Perdedor, solitario
Un cobarde que pretende ser fuerte
– Daesung ¿Verdad?
– ¿Y tú eres Seungri, cierto? – ambos, tanto el rubio como el castaño respondieron con un asentimiento de cabeza. – Si no es mucha la indiscreción…. ¿Qué te paso? –señalo Seungri al magullado rostro del castaño.
Un medio delincuente
En el espejo, eres
Sólo un perdedor
– Me metí en asuntos que no son míos – un enorme y pesado suspiro salió de los magullados labios del chico –…. supongo que es lo que hace uno cuando está enamorado.
– ¿Aún lo estás?
– ¿Tú no?
– Quisiera no estarlo –el rubio desvió la mirada del mayor para posarla al frente donde estaban su pareja y la del castaño compartiendo un apasionado beso sin ser consciente de los espectadores.
– Es doloroso, pero aun así soy solo un perdedor que no sabe cómo terminar con esto.
– Honestamente, nunca he encajado en el mundo, pero él me hacía sentir como si fuera parte de esto.
– Aunque él siga haciendo eso, no creo que pueda alejarme de él en un tiempo.
– Ah…Se están yendo ¿Deberíamos seguirles?
– No – negó el de cabellos castaños mientras levantaba su mano para que el barman lo atendiera – No quiero confirmar lo que ya se. Además, verlos tener sexo no es algo que quiere ver alguna vez en mi vida. No quiero ver como disfruta con él.
Un solitario, un tonto cubierto de cicatrices
Sucia basura
En el espejo, soy un...
A comparación de Daesung, Seungri si pensó en seguirlos, saliendo del concurrido bar tal como ellos lo habían hecho, manteniendo una distancia prudente para que no notarán que eran seguidos, cosa que dudaba notaran tomando en cuenta que sus bocas estaban más entretenidas en devorarse.
Las calles eran algo solitarias así que para no ser descubierto cruzo la calle hasta la acera de enfrente, siguiéndoles de esa forma.
Tenía curiosidad de algo, así que saco su celular y marcando solo el número uno y el botón verde, en la pantalla apareció el número de Ji Yong junto a una foto que él mismo se había tomado con el celular del menor.
Mientras tenía el teléfono pegado a la oreja veía a la pareja que solo se separó a petición de Ji porque tenía que atender su teléfono. Vio como ambos se dejaban de caminar y como el pelirrojo miraba la pantalla, parecía que si iba a contestar pero los labios de su acompañante buscaron de nuevo su atención por lo que la llamada entro al buzón de voz.
Lo intento un par de veces y el resultado era el mismo, hasta que el mismo Ji Yong se hartó de aquello y apago el celular.
~ Flashback~
Realmente nos sabía qué demonios hacía ahí, había sido arrastrado por Jong Hoon pues este había alegado que iba a ser la mejor fiesta de su vida que posiblemente encontraría a algún chico lindo, porque si Seunghyun era homosexual, no abiertamente declarado, pero varias personas lo sabían, tampoco es algo de lo que alardear, pues para él aquello era tan normal como ser heterosexual.
Y ahora estaba ahí, solo porque su amigo se había ido con alguna chica a follar.
Honestamente, nunca he encajado en el mundo
Siempre estuve solo
– Que decaído te vez, ¿La fiesta no es de tu gusto? – Seungri dejo de lado su bebida para ponerle atención a la voz que se hacía escuchar sobre la estruendosa música – ¿Eres nuevo en la carrera? Nunca te había visto.
– Antes no solía tener un color de cabello tan llamativo – por inercia llevo su mano a su ahora rubio cabello, había hecho una apuesta con su mejor amigo, había perdido y el castigo había sido teñirse el cabello.
– Ah cierto, el chico que parece panda, mucho gusto soy Ji Yong – el pelinegro alzo la mano hacía el rubio en señal de un saludo formal.
– Lo sé – como no saberlo, era el popular, super guapo, rico, inteligente y con muchos talentos Ji Yong quien le estaba hablando en ese momento.
– Cierto, “crea fama y échate a dormir” pero aun así, no me has dicho tu nombre – el pelinegro ya se había resignado a no ser correspondido en sus buenos modales.
– Lee Seunghyun, pero me puedes decir Seungri, hay otro Seunghyun en el grupo B, así que es como diferencian, pero no creo que sirva de mucho el apodo, no soy tan popular como él para que griten mi nombre en los pasillos.
