-----Youngjae----
-¿es todo lo que tienes? Jaja no me hagas reír- pero si él es mucho mejor que yo en basquetbol, no sé qué se queja.
-no me presiones, tu no sabrías identificar la tecla “do” en todo el piano- me burle de él mientras trataba de quitarle el balón.
-tú te caerías dos segundos después de subirte a una patineta- me devolvió la jugada verbal y al mismo tiempo encesto -5 a 1….vas mejorando- y era cierto, la ves pasada íbamos 8 – 0
-pues tú no podrías hacer una nota alta perfecta aunque te pagaran- ahora yo tenía el balón y corrí hasta la otra canasta.
-¿para qué cantar ópera si lo mío es el rap?- me alcanzo con facilidad y así como llego hasta mí, me quito y lanzó el balón, haciendo una canasta perfecta -waahh~ ¿viste eso?- yo me senté en el suelo, totalmente agotado y sudando como loco.
-vas mejorando- reí y saque un pañuelo para limpiarme.
-gracias por el calentamiento, le ganare a Jackson esta vez- me dijo y se pasó a lado de mi con el balón en sus manos. Yo conocía a Jackson gracias a Mark. Se conocieron jugando este deporte y son buenos amigos, casualmente a ambos les gusta el baloncesto, el skate y el rap. Mark dice que Jackson hace Beat Box también.
-debo regresar a casa y ducharme, mi clase comienza en una hora- me levante del suelo más tranquilo, yo no era muy deportista ya que lo mío es el arte, me encanta actuar, pintar pero más tocar el piano y cantar.
-me encantaría poder acompañarte, pero Jackson no debe tardar y hoy es mi revancha- hiso una voz tenebrosa muy fingida que me hiso reír. Tome mis cosas.
-¿Cómo quedaron?- pregunte
-5 – 7 – respondió, yo me impresione, en verdad debe ser bueno, no me gustaría jugar con él porque me dejaría en ridículo, si Mark ya lo hace, él me ara polvo.
-pues mucha suerte con eso, nos vemos luego- le dije y antes de irme, me detuvo
-¡espera! Antes de que te vallas, ¿ya has conseguido más amigos? Ya llevas tiempo aquí y es para que tengas a alguien más aparte de mi- sí, él era mi mejor y casi único amigo, me mude a Busan hace 7 meces y Mark es el único chico que puedo considerar mi amigo en este lugar
-lo are cuando tenga tiempo- le respondí.
-puedes socializar más… ¡ya se!, tal vez te invitare a alguna fiesta- me dijo emocionado.
-nos pondremos de acuerdo después, tengo que irme- le dije mientras veía mi reloj, nunca había llegado tarde a una de mis clases.
-bueno, que te valla bien, Youngjae- le sonreí y me marche a casa, no quedaba muy lejos del deportivo y no fue mucha necesidad correr ni nada.
Llegue a casa y me metí al baño a tomar una cucha de agua tibia para refrescarme mientras pensaba en lo que me dijo Mark
~puedes socializar más… ¡ya se!, tal vez te invitare a alguna fiesta~
Hum… una fiesta… hace tiempo que no voy a una. Ni siquiera recuerdo cual fue la última a la que asistí. Pero no tengo mucho tiempo para fiestas, no creo que sea necesario conocer a más personas, con Mark estoy bien y más amigos sería un conflicto, Mark es tranquilo y serio algunas veces. eso me agrada mucho de él.
Si conozco a alguien más tendría que cambiar mi modo de vida para tener tiempo para ellos y no sé si sea bueno, mi mejor amigo (aparte de Mark) es la música y el arte, son dos cosas fantásticas y que nunca abandonaría, ni siquiera por eso que llaman “amor”
Salí de la ducha y me puse una camisa blanca, chaqueta negra y unos jeans. Mis gustos de la moda son simples.
Después de peinarme, Salí de mi casa directamente a mi “escuela de artes”.
Llegue y entre. En realidad podría considerarse como una casa de cultura. Hacen muchas cosas aquí, como bailes tradicionales, clases de Taekwondo, pintura, música, obras y muchas cosas más.
Llegue a un pequeño salón donde estaban pintando, casi no me gusta esta clase porque no soy muy bueno en esto. Pero me gusta poder pintar algo además de maquillarme algunas veces.
Hoy era estilo libre, así que cada quien dibujaba lo que quisiera. Yo intente dibujar la silueta de un árbol en un atardecer de rojo carmesí. Para no ser el mejor, admito que me quedo bien.
Otros pintaban cosas como paisajes, animales y hasta personas.
Cuando todos terminaron, comenzaron a dialogar entre ellos sobre sus pinturas, mientras yo daba unos toques adicionales para matar el tiempo que restaba. En esos momentos eran cuando en verdad me sentía solo. Me sentía como alguien con un repelente contra personas. Nadie se molestaba en hablarme, más que para pedirme algo como “oye, ¿me podrías prestar esa pintura?” no creo que sepan al menos mi nombre, y no éramos muchas personas que digamos, una docena como máximo.
Hoy había algo diferente, tal vez un nuevo alumno. No estoy seguro, no me molesto en recordar a mis compañeros de clase pero juraría que definitivamente es nuevo. Pero a juzgar por como pinta debería llevar mas tiempo aquí. Se encuentra solo como yo y sonríe como si le agradara eso.
Termino la hora y era tiempo de ir a una de mis clases favoritas. Canto.
Todo transcurrió con normalidad. El profesor tenía una especie de preferencia conmigo. Hasta cuando formábamos coros para algunas demostraciones en festividades, yo siempre era uno de los que estaban en frente, era muy divertido para mí. Pero por más bueno que sea en esta clase, nadie se interesa en conocerme.
Termino y decidí ir a la biblioteca que tiene este mismo lugar. Me gusta la literatura aunque no es algo que me apasione en realidad, solo me gusta como otro modo de relajación.
Al estar sentado, leyendo un libro de amor. Uno de mis intentos por intentar entender a los demás.
Un cosquilleo me recorrió la espalda, del que tienes cuando te miran por detrás. Como si te estuvieran siguiendo.
Voltee y era el mismo chico de la clase de pintura. Tenía el pelo y abrigo de color negro. Piel pálida y labios gruesos, era atractivo a simple vista, pero no de alguien del que yo me enamoraría…si fuera homosexual…la verdad es que no se aun mis preferencias. Aun teniendo 19 años.
Él me observa de la misma manera y gira la cabeza, como si estuviera curioseando.
Volví a darme la vuelta y continuar con mi lectura. Pero aunque leía las palabras no comprendía ninguna. Vi mi reloj, suspire y cerré el libro. Era hora de la siguiente clase.
Deje el libro donde lo encontré y me fui a un salón más grande. En este habíamos muy pocos alumnos. La maestra no había venido las últimas 2 clases y no vendría en otras más, no era algo que me tuviera triste, al contrario. Ella había tenido un bebe hace unos días y tiene que guardar mucho reposo. Por ser su primer hijo le fue muy difícil aparte de ser muy madura.
No es solo eso que me pone de buen humor. Nadie se molestaba en venir a las clases (claro que cualquiera no vendría si sabe que no se presentara el maestro) pero yo ya sabía todo lo necesario para tocar el piano sin que me ayuden. Y al estar solo, es mucho mejor.
Entro y busco unas partituras que llamen mi atención. Una canción llamada “Heartbeats” latidos del corazón en inglés.
Las tome. Había 5 teclados de piano para principiantes y solo un verdadero piano, un piano de cola. El más hermoso que he visto.
Voy con uno de los teclados, no quiero tocar el piano de cola hasta que me salga bien la canción.
Al comenzar a leer y tocar, me doy cuenta que las notas en la clave “Fa” simulan los latidos de un corazón, algo curioso, pero me calma.
Cuando iba practicando a la mitad de la canción, alguien entro.
Me gire rápidamente y detrás de la puerta, poco a poco alguien comenzó a asomarse. Era el mismo chico de la biblioteca.
-¿hola?- saludo curioso.
-¿Qué quieres?- respondí con mal genio.
-solo salude, no era para que te molestaras- me respondió.
-estas perturbándome, además, no hay razón para que estés aquí- le dije, tal vez por eso no tenía muchos amigos, mi parte antisocial que normalmente moraba en mí alejaba a los demás. no sabía por qué era así, si la soledad era algo que me gustaba pero también me amargaba la vida.
-el querer estarlo es una buena razón- respondió.
-¿Por qué quieres estar aquí?- le pregunte.
-me pareces alguien curioso, tal vez hasta paranoico, por como reaccionaste al verme en la biblioteca y cuando entre. Tranquilo, la NASA solo se concentra en aliens y los iluminati en conquistar el mundo y esclavizar a los humanos- no pude evitar dejar escapar una pequeña risita, era serio pero divertido al parecer.
-lo siento, no sé lo que me pasa- le dije.
-¿te disculpas por algo que no sabes?-me confundí
-eres algo raro-
-ya me lo han dicho…muchas veces jaja- le sonreí.
-¿Cómo te llamas?- le pregunte.
-Youngjae- me respondió y yo me quede con cara de poker.
-yo también- alzo las cejas
-Yoo Young Jae- extendió la mano después de decir su nombre completo.
-Choi Young Jae- la estreche y reí a la vez. –entonces. Ya que no eres de la NASA o un iluminati. ¿Qué haces aquí?- le pregunte y él rio.
-escuche un sonido, uno de mis favoritos por cierto. Y al seguirlo me encontré contigo-
-yo estaba tocando el piano- le dije y volteo a ver el lugar
-ya lo note- dijo.
-¿te importaría que me quedara aquí? Tengo esta hora libre y pensaba en ir al jardín a pintar algo. Pero me encanta escuchar el piano- me quede meditándolo un momento. No creo que haga ruido y podré concentrarme.
-de acuerdo. Pero no te molestes si no hablo mucho- le dije.
-perfecto. Solo cuando tomo pausas es cuando me gusta interactuar- tomo una de las sillas y yo volví a sentarme frente a ese teclado.
Comencé a tocarlo y él me hablo.
-¿Por qué no tocas ese piano de verdad?- me dijo. Voltee a verlo y lo vi con una pluma y su libreta en mano.
-no quiero tocarlo hasta que me salga bien esta pieza, soy como tú. Antes de usar un pincel, practicar con el lápiz, y aunque seas un profesional con el pincel no significa que no volverás a tocar un lápiz- le dije, él volvió a lo suyo y yo a lo mío.
Después de practicar y practicar, me salió bien la canción y me había aprendido la gran mayoría de esta.
-¿quisieras comer algo?- me pregunto cuando la hora termino.
