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La Familia STARISH 2.0 por NekoPame

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Notas del capitulo:

Hola! Estoy de vuelta! Les traigo amor~

 

La vida de los idols de STARISH y Quarter Night cambio mucho en estos últimos años con la adolescencia de sus hijos y sobretodo con la llegada de nuevas personitas....

~•~•~•~•~•~

Eran las 8:30 pm. El cielo estaba oscuro pero sin rastros de ninguna nube dejando resaltar la belleza de una hermosa luna llena. La luces de los faroles iluminaban la vida nocturna de la ciudad. 

En una gran plaza se encontraban reunidos todos los ex-miembros de STARISH y Quartet Night, a excepción de Ai Mikaze. De pronto, uno de los allí reunidos comenzo a hablar.

-¡Si que ha pasado mucho tiempo desde la ultima vez que salimos todos juntos!.-comentó el rubio mientras miraba a todos los presentes con esa mirada y sonrisa tan típica de él. 

-Tienes razón.- afirmó el pelirrojo a la vez que todos afirmaban a la vez con la cabeza  por el comentario del rubio.

-Todo se lo debemos a Ai-Ai, sin él nada de esto hubiera sido posible.- acotó Reiji.

-Por cierto, ¿Cómo convencieron a Mikaze-kun de que cuidará a nuestros hijos?.-pregunto Tokiya, ya que Otoya no le había explicado muy bien lo que paso.

-Bueno, en realidad...-comenzó a hablar el pelirrojo.-nadie convenció a Mikaze-kun. Simplemente, hace unos días se contacto con Camus, Syo, Reiji, Haruka y conmigo para informarnos algo. En la reunión dijo algo como "Intento descubrir aquel cariño que sienten los padres por sus hijos. Es por eso que cuidare de ellos". Y eso es todo.- dijo terminado de hablar.

-Ya veo...-dijo Tokiya.

-Bueno. ¿Que les parece si empezamos?.-propuso Reiji.

-¡Hai!.- fue la respuesta de todos.

Hace mucho tiempo que no hacían una salida grupal de amigos y gracias a Ai, se les había presentado una oportunidad. Por lo cual, ahora se encontraban reunidos para realizar dicha salida. Habían organizado todo perfectamente,sólo debían seguir el plan. Primero iban a cenar en el mismo restaurant. Luego irían al cine, donde verían una película romántica. Después irían a un parque de diversiones. Finalmente, volverían a la casa de Camus y Cecil para buscar a sus hijos. 

Seguramente se preguntarán por qué decidieron dejar a los niños bajo el cuidado de Ai en la casa de Camus y Cecil. La respuesta era simple. A diferencia de las demás familias, Camus y Cecil no tenían una casa, sino ¡Una mansión!. La cual contaba con suficientes habitaciones como para que todos estuvieran cómodos.

Al finalizar la charla, todos se dirigieron al restaurant francés que habían elegido. 

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Mientras tanto, en la Mansión de la Familia Aijima, a diferencia de lo que los demás pudieran imaginar, todo se encontraba en orden. Aunque Ai, con la ayuda de  solo dos empleadas, estuviera a cargo de muchos niños, eso no quitaba la posibilidad de que no pusiera controlarlos a todos. 

El peliturquesa debía hacer una serie de recorridos por la Mansión para asegurarse de que todo estuviera en calma.

La primera habitación era la de juegos, la segunda era el gran living, la tercera era la cocina y, de vez en cuando, una que otra habitación incluyendo principalmente el inmenso jardín.

Decidió ir a la habitación donde se encontraban los hijos mayores.

Actualmente, Akaya, Syusuke y Tomoe ya se habían convertido en  adolescentes. Akaya, el hijo mayor de Ren y Masato, había cumplido 15 años de edad, seguido del peliazul llamado Syusuke, hijo mayor de Tokiya y Otoya, y del azabache llamado Tomoe, hijo mayor de Tomochika y Haruka, quienes tenían 14 años. 

