Japón lentamente iba cambiando por una capa de maldad y odio que, descaradamente, era llamada "Paz". Los derechos de las personas fueron siendo eliminados, teniendo que hacer todo lo que dijera el gobierno si objeción alguna o serías asesinado; pareciera que habíamos vuelto siglos atrás, pero con tecnología.
Con el tiempo, esta fue la nueva realidad de los japoneses, como siempre lo hacen, se habían adaptado para sobrevivir. Aunque no todos aceptaban esa realidad, creándose así pequeñas organizaciones. Claro estaba que había equipos que se encargaban de contrarrestar estas “pestes”.
Pareciendo más mercenarios que militares, se encontraba el mejor equipo de todo Japón, o como se hacían llamar, Los Siete Iniciados. No trabajaban directamente bajo las órdenes del gobierno, pero tampoco era una organización que se deshacía de las pestes gratis. Este equipo era conformado por, como lo dice su nombre, siete hombres:
Iwaizumi Hajime (Capitán)
Estatura: 179.3 cm
Edad: 27 años
Especialidad: Excelente en corta y larga distancia con armas, y en combate cuerpo a cuerpo.
Ubicado en: Equipo Sigiloso
Curiosidad: Es el segundo más bajo de su equipo y, aunque no lo demuestra, le molesta mucho.
Kuroo Tetsuro (Vice capitán)
Estatura: 187.7 cm
Edad: 27 años
Especialidad: Combate cuerpo a cuerpo, parkour y peleas con cuchillos de corto alcance.
Ubicado en: Equipo de Combate
Curiosidad: Iwaizumi lo considera el más fuerte y difícil de derrotar de su equipo, aunque no se lo ha dicho.
Daichi Sawamura
Estatura: 176.8 cm
Edad: 28 años
Especialidad: Defensa
Ubicado en: Equipo de Defensa/Protección
Curiosidad: Daichi rara vez entra al “campo de batalla”, él prefiere dar su mejor esfuerzo con la protección civil.
Kageyama Tobio
Estatura: 180.6 cm
Edad: 25 años
Especialidad: Disparo a larga distancia.
Ubicado en: Equipo Sigiloso
Curiosidad: Es el más joven del equipo, pero es considerado y respetado como un experto francotirador.
Bokuto Kotaro
Estatura: 185.3 cm
Edad: 27 años
Especialidad: Combate cuerpo a cuerpo, peleas con cuchillos de corto alcance y parkour.
Ubicado en: Equipo de Combate
Curiosidad: Compite muy a menudo con Kuroo para ver quién es el más fuerte: casi siempre pierde él. También era un muy respetado candidato para ser el capitán, pero sus cambios de ánimo se lo impidieron.
Tsukishima Kei
Estatura: 188.3 cm
Edad: 26 años
Especialidad: Análisis del entorno y planeación.
Ubicado en: Equipo de Comunicación
Curiosidad: Es el más alto e inteligente del equipo. No le gusta combatir. Es el único en el equipo de comunicación.
Asahi Azumane
Estatura: 184.7 cm
Edad: 28 años
Especialidad: Combate cuerpo a cuerpo.
Ubicado en: Equipo de Defensa
Curiosidad: No le gusta lastimar a las personas por eso, aunque sea de los más fuertes en el equipo, está en la defensiva junto a Daichi.
-Hay aproximadamente 10 enemigos, van en parejas de dos, 2 de las 5 parejas se encuentra a las 3 en punto del equipo de combate; el resto está en el techo de los edificios A y B. – Se escuchaba a través del radio la voz de Tsukishima que se encontraba en la camioneta del equipo.
- El equipo de defensa ha evacuado a todos los civiles del área. – Dice Daichi.
- Kageyama y yo podemos ver claramente a los que se encuentran encima de los edificios. Estamos en una muy buena ubicación. – Decía el capitán.
- Pido permiso para disparar, capitán. – Preguntaba Kageyama mientras apuntaba a los objetivos.
- Esperamos la orden del capitán. – Menciona Kuroo mientras se esconde detrás de una pared, observando a los enemigos mencionados.
