- ¡¿Pero qué putas es eso?! - mi corazón se aceleraba sentía su mirada gélida penetrarme, por más que intentaba correr mis piernas no respondían. ¿Sería el fin?, yo solo…. Tengo miedo.
Mi nombre es Sasuke Uchiha soy un aburrido oficinista desde hace 2 años, mi vida antes era divertida y arriesgada. Solía ser un tipo buena onda y admirado por las demás personas, pero todo cambia cuando te gradúas de la Universidad, tienes que seguir unas normas, cumplir un horario, acatar órdenes. Es tan…. mamón, es decir, aunque quiera salir a fiestas los fines de semana el trabajo me consume, ¿cómo es que un joven apuesto como yo, de 25 años tienes que ser absorbido por los estúpidos trabajos?
- Chií – mofe con mi boca y revolví mechones de mi cabello entre mis largo y pálidos dedos.
- ¿Qué tienes Sasuke? – mi compañero de oficina me mira confundido, sus ojos azules me reparan insaciablemente, siento un extraño calor en mis mejillas.
- Nada, estúpido – me impulso con mis pies y la silla rechina mientras le doy la espalda.
- Naruto, Sasuke preparen sus maletas irán como voceros a Colombia-
- ¿Qué?, ¡acaso está loco! Ese es un país tercermundista, además de que está altamente golpeado por la delincuencia- mi cara se mantiene tranquila pero mi voz demuestra la ira que siento.
- No…. Piensa en las brujas – dice con voz temblorosa mi rubio compañero, tanto el jefe como yo lo ignoramos. ¿Puede ser más estúpido? – Colombia, mierda. Acaso no saben en cada región hay diferentes espectros, a mi…. Me aterra-
- Naruto, por favor… además- comienza a hacer gestos extraños con su rostro –pueden tomarse unas vacaciones, solo contamos con ustedes son los únicos en la empresa que saben español a la perfección. Los colombianos son carismáticos… ah el vuelo sale mañana espero disfruten estos meses en el lugar “terrorífico” – hace unas comillas con sus dedos mientras se aleja soltando una sonora carcajada.
No sé qué es peor, si debo ir a un lugar que es horrible, o ir con Naruto. Pero para ser sincero jamás había escuchado sobre las brujas, no entiendo muy bien a que se refiere. En Japón tenemos nuestros propios mitos pero es más referente a fantasmas de Samurái caídos en las diferentes guerras, es inútil que intente encontrarle una lógica al absurdo pensamiento de Naruto.
-En 5 minutos llegaremos a Bogotá-Colombia, por favor pasajeros abrochar sus cinturones, esperamos un aterrizaje perfecto, gracias por viajar con nosotros – Tsk, miro de reojo a mi rubio compañero quien tiene su boca abierta y su cabeza apoyada en mi hombro.
- Naruto…- digo suavemente y con dulzura, muevo lentamente su cuerpo.
- Ahhh- suelta un grito repentino asiendo que me asuste, diablos y eso que estaba intentando ser amable.
- Estúpido…- susurro.
-Mira, mira- veo como sus ojos brillan al ver por la ventanilla –rayos me pregunto cómo será esto.
15 minutos después.
-¡Es horrible!- decimos al unísono mirando la complicada distribución de taxis, la verdad estoy preocupado y hace un frio de muerte. Miro mi reloj 4:00am, como demonios no soporto el frio. Me rasco los ojos y guio a Naruto hasta un puesto de café.
-¿Le regalo un café?- una anciana me mira y sonríe. Seguramente Naruto pensara que es muy amable, pero no caeré en estos trucos.
