-Todos estos años desperdiciados luchando entre nosotros, Charles-exclamo magneto mientras contemplaba probablemente por ultima vez a su querido amigo de tantos años.
Se encontraban a merced de los centinelas quienes ya los habían encontrado por mas que habían intentado ocultarse. Y justo en ese momento en que vio todo por perdido. Que vio a sus últimos aliados mutantes caer ante las maquinas. Creación de los homosapiens. Fue que se dio cuenta de todo el tiempo desperdiciado a lo largo de su vida. Cuantas cosas dejo pasar por su ira, por su rencor y convicción. Que no estaba errónea después de todo, ya que ahora muchas décadas después estaban siendo exterminados por los humanos como el tanto temió.
Erik contemplo a su viejo amigo quien lo miraba preocupado desde su silla de ruedas mientras el sostenía su abdomen para detener la hemorragia. Contemplo esa misma expresion que aun a lo largo de los años no habia cambiado. Charles siempre solía hacer ese gesto de preocupación cuando algo le ocurría, no importaba que tan pequeño o grande fuera, charles siempre mostraba ese misma expresion de miedo. Tenia miedo de que el se hiciera daño. Como si fuera un niño pequeño. Y eso él lo agradecía.
-demonios!!- grito muy enfadado. Y charles corrió a su lado. -¿estas bien Erik?- pregunto algo preocupado al ver esos ojos entrecerrarse en coraje. -me estoy quejando ¿ tú que crees Charles?- dijo. Sobándose el dedo amoratado por culpa de la alacena de madera. El castaño dejo salir una risa que no agrado al principio al polaco pero que dejo pasar. -no todo es de metal en esta casa, deberías aprender a manejar todo lo demás de mejor manera si no quieres mas accidentes- Erik bufo ante el comentario. -pues deberías cambiarlos- dijo con la ceja alzada y una sonrisa ladina.
-ni hablar! ¿Sabes lo viejo que es todo esto? Es una antigüedad Erik- exclamo exaltando viendo a sus muebles como unas obras de arte y Erik no pudo evitar reir. -eres como un anciano Charles- sonrió el magnético. El telepata lo fulmino por un momento para recobrar su compostura elegante de siempre.
-no soy un anciano, solo que se apreciar las cosas de una manera diferente- se defendió orgulloso
-¿como un anciano?- dijo. Alzando una ceja en forma de burla mientras cruzaba los brazos y se apoyaba en la barra de la cocina. Charles entrecerró los ojos y Erik supo de inmediato lo que vendría a continuación.. Se preparó y espero a Charles a que le lanzara un puño en juego pero el lo detuvo en el aire para jalarlo a él y luego imposibilitándolo con sus brazos cruzados. El menor forcejeaba entre sus brazos pero por mas que lo intentaba no lograba zafarse. Después de todo el castaño era mas pequeño, y delgado que el. -¡Erik basta, suéltame!- dijo el castaño algo molesto. Pero los ojos fulminantes del menor no inmutaron al magnético quien se carcajeaba con fuerza al ver aquella lucha inútil. Erik habia olvidado del número de veces que se habia reído desde que conoció al telepata. Puesto que Antes de aquella noche en la que Charles lo encontró en el mar intentando matar a Shaw. Erik no era capaz de recordar cuando fue la ultima vez que se permitió reir o cuando se habia sentido en confianza con alguien mas. Ni siquiera estaba seguro si alguna vez fue capaz de hacerlo.
-no seas amargado Charles- dijo riendo. Pero al no escuchar una queja por parte de su amigo se sorprendió. Bajo la vista para ver con mayor claridad lo que hacia el castaño topándose con un Charles colorado hasta las orejas.
Charles era un hombre caucásico, tenia una piel extremadamente blanca con pequeñas pecas a lo largo de su cara, haciendo facil notar sus colores. Erik miro extrañado al telepata quien intentaba cubrir su rostro de el. Volteándolo de lado. Y por primera vez en su vida Erik sintió un deseo por besar a alguien. Ante eso, soltó su agarre de inmediato y menor se alejó aun con la vista cabizbaja. -¿perdón...?- dijo. Y el telepata solo negó algo avergonzado -esta bien Erik, no estaba enojado- dijo con una sonrisa que demostraba su vergüenza. Charles se dio la vuelta para salir de la cocina pero antes de irse se giro a mirar a Erik quien no había apartado su vista de el.