- Todos tienen permiso para disparar a matar. – Afirma Iwaizumi.
Después de eso, se escuchó el primer disparo, seguido de múltiples disparos.
-2 de 6 enemigos han caído, capitán.
- Bien hecho, Kageyama.
- ¡Hey, hey, hey! ¡En lo que ustedes hablaban, mi Bro y yo acabamos con nuestros enemigos! – Gritaba muy alegremente Bokuto por el radio.
- ¡Cállate, estúpido búho! No tienes que gritar a través del radio. – Kuroo regañaba a Bokuto porque casi deja sordos a todos.
En eso aparece de salto un enemigo, disparándole a Kuroo.
-¡Mierda! – Gritó Kuroo mientras esquivaba rápidamente la bala - ¡Bokuto!
- ¡Hey! – Bokuto le disparó al enemigo.
- Lentes, dijiste que había nada más 4 enemigos. – Kuroo se quejó con Tsukishima.
- El enemigo anterior estaba en el techo con los demás.
- Lo siento, - se disculpó Kageyama – se me escapó sin que me diera cuenta.
- Al menos avísanos si eso pasa, casi me matan. – se rasca la nuca.
- El enemigo ha sido aniquilado. Todos los equipos regresen al punto de reunión. Repito. Todos los equipos regresen al punto de reunión acordado. – Se escuchaba Tsukishima serio como siempre.
- Vaya, al menos preocúpate un poco por tu superior, ¿no lo crees? – Decía en tono burlón Kuroo.
- Me siento tan apenado de que la bala no te haya alcanzado. – Tsukishima respondió molesto.
- Todos guarden silencio y vayan al punto de reunión. – Suspiró muy fuertemente Iwaizumi – En serio a veces parecen niños.
Al cabo de un rato, todos llegaron al punto acordado.
-Ah, por fin acabó. – Dijo Asahi mientras se tocaba el pecho – Casi me muero del susto.
- Oye, no es como si hubieras estado directamente en el campo de batalla. – Daichi se enojó ante tal comentario.
- ¡Yo SÍ casi me muero! – Gritó Kuroo – Si no fuera porque tenía a mi Bro junto a mí.
- Bro, yo siempre estaré a tu lado.
- Gracias, Bro, tú sí me quieres. – Mira a Tsukishima – No como cierta persona.
- Que bueno que te das cuenta, Kuroo-San. – Tsukishima sonrió muy maliciosamente.
- Vamos, Tsukishima, sabes que me amas – Le lanza besos imaginarios a Tsukishima, mientras este lo mira con cara de asco.
- Ya, ya. Vámonos de aquí para poder cobrar nuestra recompensa. – Iwaizumi llamó la atención de todos mientras se sacudía las manos.
Pareciera que la palabra recompensa había oprimido un botón en la cabeza de todos, ya que hizo que guardaran silencio y se subieran pacíficamente a la camionetas. Al cabo de un rato llegaron a su base.
-Iwaizumi, ¿cuánto nos van a pagar esta vez? – Preguntaba Kuroo mientras se quitaba todo el armamento que tenía puesto.
- $280,000 yenes – Dijo Tsukishima, ya que él se encargaba del tema del dinero – Nos va a tocar de $40,000 yenes a cada quien.
- ¡Genial! Con eso podremos tener una laaaargas vacaciones, realmente las necesito. – Gritó Kuroo mientras estiraba los brazos.
- No te adelantes tanto, - suspiró pesadamente Tsukishima – tenemos otro encargo.
- ¿Otro? ¿Tan rápido? Todos queremos un descanso… - Lloriqueaba Bokuto.
- Bueno, bueno, escuchemos a Tsukishima y ya decidiremos si lo aceptamos o no. – Dijo Daichi palmeando a Bokuto en la espalda.
- Te escuchamos, Tsukishima. – Asahi le sonrió cálidamente a Tsukishima.
- Ah… Bueno, este podría considerarse un “caso especial” que viene directamente desde el gobierno.
- Vaya, vaya, hasta el gobierno quiere nuestra ayuda; me pregunto qué le estará costando tanto – Dijo Kuroo en tono burlón.