– Un placer Seungri…
Ha sido un largo tiempo desde que me olvide el amor
Ya no puedo escuchar canciones llenas de esperanza
La gente no lo podía creer, el popular Ji Yong estaba en una relación. La gente murmuraba cosas cada que los veían por los pasillos agarrados de las manos, o besándose, siempre diciendo cosas como “De seguro solo está con él por lastima” “Quizá amenazó a Ji y por eso el pobre tiene que hacer eso” “Debe ser por una apuesta” “¿Quién andaría con alguien como él?” “¿Ji Yong se volvió ciego?”
Tú y yo, nosotros
Somos simplemente unos payasos tristes, dóciles y cobardes
A Seungri realmente le dolían aquellas palabras pero siempre intentaba hacer oídos sordos ante estas, además Ji Yong estaba con él y siempre le hacía saber lo mucho que le gustaba y que todas esas palabras eran mentira.
He llegado demasiado lejos
Estoy llegando a casa
Habían pasado tres meses de que iniciaron su relación, era sorprendente y todos en la universidad lo comentaban, pues una de las cosas por las cuales se le conocía a Ji Yong era por sus cortas relaciones que no pasaban de las dos semanas. Era como los días de paga, cada quince días había una chica o un chico nuevo.
Quiero regresar
A cuando era joven
– Mas…más Seunghyun…por favor – las embestidas del rubio se hicieron tan rápidas y profundas como su cuerpo se lo permitía.
– Demonios Ji….me estas succionando – la voz del menor era ronca y sexy a los oídos de Ji Yong. El pelinegro debía admitir que Seungri no estaba en su top de los mejores cinco tipos con los que había tenido sexo, pero al menos lograba hacerlo llegar aunque sea a un orgasmo. Nunca se lo diría porque aquello lo lastimaría, además el chico se había estado esforzando porque había mejorado bastante a comparación de la primera vez.
– Quiero montarte – Seungri detuvo los movimientos de su pelvis para salir del mayor, recostándose esta vez boca arriba y llevando de inmediato sus manos a la cintura del ahora pelirrojo para sostenerlo mientras este lo cabalgaba, soltando roncos gemidos y jadeos que intentaba esconder en apasionados besos y en succiones en la blanquecina piel del mayor.
En algún momento
Empecé a mirar más al suelo que el cielo
Es difícil incluso de respirar
Extiendo mi mano
Pero nadie la toma
Soy un…
– Con que él es con quien comparto nombre – Seungri levanto la mirada de sus apuntes de estadística en busca de aquella voz, encontrando frente a él a su novio y al chico alto y guapo del grupo B.
– Bebé, él es Choi Seunghyun y él es Kang Daesung, su novio – hasta que escucho ese nombre y alguien más apareció atrás de ellos dos, fue consciente de su presencia.- Nos conocimos en una fiesta y conectamos de inmediato.
Perdedor, solitario
Un cobarde que pretende ser fuerte
Un medio delincuente
En el espejo, eres
Sólo un perdedor
Aquel día se habían cancelado las últimas clases por que iba a haber un festival deportivo, así que decidieron escaparse los cuatro, teniendo extrañamente una cita doble, o algo así, porque en realidad los únicos que parecían divertirse era su novio y el chico del B.
Un solitario, un tonto cubierto de cicatrices
Sucia basura
En el espejo, soy un...
– Maldición Ji Yong, no me creas estúpido, se ve demasiado claro
– Estas exagerando, además ya te dije que no pasó nada, estábamos platicando y quizá mientras lo hacíamos tomamos esa posición y parece que nos estamos besando.
– ¿En serio me crees tan idiota? – la voz del rubio había tomado un matiz más grave, era claro que estaba molesto, y como no si su novio se empeñaba en negar lo que era muy obvio.
La noche anterior le habían llegado unas fotos donde se podía ver claramente a Ji Yong y Top besándose y no cualquier beso, si agrandabas la foto podías ver claramente sus lenguas entrelazándose.
– Sabes que, cuando estés más tranquilo hablamos, estaré esperando tu disculpa – y como la diva que a veces solía ser, Ji Yong tomo su mochila y chaqueta y salió del pequeño departamento del menor sin mirar atrás.
La furia que sentía Seunghyun era demasiada que en un abrir y cerrar de ojos el pequeño departamento se encontraba hecho un desastre, con libros en todos lados, la mesa volteada, platos y vasos rotos y hasta la lámpara que le regalo su madre cuando se mudo había sido víctima de su furia.
Un solitario, un tonto cubierto de cicatrices
Sucia basura
En el espejo, soy un...
Cerro los ojos por inercia cuando el líquido se estrelló contra su cara, el ruido a su alrededor desapareció, todos en la cafetería estaban al pendiente de la discusión que llevaban a cabo la popular pareja. – Retráctate de lo que dijiste, tú no eres nadie para llamarme de esa forma.