- No, gracias-
Por fin camino al hotel, el sol comienza a salir. Es extraño, es el mismo cielo, pero el ambiente es diferente afortunadamente no nos han secuestrado y la temperatura ya no es tan baja pero…. – demonios hace calor – me limpio el sudor que se resbala de mi frente, miro la hora 12:00m. Es otra razón por la que no quería venir a Colombia es patéticamente cambiante. El ruido del motor y el aire que entra por la ventanilla, el pesado aire contaminado…
-Sasuke… Sasuke- Abro mis ojos y veo un hermosa casa ¿Acaso este era el hotel? – creo que se confundieron y nos trajeron a otro lugar, pero no importa es bonito – Me levanto suavemente y entro al hogar, es bastante agradable y amplio, y eso que tan solo nos quedaremos por tres días, no veo porque la empresa se tomó tantas molestias. – Sasuke…-
- ¿Qué?- me giro hacia donde proviene su voz veo como sus manos tiemblan – dime que tú también ves eso – miro hacia donde él tiene tus ojos clavados, veo una extraña sombra. ¿Un hombre? Es… parpadeo unas cuantas veces y la sombra ya no está.
- Tonto… seguramente es culpa del cansancio…- no me gusta la sensación de este lugar, no me agrada en lo absoluto. Tengo algo de miedo. Algo nos está viendo – Este lugar es algo peligroso mejor durmamos en la misma habitación – escucho un suspiro de su parte, pero a quien engaño el que esta más asustado soy yo.
Luego de un ligero refrigerio nos pusimos el pijama y nos acostamos en la cama, no me incomoda dormir con Naruto, total…. Es el chico que me gusta – ¿Estas dormido? – mis mejillas se ponen calientes y siento como la sangre se acumula en mis blancas orejas, yo quiero aprovechar cada momento que tenga con él, ya no soporto el tratarlo tan indiferente, sonara lascivo, me comportare lascivo pero cada que veo las expresiones estúpidas de Naruto no dejo de quererlo dentro de mi… más y mucho más, no es suficiente el quererlo con todo mi corazón, mi culo también lo quiere.
- No –
Acomoda su cabeza en mi cuello, su lengua caliente se pasea por mi clavícula, sus dedos tocan atrevidamente mi pene sobre el pijama. No soporto el desespero, necesito… sentir más.
-Ahh Naru….to, por favor rósame – él es el único que me conoce de esta forma. Tan inquieto, tan deseoso de su esperma.
- Sasuke eres goloso – asiento tiernamente y me cubro el rostro por la vergüenza. Seré su mascota, mientras el me haga el amor como siempre.
Siento su peso sobre mi cuerpo, su miembro ya está igual de duro al mío, comienza a moverse sensualmente rozando ese glorioso y exquisito trozo de carne contra el mío. Levanto mi cadera, abrazando la suya con mis piernas, me muevo rápidamente.
- Esto es…- siento su pene punzando contra mi entrada, esto es… a lo que conocen como sexo con ropa – rico….- no puedo contener mis gemidos y siento como me mira con picardía.
- Sasuke….- su aliento se acerca cada vez más, casi puedo sentir sus labios contra los míos.
- ¡Largo de aquí! –
Quito rápidamente mis manos de mi rostro, miró fijamente a Naruto y el me mira con terror completo.
- Acaso… ¿hay alguien más? – respiro hondo. Si hay alguien que acaba de interrumpirnos no dudare en darle una buena lección – ¿Quien está ahí?- No hay respuesta alguna, así que me levanto aun con mi erección, es difícil caminar con ella pero mi enojo me gana. – ¡¿Dije que quien está ahí…?!-
- Ajajjajaja- El bello de mis brazos se eriza por completo, la risa gutural se escucha aún más fuerte, viajando por los pasillos y retumbando en mis tímpanos. Tengo la terrible sensación de que…. No estamos solos, siento los brazos de Naruto rodear mi cuerpo.
- Sasuke – entrecierro mis ojos y escucho el candado de la puerta sonar, escucho el manubrio de la puerta retumbar – vamos…- en un suave susurro me conduce nuevamente a la cama, me abrazo a su cuerpo, siento su calor mi corazón no para de latir.
- Tengo…. tengo…. miedo-
- Lo sé –
No sé qué será, no quiero averiguarlo pero mientras este junto a Naruto no habrá temor alguno que me venza, lo único que más me preocupa en este momento es que….
…. Mi noche de sexo y amor con Naruto se vio arruinada……