La puerta se abrió con una explosión y en asaltaron un adolescente joven con rosa erráticamente pinchos y el pelo azul. Arrojando su bolsa en una rabia y dando inicio a sus zapatos se subió directamente a su habitación sin decir una palabra a de la casa otros habitantes que simplemente lo miraban con expresiones perplejas en sus rostros. Arrojando a sí mismo en la hamaca que usaba como una cama del chico cerró los ojos y apretó sus manos a la cara, en silencio gimiendo en ellos como la hamaca se balanceó. La figura azul brillante que le había seguido en silencio lo observó con curiosidad por un momento antes de decidirse a hablar. "Yuma", fue la voz algo sobrenatural sonido que sonaba en algún lugar entre lo real y sintetizada. "Todo lo que es el problema? Estás frustrado."
Yuma gruñó, pero no dijo nada. Simplemente pateó la pierna de la hamaca y la usó para continuar el movimiento de vaivén. El ser azul - llamado Astral - ladeó la cabeza hacia un lado y siguió mirándolo con sus ojos amarillos y blancos. "No entiendo por qué usted se sienta frustrado. El día de tu escuela no parece tener nada ocurra lo que daría lugar a la frustración y tuvimos otra victoria duelo éxito hoy en día que yo había asumido desde tu varias puño bombas y exclamaciones de alegría que ¿Quedó satisfecho con el resultado. ¿Por qué es que usted- "
"Darle un descanso, Astral ..." Yuma gimió desde la hamaca, con las manos en movimiento de la cara a sus oídos mientras rodaba su cuerpo hacia un lado dejando a su espalda hacia el extranjero perplejo.
"Da lo que es un descanso, Yuma?"
El muchacho suspiró y Astral podía imaginarlo poniendo los ojos en él. Esperó una respuesta que el niño nunca se rindió y en lugar de sondeo para que imitó el acto de sentarse y se sentó en silencio mirándolo por unos momentos. "Me recuperé otra memoria", dijo finalmente, después de algún tiempo. "A la memoria de mi Worl-"
"Astral, yo no quiero hablar de eso ahora."
Astral frunció el ceño siempre tan ligeramente al chico en la hamaca. No era como Yuma a actuar de esta manera. Normalmente se le llena de entusiasmo y con ganas de saltar a más acción duelo pero hoy parecía que él era - ¿cómo fue que Yuma normalmente lo puso? - No "sentir el flujo". "Yuma, dime cuál es la quina"
"Nada es lo que pasa!" llegó interrupción vocal de Yuma. Todo pasa ...
El ceño de Astral se profundizó. "No te entiendo, Yuma," dijo en voz baja. "¿Por qué es que todo lo que me dices es siempre lo contrario de lo que estás pensando?"
"Y por qué es que siempre estás lo suficientemente rudo para sondear mis pensamientos !?"
El temperamento de Yuma fue aumentando exponencialmente ahora. Astral estaba considerando dejar el tiempo niño a pensar por sí mismo cuando el pequeño pensamiento susurrada más pequeño pasa a través de la relación entre ellos. No quiero perderte ...
Momentáneamente sorprendido, Astral miró con los ojos muy abiertos hacia el niño, incapaz de averiguar si había escuchado realmente ese pensamiento correctamente. "Yuma?" -preguntó lentamente y con incertidumbre.
"Mmm", fue la respuesta de gruñido. "¿Qué?"
Astral pensó en discutir lo que acababa de oír, pero se lo pensó mejor. "Nada", dijo.
Bastante tiempo transcurrido antes de Yuma se mudó y en ese tiempo Astral se había quedado en silencio e inmóvil, observándolo desde la distancia. Él estaba seguro de que había oído un resoplido ahogado, pero no era del todo cierto. Después de un rato el niño había deshecho sobre su espalda y miró torpemente a través de la red de la hamaca en donde estaba sentado Astral, su mente pensando en la palabra para decir que la disculpa que ya estaba escrito en sus ojos carmesí. Astral negó con la cabeza. "Está bien", dijo simplemente.
Yuma se sentó y suspiró, estirando sus extremidades antes de girar sus piernas redonda para colgar de la hamaca. "Supongo que todo esto Número de caza de llegar a mí, eh, Astral?" sonrió ampliamente, pero aun Astral podía decir que no era genuina.
