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Xiumin, mi barista favorito (Xiuhan/Chenhun) por exolove1

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Notas del capitulo:

gracias a esa chica que dejó comentario!!!!

y a los lectores xD 

Luhan terminó por fin su turno en el bar Two Moons, donde parecía ser que seguiría el resto de sus días por el momento. No era que le importara, le encantaba el bar y la paga – sobretodo la paga – pero era un problema los clientes que de vez en cuando se acercaban con segundas intenciones. Ese bar era para tomar algo tranquilamente, no para buscarse ligues.


-Taemin, yo me voy yendo ya –Le avisó, el mencionado asintió.


-Claro, yo me quedaré un poco más –Dijo -¿No viene tu novio hoy?


-Sí, pero desde hace unos días me espera fuera. –Le dijo –Manías de él.


Taemin rió y siguió con su trabajo mientras Luhan se iba dentro, a los camerinos, para desvestirse y ponerse ropa normal. Se quitó todo el maquillaje que llevaba en el rostro y una vez vestido a su manera, habiendo guardado el uniforme, cerró bien y se fue por la parte trasera encontrándose a Minseok esperándole con una sonrisa ladeada en su rostro.


-Hola, Baozi –Saludó.


-Hola, Lu Ge.


Se acercaron para besarse como bienvenida, un corto beso que era suficiente para dejarles el sabor del otro en sus labios y la sensación de haberlos posado anteriormente. Una sensación agradable.


-¿Te he hecho esperar demasiado? –Preguntó mientras caminaban lentamente.


-No, tranquilo. Llegué un poco antes, en realidad, estaba aburrido y había terminado de editar el vídeo que subiré mañana.


-¿De qué será? Nunca me das pistas. –Se quejó haciendo un puchero.


Riéndose, pasó un brazo por las caderas de Luhan para atraerlo hacia él y caminar más pegados, como a ambos les gustaba, en medio de la noche.


-Ya lo verás mañana, cariño.


-Oh, cariño –Dijo riendo Luhan –Me hace ilusión que me digas así.


Minseok rió divertido.


-¿De verdad? Ca-ri-ño –Luhan paró de caminar para besarle apasionadamente, aprovechando que aún no salían del callejón. Minseok correspondió al beso con una leve sonrisa, moviendo su mano al trasero de Luhan, pequeño pero bien puesto que era lo que más le gustaba después de todo, atrayéndolo contra su cuerpo.


Porque estaban en la calle, que si no…


-¿Sabes? Creo que a Sehun le pasa algo y no me quiere decir –Le comentó a Minseok  unos minutos después.


-¿Tú crees? ¿Por?


-No sé, sale a menudo además veo que usa el móvil más tiempo para mandarse mensajes que para jugar juegos de esos raros… -Dijo –Es raro. No sé, quizás sean paranoias mías.


-Puede ser, pero el mayor eres tú. Lo conoces mejor que nadie, después de todo. –Dijo –En todo caso, Sehun es un adolescente, dale tiempo para que te cuente que puede pasarle.


-Supongo que sí, a todos nos gusta que nos den nuestro espacio después de todo, sobretodo cuando somos adolescentes –Comentó con una sonrisa –Aun me acuerdo de cuando era un adolescente, odiaba que me mandaran hacer algo o que me presionaran, a la mínima saltaba y gritaba.


Minseok rió divertido, imaginándose a Luhan cual adolescente rebelde.


-Eras un pequeño rebelde.


-Y tanto.


-Yo era más normal. Era el chico que se sentaba en una esquina al final de la clase, que pasaba desapercibido y que le gustaba así, el chico que sacaba todo dieces y que tenía a los profesores babeando por ser el lindo alumno estrella cuyo comportamiento tímido e inocente era solo una fachada para pasar desapercibido y conseguir todo lo que quería con más facilidad.


-Wow, eso es usar tu cara y lo demás son cuentos.


Minseok y Luhan rieron mientras seguían el camino hacia casa de Luhan, pues este se quedaría a dormir ese día en su casa.


-Claro que sí, no subestimes el poder de un rostro de bebé nunca.


-Ya lo veo, este rostro de bebé puede hacer cada cosa…


-Puede hacer cada cosa que te hará gritar de placer, básicamente.


-Exacto.


Ambos volvieron a reír, estando perfectamente cómodos el uno al lado del otro, caminando a pasos ligeros porque querían retrasar el momento de llegar a casa del de origen chino y separarse, aun cuando se verían mañana por la mañana.


Uno nunca sabía que podría pasar.


.


.


