(POV RYEO WOOK )
Al despertar siento algo alrededor de mi cintura, volteo y veo el brazo de Jong Woon, sonrío siempre amanecíamos así, quite su brazo dejándolo recostado, al momento en que deje la cama Jong Woon recorre su brazo buscándome, me da ternura al momento de que toma mi almohada abrazándola con fuerza. Ya son 5 meses que salimos, y si, ya hemos tenido sexo, su pene es anormal aun me duele cuando lo hacemos y más cuando fue la primera vez, me duele solo de recordarlo.
(FLASHBACK)
-Aaah Jong Woon AAAAHHH DUELE- le di una bofetada para que me dejara, para que lo sacara, arde como mil demonios
-Ah ah ¿Por qué hiciste eso?... ah~
-Aaah lo siento… pero sácalo ahh está demasiado grande aaahh- puse mis manos en mi rostro en modo de desesperación, y aun asi Joon Woon no lo hizo.
(FIN DEL FLASHBACK)
Me cambie me pongo unos jeans azules, un polo negro, y mis tenis favoritos, Salgo a la tienda por unos vegetales para hacer el almuerzo yo siempre me encargaba de la comida, compre apio, unas cebollas y otras cosas, pase por una farmacia quiero comprar un lubricante pero me da pena, a Jong Woon le gusta hacerlo sin lubricante.
Mi celular suena es un mensaje de Jong Woon
“-Pequeño, ¿Dónde estás?-”
No me acordaba que no le avise a mi Woonie salí de la farmacia y me fui directamente a la casa, Esta Woonie recargado en la pared de la entrada está enojado, es muy celoso;
-¿A dónde fuiste?- camino hacia mí, toma mi mano halándome hasta recargarme en la pared
-Fui a la tienda por una vegetales- respondí sinceramente
-No lo creo hueles a perfume de otro hombre y no es tu colonia- me dijo con su mirada insistente
-Es por… por- no sabía que contestar pues es la camisa que me presto Sung min cuando fui a su casa y a mitad del camino tropecé y caí en un charco
-Dime pequeño, no querrás que te lo saque a la fuerza - me muerde la oreja
-Espera te explico- lo separe de mí- mientras hago el desayuno-
Empecé a picar lo vegetales, ponerlos a cocer pero no encuentro la zanahoria recuerdo que compre una.
-Jong Woon , de casualidad ¿No te has comido la zanahoria que había?-
-No, se te olvido comprar zanahorias-
Esto es raro tendré que salir a compra más otra vez, tome la llave para volver a salir, pero Jong Woon me detuvo
- ¿A dónde vas precioso?-
- Por unas zanahorias-
- ¿Para qué?, aquí hay una- me dijo tomando mi mano y colocándola en su erección
- ¡Ah¡ Jong Woon, ¿Qué estás haciendo -
-Quiero jugar en la cocina-me toma del brazo y me lleva hasta la cocina
-Toma lávala por favor-me da la zanahoria y yo bien obediente lavándola, sentí su erección en mi trasero empuja un poco haciendo que me apoyara en la barra donde estaba picando las cosas, empieza a dar suaves embestidas, me desespere, ¿Por qué tenemos ropa?, no puedo sentir su pene del todo.
-¡aaamm Joong Woon hagámoslo! ahh si – me aferre de la barra
- No pequeño, estas cocinando- y me suelta, así nada más, como si no pasara nada
-ah pero, tú me dijiste que querías jugar- dije con mis mejillas más rojas que de costumbre.
-mmm… está bien- me voltea y me toma de las piernas levantando me y sentando me en la mesa, me besa lujuriosamente que provocando que gimiera, toma mis mejillas haciendo más profundo el beso, siento como su lengua recorre toda mi boca
~mm ah mmm yeye ah~
Seguí gimiendo entre nuestras bocas, sentía como masajeaba mi miembro muy bruscamente, pareciera que tenía hambre pero no era tan lindo cuando tenía hambre, me quita el mandil y lo aventó a un lugar en la cocina quita mi polero negra también bruscamente, empieza a morder mi cuello.
~ ah no aguanto más, quítate esto ~ tentando sus caderas
~No quiero~ levanto la vista, no le importo que me negara, arranco el pantalón, me hizo levantar las piernas hasta la mesa,
Se relamió los labios y con su dedo acaricio mi entrada metiendo la punta de su dedo, me estaba excitado si de Por si con un solo toque me ponía al cien mete el dedo completo con dificultad.