-claro- le dije sin pensarlo, de haberlo hecho, mi antisocial-yo hubiera echo efecto y lo rechazaría.
Salimos a una cafetería cerca. Algo típico para comenzar una buena conversación.
Pedí una malteada y pay de moras. Él un café y pay de manzana.
-¿desde cuándo estas aquí?- le pregunte. Él me miro y después de comer un poco de su pay, me respondió.
-esta es mi primera clase en este lugar, pero la segunda vez que estoy aquí. La primera fue por la biblioteca, me gusta la lectura y a veces pinto a los personajes de las narraciones como me la imagino. Es algo muy entretenido y divertido. Después de leer, pase por uno de los salones por curiosidad y vi que estaban pintando. Inmediatamente me inscribí y quiero ver que más clases hay que puedan interesarme.- me narro y escuche con atención.
-¿te gustaría aprender a tocar el piano?- me sonrió y negó.
-solo soy bueno en el lienzo y papel. Me gusta escuchar el piano pero no me interesa tocarlo. Además, escuche que la profesora se retiró algunos días por cuestiones maternales- asentí bebiendo de la malteada.
-¿te gusta este lugar?- me miro
-me toca hacer una pregunta-
-de acuerdo-
-cuando te vi en la clase, note que no hablas con nadie. Tampoco en canto y mucho menos en tu clase de piano. Aparte, estabas solo en la biblioteca. ¿Por qué?- preguntaba algo más que obvio.
-no tengo muchos amigos- le dije bajando la cabeza.
-eso ya lo sé. Pero ¿Por qué? No es muy difícil hablar contigo- me encogí de hombros.
-eres uno de los pocos con los que me he abierto así- sorbió de su café. Interesado.
-¿Por qué?-
-es mi turno de preguntarte algo- le dije y él sonrió, asintiendo.
-¿te has enamorado?- le pregunte. Suspiro y lo medito por un momento.
-si- respondió rápidamente.
-¿Cómo fue tu experiencia?-
-mi turno- dijo y yo hice una línea recta con los labios -¿Por qué dejaste que te hablara si eres tan antisocial como dices?- recordé como me sentía al estar solo todo este tiempo a excepción de las pocas horas que veo a Mark.
-la soledad es dulce, pero con el paso del tiempo se vuelve amarga- le respondí en resumen –ahora tu responde. ¿Cómo fue?- tome un gran trozo de pay que sabía a gloria. Él me miro con un brillo en sus ojos.
-¿con detalles?- asentí mientras no lo dejaba en paz con mi vista. –al principio, cuando vi por primera vez a esa persona, sentí algo extraño, como si la conociera desde hace tiempo. Tenía un gran deseo de hablar y conocerlo. Pero al estar frente a frente, las palabras no salían y mi boca me traicionaba, diciendo cosas incoherentes. Paso el tiempo y yo no dejaba de pensar en ese ser que me traía vuelto loco, provocándome insomnio y retratándolo una y otra vez en mis pinturas. Como si fuera la droga más fuerte y adictiva. Hasta que no pude más y se lo confesé. Aun somos pareja de hecho- sonrió viendo la nada y yo deje salir una risita.
Bebí de la malteada para aclarar más mi garganta.
-suena ridículo. ¿No?- sonreí y asentí. –lo sé. Pero a juzgar por el libro que leías, esta historia que me hiciste contarte y la soledad en la que te encuentras. Sé que no has encontrado el amor. Solo déjame decirte, que cuando lo encuentres, entraras en la más profunda depresión cuando la dejes…o lo dejes- dijo y yo giré a verlo con los ojos abiertos.
-¿tú eres gay?- le pregunte. El solo se limitó a sonreír.-¿Cómo se llama?-
-Daehyun- dijo y terminamos de comer en silencio, no incomodo gracias al cielo.
Era la hora de otra clase, la clase de teatro. Yo era muy buen actor y hacia papeles principales y eso me enorgullecía. Youngjae prometió quedarse esta hora y verme actuar. ¿Quién lo diría? Había conseguido un amigo. Y es casi como Mark, serio pero divertido, aunque Youngjae es algo tenebroso, su forma de analizar las cosas perturba pero aun así, es un buen chico.
Terminan las clases y después de obtener unos halagos de Youngjae suena mi celular en ese momento. Era Mark.
-¿hola?-
-¡hola! ¿Recuerdas lo que te dije de una fiesta?- suspiro. He pensado en eso casi todo el dia.
-si- respondo secamente. Más nervioso de lo que demostraba.
-y…¿no preguntaras que sucede con eso?- sonrió. Le gusta dar vueltas al asunto.
-no me digas. Ya sabes a qué fiesta me invitaras- Youngjae me miro sonriendo, haciendo una expresión de sorpresa.
-mmm fiesta lo que se llama fiesta, no es. Pero te gustara- medito un momento antes de responderle.
-¿un bar, antro o disco…un burdel?- ahora Youngjae si estaba sorprendido.
-ya lo veras. Pasare por ti en 20 minutos.-
-¿Cómo? ¡¿Hoy mismo?!- revise mi vestimenta. Tenía unas pequeñas manchas de pintura en mis prendas y no eran las más apropiadas para conocer gente nueva.
-oye. Mark, no creo que sea muy necesario. Además, ya encontré un nuevo amigo- mire a Youngjae y él me sonrió asintiendo.
-¡genial! Él también puede venir- abrí mis ojos de par en par
-pero…- no termine mi oración
-pasare por ti y tu amigo en 20 minutos- me interrumpió y colgó rápidamente el celular, antes de que yo pudiera protestar.
-y… ¿Qué te dijo?-me pregunto Youngjae mientras se sentaba de nuevo en una de las sillas que estaba cerca. Seguíamos dentro del salón de teatro.
-pasaran por nosotros en 20 minutos- dije y él me miro raro.
-¿nosotros?- repitió. Le sonreí
-si, espero que no sea mucha molestia para ti. Lo que sucede es que Mark es muy insistente y siempre te deja sin salida. Pero son parecidos ustedes dos. Casi no hablan y son tranquilos- le dije y él pareció pensarlo.
-de acuerdo, solo espero que no sea muy larga esta cita- me senté a lado de él. Eran aproximadamente las 3:30 pm Y el tiempo corría lento para mi gusto. Youngjae había rentado un libro de la biblioteca y estuvo muy entretenido. Yo en cambio solo estaba sentado sin hacer nada.
Aunque pensándolo mejor. Si hacia algo. Pensaba en cómo serían sus amigos. Tal vez sean como él y Youngjae. Pero por otro lado. Dicen que los amigos normalmente son muy disparejos. Siempre hay uno que hace bromas, otro serio y un tierno. Hay más categorías pero no los recuerdos, aunque es difícil olvidar al “don juan” o “galán” de cada grupo de amigos.
-Choi, hay algo que me parece curioso de ti. ¿Sabes?- dijo Youngjae sin despegar su mirada del libro.
-¿Qué cosa?...Yoo- le dije, tener casi el mismo nombre ameritaba ciertos medios.
-no eres como crees ser- esta vez sí me miro.
-¿a qué te refieres?- le dije
-crees que eres antisocial, te gusta la soledad y la verdad es que a todos nos gusta en cierto periodo de su vida, mayormente en la pubertad.-sonreí, yo suponía que ya había pasado esa etapa.
-¿estás diciendo que aún estoy en la pubertad?- él volvió a mirar su libro.
-no, a lo que me refiero es que te quedaste con esa sensación, deberías salir de tu cascaron y conocer personas. Ser “antisocial” no es lo tuyo y puedo verlo en tu mirada. Cuando sonríes lo haces con mucho entusiasmo y tratas de aprender cómo ser normal por medio de la literatura romántica- de acuerdo, si había leído libros de amor pero no creo que era para tanto. ¿o sí?.
-bien, entonces ¿debería socializar más?- le pregunte.
-en cierto modo, sin perder tu toque. Y una cosa más- no despego su mirad del libro esta vez.
-dime-
-no has conocido el amor, y pareces desesperado por encontrarlo, puede que inconscientemente. Pero te lo vuelvo a repetir. Cuando lo encuentres, te será muy difícil dejarlo. No estoy diciendo que no ames. Solo que cuando lo hagas, estés atento a lo que tal vez te pueda pasar- este tipo da miedo en cierta manera. Tal vez sea así como un psicólogo.
-¿eres psicólogo?- me miro y se echó a reír, eso me quedo muy claro.
-por supuesto que no.- continuo riendo.
-¿entonces en que trabajas?- le pregunte. Por cómo estaba vestido podría decirse que ganaba bien.
-¿no es obvio? Soy pintor.- dijo y volvió a mirar su libro con una sonrisa.
-¿entonces por qué vienes aquí?-
-nadie me enseño a pintar y nunca es tarde para aprender, digamos que tengo un don. ¿Y tú? En que trabajas-
-mis padres siguen pagando mis estudios, pero pagan la mitad por mi beca y algunas veces toco el piano en restaurantes- dije mirando el piso, extrañaba a mis padres y comenzaba a sentirme una carga para ellos, pero continuo esforzándome en la universidad para dar lo mejor de mí.
-¿Por qué no estás en tu instituto?- pregunto
-estamos en vacaciones. Y tomo todas estas clases para no solo depender de mi trabajo, me gusta hacer muchas cosas- fui interrumpido por mi celular. Era de nuevo Mark.
-ya estoy afuera- ¡¿tan rápido habían pasado 20 minutos?! Bueno, es comprensible, antes de que comenzáramos a charlar ya había pasado bastante tiempo.
Colgué el celular y me levante de una se las sillas.
-ya es hora- Youngjae cerro su libro, no sin antes echarle una última mirada a el número de página. Se levantó también y caminamos a la salida.
Fuera estaba Mark en su auto color negro, no sabía mucho de carros pero me gustaba mucho el suyo.
-¡hola! Tú debes ser el nuevo amigo de Youngjae- le dijo a Yoo mientras se acercaba a nosotros.
-si, me llamo Young….Yoo Young Jae- se sorprendió.
-valla, has encontrado a tu hermano perdido jaja, es un gusto, yo soy Mark- dijo y estrecho su mano.
-el gusto es mío- devolvió el gesto y se soltaron.
-bien, entonces hay que irnos, nos están esperando- subimos al auto y nos llevó a un lugar un tanto lejos.
Llegamos y bajamos del auto. Era una discoteca. Pero era muy temprano como para que abrieran, o eso era lo que yo pensaba
-no sabía que lo abrían a las 4:00 pm- dijo Youngjae, yo tenía la misma opinión que él.
-si, pero no muchos vienen a esta hora. Hay que llegar temprano a la diversión- respondió Mark mientras caminaba a la entrada.
