Jugando con fuego
Introducción
Mi madre siempre me dijo que el amor podía ser una cosa muy peligrosa y que debía de tener cuidado de no salir lastimado, porque amar profundamente a una persona podía llevarte a la ruina.
Desde pequeño pude ver como mi familia se separaba como una grieta en el vidrio que se desquebraja poco a poco hasta el punto de no tener retorno.
Mi madre lloraba, mi padre era más frío que un tempano de hielo y mi hermano menor era lo suficientemente pequeño como para no percatarse que aquello nos estaba destruyendo.
Me resigné, le temí al amor como un vil cobarde y solo me quedé quieto mirando como todo se desplomaba, tranquilamente fui construyendo esas barreras que se hicieron mis amigas.
“El amor es como el fuego, Ryou-chan”
Me dijo eso mi madre cuando yo tenía 12 años y miraba como mi padre azotaba la puerta con las maletas en mano.
“Es peligroso”
Sentí como mi hermano sujetaba fuertemente mi mano y sollozaba tirándose al suelo ante la partida de nuestro padre, yo solamente me quede parado en medio de los únicos dos familiares que me quedaban, no podía llorar… pero por lo menos podía hacerme un juramento…
No dejaría que aquel fuego me alcanzará, me refugiaría en mi caja de acero y me confinaría a mí mismo a la soledad para que nada me lastimará como esas llamas que habían consumido a mi madre.
Esos eran mis planes…
Esto era lo que quería para mi vida…
Pero al final, este mundo está lleno de tantas sorpresas, así que lo que ahora estaba seguro, mañana podía cambiar.
Tú fuiste el único combustible que logró encender ese fuego que había escondido en lo más profundo de mi alma…
Kuramochi Youichi.
Continuará...
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Jugando con fuego
Introducción
Mi madre siempre me dijo que el amor podía ser una cosa muy peligrosa y que debía de tener cuidado de no salir lastimado, porque amar profundamente a una persona podía llevarte a la ruina.
Desde pequeño pude ver como mi familia se separaba como una grieta en el vidrio que se desquebraja poco a poco hasta el punto de no tener retorno.
Mi madre lloraba, mi padre era más frío que un tempano de hielo y mi hermano menor era lo suficientemente pequeño como para no percatarse que aquello nos estaba destruyendo.
Me resigné, le temí al amor como un vil cobarde y solo me quedé quieto mirando como todo se desplomaba, tranquilamente fui construyendo esas barreras que se hicieron mis amigas.
“El amor es como el fuego, Ryou-chan”
Me dijo eso mi madre cuando yo tenía 12 años y miraba como mi padre azotaba la puerta con las maletas en mano.
“Es peligroso”
Sentí como mi hermano sujetaba fuertemente mi mano y sollozaba tirándose al suelo ante la partida de nuestro padre, yo solamente me quede parado en medio de los únicos dos familiares que me quedaban, no podía llorar… pero por lo menos podía hacerme un juramento…
No dejaría que aquel fuego me alcanzará, me refugiaría en mi caja de acero y me confinaría a mí mismo a la soledad para que nada me lastimará como esas llamas que habían consumido a mi madre.
Esos eran mis planes…
Esto era lo que quería para mi vida…
Pero al final, este mundo está lleno de tantas sorpresas, así que lo que ahora estaba seguro, mañana podía cambiar.
Tú fuiste el único combustible que logró encender ese fuego que había escondido en lo más profundo de mi alma…
Kuramochi Youichi.
Continuará...