- El gobierno ya ha mandado a varios de sus mejores equipos a atrapar o asesinar a estos individuos y no han tenido éxito. Esta organización se estima que está formada de 5 a 7 persona.
- ¿Un equipo tan pequeño y hasta el gobierno no ha podido con ellos? – Preguntaba muy curioso Bokuto.
- Sí, el gobierno los ha apodado “Los Ocultistas”, los consideran una máxima amenaza, porque ya han hackeado varias veces el sistema y descargado varios documentos con información clasificada del gobierno. Tiene pequeñas pista de quiénes creen que conforma el grupo, y también creen que su base principal se encuentra en Miyagi.
- Suena interesante.
- Sí, y esa no es la mejor parte. Si los asesinamos, o de preferencia, capturamos, nos van a pagar $700,000 dólares.
- ¡¿70,000…?!
- ¡¿Dólares…?!
- Cállense ustedes dos. – Iwaizumi reganó a Kuroo y Bokuto. – Nunca nos habían ofrecido tal cantidad enorme de dinero, pero eso significa que realmente son muy peligrosos. Vamos a decidir si lo aceptamos o no. Levanten la mano quienes están de acuerdo.
Todos levantaron la mano a excepción de Tsukishima y Asahi quienes suspiraron al ver que habían perdido.
-Bueno, está decidido. Nos vamos dentro de una semana. Todos preparen sus cosas.
Mientras tanto en Miyagi…
En el sótano de un edificio abandonado se encontraba un pequeño grupo de cinco personas.
-Tal parece que el gobierno ha contratado a un grupo de mercenarios llamado “Los Siete Iniciados”, no tengo mucha información de ellos, sólo algunos nombres y otras cosas.
- Wow… Ahí dice que son el mejor escuadrón de Japón, ¿tan importantes somos, Kenma?
- No lo creo, Shouyo. Más bien tenemos muy fastidiado al gobierno.
- Eso significa que tendremos que ser muy cuidadosos.
- Suga-San, ¿estás nervioso? – Preguntaba Hinata al ver la expresión de Suga.
- Por supuesto que sí, ¿tú no? Es el mejor escuadrón de Japón después de todo.
- Sí, un poco, pero es más emocionante saber que pelearemos con el mejor de los mejores. – Decía Hinata muy emocionado.
- Aunque Kenma-San y Yamaguchi se encargarán de evitar un combate directo lo máximo posible.
- B-bueno, eso sí.
- ¡Vamos, Shouyo! ¡No te deprimas! – Nishinoya le gritó a Hinata para después pasar su brazo sobre el cuello de Hinata. - ¡Siguen siendo los mejores!
- Mira a quién tenemos de capitán.
- ¿Reconoces el nombre, Gran Rey? – Preguntó al ver a Oikawa muy sorprendido al ver el nombre del capitán.
- Claro que sí, aunque no tenga foto, sé exactamente de quién es este nombre, Chibi-Chan. Es mi mejor amigo de la infancia.
- ¡Es increíble que con el puro nombre reconozcas a alguien! – Hinata miró con asombro a Oikawa - …Por cierto, ¿dónde están Akaashi-San y Yamaguchi? – Hinata volteaba a todos lados buscando a sus compañeros.
- Yamaguchi está en su trabajo y Akaashi… bueno, él está consiguiendo información. – Suga embozó una pequeña sonrisa forzada.
- No me gusta que Akaashi-San consiga información de “esa” forma. – Hinata se enojó.
- Si no fuera porque Pretty Boy-Chan consiguiera información de esa forma, ni siquiera hubiéramos tenido tantos avances como hasta ahora. Él es el único con un pase especial. – Oikawa trató de calmar a Hinata – Todos tenemos que sacrificar algo para obtener lo que deseamos.
- Estaré en contacto con Akaashi para decirle nombres y ubicaciones para conseguir el tipo de información que necesito. – Dijo Kenma mientras se ponía unos auriculares. – No tenemos mucha información sobre ellos, tal parece que algunos datos y sus fotos no están en la base de datos.
