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UNA VERDADERA FAMILIA por Ina Laufeyson

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Notas del fanfic:

Es el primer fanfic que hice y nunca pude terminarlo, pero ahora lo haré, después de... cinco, seis años de abandono? xd

Los personajes no me pertenecen. Todo a mitologías nórdicas y el universo cinematográfico de MARVEL

 

Las tropas del reino dorado, Asgard, estaban de pie, triunfantes sobre Jotunheim. Odín tenía en mente matar al rey de los jötnar: Laufey. Pero decidió lo que todo rey debía hacer, no solo buscar la guerra sino la paz. Así que le propuso un acuerdo en que ambos reinos se alejarían dejando atrás las venganzas y las amenazas de otra guerra, y todo el pasado sería olvidado. El rey Laufey, caído en la derrota, aceptó con sorna.

Ese gesto no pasó desapercibido para Odín. Laufey siempre buscaba la guerra una vez recuperaba su fuerza.

—Y me llevaré el Cofre de los Viejos Inviernos. —Finalizó Odín, tomando el gran cubo que destellaba luz azul. Era la fuente del poder de todo Jotunheim, una reliquia de Laufey.

En ese momento, el rey Laufey desapareció todo rastro de diversión en su rostro. Si Odín se llevaba el Cofre de los Viejos Inviernos, sería una gran desgracia para todo su reino. Estarían atrapados por siempre en ese mundo sin poder conseguir  más aliados ni intentar gobernar otros mundos.

—Llévate lo que quieras; mi oro, mis guerreros… pero esa reliquia es mía—dijo Laufey, casi implorando mientras trataba de levantarse.

Odín se dio media vuelta, ignorándolo. Sabía que Laufey no tendría la fuerza suficiente para dañarlo, pero sí otro. La reina Farbauti, aunque en ese momento era un “él”. Los jötnar tenían la habilidad de cambiar de sexo por un corto tiempo para dar a luz a futuros jötnar y luego volver a ser los despiadados gigantes de hielo, humillando a las razas de otros reinos, burlándose de lo incapaces que eran ante su fuerza y altura. Y ahí estaba Farbauti, listo para atacarlo por la espalda.

Farbauti había jugado sucio en toda la batalla, usando trucos que no solo destrozaban a sus guerreros, asgardianos, sino también a los propios jötnar. Y sin pensarlo dos veces, Odín lo asesinó.

Gigantes de hielo, no solo su apariencia se debía a ese nombre sino también a sus corazones. Laufey no mostró nada de dolor ni sorpresa al ver a Farbauti caer sin vida, no podía importarle más que el Cofre de los Viejos Inviernos. Pero poco pudo resistirse  a la idea de ser vencido y despojado de su poder. Pronto las puertas del Bifrost se llevaron a su enemigo eterno, Odín.

🌟 🌟 🌟

Asgard recibió a Odín, con una fiesta que dudaría todo un mes. La guerra contra los Gigantes de Hielo no sería olvidada nunca por nadie, cantarían canciones en todos los rincones sobre la derrota a Laufey que despojado de su poder ahora le tocaba arrodillarse ante Odín.

Además, con solo ver al rey Odín, todos recordarían ese día y no como solo un triunfo sino también una pequeña pérdida. Odín había perdido un ojo a causa de Laufey, pero no era algo que se pudiera lamentar en Asgard; allí se respetaba a quien tenía cicatrices o algo que pudiera faltarle como recuerdo de una digna batalla.

Y para el pequeño príncipe, Thor, de entre todas las historias, ésa sería su favorita. Tenía tan solo doscientos cincuenta años*, y corría a los brazos de su padre, para darle la bienvenida. Thor era un niño muy activo, y también decía muchas tonterías como que cuando fuera grande tendría un solo ojo, igual que su padre.

La hermosa reina, Frigga miraba con diversión, esperando que Thor más grande no dijera cosas así.

Antes de que la fiesta por la victoria pudiera empezar, antes de que los nueve reinos pudieran unirse en el gran banquete, las tres Nornas de Nornheim hicieron su vista. Estas mujeres, brujas del destino, nunca regalaban su presencia sin una invitación a ellas o de ellas. Urd (Pasado), Verdandi (Presente) y Skuld (Futuro) se dirigieron ante Odín con una advertencia sobre el futuro de la alianza entre Jotunheim y Asgard.