Todos entramos y había música con su volumen típico. Fuimos una planta más arriba, donde el volumen era más moderado, las ventanas no permitían la entrada a la luz solar, y la luz artificial le daba un toque de elegancia pero fantasía. Perfecto para charlar.
Nos sentamos en una mesa donde hay cuatro tipos más.
-¡hola! Él es el amigo del que les hable y él es un amigo suyo- dijo Mark.
-me llamo Kumpimook. Pero dime BamBam.- dijo un chico hiperactivo y con una gran sonrisa.
-él es Yoo Youngjae y yo soy Choi Youngjae- dije y sonrieron.
-valla, espero no confundirme. Yo Soy Himchan- dijo otro de pelo negro y sonrisa graciosa. Parece de conejo.
-yo soy Gyeom, déjame informarte que falto uno de nosotros hoy- hablo un chico con facciones de un estadounidense-coreano. Era atractivo.
-oohh si, dijo que no pudo venir, se sentía mal del estómago- dijo BamBam toqueteándose la barbilla.
-ya nos han presentado a nosotros, pero si no lo recuerdas. Soy Jackson Mang-me sonrió y le sonreí.
-vamos, tomen asiento- dijo BamBam
Los tres nos sentamos y disfrutamos la música por un rato.
-disculpen, ¿podrían decirme quien falto?- dije y Gyeom me respondió.
-falta Jae Bum, puedes decirle JB. Le gusta que le digan así- sonrió.
-si, me llamo y dijo que se sentía mal, pero que no te preocuparas, él te conocerá…algún día, no te desesperes- dijo BamBam.
-tranquilo BamBam, no querrás asustarlo- dijo riendo Jackson.
-deja al pobre niño, él solo quiere hablar con Choi Young Jae. También deberían de hablar con su amigo, no lo he visto decir ni pio- dijo Himchan mirando a mi invitado y este le sonrió.
-no hablo mucho- le respondió.-
-eso ya lo notamos- le sonrió Jackson.
-¿quieren pedir algo?- dijo una camarera que se había acercado a nosotros quien sabe cuándo.
-yo un Martini y una limonada para los niños- dijo riendo Himchan.
-ehh que no somos niños, ya tenemos 18 años.- reprocho ofendido BamBam.
-¿desde ayer? Oye, no queremos que te pongas loco con el alcohol, puedes tomar, pero no mucho- le dijo Jackson y él se calmó.
Después de pedir las bebidas todo se volvió más movido y divertido.
-ehh chicos. ¿No quieren jugar?- dijo Gyeom.
-¿a qué? Piedra, papel o tijera? Todos ya sabemos quién gana siempre- dijo Himchan.
-no, no, no y no. Yo decía a algo más interesante…- volví a decir.
-¿botella?- dijo BamBam.
-algo así, pero sin botella. Miren. En vez de preguntar “verdad o reto” solo pondremos retos. Como estamos sentados en círculo esto ira así. Yo a Jackson, Jackson a Mark, Mark a Choi y así. Al terminar, vamos a hacerlo al revés- dijo, se veía mareado y tenía los efectos típicos del alcohol.
-vale, estoy de acuerdo, pero más vale que todos cumplan su reto, por más bochornoso que sea- me sorprendió escuchar a Yoo Youngjae, creo que es lo segundo que dice en todas estas horas.
-¡estoy de acuerdo con él! Pero tampoco que sea muy pesado- comento himchan y todos asentimos y aplaudimos.
-¿Quién empieza?-pregunto Mark.
-el más pequeño. Gyeom- dijo Himchan y volteamos a verlo.
-de acuerdo. Jackson, quiero que vayas a la planta baja y tomes lo primero que encuentres- él pareció pensarlo un momento mientras todos reíamos. Se levantó y fue abajo, todos estaban curiosos por lo que traería.
Después de unos 2 minutos regresa con algo en la mano
-¿una copa?- dije extrañado, pero claro, ¿Qué sería lo primero que encontrarías? Siendo este un lugar de fiestas.
-si, se lo quite a un chico. Muy atractivo por cierto- dijo Jackson mientras se sentaba de vuelta. –mi turno- volvió a decir-Mark, bebe esa copa. Hasta el fondo sin respirar.- Mark tomo la copa y la olio.
-¿que diablos es esto? Huele muy fuerte. Seguro y caigo al piso- todos lo miraron.
-te cuidaremos- le dijo himchan y Mark bebió la copa de cuatro tragos.
-cof cof…wahh~ sabe genial- dijo riendo.
-asi se hace- comenzaron a alagarlo.
-bien, mi turno.- dijo Mark –Choi Youngjae- yo voltee a mirarlo de nuevo con una sonrisa de nerviosismo -como no has tenido novio ni nada. Intenta róbale un beso a esa chica- todos volteamos. Al parecer a Mark se le subió muy rápido el alcohol a la cabeza.
-¿estás loco? Puede demandarlo por acoso- dijo preocupado BamBam.
-esto es una fiesta. Seguramente y hasta se deja- volvió a decir Mark.
-de acuerdo, solo a ella.- dije y me levante con esfuerzo, estaba mareado y voltee a ver cómo me daban ánimos mientras reían, yo me acerqué a una chica de vestido negro y pelo castaño.
-¡hola!- le dije
-¿vas a besarme?- dijo y yo me sorprendí.
-s-sí. ¿Cómo lo supiste?- le pregunte.
-son muy ruidosos ustedes. De diré algo, fingirás querer besarme y yo te daré una bofetada leve, luego me iré molesta. ¿Trato echo?- no entendí la mitad de lo que dijo pero yo asentí riendo.
Me quede viéndola por unos segundos.
-¿Qué esperas? Llevas dos minutos viéndome- reí irónico.
-jajaja como vuela el tiempo- le dije y estaba a punto de caerme. Pero ella me empujo y me bofeteo.
-¡cerdo!- me grito. Ese golpe sí que me dolió. Voltee a ver a los chicos y ellos se burlaban a manera de juego. Yo regrese con mi mano en mi mejilla.
-bien hecho, galán- dijo riendo Mark.
-no sé por qué lo hiso, ¡ni sé que me dijo!- les dije y ellos continuaron riendo.
-bien, te toca ponerle un castigo a tu amigo- me dijo Jackson sonriendo
-un castigo…humm..- no sabía que decirle. Hasta que recordé a su pareja –Yoo Young Jae. Quiero que llames a tu novio y dile que venga- todos se quedaron en silencio, estupefactos por mi petición.
-espera un momento- saco su celular y tecleo un número. Espero y alguien contesto. E hiso exactamente lo que le pedí. -¡listo!- dijo mientras guardaba su celular.
-¿Por qué le pediste algo así?-dijo Gyeom, yo reí.
-no sabía que más hacer- todos me reclamaron y rieron.
-¡esperen! ¡Esperen!. Es el chico al que le quite su copa- dijo Jackson mientras señalaba a un tipo de pelo plateado y rasgados ojos.
-Himchan. Ve con él, pregúntale su nombre, pídele su número y proponle una cita- Dijo Youngjae. Todos exclamamos asombro mientras Himchan reía.
-estás loco- dijo.
-¡tú dijiste que todos debíamos cumplir los retos!- exclamo Youngjae y todos lo apoyamos.
-está bien, lo are. De todos modos, este chico si es mi tipo-le aplaudimos y Himchan se levantó, yendo directo a ese tipo.
-¿creen que lo haga de verdad?- pregunto Gyeom.
-ya lo está haciendo- respondí.
-debe estar fanfarroneando. Tal vez solo finge y en verdad le pide la hora.- sospechaba BamBam.
-esperen…se está riendo, jajaja está nervioso-comento Jackson.
-miren como lo ve. Parece que está viendo un bicho raro jajaja pobrecillo- dijo Yoo Youngjae.
-esta escribiendo algo… ¿será su número?-dije y Himchan comenzaba a regresar con una gran sonrisa.
-¿Qué te dijo?- le pregunto Youngjae.
-pues, me dijo su nombre, me dio su número pero no acepto mi cita, aunque me dijo que lo llamara pronto- dijo Himchan victorioso.
-no te creo. Enséñanos su número- dijo BamBam. Himchan extendió un papel en donde un número estaba escrito.
-¿Cómo se llama?- le pregunto Gyeom.
-JongUp…Moon Jong Up- Volvo a sorrier.
-valla, hasta te dijo su nombre completo- dije sorprendido.
-así es. Y es mi turno poner un reto.- dijo Himchan mientras veía a su alrededor.
-BamBam, haz un baile. Un baile sensual-exclamamos y reímos por tal reto.
-yo quiero ver eso.- Gyeom hablo y BamBam lo miro.
-será mejor que lo disfrutes porque yo te pondré algo peor- dijo mientras dio una sonrisa pícara.
-¿Qué la baile completa?- pregunte.
-si su baile es bueno, podrá bailar solo una cuarta parte. Pero si no lo es, la bailara completa-
Esperamos a que la siguiente canción empezara. Y casualmente empezó una bastante genial. Se llamaba “Up and Down” de un grupo de chicas. Todos reímos y aplaudimos para animarlo.
Comenzó a bailar y se movía bastante gracioso pero sensual. Comenzamos a reír como locos y llego la mitad de la canción.
-bien, estoy satisfecho, puedes parar- dijo Himchan y él volvió rápidamente a su asiento, varias personas además de nosotros lo habían visto y también reían.
-mi turno. Gyeom, besa a Mark- guardamos silencio. Todos nos vimos entre sí.
-BamBam, ¿no crees que es mucho?- le dijo Jackson.
-aceptó el reto. Sentirás después mi venganza- dijo y todos volteamos a verlo, totalmente sorprendidos.
Gyeom se puso de pie. Y fue hasta el otro extremo donde se encontraba Mark. Él se giró totalmente sorprendido y ante la mirada atónita de todos, Gyeom se acercó rápidamente a Mark y le dio un beso en los labios. Luego se separó rápidamente y gritaron ambos.
-aaahh… ¿cómo pudiste hacerlo?-le dijo Mark con una expresión de trauma bastante graciosa. Todos volvimos a reír.
Después de eso. Todo volvió a ser risas, llego el novio de Daehyun y comenzaron a hablar de ellos mientras yo escuchaba atentamente su historia, de cómo se conocieron y fue bastante entretenido.
Las horas siguieron pasando y unos tomamos con moderación mientras otros, bueno, otros fueron bastante felices.
-chicos, creo que ya me voy a casa. Mañana tengo que ir a tomar mis clases- dije.
-te podemos llevar. Daehyun tiene auto y también tenemos cosas que hacer mañana.- dijo Youngjae.
-cierto, además ya tengo bastante sueño- dijo y yo sonreí.
