Haruka
Estaba recostado en el frio piso de madera, admirando la oscuridad que era mi única compañía en aquel sombrío día. Todavía era temprano, así que tenía tiempo de sobra antes de irme a la Universidad. Oscuridad total y silencio absoluto, observaba mí alrededor todo vacío…ya que el camión de la mudanza hace unas horas antes, había partido con todos los muebles.
Sentía el cuerpo pesado y con dificultad me levante del suelo. Camine pausadamente hacia la puerta y le di un último vistazo a mi habitación, consistía en un cuarto mediano con las paredes pintadas de un azul oscuro desgastado por el paso de los años que combinaba perfectamente con la madera de tonalidad lóbrega. En frente mío estaba un enorme ventanal por el cual me gustaba contemplar a las estrellas. Cruce la puerta sin pensar y empecé a recorrer los sombríos pasillos mientras observaba el lugar el cual fue mi hogar, miles de recuerdos salieron a flote acompañados de sentimientos de tristeza y ¿nostalgia?...
Cuando termine mi recorrido, me topé con el inicio de las escaleras, aquellas viejas escaleras representaban el fin de mi aventura en aquel lugar y que era hora de decirle adiós e empezar mi nueva vida, Baje los viejos escalones ya algo descuidados y marcados por el paso del tiempo, no mentía estaba aterrado, con cada paso que daba una nueva duda se generaba en mi cabeza. Mis piernas empezaron a perder fuerza, así que apresure el paso procurando no caerme en el proceso. Baje el ultimo escalón y me dirigí a la salida, no di una última mirada porque sabría que me arrepentiría de la decisión que he tomado…
Cerré la puerta con llave y me dirigí al jardín, me recosté en la fría hierba para contemplar la que era mi casa, la cual no era ni muy grande ni muy chica. En la cual crecí y en la cual viví los mejores momentos de mi vida, como mi primera navidad, en aquella navidad mi madre ahorro mucho dinero para poder regalarme algo y no cualquier regalo, oh no, sino uno hecho por ella misma. Me regalo un peluche de un delfín, para que no me sintiera solo mientras ella trabajaba por las noches, él y la oscuridad eran mi única compañía en ese entonces.
La hierba, húmeda y fría. El aire soplaba con fuerza y el aroma de la humedad estaba presente. El cielo estaba nublado y el día tenía un toque sombrío, el mejor día para conocer a la que sería tu nueva familia…
Mi nombre es Haruka Nanase bueno de ahora en adelante será Haruka Matsuoka, no es que me disguste pero creo que a nadie le gusta la idea de irse a vivir a lugar que no conoces, con dos desconocidos, la peor parte de esto es que tengo que socializar, algo que no está en mis cualidades. Según mi madre son buenas personas pero mi madre es muy ingenua y tengo miedo que le hagan daño. Lo irónico de esto es que el que será mi “hermanastro” va en la misma universidad que yo, bastante irónico, ¿verdad?
El frio se hacía más presente así que me levante y me sacudí la ropa para al menos llegar presentable a la universidad. Saque mi teléfono para ver la hora.-Maldición se me hace tarde- observe el enorme ventanal que daba a mi cuarto, me despedí de mi antiguo hogar y Salí como alma que lleva el diablo hacia la universidad.
De camino trate de recordar el nombre de mi hermanastro, mi madre me lo había dicho pero estaba tan sorprendido en ese momento que no le preste atención y al parecer el efecto seguía en mí. -¡Haru!- grito mi mejor amigo llamado Makoto Tachibana el cual poseía un cuerpo envidiable, era alto, con el pelo corto de color castaño y tenía los ojos color verde esmeralda, al ver sus ojos se podía observar que era una persona amable y algo tímido. Según el soy algo indiferente y que nunca expreso mis sentimientos, no es que lo sea solo que le restó importancia a muchas cosas. Lo observe a los ojos y el me dedico una sonrisa, ¿acaso no se cansa de sonreír nunca?
Al parecer él estaba gritando mi nombre desde hace ya rato. -Buenos días, parece que estas más distraído de lo usual- ignore su comentario y seguí con mi camino hacia el aula, ya que hoy a primera hora tenía literatura, la cual la daba el profesor más temido de toda la universidad y no quería problemas. Makoto seguía hablándome de cosas que sinceramente no me importaban, solo asentía y respondía con monosílabos, cuando un tema en particular me llamo la atención.-Oye Haru sabes que te amo- me quede mudo al escuchar aquello, Makoto y yo solo éramos amigos de infancia, nos conocíamos desde pequeños, aparte éramos hombres. Sentí mi cara colorada y quise decirle algo pero solo conseguía tartamudear, el solo sonrió.
