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I'm Still Here por Ashtad

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Notas del fanfic:

Todos los personajes pertenecen a DC/ Warner Bros.

<3

Notas del capitulo:

Hola hermosos! Ya se que tengo mas fics pendientes pero es que ah! No puedo dominarme como debería 7n7

Pero ya estoy trabajando en los otros lo prometo  :)

 

Bueno… pues lo de siempre, besos y abrazos apapachones.   /*u*/

 

El emblema de empresas Wayne colgaba de un borde de la torre que antes lo mostraba orgulloso junto a una ventana completamente rota. En el interior del edificio el causante del impacto se masajeaba la cabeza mientras intentaba despejar el dolor.

 

-Linterna estás bien?- escuchó al velocista por su comunicador.

 

-Rayos, tenemos que detenerlo antes de que haga algo completamente desquiciado.

 

-Wonder Woman está intentando sacarlo de la ciudad.

 

El cielo se rompía una y otra vez cada vez que ambos puños se enfretaban, la poderosa princesa de Temiscira blandía su espada con maestría y gracia lanzando gruñidos de advertencia. Tremenda guerrera no dudó ni un segundo en ser la primera en atacar, sus mechones negros se agitaban con el viento que sucumbia ante su elegante y poderoso cuerpo.

 

-Detén esto, no quiero lastimarte- grito antes de esquivar un puñetazo con dirección a su rostro. Sin duda la amazona era feroz, pero en esos instantes aun continuaba reprimiendo su poder, después de todo era su amigo con quien ahora peleaba.

 

-No puedes!!

 

Si no lograban darle más tiempo las consecuencias serían catastróficas. Un movimiento veloz la lanzó en picada hacia una avenida ya despejada por Flash, su cuerpo cayó en el duro concreto haciendo un hundimiento considerable. Al alzar la vista lo vio con la intención de rematarla pero antes de que aquel cuerpo bajara más allá de los edificios un rayo verde en forma de bota lo lanzó volando varios metros.

 

-Flash- hablo seria la princesa limpiándose un pequeño rastro de sangre- ya lo localizaste?

 

-No he tenido tiempo, es pleno día, hay muchos civiles.

 

-Mantenlos a salvo- levito nuevamente preparada para el segundo round- cuando tengas un momento lleva a Cyborg a los laboratorios S.T.A.R. que le den atención médica- ordenó la mujer, para todos era bien sabido que ella junto con Batman y Superman eran los líderes, ahora ella controlaba las operaciones tácticas, algo innato de la realeza.

 

A ochenta y cinco kilómetros en el aire, Linterna Verde lo seguía manteniendo a raya, Shazam había sido derrotado justo en el momento menos oportuno con una lluvia de golpes que lo dejaron inconsciente en algún tejado de Gótica. Cuando Wonder Woman volvió a hacer su aparición el enfado exploto en su máximo esplendor, ellos dos aun intentaba controlarse aunque siendo sinceros ya estaban llegando a la cúspide de su resistencia. Y no era para menos, ya que con quien ahora luchaba sin tregua la Liga de la Justicia era su poderoso líder: Superman.

 

Sin mediar la fuerza de sus ataques derrotó al Linterna Verde y poco le faltaba para hacer lo mismo con la guerrera. El velocista había intervenido en el combate debilitando mucho pero la fractura de ambas piernas lo dejaron fuera e inconsciente. Con todos fuera del camino solo le faltaba un miembro a quien confrontar, y ahora con el enfado quemando todas sus células escucho el palpitar de aquel corazón helado a la perfección.

De no haber estado tan dominado por sus instintos se habría extrañado de escucharlo tan cerca de ahí, aún continuaba en la Torre.

 

Se adentro con la pose de un Dios en el despacho principal, todo permanecía en un inmaculado orden que daba la impresión de que ninguna batalla se hubiera liberado a los pies del rascacielo central de la ciudad, la capa roja se mecía aterradora bajo sus pies.

