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Un lobo, la luna creciente, y una estrella por mimi15

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Notas del capitulo:

David Thewlis intrepreta a Remus Lupin, en la saga de Harry Potter. y Gary oldman interpreta a Sirius Black. Hoy les traigo un choque de universos. espreo les guste, me imagino a Gary cuando actuo en la pelicula el profesional.

Espero les guste este fic XD

“La boda más esperada del siglo. Miles de magos y brujas alrededor del mundo esperan que la pareja formada por Sirius Black y Andrómeda Black contraigan matrimonio este 14 de febrero en la propiedad de la familia Black  12 Grimmauld Place…” Remus no quiso leer más, estaba demasiado dolido. El lobo siguió su camino por el callejón Diagon hacia la tienda de túnicas en donde sus mejores amigos lo esperaban.

No importaba donde estuviese, desde el ministerio de magia hasta el estadio de Quidditch, lo único de lo que se hablaba era de la boda entre Sirius y Andrómeda, Remus veía el “Amor” que se profesaban los primos por todos lados, desde obituarios en el profeta hasta pancartas de imágenes movientes de Sirius y Andrómeda besándose,  y lo único que podía hacer Remus era ponerse celoso y callarse.

Apenas entro a la tienda Sirius, James y Peter lo regañaron por llegar tarde a probarse su túnica de padrino de bodas.

-Hey, pensé que no vendrías, estaba a punto de darle tu lugar a Peter- dijo Sirius mientras se quitaba su corbatín –Eres mi padrino de bodas, al menos hasta donde yo sé-

-Lo siento pero todos los periodistas quieren la exclusiva de la boda y debo ocultarme para venir. Qué bueno que soy bueno en transfiguración-

-Ponte el traje de una vez- dijo James –tengo que volver a casa o Lily me convertirá en reloj nuevamente-

Remus se vestido rápidamente, se veía elegante con el pantalón negro, la camisa blanca, la túnica negra y el corbatín.

-Me encanta, te vez elegante- dijo Sirius impresionado –Andrómeda va adorarlo-

-Mejor vámonos. Tenemos que practicar sobre tu  encanto Patronus- dijo  Peter.

Los 4 amigos se pusieron nuevamente su ropa, pagaron por las túnicas y fueron a la casa de James y Lily. Andrómeda quería una boda perfecta y había escogido la ropa desde las damas de honor hasta la de los padrinos, tenía un poco histérico a Sirius, quien no hacía nada más que agachar la cabeza, algo que al lobo no le gustaba para nada.

Sirius había sido su mejor amigo, pero definitivamente quería que fueran algo  más. Remus había amado a Sirius en secreto desde el primer año en Hogwarts, desde que iban a clases de herbologia y Sirius le regalo la rosa arcoíris que había sembrado. Remus nunca tuvo la oportunidad de decirle sus sentimientos a su mejor amigo, se callaba y sufría en silencio mientras Sirius se besuqueaba con una chica diferente y desconocida en los pasadizos de la escuela cada semana.

Había soportado tanto dolor, pero el golpe más fuerte fue el compromiso entre Sirius y Andrómeda. Era de esperarse ya que los Black se casaban entre primos para conservar la pureza de su sangre.

Los amigos fueron al patio trasero de la casa James, Lily apareció con unos bocadillos y unas tazas de té.

-Gracias preciosa- dijo James.

-De nada. Voy a salir, Ire a verme con unas amigas, vendré antes de la cena-

-Claro, pero me gustaría conocer a esa amiga tuya, tiene toda tu atención, la miras más que a mí-

Lily sonrió, y si los merodeadores conocieran bien a las chicas, sabrían que esa sonrisa era falsa –Nos vemos cariño-

Lily se fue y los aurores empezaron a practicar sus encantamientos.

-¡Expecto Patronus!- grito Sirius y un una luz con forma de perro salió de su varita. Los tres amigos le aplaudieron, luego fue Peter y resulto ser una rata, de tercero fue James que fue un ciervo al igual que su forma animago,  y por ultimo Remus que apenas hizo unas chispas de Luz.

-¿Qué paso? No has practicado como te he dicho verdad- dijo James en tono acosador.