-yo conduciré.- le dijo Youngjae. Daehyun me parecía muy buena persona y también alguien lindo, aunque hacia enojar a Youngjae a propósito pero siempre se reconciliaban.
-yo…Yo...-comenzó a decir Mark pero no terminaba su oración, él fue quien más bebió de todos. Debió ser por la copa que le dio Jackson en el juego.
-será mejor que todos volvamos a casa- dijo Jackson mientras se acomodaba el pelo.
-ha sido una gran velada-dijo BamBam levantándose de su asiento.
Como se dijo. Cada quien se fue con alguien diferente para marcharse a su hogar.
Daehyun y Youngjae fueron amables y llevaron a Gyeom y a mí. Mark, Jackson, Himchan y BamBam se fueron juntos.
-es aquí. Muchas gracias por traerme-les agradecí.
-no fue nada. Esperamos que nos inviten a fiestas más seguido jaja.- me dijo Daehyun mientras reía.
-nos vemos luego, cuídate mucho- dijo Gyeom.
-nos vemos mañana en clases-me dijo Youngjae, después de responderles. Se marcharon y entre a mi cálido hogar.
Encendí las luces y trate de prepararme algo para cenar. Cuando revise mi teléfono de casa y vi unos mensajes de voz.
-Youngjae, necesitamos una de tus presentaciones en el restaurante. Llámame cuando escuches esto.- ¡genial! Me gustaba tocar el piano en estos lugares lujosos. Hay veces que me invitan a cenar.
Marque inmediatamente y fui atendido unos momentos después.
-buenas noches ¿Qué se le ofrece?- escuche.
-¡hola! Soy Youngjae. Quería saber qué día debo ir al restaurante.- dije emocionado.
-hoy a las 5:30pm. Tu presentación terminara 3 horas y media después.- dijo, me confundí cuando dijo “hoy”. Reviso mi reloj ¡madre mía! Es la 1:14am.
-con mucho gusto, ahí estaré puntual. Que tenga buenas noches-dije.
-gracias. Igualmente, espero con ansias verlo ahí- y colgó.
Por ser de madrugada debería comer algo no muy pesado.
Tomo una fruta mientras camino a mi habitación. La termino, me lavo los dientes y me cambio de ropa.
Me recuesto pensando en toda esta noche que paso, fue muy divertido conocer personas nuevas.
Poco a poco cierro los ojos. Fue un largo día y mañana tengo que estar listo. Me gustaría conocer al chico que falto hoy.
Suena mi alarma. Yo solo saco mi mano de las cálidas sabanas, buscando el aparato que genera el molesto sonido. Son las 7:30am. Tengo que ver a Mark en el deportivo como todas las mañanas. Pero por todo lo que sucedió anoche dudo mucho que esté esperándome.
Tomo mi celular y lo enciendo, tecleo su número y espero a que responda.
Después de un buen rato al fin me atiende.
-¿hola?- su voz carraspea y habla con lentitud.
-hola, Mark, ¿iras hoy al deportivo?- le pregunto con los ojos cerrados.
-no… me siento fatal. Apuesto que tu no tanto pero deberías dormir un poco mas, la hora y media que dormirás te servirá mucho- me dijo y yo sonreí.
-estoy de acuerdo. Descansa Mark- le dije.
-igual tu- colgué mi celular y programe mi despertador para que sonara una hora después. Me recosté y unos minutos sonó.
-no puede ser, solo pasaron minutos- eran las 8:00am y no quería levantarme, pero no había de otra.
Me levanto y voy a la ducha. Me alisto y desayuno algo. Llego a clases y esta vez sí era unos minutos tarde. Pero nadie lo nota.
De nuevo, la clase de pintura. Veo en una esquina a Youngjae. Voltea a verme y me sonríe. Yo corresponde.
-hola- dijo
-hola. ¿Qué tenemos que hacer hoy?-le pregunte.
-dice que tenemos que representar algún sueño que hayamos tenido. Curioso ¿no?- me dijo, yo asentí.
-cierto, pero casi no recuerdo lo que he soñado estos días- dije mientras me marchaba a mi lugar.
-entonces dibuja algo que quisieras- me sugirió Youngjae, voltee a verlo pero él estaba mirando su lienzo que comenzaba a profanar con delgadas líneas. Sé que dibujara algo interesante.
Voy a mi lugar y me quedo contemplando la pureza de mi lienzo. Estaba totalmente en blanco. No tenía nada.
Paso la hora y yo no hice ni un puntito.
-¿puedo ver tu pintura?- pregunto Youngjae y asentí riendo. -¡joder! Eres el mismísimo Leonardo Da Vinci.- comenzamos a reír -¿Por qué no pintaste nada?- pregunto.
-no estoy de humor.- dije encogiéndome de hombros.
-ya lo note…¿Qué aras después de esto?- dijo juguetón.
-tengo que ir a un restaurante. Me gustaría compartir tiempo con ustedes pero trabajo es trabajo.- bajo su mirada, pero luego la volvió a subir.
-¿crees que pueda ir a verte?- me pregunto entusiasmado.
-pues sí, pero mi presentación durara 3 horas y media. Comienza a las 5:30pm-junto sus labios haciendo una línea recta.
-le diré a Daehyun, cenaremos y te escucharemos al menos una hora- me dijo. Yo me entusiasme.
Pasaron las siguientes clases y cuando volvió a tocar la hora de piano, me encontré con Youngjae.
Me acompaño hasta el salón y me senté en un teclado.
-oye. Deberías practicar en el grande. Así estarás mejor preparado para esta tarde- le sonreí, tenía razón.
Toque casi todas las canciones que sabía de memoria. Las otras las tocare mientras leía partituras.
Después de todas las clases fui a comer algo con Youngjae y volví a casa. Tenía una hora y media para prepararme. Así que me puse traje y me peine lo mejor que pude.
La hora había llegado y yo ya me encontraba en el restaurante. Antes de subir y tocar el piano, eche un vistazo a los comensales de aquel lugar. Vi cuando entraron Daehyun y Youngjae. Él me miro y me saludo. Hice lo mismo. Hiso los pulgares arriba, al parecer me veían bien.
Comencé a tocar el piano. No veía a las personas pues estaba concentrado en lo mío. Después de tocar las canciones que sabía, era hora de tocar con partituras y mientras las preparaba pude ver al público, habían pasado dos horas y Youngjae se estaba marchando. Le sonreí e inmediatamente volví a lo mío.
Toque, con mucho esmero por cierto y las canciones me recordaban a mi vida, me preguntaba por qué el amor no había llegado aún a mi vida. Parecía ser infeliz pero solo no ha llegado la persona indicada a mí.
Me pregunto cómo sabré que llego. Youngjae dice que no podía dejar de pensar en Daehyun. Sentía cosquilleos y soñaba repetidas veces con él. ¿Qué se sentirá estar enamorado?
Cuando termine mi presentación, me levante. Unas personas aplaudieron. Hice reverencia y me retire.
-gracias, Youngjae. Fue muy hermoso- me agradeció el mismo señor que me había llamado.-
-gracias a usted por darme esta oportunidad- hice una reverencia.
Después de recibir mi paga justa me dirigí a la salida. No quería perturbar a los clientes así que Salí por una puerta trasera. Abrí la puerta y casi choco de frente con alguien.
-¡lo siento! no sabía que alguien entraría…-vi mejor y era un chico, muy…lindo, tenía las facciones más perfectas que nunca había visto en mi vida y él me miraba con intensidad, como si me estuviera contemplando o algo así.
-n-no te preocupes…-lo mire unos segundos después y él hiso lo mismo. Hasta que alguien nos interrumpió.
-¡ya era hora! Es tu turno.- dijo el mismo señor que me había llamado.
-lo siento, tuve un par de problemas pero ya los solucioné-respondió y se fue corriendo.
-valla. Al menos tú llegaste a tiempo- me dijo y yo asentí.
-disculpe. ¿Él que es lo que…?-
-¿hace?- asentí –el canta, bastante bien, pero tampoco para que lo haga en una ópera- dijo riendo.
-¿usa pistas?- le pregunte.
-algunas veces, otras vienen músicos y todo es en vivo, su voz es la indicada para este lugar y hasta hacen dúos- dijo.
-¿podría…verlo?-le pregunto tímido.
-¡claro!- me tomo del hombro y fuimos a un lado del escenario, donde no podrían vernos gracias al telón.
Arriba estaba una chica y él…ese tipo tan…es muy difícil definirlo.
Comenzaron a cantar y su voz era hermosa, tanto de la chica como la de él. Aunque Ella era la que hacia las notas altas. Él se veía tan atractivo. La escasa luz blanca que lo iluminaba lo hacía verse como el ser más perfecto. ¿Quién será este chico?
-----en la noche siguiente----
-Jae…tengo miedo…- dije nervioso.
-¿Por qué?-
-porque…creo que me estoy volviendo loco-
-¿crees?-
-si….- me revolví el pelo.
-¿Por qué piensas eso?- me pregunto
-anoche…Soñé con un chico, un chico que solo vi una vez- suspire.
-un chico…¿sabes quién es?- negué con la cabeza.
-cuando lo vi, me sentí muy extraño y tenía miedo de preguntar su nombre.
-miedo o…nervios..-lo mire
-no…no estoy seguro…-bebí de mi café capuchino.
-¿volverás a verlo?-
-creo que si…-
-pues pregúntale su nombre.-casi me atraganto con el café.
-¡no!...-me miro sorprendido.
-pero ¿Por qué no? Si no lo haces no lo sacaras de tu mente- analizo.
-puede que pase lo contrario. Tengo que dejarlo atrás.- dije
-¿crees que es así de fácil?- lo mire confundido –ya se lo que sientes. No dejaras de pensar en él y te desesperaras. No tendrás otra alternativa más que conocerlo. Si me haces caso te ahorraras tiempo, sufrimientos y hasta deseos..- me quede analizando, ¿Cómo podía saber que pasaría todo eso?
-¿Cómo puedes estar tan seguro?- le pregunte acercándome a él. Me sonrió
-porque así me sentí cuando vi por primera vez a Daehyun…-
Recordé nuestra plática de la mañana mientras estaba en la ducha. No podía ser cierto. Tal vez conocía a ese chico en mi niñez y por eso me intereso tanto. No puedo enamorarme de alguien a simple vista y tener una conversación tan seca y sin sentido.
Me relajo bajo el agua caliente. Mañana no iré a las clases de artes. Quiero tomarme un día libre para despejar mi cabeza de todo lo que paso esa noche.
Escuche mi celular sonar, pero al estar en la ducha no me moleste en responder. Si era otra cita del restaurante llamarían a mi casa y dejaran mensaje. Pero era mi celular y casi nadie me llamaba de ahí.
