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11:30 AM
El reloj me tortura una y otra vez ¿que se supone que deba hacer?
Ayer por la tarde acepte la invitación de Ray, pero nunca le dije una hora exacta. Pensé que llamaría para quedar de acuerdo. Pero antes de tomar el desayuno recordé que el no tiene mi numero, ninguno lo tiene.
Maldición, la estupidez de Tyson debe ser contagiosa… y doble maldición, como es posible que aun piense el cuando debería preocuparme por Ray.
Lo mejor será ir al parque de entrenamiento. Tal vez este ahí.
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11:59 AM
No, no esta. Recorrí los lugares donde entrenamos pero no aparece en ninguna parte. De hecho no hay nadie conocido. Solo un montón de niños y sus bladers como es de costumbre.
Y sentado en esta banca empiezo a creer que no vino. Seria mucho mejor así.
Por que aun no puedo aceptar por completo lo que dijo ayer.
... me gustas Kai…Kai, me gustas Kai
…Kai
- ¡Kai!
- ¡¿…?!
- Cuanto me alegra encontrarte – apareció Ray frente mío, con una mochila, sonriendo y con un entusiasmo propio de Tyson pero muy poco común en el - al no decir nada ayer, supuse que vendrías aquí.
- Pero –habiéndome hecho ya la idea de que no vendría conteste un poco asombrado - no dije la hora, como…
- ¿Cómo adivine? Jaja, no es que te hubiera esperado todo el día en este lugar. No, como crees. Solo fue coincidencia. Jajá
Finalizando eso se sentó alado mío. Para después crear un corto silencio entre los dos
- Mmm, y… ¿Cómo estas? – pregunte, abriendo por primera vez un tema.
Pero tan rápido como se sentó Ray, también se levanto y volviéndome a sonreír con una mirada tranquila y relajada que nunca veré en Tyson dijo:
- Sígueme, tengo que mostrarte algo.
Hice caso y me levante sin refutarle, el sabe que soy persona de pocas palabras.
- El lugar queda un poco lejos pero lo vale.
Diciendo eso ultimo caminamos en una zona lejana. Por la cual nunca antes había pasado. Subiendo pendientes y atravesando verdéales de magnitud.
14:00 PM
- Ray, a donde me estas llevando.
Pregunte al fin, luego de más de una hora de caminata y agotamiento.
- Falta poco – hablo con tranquilidad, y tomándome de la mano me jalo en la ultima pendiente – listo llegamos.
Al observar, solo note una gran cantidad de piedras y un bosque oscuro y sin vida, que notoriamente es por donde pasamos.
- ¿Esto? – no me esperaba que la sorpresa fuera tan mala.
- Claro que no, voltea. – rio con un poco de burla - Te dije que lo valía.
Y voltee. Y aun con el sol abrasador que daba directamente en mi rostro por que comenzaba a atardecer, sonreí. Por que era verdad. Lo que había frente a mi, realmente valía esta pequeña caminata.
Si Tyson estuviera aquí, se habría quejado todo el camino, y viendo esto. Pondría esa tonta y linda sonrisa que tiene…
Demonios.
- ¿Que pasa Kai, te vez molesto? ¿no te gusto?
- No, realmente es un lugar hermoso
Conteste con la verdad, solo me molestaba, que hasta en un lugar tan lejano como este, siga pensando en el.
- ¿cuantas personas conocen este lugar? – preferí cambiar el tema, antes de tener otro dolor de cabeza.
- A – se noto sorprendido por mi pregunta – bueno, descubrí este lugar hace poco en uno de mi entrenamientos. Así que, serias el primero en traer a ver esto. Y por eso…
- ¡¿…?!
Y sin percatarme de sus agiles movimientos, obtuvo un celular de su mochila y nos saco una foto con esa maravillosa vista de fondo.
- Espero que no te moleste. Pero mírala, ambos salimos bien. – me la mostro a una distancia lejana, como si temiera que le borrara la foto con solo tocarla.
- Mas te vale, no mostrar esa foto a nadie.
Fue lo único que pude decir. ¿Por que? Por que realmente conocer a Ray no era tan malo.
Luego de sentarnos en una pequeñas elevaciones de piedras donde un árbol deformado por el tiempo nos protegía del sol. Contemplamos la belleza del paisaje. Ray agarro su mochila y saco dos sándwiches. Para comerlos en un silencio tan pulcro y perfecto que me hacia respirar aire limpio.
- Kai, deberías darme tu numero, para que cuando no volvamos a ver, podamos encontrarnos rápido. – me dijo Ray sin quitar su mirada al frente.
Pero volvernos a ver, era algo que no había pensado.
- Vámonos – dije – si tardamos mucho tiempo en subir, tardaremos también en bajar.
El asintió y volvimos a recorrer el camino en silencio, pero en un silencio distinto al primero. Ya que este silencio, no tenia curiosidad, este silencio gozaba de dudas y penas.
17:00 PM
Regresamos al punto de partida en el parque. Agotados y sedientos. Ray sacó de su mochila dos botellas de agua. Y tomando asiento. Descansamos un rato, viendo como la calle oscurecía lentamente.
- Bueno es hora de irnos – me hablo Ray, luego de acabar su botella.
- Tienes razón - lo imite y antes de que el volteara para despedirse, agarre su hombro – espera, préstame un segundo tu celular.
- Vamos, dime que no borraras la foto – me dijo con un poco de frustración y tristeza
- No, no es eso – el me la dio y con rapidez escribí en su bandeja lo que me pidió – listo.
El al verlo se quedo sorprendido y sonrió levemente.
- Es mi número, no se lo des a nadie, no quiero recibir llamadas innecesarias. – le dije, dando media vuelta para retornar a mi casa - Adiós Ray.
- Hasta otra… Kai
21:00 PM
No esperaba que este pequeño encuentro fuera tan divertido. Ray es una persona simple pero entretenida.
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Me llego la foto que nos saco Ray
La imagen muestra a los dos, el sonriendo y yo con la mirada lejana perdida en el horizonte.
Donde se ve, una meseta plana con un rio sin fin que lo atravesaba y prados verdes, rodeada por gigantescas montañas las cuales parecen proteger el pequeño paraíso.
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De: Ray
Para: Kai
Espero que no te encuentres agotado por tanto recorrido. Te mande la foto del lugar por si la quieres. Y ¿Qué dices de vernos mañana nuevamente?
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De: Kai
Para: Ray
Por que no.
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