"Las lágrimas son el reflejo del alma de la persona, depende de cada gota el resultado de su sentimiento"
Único capítulo: ¿Qué se siente llorar?
Se removió como por décima vez en las sábanas, sin poder conciliar el sueño ni una sola vez, no tenía ni la menor ídea de porqué la desvelada, quizá solo no sentía cansancio o sentía que algo podría pasar. Realmente le daba igual, no podía dormir y punto. Se levantó y restregó su cara con sus manos, ladeó la cabeza hacia la mesa, el reloj marcaba las 12:36 pm. Chasqueó la lengua y se levantó de la cama, se dirigió hacia la ventana y miró a lo lejos con la mirada perdida. Quizá salir un rato le daría más sueño, o eso esperaba.
Abrió la puerta con parsimonia intentando no despertar al perro que roncaba como oso al otro lado de la habitación, sinceramente no sabía como hacía Matt para dormir como roca. Abandonó la habitación sigilosamente sin llamar la atención de nadie. Llegó al patio existosamente sin hacer ningún ruido, quizá una caminata le harían aclarar los pensamientos para poder dormir de una maldita vez. Suspiró profundamente al sentir la fría brisa nocturna por todo su cuerpo, miró alrededor escaneando el enorme patio, notó un árbol a lo lejos, quizá recostarse un rato y observar el panorama por un rato le darían algo de sueño.
Se recostó en el tronco y volvió a suspirar, fijó su vista en el cielo nocturno y miró todas las estrellas que podía contar, sintió como una paz inexplicable invadía todo su cuerpo. Un ruido, escuchó como unos pasos se acercaban, sintiendo como su paz se destruída casi instantáneamente. Maldita sea, Near, ese tonto niñato se acercaba como si fuera un fantasma, frunció el ceño.
—Near ¿qué mierda haces aquí? —Preguntó casi gritando.
—No es necesario elevar la voz para hacer una pregunta —Dijo con un susurro que sonaba un tanto exasperado. Mello chasqueó la lengua.
—Eso no responde a mi pregunta —Dijo esta vez con una voz mas baja.
—No puedo dormir, así que decidí salir a caminar, no esperaba que Mello estuviera aquí.
Era increíble, el estúpido niñato también venía por la misma razón que él, Mello podría romper un récord de cuantas veces se habrá enojado por algo tan ridículo como eso, miró hacia otro lado exasperado, y mucho más ya que Near es estaba sentando al lado suyo, cuanta paciencia le sobrará sin que termine dándole un puñetazo a ese albino mocoso.
Pasaban los minutos y ninguno de los dos no decía ni una palabra, de igual forma ho había ningún tema de conversación, y si lo hubiera es dudoso que alguno hablara, con lo mal que se llevan sería bastante extraño.
Ambos estaban absortos mirando el cielo, Mello dirgió la vista hacia Near, podía notar su expresión de tranquilidad, y notó que algunas estrellas y parte de la luna se reflejaban en sus grises ojos, eran más claros de lo que creía, volvió a voltear hacia el cielo, ignorando esa otra vista.
Los minutos volvían a pasar, y finalmente el sueño que tanto esperaba comenzaba a atacarlo haciendo que cerrara sus ojos de vez en cuando. Apunto de levantarse para finalmente retirarse y alejarse de ese mocoso la voz de Near lo detuvo.
—Mello —Susurró.
—¿Que pasa? —Preguntó mirándolo, tenía la misma expresión de siempre.
—¿Qué se siente llorar? —Preguntó sorprendiendo al rubio.
Mello quedó paralizado a la pregunta del albino ¿a qué se refería con eso?
—¿T-tu, nunca haz llorado? —Near negó con la cabeza. Mello se colocóuna mano en la frente —. No puedo creerlo, ¿a qué viene esa pregunta?
—No lo sé, sólo quisiera saberlo —Near se encogió de hombros.
Mello suspiró ¿qué clase de pregunta era esa? realmente Near era raro Mello sabía perfectamente que Near era extraño, pero no haber llorado nunca y preguntar como se siente, ya era demasiado.
—P-pero ¿cómo quieres que te responda? es difícil de describir, pero enserio ¿para qué quieres saber?
Near bajó la cabeza.
—Llorar es uno de los sentimientos más comunes en todo ser humano —Se tocó la mejilla —, como tú y muchas personas siempre dicen que no tengo emociones, me gustaría saber qué se seinte llorar, para así saber como sería la sensación de llorar alguna vez.
Mello de repente se sintió mal, como un verdadero estúpido, quizá Near no sientiera "nada" pero si podía recordar lo que ya había experimentado, y especialmente sus insultos, la culpa lo invadió por dentro.
—Pero saber cómo se siente no es lo mismo que sentirlo.
—Entonces ¿me enseñarías a llorar?
Mello se quedó paralizado ¡¿acaso estaba bromeando?! ¿como demonios pretendía que le enseñara a llorar?
