No era lo que esperaba, sinceramente jamás creí que mi vida diera un giro de esa manera. La persona que más odiaba y quería superar en el mundo, se había convertido en la persona más importante de mi vida. Como en los cuentos de hadas, es gracioso porque eso pasa aunque algunos años antes solo lo veía como una fantasía.
No voy a decir que él es perfecto, por que como todo ser humano tiene sus defectos, que con el paso del tiempo he aprendido a tratar... a amar. Simplemente pasa, uno no lo planea y de pronto ya está sucediendo.
El libro del amor es largo y aburrido.
Nadie puede levantarle.
Nadie nace sabiendo como amar, el amor es diferente para cada una de las personas, se vive diferente, se siente diferente. Es gracioso y romántico como no lo esperaba debo admitir el cómo todo termino de esta manera.
Está lleno de cuadros, hechos, figuras e instrucciones
Para bailar.
-¿Cómo se pide esto?-decía el peli verde.
-Oh, mi Shin-chan esta apenado, lo sé, mueres por mí-decía el pelinegro con una sonrisa pícara a manera de burla.
-Cállate Kazunari, esto no es una broma y si voy a hacerlo voy a hacerlo bien-
-Entonces espero Shin-chan-
Jamás creí que iba a hacerlo, que las palabras que tanto ansiaba oír y que quería salieran de sus labios realmente las diría, solo tres simples palabras...
-Oha-Asa predijo buena suerte para cáncer este día-nanodayo... "¿Quieres salir conmigo"-
El rubor que se esparció por mis mejillas, fue momentáneo y no pude evitarlo. La sonrisa que siempre me caracterizaba se borró.
-Ta-Takao, te encuentras bien-
Su preocupación al tocar mi rostro suavemente y retirar con la yemas de sus dedos las lágrimas que se escapan sin permiso de mis ojos, me lo confirmó.
-Shin-chan-habló recuperando su sonrisa de nuevo pero entre lágrimas que no eran más que de pura felicidad.
-Takao...-dijo acomodando sus lentes-Sabía que esto no iba a funcionar-volvió a hablar mientras resoplaba un poco-Olvídalo-dijo girándose para continuar su camino.
-¡Shin-chan espera!-hablo Takao aferrándolo por un brazo mientras se acercaba a esconder su cabeza en el pecho del más alto, mientras asentía constantemente. Y no hubo necesidad de más palabras, las acciones dicen mucho.
Realmente yo lo amo por sobre todo, sobre todos, sobre mi vida y hay veces en las que yo mismo me pregunto si es correcto amar de esta manera. Si cuando algo pase y nos lleguemos a separar podría morir por mí mismo casi estoy seguro.
No tengo tiempo para pensar en esas cosas que no son importantes hasta que no sucedan, el presente es lo realmente importante. Su carácter es difícil y vaya que si lo he aprendido con el tiempo, pero yo amo esos pequeños bellos momentos en los que solo somos yo, el... y "El libro del amor".
Pero yo...
Amo cuando lo lees para mí.
Y tu...
Puedes leerme lo que sea.
Todo lo que hemos vivido valió y vale la pena, porque son instantes, momentos que se quedan grabados en la mente que por más que uno trate de eliminar será muy difícil que se vayan de allí.
El libro del amor contiene música,
De hecho, es de ahí donde la música viene.
…l lo es todo para mí, amar a una persona con la misma intensidad que con la que amas tu propia vida ¿es lo correcto?
-¡Takao! No es gracioso, dame ese peluche en este momento-
-Buajaja, Shin-chan debes superar ya esta fase de tu Osa-maja-decía el pelinegro mientras corría por la casa, así es vivían ya juntos.
-Kazunari Takao devuélvemelo-dijo ya harto y alcanzándolo con solo un par de pasos abrazándolo fuertemente por la espalda-Te tengo-
-Pudiste haberme atrapado todo este tiempo ¿no es así?-decía burlón el pelinegro volteando un poco el rostro para depositar un beso en los labios del peli verde-Te amo Shin-chan-
Algo de él es transcendental.
Algo de él es... realmente tonto.
Sus besos realmente se sentían bien y entre besos y sabanas, confirmaban el amor que a veces no eran capaz de expresarse con palabras.
Pero yo...
Amo cuando cantas para mí.
Y tu...
Puedes cantarme lo que sea.
La vida continuaba pasando, algunas cosas se volvían cada vez más monótonas, los días de preparatoria e incluso algunos años de universidad en la que todo en su mayoría era baloncesto, risas y suerte... había pasado ya. Los dos habían madurado o tratado al menos de hacerlo.
El libro del amor es largo y aburrido.
Y fue escrito hace mucho tiempo.
-¡Shin-chan, reacciona! No piensas dejarme solo con esto verdad-decía entre balbuceos con el miedo a la inexperiencia en ese tema.
-...-solo estaba pensando en lo poco probable que era y venía a pasarle a ellos.
-¿Shin-chan? No me dejes solo por favor...-suplicaba casi.
-No iba a hacerlo Kazunari, se ocuparme de mis responsabilidades... esto es un milagro, es prácticamente un regalo-hablo jalándolo para sentarlo en sus piernas-Claro que no iba a dejarte solo-nanodayo, vamos a superar esto juntos.
-Shin-chan...-se aferró más a su cuello para soltarse a llorar.
Está lleno de flores y cajas en forma de corazones.
Y cosas que para saberlas aun somos muy jóvenes.
-Kohana, dale un abrazo a papá-decía el pelinegro mientras le entregaba al peli verde en brazos a la pequeña de dos años, Midorima al querer especializarse más en su carrera había durado un año más en graduarse de la universidad.
-Papá!-grito la pequeña abrazando a su padre por el cuello.
-Felicidades Shin-chan-hablo esta vez Kazunari acercándose para darle un corto beso.
-Gracias, ahora ya libre... puedo hacer lo que es correcto-
Pero yo...
Amo cuando me das cosas
Y tu...
Deberías darme anillos de bodas...
Regresando al presente, Ahora estoy aquí esperando con mi hija de la mano y Midorima frente a mí, se le ve ¿nervioso?
-Kazunari, he madurado y he aprendido a decir las cosas de frente aun así esto es difícil...-
-Shin-chan puedes decirme lo que sea, aunque no creo que nos falte nada-le digo sonriendo.
-Kazunari Takao-dice mi nombre con un tono de voz extraño mientras se arrodilla en el suelo, no es lo que creo ¿verdad?-¿Quieres casarte conmigo?-
Lo era...
Pero yo...
Amo cuando me das cosas
Y tu...
Deberías darme anillos de bodas...
La vida es extraña, tiene sus momentos buenos y sus momentos malos, solo debemos afrontarla con lo que tenemos... la vida es solo aquello que pasa mientras continuas viviendo día a día <3