.


Al día siguiente, Luhan se levantó con el sonido de la alarma. Medio dormido, se movió para apagarla y se levantó. Con los ojos más cerrados que abiertos, sin camiseta a pesar del tiempo fuera, observó su habitación. Algunos de los peluches que tenía eran regalos de las fans a él por ser el novio de Xiumin, cuya fama en ese año había crecido tanto como la de Jongdae y su personaje de Chen.


Bostezó y se levantó, colocándose un jersey ancho para protegerse del frío y salió a la sala de estar, encontrándose con Sehun vestido y arreglado para salir. Extrañado, se le quedó mirando.


-¿Sehun? ¿Saldrás?


Sehun se giró a verle. Luhan podría jurar que estaba nervioso, pero no quería parecer paranoico para con su hermano, después de todo estaba en la época de salir y él a su edad hacía más cosas que salir. Joder, hacía cosas que ni Sehun se imaginaría. Suponía, él fue un poco adelantado en todo. Menos mal para su pobre corazón que su hermano menor iba más normal en ese tipo de cosas.


-Sí…


-¿Dónde si puedo preguntar?


-Oh, iré a dar una vuelta con unos amigos –Dijo –Y después puede que vayamos a casa de uno de ellos y nos quedemos a comer allí, ya te dije ¿Recuerdas?


-Oh, claro. Perdón, es que me acabó de levantar.


Sehun le dedicó una pequeña sonrisa.


-Lo veo, sobretodo por tus cabellos. ¿Te ha pasado un huracán mientras dormías o algo?


Luhan le sacó el dedo medio con algo de mal humor mientras caminaba hacia la cocina para hacerse algo de desayunar.


-Que te jodan.


-Que te jodan a ti, oh, espera, si ya lo hacen.


Luhan rió mientras abría la nevera. Maldito mocoso.


Sehun se fue en poco tiempo y Luhan se quedó en la cocina desayunando cuando el teléfono móvil sonó. Con comida en la boca, cogió su móvil viendo que era un mensaje de Minseok. No dudó ni un segundo en leer el mensaje y contestar a su novio, el cual le avisaba que iría a su casa en poco tiempo para recogerle. Luhan le contestó que estaba desayunando y que le esperaba como un buen chico, a lo que en poco tiempo recibió respuesta con una carita con sonrisa pervertida y un mensaje que ponía que más le valía ser un buen chico o le castigaría.


Luhan por poco se atragantaba con la comida.


Por suerte, no murió y pudo terminar su desayuno antes de que Minseok apareciera, estando a medio vestir cuando Minseok llegó y abrió la puerta de su casa. Hacía unos meses que Luhan tenía la llave del departamento de Minseok y este tenía la llave de la casa donde Sehun y Luhan vivían.


Con confianza, caminó por la casa directo a la habitación de Luhan, donde lo encontró subiéndose los pantalones  y sin camiseta.


-Hola, Lu Ge. –Le saludó –Buenas vistas, tu trasero me encanta.


Luhan rió, acabándose de colocar sus pantalones, y se giró para ver a Minseok.


-¿De verdad? Yo prefiero el tuyo, es más grande. –Dijo  como si nada.


-¿Sí? Yo no tengo tu elasticidad, sin embargo –Y con eso dicho, le guiñó el ojo. Luhan, al rojo, rió negando lentamente con la cabeza y se colocó una polera encima de una camiseta que se había colocado en medio de esa conversación.


-¿Ya estás?


-No, tengo que peinarme pero termino en poco tiempo.


-¿Dónde está el mocoso? ¿Lo perdiste o lo vendiste?


-Se fue con sus amigos. –Contestó –Oye ¿Cuánto crees que me darían si lo vendo?


-Mm… Mucho, seguro.


Ambos rieron, pobre Sehun.


Una vez preparado para salir, fue a Minseok besándolo y salieron de casa, asegurándose de que cerraban la puerta. Se subieron al coche de Minseok, este de conductor y Luhan de copiloto, y comenzaron su camino a Gangnam para pasar el día  los dos juntos como la gran parte de los fines de semana. Aunque se veían casi todos los días, solo los fines de semana podían hacer esas cosas puesto que era cuando Luhan tenía fiesta.


Debido a que un camarero se fue y no encontraban remplazo, la fiesta que tenía Luhan los miércoles por la tarde ya no la tenía, de manera que ahora solo tenía fiesta los fines de semana. No era un gran problema para ellos, puesto que Minseok lo recogía todos los días y algunas veces salían a cenar a algún restaurante y Luhan se quedaba a dormir.


