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BEHIND BLUE EYES DRAGON por LEGNAEL

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Disclaimer: Yugi-oh, no es de mi propiedad como habrán imaginado, yo solo tomo prestados a los personajes de Kazuki Takahashi-sensei para escribir este fic.


Notas de la autora: hace mucho quería escribir algo de este fandom, pero hoy nació la idea que más me gusto. Soy pésima para los títulos pero hay veremos qué pasa.


Paring: Seto&Joey


Advertencias: Yaoi, lenguaje Soez, mundo alterno, espero no caer mucho en el OoC (solo un poco). Mpreg a futuro, amor lento. Uno que otro error de dedo, espero que no haya muchos.


Aclaraciones: tomaré los nombres de la traducción al español que hicieron, porque de repente se me hace raro llamar a Joey, Jonouchi Katsuya. (Que puedo decir, crecí con el doblaje hecho por Nickelodeon).


Tiempo de actualización: INDEFINIDO (Todo depende de Inspiración-san).


 


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Capítulo 2. Kaiba


 


Regresaron al apartamento de Joey, sinceramente a Mokuba le sorprendió el exceso de energía del rubio. Y entonces cavilo en algo, algo que no había pensado, puesto que Wheeler parecía un hombre en edad laboral, porque se dedicaba a repartir periódicos (generalmente esos trabajos eran para estudiantes).


 


– Hey, Joey… ¿por qué repartes periódicos? –pregunto sin malicia alguna.


– Ah, eso… digamos que no he tenido mucha suerte buscando trabajo.


 


Aunque internamente el rubio sabía que no lo querían contratar por sus supuestos escándalo amoroso con Kaiba. De solo recordar a ese desgraciado, había jurado que si lo volvía a ver le partiría la cara.


 


– El mundo de los adultos –musitó Mokuba.


 


La mirada de Mokuba se mostraba melancólica. No es que no comprendiera que sus hermanos se habían convertido en adultos antes de tiempo, es solo que extrañaba pasar tiempo con ellos, para empezar Noah se la pasaba en la oficina e incluso cuando este regresaba a casa se encerraba en su despacho. Y Seto, bueno hacia mucho que Seto se había apartado de la familia. Desconocía muchos de los detalles, e incluso cuando intentaba preguntarle a Noah esté solo le decía –cuando seas un adulto lo comprenderás–. Era tonto que le pidieran comprender algo sin explicación alguna.


 


– Oe,Mokuba. Tierra llamando a Mokuba –se acercó Joey pasando una mano frente a los ojos azules del menor.


– Joey, ¿qué ocurre?


– De repente te quedaste sin decir nada –acusó Joey–. Bueno supongo que podemos desayunar.


 


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Enfrente de los apartamentos…


 


Noah Kaiba, bajo de un auto negro al mismo tiempo se permitió contemplar el lugar de forma fugaz.  Sus guardaespaldas que siempre estaban a sol y sombra protegiéndolo, lo seguían muy de cerca, fue entonces cuando Noah moviendo la mano les indicó que lo esperaran dentro del auto. No muy convencidos los hombres respetaron la orden de su jefe, asintiendo con la cabeza.


 


El de cabellos verdes, subió las escaleras, la puerta de madera lo dejo escuchar las sonoras risas. Claramente reconoció el sonido de las carcajadas de Mokuba. Un estremecimiento y su misma debilidad lo dejo pensante, – ¿Hace cuánto no lo oigo reír así?–. Tal vez un par de años.


 


Escucho las voces, la otra voz le era completamente ajena. Agito la cabeza desechando sus pensamientos, debían enfocarse en lo que había venido a hacer.  Toco el timbre, de inmediato se escuchó una voz que decía:– Ya voy.


 


Cuando Joey abrió la puerta, enfrente de él vio a Seto Kaiba de cabellos verdes con una tonalidad más clara en la parte del fleco. Pero sin duda alguna eran esos mismos odiosos ojos azules. Estaba a punto de dejar salir su ira. 


 


– Buenos días, Wheeler-san –saludo el desconocido de forma sumamente cortes–. Estoy buscando a mi hermano menor. Por mis fuentes sé que él está aquí, sería tan amable de llamar a Mokuba.


 


Joey miró al sujeto, demasiado educado a su parecer. Por un momento pensó en que sus palabras eran tan melosas lo que significaba que eran sumamente exageradas.


 


– Buenos días –respondió Joey utilizando la voz más natural que podría usar.


– Lamento los inconvenientes que le haya podido causar mi hermano –comentó Noah mientras analizaba al rubio.