- Okey, te lo encargamos. Bueno, ya que Neko-Chan nos ha dicho lo que tenía que decirnos, todos nos tenemos que retirar.
Así que estás vivo después de todo este tiempo, Iwa-Chan. Ahora que la paz ya no existe en este mundo, con esta pequeña organización seré capaz de crear un nuevo y mejor futuro. Es hora de buscar el fin a esta cruel realidad y alcanzar el sueño que teníamos de niños.
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- Vaya, aún después de tantos años, Miyagi no ha cambiado en casi nada.
- Tienes razón, Daichi. Es tan nostálgico para todos.
- Oigan, oigan, no todos somos de Miyagi. No puedo ubicar ni una mierda dónde estamos.
- No importa este lugar, Kuroo. Nosotros iremos a un hotel en el centro. – Iwaizumi respondió frío como siempre.
- ¿Y cuándo iremos de turismo? Quiero conocer a una bella chica.
- No venimos de turistas, Bokuto-San. Terminando la misión nos iremos de vuelta a Tokio.
- Dices eso como si no nos fuésemos a tardar más de una semana, Tsukishima, ¿acaso ya conseguiste información de Los Ocultistas? – Kuroo sabía la respuesta, pero quería molestar a Tsukishima.
- No tengo mucha información, pero me han dado nombres de personas que creen están en esa organización.
- Lo que importa es su ubicación, no los nombres. – Habló Kuroo - ¿No nos habías dicho que ya los habían rastreado varias veces?
- Lo han hecho, pero para cuando los equipos llegaron el lugar estaba abandonado.
- Ese hacker que tienen es impresionante. – Afirmó Kageyama.
- Si, se reportó que una vez emboscaron a un equipo completo.
- ¿Y no vieron el rostro de los secuestradores? – Preguntaba Daichi sorprendido al ver que, incluso después de secuestrar a un escuadrón de gobierno, no los habían atrapado.
- Directamente no se les vio la cara, pero tienen algunos sospechosos por la estatura y peso aproximado. – Aclaró Tsukishima.
- En Miyagi no hay cámaras de seguridad, por eso también es más difícil vigilar y confirmar las identidades de los sospechosos. – Mencionó Asahi.
- Desgraciadamente, no hay más que tres sospechosos. – Suspiró Iwaizumi.
Sugawara Koushi
Estatura: 174.3 cm
Peso: 63.5 kg
Edad: 28 años
Trabajo: Doctor en el consultorio particular “Karasuno”
Estudios: Universidad. Doctorado en Enfermería.
Akaashi Keiji
Estatura: 182.3 cm
Peso: 70.7 kg
Edad: 26 años
Trabajo: Psicólogo.
Estudios: Universidad. Licenciatura en Psicología.
Kozume Kenma
Estatura: 169.3 cm
Peso: 58.3 kg
Edad: 26 años
Trabajo: Actualmente desempleado.
Estudios: Licenciatura en Programación.
-Basándonos en la información y los estudios que tiene, creemos que el hacker es este último, Kozume Kenma. Es un experto en programación. Capitán, es toda la información que tenemos, no puedo ser de más ayuda si no tengo más datos.
- Mmm… Dado que no tenemos más datos, necesitamos investigar a los sospechosos. Bien, está decidido; mandaré a tres hombres a que los sigan. Daichi, Bokuto, Kuroo, gracias por ser voluntarios. Se los encargo. – Iwaizumi miró con aprobación a los tres.
- ¡E-Espera! – Bokuto se dirigió a Iwaizumi - ¡Tienes a más personas en el equipo!
- ¡¿Ah?! ¡¿Quieres contradecir al capitán?! – Iwaizumi miró con desprecio a Bokuto, quien se ocultó detrás de Daichi inmediatamente.
- N-No, señor… - Susurró Bokuto.
- Ah, mierda. Ya que no hay de otra. – Suspiró Kuroo y se sentó en una silla.
- ¿A quién voy a vigilar? – Preguntó Daichi.