El peliturquesa observó a los 3 muchachos. Estos estaban hablando pacíficamente, seguramente, de cualquier trivialidad. En realidad, los únicos que hablaban eran Tomoe y Syusuke, mientras Akaya parecía estar ojeando un revista de tecnología, acotando algo de vez en cuando. Estos no notaron su presencia. Viendo que todo estaba en orden, optó por pasar a la siguiente habitación.

Los hijos mayores de cada pareja no eran los únicos que pasaban por la etapa adolescente,también lo estaban Mizuki, hija de mayor de Natsuki y Syo, y Christopher, hijo mayor de Cecil y Camus, con sus 13 años de edad.

Algunos se encontraban próximos a la adolescencia como Otomi y Touma, los gemelos de la Familia Ichinose, también Masaomi y Rina, los mellizos de la Familia Jinguji, y Rei, hijo mayor de la Familia Kurosaki, que tenían 12 años.

Ai, miro adentro de la habitación, encontrando a un grupo de chicos y chicas. Todos se distraían haciendo diferentes cosas. Por ejemplo, los mellizos y Otomi hablaban de alguna serie de televisión, que al parecer por lo que había escuchado, era de acción. En un rincón de la habitación, Mizuki y Christopher estaban retratando en una hoja de papel alguna zona de la habitación.

 

El peliturquesa, curioso, se acercó a ellos  y observo cada cuadro. Al ver el de Christopher no pudo evitar pensar "Perfecto" ya que la pintura era hermosa. No se esperaba menos del hijo del detallista Conde de Permafrost. Después dirigió su mirada hacia la pintura de Mizuki. Este sólo tenía plasmada la imagen de muchos "Piyo-chan". 

-"Debí haberlo imaginado, después de todo es la hija de Natsuki".-pensó.

Los dos chicos siguieron pintando sin darse cuenta de la presencia de Ai, ya que ambos tenían puestos sus audiculares conectados a sus celulares. 

En el medio de la habitación, no tan alejados de los mellizos y Otomi, se encontraban Touma y Rei, los cuales estaban armando un rompecabezas bastante complicado mientras el castaño le hablaba amenamente  de un tema y el pelirrojo asentía en forma de respuesta.

Sin llamar mucho la atención, se retiró de la habitación para ir a la siguiente.

Al llegar a la habitación continúa, visualizo a un grupo de niñas. Todas ellas estaban acostada en la alfombra viendo una novela romántica.

Analizó a la primera niña e inmediatamente pensó: "Kotomi Ichinose. Cabellera larga de color morado. Ojos azules. Edad: 7 años. Tranquila, inteligente y sobretodo muy callada. Padres: Tokiya Ichinose y Otoya Ittoki."

Hace 7 años atrás Otoya y Tokiya creían que con los gemelos pondrían final a la familia. Pero al parecer la vida está llena de sorpresas, al igual que lo habia sido el nacimiento de Kotomi, su segunda hija. A pesar de todo, se dice que un hijo siempre es motivo de alegría, y Kotomi no fue la excepción. 

Luego posó su vista sobre la niña que estaba al lado de la anterior.

-"Reika Kurosaki. Cabellera ondulada y larga de color plateado con flequillo de costado. Ojos rosados heredados del ojo derecho de su padre. Edad: 7 años. Rebelde y malhumorada, apesar de no parecer muy amigable, tiene un lado dulce. Padres: Ranmaru Kurosaki y Reiji Kotobuki."-

Reika fue concebida gracias a la insistencia de su madre. Como era de esperarse, Ranmaru no queria tener mas hijos, "con Rei es suficiente" fueron las palabras que le dijo a Reiji. Por supuesto, el castaño no se dio por vencido y, luego de insistir,seducir y provocar a RanRan, por fin logró quedar encinta. Aquellos 9 meses fueron un "infierno" según Ranmaru, porque su esposo comenzó a tener antojos muy "peculiares" más exactamente extraños, los cuales eran pedidos a cualquier hora, no importando que sean las 5 pm o las 5 am. Aunque debía admitir que había momentos buenos, ya que Reiji habia comenzado a tener un apetito sexual insaciable. 