-Haru-chan escucha cuando alguien te está hablando- ¿Qué cómo se dio cuenta? y cuantas veces le había dicho que sin el chan, pero bueno se la paso esta vez…pero…-¿Cómo fue que tu…?- pregunte algo sorprendido por la astucia de mi amigo
-Deje de hablar y tu seguías respondiendo- Chasque la lengua en forma de respuesta y decidí continuar con mi camino cuando mi vista se desvió a un lugar del pasillo en la cual miles de alumnos estaban unos felices y otros que parecía como si hubieran visto un muerto, me acerque hacia donde se encontraban ellos y Makoto me siguió. Enfrente nuestro estaban la tabla donde publican los resultados de la universidad. Empecé a buscar mi nombre entre los miles que había cuando lo encontré…
1. Matsuoka Rin 1000
2. Nanase Haruka 999
Ahora recuerdo aquel nombre era el de mi hermanastro….-Rin- su nombre se me escapo de los labios y no podía evitar que una curvatura se formara en mi cara. Que bien sonaba su nombre.- ¡Haru, felicidades! Estas en el segundo lugar - decía Makoto mientras me regalaba una sonrisa, esa sonrisa tan característica de él. Solo asentí con cabeza y ambos nos dirigimos hacia el aula, gracias a dios que tenemos el mismo horario. Al llegar tomamos asiento y las clases continuaron como todos los días, ya se había vuelto una rutina monótona el ver a los profesores impartir sus materias y los alumnos “poniendo atención” y tomando “notas” pero hoy era diferente, ya que hoy yo no estaba concentrado como usualmente y en mi libreta no estaba tomando apuntes como todos los días hacia…estaba dibujando a un joven de mi edad, con los ojos de un rojo carmesí y su cabello del mismo tono que sus ojos, sus facciones eran algo afiladas y tenía los dientes algo afilados haciéndole parecer un ¿tiburón?....Sonó la campana que anunciaba que los primeros módulos habían terminado.
-¡Haru! ¿Qué demonios te está pasando hoy?- me gritaba cierto castaño mientras se dejaba dominar por el nerviosismo.- ¿Qué es lo que le pasa hoy?, ¿fue porque se me olvido pasar por él? , ¿Y si le paso algo mientras yo no estaba a su lado?, ¡QUE CLASE DE MEJOR AMIGO SOY SINO SE LO QUE LE ESTA PASANDO A MI AMIGO!...-seguía diciendo mientras se regañaba a sí mismo.
-Mako…
-¡SOY LO PEOR DE LO PEOR!
-Makoto
-¡NO MEREZCO SEGUIR SIENDO TU AMIGO!- por más que trababa de calmarlo, no podía hasta que me saco de mis casillas.
-¡MAKOTO TACHIBANA!- él se calló en ese mismo instante, casi nunca alzaba la voz, al ver su mirada solté un suspiro y lo mire directamente a los ojos, trate de calmarme y pensar en las palabras correctas.
-Estoy bien…- Maldita sea, por más que quiero decir algo mi boca dice lo contrario, que tan difícil era decir “Makoto mi madre se va a casar y hoy conoceré a mi nueva familia” ¡dime boca era tan difícil!
-Si tú lo dices, pero prométeme que si te paso algo seré el primero en saberlo.-Esa parte era la que más me gustada de Makoto, el sabia cuando no le podía decir algo y respetaba cuando no quería hablar.
-lo prometo…-dije sin más chiste y el volvió a sonreír. Seguimos hablando de miles de cosas pero Makoto siempre daba en mis puntos débiles…
-Bueno entonces se puede saber que estabas dibujando que causara aquella sonrisa que tenías-Mi cara enrojeció y oculte mi cuaderno de los ojos de Makoto. Espera ¿estaba sonriendo? Yo Haruka tenía una ¿sonrisa en la cara?
-No sé quién es…- Makoto hizo una mueca de confusión a mi respuesta, aunque era la verdad, no tenía ni la menor idea de quien era. Mi mano al tomar el bolígrafo empezó a hacer trazos y cuando me di cuenta ya estaba terminado el boceto de aquel chico.
-Bueno cambiando de tema drásticamente ¿cómo que estas muy contento aunque te hayan quitado el primer puesto en la tabla de los mejores estudiantes?
-Ya habrá una próxima- respondí otra vez mostrando indiferencia, ya que los alumnos estaban volviendo al aula dado a que la campana había sonado unos minutos antes. Makoto observo muestro alrededor y no me hizo más preguntas, entendiendo a la perfección a lo que me refería. Llego el Maestro y empezó a dar la clase.
