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Una noche de luna llena por KainEDeamonum

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Notas del fanfic:

Em... bueno les traigo un pequeño One shot de esta pareja que a mi, me encanta, espero y lo disfruten

Notas del capitulo:

Espero les guste... se aceptan todo tipo de criticas

Noche de luna llena
La noche era clara, como esas noches de verano en las que una suave y humeda brisa soplaba y mesia las hojas de los arboles, los grillos y sapos cantaban y las estrellas tintineaban en el cielo... todo era calma... nada preevia lo que esa noche le ofrecería...
Sesshoumaru reposaba tranquilamente sobre la rama gruesa de un frondoso sauce, observando con calma como las hojas de ese árbol se mobian en dirección a su derecha; inspiró el suave y humedo aire que emanaba en el lugar y, con los ojos entrecerrados, saltó al suelo con un aire despreocupado y calmo como lo era esa misma noche...
  - Ya sé que estas ahí...- dijo mirando por el rabillo del ojo a su izquierda- sal de una de vez...- ordenó tajante- ¡Inuyasha!
 Y de la nada una mancha roja escarlata saltó sobre él, dejandose ver cuando caia, a un Inayasha transformado en youkai, mostrando sus colmillos y sus garras  con agresividad. Sesshoumaru esquivó rapidamente la emboscada alejandose un poco y poniendose en posición de defensiva; ambos hermanos se midieron con la mirada, uno consciente del otro, uno esperando la reacción del otro;  a estas alturas solo se oia el jadeo fuerte de la respiración agitada de Inuyasha.
  - No me esquives, Sesshomaru- le gruñó a la vez que se acercaba rapidamente para atrapar al mayor.
  -Siempre tan lento Inuyasha- dijo este apartandoce- ¿núnca te cansas de ser derrotado cada luna llena?
  - Esta vez te venceré , maldito- bramó el agresor estirando un brazo para atrapar la manga vacia de su hermano.
  Y así lo hizo, la atrapó y jaló fuertemente de esta atrayendoló hacia si mismo. Cuando lo tuvo frente a frente lo observó  a la vez que lo sujetaba del cuello, y, con la mano libre le sopló en el rostro una especie de escamas blancas  que conciguieron que su hermano cayera profundamente dormido. Inuyasha sonrió para si mismo, a la vez que se acomodaba a Sesshoumaru al hombro como costal de arena, miró hacia la luna, resopló con aire triunfal, y dando un salto se puso en marcha desapareciendo del lugar...
...
Oh, por dios como le dolia la cabeza, abrió sus ojos  con dificultad, a la vez que intentaba llavarse una mano a la cabeza, ahi se percató de la situación... estaba completamente desnudo y atado de manos sobre un taburete...
  - Hasta que al fin despiertas, hermanito- dijo Inuyasha con un tono burlesco a la vez que se acercaba a él con actitud soberbia.
  Sesshoumaru se percató de la mirada sadica de su hermano que escaneaba cada centimetro de su cuerpo,  se ruborizó aun más al ver como aquellos ojos se posaban en sus genitales con lascivia.
  - ¿Qué es lo que tramas Inuyasha?- indagó el Youkai con nerviosismo.
   -Eso, querido hermano... es lo que estas a punto de descubrir- le respondió Inuyasha a la vez que lanzaba una pequeña risita burlona y se acercaba a su hermano mayor para tomarlo del mentón y obligarlo a que lo mirara- ¿qué es lo que dicen tus ojos?-increpó  finjiendo sorpresa- ¿acaso es miedo? 
  Finalizó ese monologo besandolo de manera posesiba en la boca; esto sorpendió al youkai, que solo atisbó a abrir más los ojos mientras sentia el beso demandante de su hermano. Inuyasha lo tomó por la nuca para afirmar más aquel beso, enredando sus dedos en las hebras plateadas del cabello del mayor, a la vez que llevaba su mano libre hacia uno de los pezones rosados de él, haciendo que este se estremesiera. Ese beso hubiera podido ser eterno pero les faltó el aire y tubieron que separarse dejando un hilo de saliva entre sus labios... 
