Querido cuchillo: por Hemminwin

-Luke, Luke ¡LUKE YA BASTA!- Otra vez lo mismo, cada día la misma historia, quizás por suerte algún día podía estar tranquilo, sin tener que preocuparse de aquél pequeño rubio que siempre acababa tendido en sus brazos.
-Luke ya basta.. ya basta, tranquilo, estoy aquí ¿sí?- Gritos. Gritos. Más gritos. Agarró el cuchillo afilado que había entre los dedos del rubio, algunas gotas de sangre salían de un pequeño corte que había en su brazo, enseguida taponó la herida con uno de sus propios dedos y una vez más lo acurrucó entre sus brazos. Una vez más debía tranquilizar la histeria de Luke. Una vez más.. siempre había una vez más.
 
Lo agarró en brazos una vez se había tranquilizado, dejándolo caer, cuidadosamente de no despertarlo sobre la cama. Arrastró la silla que había en una de las esquinas hasta el borde de la cama, sentándose a su lado. Una venda, un poco de esparadrato y demasiado cuidado. Tapó la herida. No más sangre. De momento. Lo observó dormir, parecía tan tranquilo ''Ojalá siempre estuviera así..'' pensó. Deslizó la yema de los dedos a través del flequillo de Luke echándoselo hacia atrás. 
 
Era pleno invierno, probablemente la navidad estaba cerca, qué más daba, no eran fechas diferentes a las demás. Luke y él seguirían igual, probablemente ''O quizás peor.'' esperaba que no. Ashton decidió encender la chimenea, caldear un poco la casa, el ambiente. Puso algunos troncos y algunas maderillas sobre las brasas, probablemente ayudarían a los troncos a prender, quemó un trozo de papel con un mechero y tras unos segundos lo colocó entre las maderillas, las cuales poco a poco comenzar a prender. Se dejó caer en el sofá, bufando, pensando en el día en el que todo aquello acabaría, el día en el que por fin podría vivir tranquilo, sin estar preocupado veinticuatro horas al día, siete días a la semana ''Por favor, Dios, ayúdame..'' no creía en Dios, ni muchísimo menos, pero ¿Qué perdería por intentarlo?
 
-Ash.. Ash..- Apenas podía levantar la voz, a su alrededor todo oscuridad, excepto una luz, la pequeña y tenue luz de una vela al fondo de la habitación. Acostumbró la vista a aquella falta de claridad e intentó levantarse. Dolor. Un punzante dolor en el brazo. Llevó la mano contraria a donde se encontraba aquél bendaje si así se le podía llamar. Buscó a Ashton por todos lados pero no conseguía encontrarlo. ¿Donde estaba Ashton? Ashton siempre estaba. -Ash.. ¡ASH!- No podía.. no podía haberlo abandonado. No sin decir nada. Al instante pudo escuchar pasos correr hacia él. Ashton. Por fin, de nuevo a su lado. 
-Pensé que te habías ido..- El mayor se sentó a su lado en la cama, con una pequeña sonrisa, a decir verdad algo forzada, rodeando los hombros del menor con un brazo para pegarlo a su cuerpo.
-No pienses eso Luke, sabes que no podría abandonarte.- Mentiría si dijera que nunca había pensado hacerlo, al fin y al cabo ¿Por qué era él quien tenía que aguantarlo? Aquellos pensamientos duraban poco en su cabeza. Cómo iba a pensar algo así de la persona a la que amaba, aunque quisiera, su corazón no permitiría hacer sufrir a aquél pequeño ángel de ojos claros. 
 
El rubio apoyó la mejilla sobre su hombro, cerrando los ojos mientras suspiraba con profundidad.
-Quizás debiste dejarme morir aquél día, o todos los días que han venido después, quizás.. quizás no debiste enamorarte de mi.-
-Quizás.. pero lo hice, y no me arrepiento.- La voz de Ashton estaba algo quebrada, le dolía escuchar aquello, sabía que Luke merecía todo y más, a pesar de los gritos, de los cortes, las imaginaciones, las amenazas. No podía hacer nada contra su propio corazón.
 
*Flashback de Ashton: 6 años atrás.*
 
z98; Era un día soleado, a pesar de ello de vez en cuando algunas ráfagas de arie fresco chocaban contra sus rostros. Luke y Ashton estaban en el garaje de la casa de los padres de Luke, la puerta estaba abierta de par en par y el aire entraba sin permiso. Cada uno con una guitarra, una sonrisa dibujada en cada rostro, unos acordes al unísono y sus voces acompasadas.
 
''Don't stop doin' what you're doin' .
Every time you move to the beat it gets harder for me.
And you know it know it know it.
Don't stop 'cause you know that I like it.
Every time you walk in the room you got all eyes on you.
And you know it know it know it. ''
 
Siempre les había gustado la música, y soñaban con formar parte de algún grupo de rock que pasase a la historia. Como Green Day o quizás como Nirvana, cada día aspiraban más alto. Al terminar la canción la sonrisa de Luke deslumbró a Ashton. Por primera vez en toda su vida Ashton había sentido que el corazón no le latía y que su sangre no corría por donde debía.
 
-¿Ash?- Al escuchar su nombre salió de aquella nube en la que se había metido. Quizás en aquél momento no lo supo, pero se había enamorado de Luke y no era capaz de imaginarse hasta que punto.
 
Se conocían desde que nacieron, sus madres eran amigas, cuando la madre de Luke se había quedado embarazada Ashton ya tenía tres años, y siempre, siempre que podía tocaba su barriga con una sonrisa, ponía la oreja a ver si escuchaba al bebé que había dentro, le cantaba para que naciera ''más inteligente'' o eso le decían. No le importaba, adoraba al bebé.
 
Hubiera hecho cualquier cosa por él, incluso antes de nacer.z99;
 
*Fin del flashback*