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Noir por ritsuka10

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Un castaño miraba fijamente al hombre delante de él quien se deslizaba sigilosamente a la longitud de la oficina,  entrelazo los dedos para colocar la barbilla en el arco creado no tenia expresión en su rostro simplemente lo dicho por ese hombre mayor lo dejo sin palabras, sus labios buscaban la manera de negarse a la petición de ese personaje pero su mente lo detenía, debía tirar por la borda lo trabajado todos esos, no era justo ¿Verdad? sacrifico una parte de él en la su última misión como agente de campo, no quería volver a toparse con la cara de ese hombre, cuando lo llamo en la detención no se detuvo, ni un solo segundo se giró para enfrentarlo, apretó los dientes con suma fuerza hasta lastimarse, ¿Porqué Bang YongGuk tenía que volver aparecer en su vida?, ahora él era el director estratégico de operaciones en Asia de la famosa empresa de seguridad, TS Corp,  una organización encargada de atrapar a los criminales más peligrosos alrededor del mundo contaban con distintas sedes siendo la de Asia la más efectiva,   era asesinos de cuello blanco, trabajaban en conjunto con distintas organizaciones de seguridad nacional pero al fin de cuenta eran mercenarios que cortaban las cabezas de “enemigos” públicos por una jugosa paga aunque para algunos agentes era un orgullo pertenecer a esa empresa, “ONU con armas” le decían en los bajos mundos, YoungJae Yoo era un soberbio hombre que haría cualquier cosa por conseguir cumplir sus ambiciones, de esa manera lo hizo en el pasado.


—No pienso darte más tiempo para decidir.—Hablo en tono fuerte el hombre volviendo a su lugar detrás del escritorio.— ¿Estas dentro o no ? 


—Soy YoungJae Yoo.—Contesto orgulloso el menor recuperando la postura, recargando su cuerpo en el respaldo de la silla.—Atraparé a X, y formaré equipo con Bang ¿él esta enterado del trato?


—Hemos hablado con sus abogados pero se ha negado a participar.—Intervino un hombre de cabello negro con una encantadora sonrisa, su aspecto era desaliñado, tomo asiento en la silla libre a un lado del director general.—Por eso te llamaron niño de cara bonita.—Su tono de voz era coqueto.—Tú trabajaste con él más de 2 años, sabes como piensa así que tienes el trabajo de hacerlo aceptar el trato o saber como manejarlo.


YoungJae movió su cabeza para darle un manotazo a su compañero prohibiéndole tocar su rostro, no le agradaban los agentes continentales, esos personajes que habían perdido el verdadero significado de ser un agente de TS, eran asesinado entrenados con el objetivo de destrozar a sus víctimas, no necesitaba que le presentaran a su compañero, conocía su rostro, su historia así como las atrocidades hechas en su pasado, Jung DaeHyun era el nombre del individuo que en su última misión asesino a toda una secta donde su único objetivo era terminar con el líder, una masacre que tuvieron que pintar como un suicidio colectivo, Jae no estaba feliz de trabajar con él pero era ampliamente conocido que era de los mejores analistas creando perfiles de psicópatas, él quizá era uno, ademas se rumoreaba quizá él era X, su mirada fue captada por la entrada de un tercer individuo, desconocido para él.


—No sé que pretendan pero esta claro que Andrew no va estar muy contento de volver a verme, yo fui quien lo metió a la prisión donde se encuentra recluido.—Su vista se dirigió al rubio que llevaba un suéter blanco y un piercing en la nariz.  —Le ha puesto un precio a mi cabeza, Andrew es bastante vengativo y sé que tarde o temprano cumplirá su promesa.—A veces  olvidaba que el verdadero nombre del sujeto con el que trabajo más de 2 años era YongGuk pero en su mente solo persistía el sobrenombre “Andrew Baang”.—¿Como creen que lograremos que nos apoye?


