Luego de un arduo día de trabajo, Dong Young Bae salía del baño una vez que se tomó su tiempo necesario en darse una relajante ducha.
Completamente desnudo y con una toalla pequeña, secaba su castaño cabello tranquilamente.
Para su suerte, no debía presentarse mañana a trabajar ni ensayar, por lo que suspiró relajado con sus ojos cerrados terminando de secar su cabello.
“Dormiré hasta tarde y luego invitaré a alguna que quiera pasar la noche conmigo”
Sonrió de lado ya que al ser admirado en su lugar de trabajo, podía escoger la persona que quisiera con sólo hacer una llamada. Era una costumbre que no hace mucho comenzó a realizar para liberar su estrés cuando tenía tiempo libre.
-Realmente eres sexy, Taeyang-
Al escuchar una voz completamente desconocida, el castaño abrió sus ojos y no podía divisar con exactitud si alguien estaba en su habitación ya que estaban las luces apagadas. Sólo la claridad de la Luna iluminaba parte de su cama.
-¿Quién eres?- frunciendo el ceño, encendió las luces encontrándose con un joven de cabello platinado de unas notorias ojeras, que para YoungBae no le quedaban mal, vistiendo un ajustado jean oscuro, al igual que su camiseta llevando en su cuello una fina cadena de oro, el cual se apreciaba un dije con algo grabado que el castaño no llevó a divisar.
-Soy un incubo. Me llamo Seungri y he venido para tener s-sexo contigo- titubeó un poco pero lo disimuló sonriendo de lado levantándose su oscura camiseta manoseándose su pecho mientras se recostaba en la cama, abriendo sus piernas.
-¿Acaso eres un admirador que logró violar la seguridad de mi departamento?- se acerca a él mirándolo curioso.
“Es la segunda o tercera vez que un hombre se me insinúa… pero él sí es muy sexy”
-¡Claro que no!, ¡soy un incubo hambriento de sexo!- lo mira desafiante provocando una sonrisa pícara en YoungBae.
-Veamos cómo eres para eso- sin darle tiempo a Seungri, le bajó el pantalón notando que no llevaba ropa interior.
“Interesante”
Le abrió sus piernas lo más que pudo mientras le elevaba un poco su cadera para apoyar su pulgar sobre el pequeño ano del peliplateado.
-O-Oye, espera mmh- jadeó al ser volteado rápidamente quedando boca abajo mientras su desnudo trasero era manoseado por YoungBae.
“Qué excitante se ve esto. Quiero follarlo ahora”
Se subió a la cama colocándose detrás de Seungri.
-Cumpliré tu deseo de follarte-
-¿D-De verdad?- entusiasmado, volteó su rostro lo más que pudo para verlo.
-Sí- respondió seco mientras apoyaba su miembro entre las nalgas del peliplateado para frotarse un poco antes de colocar la punta en la pequeña entrada de Seungri.
-N-No la metas aún- ruega nervioso.
-¿Por qué? Tú dijiste que querías tener sexo-
-Pero primero debemos besarnos- lo mira sonrojado.
“Se ve adorable. ¿Es eso posible en un incubo?”
-¿Para qué? No somos nada. Eso lo hacen las personas que se aman- ríe.
Seungri con lágrimas en los ojos, le dedicó una mirada de odio.
-¡Eres un idiota!- lo empujó transformándose en murciélago mientras volaba saliendo por la ventana.
El castaño se sorprendió por un momento y luego rió.
-Ya volverá o encontrará a alguien más- se encogió de hombros y se puso de pie para apagar las luces e irse a dormir, no sin antes encargarse de la erección que le provocó aquel incubo torpe, adorable y sexy…
**
Al sentir algo cálido, YoungBae abrió sus ojos lentamente encontrándose con la atenta mirada del peliplateado quien se encontraba acostado a su lado.
-Buenas tardes, Taeyang- le sonríe dulce.
“Qué tierno se ve”
-¿Es divertido pasar el tiempo mirándome mientras duermo?- suspira sin dejar de mirarlo.
-Sí. Eres bello cuando duermes tan plácidamente-
-¿Y no lo soy cuando estoy despierto?-
-Lo eres, sólo que eres más…- pensó qué palabra no hiriente utilizar.
-Frío. Ya lo sé. No hace falta que intentes ser bueno conmigo-
Seungri no dijo nada, sólo lo miraba.
-¿Qué es lo que quieres en verdad?-
-Quiero hacerlo contigo-
-¿Y por qué yo?-
“He escuchado que para muchos, soy sólo una mierda de persona”
-Porque me gustas- confiesa sin titubeos, levemente sonrojado.