-Erik ¿quieres jugar una partida de ajedrez conmigo?- comento. Apoyando la mano en el muro de la habitación. -por supuesto- respondió. Y Xavier sonrió ante su respuesta inmediata -te veo entonces en el estudio a las 9:00 pm. amigo- dijo para retirarse nuevamente. Y Erik se quedó allí pensando en lo ocurrido.
Ambos se encontraban mirándose desafiante el uno al otro, sin la mínima intención de perder. Desde que Erik había descubierto que Charles era un amante de los juegos de ajedrez, el buen licor tanto o más que él. Habían pasado la mayor parte de las noches jugando en el estudio con un buen vino o wisky en mano. El magnético comenzó a disfrutar eventualmente de esos pequeños momentos con su amigo. Después de todo Charles era la primera persona a la que podía considerarlo así. Como su amigo.
-sabes Charles, a veces pienso que te metes en mi mente para saber que jugada hare- dijo con simpleza mirando a un sus posibles piezas. El telepata alzo la vista y ladeo la cabeza con una sonrisa en sus labios -oh no. Jamas haría una cosa asi. No es etico mi amigo- dijo mirándolo a un divertido por el comentario -tan solo digo. porque me resulta extraño que siempre atines mis movimientos- respondió. Con gesto divertido mientras tomaba un sorbo de su wisky.
-yo no le veo lo malo. No estoy entrando en tu mente, mas bien diría que tenemos una buena conexión ¿no te parece?- y ante ese comentario Erik lo miro fijamente. Habia sido un comentario bastante directo pero por el tono en que el castaño lo había dicho termino removiendo algo en el. Se mordió el labio y luego rio. -si, tienes razón. Igual lo creo- ambos compartieron una mirada de medio lado y de igual forma sonrieron, sus ojos chocaron sobre encima del tablero por un segundo en el que fue perfecto, para luego continuar su juego.
***
-un tiburón...- exclamo algo sorprendido.
-¿como?- pregunto al ver los ojos brillantes de su amigo quien sonreía tan deslumbrado.
-tu sonrisa. en ocasiones haces esa sonrisa que hace ver todos tus dientes y pareces un tiburon. Me gusta. Es linda. Deberías hacerla mas seguido, darling- dijo el menor señalando su boca para mostrarle la forma en que el otro lo hacia. Erik bufo y lo codeo al oírlo.
-¿en que pensabas Erik?- pregunto algo intrigado al ver como el otro sonreía tan feliz.
-estas loco Charles. No pensaba en nada y no hago ni una sonrisa tonta-exclamo algo avergonzado. Después de todo él era Erik lehnsherr. El no se reía como idiota y por Dios que no era lindo. Y por supuesto que no iba a contar estar recordando a Charles caerse varias veces mientras entrenaba Hank esa tarde.
***
-quieres ayuda Charles?- dijo Erik al ver a su amigo llevar unas cajas demasiado pesadas para alguien de su complexión. Charles sonrió agradecido en aceptación ante la pregunta y Erik no dudo en ir a su lado. Aun sin el consentimiento del hombre Erik estaba seguro que iría ayudarlo siempre.
***
Por una extraña razón que ni el conocía detestaba el hecho de que Moira se paseara por toda la mansión intentando coquetear con Charles, porque eso hacia. No estaba trabajando como se suponía que debería hacer, en cambio andaba tras el castaño que aun siendo telepata no llegaba a notarlo.
Estúpida Moira y estúpido Charles.
***
-¿todo esta bien Erik?- aquellos ojos azules se clavaron directamente a sus ojos y Erik sintió como el corazón le latía con fuerza. Estaba acostumbrado a mirarlos y el menor siempre tendía a mirar directamente a los ojos con quien hablara. Pero esta vez estaba distraído y no esperaba tenerlo tan cerca suyo de esa manera. El menor se había puesto detrás de el mientras disfrutaba del aire que soplaba en el jardín. Charles volvió a mirarlo esta vez entrecerrando sus ojos en ese claro ejemplo de preocupación.
