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ERES MI MAESTRO por itzerUchiha2

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Notas del fanfic:

Hola a todos, he vuelto recargada en mi estilo de escritura esperando que sea mejor, yo soy itzerUchiha e itzerUchiha1 la escritora de Batalla en el cielo y el circo de las ilusiones falsas fics a los que les haré muchas mejoras sin perder la trama de estas historias, he abierto otra cuenta pues no pude recuperar mis anteriores contraseñas, pero esta vez no dejaré abandonados ni mis fics ni mi cuenta lo prometo.

Este fic fue inspirado por la serie fate stay nigth, serie que me fascino pues su trama es atrayente e interesante, comento que los personajes que usaré si son existieron en la historia que ya irán sabiendo quiénes son conforme la trama avanza, tuve que estudiar mucho para poder lograr algunas modificaciones en las vidas de mis personajes pero sin alterar su escencia y hazañas.

Gracias a quiénes se tomen la molestia de leerlo.

Atentamente itzerUchiha2.

Notas del capitulo:

He seguido el consejo de una escritora que cautivo mi atención por su hermosa manera de escribir y decidí publicar el fic conforme vaya haciendo los capítulos porque estaba cayendo en el círculo vicioso de leer mi fic y cambiarle un montón de cosas y no publicarlo al momento así que los capítulos serán publicados conforme vayan siendo escritos ^_^.

Gracias por su atención, disfurten el fic.

MANSIÓN UCHIHA, 10 AÑOS ANTES

 

El sonido de una campana anunciaba el fin para el día de clases de las escuelas cercanas, miles comenzaban a salir de sus respectivas instituciones al momento de escucharla, conversando, corriendo, algunos incluso jugando, de entre la orda salío un chico que caminaba con paso tranquilo, ojos negros, piel blanca y cabello negro-azulado, su nombre, Uchiha Sasuke quién pese a tratar de mantener un bajo perfil era acosado por las chicas de su salón a quienes constantemente rechazaba de forma cortés con el tiempo ya se había acostumbrado a ello excepto por…

 

-sasuke!!!- una chica de cabellos rosas, ojos esmeraldas y piel blanca se le colgaba de pronto del cuello del pelinegro haciéndolo casi perder su equilibrio.

 

-sakura ten cuidado que podemos caernos- advirtió algo molesto tomando a la chica de la cintura para bajarla- te he pedido muchas veces que no te me cuelgues así no me agrada-explico con hastío ya que esta chica lo había metido en problemas al hacer correr el rumor de que eran pareja y peor aún que incluso se había acostado con ella.

 

-ay lo lamento sasuke es que me eres tan irresistible- le dijo volviéndolo a abrazar atrayéndolo hacia ella a lo que el chico ya harto abrió los brazos de la chica de forma fuerte haciéndola incluso un poco hacia atrás.

 

-ya basta sakura por enésima vez dejame en paz!!- le pidio molesto siendo observando por la chica con sus ojos llenos de lágrimas-lamento haber sido tan grosero pero pareciera que es el único modo en que puedes entender, de verdad lo siento pero yo no soy ni seré para ti-le dio la espalda marchándose del lugar sin percatarse que la chica lo observaba con profundo odio  y apretaba los puños con la furia.

 

Suspiro con pesadez continuando con su camino hacia casa , la cuál quedaba a seis cuadras lejos de su escuela pero antes de llegar haría una parada, dio vuelta a la derecha entrando a un enorme edificio que decía biblioteca central, paseaba por los pasillos de su sección favorita “mitología”, cuando un libro de tapas gruesas en color azul le llamo la atención no solo por su grosor sino porque este emitía un ligero brillo en dorado, lo tomó entre sus manos viendo que este era muy antiguo con hojas color dorado, escrito en hermosa y elegante letra cursiva.

 

-El santo grial- pronunció su título-suena interesante- sonrió por un momento diriéndose hacia la recepción para pedirlo prestado.

 

Salió de aquel edificio dirigéndose al fin a casa, una mansión color blanco su familia era acaudalada debido a que esta se dedicaba a buscar tesoros inéditos de la humanidad forjándose un renombre, entró dejando su chamarra en un perchero a la entrada.

 

-bienvenido hijo- le saludo una mujer con un gran parecido a él que lo recibió con una sonrisa- ¿Qué libro traes hoy?- curiosa al pelinegro.

 

-me encontré hoy un libro con un título muy peculiar- se acerco a ella mostrándole el antiguo libro-estaba arrinconado en una de las estanterías de la biblioteca, debe haber transcurrido un buen tiempo sin que alguien lo haya leído.

 

-no es muy grueso- habló viendo el ligero grosor del libro- no creo que tardes mucho en terminarlo y cuando eso pase quiero que me cuentes de que trata ¿de acuerdo?- dijo sonriente devolviéndoselo- ve y dile a tu padre que baje en 30 minutos al igual tu y también avísale a tu hermano- pidió entrando de nuevo a la cocina.