Claro que estaba enojado pero más conmigo mismo ya que baje mis notas por lo sorprendido que estaba por la noticia que mi madre se iba a casar, Lo siento Rin…pero esta será la última vez que me superes, porque no permitiré que tú me ganes y menos tan fácilmente, sin dar pelea o ponértela difícil.
Rin, Rin, Rin no podía dejar de pensar en él y como seria, mi mente estaba llena de ese nombre y mi curiosidad empezaba a hacerse presente, miles de dudas y preguntas asaltaron mi mente.-Rojo...-se me escapo de los labios, espero que nadie se haya dado cuenta pero este día la suerte no parecía estar de mi lado…
-Joven, veo que está muy interesado en participar, así que le pido que se pare al frente- sentencio la ¿profesora? ¿Pero en qué materia estamos? ¿Qué no estábamos en algebra? Deje de pensar en ello y fui directo al frente, observe el pizarrón y ahora todo estaba claro, hoy empezaría una nueva profesora y teníamos que presentarnos…
-Joven… ¿Nanase Haruka?- pregunto la profesora revisando la lista de los alumnos, yo asentí con la cabeza.-Dígame sus cualidades y sus metas- termino de decir sentándose en su escritorio. Sentía la mirada de todos observándome y parecía como si quisieran comerme. Respire honde y empecé a hablar.
-Mis "cualidades" no es que tenga muchas pero siempre he destacado en el ámbito del Arte en lo que sería dibujar y hacer esculturas y Mi objetivo aun no lo tengo claro solo quiero ser alguien importante en este mundo y no quedarme en el olvido- la mirada de todos demostraban una sorpresa y una curvatura se formó en mi rostro al ver la mirada estupefacta de la profesora.-Bueno gracias joven Nanase, puede sentarse…- tome asiento y la profesora no volvió a dirigirme la mirada, la clases continuaron como normalmente y al fin pude sacar a ese tal Rin de mi mente…
La clase estuvo relativamente fácil; dado a que la maestra estuvo la mayoría del tiempo hablándonos de su “perfecta vida”, de lo “feliz” que es y que “ama” su trabajo.-Pffff…Esa ni yo me la creo- Lo que me faltaba ahora tendré que soportar a esa bruja y por si fuera poco nos dejó un montón de deberes, mientras yo seguía insultando a la bruja de la profesora, Makoto me observaba con una sonrisa. Sonó la campana que anunciando el fin del módulo y eso significaba que ya no tendría más clases el día de hoy, amo mi horario. Me levante de mi lugar y colgué mi mochila en mi hombro derecho, Makoto imito mi acto y juntos nos dirigíamos hacia la salida, una vez ahí Makoto se tuvo que separar de mí, ya que él tendría que ir al club de natación.
Siendo sincero no solo me interesa estudiar también me encanta nadar. Muchos me dicen que tengo una adicción con el agua, pero cuando me sumergió en la piscina siento como si todos mis problemas desaparecen y me hace sentir libre como si todo fuera posible pero para mí condena no podría estar siempre sumergido en la piscina, aunque me encantaría; mi madre siempre le ha gustado verme nadar dice que parece como si fuera un delfín y que debería dedicarme a la natación, no solo mi madre me lo dice también muchas personas y entrenadores que me han visto nadar, me han hecho propuestas y todo pero yo ya elegí mi propio camino, sé que suena algo ilógico pero después de cierta edad ya no podre nadar y no poder vivir solo nadando por eso he rechazado las ofertas que me han hecho aparte no me gusta trabajar en equipo y solo nado estilo libre...
Rin
Sentí algo pesado en mi pecho, algo desagradable. Abrí mis ojos y lo primero que vi fue a la chica con la cual había tenido sexo hace unas horas antes. Me senté en la orilla de mi cama y la chica se colgó de mi cuello y empezó a repartir besos por todo mi cuello. Tome mi móvil y lo primero que vi fue un mensaje de mi mejor amigo Sousuke.
>>Sousuke
5:58.-Rin, es importante que te presentes hoy a la universidad.