Cuando Salí del baño, me vestí con mi pijama y seque mi cabello. Tome mi celular mientras estaba boca abajo en mi cama. vi el registro de llamadas “número desconocido”…debieron estar equivocados. Lo deje a un lado y me dispuse a ver la televisión bajo las suaves y cálidas mantas, intentando olvidarme de lo que me había dicho Jae.
Pero volvió a sonar mi celular y tuve que contestar.
-¿hola?-
-¿Youngjae?- escuche del otro lado
-si, ¿Quién habla?-
-soy Himchan, el amigo de Mark. Quería ver si este era en verdad tu número, BamBam me lo dio pero a veces me hace bromas pesadas-
-¿todos tienen mi numero?-pregunte asombrado.
-si, Mark se lo paso a Jackson y él a los demás…-
-no me lo esperaba- juguetee con el control en mi mano izquierda. No sabía de qué hablar.
-si…oye, ¿Qué te parece si hacemos otra fiesta? Pero en mi casa porque en la disco hay muchas personas.-se escuchó alegre.
-claro-dije sin pensar
-bien, invita a tu amigo. El que se llama casi igual que tú. Y dale las gracias por mi parte-
-¿gracias por qué?- le pregunte.
-¿recuerdas al chico que le tuve que pedir su número? Pues ya hablamos y resulta que le agrado, acabo de regresar de una cita con él y me gustaría hacer la fiesta para que se acople a todos.-explico. Fue algo absurda la manera en la que se conocieron.
-de acuerdo jaja…bien, entonces lo invitare. Pero hay un problema, no sé dónde vives.- dije nervioso
-no te preocupes, entonces lo aremos en la casa de Mark, tiene una piscina- la recordé y me hiso algo de gracia.
-bueno, ¿a qué hora?-le pregunte
-a las tres de la tarde estará bien, convencer a Mark es “pan comido”- aseguro.
-está bien, entonces te veré mañana en la casa de Mark- dije
-descansa. Adiós- colgó el celular y yo solo lo deje caer alado de mí.
Apague el televisor y bostecé. Me acomode en la cama y me dispuse a dormir, pero al cerrar los ojos. La mirada de ese chico me atormentaba. Tan oscuros y atractivos. Su perfil perfecto, la manera de hablar y cantar me tenía me extasiaba.
Abrí los ojos, bufando por mis recuerdos insistentes ligados a un chico que solo vi una vez. Con la impotencia a tope. Encendí de nuevo la televisión para ver algo que me impacte. Que no deje de pensar en ello y haga a un lado a ese chico.
Y así encontré una película, llamada “interestelar” una grandiosa película que el mas mínimo detalle contaba. Así como lo planee, esa película fue suficiente para dejarme pensando en ella.
Me recosté y cerré los ojos que solo vieron oscuridad esta vez.
Termine de tocar el piano, me levante y todos aplaudieron. Hice una reverencia y me retire. Salí por la puerta trasera para no perturbar a los comensales y al abrirla, me encontré con un chico. Él me miro y se acercó a mí, comenzó a besarme y acariciarme el pelo, aumento de intensidad y caímos en una cama desconocida para mí. Él frotaba todo su cuerpo contra el mío, y comencé a sentir como mi miembro despertaba, él bajo sus manos por mi abdomen y cuando estuvo a punto de llegar a mi entrepierna, me desperté gracias a mi alarma matutina.
-ohh~ cielos…-dije al apagar la alarma y ver las sabanas, un bulto llamativo se encontraba ahí abajo.
-no…no..¡no!-me cubrí el rostro, -no puede pasar…¡no tiene que pasar!-me quedo quieto por un momento y descubro mi rostro. –una…una ducha…-me levante y fui directo a la ducha mientras dejaba un camino de ropa hasta el baño.
Abrí el agua fría y casi una tercera parte del agua caliente. Mire abajo, poco a poco me calmaba pero recordé de nuevo mi sueño. ¿Qué diablos ha pasado por mi cabeza?
En el desayuno intento olvidarlo, pero no le encontraba explicación a ese sueño tan íntimo.
Lo dejo a un lado y tomo mi celular, que idiota fui al no avisarle a Yoo sobre la fiesta desde anoche. Suerte que desde ayer le pedí su número, antes de que habláramos de mi sueño.
-hola, Jae- escucho en la otra línea.
-¡hola! Oye, lamento no haberte avisado desde ayer, los chicos aran una fiesta pero en la casa de Mark, te puedo llevar si quieres.- le dije mordiendo mi labio inferior. Mark me había contagiado esa manía.
-no te preocupes, y lamento rechazarlo, pero iremos a Seúl Daehyun y yo para celebrar nuestro aniversario, hoy justamente cumplimos 2 años de noviazgo- lo escuche feliz
-pues felicitaciones, me alegro por ustedes. Entonces yo les avisare a los demás. Disfruten su día- dije
-gracias, te dejo, ya es hora de marcharnos. Ustedes disfruten su fiesta- colgó el teléfono y suspire, me gustaría poder estar así de feliz como ellos dos. Claro que todo a su tiempo.
Vi mi alrededor. Era hora de hacer limpieza en mi casa y mientras lo hacía, escuchaba algo de música para relajarme. Al terminar, era la 1:00pm. Así que tengo mucho tiempo de buscar algo para ponerme hoy.
Me pruebo todo del closet. No es que no me decidiera, sino que también tenía tiempo que matar.
Termine vistiendo una sudadera roja, pantalón negro y tenis rojos, no los solía usar así que tal vez podría ser buena idea usarlos hoy.
Vi mi pelo, juguetee con él, haciéndome peinados divertidos pero vi mi reloj. ¡2:55pm! Joder, el tiempo pasa sin que te des cuenta.
Tomo el cepillo y lo peino adecuadamente. Tomo mi celular, llaves y mi cartera. Salgo caminando rápido, la casa de Mark estaba a pocos minutos. En el trayecto, recuerdo la fiesta en la que conocí a todos. Fue divertido aunque casi no recuerdo algunas cosas. Intento recordar el nombre de todos. Jackson, BamBam, Himchan, Gyeom…¿Cómo se llamaba el otro? Él no había venido… ¿estará hoy presente?...creo que su nombre era Jae…Jae Bum o algo así.
Llego a su casa. Escucho música desde afuera. Pero al tocar la puerta abre Mark.
-¡hola! Jae- me saludo –entra-
-¿Dónde están todos?- le pregunte al ver la sala vacía.
-BamBam, Himchan y JB fueron a hacer las compras, Jackson y Gyeom están arriba, buscando algo de música. Himchan me dijo que traerías a Yoo- dijo viendo fuera para ver si lo encontraba.
-no pudo venir, hoy cumple dos años de noviazgo con Daehyun y fueron a Seúl- dije y él asintió.
-valla~ dos años, uuff eso es bastante-
-si…¿JB?..-dije y él me miro.
-ohh si, aun no lo conoces. De hecho, llegas un poco tarde, ellos se fueron hace unos 5 minutos y tal vez tarden un poco.-dijo mirando su reloj.
-bueno, no tengo prisa- dije sentándome en el sofá.
-¡hola, Jae!- escuche y me gire, era Gyeom que bajaba las escaleras.
-¡hola, Gyeom!-
-me da gusto verte por aquí- dijo Jackson que bajo después de Gyeom.
-no me perdería otra fiesta con ustedes- dije y sonrieron.
-Mark, ¿tienes algo de beber? Me muero de sed- dijo Jackson acercándose a él. Gyeom en cambio vino hacia mí.
-si, en la cocina tengo algo…-se marcharon a la cocina.
-¿quieres jugar videojuegos?- me pregunto Gyeom con un tierno brillo en sus ojos.
-¡claro!- acepté. Encendió el televisor. Conecto el mando y coloco un juego de peleas, no entendí el nombre pero se veía interesante.
-¿Qué tengo que hacer?-pregunte en cuanto me dio un mando.
-elije un jugador, el que quieras- vi el juego, tenía un fondo oscuro, parecía ser algo sangriento para mi gusto. Elegí un tipo que parecía haber salido del psiquiátrico, su mejor habilidad era ser rápido, aparte de tener varias armas blancas tenía un peinado similar al de Einstein.
Gyeom en cambio escogió a un carnicero, dijo que ambos tendríamos que combatir con cuchillos, navajas, hasta cierra eléctrica, ese gordo carnicero se veía terrorífico, su mejor habilidad era que tenía bastante fuerza pero al ser corpulento lo compensaba con su facilidad por cortar carne…no sé si me guste este juego.
-al comenzar la partida, hiso aparición mi jugador primero, que tenía una camisa de fuerza y se libera con uno de sus navajas. El carnicero toma un cerdo y lo parte en la mitad. Gire la vista, no soporte ver eso.
-¿estás bien? No te preocupes, lo demás no es tan…exagerado, claro, a no ser de que lo ocasiones…-dijo. Pauso el juego.
-¿quieren algo de beber?-pregunto Mark.
-si, por favor, algo fuerte para mí- dije
-tranquilo, aun no empieza la fiesta jaja- dijo y me extendió una copa.-no bebas tan rápido, un trago solamente porque yo también me traume con ese juego- me dijo y tome una pequeña cantidad, suficiente para aclararme la garganta.
-estoy listo- dije y puso “play” al juego. Fue divertido…sangriento, sanguinario y repulsivo, pero divertido.
Jackson me apoyaba y Mark a Gyeom. Entre partidas, risas y pequeños tragos a la misma copa, el tiempo se fue volando. Así que se escuchó el timbre.
-yo no- dijimos al unísono Jackson, Gyeom y yo.
-de acuerdo, yo iré. Pero pausen el juego, que quiero ver como gana Gyeom esta vez.- dijo Mark
-admito que para ser un novato eres muy bueno- me palmeo Gyeom.
-amigo, me acabas de hacer perder varias apuestas. Pierde esta partida y dividiremos la plata- reímos por lo que dijo Jackson. Gire a ver las personas que llegaron. Entre ellos, el chico que….oh no…
-Gyeom… ¿es probable que los juegos violentos y el alcohol me hagan alucinar?- pregunte parpadeando varias veces.
-tal vez. Si ambos son en exorbitantes cantidades, si es así, sería normal que alucines- dijo sonriéndome. Joder. Él era el chico que aparecía cada vez que parpadeaba, cuando pensaba era en él, el mismo que vi en el restaurante, el mismo de mi…de mi sueño…
-¡ya era hora! me muero de hambre- dijo Gyeom
-si tú te mueres, ¡yo me pudro de hambre!- dijo BamBam. Pero no les preste atención, no dejaba de ver ese chico que iba a la cocina con unas bolsas….¡¿no era un sueño?!