 

Subió las escaleras para ir a su habitacion deteniéndose frente a un enorme par de puertas de color ámbar, toco la puerta y un ligero “pase” le permitió la entrada.

 

-hola padre- saludó al hombre que leía con atención unos papeles en su escritorio, usaba lentes de armazón color negro dueño de una mirada fría haciéndola resaltar aún mas un par de marcas debajo de sus ojos, piel morena y cabello castaño.

 

-buen día sasuke- saludo quitándose un momento los anteojos para observarlo tranquilo- espero que el libro que atrasó tu regreso a casa sea de un tema interesante- le habló con una sonrisa al pelinegro.

 

-creeme que lo es padre- dijo con una sonrisa de superioridad- no suelo seleccionar cualquier libro si el título es interesante será leído.

 

-así se habla hijo- respondió en tono divertido a la respuesta de su hijo converso un par de cosas mas con su padre saliendo 15 minutos después y dirigirse a su cuarto para poder cambiarse de ropa, no sabia el porque pero se sentía ansioso de leer aquel libro.

 

Entró a su habitación dejando su mochila sobre la silla que había en su escritorio, se cambio su uniforme rápidamente  para luego recostarse en una enorme almohada y así iniciar su lectura.

 

“La guerra por el santo grial:

 

Hace 200 años, magos de poderosas familias hechiceras se unieron, dando como resultando la aparición del santo grial, una reliquia con tal poder que podía realizar cualquier tipo de milagro.

 

Usada y tocada por el hijo de dios padre la reliquia invocada por humanos solo podía conceder un deseo, pese a los enormes esfuerzos realizados por los miembros mas poderosos de las familias invocadoras la cantidad de deseos no aumento.

 

La alianza una vez firme, se rompió, dando paso a una ensangrentada batalla por su posesión, marcando así el principio de lo que se conocería como la guerra por el santo grial.

 

La profunda ambición mostrada por estas familias provocaron una profunda tristeza y decepción a Dios que como castigo los maldijo con la orden divina de cumplir con esta guerra una y otra vez hasta que este sentimiento inmundo desapareciese tanto en el maestro como en el alma herócia que invocara, sin estas condiciones la guerra no terminaría.

 

Desde entonces el santo grial aparece cada 10 años, selecciona a 7 magos ya sean descendientes directos de aquellas familias de hechiceras, que puedan asimilar o utilizar magia que logre controlar e invocar almas del tipo espíritu-heroico, denominados sirvientes, seres reconocidos por la historia que lograron labrar su nombre de tal forma que no son olvidados por generaciones predecesoras al periodo en el que vivieron.

 

Para saber cuál de los siete es digno de tocar el santo grial se enfrentan en combates a muerte, donde el superviviente de estas ensangrentadas batallas, gana el derecho a pedir el milagro, ya sea para el sirviente o para el humano quién es denominado maestro, el cuál controla la existencia de este espíritu, dando ordenes absolutas al mismo que debe cumplir, obligados a dar la vida y sacrificar su honor por protegerlo.

 

El alma resonará y resurgirá en la era de invocación cuando una reliquia que represente o allá pertenecido al espíritu-héroe al mismo tiempo que el invocador derrame un poco de su sangre sobre el santo sello para forjar el contrato que los unirá”.

 

-vaya no cabe duda que la mitología siempre dio rienda suelta  a la imaginación de forma sorprenderte- habló fascinado por el texto recién leído- héroes luchando por cambiar algún acontencimientopor el que sus nombres son recordados en la historia, no le veo ningún sentido.

 

-sasuke es hora de cenar- lo llamo su madre a lo que el chico dejo el libro sobre la cama y bajo atendiendo al llamado.

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OSAKA, JAPÓN, 10 AÑOS DESPUÉS

 

Ahora Sasuke se encontraba radicando en aquella ciudad cumpliendo la petición de su hermano al momento de morir, aunado a eso sus padres habían sido brutalmente asesinados aunque se monto una exhasutiva investigación buscando dar con el asesino siempre terminaban las mismas en un callejón sin salida aceptando al fin que ese suceso sería un misterio sin resolver.

 

Se quedo al cuidado de su hermano, tenía mala suerte como el solía decir ya que 3 años después  presencio la muerte de su amado hermano la fatídica noche del 17 de mayo.

 

****************************FLASH BACK*********************************

Estaba sentado sobre el borde de una de las ventanas viendo como el viento movía agitadamente las hojas de los ábroles y volando las que se hayaban en el suelo, había adoptado ese lugar para tratar de calmar un poco su tristeza cuando sintió una mano sobre su cabeza la cual revolvió de forma agitada sus cabellos.

 

-itachi no me gusta ni gustará que me hagas eso y lo sabes- dijo con el seño un poco fruncido y agarrando con ambas manos la mano de su hermano.

 

-aunque me digas eso siempre serás mi pequeño hermano por lo tanto mi trabajo es y será protegerte- lo abrazo mirándose por un momento su mano derecha que estaba vendada-ven conmigo sasuke-lo jaló hacia su habitación sentándolo en su silla frente a su escritorio- quiero observes lo que haré- menciono colocándose a un lado de su hermano.