-estoy bien Charles- exclamo finalmente para no ser interrogado por el ingles. Este suspiro viendo marchar al mayor y un gesto de tristeza se formó en sus rostro.
odiaba verlo asi pero ¿que iba a decirle? ¿que estaba molesto
Porque Moira andaba ofreciéndosele como todo una puta? ¿ y que para colmo a el le molestaba en verdad? No podia simplemente hacerlo porque ni siquiera el tenía idea de porque tenia deseos asesinos en esos momentos.
***
-¿que haces aquí afuera Charles?- dijo el mayor al ver a su amigo a lo lejos sentado en una de las bancas de piedra que el magnífico jardín poseía. Charles lo miro y en respuesta le sonrió indicándole que se acercara, Erik no dudo en ir con el ante la invitación.
-solo contemplaba la noche, sabes, he vivido toda mi vida en este lugar pero casi nunca me detuve mirar las cosas que poseía. No se, tal vez a que siempre pensé que estarían aqui cuando quisiera tomarme el tiempo de admirarlas. Pero ahora, que estamos en medio de una guerra... tal vez y no las vuelva admirar- ante aquello Erik no supo que contestar. No podía asegurarle al hombre que todo iba a salir bien, que si ganaban el estaría completamente ileso. Estaba seguro de que ganarían, de que matarían a Shaw porque dependía su vida de verlo muerto. Pero. Mas allá de eso no habia nada que el pudiera garantizar. Charles lo miro por un momento, estudiando sus facciones y un largo suspiro se dejo escapar.
-tal vez son solo tonterías, saldremos bien de esto, estamos todos juntos, y nosotros cuidaremos de esos chicos ¿verdad?- dijo. Y Erik no pudo evitar sentirse culpable al sentir su corazón latir al oir el "juntos". Cuando el ingles estaba expresando sus preocupaciones pero Charles hablaba de un juntos, como una familia. Y el "nosotros" como solo ellos dos. Erik se sentó a su lado en el espacio que Charles habia dejado para el. Lo miro por unos segundos contemplando aquellos ojos azules intensos que se veían medio a adormilados. Después de todo ya eran pasados la medianoche era normal que estuviera cansado. Por lo mismo, tomo al menor por el hombro y lo acerco a el. Dejando posar la cabeza ajena en su cuerpo. lo acaricio por unos minutos, sintiendo aquel rígido cuerpo dejarse llevar por su tacto, Erik sintió como este se iba relajando, como la respiración ajena se tranquilizaba a momentos. Hasta quedarse dormido en sus brazos. El polaco no pudo evitar mirar esa piel que a la poca luz de la noche se veia mas increíblemente blanca, las pecas de su nariz adornaba su rostro, esas pestañas largas dejaban sombras debajo de sus pómulos al dormir. Y Erik suspiro ante esos labios increíblemente rojos, delgados y hermosos, Charles era un hombre increíblemente hermoso y perfecto.
***
Las partidas de ajedrez se habian vuelto cosas suyas. Era algo que tenían en común tanto el ingles como el, disfrutaban de aquello tanto como el hablar sobre mutantes, el buen licor y libros. Tenia que reconocer que Charles era un hombre fascinante.
-eres un hombre fascínate darling-dijo en susurro, Erik alzo la vista. Contemplando a su amigo quien lo miraba con una sonrisa brillante como si contemplara la criatura mas magnifica de todas. Y el no pudo evitar sentirse avergonzado por un segundo. -te toca mover Charles- exclamo. Mientras miraba cuidadosamente la jugada de su amigo.
-creo que de los dos, tu eres incluso mucho mas fascinate- susurro esperando no ser oido. Pero aquellos ojos azul intenso y el sonrojo en las mejillas del castaño le rebelaron que no solo habia sido escuchado sino también correspondido.