Sus ojos no brillan la forma en que normalmente lo hicieron cuando sonreía. Parecían muertos y sin vida en comparación. Astral no hizo ningún comentario sobre el mismo. Él simplemente asintió con la respuesta a lo que el chico había dicho y esperó a ver lo que iba a hacer a continuación. Como si confirmando los pensamientos de Astral, la sonrisa de Yuma murió rápidamente como una vela en una tormenta. Su mirada se dejó caer al suelo y una mirada distante nubló sus ojos. Esta vez Astral hizo comentario. "Yuma, no me refiero a presionar, pero aun te puedo decir que hay algo mal."
Yuma no lo miró. Siguió mirando al suelo, pero su frente había fruncido el ceño enfocada. "Ya te lo dije", dijo. "Es sólo que creo que me estoy poniendo un poco descuidado por todo esto Número cosas. Eso es todo."
"¿Qué hay de lo que está cansando?"
Yuma no respondió. Él sólo siguió manteniendo su mirada fija en el suelo, negándose a mirar a Astral, tratando de sacarlo en blanco. No ayudó que podía sentir la mirada del extranjero sobre él. Podía sentir su presencia en el aire a su alrededor, siempre tan levemente eléctrico con la energía extraña su cuerpo parecía desprender - algo que él había tomado bastante tiempo para acostumbrarse a pero ahora había crecido totalmente acostumbrados. Una única perla resplandeciente de agua cayó por debajo de la cabeza inclinada de Yuma, que serpentea hasta la punta de su nariz antes de caída libre hasta el suelo. Astral no se había perdido. "Yuma", dijo, moviendo su cuerpo en una posición de pie de nuevo. "Usted esta filtrando."
A toda prisa el chico se frotó los ojos y miró hacia otro lado. "No, no lo soy," murmuró. Se llama 'llorando' idiota ...
Los ojos de Astral se estrecharon y levitaba hacia el niño que, al notar el movimiento de la entidad azul, se entregó por completo alrededor de modo que sus pies colgaban fuera el otro lado de la hamaca. Su cambio de posición no hizo nada para detener Astral que simplemente flotaba sobre él y colgado boca abajo en el otro lado, su nivel de cabeza con Yuma. "¿Por qué estás llorando?"
Yuma le lanzó una mueca falta. "Leyendo mis pensamientos de nuevo ¿verdad?" dijo con rencor. "¿No tienes algo mejor que hacer?"
Astral negó con la cabeza y se volcó a sí mismo en posición vertical. "Estás molesto por algo", dijo.
No era una pregunta. Yuma tratado de sostener su mirada seria pero no pudo. "Vete", murmuró. "No se refiere a ti."
Astral sabía sin escuchar los pensamientos del chico que lo hizo con claridad. Sin embargo, por alguna razón el muchacho se negó a decirle lo que era. Haciendo una observación mental, señaló que cuando los seres humanos están preocupados por algo que no siempre hacen saber a la persona que se refiere ...
Yuma fue tamizado a través de su baraja ahora, mirando distraídamente a sus tarjetas, sin importarle que ahora había dos ríos de lágrimas corriendo por sus mejillas. Astral se enderezó y lo miró por un momento antes inclinando la cabeza. "Como quieras", dijo en voz baja.
Con eso flotó hacia la salida de la habitación y estaba a punto de descender a la planta baja cuando oyó un débil gemido detrás de él y miró hacia atrás para ver al niño acurrucado en su espalda en la hamaca, la celebración de la llave de oro contra su corazón. Sollozos Tranquilo escaparon de su boca mientras las lágrimas frescas estrías su camino por su rostro rosado con manchas. Flotante de nuevo a su lado, Astral lo miró y suspiró. "Yuma, por favor dígame cuál es wro-"
Antes de que pudiera terminar la frase Yuma fue erguido otra vez, sus brazos mal envuelto alrededor del marco pálida de Astral, su cuerpo temblando con cada sollozo que salió de él. Astral se mostró reacio a responder al principio, momentáneamente aturdido por el repentino contacto, pero lentamente y con cuidado en un primer momento puso sus brazos alrededor del chico tembloroso antes de relajarse un poco y permitir Yuma a llorar con él. Era extraño. Astral nunca había considerado posible Yuma para poder tocarlo en absoluto. Estaba seguro de que la última vez que el chico había intentado un oscilación en él su mano había pasado directamente a través de él como si allí no había nada en absoluto y sin embargo, ahora parecía sólido y real, y por primera vez Astral podía sentir marco del joven bajo dedos, calor radiante. Astral no recordaba tal sensación. Si él había experimentar algo tan trivial como un abrazo que no podía recordar. La experiencia parecía tan fresco y nuevo y completamente ajeno a él. "Yuma", dijo en voz baja junto a la oreja del niño llorando.