-¿Qué haremos? –Preguntó Minseok de camino.


-Quiero comprarme unas cuantas cosas por allí –Dijo –Además, el cumpleaños de Sehun se acerca. Va a ser mayor de edad pronto.


-Aún recuerdo lo que me regalaste para mi cumpleaños –Dijo Minseok riendo.


Su cumpleaños había sido hacía poco tiempo y fue celebrado por todo lo alto con sus amigos y los compañeros de equipo de fútbol donde Luhan iba los domingos con Minseok. Hicieron una fiesta en un local alquilado por el dinero juntado entre todos llena de alcohol, aunque se aseguraron de que Sehun y los amigos que trajo no tomaran por su minoría de edad. Sorprendentemente, Jongdae fue el que más lo vigiló siendo todo un adulto responsable.


Quién lo diría de él.


-Sí, para no recordarlo –Bromeó.


-Aun guardo el traje para otros usos –Comentó como si nada –No todos los días te tengo el día después de mi cumpleaños todo el día vestido con un traje erótico de sirvienta y atendiendo todas mis necesidades.


-¿De verdad? Podemos buscar hueco, no me importaría siempre y cuando un día te vistas de algo para mí.


-¿De policía? Así te castigo por ser mal chico –Comenzó pícaro.


-De policía, de bombero, de delincuente… Hasta de mafioso.


-Dejemos la conversación aquí si no quieres que pare en uno de los callejones para follarte en este coche sin problemas.


-Eso me recuerda que no lo hemos hecho nunca en tu coche –Dijo –Un día tenemos que probarlo.


-¡Luhan! Estoy conduciendo…  -Puchereó, Luhan no pudo evitar reírse.


Antes era Minseok quien le ponía nervioso y lograba hacerle sonrojar, ahora también pero con una diferencia, se las devolvía causando ese mismo efecto en Minseok.


Todo un arte.


Al llegar a Gangnam estacionaron el coche correctamente y salieron, adentrándose un una tienda de ropa donde la música del KPop les invadió. Fueron directos a la parte masculina de la tienda, a la moda adolescente – juvenil, mirando que podría gustarle a Sehun. Inmediatamente Luhan sacó unas cuantas camisetas para el verano que en unos meses llegaría y comenzó a ver cuál poder regalarle mientras Minseok, conociendo también un poco del estilo de Sehun, miró pantalones o chaquetas.


-¿Sabes? He estado pensando y hablándolo con Jongdae y creo que comenzaré a mirar donde abrir una cafetería –Dijo Minseok mientras miraba dos pantalones iguales salvo el color, uno negro y el otro azul oscuro.


-¿De verdad?


Luhan le miró, prestándole toda la atención, observando el serio rostro de Minseok.


-Sí, sabes que es mi sueño desde hace tiempo –Dijo –Y tengo muchísimo dinero acumulado. Mucho más del que pensarías.


-Puedo imaginármelo –Comentó.


-Buscaré local y comenzaré a hacer reformas. Quiero que sea grande, que vendan todo tipo de cafés, refrescos y zumos, como un bar normal, también tenga pasteles y helados en invierno.


-Wow, lo tienes bien pensado.


-Sí, quiero que el ambiente sea clásico –Describió –Mesas redondas, además.


-Me gusta, tienes todo mi apoyo ¿Lo sabes no?


-Lo sé.


Minseok escogió el azul oscuro y se acercó a Luhan abrazándole por la espalda, besando su cuello con dulzura.


-Quiero pedirte un favor –Le susurró –Quiero que dejes el bar donde trabajas y seas uno de mis camareros –Le pidió –Te pagaré bien.


Luhan no pudo evitar reírse, escogiendo por fin la camiseta que le regalaría entre otras cosas.


-No lo dudes, Minseok –Le dijo girándose para verle a los ojos –Seré tu camarero, cuando tengas el bar y vayas a abrir pediré mi renuncia en Two Moons.


-Gracias, Lu Ge.


Siguieron comprando, saliendo de la tienda aquella para meterse en una tienda donde vendían artículos para los móviles, ordenadores y consolas para videojuegos. Aunque todo era carísimo, Luhan no pudo evitar fijarse en una funda para móvil con la bandera de china en una esquina y la fotografía de la muralla china que le encantó. La cogió y miró el precio. Muy cara, pero la quería.


-¿Te gusta? –Preguntó Minseok –Si quieres te la compro, tu cumpleaños también está cerca.


-No hace falta, no te preocupes.