Aquella noche el unico sonido de la noche fue el de las piezas de ajedrez moverse sobre el tablero.
****
Te vez muy bien Charles, no le busques mas- dijo. Mientras apoyaba su cuerpo en el umbral de la puerta de la habitación del telepata. El menor lo miro sobre el espejo devolviéndole una sonrisa alegante. -¿no te enseñaron a tocar darling?- dijo sin quitar la diversion de su rostro mientras acomodaba su chaleco y el otro negó con la cabeza divertido -me parece que no. No tienes que arreglarte tanto, solo iremos a tomar tu y yo- comento el polaco al ver como Charles perfeccionaba minuciosamente cualquier detalle de su apariencia que no le pareciera. Le gustaba que su amigo fuera tan elegante y perfeccionista consigo mismo pero a veces era extraño que hasta en la mansión lo fuera. Era su casa después de todo podía hacer lo que quisiera.
-un hombre con estilo siempre es bien visto mi amigo y quien sabe, puede que hoy conozca a alguien- dijo mientras silbaba y Erik entendió que eso habia sido un comentario coqueto hacia nadie en particular. Charles estaba pensando en ligar esa noche y por una extraña razón el se sintió molesto. -solo apúrate ya- dijo para darse media vuelta algo irritado. Xavier lo miro extrañado ante su accion pero no dijo nada. A veces judío solía tener ataques de ira entre momentos. Eran algo tan de el.
Al llegar al bar se sentaron en una mesa al fondo, Erik habia sido quien habia escogido el lugar. Aunque Charles habia insistido de sentarse cerca de la pista de baile seguramente para tener una mejor vista de las posibles presas de esas noches Erik Habia negado rotundamente esa petición excusándose de que detestaba el ruido excesivo. Preferia hacer las cosas mas en privado y ante eso el telepate no pudo negar nada. conocía el pasado de su amigo y sabia lo incomodo que llegaba a ponerlo estar rodeado de gente. Asi que decidió darle una noche tranquila tomando unas cervezas y conversando entre ellos.
Mientras tomaban, Erik noto el sonrojo que se formaban en las mejillas de su amigo. Con cada cerveza que pasaba podia ver como crecían. En un principio se sorprendió de ello, pero luego de dar un vistazo en la mesa no se extraño tanto. De los dos, charles era quien mas había bebido. Para ser alguien tan elegante y pequeño tomaba como solo el podía. Erik se preguntaba si no tenia un problema con el alcohol o algo asi. -no soy alcohólico Erik- dijo algo pastoso mientras se llevaba una cerveza a la boca. Erik fruncio el ceño al ver que habia leido su mente cuando se suponía que no debería hacerlo.
-lo siento, no quería leer tu mente... a veces me pasa cuando estoy muy cerca de alguien o cuando estoy tomando- dijo algo triste mientras miraba las huellas de agua que habían dejado su cerveza sobre la mesa.
-esta bien, solo no lo hagas seguido- comento algo mas convencido ante lo dicho. se llevo a la boca su cerveza mientras miraba a lo lejos la pista de baile y a todos los homosapiens quienes disfrutaban de ello. El nunca habia sido buen bailarín ni cuando era niño mucho menos ahora en su adultez debido a que jamas volvió a intentarlo y ahora ni le parecía algo de lo cual divertirse.
-deberias intentarlo, estoy seguro que serias un gran bailarin con esas piernas tan largar que tienes, aparte estoy leyendo desde aqui a un par de señoritas quienes se mueren de tener el honor de bailar contigo- dijo riendo mientras limpiaba su lado de la mesa –charles…- gruño en advertencia. Le habia dicho que no lo hiciera y pareciera que el no entendía. comprendía lo difícil que era para el controlarlo mientras bebía pero entonces con un demonio debía dejar de tomar. Le aparto la botella de la boca y la coloco a un lado de la mesa molesto. El menor bufo haciendo un puchero que por un momento desconcertó al magnético. Estaba molesto no debería parecerle adorable el gesto ajeno. Pero tambien era cierto que el telepata era algo... ¿adorable? Lo era, A veces cuando no entraba en modo super genio. Que lo cierto era que lo irritaba.