-¿Te gusto?, es imposible. ¿Sabes el tipo de persona que soy?- frunce el ceño.
-Sí. Me sentí atraído a ti desde la primera vez que te escuché debutando. Tu voz le trasmite paz a mi corazón- sonríe al recordar aquel bello momento cuando en el mundo de los incubos, escuchó en su pequeña radio la voz YoungBae provocando que su corazón latiera con fuerza por primera vez en años.
El castaño quedó en silencio ya que era la primera vez que alguien era sincero con él.
Desde su debut, él siempre fue dulce y amigable pero luego de una pésima experiencia con una joven al comenzar con su carrera, simplemente su corazón formó una coraza para que no vuelvan a pisotear sus sentimientos y con respecto a su carácter, había decidido ser desinteresado. Aunque fingía ser amable delante de sus admiradores para recibir propinas.
Suspiró regresando a la realidad al sentir la mano de Seungri acariciar sus cabellos.
“Debo alejarlo de mi”
-Ya no me dedico más al canto-
-¿Cómo que no? Eras el Rey del canto y del baile- lo mira sorprendido.
-Lo era. Ahora me dedico a otra cosa- se encoje de hombros.
-¿A qué te dedicas?-
YoungBae decidió no responder mientras sentía cómo el peliplateado le acariciaba sus cabellos mirándolo de manera dulce.
-Eres un incubo, ¿desde cuándo son así de dulces y enamoradizos? Siempre son interesados en el sexo y nada más-
-Puede haber una excepción- le sonríe.
-No te creo- entrecierra sus ojos.
-¿Qué puedo hacer para que me creas?-
YoungBae pensó un momento.
-¿Realmente me quieres?-
El peliplateado asintió.
-Entonces si me quieres, debes irte por una semana. Si te quedas, es sólo porque quieres sexo-
-¿Qué? ¡Pero quiero pasar tiempo contigo!- se sienta en la cama mirándolo triste.
-Ya lo he dicho. Si te quedas o regresas antes de los siete días, es sólo porque quieres tener sexo-
-¡Eres injusto!-
-La vida es injusta- se encoge de hombros.
Seungri lo miró durante un largo tiempo hasta que finalmente se transformó en murciélago yéndose del departamento.
-Realmente le gusto- ríe negando.
Ignorando lo que acababa de suceder, decidió tomar su celular que yacía sobre la mesita de luz, para ver la hora.
-Las cuatro de la tarde. Sí que he dormido esta vez- suspira y decide enviarle un mensaje a una chica cantante amateur que conoció mediante su mejor amigo y compositor de la mayoría de sus antiguas canciones, para que viniera a su departamento en unas horas.
Al recibir una rápida respuesta, sonrió de lado mientras se levantaba para prepararse antes de que la joven viniera a divertirse con él.
**
Eran las ocho de la noche y finalmente su visita llegó, por lo que YoungBae abrió la puerta.
Una rubia con buenas curvas, vistiendo un entallado y escotado vestido negro, estaba parada de manera sensual delante de la puerta.
-Hola Taeyang- sonríe de lado tocando su larga cabellera para luego acomodar mejor su pequeño bolso.
-Hola CL- la escanea con la mirada perdiéndose en sus bellas piernas.
-Tal como te describió tu amigo Jiyong, realmente eres apuesto-
-Gracias preciosa. Tú eres muy sexy-
Ambos sonríen de lado.
-Pasa- le indica y mientras la rubia ingresaba a su departamento, YoungBae la observó de atrás.
“Tiene buen trasero… pero no tanto como el del incubo”
Se sorprendió al pensar en el peliplateado, por lo que negó frunciendo el ceño mientras cerraba nuevamente la puerta.
-Ponte cómoda y siéntate en donde más gustes-
CL al notar dónde estaba el dormitorio, caminó hacia allí para sentarse con algo de inestabilidad, en la gran cama del castaño dedicándole una mirada felina.
“Decidida y sin rodeos”
Sonrió de lado caminando hacia ella.
-¿Quieres algo de beber?-
-No, ya he bebido antes de venir aquí-
-Lo he notado-
-¿Tanto se me nota?-
-Es que tienes las mejillas sonrojadas y te hacen ver muy hermosa- le acaricia su rostro provocando que la rubia lo tomara de la mano jalándolo hacia ella y así, lograr que ambos cayeran sobre la cama.
-Bésame Taeyang oppa y hazme sentir en el infierno- intentó besarlo pero se alarmó al escuchar un ruido en la ventana.
-Quita tus sucias manos de él-
“Oh, no…”
Suspirando para no enojarse, YoungBae volteó al ver a Seungri sentado en la ventana, de brazos cruzados.