—Por ese tema no debes preocuparte.—Añadió el CEO mirando al nuevo integrante que acomodaba una silla a un lado de los intrigados hombres.—Él es Choi JunHong, un recién graduado de nuestras fuerzas, él numero uno en su generación pero no solo por eso lo he agregado al equipo sino por sus actitudes detrás del teclado.—El rubio asintió con una tímida sonrisa, era una extraña combinación, ternura con un toque de maldad impresentable.—El habido hacker ha descubierto la manera de atraer no solo a Bang al equipo sino a Kim HimChan y Moon JongUp.


Los dos mayores asintieron mirándose entre ellos, ninguno de los dos quería formar equipo con el contrario pero ambos necesitaban completar esa misión para pasar al siguiente nivel dentro de la organización, la ambición era el sentimiento apoderándose de su existencia, el Director quería escalar hacia la cima mientras el agente buscaba algo más importante, una promesa dada por el propio CEO, un llave a la libertad al mismo tiempo ambos se giraron hacia el tercer integrante de esa triada, curiosos de conocer las intenciones de ese niño ¿Él que perseguía con la tarea recomendada? la inocencia cubría cada una de sus finas facciones, simplemente parecía ser muy joven, no superaba los 19 o 20 años, el equipo salió de la oficina decididos a iniciar sus actividades.


 


Un hombre de cabello negro con mechones rojos novia la cabeza al ritmo de la música escapando de un viejo reproductor de vinilo, llevaba en la mano derecha una copa de vino la cual agitaba delicadamente dejo caer su cabeza hacia atrás para mirar el techo, su celda era el triple del tamaño estándar, su decoración era más una replica exacta de un elegante departamento al estilo Europeo que el de una prisión, el sonido de varios pasos acercando le provoco emitir una terrible sonrisa, se encontraba sentado al frente de la puerta mientras el lujosa habitación se dibujaba a su espalda, chasqueo la lengua al notar a tres individuos detrás de la puerta principal  que se abrió ante la mirada molesta de los agentes, minutos antes su abogado le comentó sobre el trato puesto por TS Corp, el ex mafioso se negó a entrevistarse con los representantes de esa empresa, no le importaba nada que tuviera que ver con los hombres causantes de su detención, devoró con la mirada al agente Yoo, relamió sus labios con inusual  desagrado provocando que el castaño se removiera nervioso.


—Me hubiera gustado que solicitaras una reservación para una visita conyugal, quizá solo así hubiese aceptado verte.—Le comentó poniéndose de pie para caminar hacia el reproductor.— Ya mi abogado hablo conmigo pero no estoy interesado en trabajar como un maldito perro de TS, no me gusta que me digan que hacer.—Sus delgados dedos acariciaron la superficie de ese objeto.—En este momento solo estoy interesado en una sola misión.—Los tres hombres miraban la espalda de ese mafioso quien de repente se giro con un dardo en la mano decidido a clavar el objeto en el ojo de su enemigo pero DaeHyun actúo rápido para detenerlo.—Wow tienes un nuevo amante, de esa manera lograste subir en TS Corp.—Llevo su dedo indice a su barbilla.—No, ese puesto te lo di yo, solo tuviste que abrirme las piernas, joder eras bueno.—Emitió una amarga sonrisa.—Maldito traidor juró que mientras me quede aire te cortare la maldita cabeza con mis propias manos.


—Es triste pensar que al gran Andrew ahora esta ahogado en la amargura porque su pequeño amante lo traicionó.—Le enfrento DaeHyun evocando una burlona sonrisa.—¿Quieres seguir pudriéndote en esta asquerosa prisión?  por mucho que la disfraces sigue siendo una asquerosa celda.—Lo barrió de arriba hacia abajo, mostrando una mueca de lastima.— Esto es lo único que queda del mafioso más temido de Asia, un despechado ex amante.