-dejen de pelear. ¡Hola, Jae! ¿y tu amigo?-pregunto himchan.
-“de luna de miel” jaja- dijo Mark –cumple dos años con su novio-
-¡qué bien! Hubieran venido y esta fiesta seria en su honor- dijo –Jae, todavía tenemos que presentarte a JB….¿dónde está?- preguntó.
-fue a la cocina- dijo BamBam mientras comía de unas frituras.
-ehh dame un poco- dijo Gyeom levantándose y yendo directo a BamBam
-¡quita! Son mías-
-no por mucho tiempo- comenzaron a batallar por las frituras. Yo casi giraba mi cabeza como los búhos para ver la cocina.
-¡Jae Bum! Ven, saluda a Youngjae- dijo alto Himchan. Yo miraba atento a la cocina.
-¡en un segundo!...- joder…joder…¡que quiero verlo ya!
-bah, ese chico no tiene cura- Himchan se dirigía a la cocina pero su celular sonó, lo respondió y después de una corta conversación, colgó. –me iré por JongUp, ustedes dejen de pelear. Mark, ayuda a JB. Jackson, prepara las bebidas y Youngjae….ayuda a Jackson. Regresare en 10 minutos- cerro la puerta y todos nos quedamos en silencio.
-vaya~…- suspire
-Jae. Ven conmigo- me dijo Jackson.
-¿puedo cambiar de lugar con Mark? Me gustaría conocer a JB- dije preocupado a que lo negaran.
-no hay problema- dijo Mark.
-cuando terminen, tu y yo jugaremos una nueva partida. BamBam quiere la revancha- dijo Gyeom, no tuve ningún problema con eso.
-bien, te destrozare después. Pequeño-dije y se rio. Luego reiniciaron la partida y jugaron los dos. Sonreí. De todos modos estaba perdiendo.
-bien, JB sique en la cocina, estaremos en el comedor preparando las bebidas- dijo Mark
Asentí y fui a la cocina. Mi corazón palpitaba muy rápido. ¿lo veré de nuevo? Mis pasos eran lentos. ruidos peculiares se escucharon a unos metros de mí. Coloque mi mano en la puerta, la empuje lentamente y antes de asomarme di un gran suspiro. Sin querer vino hacia mi esa imagen de mi sueño. Me regañe mentalmente y entre a la cocina con mucho valor.
-¡woah!...me asustaste…- dijo. Cuando se fijó mejor en mí, nos quedamos viendo mutuamente.
-lo…lo siento…- fue lo único que pude decir.
-descuida…tu….¿tú eres Youngjae?- pregunto sorprendido. Asentí tímidamente.
-tú debes ser Jae Bum- parpadeo un par de veces.
-¡sí!...así que…también trabajas en el restaurante…- se vio nervioso.
-si, toco el piano. Te vi cantar y lo haces bien…-le dije mientras jugueteaba con mis manos, me derretía el solo verlo a los ojos.
-no se me da mucho cantar. Soy mejor bailando y actuando.-
-¡¿te gusta actuar?!. Cielos, yo también amo actuar- dije impresionado
-¡si! He actuado en varias obras y he asistido a castings para películas- dijo
-es genial, también he actuado en obras, pero no he ido a castings, siento que aún me falta un poco- dije y él se acercó. Sin quererlo, me puse nervioso.
-a mí no me han aceptado aun, jaja… ¿estás bien? Te vez pálido…- dijo preocupado.
-s-si…por cierto, dijo himchan que…que te ayudara…- miro la cocina.
-quería preparar algún guiso. Pero compraron hamburguesas, así que puedes ayudarme a picar lechuga y los jitomates. Pero la carne yo la cocino- me sonrió. Algo se veía raro en él.
Mientras cocinaba vi como sus manos temblaron y lo traicionaron varias veces. pero su expresión se veía impía, aunque de vez en cuando nerviosa
No mantuvimos una conversación fija. Pero cada cosa que me contaba me parecía fascinante e interesante.
Cuando terminamos, himchan nos presentó formalmente a JongUp y Jackson se disculpó con él por robarle su copa.
La diversión era más que evidente en el lugar, aunque yo fui el que se mantuvo más callado, incluso Mark hablo más que yo, considerando que él es alguien serio en varias ocasiones. Yo solo miraba a JB y él al notar mi insistente mirada, se ponía cada vez más y más nervioso. Llegando a esquivar mis miradas.
Cuando la noche llego, unos se habían quedado dormidos a pesar del ruido, Gyeom, BamBam y Jackson. Después de todo. Eran las 3:45 am.
-himchan, desde que te acercaste a mí, me gustaste mucho- dijo JongUp, un chico agradable y sonriente. Admito que todos estábamos muy ebrios.
-ohh mi jonguppie…te amo…- dijo Himchan casi cayendo.
-¿Qué diablos esperan? Si tanto se aman, dense un beso, joder- dije sin pensar siquiera. Ellos se acercaron “románticamente” y se dieron un torpe beso, los tres aplaudimos.
-¡bravo! Es lo más romántico que he visto en toda mi vida- dijo lagrimeando Mark.
-jah, es más romántica la película del exorcista- dijo JB
-si te crees tan experto, ¡anda! demuestra lo que es ser romántico- dijo molesto Himchan.
-ya verás- dijo JB, y bajo mi atenta mirada. Se levantó y casi cae, pero recupero el equilibrio y sorprendentemente camino hasta mí. –Youngjae…desde que te vi por primera vez, no pude dejar de pensar en ti, cada vez que cerraba los ojos te veía, cada vez que veía una película de amor nos veía a nosotros dos. Porque con solo verte una vez, supe que te amaba. Sé que no ha pasado mucho tiempo desde la única vez que nos vimos, pero contaba cada segundo eterno que pasaba y fue un atormento…un dulce atormento.-me quede inmóvil, entendiendo perfectamente cada palabra.
-ahh…Romeo no es tan genial como pensé- dijo JongUp y vi como se había sonrojado JB.
-calla, que aún no debe terminar- dijo Himchan abrazando a JongUp.
JB aclaro su garganta antes de hablar.-nunca pensé que amaría a un hombre, pero tu llegaste y acabaste con mi pensamiento de golpe. No había sentido esto tan fuerte como lo que siento ahora. Por eso sé que tú eres el indicado, eres demasiado perfecto para mí, y espero que me des una oportunidad…-
-joder, ¿que se le ha declarado de verdad o estará actuando?- dijo Mark y la verdad es que yo también me preguntaba eso
-no tienes que decir nada, solo tienes que…que besarme- estaba totalmente perdido en su sobria mirada, algo me decía que esas palabras en verdad habían salido de él. Pero en cambio, lo que me había dicho Jae que cuando encontrara mi primer amor me sería muy difícil dejarlo si no es el indicado.
Me acerque lentamente a él como él a mí. Nuestros alientos chocaron y los labios se rosaron. Cerré los ojos y me deje llevar, por mi primer beso… Algo que anhelaba desde hace tanto tiempo. Era perfecto, sus suaves labios tan reconfortantes y cálidos, se movían con delicadeza, como era mi primer beso no sabía cómo responder correctamente.
Cuando sentía que el aire me faltaba, él se alejó despacio de mí. Abrí mis ojos y voltee a ver a los demás, que se quedaron literalmente boquiabiertos, hasta salidos de la embriagues. Sentí mis mejillas arder y la confusión me comenzó a carcomer. Voltee a ver a JB y me miraba con los ojos abiertos y asustados.
Me levante de la silla.
-tengo que…tengo que irme- camine hasta la puerta con paso rápido y se azotó en el marco por descuido mío.
Aun estando mareado y alcoholizado estaba consciente de lo que paso, lo bueno era que mi casa estaba a un par de cuadras pero el frio era terrible.
Mi paso, antes rápido y firme, ahora se veía vencido por el frio y mi desorientación, escuche pasos detrás de mí. Abrí los ojos asustado y comencé a correr.
-¡espera!- escuche detrás de mí, pero al estar en este estado me fue muy fácil caer al suelo.
-¡déjame!-dije asustado.
-Youngjae, lamento haberte echo eso- escuche la voz de JB, me sonroje. Estaba muy apenado con él.
-¿podemos hablar de esto otro día?-dije levantándome poco a poco. El piso seguía moviéndose y volví a caer al suelo apenas cuando me puse de pie.
-déjame ayudarte-me dijo y me tomo por el brazo, pero él estaba tan ebrio como yo y cayo junto conmigo, quedando entre mis piernas. Contuve la respiración por un momento y solo pude sentir su cuerpo sobre el mío entre mis piernas.
-joder-dije y lo quite de encima mío, no quería tener lo mismo que tuve en la mañana, no quiero que vea eso.
-l-lo siento de nuevo- nos levantamos con mucho cuidado, vi como sus manos temblaban y su rostro se veía muy nervioso.
-por favor, no es mejor momento para hablar de esto, tal vez en la tarde- dije mientras intentaba caminar, alejándome poco a poco de él.
-no sé dónde estoy- me dijo y bajo la cabeza.
-….mi hogar esta muy cerca y volver sería un peor lio, puedes dormir en mi casa- dije y no me moleste en mirarlo, tenía miedo, miedo a enamorarme.
-¡gracias! en verdad te agradezco.- dijo caminando detrás de mí. En el trayecto imaginaba donde dormiría cada uno, tenía un cuarto de huéspedes pero al no tener ninguna visita por dos días lo utilice para tener varias cosas, como un teclado, lienzos para pintar, adornos para días festivos (en realidad no sé por qué compre esas cosas) y otras cosas más que casi no utilizaba.
Llegamos y abrí la puerta con mucha dificultad, el picaporte se movía y no me dejaba introducir la llave, hasta que entre siendo seguido por JB.
-qué bonita casa tienes- me dijo.
-la acabo de limpiar, llegaste en buen momento- reí tenuemente.
-no tengo pijama…- voltee a verlo, tenía la cabeza agachada.
-te prestare alguna- lo guie hasta mi habitación y le di una pijama adicional que tenía. –Te dejare solo para que…te cambies- se había quitado la camisa, tenia…el abdomen bien definido. Agache la cabeza, totalmente sonrojado.
-lo…lo sie…-
-no te preocupes- Sali de la habitación interrumpiéndolo. Me sente en el sofá, era para una sola persona y sería imposible dormir ahí…mi cama era grande…oh dios.
Escuche como abría la puerta. Cuando salió aproveche para meterme de inmediato y cambiarme también, y cuando estuve listo abrí la puerta.