-disculpen caballeros ¿si estan solos no les importaría hacernos compañía?- dijeron unas jóvenes quienes sonreían coquetamente a los dos. Erik aparto la vista sin animos de ligar con nadie esa noche pero charles se veia mas que dispuesto a aceptar -claro que si señoritas, nos encantaría-dijo apoyándose mas sobre la mesa acortando el espacio entre una de ellas. Erik bufo. Podía ser que el telepata estuviera al tope de ebriedad pero siempre iba a mantenerse lo suficientemente cuerdo para hablar con esa elegancia inglesa que solo el poseia.
Una vez en la pista Erik podia observar a su amigo quien bailaba con ambas chicas pues el se habia negado. Podia ver la expresión de ambas mujeres que aun sin que el fuera telepata estaba seguro que ambas querian llevárselo a la cama. La forma en que escaneaban su cuerpo de entre su pecho hasta su virilidad era sumamente molesto. Si algo odiaba era a las mujeres vulgares. Y ellas se ganaban el premio. Luego de unos momentos una de ellas se animo acercarse lo suficiente a charles para susurrarle al oido algo que por el cambio de expresión en el hombre termino molestándolo mas. ¿porque siempre terminaba encabronado con algo que tuviera que ver con ingles?. Erik se acercó de inmediato al trio y como si fuera oportuno tomo al telepata del brazo
-nos vamos- afirmo el mayor. Charles lo miro desde abajo con un puchero por lo ebrio que estaba
-no aun no- dijo pastosamente. Atrayendo a su amigo con un abrazo a su cintura. Eso estremeció a Erik, solo por un segundo ya que su fastidio era mayor. -mi amigo, estas dulces jovencitas me han propuesto una invitación que no estaria mal rechazar- exclamo el castaño sin dejar de Mandarle miradas coquetas a las chicas. Erik no podia dejar de revirar los ojos cada vez que el hacia eso.
-si tanto quieres quedarte con ellas adelante, yo me voy- afirmo. Soltándose del abrazo del menor quien lo miraba con esos ojos de cachorro que a veces solía hacer. No entendia como un hombre asi de sumiso en sus expresiones faciales pudiera tener tan buen toque con las chicas. Se dio media vuelta pero antes de poder irse del establecimiento una chica se chocó contra el. Si ya estaba molesto, el hecho de tener que soportar ahora a alguien golpeándolo era la gota que derramaba el vaso. Fulmino a la chica que se encontraba frente a el pero al ver esos ojos azules mirándolo todo su coraje se desvaneció. La chica frente suyo era muy bonita. Su cabello era largo y castaño y su piel muy blanca, eso sin contar que tenia unos buenos atributos. Si la veia bien aquella chica tenia un parecido a... Dios no!! Solo era bonita.
-lo siento..- comento la chica avergonzada y el negó de inmediato.
-no, esta bien fue mi culpa iba muy deprisa- y ella sonrió mientras peinaba su cabello hacia atrás.
Erik se dio cuenta que tal vez esta era su golpe de suerte, una linda chica le haría bajar su mal humor. Y si charles ya tenia dos ligues con las que era seguro que tendria un revolcón no estaria mal que el hiciera lo mismo. Pero antes de poder avanzar en su movida un agarre lo hizo volver en si.
-Erik ya lo pensé mejor, vámonos-dijo con una sonrisa que hasta el percibió como fingida. En un principio pensó negarse. Si el se lo habia echo cuando se lo habia pedido al primero entonces que el telepata igual se aguantara. Pero esa sonrisa entristecida, y pastosa termino convenciéndolo.
-de acuerdo- la sonrisa que mostro su amigo fue perfecta para conmemorarla en una foto. Charles se mordía el labio divertido mientras jalaba del brazo al magnetico para irse.