—Padre de Todo —como se referían todos a Odín, Skuld (futuro) hizo una reverencia —permítame señalarle el futuro.

Odín las rechazó, pidiéndoles que no dijeran nada sin su consentimiento, y menos delante de algunos asgardianos que podrían malinterpretar todo. Pero ellas empezaron a seguir con sus advertencias como si no le hubieran escuchado.

—Asgard está bien —dijo Verdandi (Presente) —, y no vuelva a Jotunheim.

—Porque el mal fue abandonado allí —dijo Urd (pasado)

—Y lo conocerá en el futuro —apuntó Skuld (futuro) —y ya no será una amenaza.

Odín no entendió muy bien a qué podrían referirse, estaba seguro que la única amenaza de Jotunheim había sido el Cofre de los Viejos Inviernos, y ahora estaría custodiada en su salón de reliquias que muy celosamente conservaba cerca suyo. Quiso preguntarles, saber más pero las nornas simplemente se marcharon tan rápido como habían aparecido. Odín y Frigga se miraron preocupados de que algo importante fuera olvidado en las tierras heladas. Por una semana, el rey Odín estaba tentado de volver a Jotunheim, pero la advertencia de las nornas se lo impedía. Ellas siempre velaban por el bien de Asgard, así que debía confiar en ellas, y entregarse a la fiesta que merecía su presencia.

🌟 🌟 🌟 🌟

 

Jotunheim estaba más silenciosa como de costumbre. El mismo día de la derrota, Laufey ordenó que los guerreros caídos fueran alimento de los animales del reino. Que hasta el mismo Farbauti fuera devorado.

Abandonaron el campo de batalla, Laufey temía que Odín pudiera regresar a matarlo ahora que no tenía en sus manos el Cofre de los Viejos Inviernos, pero los llantos de un bebé lo detuvieron.

Farbauti y Laufey habían decidido traer a la vida al futuro heredero, y para qué pedir más cuando sus padres serían los más poderosos, entonces su hijo lo sería doblemente y sería ahora quien vengaría la muerte de la madre y recuperaría el Cofre de los Viejos Inviernos.

Pero esos planes ya no importaban, esa felicidad había sido breve, tornándose imposible cuando el niño nació. Era pequeño como para ser hijo de gigantes, tan débil al frío para ser un jotun. Era la vergüenza que Laufey escondió en el templo mientras la batalla se llevaba a cabo. Esperando que la destrucción llegara al templo y el niño muriera con la caída de escombros. Pero estaba vivo, pidiendo tal vez algo de comer con su llanto. Lo tomó en brazos, Laufey realmente sintió decepción e ira al verlo, más de la  que ya  sentía en su derrota ante Odín.

No podía aceptarlo como su hijo, así que lo abandonó a su suerte, convenciéndose que el niño merecía morir.

Mientras se retiraba ya varios metros, vio abrirse un portal en el cielo de donde descendieron las tres Nornas de Nornheim. Laufey no podía temerlas, ellas no eran guerreras, no había forma de que quisieran tomar a Jotunheim, y aun así a Laufey le causó curiosidad su repentina visita.

—Rey Laufey —llamó Verdandi (presente) —, me temo que usted olvida algo importante en el templo…

 

Notas finales:

 

*Los 250 años de Thor equivalen a 5 años.

Cada 50 años en los mundos de este fanfic, contarán como un año, evitando que nuestros dioses se mueran o envejezcan tan rápido.

Y sobre la palabra jotun y jötnar. La primera es en singular y la segunda plural :3 no tengo el enlace de donde lo saqué, pero supuestamente esta es la forma correcta de usarlos, obvio pueden tener doble N en algunos casos.

Y por último; las actualizaciones, como algunos saben, yo actualizo rápido pero menos este fanfic ???? y que no cunda el pánico, ahora sí lo voy a actualizar así de rápido, mínimo un capítulo por semana, es decir que máximo tendrán muchos 7u7r

Y gracias de ante mano por su apoyo y si no les gusta esta plataforma, pueden buscar la misma historia en otras (que obviamente se actualizan a la misma hora y día) besos ????


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