Nada más se dijo durante varios momentos en los que la intensidad de los gritos de Yuma se redujo y hasta que finalmente no eran más que estornudos ocasionales sin embargo, él no se apartó del abrazo de Astral. Él murmuró algo en el cuello del extranjero pero Astral no podía distinguirlo. "¿Qué?" -preguntó, retrocediendo ligeramente a echar un vistazo a la cara de Yuma, con manchas y rojo y llena de lágrimas. "Por favor repita eso."
Las mejillas de Yuma parecían enrojecer aún más y no podía mirar Astral en el ojo. La inhalación de un suspiro tembloroso, murmuró en voz baja: "Yo no quiero que te vayas ..."
Astral miró perplejo hacia él. "¿Ir?" se hizo eco. "Pero Yuma yo-"
"Quiero decir después de más de ... todo esto de cosas" Yuma interrumpió, todavía se niega a cumplir con la mirada de Astral. "Cuando usted consigue sus recuerdos de vuelta y todo eso se acabó. Vas a tener que ir a casa de algún tiempo, ¿no es así ... Una vez que tengamos todos los números y hacer lo que se le envió a hacer aquí ..."
Astral no respondió. Él simplemente se quedó mirando Yuma con los ojos abiertos como los ojos del muchacho empezaron a regar de nuevo. "A-y eso es otra cosa ..." balbuceó, con la voz quebrada ligeramente. "Hay tanto montar en estos números duelos ... Si pierdo un solo yo te pierdo para siempre ... y yo ... yo no creo que pueda seguir ganando así ..."
"Pero Yuma que precisamente por eso que estoy él-"
"Incluso los buenos duelistas caen a veces, Astral," Yuma lo interrumpió de nuevo, nuevas lágrimas comenzando a correr por sus mejillas de nuevo. "¿Qué pasa si algo sucede y usted no puede ayudarme? ¿Qué pasa si no puedo ganar ... ¿Y si ... si ... ¿Qué pasa si no puedo protegerte ...?"
Los hombros de Yuma temblaban de emoción una y Astral sentía algo dentro de sí mismo suavizar al ver a la joven cayendo a pedazos sobre sus temores de ser capaz de protegerlo. Apriete su agarre alrededor del chico, Astral atrayéndolo más cerca, descansando su cabeza sobre el hombro de temblor Yuma y cerrando los ojos. "Has ganado los duelos difíciles sin mi ayuda, Yuma", susurró. "Tengo fe en ti."
Lentamente Astral comenzó a frotar la palma de su mano en pequeños círculos en la espalda y los hombros de Yuma, calmar el llanto ascendente que escapó de la joven. Se quedó en silencio durante bastante tiempo antes de hablar de nuevo, susurrando suavemente al oído de Yuma, "Yo no te dejaré. He crecido demasiado aficionado a las cosas aquí. Descubrir y aprender acerca de este nuevo mundo es una aventura emocionante cuando me tomas a través de él. Aunque mis recuerdos son incompletos, no puedo decir que la vida era ni de lejos tan colorida o exhilirating de vuelta en el mundo astral ". Se quedó en silencio por un momento, teniendo en cuenta lo que acababa de decir antes de continuar. "Fui enviado aquí para salvar mi mundo, pero eso no significa que tenga que volver allí una vez que me he ahorrado él. Estoy feliz aquí con ustedes, de Yuma."
Yuma había quedado en silencio, sus sollozos habían muerto a casi nada y Astral habían sentido corporal congelación del muchacho. Sacó un poco hacia atrás, mirando a los ojos amarillos y blancos del Astral con una mirada de sondeo. Parecía como si estuviera buscando la deshonestidad en la mirada del extranjero, algo que sugiere que lo Astral acababa de decir que había sido una mentira, pero lo que encontró en su lugar era algo que nunca había visto antes. Detrás de esos ojos penetrantes que había una nueva calidez, una especie de suavidad a su mirada que no había estado allí anteriormente. Parecía como si los ojos de Astral sonreían a él, brillante y resplandeciente brillante y como el extranjero lo miró, vio la luz viene de nuevo en orbes carmesí de Yuma. Una sonrisa se dividió por la cara de oreja a oreja y le abrazó con fuerza astral de nuevo, descansando su cabeza contra su pecho brilla intensamente azul y sosteniendo lo apretado. Gracias, Astral ...
"No, Yuma", dijo Astral con una sonrisa. "Gracias..."