~aah Wonnie aaah~
Besaba su cuello, me encanta morder su cuello dejar marca para que supieran que era mío, toma mis mano y las pune alrededor de su cuello besándome fugazmente se separa de mi
~ Observa lo que sigue~
Toma mi rostro para que viera lo que haría, toma la zanahoria y empieza a hacer pequeños círculos en mi entrada
~ah no creo que lo hagas ~
-¿Quieres apostar?-
~Aahh por eso pediste ahhh que la lavara verdad ~
~Si, me las voy a cobrare ~
Seguía haciendo círculos con la zanahoria hasta que mete la punta
~Aaah eso es sucio ahh~
~ No, no lo es, tu solo disfruta ~
Seguía metiendo la zanahoria y para mi mala suerte era grande y ancha por eso la había escogido, la dejo por un momento
~ Tan pronto estas así solo es una zanahoria~
~aaaah es más grande que la tuya ~ su rostro es una obra de arte
- como… te arrepentirás- toma la zanahoria y de un fuerte empujón la mete sin más
-¡AAAAAAAAAA¡-
- Que sucede preciosura ¿No te gusta?-
~aah ah ah más despacio ah ah ah~
Pero hizo caso omiso al contrario empezó a masajear mi miembro, puse mis brazos en su pecho en un intento de pararlo, pero mis esfuerzos son inútiles.
~ Harás como nuestra primera vez ~
~aahhh lo siento ahh ese día ahhh~ me corrí en su mano
~ Pero mira lo que paso aquí, ¿Por qué te corriste?, no te di permiso~
~aha ha ah mm ngahh~
Saca la zanahoria de mi interior, saca su miembro, está muy duro me estremecí de solo ver semejante cosa este hombre es anormal no es la medida común, estaba en mis pensamientos cuando sin previo aviso se metió de una, como ya estaba acostumbrado ya no me dolia tanto como otra veces.
~Me gusta cuando te pones así~ me dijo con una voz ronca soltando un gemido,
~aaah mm Wonnie aaa más~ si, lo se, soy masoquista, me encanta cuando me duele
~Aah pequeño sigues tan… ahhh estrecho… aa hh me encanta ~
Se escuchaba sus gruñidos y mis gemidos por toda la casa, creo que mis vecinos nos escuchaban, pero o que mas me volvió loco es cuando nuestras pieles chocan y dan un hermosos sonido,
~aaah ra rápido aaa~
~ Ya ah casi lo encuentro ~d
Se apoya en la mesa me abrase a su cuello, dio una envestidas que sentí que me partia en dos, la mesa se movió muy brusco, solo se escuchó cuando callo el cuchillo al suelo
~Aaa Wonnie me… ahh dejar sin caminar aaaaah~
~Eso quiero wooki… ah eso quiero~
~Aaah ya ya no aguanto ~
~Ahh yo tampoco ahh ahh~
Seguía dando embestidas hasta que no aguante más
~Aahmm ~ me abrace a su cuello para que no escuchara mi gemido, unas estacadas más se corre dentro de mi
~Aahh Woki, aha porque, me… ah debes un gemido pequeño~
Sale de mí lentamente, me abraza y me bajo de la mesa, estuvimos un rato mientras limpiamos todo , recogí lo que se cayó, me duele mi trasero,
- ¿Estas bien mi jirafita?-
-Lo estaría si la tortuga no fuera tan brusco-
-Lo siento pero me puse celosos, cuando no te vi cuando desperté me sentí un poco triste, y te busque pero no estabas pensé que te habías ido con Sungmin-
- De todos modos ya paso, no te preocupes- le di un beso, me abrazo y olio el polo
-Pero ¿De quien es este perfume?-
- Aaa es que el polo me la presto Sungmin-
-Ya ves te lo dije, fuiste con tu amigo Sungmin-
-No mi tortuguita, me la presto cuando fui a su casa y me caí en un charco mojándome desde entonces no se la eh devuelto, es la segunda vez que la uso-
-Está bien-
Se acerca a mi acariciando mis mejillas me acerco para poder besarlo como me gusta, al fondo escucha un sonido
-Buenos días- grito Sungmin
- Buenos días, ¿Dónde esta kyu?-
-Aquí viene, amor, ven-
-Buenas-dijo kyu enojado-
-Que paso, ¿Por qué esta enojado?-dijo yeye
-Porque Sungmin no lo quiere hacer, no lo hemos hecho desde hace tres días-
-Aaa porque quiero hacerte una sorpresa-dijo Sungmin feliz dirigiéndose a la cocina
- ¿Quieren desayunar?-
-Si claro- dijo kyu
-Ryeowook, ¿que tiene esta zanahoria?- pregunto curioso Sungmin
-ahh este es es mmh- voltee a ver a Wonnie se había ido con kyu al sofa
- ¿Esta bien si me la como?- dijo
Sungmin dándole una mordida a la zanahoria
-Es… espera Sungmin-
-Esta deliciosa. ¿Qué le pusiste?-
-AMOR-grito Wonnie desde el sofá
Desayunamos ramen porque lo que estaba preparando se quemó.
Al menos comiste zanahoria- dijo kyu
- Y Wooki también- dijo Wonnie sonriendo
Me sonroje, y así paso una semana metiéndome todo tipo de cosa que compraba en Internet, hasta que un día se cansó porque fingí que me dolía demasiado