-No te desahogues con el solo porque Lily te dejo, es obvio lo que pasa, Remus no tiene un recuerdo feliz- contesto Sirius defendiendo a Remus –Vamos amigo, busca en el interior de tu ser el recuerdo más feliz que tengas-

Remus vio la dulce sonrisa de que Sirius le ofrecía, su corazón empezó a palpitar rápido, la confesión iba a salir de su boca, Remus rápidamente huyo del lugar, dejando a sus tres amigos confundidos.

Varios días después…

Toda la familia Black se encontraba en Grimmauld place, discutiendo sobre la comida de la boda, Remus, James y Peter estaban presentes también. Sirius le presento a Remus a la chica que sería su acompañante en la boda.

Nymphadora era hermosa, joven, una aurora un poco torpe, y claro divertida, era otra prima de Sirius, y tenía la intención de ganarse el corazón del lobo, pero ese corazón ya tenía dueño.

-Sí, ella no te gusta, puedes decirle que cambie, es una metamorfomaga- dijo Sirius.

-Es hermosa, pero muy joven para mi gusto- dijo Remus tratando de maquillar sus sentimientos.

-Remus, siento que hay algo que no me has dicho aun, soy tu mejor amigo, puedes contarme lo que sea-

Remus suspiro –Tengo que irme, tengo una cita con una camarera del caldero chorreante-

-Está bien, pero recuerda que la boda es pasado mañana, no quiero que tengas esa cara de hombre lobo en pena, sonríe un poco, aunque sea por mí-

Remus partió, pero no tenía una cita ni nada por el estilo, fue a su casa, tomo una botella de Whisky de fuego y empezó a beber. Tomo el expreso al mundo muggle. No sabía a donde ir, pero no quería estar cerca de otra cosa que le recordara ala feliz pareja.

En un parque muggle de la ciudad de Londres.

Si miraba otra maldita imagen de Sirius y Andrómeda besándose y dándose mimos se suicidaría. Estaba celoso, la envidia lo consumía, Andrómeda gozaba de los besos y caricias de Sirius, algo que el anhelaba más que nada en el  mundo. Remus se encontraba en Hyde Park, Londres, el parque más extenso de la ciudad, estaba sentado bajo un gran árbol, en una noche de Luna creciente sin estrellas, cada trago del Whisky del fuego hacia que perdiera más la razón. El lobo pensaba que se encontraba solo con sus penas pero no era así.

Una sombra se abrió paso entre los árboles, su lobo interior lo sentía, Remus intento tomar su varita de su chaqueta pero estaba ebrio para coordinar sus dedos. La persona se acerba rápidamente.

-¿David?- pregunto una voz masculina. Remus se puso de pie. Metió su mano en su chaqueta, estaba listo para enviar un encantamiento, su vista estaba nublada. -¡David! ¡¿Qué haces por aquí?!

Remus se froto los ojos, y al parecer Sirius estaba frente a él, pero este Sirius tenia cabello lacio y estaba bien afeitado – ¿Sirius?-

-No. Soy yo Gary, tu amigo- dijo aquel hombre con una sonrisa coqueta -¿Estas ebrio?-

-Sirius- dijo El mago abrazando al hombre.

-Okey amigo, estas ebrio, será mejor que te lleve a casa, mañana me explicaras que hacías aquí-

-¿Qué hacías en este parque muggle?

-¿Muggle? Estas demasiado borracho, ya estas inventado palabras, yo solo estaba trotando, me preparo para mi próxima película-

-Pe-pe-pe-película- tartamudeo el lobo.

Gary llevo al lobo  a su auto, Remus alucinaba, el whisky hacia su efecto, su mente le juraba y perjuraba que estaba con Sirius. Apenas llego a su casa, Gary llevo a Remus al sofá, en donde lo acostó.

-Voy a lavarme los dientes, mañana le diré a Anna que pasaste la noche aquí- te prepare una cama.

-A mí no me gustan las mujeres- dijo el lobo –Soy un hombre lobo que ama a los hombres, lo dije, díselo a todos en el ministerio de magia, ya no me importa nada-

Gary se echó a reír – Anna te mataría si te viera así, estas demasiado ebrio, mírate diciendo locuras- Gary subió a prepararle una cama a su amigo “David”. Mientras la para Remus era la oportunidad perfecta para confesarle su amor a “Sirius”.

Gary había preparado una cama para su amigo. En ese instante Remus se paró en la puerta de la habitación.