 


Lo miro de forma analizadora, le sonaba de algo el rostro del rubio. Y fue como un chispazo, ato cabos. Era el abogado del cual prácticamente Seto se encargó de hundir su reputación y credibilidad por los suelos. Debía ser una especie de broma y una de muy mal gusto. O la segunda idea, le recorrió la espina dorsal. Posiblemente el abogado había atado las conexiones que ataban a Seto Kaiba con K. Corp.–NO–, negó mentalmente. Después de todo a pesar de que Kaiba se pronunciaba igual tenía dos significados distintos y tan similares a la vez. –Sería posible que Wheeler estuviera buscando venganza–, su deducción no parecía tan descabellada. Era tan problemática la forma de hacer las cosas de Seto. Sus pensamientos fueron interrumpidos por una voz familiar.


 


– Onii-sama –murmuró el recién llegado.


– Mokuba –pronuncio el nombre con tono severo.


– Yo –susurro.


–No, Mokuba, te escapaste de casa –riño el mayor–. No puedes simplemente salirte de la casa como si nada. No mides las consecuencias de tus actos.


 


Joey observó a ambos hermanos en mutismo.


 


– Disculpe –interrumpió Joey–, esté –comenzó a hablar Joey sin saber el nombre del recién llegado.


– Noah Kaiba, se escribe con los kanjis que significan "Bebé dragón".


 


Joey noto el énfasis que hizo el de cabellos verdes al aclarar su apellido. Pero Kaiba también tenía otro significado "Caballito de mar", que curiosamente era el apellido de aquel yakuza odioso y detestable.


 


– Joey Wheeler, aunque me parece que ya sabía mi nombre.


– Ah –sonrió–. Solo sabía su apellido, me fije en el nombre que pone en su puerta –comentó como si fuera lo más normal del mundo.


– Onii-sama, yo.


– Hablaremos en la casa, despídete apropiadamente Mokuba.


 


Joey observó cómo la mirada de menor se entristecía.


 


– Agradezco las molestias que se tomó al cuidar a mi hermano, pero simplemente debió acudir a la policía –comentó Noah.


–Joey solo me ayudo –salió el menor en su defensa.


– Mokuba, tengo que ir a trabajar. Y se supone que tú deberías estar en el colegio.


– Pero, es que yo quiero ver a Nii-sama –añadió el menor.


 


De inmediato Joey noto como el semblante de Noah se ponía serio.


 


– El único hermano que tienes soy "yo" –alzo la voz.


– Disculpe, Kaiba-san. Sé que no es mi asunto, pero debería escuchar a su hermano. Y por lo menos darle una explicación o algo, es un niño no un tonto –comentó Joey.


 


Noah intentaba mantenerse sereno.


 


– En todo caso, Wheeler –gruñó el nombre– yo soy su familia y usted es un simple desconocido.


 


Mokuba notaba cómo las cosas comenzaban a ponerse tensas. No dudo en interponerse entre ambos adultos.


 


–Onii-san. Joey solo intento ayudarme.  Lamento las molestias que te ocasione; pero no es necesario que te molestes con la persona que fue amable conmigo –expuso Mokuba.


Noah miro a su hermano fijamente, era inusual que Mokuba mostrara cierto grado de agrado e incluso parecía que Wheeler de alguna manera se las ingenió para ganarse la confianza de su hermano. Internamente sonrió, una idea cruzo en esos momentos en su cabeza.


 


– Error mío, te pido una sincera disculpa Wheeler, ayudaste a mi hermano –inclino ligeramente la cabeza.


– No se preocupe, no es nada serio –respondió de forma honesta.


 


Mokuba se permitió respirar al ver que el ambiente se había vuelto ligero.


 


–Muchas gracias por tu hospitalidad –dijo el menor–. Onii-san debes regresar al trabajo.


 


La charla fue interrumpida por uno de los guardaespaldas de Noah. El hombre emitió un par de palabras: – Señor, su secretaría acaba de llamar para avisar que en veinte minutos empieza la junta directiva.


 


Mokuba y Joey solo observaron cómo Noah salió caminando a toda prisa, seguido de hombre uniformado de negro.


 


–¿Siempre es así?–interrogó Joey.


– Sí –asintió Mokuba mientras una ligera sonrisa se dibujaba en su rostro–. Eso nos da tiempo para ir a buscar a nii-sama.


– Pero tu hermano –musitó Joey inseguro.


– Bueno, posiblemente se pase en la junta todo el día –admitió el de cabellos negros.


 


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Aclaraciones finales:


 


Bueno como habrán notado, tanto Mokuba, Noah y Seto se apellidan Kaiba; pero, me atengo a lo siguiente, que ambos apellido se escriben de forma distinta debido a los kanjis, admito que no sé nada de kanjis.


 



  1. Kaiba, significa bebé dragón (Noah y Mokuba).

  2. Kaiba, también puede interpretarse como "caballito de mar" en japonés, relacionado con la creencia folclórica de que los caballitos de mar pueden llegar a convertirse en dragones al cabo de cien años. (Ese sería Seto).


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