Al nacer Reika, supo que había conseguido a una aliada, ambos se llevaban muy bien, dado a que sus personalidades eran similares. Ahora no estaba tan solo en la guerra contra Reiji y Rei. Porteriormente, Reika se convirtió en "la niña de papá".

Después miro a dos niñas muy parecidas.

-"Mikaela y Elizabeth Aijima. Cabelleras rubias hasta la mitad de la espalda. Ojos celestes. Edades: 8 años. Padres: Cecil Aijima y Camus, Conde de Permafrost."-

Luego de aquel incidente con el condón hace 8 años atrás, Camus quedó embarazado por segunda vez. El conde de Permafrost, que no tenia pensado tener mas hijos,  al enterarse que estaba encinta, se molesto tanto que no dejo que Cecil lo tocará por un mes entero, aquello le había enseñado al príncipe de Agnapolis a tener más cuidado si no queria que su esposo le prohibiera tener contacto físico.

A diferencia de su primer embarazo, Camus habia aumentado considerablemente de peso en este embarazo, consiguiendo algunas burlas por parte Ranmaru. Claro que Kurosaki tuvo que disminuir sus bromas, ya que Camus en tal estado sufría constantemente  cambios de humor, los cuales llegaban a ser muy agresivos si lo molestaban, y el peliplateado no queria tentar a su suerte. 

De aquel embarazo, nacieron Mikaela y Elizabeth, las mellizas de la Familia Aijima. Las pequeñas eran, prácticamente, la versión femenina de Camus, heredando su aspecto como su personalidad.

Posteriormente, observó a la siguiente y última niña.

-"Naomi Shinomiya. Cabellera rubia hasta la altura de los hombros. Ojos verde oliva. Edad: 7 años. Simpática, carismatica, valiente y un poco tsundere.

El concepción de Naomi fue buscado con mucha insistencia por parte de Natsuki y Syo, que luego de un año lograron que el pequeño rubio quedará encinta. Al nacer la pequeña, todos quedaron encantados por su nacimiento, ya que la pequeña era preciosa. 

-"Al parecer, todo esta bien".- pensó y se retiró del lugar para seguidamente bajar al primer piso.

La cena ya se había llevado a cabo hace no mucho tiempo sin ningún tipo de interrupciones. Al parecer las cosas marchaban bien.

Finalmente, decidió ir hacia la sala de juegos.

Se adentro en la habitación y vio a  muchos niños de pocos años de vida.

De pronto, sintió un leve tirón en su pantalón. Bajo la vista y miró a un pequeño pelirojo de ojos del mismo color.

-¿Que sucede, Toshio-chan?.-

-Mikaze-san, ¿Quiere jugar con nosotros?.- le pregunto el pequeño que lo miraba con ansias, esperando que la respuesta fuera afirmativa.

Toshio era el hijo más pequeño de la Familia Ichinose y, seguramente, el último. El pequeño era la versión miniatura de su madre, Otoya Ittoki. Con lo que respecta a su personalidad, era normal, una mezcla de ambos padres, atento, alegre, inteligente y serio cuando lo requería la situación.

Aparto la mirada del pequeño y observó como un grupo de infantes lo miraban de la misma manera que el pelirojo. Sin poder negarse a esas miradas, asintió con la cabeza accediendo a jugar al juego.

-¡Bien! Jugaremos a las escondidas. Te toca contar a ti.-le dijo el pequeño pelirojo y salio corriendo para poder esconderse, siendo imitado por los demás niños.

Se dio media vuelta, mirando hacia la pared y contó en voz alta hasta cincuenta. Al terminar de contar, observó la habitación, aun podía escuchar algunas risas provenientes de los niños.

De pronto, observó como, de una montaña de peluches, se caía un osito de felpa. Dispuesto a encontrar a cada uno de los pequeños, y con la idea de resultar ganador del juego, se dirigió hacia allí. Una vez delante de la montaña de peluches, pudo visualizar una cabellera tan rubia como la de Ren Jinguji.