YongGuk tomo por el cuello al agente quien trato de defenderse, ambos personajes comenzaron a lanzar golpes para demostrar quien era más fuerte ninguno de los otros dos representantes de TS se movieron, los guardias miraban nerviosamente, la pelea se detuvo cuando el castaño de TS posó una arma en la nuca del mafioso, Guk chasqueo la lengua, para detener el ataque, el hombre se giro para dejar que el cañón pegara con su frente, una vez más su lengua recorrieron el contorno de sus labios, odiaba a ese traidor, le quito su imperio pero se odiaba más a si mismo por dejar que un par de buenas piernas lo enredaran a tal grado de volverse un imbécil, regreso a su posición a un lado del reproductor para tomar la copa de vino semi llena.


—No voy a estar en ese equipo porque no soporte ver la cara del bastardo que tantas veces que cogí y después me traiciono sino porque no me interesa, ya tengo mi plan de escape sin meterme en tantos líos.—Evocó una peculiar sonrisa tomando el vino.—No acepto su oferta porque no me genera un beneficio real, con o sin su “propuesta” voy a salir de esta prisión en poco tiempo.—Nuevamente chasqueo los labios.—Voy a ser sumamente feliz cuando sus cuerpos aparezcan muertos con una nota de amor del “Señor X”.—Su mirada se volvió más fría, YoungJae desvío sus propios ojos.—Ahora lárguense han amargado mi tiempo.


El líder del equipo hizo un movimiento de cabeza para salir de la celda, Jae conocía a ese hombre y sus palabras eran ciertas, tenía a manía de contar sus andanzas cuando suenan fantasiosas pero al final resultan ser reales, cuando se giraba observo como el hacker sacaba algo de su pantalón toda la reunión había estado quieto bajo el umbral sin mostrar emoción alguna, entonces el Director recodó las palabras del CEO, ese chiquillo tenía la forma de obligar a Andrew unirse al equipo se mantuvo expectativo cuando el alto joven se posó frente al mafioso quien lo miraba intrigado de arriba hacia abajo. 


—Vas aceptar unirte al equipo sino quieres que le dé la dirección de esta hermosa pelirroja a tus enemigos.—El rubio extendió la imagen borrosa tomada de un video, en esa impresión aparecía la figura de una mujer en un vestido negro entallado y rizos color fuego.—Muchos de tus aliados te han dado la espalda, tus enemigos buscan borrarte de la faz, estos barrotes no solo te impiden escapar sino también te sirven de protección por ello no haz huido.—El mafioso quedo enervado por el aliento a menta de ese “peculiar” agente, su mano temblaba pero su voz era firme, le pareció excitante la combinación.— Cada uno de tus movimientos son calculados, eres bastante listo pero nunca te habías topado conmigo.


—Niño estúpido, una prostituta no tiene importancia para mi.—Le enfrento molesto, aquel aire de superioridad de un mocoso también le enfermaba.—Si te haz puesto a ver las visitas conyugales que tengo te darás cuenta que son muchas las mujeres y .—Llevó sus ojos a YoungJae.—Hombres que se han acostado conmigo, me importa un maldito comino una golfa menos. 


El rubio emitió la mitad de una sonrisa imposible descifrar que significaba, ¿frustración? ¿Soberbia acumulada? lentamente los labios rosas de ese chico de piel blanca se acercaron a los oídos del mafioso, “¿Estas seguro?¿ no te importa que le pueda pasar a SungWoon?”, los ojos de Bang se abrieron como plato sorprendido por la repentina confesión, sus facciones se endurecieron, toda la acción que llego a percibir por esa aura ahora se volvía en una repulsión total, nadie hasta ese momento conocía ese nombre, apretó sus manos formando un puño, clavando las uñas en la piel, sus nudillos adquirieron un tono blanco, había cuidado la identidad de ese individuo desde el instante que nació para que ahora un niño estúpido con aires de superioridad le arrebatará lo que tanto había conseguido, torció su cuello esa jugada no la tenia dentro de su abanico de posibilidades, sujetó a ese agente del brazo.


—Más te vale que nadie más conozca ese nombre.—Le susurró al oído.—Si me enteró que alguien más fuera de ti lo conoce X será el menor de sus problemas.—Sus miradas se cruzaron, ambos peleando por ejercer el control en la vida del contrario.—Si tan bien sabes de mi comprenderás que no miento.