Me levante de golpe empujando a la zorra la cual había follado más de 3 veces en una misma noche. Tenía que ir a la universidad aunque no quisiera ya que cuando Sousuke dice que es importante algo, es porque en verdad es importante. Tome un cigarro y me acerque a la ventana para poder fumar con tranquilidad, necesitaba desahogarme. Observe el cielo, a pesar de que era de mañana. La mañana era sombría y agria. Se podría decir que hoy sería un día "especial", ya que hoy conocería a mi nueva madrastra y a mi hermanastro, mi padre dice que son buenas personas pero no lo creo. En este mundo las personas fingen algo que no son... Y la peor parte es que mi hermanastro asiste a la misma Universidad que yo, ¿Qué no era suficiente tener que estar bajo el mismo techo? Pues al parecer no ahora le tendré que ver la cara todo el día y todos los días. Me levante de la cama y me di una ducha rápida para borrar pensamientos molestos. Faltaba muy poco para que mis clases empezarán, pero me daba igual, me gusta hacer las cosas a mi manera sin que nadie me diga que hacer.
–Matsuoka Rin-sama, el auto lo espera abajo si me disculpa me retiro. –una chica de la servidumbre me aviso, chica cual nombre no recuerdo y no me importa recordarlo.-Qué molestia…-Suspire al salir del baño. La zorrita que me había tirado la noche anterior me miraba como esperando algo.-Recoge tus cosas y largo- le dije mientras le aventaba su ropa, ella me miro indignada.-Pensé que me amabas- Una carcajada salió de mi boca al escuchar aquello.-Mira, no sé qué pensaste pero yo solo quería tener sexo así que adiós ¿Diana?- La chica se puso roja del coraje, tomo sus cosas y cuando estaba en la puerta.-Me llamo Rosalina no Diana-y se fue al fin.
Me aliste para irme a la universidad, camino a esta recuerdo que mi padre me había mencionado el nombre de mi hermanastro pero no lo recuerdo. ¿Por qué será...? Recorrí los pasillos del instituto, y eche un vistazo a la planilla de calificaciones;
1. Matsuoka Rin 1000
2. Nanase Haruka 999
Ahora que lo recuerdo, El será mi hermanastro. Una sonrió se dibujó inconscientemente. -Haru... - no pude evitar murmurar su nombre. Quizás no sea tan malo tener un hermanastro, yo me encargaré de darle una "especial" bienvenida. Mis pensamientos eran eróticos al imaginar su cara gimiendo y sonrojada. Continúe mi camino hacia el salón mientras más ideas venían a mi cabeza.
-Rin- Mi mejor amigo Sousuke me saco de mis pensamientos. - Io, Sousuke - Sousuke era un chico alto y de cabello marrón oscuro y sus ojos eran verdes turquesa, Es mi mejor amigo desde la infancia. Siempre nos metimos en problemas juntos y de alguna manera escapábamos fácilmente de ellos.- ¿Por qué era importante que viniera hoy?-Fui directo al grano, Sousuke me miro con seriedad.-Porque que hoy vamos a tener un examen que vale más de la mitad de la calificación.-Asentí con la cabeza y empecé a divagar en mis pensamientos.- Oye, estas muy distraído. ¿Paso algo interesante? - sólo pude reír. ¿Sousuke se reiría si le digo lo que estaba pensando? Ya le había contado lo de mi madrastra y eso. Pero contarle lo que iba a hacerle a mi hermanastro... Eso sólo yo debía saberlo. - No. Solo recordé que tenía algo que hacer. - ambos entramos a la universidad, faltaba algunos pocos minutos para que las clases empezaran. Empecé a contarle algo a Sousuke, pero se distrajo al ver a un chico de pelo castaño. - Oye Sousuke, ¿me escuchaste? - Sousuke volvió a mirarme. - Lo siento. Me distraje con algo – Claro, y yo me acuerdo de todos los nombres de las mujeres con las cual he tenido sexo.- Más bien "alguien" - conteste sonriendo burlón.- Ese chico que paso... ¿Que no es Tachibana Makoto?– El que quedo en tercer lugar- lo recordé. Por supuesto quien más en la universidad tiene esa sonrisa.- ¿Lo conoces? - las palabras de Sousuke tenían interés e intriga - No. Solo sé que tiene el tercer lugar en la planilla de calificaciones.- Al parecer Sousuke esperaba saber más acerca del chico con cabello castaño. Seguimos caminando hacia donde sería la primera clase, volví a contarle a Sousuke lo que pasaría hoy.- ¿Podrás soportarlo? Puedes venir a dormir a casa si quieres. –Sonreí internamente.- Ojalá. Pero según mi padre es necesario que esté presente el día de hoy. Es muy importante para el que conozca mi madrastra y mi hermanastro.- Suspire maldiciendo por lo bajo. De verdad era una molestia. Tenía planes y tuve que cancelarlos sólo por culpa de mi hermanastro... Bueno, sacaré provecho de eso. Después de terminar el examen; el cual estaba fácil. Las demás clases transcurrían rápido por suerte.