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Solo bésense de una vez por Gon Freecss

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Notas del fanfic:

Este trabajo no me pertenece, los créditos deben ir a la respectiva creadora/or. Les dejaré el link original en la parte de abajo por si hay algún interesado.

Si es que estuvieran en posesión de algún trabajo en inglés o francés, del cual deseen y piensen que merece una traducción para así compartirlo en esta página, no duden en dejarme su mensaje con dicho trabajo.

Parejas:

KilluaxGon// GonxKillua

LeorioxKurapika (mención).

Notas del capitulo:

Gracias por haberle dado una oportunidad a este fanfic :)

 

La cosa se estaba poniendo pesada. Si ellos no hacían algo; y pronto, él mismo se encargaría de romper sus cráneos y sacarles las entrañas, procurando que estén conscientes durante todo el proceso.

El hecho de que físicamente no era capaz atrapar a ambos, Gon y Killua, al mismo tiempo; y mucho menos de hacérselos entender, a pesar de que sería ridículamente obvio para cualquier otro, sólo aumentaba la frustración de Kurapika.

Leorio no pudo evitar encontrar la situación hilarante.

Estaban de vacaciones, lo cual no pasaba muy seguido. A pesar de todos los traumas que se vieron forzados a enfrentar por años desde que se conocieron,  la verdad era que ninguno era muy bueno al momento de darse cuenta de que se merecían un descanso. Killua y Leorio eran,  claramente, mejores en ello que Gon y Kurapika, pero por muy poco realmente, lo cual llevó a Alluka a comprar cuatro boletos sin retorno a una isla con una población de 20, 500 a la agencia de viajes más cercana, por supuesto, asegurándose de que aquella islilla contara con montañas, bosques y la suficiente vida silvestre como para tener a ese cuarteto ocupado pero que al mismo tiempo pudiesen relajarse.

Esto, como era de esperarse, terminó con Gon y Killua desapareciendo en las primeras tres horas para explorar el lugar, Kurapika matando el rato con su tablet y Leorio, sin siquiera molestarse en ocultarlo, tratando de concentrarse en un poco de estudios extras porque, sí seguro, había pasado su examen para convertirse en doctor, pero qué tal si alguno, de entre todas las millones de enfermedades existentes, acabara por contraer precisamente una de las enfermedades de su libro de ahora y necesitara de su ayuda; y él no supiera detectarla y, y… Huelga decir, ninguna de aquellas enfermedades era posiblemente desarrollable en el sentido tradicional de la palabra.

 

La isla era hermosa. Los habitantes eran pacíficos y tranquilos, la verdad era que raramente lograban ver a alguno. Kurapika no tenía idea de cómo Alluka la había encontrado, pero debía admitirlo, incluso para ellos sería difícil iniciar una pelea en un lugar como ese. No había descartado la posibilidad, pero tampoco lo había hecho Alluka, habiéndole pasado discretamente un archivo con tres potenciales planes de escape si las cosas se ponían feas. Lo cual posiblemente acabaría así si Gon y Killua seguían comportándose como lo habían hecho hasta ahora.

No era como si no fuesen cercanos. No era como si ya no se hubiesen confesado eso mismo el uno al otro, incluso a él y a Leorio,…como amigos cercanos. Y por un largo tiempo, Kurapika se había preguntado si es que Gon simplemente carecía del deseo o tal vez capacidad para desear algo más que eso, a pesar del claro anhelo de Killua por su risueño e imprudente niño de la isla. Grande fue su sorpresa al momento de darse cuenta de que se había equivocado.

Fue tres años antes, cuando un tímido Sr. Freecss, alto, rubio y de buen porte le declaró ser la pareja de Gon; quien, de paso, explicó ser en realidad pansexual  y que esperaba que ello no significase un problema para Kurapika. Un desconcertado Kurapika dijo, aunque lo consideraba bastante obvio, que él y Leorio habían estado en una relación por doce meses, que por supuesto no tenía problemas con ello, y que si por el contrario, a Gon y a su novio, les gustaría acompañarlos a cenar.