—Lo sé, nadie excepto yo conoce la historia de ese humano.—Los alientos de ambos se mezclaron, uno con olor a uvas mientras el otro con su impactante sabor a menta. —Solo ve la misión como una tarea extra antes de escapar a tu libertad. 


El mafioso dejo escapar un suspiro pesado, esa actitud le cansaba pero también le causaba un cierto grado de intriga, detestaba ser confrontado pero una admiración en él nacía cuando se topaba con las personas capaces de doblegarlo, en lo más profundo de su ser crecía la necesidad de enfrentarse a sus enemigos, torcer sus brazos, obligarlos a arrodillarse ante su presencia y en ese instante deseaba hacerle lo mismo a ese niño de piel blanca, pagaría muy caro su intromisión.


 


 


YoungJae caminaba  en medio de JunHong y DaeHyun no podía apartar la mirada del menor, su perfil le parecía enigmático después de la reunión con Bang quedó impresionado por sus habilidades de “convencimiento” aunque le cuestiono cientos de veces la táctica que uso con el mafioso, el hacker dijo no poder revelarla pero cuando esa misión terminará se la hará de su conocimiento, le fastidiaba saber que Bang tenía un punto débil que desconocía, apretó sus labios sus sentimientos debían ser radicados, levantó la barbilla orgulloso, hizo lo correcto ese era su meta, no importaba lo que su corazón dictará cuando la posibilidad de guiar TS estaba a su alcance.


—No entiendo porque debemos agregar a este loco al equipo ¿Es enserio?—DaeHyun le cuestionó a sus compañeros deteniendo su andar mientras echaba un vistazo a la carpeta que llevaba en las manos.—Es un maldito enfermo mental, me he topado con asesinos pero todos pelean por un “ideal”, él solo es un asqueroso sádico.


—Si él acepta estar en el equipo HimChan automáticamente estará adentro.—Mencionó el rubio tomando el folder que extendía el agente.—El Señor X tiene una rara devoción por HimChan, hasta el momento ha matado a todos los agentes involucrados con su detención.


—No, no es Kim el señor X.—Intervino YoungJae al ver el gesto de su compañero.— Para la población en general el roba bancos esta prófugo pero TS Corp lo tiene escondido en una de sus prisiones, él estaba involucrado en el robo de información confidencial relacionada a las armas nucleares en Corea del Norte, la organización decidió esconderlo hasta que diera su información a diferencia de Bang no ha tenido un buen trato.—Dejo escapar un suspiro al encontrarse frente a la puerta de una celda, ese edificio no era una prisión sino un Instituto mental por la ventanilla se veían las paredes tapizadas de colchones blancos.—Es mejor que nos mantengamos alertas, Moon no es una persona fácil de tratar.


El guardia que usaba un traje de enfermero ingreso los códigos necesarios para abrir la puerta, los tres agentes metieron las manos en sus bolsillos seguros de tener sus armas cerca, por cualquier percance, ingresaron lentamente al interior al fondo se encontraba un librero repleto de títulos de manga, en uno de los extremos el paciente estaba sentado en una silla, llevaba cadenas en sus tobillos, sus manos esposadas al escritorio, su cabello azul desgastado brillaba bajo la luz de aquella vieja lampara, su vista estaba puesta en alguna esquina vacía al sentir la presencia de sus invitados se giró para enfrentarlos, su sonrisa los dejo sin aliento, trató ponerse de pie pero las cadenas se lo prohibieron, saco la lengua para relamer su labio interior fascinado por la persona que devoraba con la vista.


—He leído su propuesta, la cual parece interesante.—Sus ojos estaban puestos en JunHong, quien trago en seco dando un paso hacia atrás asustado.— Anda acércate para decirte la respuesta .—El rubio lentamente se acercó al chico coloco su oído junto a sus labios, la vibra lo aterraba pero no era momento para mostrarse débil. —Estoy dentro del equipo, solo dile a HimChan que si se mete conmigo le voy a rebanar la garganta.—Cerró los ojos para absorber su aroma.—Me encanta saber que no soy el único podrido, hueles como yo. 