Cuando lo vio parado usando un traje Armani azul real y no su armadura un impulso eléctrico le acaricio la espalda. Sin caminar se elevó hasta quedar enfrente del playboy quien dejó de rebuscar entre uno de sus cajones un mecanismo secreto que le daría acceso a un trozo de kryptonita.

Cuando Cyborg le comunicó el estado del hombre de acero tomo la ruta más cercana para llegar al mineral, se encontraba lejos de la mansión y al ver como de un manotazo sacaba volando a Hal decidió usar la que mantenía en su oficina. Lo que no estaba en los planes de Bruce había sido un incendio que se extendía al complejo departamental habitado por gente que se resguardaba ahí. Apagar el fuego le costó trabajo ya que no traía consigo su cinturón ni armadura. En esos momentos era Bruce Wayne, el famoso millonario quien se disponía a comer con su actual pareja Berlín Moretz, una despampanante alemana hija de Fausto Moretz, criminal internacional que se alojaba en el país buscando ampliar su negocio.  

 

-Te encontré- la áspera voz inundó la estancia.

 

-Clark- tenía que ser cuidadoso, ya había dejado a tres de sus compañeros inconscientes- tienes que calmarte, este no eres tú.

 

-Ah no? Entonces quién soy Bruce? Porque dudo mucho que TÚ...- escupió la palabra- ...me conozcas.

 

-Es kriptonita roja Clark, Moretz contrato al espantapájaros para hacer que tu acabaras con la Liga para luego él tomar el control- los ojos del kryptoniano iluminaban de un reluciente carmín su rostro. Podía sentir el calor abrasador salir de sus poros mientras lo veía acercarse, casi como un depredador- dejame ayudarte.

 

-¿Y tenías que hacerlo?

 

La pregunta era extraña por sí sola y la escena se completó al ver el rostro compungido de su compañero. Hizo un recordatorio mental intentando encontrar la razón del enfado, pero por mas que se esforzaba su mente no le procesaba ningún incidente. La verdad es que lo más que podía ignoraba al reportero. Le agradaba bastante las plasticas simples que tenían y las ocurrencias con las que lo llegaba a asaltar pero sentía que cada vez se involucraban más y por experiencia sabía era peligroso. Al no hallar respuesta preguntó con la seguridad de que su tono de voz no lo delatarían con su nerviosismo que borboteaba y pedía por salir.

 

-¿De qué hablas Clak?

 

-¡Tenias que salir con la hija de Moretz!¡Toda la prensa cree que van a casarse!

 

-¿Estas… celoso?- dependiendo de la respuesta todo se complicaría o facilitaria a gran escala.

 

-¡Sabías lo que siento! Eres el detective más grande del mundo así que NO te atrevas a negarlo- dando un simple manotazo el escritorio de caoba cedió partiéndose en dos, los papeles y plumas cayeron- ven ahora.

 

Le sorprendió más su propia docilidad que el tono a orden que le demandaba la acción. Superman lo sujeto colocando su frente sobre su propio pecho con la intención de permitirse volar lo más rápido posible sin negarle el aire.     

No tuvo que preguntar a dónde se diriguian, el fresco y frío aire le gritaban “La Fortaleza”.

 

Lo tumbó sobre la cama de su amplia habitacion privada con el rictus completamente serio, sus ojos que antes eran de un puro y limpio azul estaban manchados por el rojo y algo mas. Haciendo cuentas mentales el murciélago concluyó que el efecto del mineral lo dominaría por aproximadamente cuatro o cinco horas. Fue él quien sonrió comprendiendo que si quería frenar a su amigo tendría que sacrificarse. ¡Y de qué manera se iba a sacrificar!

 

    

Le jalo por la nuca plantando un beso por damas húmedo, sus lenguas se degustaba con agitación, los pulmones de Bruce se esforzaban para soportar los largos besos que lo devoraban, Cuando le falta el valioso oxígeno se separaba ganando gruñidos de desaprobación. Continuaron con el placer que se regalaban esas bocas, una experta y la otra demandante, la mejor combinación. No fue del todo consciente cuando el superhombre lo alzó para ponerlo de pie.

 

-De rodillas.