 

El pelinegro colocó un pequeño trozo de cristal sobre una hoja de papel que tenía dibujado un raro símbolo, respiro profundo levantando sus manos que comenzaron a brillar en un suave tono verde esmeralda, el pequeño pelicorto tenía toda su atención en lo que el mayor hacía, este movía sus manos de un lado a otro de forma lenta y suave para darle forma, dando como resultado el símbolo familiar que le entrego al mas chico que estaba embelesado con él.

 

-asombroso hermano, es como si hubieses usado magia- habló emocionado escuchando al momento una leve risa de su hermano.

 

-y es lo que use mi pequeño hermano, magia- le dijo sonriendo suave-una herramienta muy poderosa que debe ser usada para a proteger todo y todos aquellos que son lo mas importante-le explicó al mas pequeño de forma suave colocando sus manos sobre los pequeños hombros de hermano-cuando sea el momento tus sentimientos y convicción harán que la magia se vuelva  tu arma mas poderosa.

 

-lo juró, nunca lo olvidare-el mas alto sonrió tranquilo para después abrazar con fuerza al mas chico-hermano quiero que me enseñes- le preguntó al mayor emocionado colocándose de nuevo frente a la mesa donde había presenciado la magia del pelilargo.

 

-lo siento sasuke-se acercó para darle un leve golpe en la frente del mas pequeño con sus dedos anular e índice- será otro día, hoy debo salir- le anuncio caminando hacía la puerta.

 

-ten cuidado-le pidió con anhelo al pelilargo que se detuvo un momento al sentir el abrazo del mas pequeño en su espalda, no quería admitirlo pero tenía tanto miedo de quedarse solo, desde que sus padres murieron era ya costumbre siempre esperar su hermano ocultando con ello su mayor miedo, no verlo entrar por la puerta.

 

El pelilargo salió por la gran puerta y asegurándose de que nadie lo observará dio un fuerte salto quedando sobre el techo de la enorme mansión, su cabello era movido con suavidad bajo su vista un momento sonriendo al ver como el mas pequeño salía por la puerta y sentaba sobre un columpio que colgaba de las gruesas ramas de un cerezo columpiándose con fuerza de forma emocionada, se desvendo su mano haciendo brillar un símbolo en forma de cruz apareciendo un silueta tras él-bien amigo es hora de terminar con esta maldita guerra- le habló a aquel personaje que hacia un reverencia al pelinegro haciendo que el sol brillará sobre si mostrando una reflugente armadura-será nuestra última batalla juntos, lo que me alivia es que ya resolví un asunto de suma importancia-sonrió con tranquilidad.

 

-ese dije que cuelga del cuello de su hermano, es un sello de protección ¿verdad, maestro?-preguntó seria aquella silueta que comenzó a caminar hacia el pelilargo.

 

-tan persuasivo como siempre mi caballero- dijo volteando hacia el personaje mostrándole una sonrisa resignada al verse descubierto.

 

-ese objeto expide un tipo de magia que solo protegerá a aquel que lo porta y conoce de la misma-explicó ya a lado del pelilargo-es por eso que le mostró su magia para que el sello funcionará, pero aún así recuerde que le hizo una promesa a su hermano-le recordó al mayor quién solto un largo suspiro.

 

-sasuke sabra perdonarme por faltar a mi palabra- su voz se escuchó por un momento triste y agachaba la mirada con pesar- y tu también mi caballero de verdad lamento haber sido incapaz de cumplir la promesa que te hice al momento de llamarte.

 

-no tiene porque pedirme perdón maestro, esa palabra solo debe ser dicha a dios al momento de estar frente a él-le dijo sonriente al pelilargo quién le correspondio un momento.

 

-yo se muy bien que él, será quién al fin de un vuelco importante a esta guerra maldita- la silueta se movío levemente hacia donde se hallaba el pelinegro-cumplirá con la misión que yo no pude- su vista estaba llena de esperanza-muy bien llego la hora-apretó su puño con fuerza haciendo que el brillo de su símbolo fuera mas fuerte-esta batalla decidirá todo-su mirada era decidida, el símbolo ilumino el techo con un potente fulgor haciendo que el cuerpo del receptor brillará en un tono color anaranjado.

 

-aunque le he dicho muchas veces que no debe usar el poder de mi interior debido a la condición que esta maestro-explico en un tono preocupado pero con un toque de resignación-aunque se muy bien en este momento su menor temor es la muerte- expresó tomando la mano derecha del pelilargo donde se hayaba el símbolo.

 

-no hay ni habrá una sola gota de duda en esta última batalla- entrelazó su mano con la de su acompañante-la vida de todos depende de este último combate en el que daré mi vida de ser necesario-su acompañante asintió agachándose y dejando que se subiera a su espalda para dar al momento un fuerte salto dirigiéndose hacia el norte.