  - ¿Qué haces Inuyasha?- murmuró el hombre a la vez que jadeaba tratando de recobrar oxigeno.
  Inuyasha no respondió más que con una leve sonrisa, agachó su cabeza para besar aquel palido cuello, dejando marcas en este y produciendo gemidos ahogados en su dueño
-Espera-musitó Sesshoumaru tratando de librarse de aquellas ataduras-espera, Inuyasha-  insistió a la vez que sentia como el menor iba dejando un camino de besos por su pecho.
Obviamente, Inuyasha hizo caso omiso a la suplicas de su hermano y siguió jugueteando con aquel cuerpo que tanto deseaba, succionando, besando y mordiendo aquella piel, que en la languida luz de la luna que se filtraba por algunos recobecos del lugar parecia brillar. En un momento, soltó la cabeza de su presa y fue bajando su mano por el cuerpo de este, dejando suaves y sensuales caricias que no hacian más que estremeser y  gemir ahogadamente de placer a Sesshoumaru, un placer un tanto culposo desde el punto de vista de este ultimo... ¿Un tanto culposo? Pues, claro... si se tenia en cuenta la sangre y el hecho de que ambos eran hombres., era culposo...
  - No lo pienses... no pienses hermanito...-susurró Inuyasha al darse cuenta de la lucha interna que llevaba aquella persona- No lo pienses... solo disfrutalo- terminó su frase succionando el pezón de este y probocando un nuevo estremecimiento seguido por un gemido fuerte y hondo.
  Sus manos bailaban sobre aquel cuerpo yendo y viniendo sobre el pecho y el estomago de él, disfrutando de aquellas reacciones un tanto tortuosas... hasta que notó una ereccion en su hermano, esta se alzaba majestuosa, con algunas gotas de pre semen bajando desde la cima hasta la base.
  - Pero mira, si nada más he jugado un poco y ya estas así- comentó Inuyasha viendo de reojo el rotro ruborizado de su hermano mayor- deja que te alivie.
Acto seguido beso aquella punta para engullirlo por completo logrando que de la garganta del youkai emanara un nuevo gemido, haciendo que a la vez se arqueara hacia atras del placer al sentirlo succionar su pene.
Inuyasha siguió por unos escasos minutos bajando y subiendo su cabeza con un ritmo tortuosamente lento, mientras en la habitación solo se oía la voz de Sesshoumaru, tratando de ahogar aquellos gemidos, tratando de espar del lugar. Sintió como su hermano menor dejaba su pene solo unos momentos, y vio como este se llevaba tres dedos a la boca, mojandolos de saliva, supo por la expreción de malicia de este lo que tramaba hacer.
  -¡NO!- gritó asustado- no lo hagas- suplicó casi convlagrimas en los ojos.
El menor arqueó una ceja oconvactitud divertida y se apartó un poco solo para desvestirse, luego se acercó a su hermano de nuevo atrapandoló por la cintura, tomó su mentón para darle otro beso esta vez un poco más suave que el primero, volvió a llevarse los dedos a la boca para bajarlos al culo de su hermano.
  - Ja, como si no lo quisieras-musitó a la vez que acarisiaba su ano haciendo que Sesshoumaru se estremeciera con una mezcla de placer y de miedo- mira como estas, jeje, solo mira como está esto- dijo haciemdo referencia al pene erecto de su hermano- mirate... y niegame que no lo deseas- le susurró al oido, para luego mordisquearle el lobulo.