- No importa a quién elijan. Agarren uno. – Tsukishima extendió su mano con tres sobres – Será al azar. Dentro de cada sobre está la información que se tiene de cada individuo a vigilar. Se puede observar la ubicación del hogar y lugar de trabajo de los sospechosos. También la información básica y su foto.
Todos agarraron un sobre y lo abrieron inmediatamente.
-Bien, entre más rápido consigan la información mejor. Cualquier cosa que consideren importante, favor de reportármelo; cualquier dato podría sernos de ayuda.
-¿Akashee… Keiji? – Bokuto no podía leer el nombre de su sobre.
- Bro, ahí dice “Akaashi”, no “Akashee” Vaya, vaya, me tocó el hacker. ¿Quién te tocó a ti, Daichi?
- Sugawara Koushi. Es el doctor.
- Creo que te tocó el más difícil de investigar – Kuroo sonrió – Por lo general tienen horarios muy diversos y es un fastidio estar siguiéndolos.
- Ah…, espero que no sea así.
- Mañana van a empezar con su misión, así tomen un baño, descansen, o lo que sea, pero los quiero listos para mañana.
- ¡Sí, capitán! – Gritaron los tres a la vez.
- ¿Y los demás qué haremos, capitán? – Kageyama preguntó con curiosidad.
- Tsukishima se tiene que quedar aquí… Asahi y tú pueden recorrer Miyagi e investigar si hay algún lugar abandonado; por lo general las bases se ubican ahí.
- De acuerdo… ¿Y usted qué hará, capitán?
- ¿Yo? Voy a relajarme en algún lugar. – Respondió muy calmado.
- ¡¿Eh?! ¡Eso no es justo!
- Bokuto… - Iwaizumi tronó sus dedos de una forma que pareciera que se preparaba para golpearlo.
- L-Lo siento, capitán…
Todos se retiraron a sus respectivas habitaciones.
Oikawa, no voy a permitir que la paz sea quebrantada por una organización tan patética. Por ti. Por mí. Por nosotros.
~~~~~~
Finalmente ha amanecido. Todos los chicos están listos para empezar la misión que les dará una increíble suma de dinero. Apenas son las 06:00 am de la mañana del 9 de Enero, pero Bokuto, Kuroo y Daichi ya están vestidos con ropa casual.
-¡Joder! No me gustan las misiones sigilosas.
Mientras Kuroo se quejaba, Daichi ponía el auricular con el que podría contactarse con Tsukishima por cualquier cosa y Bokuto se veía al espejo y se decía a sí mismo lo guapo que es. Cuando todos se terminaron de arreglar, vieron el sobre para ver por dónde tenían que empezar. Todos estaban concentrados leyendo hasta que alguien los interrumpió.
-Todos están aquí, ¿ya están listos? – Preguntó Iwaizumi mientras entraba a la sala donde estaban los tres – Bueno, no me importa.
- Qué ánimos, gracias. – Decía Kuroo muy sarcásticamente.
- Soy el capitán, no una animadora en mini falda, y aunque no lo sea, les deseo la mejor de las suertes. – Iwaizumi les dedicó una pequeña sonrisa.
Todos sonrieron ante tal agradable comentario de parte de su capitán y se dirigieron hacia el elevador. El ambiente estaba muy tenso y callado.
-Hace tiempo que no tenemos una misión de este tipo, estoy un poco nervioso.
- ¿Nervioso tú? Eres el mejor en este tipo de misiones que nosotros dos. No entiendo cómo permitieron que Bokuto fuera parte de esta misión, es un completo idiota ruidoso que no sabe pasar por desapercibido.
- ¡Oye! ¡Eso fue muy grosero, Bro! ¡Yo no soy un idiota ruidoso! – Dijo cabreado – Es sólo que a veces olvido que estoy vigilando a alguien…
- Lo siento, Bro, es la verdad. ¿Ves? Mientras Bokuto no puede pasar desapercibido por lo ruidoso que es, yo no puedo por ser demasiado guapo y atractivo.
Kuroo hizo que todos sonrieran un poco, aligerando el ambiente y el nerviosismo que tenían. El elevador llegó al primer piso, lugar donde era tiempo de todos irse por un camino diferente.