 

Aquella noche sasuke se había sentido feliz y aliviado al ver que su hermano había regresado, después de una amena charla ambos se fueron a dormir, se recostó pensativo al recordar que cuando su hermano regreso algo en él lo hacia sentirse muy inquieto y solo- lo importante es que volvío sano y salvo a casa pronucnio sin darle mucha importancia al sentimiento que lo embargo por un instante, cerró sus ojos entreándose al sueño.

 

Eran las 3:00 a.m dormía tranquilamente cuando de pronto el vidrio de la ventana de su habitación reventó toscamente, se despertó de golpe al momento de sentir como una mano lo tomaba del cuello levantándolo de su cama para azotarlo de inmediato contra un de los muros, la oscuridad no le permitía ver el rostro de su atacante que apretaba cada vez y mas, se asfixiaba, de pronto el dije que le dio su hermano comenzó a brillar en un tono azul rey, estaba perdiendo la conciencia cuando un fuerte destello lo separo de aquel asesino.

 

-sasuke!!!- escuchó la voz apresurada de su hermano mientras este lo cargaba en vilo- ¿Estás bien, hay alguna parte de tu cuerpo que te duela?- pregunto angustiado.

 

-estoy bien- bajo de los abrazos de su hermano- pero ¿que está…?- se escuchó una risa siniestra que lo hizo ocultarse detrás de su hermano.

 

-tan blando como siempre-se escucho la voz siniestra que usaba un tono divertido-¿de verdad, creíste que habías acabado conmigo? Necesitas mas que eso para lograrlo-habló de forma burlona poniendo su dedo en su barbilla-creo el título de genio que se te dio es un simple y risible adjetivo para ocultar lo estúpido que eres, pero ¿sabes?- sonrió ahora con sadismo-no puedo esperar el ver tu rostro lleno de furia y desesperación cuando te quite aquello que haz protegido con tanta pasión-el pelicorto sintió miedo cuando un par de ojos rojos se fijaron en él escondiéndose mas detrás de su hermano-matarlo lento, ver como su vida se escapa poco a poco, cada exquisita gota de dolor y desesperación me harán sentir satisfecho, te haré pagar muy caro el haberme quitado mi santo derecho a obtener el único deseo!!!- gritó ya en tono furioso haciendo brillar aún mas esos temibles ojos.

 

-si osas tocarle un solo cabello, seré yo quién no dudará en aniquilarte de forma lenta y dolorosa- habló ahora en tono fúrico-no caeré muestro hasta ver tu cadáver y escupirlo-dejando ver también unos brillantes ojos rojos que sorprendieron al mas chico.

 

-jajajaja esa cara y ese tono son los que me fascinan cada vez que esta guerra inicia- caminaba alrededor de ambos chicos, el pelicorto sentía miedo apretaba con fuerza las ropas de su hermano- matar a los seres queridos de los maestros involucrados, ver sus lágrimas derramarse por la pérdida y lo mas bello es hacerlo frente a sus ojos- estiró su mano hacia ellos y una veloz silueta estaba de pronto a su lado, cerró sus ojos con miedo abrazando a su hermano cuando un fuerte choque se escuchó, una silueta había inteferido aquel poderoso ataque contra ellos.

 

-al parecer lo que te caracterizó es que te adelantas demasiado ráido a los hechos- dijo la seria voz de su hermano levantó su vista viendo con sorpresa que los ojos de su hermano también brillaban en el mismo tono que del otro sujeto incluso mas fuerte-no cantes victoria sin siquiera poner todavía un pie sobre mi cuerpo muerto.

 

-jajajajaja no me hagas reír, estas demasiado agotado como para que le inyectes mas poder a tu sirviente, ¿Qué podría hacer un pobre moribundo como tú?- se escuchó aquella voz en tono burlón.

 

-lo que menos esperabas- un símbolo en forma de cruz apareció a los pies de su hermano-arrebatarte la victoria-sonrió su hermano burlonamente haciendo que aquel hombre desconocido apretará los puños con frustración al ver que bajo sus pies aparecía el mismo símbolo que su hermano había hecho aparecer hace un momento-la reliquia ha sido sellada, agradezco tu ayuda ya que el que tu estuvieses aquí inyectaste el poder mágico que hacía falta-el pelinegro cayó de rodillas respirando copiosamente y escupiendo sangre al momento-solo queda esperar para que tu sirviente y el mío desaparezcan-advirtió sonriente-por lo que ahora esta batalla se ha convertido en una carrera contra el tiempo y eso es lo que usaré para protegerlo-el pelicorto pudo ver como su hermano le sonreía de una forma que nunca había visto, era una sonrisa tan gentil y a la vez llena de una profunda tristeza que con el solo verla sus ojos comenzaron a derramar gruesas lágrimas.

 

-itachi no me digas que tu…- no pudo terminar la frase cuando la mano de su hermano apretó un punto en su cuello que lo obligo a caer en la inonciencia.

 

Abrió lentamente sus ojos, su cuerpo estaba adormesido todavía, pudo distinguir como el cuarto en el que se encontraban era ya un montón de escombros, apenas alcanzó a distinguir como de aquel desconocido caía, una gran cantidad de sangre por la grave herida que tenía en su ojo izquierdo, su respiración era herrática y apenas podía mantenerse en pie.