– ¿De llamarte como Ji Yong? ¿Tanto te duele que te diga la verdad?
– Seunghyun, estás llamando la atención de todos – Jong Hoon tomo del brazo a Seungri para que reaccionara y dejara de hacer todo aquel espectáculo – Vamos esto no es bueno –el de baja estatura tomo un par de servilletas para que el rubio pudiera limpiarse el refresco que el pelirrojo le había lanzado.
– La próxima vez se más cuidadoso cuando andes de puta regalada– la cachetada hizo eco en la cafetería, la exclamación de sorpresa se escuchó a coro por todos los espectadores y los pasos rápidos de Ji Yong fueron los que dieron fin al espectáculo.
No se puede detener está peligrosa carrera a toda velocidad
Ahora no tengo ningún interés, no más diversión
Estoy solo en el borde de un acantilado
Otro noche más donde solo era un espectador de aquella tortura impuesta por el mismo porque simplemente no podía terminar con aquello, realmente no sabía cómo hacerlo.
Ji Yong se divertía con el Seunghyun apuesto, ambos restregando sus cuerpos con ansiedad y compartiendo besos húmedos que se supone debía darse con él por ser su novio oficial, pero estaba seguro que Ji Yong ni siquiera era consciente de su presencia.
Estoy cansado de llorar, traté de sonreír tanto
Pero nadie me reconoce
Soy un...
~ Fin flashback ~
Un solitario, un tonto cubierto de cicatrices
Sucia basura
En el espejo, soy un…
…Perdedor
Los gritos de placer de Ji Yong hacían eco en el oscuro departamento. Ji nunca se había expresado de esa forma cuando se acostaba con él.
Sentía el estómago revuelto, pero sabía que era lo mejor, ya no iba a ser un cobarde que pretende ser valiente, no iba a ser igual que Daseung.
Soy un perdedor…
Armándose de valor camino hasta la habitación que muchas veces visito y con el punto de hacerse notar abrió la puerta con brusquedad; la imagen frente él, de Ji Yong con una mueca de desbordante placer sobre el regazo de Seunghyun siendo penetrado con tanta fuerza, le hicieron flaquear. – Sigan con lo que están haciendo, no me voy a tardar mucho.
– Se-Seungri…Yo…No…No es lo que parece
– ¿Entonces que es Ji Yong? – el menor intentaba a toda costa no mirarles, el solo verlos juntos le provocaban nauseas, así que prefería estar concentrado en guardar las pocas pertenencias que había llevado al departamento de su ahora ex novio
El ambiente caliente se había esfumado, tanto que los mayores se separaron para poder vestirse. – ¿Seungri, que haces?
– ¿Qué no es obvio? Terminar con esto Ji Yong
– Beb...
Soy un perdedor….
– No me vuelvas a decir así – la voz de Seungri era dura y su semblante era demasiado frío, era una expresión que Ji Yong nunca había visto – ¡Y tú! – el menor señalo al mayor de los tres que parecía desconcertado por no saber si seguir ahí o irse de una vez – Si vas a seguir con esto, sería bueno que finalices todo con Daesung, él no debería estarse haciendo cargo de tus putos problemas de drogadicción, solo termina con él y hazlo sufrir un momento y no el resto de su vida.
– Tu que sabes, maldito mocoso –ignoro el intento de insulto del mayor, la verdad ya nada le importaba, solo quería que Top dejara en paz a Daesung. Daesung era muy frágil, esa sonrisa podía confundir a quien no lo conociera, y Seungri se había dado el tiempo de conocerlo, él no tenía por qué seguir soportando todas esas estupideces.
Tomo la mochila en la que había guardado sus cosas sobre su hombro y dejo sobre la cama su copia de la llave del departamento y el anillo de pareja que en un tiempo mostro con orgullo en su mano izquierda.
Ji Yong estaba atónito, no sabía cómo reaccionar, sabía que todo lo que había hecho ese tiempo había estado mal, pero por más que quería no había logrado parar y aun así en el fondo, creyó que Seungri siempre iba a estar ahí para él a pesar de todos sus tropiezos – ¡Seunghyun! Si das un paso más nunca más en tu vida me vas a volver a ver – era estúpido lo que decía, pero en verdad no quería que el menor lo dejara.
Soy un perdedor…
– Ese es el punto Ji Yong – antes de que Ji Yong dijera algo más abandono la habitación y poco después el departamento. Extrañamente sus hombros se sintieron ligeros y sintió que cada respiración que daba su cuerpo se llenaba de aire limpio y agradable, se sentía bien.
Era un perdedor, pero al menos era uno que se sentía libre.
Soy un perdedor…