 

En otras circunstancias le habría enviado directo a Krypton y de regreso, él era Batman y no se humillaba ante nadie, pero lo cierto era que la actitud dominante de Kal- El lo excitaba, lentamente fue descendiendo hasta que sus rodillas sintieron la áspera alfombra que se extendía frente al lecho. Cuando se disponía a bajar la parte inferior del traje la amplia mano del reportero le sujetó de los mechones negros para frenarlo, en una nueva orden sentenció sonriendo por primera vez.

 

-Solo la boca.

 

Haciendo uso de todos sus conocimientos como playboy se ayudó de los dientes y la lengua para despejarse el camino. El miembro, al igual que su dueño, era de otro mundo. Bruce nunca había visto uno de tamaño semejante, y por el contrario de asustarse su sonrisa se amplió imaginando lo que se aproximaba.

 

Sus movimientos lentos eran su la forma perfecta para castigar y vengarse de la posición en que lo tenía, dio una única lamida de la base hasta la punta y luego sopló sobre este causando un escalofrío agradable. Los ojos penetrantes de Clark lo observaban con fuego y sin importarle la opinión del otro introdujo su anatomía en la cavidad ajena. Recibiendo el mensaje Bruce comprendió que el otro demandaba movimiento.

 

-No estoy para juegos ahora Bruce- quito sus manos para que el otro se moviera a su gusto- ya tendremos tiempo de eso después de que hagas que me corra.

 

Fue así como el millonario inició su meneo, daba pequeñas succiones rápidas sintiendo el miembro crecer en su boca, hacía chocar la punta del glande en su mejilla interna. Kal echó la cabeza hacia atrás mientras jadeaba levemente.

Siguiendo el recorrido bajo la lengua y la fue enredando en la corona y cuello del pene, tambien paso por las venas dorsales que ya se marcaban a causa del flujo sanguíneo que se agolpaba. Siguió con la labor hasta que el movimiento brusco en las caderas lo embistieron buscando alcanzar el clímax. Respirar le resultaba una hazaña titánica hasta que sintió el semen de su amante escurrirse por la garganta y un poco más escapando por la comisura labial. No necesito escuchar ninguna petición, fue él mismo quien decidió tragar y relamer sus labios para consumir toda la esencia kriptoniana.

 

Complacido con la escena que se le brindaba, nuevamente lo arrojó sobre él cómodo colchón, esta vez con menos brusquedad, de tres movimiento se despojó de su traje y con otros dos, se deshizo del costoso traje de Armani. Volvieron a besarse, esta vez fue más lento pero no por eso con menos pasión o lujuria. Después de algunos besos más Bruce lo miro de frente comprobando que el color azul volvia a brillar tenuemente.

 

-Bruce- susurro su nombre de forma diferente a las primeras ocasiones, ahora se escuchaba más sensual, como si nuevamente volviera a ser él, sin embargo el giro brusco que le dio al cuerpo del murciélago indicaba que aún era presa de los efectos de la piedra roja.

Lo coloco en cuatro manteniendo el rostro enterrado entre las almohadas, besaba la espalda de Bruce y este solo se podía derretir entre ante aquellas caricias.

Lo preparo rápido y sin poner especial ahínco en ello. Cuando ya se disponía a volverlo suyo fue Bruce quien le pidió hacerlo de frente.

 

La penetración fue rápida y cuidadosa, de a poco se adentraba en el interior cálido que lo apretaba con sensualidad y delirio. Clark levantó las caderas ajenas para dar inicio a un vaivén delicado que fue ganando potencia en poco tiempo. Ambos gemían llenos de placer sin esforzarse por ocultarlo, les faltaban manos para sentirse por completo unidos, las uñas de Wayne se clavaban en los brazos y espalda de Clark quien lo llenaba por completo. Cuando encontró el punto dulce que arqueó la espalda del millonario no se controlo y arremetió golpes furiosos en esa misma parte.