 

-maldito seas- gritó frustrado al pelilargo mientras un montón de polvo color plateado se desvanecía a su lado  caminando amenazante hacia el pelinegro cuando el frío filo de una espada detuvo su andar.

 

-tengo menos de un minuto antes de desaparecer pero necesito menos que eso para  cortarte la cabeza-habló ya en tono amenazante la otra persona que anteriormente lo había rescatado y se mantuvo todo el tiempo a lado  de su hermano.

 

-recuerda esto itachi- habló amenazante-te retorcerás en tu tumba cuando veas que nadie será capaz de detenerme-terminó huyendo por la ventana.

 

-eso lo dudo-cerró sus ojos y se dejo caer, su cuerpo azotaría contra el suelo cuando las manos de su compañero lo tomaron por el pecho volteándolo para que su hermano pudiese ver su rostro.

 

-perdóneme- dijo con pesar-de verdad perdóneme maestro, si hubiese sido mas fuerte, mas hábil usted…-vio como la mano de su hermano se levantaba callando las palabras del emisor.

 

-esa palabra solo debes decírsela a dios ¿no es cierto?-el tono del pelilargo era comprensivo-además mi alma descansará en paz porque yo se que cuando sea el momento regresarás para hacer lo que yo no pude, protegerlo- pidió dejando que el otro lo recostará mientras su cuerpo emitía un leve brillo dorado.

 

-lo juro, voy a protegerlo- puso su mano en la mejilla de su hermano- itachi- el cuerpo del muchacho desapareció en un polvillo dorado.

 

-itachi- susurró el más chico lográndose levantar aunque sus piernas aún temblaba logro llegar hasta donde estaba su hermano tomándolo por lo hombros levantándolo para poder revisar sus heridas-estas heridas son serias- susurró- un doctor, debemos buscar un doctor de inmediato- se quiso poner de pie pero sintió como su hermano tomaba la suya impidiéndoselo.

 

-sasuke no te vayas por favor no te alejes de mí- pidió a lo que el mas chico lo abrazo ya con los ojos llenos de lágrimas que cayeron sobre la mejilla del mas grande-debo pedirte un favor muy importante mi pequeño hermano- pidió a lo que sasuke negó rápido con su cabeza.

 

-no hermano no prometeré nada, porque así te quedarás conmigo-le habló con la voz entrecortada sin que sus lágrimas dejaran de fluir por sus ojos.

 

-sasuke-se separó del pecho de su hermano-a partir de mañana debes irte a la ciudad de Osaka nuestro padre dejo una casa, ahí estarás a salvo- puso su ensangrentada mano en la mejilla del mas chico acariciándola con cariño-te amo sasuke, te amo con todo mi corazón mi pequeño hermano-pegó su frente con la del mas pequeño.

 

-por favor no me dejes solo itachi te lo suplico-sus lágrimas ahora empapaban la frente del mayor, quería que las mismas le inyectarán la vida que se le escapaba a su hermano con cada respiro-quién va a protegerme ¿Quién? Dímelo, dímelo porque no sé- preguntaba desesperado.

 

-eres mas fuerte de lo que tu mismo crees-le sonrío seguro al pelicorto-además no estarás solo sasuke, yo estaré contigo aunque no me veas- su voz se convirtió en un susurro y sus ojos comenzaron a perder su brillo -no pierdas sasuke, nunca pierdas- cerró sus ojos para siempre.

 

-itachi!!!!!- lo sacudió gritando el nombre de su hermano-esto no es gracioso, por favor abre tus ojos, por favor!!!!- abrazó fuerte el cuerpo de su hermano al momento que sirenas de policía se escuchaban alrededor de su casa-no, no, no!!!!- los policías ingresaron siendo testigos de la triste escena.

 

********************************FIN FLASH BACK**************************

 

El pelinegro sintió la humedad en su rostro, las lágrimas que habían corrido por sus blancas mejillas fueron limpiadas por la manga de su saco escolar, sus lágrimas, necias aún se negaban a dejar de fluir cuando los recuerdos de su familia lo invadían y como la vida de su hermano se había pérdido en sus brazos.

 

Sus clases pasaron sin altercado alguno solo los acosos a los que ya estaba acostumbrado, todo los días de ahí en fuera eran rutina iba a casa para seguir practicando aquello que su hermano le había mostrado alguna vez, la magia, aunque se esforzaba por entenderla, se frustraba ya que solo poder poyectar las cosas que imaginaba o veía cambiando su composición, volviendo el metal mas duro en algo mas suave que una esponja, por amor a la memoria de su hermano continuaba practicando, había escuchado alguna vez que la magia era milagrosa, pero él no creía en esas sórdidas palabras ya que esta no le devolvería aquello que mas amo, su familia.