 

Al final la relación no duró. Y mientras Gon se la pasaba de chicos a chicas a quienes elegían no ser ninguno de los dos, Killua vivió una vida de soltero. Él sostenía que además de no estar interesado en las relaciones, ya tenía las manos llevas con la educación de Alluka; sin embargo, ella era mayor ahora y realmente, él no podía seguir manteniendo esa excusa. También estaba el hecho de que siempre que estaban juntos, se volvían instantáneamente inseparables. La frase: Vives en los bolsillos del otro no era inapropiado para describir su caso, era exactamente el tipo de relación que tenían. Cuando ellos mismos dijeron que estarían durmiendo en la misma habitación, arreglo que había sido convenientemente previsto por Alluka en su reserva de una casa de solo dos dormitorios, Kurapika, con una mezcla de alivio y alegría, había estado a punto de felicitarlos. Leorio lo detuvo a tiempo para escuchar a Gon explicar tímidamente  que se sentía raro que no fuera así, que eso era todo, y con un rubor y un encogimiento de hombros Killua había murmurado su acuerdo.

 

Así que ahí estaban, compartiendo habitación, como había sido la mayoría del tiempo, con la poca frecuente excepción del baño. El incesante compartir de cuarto hubiese sido más tolerable si no fuese por los jugueteos. Si Gon no estaba poniendo su brazo sobre los hombros de Killua, o dándole codazos, o golpeando suavemente su brazo o pateando sus pies bajo la mesa, entonces estaba jugando con su cabello o abrazándolo, o en ocasiones, hasta dándole pequeños y fugaces besos en la mejilla, ocasionándole descargas eléctricas a su amigo hasta la punta de los pies. El caso de Killua, como es más reservado, era un poco mejor; en ocasiones, inconscientemente jugaba con los dedos de Gon; apoyaba su cabeza en su hombro cuando se sentaban en sofás o bancas; aprovechaba el más mínimo insulto para iniciar una mini-lucha y un ataque de cosquillas. Kurapika, que era reservado por naturaleza, tan solo podía mirar fijamente aquellos actos “amistosos” que habían entre ellos, claro, hasta que Leorio se aclaraba la garganta y con un pellizco lo regresaba a la realidad.

 

Y además de todo eso, también estaban los elogios. Si Killua no era asombroso, entonces Gon era increíble. “Killua es tan bueno con Alluka”, “Gon ha hecho tanto por el medio ambiente” “¿Han visto la velocidad que tiene Killua? ¡De seguro que no habían visto nada como ella!”  “¡Já! Eso no es nada en comparación a tu gran progreso Gon, ¡y creían que ya eras un prodigio cuando a penas tenías doce!”

Ellos eran el mayor admirador el uno del otro, y a todo lo que decían Kurapika estaba de acuerdo, de verdad, pero él ya sabía todas esas cosas de antemano, no necesitaba que nadie se las diga, tampoco Leorio, así que llegó a la conclusión  de que esos dos solo lo decían por el mero placer de decir cuán maravilloso el otro era.

En conclusión, ellos estaban totalmente, perdidamente, estúpida y obviamente enamorados. Y Kurapika no podía hacer nada por ellos.

Cierto, los elogios llegaban a ser algo irritantes; lo toqueteos, incómodos y el siempre compartir la habitación era algo raro; pero todas y cada una de esas cosas estarían bien, qué demonios, todas esas cosas, ¡lo harían feliz! …Si todas y cada una de esas acciones no estuviese acentuadas por una profunda y silenciosa infelicidad, que corría a través de todas sus interacciones; desde el amaneces, hasta mucho después de la puesta de sol.

 

Gon hablaba con culpa y desanimo sobre sus pasadas relaciones fallidas, parejas que lo habían abandonado por no estar allí, por no estar interesado, por no intentarlo. Múltiples veces se había auto-cuestionado en voz alta si es que había algo malo en él; si es que estaba roto. Solo en frente de Kurapika, pero de todos modos, le estaba rompiendo su corazón verlo así.

Y todo eso combinado con la inexpresividad  de Killua, quien melancólicamente solo se dedica a observar la espalda de su amigo, los silencios incómodos que habían destrozado sus recuerdos de los primeros años, sus cuidadosas y sutiles encogidas de hombros cuando era cuestionado por Gon o Leorio por su propia historia de amor, era suficiente para llevar a Kurapika a un paso de la locura.

 

Esas eran personas por las que él se preocupaba, profundamente, y eran tan jodidadamente infelices, sin siquiera un verdadera razón para estarlo. O quizá, sí había una, pero en ese caso, solo era mala comunicación, y si uno, cualquiera de los dos, pudiese desatar su lengua por lo menos treinta segundos y realmente hablar de sus sentimientos, no se encontrarían en este lío.

 

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Esa tensión sexual lo estaba matando.