 Masajeó un poco ese agujero, hasta que no pudo resistirlo más y comprobó que tan bien habia quedado metiendo un dedo  en él, logrando un pequeño gritito de parte del youkai que se volvió a arquear hacia atras, pero un tanto por el dolor que le causó aquella intromición. Jugueteó un poco y llevó otro dedo a aquella cavidad, sorprendentemente, su hermano ya no se resisia, solo resoplaba con cada movimiento que aquellos dedos  generaban en sus entrañas. Introdujo un tercer dedo y observó la expresión perdida de Sesshoumaru, del rosteo de este rodaban
 Pequeñas lagrimas.
  - Bas... basta... por... por favor- intentó pedir entre gemidos. 
  - ¿Por qué? Si te gusta- le respondió el menor besandolo de nuevo con pasión.
Inuyasha ya no podia más, asi que aprovechando ese beso separó un pocovmás las piernas de su hermano y se posicionó en medio de él pegandose aun más a él. Llevó una mano a su pene para acomodarlo en la entrada, y, viendo al otro a los ojos se introdujo en el soltando un pesado suspido a la vez que a sus oidos llegaba un gemido fuerte de parte de su hermano.
  - Despacio...-escuchó que este decia y retrocedió un poco para luego volver a introducirse con más suavidad- por favor, Inuyasha, desatame- escucho que le rogaba.
  Hizo caso omiso a esa petisión a la vez que seguia aumentando el ritmo de sua embestidas. Los gemidos de ambos poblaron el lugar, mientras la noche trascurria; en un momento, Inuyasha sedió al ruego del mayor y le desató su brazos, esperando recibir algun ataque, pero, para su sorpresa solo le rodeó el cuello hundiendo su rostro en el hombro de él, abandonado como estaba en la lujuria, solo escuchaba sus gemidos que ya no intentaba ahogar.
  - Dejame acabar... por dios... dejame acabar-suplicó entre gemidos desesperados .
Sin hacerse rogar, Inuyasha llevó su mano a la palpitante erección de su hermano y comenzó a masturbarlo de forma sincronizada con sus movientos, a la vez que no dejaba de besarlo con una insistencia casi primitiva. Los gemidos fueron en aumento a la vez que se aceleraban las embestidas, hasta que ambos acabaron a la vez; Inuyasha dentro de Sesshoumaru y él sobre el pecho y mano de Inuyasha.
...
La habitación quedó en un casil completo silencio, en ella solo se escuchaba las respiraciones aceleradas de los hermanos. Inuyasha, ya en su forma natural, jugueteaba distraidamente con el pelo de su hermano, mientras, este solo se acurrucaba en su pecho absorto en un pensamiento...
  - ¿Inuyasha?-preguntó rompiendo el silencio, solo resivió un leve gruñido-¿Qué fue aquello de hace un rato?
  - ¿um? ¿una buena follada? -respondió distraido.
  - Inuyasha...-le reprochó el mayor con seriedad.
  - ¿Qué? Es la verdad...
 Sesshoumaru puso los ojos en blanco, simplemente sunhermano a veces era exasperable.
  - ¿Por qué hiciste eso?- reformuló su pregunta, como sivle hablara a un idiota, remarcando y pausando cada palabra que decia.
  - Porque...-comenzó a decir Inuyasha- ¿me gustas?
El youkai se incorporó sobre su antebrazo para poder verlo a la cara, su hermano estaba sonrrojado... oh, vaya eso si era una sorpresa... no pudo evitar reirse a carcajadas... tantos años que llevaba evitando ese sentimiento...
  - .Eres un idiota-dijo ante la mirada de un sorprendido Inuyasha-¿Por qué no lo haz dicho antes?- agregó a la vez que se abalanzaba sobre el menor con una expresión un tanto maliciosa- a mi también me gustas, hermanito, juju.
  Terminó aquella frase besandolo con insistencia, para seperarce y verlo a los ojos con aire serio...
  - Ahora... creo que es mi turno- terminó diciendo con una mueca burlona y divertida ante la expresión un tanto  intimidada de Inuyasha
  ...
 

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