 

-sasuke-kun con que ahí estás-se escuchó la voz suave de hinata, una chica de cabello azul marino, ojos blancos, 1.65 de altura, grandes pechos, delgada cintura, tímida y dulce en varias ocasiones lograba arrancarle una que otra sonrisa a su inexpresivo rostro, la única que portaba el título de amiga-pensé que ya te habías ido a casa así que hoy tendrás que acompañarme- lo tomó por el brazo jalándolo con ella.

 

Caminaban con calma en un sendero lleno de árboles de sakura que en ese momento estaban en flor, habían ido a una heladería algo famosa a los alrededores de que aquel parque,  hinata era la única que sabía acerca de la magia que el pelinegro practicaba ya que por un descuido del mismo había sido descubierto por su curiosa amiga que se mostraba sorprendida y muy interesada en el tema, insistiéndole que le enseñara algún día, charlaban mientras caminaban cuando de pronto…

 

-ouch!!!-expresó de pronto dejando caer su helado al sentir un fuerte dolor en su mano derecha-pero ¿Qué…?-pronunció sorprendido al ver que de ella salía abundante sangre, la peliazul la tomó observando con detenimiento la misma.

 

-es una herida profunda- explicó sacando un pequeño pañuelo blanco de su bolsillo y envolviendo la mano del pelinegro con él-¿quieres que te ayude con ella?-pregunto preocupada.

 

-no te preocupes  llegando a casa me curaré- le dijo a la chica que veía con mirada preocupada la herida del pelinegro, llegaron frente a un gran casa la peliazul se despidió del pelinegro entrando para que el continuará con su camino, avanzó dos cuadras más llegando al fin a casa yendo directo al baño que había en su habitación para lavar su herida, la observaba con extrañeza ya que el corte era profundo pero no dolía para después vendarse la mano buscando que la hemorragia se detuviera, salío del lugar deteniéndose frente a un pequeño altar que era coronado por una fotografía familiar, perfectamente guardada y conservaba dentro de un fino marco de madera, en el mueble estaba tallado el símbolo uchiha mismo que el portaba en sus ropas y objetos personales con orgullo.

 

-hermano, papá, mamá, pasan los años y sigo extrañándolos demasiado- dijo sincero acariciando el marco de la fotografía con sus dedos deteniendo los mismos sobre el rostro de su hermano-itachi, me hubiese gustado preguntarte tantas cosas- de pronto sintió como una fuerte punzada en su mano derecha que lo obligó a sostenérsela apretándola para tratar de mitigar el dolor que de un momento a otro se fue.

 

Bajo las escaleras hacia un enorme despacho lleno de libros algunos seguían dentro de sus cajas-ya debería terminar de ordenar este lugar-se dijo mientras sacaba los libros de sus cajas y los ordenaba por tamaños y temas en los libreros, tomó los últimos cayendo de entre el montón aquel libro que leyó antes de que murieran sus padres-olvide por completo que eras solo un préstamo- sonrío melancólico y abrió el libro donde había dejado un separador-supongo que el destino quería que te quedarás conmigo-de pronto lo dejo caer al sentir una fuerte punzada en su mano derecha viendo como la venda que la envolvía se manchaba de nuevo con sangre-ah genial!! Quiero por fin terminar esto y simplemente no puedo- tomó el libro con su mano izquiera saliendo de la habitación sin percatarse que gotas de sangre habían manchado la alfrombra que tenía dibujado el símbolo de su familia, sobre el cual estaba una cruz patada que era cruzada de forma inclinada por una espada la cual comenzó a emitir un fuerte brillo azul.

 

Llego al gran baño que se hayaba en su habitación, desvendó su mano y comenzó a lavarla de nuevo para volver a vendarla, salió de la habitación y abrió el libro con su mano izquierda prestando especial atención en el texto que estaban leyendo sus ojos-este verso será aquel que deberá ser pronunciado para que el alma heróica reaccione al llamado-repitio en un susurro sorprendido- la sangre que la voluntad del nuevo ha maestro ha derramado ha forjado el contrato y es ahora que el llamado se complete…

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SHIRAZ, PERSIA

 

-la marca del santo grial ha aparecido en mí- dijo un chico de cabellos negros largos hasta las caderas atados en una trenza-espero poder cumplir con las expectativas que esta guerra demanda- sacó de una pequeña caja de piedra negra un trozo de tela rojo, este era sumamente antiguo lo tomó colocándolo con cuidado sobre un círculo que había dibujado en el suelo, tenía la forma de un dragón con las fauces abiertas mostrando sus colmillos y abrazando una lanza con un escudo rodeándolos, acercó un pequeño cuchillo a su muñeca haciéndole un corte dejando caer pequeñas gotas de sangre en el círculo que comenzó a pulsar.

 

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OSAKA, JAPÓN, SANTA IGLESIA DE LA HECHICERÍA

 

-todo esta listo para que la invocación de inicio- habló el peliblanco quién ahora supervisaba el rumbo de la guerra del santo grial- asesino-llamó apareciendo de pronto una silueta tras él que al estar cerca se arrodilló mostrando lealtad a quién lo había convocado

 

-me llamo maestro- habló con voz calma.