 

Una y otra vez lo hicieron ese día, con cada nueva ronda las caricias se volvían más lentas, dulces y cariñosas, de a poco el reportero empezó a dar besos en el cuello, los hombros y todo lo que estuviera a su alcance. Durante mucho tiempo lo hicieron, cambiaban de posición, en algunas Bruce montaba a Clark clavandose a su antojo sobre el poderoso falo que se erguía dentro de él, en otras, Kent lo colocaba boca abajo y arremetía sobre el trasero que se alzaba en alto para él. Cuando el cuerpo del humano alcanzo su limite se quedo dormido entre los brazos fuertes que eran capaz de soportar el peso de la luna.

Al abrir los ojos se halló con su compañero sentado en el borde de la cama dándole la espalda, se mantenía en su mar de pensamientos, con los recuerdos de hace unas horas chocando al igual que las olas violentas en la playa.

Le dolía la parte baja de la espalda y se asombró por la cantidad de mordidas y hematomas que pintaban su blanca piel.

 

-¿Clark?- se aventuró a preguntar.

 

-Bruce, yo… yo no sé qué pasó, sabía lo que hacía pero… no fui capaz…- respondió sin atreversea enfrentar los oscuros irisis- lo lamento.

 

-La cama es resistente- comentó restándole importancia- me darás ropa o tendré que andar desnudo por aquí?

 

La pregunta tranquila lo llenó de valor como para enfrentarse al hombre que amaba con el alma y corazón. Su arrebato de pasión derivó de muchos factores, el primero eran los constantes desplantes de Batman, al principio de su amistad se mostraba cómodo a su lado y cuando Clark quiso ir por más fue rechazado, eso lo pudo manejar con la psu amistad que tenían, pero cuando los rumores de un posible matrimonio entre Wayne y esa mujer alemana llegaron a sus oídos sintió llenarse de dolor, desesperación e ira.

Todos aquellos sentimientos eran una combinación que explotaría en cualquier momento, la cucharada final fue el gas de espantapájaros mezclado con kriptonita roja que hizo sacar sus deseos más primitivos y carnales.

El reportero sabía que Bruce tambien sentia algo pero su corazón terco se negaba a aceptarlo, pensó que si le daba su tiempo él llegaría solo, ahora lo tenía en su cama y no sabia si sentirse el hombre mas feliz del mundo por cumplir su fantasía de unirse con Bruce, o ser el hombre más miserable por haber perdido la amistad y confianza del arisco guardian.

 

-Bruce, la verdad es aunque hubiera sido capaz no creo haber querido parar, sabes lo que siento, esto es real, sé que no fue la mejor manera.

 

-¿Pero?

 

-Pero nada, no quiero mentirte.

 

-Clark… sabes que no puedo.

 

-Lo sé- le sonrió de manera amarga- te llevaré a casa- soltó una risa fingida- Diana va a matarme por haber caído en la trampa tan fácil.

 

-Kal… ahora no puedo, pero tal vez pronto, no quiero que te decepciones si no soy lo que esperas.

 

-¿Estas… estas diciendo que si?- fue como si la alegría volviera a su vida, sonrió emocionado.

 

-Digo que hay que conocernos.

 

-Me darás la oportunidad- murmuró más para sí mismo como si no terminara de creer lo que pasaba.



“Me enamoré de ti, sabiendo quien eres. Sabiendo que nuestro amor no iba a ser fácil. Que te iba a extrañar, que iba a ser difícil no estar a tu lado, sabiendo que ibas a partir y que yo iba a esperar a tu regreso. Pero por el amor que nos tenemos, se que todo podremos y te seguiré esperando lo necesario porque en la vida al igual que el amor, nada es fácil.”

 

“Aunque no sepa quererte de la forma que a tí te gustaría, siempre te querré con toda mi corazón de la mejor forma que sepa.”

 

Notas finales:

Este es un fic que tenía la toda intención de ser un lemon (no sé si quedó decente pero pos le hacemos la lucha), la historia fue nada más un pretexto xD jajaja lo sé, no tiene sentido, pero tenia que sacarlo de mi sistema fujoshi que lo pedía :v


Gracias por leer!!


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