Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Nuevo novio, nuevo hijo por Samantha0507

[Reviews - 10]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Kei se miró las manos cubiertas de sangre, miró a su alrededor, los gritos de dolor, las ambulancias llegaban a montones, cuanta gente había en la sala, ni el mismo lo sabía.

 

—Dr. Tsukishima. — el rubio cerró los ojos y respiró, tratando de calmarse.

 

La noche había pasado rápidamente y la sala de emergencia no solo olía a sangre, la muerte había estado presente todo el tiempo.

 

—¿Cuántas personas murieron esta noche? —el rubio se había sentado en los vestuarios, donde Koshi estaba cambiándose.

 

—No tengo idea, no sé cuántas personas atendí o revise, no sé cuántos pasaron a pabellón, dios esto fue terrible. — el peligris se dejó caer junto al rubio, llevándose la cabeza entre las piernas.

 

—¿Te sientes mal?

 

—Estoy mareado, mi turno había terminado cuando me informaron, no alcancé a comer ni nada en casa. — Koshi sintió una mano sobre su espalda, pero el mareo se estaba volviendo tan intenso que se le hacía imposible erguirse, en solo un movimiento sintió como era alzado.

 

—Creo que lo más sano es que duermas, te ves cansado, te llevaré para que descanses, debo ir con Kuroo

 

Kei se quedó observando la escena, sabiendo que el Dr. Ushijima podría darle un tiempo de descanso al peligris, que parecía estar necesitando.

 

El rubio se acercó a los lavabos, sentía los ojos rojos, los parpados solían pesarle y podría jurar que no había comido en días, esa una sensación de profundo y doloroso vacío, había olvidado lo que se sentía estar fatigado por el hambre.

 

Caminó buscando llegar a la sala de urgencia, los principales casos que habían llegado durante la noche, habían sido derivados rápidamente, aunque, las personas que estaban en urgencias, en realidad no estaban mucho mejor que los demás.

Kei atendió a varias personas, los enfermeros aún corrían de un lado para otro, todos aun estaban agitados, sabían que la cifra de muertos había sido demasiado significativa y en cada momento, en cada situación, en cada instante en que cerraba los ojos, solo podía imaginar a Keiji, no al niño que había empezado a cuidar tiempo atrás, si no al adolescente, a ese joven que ahora cuidaba, que ahora le recordaba esa extraña mezcla que su hermano había creado.

 

El rubio caminó rápidamente, debía pensar, se sentía mareado, por un segundo, por un instante, la imagen, la sola idea cruzando por su cabeza lo había asqueado y necesitaba un poco de aire.

 

Un fuerte grito, sumado a un golpe de algo estrellándose contra el suelo llamó su atención, se encaminó notando que era una de las salas de reuniones y se sorprendió más de ver al moreno tratando de levantarse.

 

—Kuroo…—Hizo ademan de entrar, pero se quedó inmóvil al ver al otro levantarse sin decir mucho.

 

Se quedó en la puerta y escuchó.

 

—Señores Sakurai. —Kuroo se levantó y se limpió la comisura del labio, bajo la mirada del rubio, quien estaba tremendamente concentrado. — se hizo todo lo que estaba en las manos de los doctores, su hijo presenta muerte cerebral y es una opción que tendremos que presentarles, si ustedes lo desean, pero no tenemos mucho tiempo, les daré espacio.

 

Kei se quedó junto a la puerta, pero su mirada se cruzó directamente con la del moreno, quien rápidamente.

 

—No quiero que me mires de esa manera…— el moreno parecía molesto, pero simplemente evitaba la mirada el rubio.

 

—Debo curarte el rostro, vamos…

 

El rubio junto las manos con las del moreno y lo llevó a los casilleros, donde rebuscó un par de cosas.

 

—¿No preguntaras?

 

—Las familias y el tipo de noticias con las que estás lidiando, creo que en realidad, por mucho que lo piense son difíciles, tienes que ver la parte legal, pero el dolor de muchas familias, el sufrimiento de quienes deben firmar papeles y las demandas, no me imagino en realidad…

 

—La primera vez que me enfrente a estos papeles, fue por la custodia de Kou, creo que jamás sentí tanta presión como cuando comprendí lo que significaba hacerte cargo de otro ser humano. —El moreno sintió la mano del rubio contra su mejilla. — Pero cuando veo a las familias, cuando debo entregarles actas y copias de documentación, los juicios y todo parece simplemente tremendo para mí.

 

Kuroo no supo que paso, pero su cabeza rápidamente se apoyó contra un duro pecho, pero el extraño calor que ahora lo rodeaba, simplemente pareció borrar todo el dolor, todas las tragedias que los rodeaban, todo el sufrimiento que llevaba viviendo, se sentía seguro y querido.

 

 

 

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).