Gon y Killua tenían casi veinte ya, y ya no importaba si es que estaban nadando, trepando, peleando o compitiendo, por cualquier cosa;  entre ellos, habían las suficientes hormonas como para poner hasta a un toro de diez metros. Incluso, en repetidas ocasiones, Kurapika tenía que salir con alguna excusa para dejarlos, en caso de que decidieran procrear ahí mismo en la playa, eso ya era demasiado.

 

Después de todo ese tiempo pensando, el rubio se dio cuenta de que ya iba por su tercer recorrido por la isla,  decidiendo que hasta Gon debería de estar aburrido de sonsear por ahí a estas alturas. Con innecesaria cautela se dio media vuelta, dirigiéndose al camino de tierra que lo conduciría de vuelta a la cabaña donde se hospedaban. Abrió la puerta suavemente, s percató de que la perilla estaba tibia, seguramente por el calor del mediodía y sin más entró. Estaba a punto de irse a su recámara cuando de repente, el sonido de unas voces llegaron a sus oídos, desviando el de las olas del mar.

Kurapika se detuvo en donde estaba y escuchó.

Era Gon hablando.

Lo más silenciosamente que pudo, corrió hacia una esquina cerca a la ventana recurriendo al zetsu, escuchando pasos y profundas y largas respiraciones que entrecortaban el aire salado.

“Nunca lo había notado.” Dijo Gon, rió, y aquella risa se rompió con lo que parecía un hipido. “Todos estos años… y nunca lo supe.”

“Eso es porque eres un idiota.” Respondió Killua, con la misma voz quebradiza.

Kurapika contuvo el aliento.

Lo árboles se movían y mecían al compás del viento, bajo el sol del mediodía.

“Pero por eso me amas, ¿verdad?” Había una sonrisa en las palabras de Gon.

Kurapika se incline un poco.

Estaban sentados en una mecedora, en frente de la cabaña, mirando hacia la arena, las redes y el mar, viendo como el marino y turquesa se apoderaban de los matices del horizonte.

Estaban sentados juntos, tan cerca, que sus hombres chocaban con el del otro, y Gon estaba acariciando el rostro de Killua. Kurapika, por un momento juró ver caer unas lágrimas por sus algo quemados y pecosos pómulos.

 

“No.” Sentenció suavemente Killua, Gon se congeló, pero entonces Killua tomó su mano, y la presionó contra su mejilla. “Te amo, siempre y sin importar qué, porque tú eres tú. Y eres un estúpido y un imprudente, y fuerte y audaz, y brillas tan intensamente que me ciegas and te he amado desde que nos conocimos, y nunca, pero nunca, he parado.”

 

Gon sonrió y se acercó aun más a Killua, presionando sus frentes una contra la otra. Las gaviotas se hacían escuchar. El olor de la madreselva que entraba por la puerta se mezclaba con el del océano. 

“Yo también te amo.” Y lo besó, profunda, inmediata y desesperadamente. Entrelazó sus dedos con el cabello de Killua, su mano destacaba de entre los blanquecinos mechones, Killua lo sujeta firmemente y vuelven besarse, como si estuviesen muriendo y esa fuera la única cura.

 

Kurapika sintió sus mejillas colorarse y decidió que lo mejor era dejar a la nueva pareja a solas, se alejó, y lo hizo con una enorme sonrisa en su rostro, tanto que sentía que los cachetes le dolían, hasta llegar nuevamente a ese mismo camino de grava que había recorrido tan solo unos minutos atrás. Se dirigía a la ciudad, les iba a comprar un pastel. Después probablemente los golpearía por haber sido tan idiotas todo este tiempo. Luego, cabía la posibilidad, lloraría; pero después seguro que reiría también, más tarde… finalmente.

 

Notas finales:

Title: Just kiss already// Solo bésense de una vez

Trabajo original: http://lesetoilesfous.tumblr.com/post/125269454013/just-kiss-already

Vuelvo a recalcar, este no es un trabajo de mi autoría, yo solo soy dueña de la traducción.

Si tienen algún fanfic o trabajo escrito que quisieran que lo traduzca, por favor mándenme el link junto con su review, pero por favor, que sea de esta pareja, pues como ya mencioné con anterioridad, es de mis favoritas y quisiera que haya más de ella en esta página. O en cualquier caso, bastaría con que sea del fandom HxH. Así que si existe un trabajo en otro idioma, que quisieran que traduzca por favor, no duden en dejármelo, también quiero poner mi granito de arena en esta hermosa categoría de HunterxHunter <3 (lo siento, es que la amo mucho).


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