-Sirius, yo…-

Gary tomo a su amigo de la mano y lo hizo acostarse –Ya duérmete, mañana hablaremos, sin palabras extrañas-

-Te amo, te amo desde primer año, por favor no te cases con Andrómeda-

Gary estaba un poco asustado, estaba si n habla. Remus le robo un beso rápido –No sabes desde hace cuánto quise hacer eso-

Gary estaba inmóvil, pero le correspondió el beso. Nunca en su vida había besado a otro hombre. Ahora su amigo lo besaba y le gustaba. Remus se dejó caer sobre la almohada y se quedó dormido.

A la mañana siguiente. El lobo tenía una jaqueca horrible, la luz del sol lo cegaba, su sorpresa fue que estaba en una casa muggle, rápidamente tomo sus zapatos y huyo del lugar  hasta el baño público que lo llevaría al ministerio.

El lobo corrió entre las  multitudes de Londres, preguntándose ¿qué había pasado? y ¿que había hecho? ¿Y por qué termino en esa casa muggle? ¿Con quién había terminado? Entro al baño público, para su suerte se había encontrado con Alastor moody haciendo la fila para llegar al ministerio.

-Remus Lupin ¿Una noche loca en Londres?-

Remus estaba hecho un desastre, emanaba alcohol por cada poro de su cuerpo –Creo que sí, yo…-

-No me expliques nada, a todos los magos nos pasa alguna vez, una noche de libertinaje no mata a nadie, y peor a un hombre lobo-

En el ministerio de magia

Remus vio la torre de pergaminos que contenía la ubicación de los magos oscuros en Uganda, no quería trabajar, quería quedarse en casa a dormir, y llorar antes de hacerlo en la boda de Sirius.

El día de la boda. Luego de la ceremonia y la declaración de los esposos, todos los aurores conjuraron a sus Patronus en señal de su amistad con Sirius. Los brillantes animales de luz y la noche sin estrellas ni luna, hacían que el salón se mirara hermoso. El último fue Remus, quien esperaba hacer el ridículo. Menciono el encantamiento y una esfera de luz se convirtió en un lobo que revoloteo alrededor de los novios.

Sirius se acercó a darle un abrazo a su amigo-Lo hiciste, sabía que lo lograrías-

Remus no entendía nada, no tenía ningún recuerdo feliz, no se acordaba de nada, ni siquiera recordaba como lo había logrado. Durante la fiesta, en vez de pensar en Sirius, Remus se preguntaba si había hecho algo en el mundo muggle para logra hacer el encantamiento Patronus.

Mientras en un estudio de cine

Gary revisaba el guion una y otra vez, pero no importaba cuanto leyese, no sacaba aquel beso de su cabeza. Su celular sonó y era su amigo David quien lo invitaba a almorzar. El actor no perdió su tiempo y fue al restaurante que su amigo le indico.

-Hey Sr. Oldman. Tanto tiempo sin verte- dijo David Thewlis-

Gary quería darle otro beso a su amigo. Estaba necesitado de los labios de su amigo, pero Anna la novia de David estaba ahí. Gary no entendía que pasaba.

-Hola, David, ¿Cómo amaneciste?-

-¿Bien? – Gary saludo a Anna, la verdad quería estar solo con David.

-¿Migraña?-

-No ¿De qué hablas?- contesto David

-Bueno, tú ayer estabas ebrio y yo…-

-¿De que hablas? Pase toda la semana en la casa de Anna, ni quiera pude ir al teatro-

Gary no entendía nada, él sabía que David pasó la noche en su casa. –Pero tú, dormiste en mi casa y dijiste que eras un hombre lobo que le gustaban los hombres y algo de muggle no sé qué-

Anna y David se rieron –Amigo, no Salí para nada durante la semana, sea quien sea que hayas conocido era idéntico a mí-

-Pero… pero…- Gary estaba en shock, se levantó de su silla, dejo solo a la pareja quienes no paraban de reírse del hombre lobo gay.

Gary manejo hasta Hyde Park, en donde recorrió el mismo camino de aquella noche. Se colocó bajo el mismo árbol en el que había encontrado al descocido que se parecía a David, Se tocó los labios, preguntándose donde podría estar aquel desconocido, quien le había dado su mejor recuerdo.

Notas finales:

Espero les haya gustado. hasta pronto :)


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