En un penthouse, se encontraba una furioso pelirroja que por enésima vez le reclamaba a su escritor que dejara de amargarse la vida –sensei deje de atormentarse y comience a escribir, ella lo dejo hace casi tres meses y usted sigue igual …. – ente eso un olor molesto la acoso -¿Qué demonios es ese olor, de cigarro y comida pasada de tiempo? – se quejaba mientras vía la horrible pocilga en la que se había convertido la casa de ese escritor -escuche… - dijo tratando de tranquilizarse la mujer al hombre que aun la ignoraba – mañana en la mañana traeré a alguien que se haga cargo de la limpieza y le haga de comer, será como su ama de llaves solo que de entrada por salida está bien – dijo la mujer dando media vuelta para salir de ese desastre que llamaba casa - no se te ocurra traer a ninguna mujer a mi casa Aikawa –por fin hablo el escritor –sensei, ella se fue hace meses, usted debe continuar con su vida, Isaka-san comprende su situación por es lo ha perdonado, además de usar esto como estrategia de venta así que por favor ya déjela ir, ella eligió irse, fue clara no “no te amo” ¿entonces? No tiene sentido continuar así de mal…. – suspiro mientras intentaba no caerse de tantos juguetes tirados por doquier – no se preocupe no traeré a una mujer, conozco a alguien discreto que tiene facilidad e horario, no se preocupe adiós…. Y póngase a escribir – le grito la mujer al escritor antes de salir.
Flashback.
-Akari, ¿por qué te vas?, yo te lo he dado todo si me dejas no sé que hare de mi vida quédate con migo por favor- le decía un asustado y al borde de las lágrimas un peliplata que trataba de detener a su prometida –Akihiko, seré clara con tigo… no me interesas, he estado aguantando tus enfermizos celos, tu egolatría, inseguridad, vanidad, inutilidad para cualquier cosa menos escribir y tu comportamiento infantil solo porque así me convenía, necesitaba dinero y tú me lo diste eso es todo, ¡dos años, dos malditos años de relación que jamás quise!, ahora me espera el hombre que en verdad amo así que déjame e paz – grito la mujer terminando de sacar sus maletas del penthouse del ojilila que solo se congelo al escucharla, no era posible, tantas veces diciendo que lo amaba y sonriéndole después de hacer el amor, eran mentira, vio por la ventana donde se distinguía su antigua prometida y un hombre de cabello rubio besándose y abrazándose antes de irse en el auto que él le había comprado a la mujer.
Fin de flashback.
Era sábado en la mañana y el escritor esa consiente de que su editora sin duda cumpliría su amenaza y llevaría un intruso a su casa, desde que Akari lo había dejado nadie a excepción de ella había pisado su casa, no quería lidiar con más hipocresías, de personas que solo se acercaban a él para pedirle favores o dinero, ya no volvería caer en el mimo error, tapo su cara con la sabana que cubría su cama para intentar dormir más tiempo pero, un estruendoso golpe se lo impidió.
-sensei, ya estoy aquí, si no baja en este preciso momento le juro que quemare todos sus osos – amenazo la mujer lista con una botella de alcohol y fósforos en mano, lo que obligó al peliplata bajar lo antes posible – estás loca si no fuera porq…. – no termino la frase debido a que casi resbala de las escaleras debido a una toalla tirada desde hace quien sabe cuánto – ya lo ve necesita a alguien que se haga cargo de su casa mientras usted escribe así que deje de quejarse – dijo la mujer triunfante mientras retaba con la vista al escritor- tu ganas pero, como dije ayer no quiero una mujer y será solo entrada por salida no quiero a nadie en mi casa ¿entendido? – dijo el peliplata ya resignado ante la apariencia de su casa- perfecto déjeme presentarle a su nuevo empleado – dijo mientras se dirigía a la puerta, el escritor veía atentamente y noto como su demoniaca editora hacia una seña para que se acercara – él es Takahashi Misaki y será su nuevo empleado –dijo la mujer con una sonrisa en su rostro completamente distinta a la diabólica que le regalaba a él esta era tierna y amable – trabajara toda la semana ahora lo ara de ocho a ocho debido a que está de vacaciones, después ya veremos sus horarios o si ya se recuperó lo suficiente como para mantener su propia casa libre de nuevas especies por culpa del desorden- ese comentario molesto al peliplata pero le robo una pequeña risa inaudible al joven que la acompañaba – Misaki, todos los utensilios de limpieza están en la habitación de arriba la primera a la izquierda, si necesitas algo envíame un mensaje vendré enseguida – dijo maternalmente, lo que llamo la atención del escritor –no soy un ogro el estará bien ahora ya vete que quiero dormir – la mujer le hizo unas señas extrañas al chico y después salió del apartamento, el chico vio al escritor y este antes de que el pudiera decir nada le advirtió – no me hables si no es necesario, no hagas demasiado ruido y como a las tres de la tarde, así que ten listo algo para esa hora ha y no me gustan los pimientos – Misaki solo sonrió y movió su cabeza en señal de afirmación. El escritor regreso a su cuarto y se cubrió con su manta una vez más.
“sus ojos son muy hermosos “, pensó el escritor pero inmediatamente rectifico su pensar “solo está aquí para ganar dinero y tener referencias de haber trabajado con alguien importante, solo está aquí por conveniencia propia” fue lo último que pensó antes de quedarse dormido. Mientras en la sala el chico suspiro profundamente y pensó “por donde comenzar, esto es un completo desastre”, inmediatamente subió las escaleras para buscar con que limpiar.