-Insisto. –Dijo cogiéndola –China… ¿Extrañas tu país?


-Te mentiría si te dijera que no, pero no es como si quisiera volver allí. Ya te dije ¿No? El motivo que me llevó a aceptar Corea.


Minseok recordó la conversación aquella. El motivo era él, nada más  ni nada menos. Saber que era tan importante para Luhan era algo que le llenaba el corazón, sobretodo porque Luhan siempre mantenía esa opinión. Él fue el motivo que le llevó a aceptar Corea, a comenzar a estudiar el coreano y a adaptarse a aquel país con costumbres ligeramente diferentes a China.


-Vamos.


Le compró, al final, la funda para el móvil aunque no sería el único regalo que caería para Luhan, Minseok lo tenía bien claro.


Como no encontraron nada para Sehun en ese lugar, pararon a una cafetería para tomar un café ambos, poder charlar tranquilos y después continuar con la búsqueda de otros regalos para el hermano menor de Luhan, el cual cumpliría la mayoría de edad por fin.


Después de mucho buscar, le compraron un ordenador portátil para que por fin dejara de usar el de Luhan, un regalo entre los dos y que se llevaría Minseok a su casa para que Sehun no lo viera. Ya que estaban, aprovecharon el resto de la mañana para hacerse fotografías y mirar más tiendas aunque fuera para pasar tiempo juntos hasta regresar para la hora de la comida.


A las cinco, Minseok subió el vídeo por fin a su canal de youtube, vídeo que Luhan vio nada más subirlo Minseok. Sentados los dos en la cama del mayor, con Luhan sentado entre las piernas de Minseok y apoyado en su pecho, ambos riéndose, uno por su propia actuación y Luhan por lo que decía, siendo un vídeo que trataba el tema de las fans y sus comportamientos diferentes hacia sus idols.


Vieron después, por supuesto, el de Jongdae el cual trataba las diferentes posturas sexuales que uno debía probar antes de morir – típico de Chen – y pasaron la tarde viendo la televisión y doramas cursis con tópicos que solo les hacían reírse y bromear con los personajes que aparecían.


Mientras Luhan veía el dorama aquel, Minseok pensó que debía decirle a Luhan que quería mudarse a otra casa y quería que se fuera con él. Iba a decírselo junto a la noticia de abrir un bar propio, pero aunque sonara raro en él, se acobardó. ¿Y si se negaba? ¿Y si se asustaba?


No lo tenía ahora tan claro.


-Luhan… -Murmuró. El mencionado se giró a verle.


-¿Pasa algo?


-Quiero decirte algo importante.


-Claro, di.


Luhan se acomodó en su asiento, viendo a Minseok más serio de lo normal y temiendo que pudiera dejarle o ser algo que no le gustara nada. Minseok suspiró y se sentó mejor, jugando con sus dedos, sintiéndose momentáneamente tímido, como hacía tiempo que no se sentía.


-Verás… He estado pensando y quiero mudarme de casa.


-Oh ¿En serio?


-Sí… Y… Quería decirte algo más.


Luhan le cogió de la mano apretándola con fuerza, dándole seguridad con una leve sonrisa.


-Quería pedirte si querías mudarte conmigo… Definitivamente.


Luhan se quedó con la boca abierta. Lógicamente, no se esperaba algo así. Aunque habían mantenido un año de relación y él lo había pensado alguna vez, no esperó que fuera precisamente Minseok quien sacara el tema. Sonriente, después de haber salido de su momentáneo shock, y viendo que Minseok entraría en pánico si no le contestaba, saltó encima de él tirándose  sobre su cuerpo.


-Claro que sí –Dijo riendo, Minseok suspiró aliviado.


-Joder, menos mal que contestaste…


-Viviremos juntos –Susurró Luhan contra su cuello –Como una pareja de más años.


-¿Quién necesita esos años? Te amo y te necesito ya –Dijo Minseok besándole con pasión.


Tumbó a Luhan debajo de su cuerpo y entre besos, caricias y roces comenzaron a desnudarse, claramente iban a hacer el amor de nuevo en ese sofá, como muchas otras veces. Que de cosas había visto ese pobre sofá, entre otras, la de cosas que Luhan le hizo y se dejó hacer por Minseok cuando se vistió de sirvienta para él.


Si estaba así de nervioso para pedirle que se mudaran juntos, no quería ni imaginarse como estaría cuando en un futuro, le pidiera matrimonio.


Ah… De solo pensarlo le daba un infarto.

Notas finales:

y lo dejo ahí! espero vuestros comentarios! bye bye!


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