 

-he puesto un barrera de invisibilidad absoluta en la iglesia, nadie escuchará o mirará lo que ocurrirá, pero de todas formas necesito que vigiles la entrada-ordenó al hombre que vestía un un pantalón flojo, camisa manga larga, una faja que delineaba sus fornidos musculos abdominales y una capucha que cubría todo su rostro a excepción de sus ojos que mostraban una seria y decidida mirada.

 

-como diga maestro-se inclinó a modo de obediencia dando un salto desapareciendo en ese instante.

 

-no me extraña que el supervisor de la guerra tenga la oportunidad de invocar a su sirviente antes que los demás ya que es su divino deber el supervisar que las invocaciones sean llevadas a cabo sin problema-habló un hombre de largos cabellos negros saliendo de entre las sombras, su piel era blanca, ocilaba los 1.85 mts, tez fornida y delgada, bajo sus ojos había unas marcas haiendo su mirada temible, pero lo que mas miedo causaba a sus oponentes eran sus brillantes ojos rojos, un don otorgado por el santo grial al primero de su estirpe que había participado en la guerra conocido como sharingan-invocaste a un alma heróica bastante conveniente para alguien de tu posición-sonrió divertido caminando alrededor del peliblanco que solo lo observaba serio.

 

-en efecto, así que si quieres asesinarme te costará un poco de trabajo-habló observándolo de reojo-con esos malditos ojos que te cargas no me sorprendería que ya supieses el verdadero nombre de mi sirviente- sonrió acomodando con su dedo índice sus gafas.

 

-no debería preocuparte por eso ya que me eres muy útil todavía, aunque…- camino frente al peliblanco con sus manos tras su espalda- a menos que decidas traicionarme entonces sería algo divertido de hacer dado el tipo de sirviente que tienes y que alma heróica es-observo al peliblanco de reojo con su sharingan.

 

- no deberías preocuparte por mí, sino por el muchacho al que itachi le heredó todo su poder estoy seguro queb te causará mas problemas de lo que crees- habló cerrando los ojos y esbozando una sonrisa, el viento provocado movió su cabello con brusqueda pues su sirviente apareció frente a él deteniendo el enorme abanico que había lanzado el otro contra kabuto y otros cuatro apuntaban filosos kunais sobre los órganos vitales del mismo-tal vez no sea tan fuerte como tu pero al menos te causaré graves heridas si luchas conmigo y mi sirviente- habló sonriendo sádico mostrando su brazo derecho que estaba repleto de montones de marcas que brillaban en color carmesí- así que será mejor que ya dejes de pavonearte y empecemos con el ritual, no quiero escucharte si se te pasa el tiempo y no puedes hacer la invocación de forma correcta- los sirvientes que amenazaban la vida del pelilargo desaparecieron.

 

-por ahora haz salvado tu pellejo maldito espero que dentro de poco tenga el placer de cortarte el cuello- caminó hacia el círculo que estaba dibujado bajo sus pies, este tenía forma de una cruz que descansaba sobre el símbolo uchiha, cortó una de sus muñecas dejando caer gotas de sangre sobre el círculo que comenzó a brillar con intensidad.

 

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BERLÍN ALEMANIA

 

-esto es aburrido- habló una chica pelirrosa con parte de su rostro y cuerpo cubiertos por sangre que caía a gotas en el suelo.

 

- ¿oye?- tomó la cabeza cercenada de una mujer de cabello blanco- ¿crees que esto me ayude a lograr la utopía que quiero?- puso la cabeza en sus piernas observadno su mano derecha que tenía un símbolo en forma de la flor que llevaba el mismo nombre que ella, en su centro estaba dibujada en una pequeña esfera con tres juegos de líneas dibujadas a su alrededor simulando que esta pulsaba.

 

- ay!!! te hubiese preguntado antes de matarte, o a ti- señaló el cuerpo sin vida de un hombre de barba café y cabello del mismo color- o a ti- volteo ahora señalando a un pequeño niño no mas de 8 años que yacía sin vida sobre un enorme charco de sangre-olvide que debo preguntarles antes de matarlos comunmente obtengo respuestas acertadas cuando están llenos de miedo-habló haciendo un pequeño puchero.-bueno que mas da seguiré las instrucciones haber que pasa-levantó los hombros aquella chica de piel blanca y ojos color verde esmeralda, colocó un pequeño pañuelo que tenía bordado en la esquina la letras EB, se acercó a uno de los cuerpos, sacó una pequeña navaja y cortó de un tajo la mano del hombre dejando caer su sangre sobre aquel círculo que comenzó a emitir un fuerte brillo verde.

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(N/A: las palabras que sasuke dirá a continuación, las estarán diciendo los demás, porque todos harán la invocación al mismo tiempo solo que en diferentes lugares, bueno espero no haya confusiones n_n)

 

-proveer, proveer, proveer, proveer, proveer-comenzó leyendo en voz alta el texto mientras bajaba sin “preocupaciones” de las largas escaleras hacia su estudio- escucha mis palabras, mi voluntad crea tu cuerpo así como tu espada creará mi destino que ahora ha quedado sellado y forjado a tu fuerza y leyenda.