Se acercó a la montaña de peluches y dijo.-Te encontré, Mayumi-chan.-

La montaña de peluches se desplomó, dejando ver a una pequeña niña.

-Mikaze-san es un experto en este juego. Me encontró muy rápido.-dijo la niña con una adorable puchero en su rostro.

Mayumi era la pequeña hija de Ren y Masato de 4 años de edad. Hace casi tres años, en un leve descuido de parte de ambos padres, Mayumi fue concebida. Para nadie fue sorpresa el embarazo de Masato, ya que sabían que la pareja tenía una vida sexual muy activa. La niña tenía un parecido excepcional a su padre, siendo, practicante, la versión femenina de este. A diferencia de sus hermanos, ella era mas del tiempo cariñoso e inocente, siendo la mezcla perfecta entre la seriedad de Masato y el carácter tan divertido de Ren.

 

Volvió a observar detalladamente la habitación, notando como la cortina de una de las ventanas se movía. Confiado de que encontraría a algún niño, se acercó a la cortina.

 

-Los encontré.-dijo mientras movía la cortina dejando al descubierto a tres niños.

 

-¡Nos encontraron! ¡Perdimos!.-dijeron al unísono los tres niños.

 

-¡Woow! Encontró a "los trillizos de oro".-decía Mayumi sorprendida y a la vez fascinada.

 

Hace un poco mas de 4 años atrás, paso algo que dejó sorprendidos a todos...El tercer embarazo de Syo no extraño a nadie, después de todo, solo tenia dos hijas y era una familia pequeña. Lo que desconcertó a todos en realidad fue que de aquel embarazo nacieran ¡Trillizos!.

 

Aquellas personas que habían cargado con el embarazo, compadecían al pobre Syo, ya que poseían un cuerpo muy pequeño y frágil como para cargar con aquel embarazo. Afortunadamente, todo resultó bien, y así nacieron los trillizos, compuestos de dos niños y una niña llamados Nagato, Natsu y Nagisa, o como se presentaban a sí mismos, "Los trillizos de oro". Los pequeños rubios poseían unos ojos tan azules como los de su madre. Eran muy amigables, traviesos e inseparables.

 

Decepcionados, los pequeños rubios se sentaron al lado de Mayumi, quien esperaba, pacientemente, a que encontrarán a todos.

 

-"Sólo quedan tres. Si no me equivoco, mientras contaba, creí escuchar unos pasos que se dirigían hacia detrás del sofa".-con eso en mente se encaminó hacia dicho lugar.

 

Como espensaba, encontró a otro infante detrás del sofa, que en este caso fue una pequeña pelirosa con ojos del mismo color.

 

-¡Akane-chan, te encontré!.-dijo con una leve sonrisa.

 

-¡Ya perdí! Bueno, al menos dure un poco más que los demás.-dijo mientras se dirigía hacia donde estaban sus amigos que habían sido encontrados.

 

Akane era la hija adoptiva de Tomochika y Haruka. La pequeña poseia una larga cabellera rosada y tenia el flequillo hacia un costado. Sus ojos eran tan rosados como su cabellera. Ella es muy amigable y timida en algunas ocaciones. La historia de cómo adoptaron a Akane no es muy agradable para nadie.

 

Hace 3 años atrás, en uno de los paseos nocturnos de la pareja, escucharon leves llantos provenientes de un callejón oscuro. Un poco asustadas, se acercaron al oscuro lugar donde aquellos llantos parecidos a los de un bebé se volvían más audibles. Apresuradas, comenzaron a buscar rápidamente. Al poco tiempo, entre algunas bolsas de basura, en una caja, encontraron a un pequeño bebé envuelto en mantas. Sin perder tiempo se dirigieron al hospital donde atendieron a la pequeña. Al parecer, Akane había sido abandonada hace unas pocas horas de haber nacido. Por suerte, su salud no corría peligro.