—P-pero ¿cómo quieres que te enseñe? no es fácil —Dijo algo nervioso. Near se encogió de hombros.
—¿Qué maneras son más comunes para llorar? —Preguntó el albino,Mello se colocó una mano en el mentón.
—Pues: Por risa, tristeza, miedo y... dolor.
—Intenta de alguna manera.
Mello se rascó la cabeza, seguía sin entender que tramaba el albino, era ridículo, sentía ganas de mandar todo al diablo y salir corriendo para irse a dormir de una buena vez. Pero su mente estaba totalmente en blanco, no pensaba con claridad, la única cosa que podía hacer sería ayudar a ese niñato, ¿pero como? pensó en las maneras en las que podría: Risa, tristeza, miedo, dolor. En la única en la que se le ocurría para intentar "hacerlo llorar" sería con dolor. Porque, intentar hacer reír a Near es como hacerle cosquillas a una piedra, no pasa absolutamente nada, de tristeza, Mello siempre le hacía sentir miserable para que se entristeciera, pero nunca funcionaba, de miedo no había ninguna manera, el dolor era la única alternativa, Mello tragó grueso.
—La única manera que encuentro fácil es por dolor, Near.
—Entonces hazlo.
—¿E-estas dispuesto a pasar dolor sólo para llorar? —Mello comenzaba a temblar.
—Si así consigo llorar aunque sea una vez, pues que así sea.
Maldito mocoso, Mello estaba a punto de enloquecer. Se tocó la nuca mientras que una gota de sudor resbalaba por su mejilla, estaba nervioso. Apretó un puño, quizá para golpearlo, pero lo dejó, no se sentía capaz de darle un puñetazo a Near, sus manos temblaban descontroladamente, Near solo lo miraba fijamente, volvió a tragar sonoramente. Tomó ambas manos del albino, Near se sobresaltó un poco, quizá lo había tomado desprevenido, Mello fijó su vista en las manos frías del albino y comenzó a hacer presión. Poco a poco aplicaba más fuerza, con el intento de que el albino llorara, miró su rostro, sus ojos comenzaban a entrecerrarse a medida que Mello hacía más presión, pocos segundos después Near cerró sus ojos por completo, mientras que Mello los abría desmesuradamente. Soltó las manos de Near temblorosamente, no podía.
—¿Qué pasa, Mello? —Preguntó el albino algo sorprendido a que Mello se detuviera.
—No puedo... —Dijo cabizbajo, su cabello cubría sus ojos.
—¿Porqué no-? — El albino fue interrumpido cuando Mello lo sostuvo de los hombros.
—No puedo hacerlo, te estoy lastimando —Dijo aún sin mirar al albino —. No puedo hacerte daño, no puedo hacerte llorar de esta manera.
Mello respiró hondo, levantó la cabeza y vio que Near lo miraba boquiabierto, Mello se sonrojó y se sintió ridículo por lo que había acabado de decir. Se levantó bruscamente.
—¡Eres un idiota! —Gritó Mello —, ¡te odio Near! —Gritó con todas sus fuerzas, apretando sus puños.
Mello comenzó a dar unos pasos hacia atrás con la intención de irse. Pero una mano en su manga se detuvo, se dio la vuelta para encarar a Near, abrió los ojos desmesuradamente y soltándose de Near bruscamente retrocedió un poco ¡estaba llorando!
—N-Near... —Near bajó la cabeza, sus lágrimas se hacían más grandes.
—Yo nunca te odiaré, Mello —Susurró colocándose las manos en sus ojos, luego las alejó mirando las gotas es sus palmas —, ¿conque esto es llorar? no es una buena sensación —Sonrió y volvió a colocarse las manos en los ojos, sollozando —Yo no te odiaré...
Mello lo miraba más que sorprendido, no podía creerlo, ¡Near estaba llorando frente a sus ojos! su labio inferior comenzó a temblar, se acercó a Near y lo abrazó, lo abrazó con fuerza.
—Yo tampoco te odiaré, Near —Susurró contra su oído, Near se estremeció.
—¿Que... que otras maneras hay para hacer llorar?
Mello abrazó al niñato con algo más de fuerza y sonrió.
—Por amor...
Near sonrió dejando derramar las lágrimas sobre el hombro del rubio, colocó sus manos sobre su espalda, devolviéndole el abrazo a Mello. Rato después se separaron, ambos lloraban. Mello sujetó el rostro del albino y lo besó, suavemente, Near colocó sus brazos alrededor del cuello del rubio, correspondiéndole. Rato después se separaron para respirar, ambos con las mejillas sonrojadas y la respiración un poco agitada.
Mello sonrió y secó las lágrimas del albino con su pulgar, para volver a besarlo...
Realmente se sentía realizado, al final lo había logrado, Near estaba llorando y no podía estar más feliz, siempre lo recordaría, y estaba seguro de que Near también...
FIN