-entra.- le dije y él me miro sorprendido, yo no podía mirarlo, lo que había sucedido hace unos minutos…me había dicho que me amaba y me…me beso…
-¿dormiremos juntos?-dijo emocionado, yo lo mire serio y asentí. Bajo de nuevo la cabeza. Tal vez avergonzado por su comportamiento.
Alcé las cobijas y me recosté, él hiso lo mismo desde el otro extremo. Apague la luz y ahora la oscuridad era lo único que se podía apreciar.
Intente dormir, pero no podía, hace mucho tiempo que no dormía con alguien. Mire mi reloj digital. 4:18am. La cabeza comenzaba a dolerme y deseaba dormir más que nada, pero no podía. Daba vuelta tras vuelta, intentando no incomodar a JB y desesperado por que no era la posición lo que me incomodaba sino con quien me encontraba.
Arto, me levante de la cama con cuidado y fui hasta la puerta, intentando abrirla con cautela.
-¿Qué sucede?-escuche la preocupada voz de JB desde mi cama.
-no puedo dormir-
-… ¿te incomodo?..-pregunto melancólico.
-un poco…dormiré en la sala…- dije mientras salía de mi habitación.
-¡no! Si alguien tiene que dormir en otro lugar soy yo, esta es tu casa- dijo a la par de incorporarse.
-eres mi huésped y debo tratarte bien.- le dije, él se había acercado hasta a mí, quedamos de frente.
-Youngjae….-parecía querer decirme algo.
-dime-
-….descansa- suspire. Me tomo de los hombros y me tense rápidamente, pero me movió a un lado para pasar mejor y se fue a la sala.
-insisto, puedes dormir en mi cama…- le dije.
-no me conoces mucho, soy muy persistente pero aceptaria una manta-no sabía que hacer o que decirle, me sentía muy apenado, dormiría en un lugar incomodo por una especie de capricho mío.
Tome una manta de lana suavecita, una de mis favoritas. Fui hasta la sala y se la di.
-este lugar es más cómodo de lo que crees, si sabes acomodarte- me dijo, sonreí pero no le respondí, no sabía que decir.
Volvi a mi cama, ahora la incomodidad se convirtió en vergüenza, recordé a Youngjae y decidí enviarle un mensaje de texto para felicitarlo de nuevo.
~Felicidades Youngjae, espero que lo hayas pasado bien con Daehyun J~
Sonreí, recordé a él y a himchan, ambos se veían tan felices con su pareja, me pregunto que se sentirá…
Sentí mi celular vibrar y lo saque.
~gracias Choi…por cierto, ¿Qué haces despierto tan tarde?~ me sorprendí al recibir su respuesta tan rápido.
~ ¿Recuerdas al chico del que te hable? Resulta ser al amigo que no fue a la primera fiesta, y ahora está dormido a una habitación de mi~ dije sin rodeos.
~ ¡Qué bien! Es una excelente oportunidad para decirle lo que sientes~
~dijo que me amaba y me beso…~
~¿y qué ha pasado después? ¿Por qué esta en tu casa?~
~no le dije nada, regrese a casa y me siguió, no podía decirle “regresa como puedas” pero por culpa mía está durmiendo en mi pequeño sofá L~
~ ¿Por qué?~
~mejor dime tu. ¿Por qué estas despierto a estas horas?~
~Daehyun y yo estamos viendo una serie muy buena, pero no cambies la conversación ¿Por qué no le dices lo que sientes?~
~porque no sé lo que siento~
~ya no tengo mucho crédito, discútelo con él cuando puedas y dile ¡todo! Lo que me has dicho a mí. Te deseo mucha suerte~
~lo are, gracias, Yoo. Disfruta tu velada~
Deje mi celular a un lado, pensé de donde rayos podría reunir valor para decirle a JB todo lo que ha pasado por mi cabeza después de verlo, al parecer no fue muy diferente a lo que él paso cuando me vio, por lo que dijo. Pero ¿y si solo actuaba? Tal vez solo fue para demostrarle a Himchan lo romántico que podría ser y no porque le haya nacido de verdad.
Entre pensamientos sobre lo que podría ser y lo que no. Lo que pasaría y a lo que conllevaría. Sin notarlo, me fui durmiendo.
El sonido de la puerta abriéndose me despertó, abrí los ojos y la luz destellante del sol me cegó por instantes. Al recuperarme. Me senté en mi cama
-lamento haberte despertado- escuche
-deja de disculparte tanto… ¿Qué sucede?-
-busco mi ropa para irme- bostecé, la boca la tenía muy seca
-quédate a desayunar. Aunque salgas a la calle no sabrías ni cómo llegar a la casa de Mark- lo mire, tenía el pelo alborotado y se veía tan…lindo.
-no quisiera causarte más molestias-
-no son molestias, además, deberíamos…hablar-dije nervioso, sentía como la tensión comenzó a aparecer.
Me levante de mi cama y me dirigí a la cocina.
-¿Qué quisieras desayunar?-pregunte.
-algo simple estaría bien… ¿Qué tal cereal?- sonreí sin demostrárselo. Gire a verlo con una ceja alzada.
-de acuerdo…-sonreí y me devolvió el gesto, se notaba nervioso tanto como yo.
Serví un plato de cereal para cada uno, algo raro para mí pero no sabía si en realidad eso sería adecuado para comer con una visita ya que no tengo mucha experiencia. Comimos en silencio, muy incómodo, no sabía ni como decírselo. Hasta que terminamos.
-te ayudare a lavarlos- se levantó y retiro los platos, apoye mi cabeza en las manos, intentando hacer que las palabras salieran de mi boca pero simplemente no podía, era jodidamente difícil.
Me levante y me dirigí hacia él.
-tenemos que…hablar sobre anoche-dije con una voz muy apagada pero audible. Quería verme seguro y serio a la vez.
-bueno yo…dije lo que tenía que decir anoche…- lo mire, pero él estaba de espaldas a mí.
-¿a qué te refieres?- le pregunte.
-quiero decir que…lo que escuchaste anoche fue por algo…-
-¿lo dijiste para demostrarle a Himchan lo romántico que podías ser?- dije asustado por que la respuesta fuera un “si”
-puedo ser actor pero….no improviso tan bien…- la respuesta me la dio clara, pero no lo suficiente. Necesitaba oírlo decir que lo que dijo salió totalmente de su corazón y no de sus ideas.
-si quieres decírmelo….se más claro…- termino de lavar los platos y se secó las manos. Apoyo sus manos en el fregadero y suspiro pesadamente.
-Youngjae…me gustas. No se cómo ni por qué, pero…tú has logrado enamorarme como ninguna otra persona que haya conocido. Lamento si te hago sentir incomodo o no te agrado nada el que te haya robado un beso…pero necesito preguntarte algo….- me quede en silencio, escuchando cada una de sus palabras que me hacían tener unas emociones tan fuertes.
Giro a verme y me tomo de los hombros, acercándose más a mí dejándome oler su exquisito aroma
-necesito que me digas si yo….te gusto…- respiraba agitado. No sabía cómo contestarle exactamente.
-no…no lo sé…. He tenido emociones tan extrañas y desde que te vi, sentí exactamente lo mismo que tu…- su rostro se ilumino, totalmente emocionado –pero no sé qué es esto, como se llama y como se vive- le dije. Ahora me miraba confundido.
-entonces… ¿no has tenido otra pareja?- negué con la cabeza.- ¿nunca te has enamorado o besado a otra persona?- negué
-de hecho, el beso que me diste fue…mi primer beso…- agache mi cabeza. Me daba cierta vergüenza confesarle eso.
-ya veo…pero si dices que has sentido lo mismo que yo…entonces quiere decir que te gusto…por favor, dame una oportunidad de demostrarte lo mucho que te amo…- me tomo de la barbilla y alzó mi rostro. Cerré los ojos, no para besarlo, sino para forzar a mi mente a darme una rápida respuesta.
-no estoy muy seguro…no sé si sea bueno- de nuevo, las palabras de Youngjae me llegaron a la mente.
-¿Por qué?- pregunto desesperado.
-¡porque tengo miedo amar!...- lo solté de golpe. –tengo miedo a que me lastimes o…o me hagas a un lado de un día a otro, cuando este perdido por ti…- mis ojos se llenaron de lágrimas y quite su mano de mi barbilla para cubrir mi rostro.
Paso sus brazos por mi cintura. Atrayéndome a él mismo para darme un cálido y reconfortante abrazo.
-Youngjae…yo no me alegaría de ti si no me lo pidieras…- su respiración choco con mi cuello, provocándome cosquillas. Y tuve que quitarme -¿Qué sucede?...-me miro extrañado. Me toque el cuello, no solo me había dado cosquillas, sentí algo extraño que me golpeaba el pecho.
-yo…tal vez pueda…darte una oportunidad…- me miro y sus ojos brillaron con gran esplendor. Me recordó a la primera vez que lo vi y algo me decía que estaba haciendo lo correcto.
-no te vas a arrepentir.- se acercó de nuevo pero para darme un beso. Cerró los ojos para disfrutarlo pero yo me asuste. Cuando se separó de mi le sonreí.
-¿podemos ir más lento?- sonrió y asintió cariñosamente. Me acaricio el pelo y me beso la frente.
~un año después~
-Yoo… ¿Dónde está Daehyun? Ayer cumplieron tres años. ¿Me equivoco?- le dije mientras estiraba mis brazos.
-sí. Dice que me dará una gran sorpresa, creo que saldremos del país porque dijo que hiciera maletas- le sonreí.
-apuesto que será genial-
-apuesto que si… y tú. ¿No cumplías un año con JB?- sonreí aún más.
-sip. Pasará por mí en cualquier momento, mientras, sigo practicando.- volví a acomodarme mejor. Esta vez, si estaba en el piano de cola y Yoo pintaba en un lienzo de mediano tamaño, estaba frente a una ventana de ese lugar, pintando el paisaje que este le brindaba.
Unos minutos después, escuche como se abría la puerta. Sonreí pero no deje de tocar. Sentí como alguien tocaba mis hombros y su aliento chocaba en mi cuello. Él sabía muy bien lo que provocaba con eso y lo hacía a propósito.
-tocas tan hermoso- cuando hablo. Se aseguró de hacerlo en mi cuello, no aguante y tuve que voltearme para dejar de sentir esas cosquillas.
-hola, cariño- le di un suave beso en los labios.
-es hora de irnos. Te tengo un par de sorpresas y tenemos que llegar a tiempo.- me levante y mientras me colocaba mi suéter él fue a ver lo que pintaba Yoo.
-hola, Yoo. ¿Qué pintas?- le dijo con confianza.
-lo que ven mis ojos a través de esa ventana- sonrió.