-pensé que estaba yendo todo bien con aquellas chicas- comento Erik quien conducía por obvias razones. Charles ladeo la cabeza sin saber realmente que decir. -no lo se, simplemente se me acabaron las ganas- dijo. Y un largo silencio los abordo. Lo cierto es que al polaco los silencios no lo incomodaban, de echo los apreciaba. Pero estando con charles siempre prefería hablar. Se alegraba que el telepata prefiriera irse con el en vez de pasar la noche con esas chicas. Pensaba que probablemente habia leído sus mentes y visto algo desagradable que no le hubiera gustado del todo. Estaba ebrio después de todo y no era muy bueno manteniendo sus poderes.
-y… asi que conociste a una chica- aquello habia desconcertado al magnetico. Miro de reojo al castaño quien tenia la vista cabizbaja. -si. No pude preguntarle su nombre- explico con simpleza. Porque aquello no era la gran cosa. Si era bonita pero no era importante. Pero aun siendo algo común no paso desapercibido para Erik el como el cuerpo del menor se tenso. Se habia puesto rígido y prefería mirar a la ventana pensativo. Eso sin duda era interesante.
-si bueno... pensaba llevármela a la cama- ¿Por qué habia dicho eso? No tenia idea pero gracias a eso podo observar como el cuerpo ajeno se volvía a tensar esta vez enterrando sus uñas en el cinturón de seguridad. Charles seguia sin mirarlo precisamente. Y Erik tenia curiosidad del porque se veia tan deprimido. ¿acaso le molestaba que conociera a una chica? El también habia ligado esa noche no era como si el se llevara toda la diversión dejando a Charles atras. ¿entonces que le molestaba tanto? Porque sabia que molesto era como estaba. O tal vez a el tambien le habia gustado la chica. Si. eso era lo mas lógico, a su amigo también le habia llamado la atención tan bonita chica. Por eso andaba tan fastidi...-no me gusta la chica. ni estaba tan bonita por Dios- ante aquello el judio no pudo evitar congelarse. ¿acaso estaba proyectando o estaba leyendo su mente todo este tiempo? Maldito charles ebrio que no podía controlar su endemoniada mutación. Si era tan malo cuando tomaba simplemente tenia que dejar de tomar.
-xavier... crei haberte dicho que no lo hicieras- su voz habia salido ronca por el esfuerzo de no gritar. Charles se encogió de hombros avergonzado porque sabia que habia echo mal.
-lo siento... no era mi intención…- pero eso no era suficiente para calmar a un Erik quien ya estaba mas que molesto. Por suerte ya habian logrado llegar a la mansión. Erik estaciono el auto y bajo deprisa molesto sin siquiera mirar a charles quien iba tambaleándose detrás de él.
-Erik espera!!- dijo con su voz pastosa y su rostro enrojecido. El magnetico lo miro un segundo de lado, charles se alivio de que no saliera corriendo a su habitación.
-Erik no era mi intención es solo que...-
-lo se. No puedes controlar tu mutación. Si eres tan malo cuando tomas ya no deberias hacerlo, es molesto- dijo Severamente mirando a su pequeño amigo quien baja la cabeza, formando ese puchero que habia visto toda la noche.
-pero es que tu no dejabas de pensar en lo linda que era ella- replico. Erik abrió los ojos ante lo dicho. ¿Esa era su molestia? ¿El que el pensara en lo linda que era una chica? El telepata si que era extraño.
--¿de que hablas charles?- el castaño lo miro alzando la ceja como si fuera obvio y su pregunta fuera estupida.
-desde que la viste solo pensabas en eso... y ella solo pensaba en pasar la noche contigo...- explico muy por lo bajo cruzando sus brazos en un claro enojo. Erik no pudo evitar conmoverse por el menor quien se veia tan infantil con sus expresiones.
-tu igual ibas a revolcarte con esas chicas y yo te deje porque eso era lo que querías- si el telepata ya habia empezado a reclamarle las cosas el tambien tenia permitido hacerlo. Habian cosas de las que queria hablarle, mas de esa noche, mas que otras ocasiones, en que andaba de coqueto.
-pero no lo hice. Me porte bien - refunfuño el menor tomando la camisa de su amigo como si no quisiera que se fuera. Este lo miro extrañado. Realmente debía estar ebrio el hombre, porque nunca lo habia visto comportarse asi.