Alrededor de dos de la tarde el peliplata decidió salir de su cuarto para tomar un café y por qué no escribir un poco, después de todo Aikawa tenía razón ya era tiempo de superar a esa mujer, su sorpresa fue grande al encontrarse en un apartamento reluciente, al bajar esperaba encontrar al chico en la cocina o limpiando algo pero no, lo encontró dormido en el sofá de la sala, “luce tan lindo y tierno” pensó pero inmediatamente se despojó de dichos pensamiento y le grito fuertemente para asustarlo -¡NIÑO DESPIERTA QUE ESTÁS EN TU TRABAJO! –pero no hubo respuesta, ni se inmuto ante sus regaños se asustó de que estuviera desmallado de tanto trabajar, o tal vez solo tiene el sueño pesado, así que se acercó y lo meció gentilmente creyendo que estaba desmayado, el chico despertó y abrió los ojos bruscamente y se puso alerta de inmediato –no puedes dormir mientras trabajas, das en verdad una mala presentación- regaño el mayor al chico que se sonrojo ante lo dicho –ya casi es hora de la comida, ¿ya preparaste algo?- dijo el peliplata en tono de reclamo a lo que el castaño solo ajito la cabeza en negación –entonces prepara algo que tengo hambre – dicho eso se levantó y se dirigió a su estudio dejando al chico atrás.
Media hora después un delicioso aroma lo obligo a salir, se encontró con la mesa puesta y una increíble comida japonesa sin duda el chico tenia talento aunque no pensaba elogiarlo, bajo las escaleras y se sentó frente a la mesa, acto seguido el castaño sirvió –¿tú no vas a comer? –pregunto el peliplata, el chico una vez más solo negó con la cabeza dejo solo al escritor y se dirigió a su habitación para limpiarla.
Toda la tarde fue silenciosa el chico nunca dijo ni pio lo que extraño al ojilila, pero no le dio importancia después de todo eso le era grato de esa manera no sentía que alguien invadiera su espacio.
Llegadas las siete de la tarde una vez más salió de su estudio y antes de bajar las escaleras pregunto -¿Qué hay de cenar Misaki?- pregunta que no obtuvo respuesta así que repitió más fuerte -¿Qué preparaste para la cena?- y no respondió ya molesto bajo las escaleras y vio que el chico llevaba puestos los auriculares, claro por eso no respondía, así que llego desde detrás y se los quito-por estas cosas no me escuchas, debes estar al pendiente –le replico a lo que el chico solo se inclinó en señal de disculpa –anda cenaras con migo como castigo - “castigo claro, a quien engaño solo no quiero seguir comiendo solo” pensó el peliplata mientras el chico serbia la cena que lucía deliciosa el mayor no quería admitirlo pero su empleado era un excelente cocinero-¿Qué edad tienes Misaki?- dijo el peliplata a lo que el menor se quedó callado un momento y después respondió cortamente –veintidós - una vez más el mayor estaba intentando empanizar con alguien pero le molestaba que el chico se lo impidiera -¿tienes novia?- el chico ajito la cabeza en negación provocando gracia al mayor -¿no te gusta mucho hablar verdad? –pregunto el mayor el chico movió la cabeza confirmando lo que el peliplata decía –está bien – se levantó de después de terminar y se fue directo a su habitación, desde las escaleras dijo –buenas noches Misaki – pero no recibió respuesta al voltear para saber el motivo vio que el chico llevaba puestos los auriculares lo cual lo molesto aún más, después de que Misaki limpiara la cocina recogió sus pertenencias y desde la puerta grito demasiado fuerte –buenas noches – lo cual molesto al mayor ”quítate esas malditas cosas de los oídos para que no tengas que gritar….. Misaki Takahashi ¿Qué serias capaz de hacer por dinero? Bueno mañana comenzare con el entretenimiento, Aikawa lo dijo tengo que distraerme y volver a escribir que mejor que con este chico” eran los pensamientos del escritor.
En casa del castaño lo esperaba una pelirroja ansiosa de saber cómo había sido su primer día de trabajo -¿Qué tal te trato el sangrón de sensei? –Dijo sin más la pelirroja –Aikawa-san no debes de habal así de usami-sensei –respondió el castaño –Misaki se HA-BLAR -dijo la mujer señalando sus labios al pronunciar la palabra –gracias Aikawa-san –sonrió el chico –no hay de que –respondió ella dándose vuelta para preparas él te –de verdad me has ayudado mucho con lo de recuperar el ha-bla –dijo el chico al sentarse a la mesa, la pelirroja le llevo él te y continuaron conversando –ni lo digas fueron tus padres quienes te permitieron hablar la sordera congénita no determina que debas ser mudo, además solo te falta practica debes hablar más ¿de acuerdo?-dijo la mujer dando un sorbo a su te –me pone nerviosos habal frente a otros que tal si se burlan de mí por no poder hacelo bien –diijo el chico muy rápido –Misaki solo debes practicar recuerda las vibraciones que hace tu garganta y podrás hacerlo perfectamente dejaste de hablar mucho tiempo por ellos se te dificulta ahora pero gracias a que aprendiste de pequeño no habrá mucho problema solo debes practicar. Ahora a dormir mañana hay que ir con el ogro – dijo la mujer para que el chico subiera a descansar