 

Como nadie había reclamado por la tutoria de la pequeña, ellas la adoptaron. Los pocos días que pasaron con la pequeña en el hospital habían bastado para encariñarse con ella. Así fue como Akane llegó a sus vidas para iluminarlas junto con Tomoe.

 

-"Ahora solo quedan dos. Pero me costará un poco encontrarlos, ya que ambos son muy competitivos".-pensó.

 

 La habitación se encontraba en silencio, parecia que no había rastros de ellos, hasta que en un descuido por parte de uno de los dos, se escuchó el chillido de un pato se hule.

 

Se acercó lentamente hacia la mesa y levantó el mantel, dejando a simple vista a un pequeño castaño de mirada grisácea.

 

-¡Te en-con-tre, Raito!.-dijo con tono animado.

 

-¡No puede ser! ¡El pato me delató!.-dijo malhumorado por haber sido descubierto, sentándose al lado de Akane.

 

Raito Kurosaki había nacido hace tres años atrás, como producto de otro capricho de Reiji. Al parecer, el castaño sentía que aún tenía mucho amor que dar y viendo que los demás, como Masato y Syo, tenían más hijos, decidió agrandar la familia. Al cabo de meses, nació el pequeño Raito. Al igual que en el caso de Otoya y Toshio, Raito era la versión miniatura de Reiji, heredando su personalidad y su apariencia. De este modo, Reiji, Raito y Rei unieron sus fuerzas para molestar a "RanRan" y de vez en cuando a Reika.

 

-"Perfecto. Solo queda uno".- pensó pero al instante escuchó un "gane" y vio a Toshio con una mano en la pared donde él había contado hasta cincuenta.

 

-Perdí...-susurro mientras veía como los demás infantes se acercan a festejar con el pelirojo.

 

Se quedó sumergido en sus pensamientos hasta que una de las muchachas que lo ayudaban lo llamó.

 

-Mikaze-sama, Anthony-chan se despertó.-

 

-Ya es hora de su biberón.-dijo mirando el reloj de la pared.- Iré a su habitación. Ve a la cocina y prepara su leche.-

 

La muchacha asintió y salio de la habitación para acatar dicha orden.

 

Camino por los largos pasillos de la mansión, se detuvo frente una habitación que tenia un cartel en la puerta que decía "Anthony", e ingreso al lugar.

 

Las paredes del lugar estaban pintadas de color celeste y tenia ilustraciones de nubes.

 

Al adentrarse en la habitación pudo visualizar una cuna de color verde agua.

 

-¡Hola,Tony-chan!.-dijo en tono divertido sabiendo que eso le agradaría el bebé que lo miraba curioso desde la cuna.

 

El pequeño Anthony balbuceo pocas palabras inentendibles muy feliz.

 

Finalmente, la muchacha se acercó con el biberón y se lo dio al peliturquesa.

 

Ai alimento al bebé y seguidamente se lo entrego a la muchacha para que lo recostara en su cuna. Antes de irse, pudo ver como el pequeño bebé dormía abrazando un neko negro de peluche.

 

-" No es tan complicado cuidar de ellos...".- pensó ingenuamente mientras se dirigía a completar nuevamente su recorrido por las demás habitaciones.

 

Mientras tanto en cada habitación habían surgido varias disputas y malentendidos pero con ayuda de las muchachas pudieron resolver cada problema.

 

Ese día, Ai aprendió a no subestimar la paciencia de los padres de aquellos niños. Aunque su trabajo de niñero no había terminado, ya que no había podido llevar al cabo su investigación por completo.

 

Luego de unas horas, los padres regresaron y se llevaron a sus hijos, y él volvió a su hogar.

Los padres de estos adolescentes y pre-adolescentes saben que la adolescencia en un cambio drástico y estarán dispuestos a ayudar a sus hijos. Claro que la vida no es color de rosas y no todo están fácil como parece. Sumando la paternidad con adolescentes también deberán cuidar de sus hijos mas pequeños que fueron llegando a este mundo en estos últimos 8 años.

Continuará...

 

Notas finales:

¡Gracias por leer! Dejen comentarios, please!

Bye~


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