 

Escucha el poderoso llamado que hace el santo grial y que tú alma vuelva a despertar de aquel sopor que tu leyenda e historia evitan tu eterno descanso. Despierta, regresa y ven a mí, obedeciendo a mi voluntad, mi razón y llamado, pisa de nuevo esta tierra, ¡oh valiente guerrero que con tu fuerza y voluntad forjaste tu nombre en la historia!

 

Juro por este medio que seré bueno en el mundo, qué con tu ayuda venceré todo el mal que lo asecha y lo consume para ganar el derecho a obtener la reliquia sagrada.

 

Los siete cielos envueltos en las tres grandes palabras de poder, invoco y hago mío a uno de ellos para que salga del círculo de inhibición y manifieste su majestuosidad física ante mí quién ahora se convertirá en el ¡guardián del orden y equilibrio de este mundo!

 

Cada círculo brilló con fuerza acumulándose en un solo punto provocando una gran explosión para después dar paso a una densa nube de humo que fue disipándose poco a poco.

 

Lee dio unos pasos hacia atrás sonriendo al ver descender sobre el círculo, un gran hombre de aproximadamente de 1.85  de altura, piel morena, cabello corto color castaño, ojos cafés, sumamente musculoso, con un pesado escudo con la letra lamba labrada en relieve sobre el mismo, una poderosa y gruesa lanza sarissa, un calzoncillo de cuero y un par de cinturones que cruzaban su pecho sosteniendo su gruesa y desgastada capa roja que llegaba hasta sus tobillos, una par de cnémidas forraban sus marcadas pantorrillas terminando en donde su espada xifos era sostenida a su costado derecho y un grueso casco conrintio cubría su seria y férrea mirada.

 

Sakura sonreía observando al sirviente que había invocado, una mujer de un hermoso y fino vestido negro con bordes dorados que llegaba mas debajo de sus tobillos, con mangas transparentes que dejaban ver sus blancos brazos, un gran cuello de tela color hueso  en forma de herradura rodeando el mismo, ojos azules, labios sonrosados y una piel en un hermoso tono blanco, sus castaños cabellos recogidos en un bien peinado chongo que era adornado por cadenas de oro.

 

-jajajaja una vez mas he llamado al sirviente mas poderoso de todo y en esta guerra no habrá nadie que siquiera ponga resistencia a mí- dijo el pelinegro sonriente al ver a su sirviente, una mujer de cabellos rubios y largos atados en un trenza que llegaba hasta un poco mas debajo de su cadera, con una refulgente armadura de plateada cubriendo su pecho, brazos manos, cuello piernas y pies, esta cubría un vestido color morado con una abertura del lado derecho mostrando parte de la pierna y muslo, abriendo sus ojos mostrando un hermoso color azul cielo.

 

Sasuke por su parte cuando había terminado de decir aquellas palabras, mientras se acercaba  a su estudio la puerta de este se abrió de golpe arrojándolo unos cuantos metros lejos, se sobó su cabeza debido al golpe, levantó su rostro al escuchar como unos pasos caminaban hacia él entre la gruesa cortina de humo que se había levantado por aquella explosión, el humo se disipó levemente dejando ver a un chico de cabellos rubios a la altura de los muslos atados en una coleta baja, piel morena y curiosas marcas en el rostro, vestía sobre sus hombros una cota de malla que cubría hasta sus muñecas y un sobreveste(1) sobre la misma color azul rey que cubría hasta sus rodillas, sus pies, pantorrillas, manos, antebrazos, hombros y espalda estaban cubiertos por una refulgente armadura plateada y en cada uno tenía labrada una cruz patada en rojo profundo destacándola.

 

-¿Quién…eres?- dijo tartamudeando al ver la imponente figura del chico frente a él, quién movió sus hermosos ojos azules en dirección a donde estaba derribado el pelinegro.

 

-yo soy aquella alma que tu voluntad ha llamado para que se manifestará en este mundo-habló al fin de forma seria agachando su rostro hacia donde se hayaba el pelinegro viéndolo serio-soy el sirviente tipo espada quien ahora pregunta si ¿estas dispuesto a ser mi maestro?- preguntó al pelinegro.

 

No podía hablar, simplemente no podía articular palabra alguna, había quedado completamente mudo ante la elegante e imponente figura de aquel chico rubio frente a él que ahora lo observaba serio.

Notas finales:

NOTAS DE LA AUTORA.

Bueno tal como dije al principio esta historia fue inspirada por la serie fate stay night que es de completa pertenencía de TYPE-MOON, aunque para este fic usaré a mis propios héroes y para darle buena trama (eso digo) algunos de los personajes mas crueles de la historia apareceran.

(1) Sobreveste: túnica sin mangas cubierta por delante en su mitad inferior y forrada toda de armiños o de una tela de color vistoso. La sobreveste era colocada sobre la cota de malla que cubría al caballero medieval y fue utilizada frecuentemente en los siglos XI, XII, XIII y finalmente cayó en desuso cerca del siglo XV.


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