-pero…ese árbol es un poco más delgado. ¿No crees?- le dijo mi novio
-decir al pintor que la naturaleza debe ser tomada como es, es como decir al pianista que puede sentarse sobre el piano-le dije
-¿de dónde sacaste esa frase?- pregunto.
-James Whistler. Esa es una de mis frases favoritas suyas- dijo Yoo mientras me sonreía.
-espero no olvidarlo.- dijo JB mientras me tomaba por la cintura y me daba un beso en la mejilla.
-nos vamos ya, Yoo. Espero que tengas suerte en tu cita- le dije.
-igual a ustedes…Choi… ¿te puedo decir algo en privado?- asentí. Mire a JB, quien me beso en los labios y salió.
-¿Qué sucede?- se puso de pie y me miro de frente, solía hacer eso cuando decía algo serio.
-escucha…sé que él es tu primera pareja, y no han llegado a más de besos ligeramente apasionados.- me sonroje, parecía que éramos muy obvios.
-vale, ya lo sé- sonrió.
-si sigues así, tal vez se queden estancados- me asuste. No quería quedarme estancado en mi primera relación.
-¿y qué debo hacer?-le pregunte alterado.
-tranquilo, ya sabes que hacer. Y sé que has pensado en hacer eso mucho tiempo, somos personas y eso es algo normal, créeme que eso ha llegado a salvar relaciones. La tuya no se ve en peligro pero eso ara que su confianza mutua crezca- me mordí el labio inferior. Y le di un gran abrazo a Yoo. Dándole a entender toda la gratitud que le daba y no podía expresar con palabras.
-de acuerdo. te veré después y muchas gracias, necesitaba un empujoncito-
Salí para alcanzar a JB que me esperaba en la entrada.
-¿A dónde iremos?-pregunte emocionado.
-es una sorpresa- subimos a su auto y él comenzó a conducir. El trayecto fue largo y en silencio pensaba cómo hacer para lograr…hacerlo.
-es aquí- dijo sonriendo y parando en un hotel.
-valla~ 5 estrellas….te luciste- dije maravillado por el espectacular vistazo que brindaba desde fuera.
-solo es el exterior. Dentro es mucho mejor- sonreímos y felices entramos. Fuimos hasta una gran habitación que había rentado. Era tan hermosa. Grande espaciosa y perfecta.
-gracias, JB. Es magnífico- le dije pero voltee detrás de mí y no estaba. -¿Jae bum?- pregunte. Luego él apareció saliendo de la cosina con unas fresas y una botella de champan.
-para ser nuestro primer año juntos, tiene que ser el mejor. ¿no crees?- camino hasta mi y le sonreí.
Bebimos y charlamos divertidos.
-oye. Por ahí hay una pequeña piscina. ¿Quieres divertirte?- me dijo.
-bueno. Si bienes conmigo- sonreímos, estaba algo mareado pero no sería peligroso ir a una piscina. Fuimos y era más hermosa. Luces azules la iluminaban y no era tan pequeña como pensé que sería.
-en verdad es maravilloso este lugar- dije sentí como JB me abrazo por detrás y cerré los ojos, sintiendo su calor.
-Jae…yo…aamm…quisiera nadar un rato. ¿Me acompañas?- me dijo, pensé que diría algo mas o tal vez lo iba a hacer pero para no incomodarme lo reprimió, le hubiera agradecido si lo hubiera dicho.
-no tengo traje de baño- le dije sonriendo.
-no hay nadie cerca- me sonroje. Tal vez sería algo rápido. –Quiero decir, en ropa interior estaría bien jaja- suspire y mire el suelo un rato. Tome valor y me quite la camisa y luego los pantalones.
-¡vamos! ¿No querías mojarte?- gracias al poco alcohol era más fácil ser valiente. JB me miro con los ojos muy abiertos y se sonrojo. Pero sonrió y también se quitó su camisa y pantalones.
-¿esta fría?- pregunto comencé a meter una pierna.
-esta perfecta- respondí. Tenía una temperatura agradable. Él me siguió y dejo espaciar un suspiro.
-genial~…- se dejó llevar y se metió hasta el cuello. Yo en cambio salte al agua y lo salpique.
-woh~ mejor que la duche- quite el exceso de agua en mi rostro y JB me miraba raro. -¿te molestaste?- le pregunte preocupado. Se acercó a mí y sin esperarlo, me salpico, quitándome el aliento.
-jaja caíste- comenzó a reírse de mí, fingí molestarme y también lo salpique, comenzamos a juguetear hasta que nos cansamos.
-este es un buen día. Gracias, amor- me acerqué y lo bese. Gracias a dicha cercanía pude sentir su piel desnuda y tibia bajo el agua. Lo tome del cuello y lo bese más intenso, era la primera vez que lo besaba así. Después de un rato, me separe de él pero nuestros cuerpos seguían juntos.
-Youngjae…yo… quisiera esperar hasta que te sientas…-
-estoy listo.-dije interrumpiéndolo. Lo mire a los ojos y brillaban gracias a las varias luces. –tenía miedo amar. Pero llegaste tú y me demostraste que el amor es algo maravilloso de vivir.- lo abrace. Apegando todo mi cuerpo a él –y quiero hacerlo contigo-. Volví a besarlo y me tomo de la cadera. Pegando nuestros miembros y a pesar de la temperatura tibia del agua nuestros cuerpos se calentaban.
-¿podríamos hacerlo en la cama? aquí es algo incómodo y frio- sonreí. Ambos salimos y tomamos unas toallas. Caminamos hasta la habitación y tire la toalla al suelo, junto con mi ropa interior. No podía verlo a los ojos, me sentía tan apenado y estaba arrepintiéndome. Hasta que JB hiso lo mismo que yo y se acercó a mí.
-eres hermoso…- eso me dio más confianza. Me tomo de la barbilla y comenzó a besarme. Me condujo hasta la cama y con cuidado nos dejamos caer sobre ella.
Sentí su pene rosarse con el mío excitándome poco a poco.
-aahh~…-deje salir un suspiro. Pero mordí mis labios al pensar que fue ridículo hacerlo.
-no te reprimas. Es normal- sus labios fueron a mi cuello, extrañamente no me dio cosquillas. En cambio, me daba placer. Seguí bajando y llego hasta mis pezones que comenzó a lamer.
-humg…Jae Bum…-gemí cuando sentí su mano tocar mi pierna, cerca de mi miembro. Continúo bajando, pasando por mi abdomen hasta llegar a mi pelvis.
-no…-volteo a verme asustado.
-¿hice algo que no te gusto?- pregunto.
-no es eso, pero…no creo que eso sea apto para este momento- me senté y lo mire de frente. Ya me sentía más confiado.
-¿no quisieras saber lo que se siente?- se sonrojo.
-tal vez…pero después, quisiera hacer el amor. No tener sexo- lo entendió perfectamente. Volví a besarme y ahora ambos estábamos completamente erectos.
-¿sabes que es…lo que tienes que hacer?- le pregunte bajito.
-si…te sentirás incómodo. Pero te prometo que lo disfrutaras.- llevo un dedo a su boca, y lo llevo a mi parte baja. No sabía lo que hacía hasta que comenzó a introducirlo.
-¡¿Qué haces?!- le pregunte asustado y alterado.
-calma… se tiene que hacer esto.
-¿se puede?- dije confundido.
-acaso no has visto…películas o… escuchado sobre esto- me pregunto. Negué –Youngjae. Eres tan puro y…perfecto.- comencé a incomodarme. Su dedo se movía dentro de mí. Pensé que debería sentir placer pero me sentía incómodo y me dolía ligeramente.
Después de un minuto sentí como otro dedo se adentraba.
-oohh~…-
-¿estás bien?- asentí. Sentí como mi erección bajaba y JB lo noto.
Llevo su otra mano a mi miembro y comenzó a masturbarme. Cerré los ojos y sentí como una lágrima caía. Suspiraba repetidas veces. Ahora si sentía puro placer hasta que sentí un tercer dedo.
-aahh~…umgh- acelero el ritmo y sentí pequeños espasmos en mi cuerpo. Sentía que me vendría. JB me miraba y se veía entusiasmado y acelerado
Antes de llegar al clímax. JB saco sus dedos y se puso entre mis piernas. Se inclinó para besarme. Yo jadeaba entre el beso y dejaba escapar ligeros gemiditos.
Sentí la punta comenzar a ser introducida. Me asuste y sin quererlo me puse tenso.
-relájate. No quiero lastimarte- suspire hondo y me relaje lo más que pude.
Comenzó a introducirse poco a poco. Lo tome por el cuello y me aferre a él. Sentí como todo su pene estaba ya dentro de mí. Mi piel se erizo y los nervios volvieron a mí.
-¿estás bien?- me pregunto. Asentí con la cabeza mientras tenía los ojos cerrados. –Estas temblando…-mire una de mis mano y definitivamente estaba temblando.
-lo siento…estoy nervioso…-sonreí tímidamente.
-pronto no lo estarás mas- comenzó a moverse. Dando pequeñas estocadas que me parecían la maravilla.
-ahh~…-gemí mas alto. Se sentía placentero de cierta forma. Saber que tenía a JB dentro de mí me hacía alucina.
-oh~…-escuche sus gemidos, me excitaban más de lo que pensaría. Su melodiosa voz chocaba casi en mi oído. Me gire para besarlo mientras me penetraba dulcemente.
-aahh…o dios~- abrí los ojos. Me miro sorprendido. Había dado en un punto donde me hiso ver las estrellas por unos segundos.
-¿te gusto?- me sonroje
-s-si…- sonrió y volvió a dar en el mismo punto.
-aahh~…JB eres magnifico~- vi cómo me sonrió. Otra lágrima recorrió mi mejilla y las corrientes eléctricas seguían viajando por mi cuerpo cada vez que daba en ese lugar.
Acelero el ritmo. Haciéndolo más intenso. Ambos gemíamos, escuchaba la cabecera golpear la pared por nuestros movimientos. De vez en cuando también se escuchaba el sonido de nuestra piel chocando.
-ahh…JB me…me vengo…ahh- no pude creer como es que acelero más el ritmo. Tomo mi miembro con una de sus manos y me masturbaba mientras seguía con ese rápido ritmo.
Primero sentí como un líquido me lleno y me sentí tan húmedo que las pocas estocadas más fueron suficientes para hacerme terminar, ensuciando mi abdomen y parte de la mano de JB.
Salió de mí y se recostó a mi lado. Ambos agitados nos miramos mutuamente.
-Jae Bum….- me acerqué a él. –Gracias por enseñarme el amor-le di un pequeño beso.
-pero a un precio- lo mire extrañado. –Youngjae, no me dejes- me abrazo. Haciéndome sentir su miedo.
-no lo are- correspondí a su abrazo y poco a poco el sueño nos venció.