El rubio se alejó sorprendido, ¿Igual a él?, no, ellos eran diferentes, no tenían nada en común aunque su pasado era similar ambos decidieron tomar un distinto camino, YoungJae se interpuso entre el agente y el recluso que se dejaba caer en el respaldo de la silla, es como si fuera una serpiente dejando su veneno incrustado en un pobre animal,  los ojos de JongUp se enfocaron ahora en el castaño frente a él, ellos ya se conocían anteriormente Andrew había ocupado de sus servicios para deshacerse de sus enemigos, los tres habían salido a tomar una copa, partieron el pan juntos aunque le dijo muchas veces al líder que ese sujeto tenía una vibra extraña nunca lo escucho, por ello se murió de risa al enterarse de su caída, el amor era para estúpidos, la lujuria para los idiotas, el humano no debería dejarse dominar por las emociones sino ellos debían dominar sus instintos.


—   No tengo nada que decir así que puedes irte.—Le habló serio simulando tomar uno de los mangas sobre la mesa.—Tu olor a cerdo me asquea. 


DaeHyun miró la forma que el Director salía de la sala, siguió sus pasos no sin antes echarle un vistazo al loco que reía por las diálogos en aquellos dibujos color blanco y negro,  cuando andaba por el pasillo enfoco su vista en la espalda de ese castaño también admiro ese pequeño trasero, era hermoso pero le desagradaba, odiaba su actitud prepotente, estaba cegado por la ambición, era un imbécil por aceptar la misión cuando a mitad de los integrantes lo aborrecía, tarde o temprano doblaría las manos echo un vistazo al rubio  que andaba a su lado, en la dos entrevistas cortas que habían hecho ese día él fue el protagonista, algo en él no le cuadraba, no decir con que argumento atrapo a Bang le causaba desconfianza mientras JongUp parecía fascinado con su presencia, de pronto un grito al fondo detuvo el andar de ambos se giraron para observar como de la puerta donde salieron los gritos escapaban, varios enfermeros se amontonaron, parecía que sufría de un ataque por ello le inyectaran un sedante.


—Sigo sin entender porque tenemos que cargar con ese bastardo.—Gritó sacando un silbido por sus labios.—Presiento que voy a tener que dormir con una arma bajo mi almohada, nuestros compañeros de equipo están locos.


—Todos tenemos demonios que no podemos combatir.— Habló el rubio pasando una vez más la carpeta al agente.—Cuando los monstruos nos devoran de niños a veces nos convertimos en ellos.


El agente miró la hoja donde estaba abierta la carpeta, una sección de informo estaba subrayada con marca textos, “El paciente sufrió de abuso infantil, de cualquier tipo”  leyó, seguía sin sorprenderle pero sin duda aquellas frases le daban la causa raíz de tanta locura,  cuando somos niños tememos al monstruo de vive debajo de la cama hay personas que se enfrentan a él, lo superan pero hay otras que se vuelven en un peor, feroz animal capaz de devorar a la causa de tu miedo, JongUp decidió volverse en un demonio al que nunca los monstruos debajo de su cama lo volvieron asustar a tal grado de orinarse en los pantalones, JunHong corrió hacia el baño donde vomitó el desayuno ingerido, apretó fuertemente las manos, él no se volvería loco, él era distinto, ahora que estaba apunto de comenzar su plan no podía detenerse, llevaba años deseando su venganza llevo sus dedos por su nuca hasta bajar a su espalda, los ingreso debajo de su suéter donde alcanzo a percibir  las costuras de una cicatriz, “Pray” esa palabra había sido escrita con una filosa navaja, él no se volvería loco, no hasta ver a sus enemigos aplastados debajo de su pie. 


 


 


 

Notas finales:

Un nuevo fanfic para celebrar el comeback!! espero les guste!!


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