-de acuerdo tienes razon eres un chico bueno Charles- los ojos del castaño brillaron ante eso. Realmente estaba feliz de que Erik lo reconociera y le dijera lo bien portado que era.
Su sonrisa se ensancho y en plena oscuridad los rojos labios del hombre se enmarcaron. Charles se abrazó a el estabilizándolo, Erik lo miraba estupefacto. El menor se acurrucaba a su cuerpo arrugándole la prenda que llevaba puesta con una clara sonrisa risueña. Dios, en ese momento Erik juro que no dejaría que el telepata bebiera solo. O al menos no con alguien mas que no fuera el. su amigo se veía tan encantador en ese estado, abrazado a el, regalándole esa sonrisa tan santurrona de un niño picaro. estando sobrio jamás se permitiría tener este lujo ya que el hombre era demasiado recto y elegante para permitirse un acto asi. Que estaba seguro, de que causaría un trauma en el.
-bueno, vamos a dormir ya...- dijo el mayor tratando de enderezar a su amigo ebrio. Pero al sentir como su cuerpo era apartado Charles se abrazó con mas fuerza a él sin deseos de dejarlo ir.
-mmmhh- negó de inmediato posando su nariz sobre la delgada tela de su camisa. Erik sintió un cosquilleo recorrerlo ante el tacto, podia sentir la respiración ajena sobre su pecho provocándole una sensación de calidez. El inglés se veia tan exquisito y aunque su aliento era de alcohol puro no disminuía su gran belleza, esos labios estaban mas enrojecidos de lo normal incluso podia jurar que se veian levemente hinchados. ¿acaso se habia estado besando con alguna de esas mujeres? Maldita sea. Una ráfaga de celos que ni el conocía comenzó a invadirlo. Atrajo al menor con mas fuerza juntando sus cinturas. Y sintió un jadeo por parte del ingles. Joder. Charles era sumamente sensible. Y eso sin dura era sexy. Sus respiraciones se juntaron entre cortadas, ambos estaban cansados y ebrios. Aquellos ojos increíblemente azules brillaban, clavándose en sus orbes celestes. Eran tan hipnotizantes, podía mirarlos toda una vida y jamás se cansaría de ellos. Si tan solo... si solo por un momento el pudiera ser capaz...de... Dios, Cuando finalmente reacciono, se encontraba unido al telepata. Ambos compartían un beso torpe pero al fin de cuentas era un beso. Que provoco una descarga de placer a lo largo de su cuerpo. Por Dios estaba besando a Charles. En serio estaba tocándole y no necesitaba estar sobrio para saber que era lo correcto porque muy dentro de el, esto lo había deseado. Habia pasado probablemente todo el tiempo de conocer al hombre negandose este momento.
Tenia sentido pues pasaba gran parte de su tiempo observándole con tanto anhelo que él no comprendía. Pero que justo ahora tenia sentido.
Se habia enamorado de este increible hombre, inteligente, elegante y poderoso mutante.
Siguio besándole tomando el rostro ajeno con fuerza atrayéndolo mas a él. Queria sentirlo por un poco mas de tiempo pero justo en ese momento Charles abrió los ojos con pesadez.
-¿Erik...?- su voz sonó pastosa y adormecida. Y el judio entendió. Charles no estaba precisamente ahi. Solo era un hombre ebrio siguiendo instintos. La culpa lo recorrió de solo pensar en que se estaba aprovechando del hombre, solo porque a si el lo quería. Charles tomo su prenda nuevamente pero esta fue apartada. Dejando a un charles a medio dormir desconcertado. Erik habia subido las escaleras con suma prisa cerrando la puerta tras de si.
Se masajeo la cien sin saber exactamente que hacer.
¿y ahora que?, ¿como podria ver de nuevo al hombre sin sentirse avergonzado? Esperaba que el telepata estuviera lo suficientemente ebrio para no recordarlo mañana. Porque de no ser asi estaba seguro que jamas se lo perdonaría. Y el no queria que su primer y único amigo lo odiara. Todos menos eso.