-¿Y tú quién eres?- frunce el ceño la rubia mirándolo atentamente ya que pese a que estaba enojada por la interrupción, el peliplateado lucía muy sensual.
-No te interesa. Y él es mío, por lo que te repetiré por última vez que te alejes de MI hombre- se pone de pie logrando que rápidamente YoungBae se ponga de pie.
-¿Acaso no te he dicho que no vinieras hasta dentro de siete días?- lo mira serio.
-Sí pero menos mal que estaba cerca, de lo contrario, ibas a engañarme- frunce el ceño apretando sus puños ante el enojo que sentía.
-¿Engañarte?, pero si no somos nada- responde irónico.
Seungri hizo un puchero comenzando a llorar provocando que el castaño sintiera un dolor en su pecho.
“¿Por qué verlo así me hace sentir mal?”
Se sorprendió hasta que notó que CL, como pudo, se puso de pie.
-Mejor me retiro. Arreglen su problema de pareja. Odio estar involucrada en esto- toma su bolso.
-¡Piérdete bruja mal teñida!- gruñe aún sin dejar de llorar logrando que la rubia lo ignorara yéndose rápidamente del lugar.
Al escuchar el fuerte azote de la puerta principal cerrándose, el castaño tomó de los hombros a Seungri arrojándolo hacia la cama pero no contaba con que sus reflejos fallaran, logrando caer sobre el peliplateado.
-¿T-Taeyang?- se sonrojó al sentir la cercanía del castaño.
-¿Por qué estás aquí?- lo mira.
Seungri desvió su vista.
-Habíamos acordado que si venías era sólo porque deseabas tener sexo. Es mentira que me quieres, ¿verdad?-
“Es sólo un incubo, era de esperar que sólo quiera sexo”
Al pensar en ello, no pudo evitar sentir una leve molestia en su interior.
-¡No!, ¡yo te quiero Dong Yong Bae!- confiesa mirándolo levemente sonrojado al haberlo llamado por su nombre completo.
-¿Y por qué estabas aquí?- por alguna extraña razón, no podía dejar de observar la dulce mirada de Seungri.
-P-Porque extrañaba verte… p-pese a que nos hemos visto sólo dos veces, yo s-siempre pensaba en ti desde mi mundo y deseaba con e-estar contigo- mordió su labio inferior cerrando sus ojos con fuerza ante lo avergonzado que estaba.
El castaño no dejaba de verlo mientras que Seungri secaba su rostro ante la aparición de unas traicioneras lágrimas.
-Lamento haber interrumpido… me iré- intentó moverse para poder quitarse a YoungBae de encima y así poder transformarse pero el castaño lo tomó de las muñecas.
-¿Tú me quieres?- lo mira desconfiado.
-Me gustas… no, yo te amo Taeyang- confiesa sin titubeos mirándolo decidido.
Sonriendo de lado, el castaño se acercó más a él.
-Cumpliré tu deseo- susurra cerca de los labios de un sorprendido Seungri quien sólo atinó a abrazarlo por el cuello.
-¿P-Puedo besarte antes?- hace un adorable puchero.
YoungBae parecía pensativo mientras que sintió un agradable aroma dulce inundar sus fosas nasales.
-Por favommmh- no pudo terminar de hablar debido a que YoungBae atacó sus labios en un hambriento beso que al principio, le costó seguir al peliplateado.
Poco a poco, Seungri ladeaba su rostro para amoldarse mejor a la boca del castaño y a medida que el tiempo pasaba, el incubo frotaba su cuerpo con el de YoungBae.
“Su sabor es jodidamente dulce y excitante que se siente muy bien”
Finalmente deshizo el beso provocando que un sonrojado Seungri gimiera bajo mientras que el castaño se colocaba de rodillas, entre sus piernas.
YoungBae comenzó a quitarle las prendas al peliplateado quien cooperó de manera tímida y una vez que estaba completamente desnudo, intentó cerrar sus piernas avergonzado provocando que el castaño entrecerrara sus ojos.
-¿Acaso tú… eres virgen?-
Seungri se sonrojó como un tomate logrando que el castaño riera.
-¡No es gracioso!- hace un puchero.
-Es que es tan extraño que un incubo sea virgen siendo que prácticamente viven del sexo… ¿por qué quieres que un humano como yo sea tu primero?- lo mira serio.
-P-Porque estoy enamorado de ti y sé el tipo de persona que eres-
-¿Qué tipo de persona crees que soy? Todos dicen que soy un demonio disfrazado de un amable humano-
-Eres una persona dulce y llena de pasión por lo que amas. No eres un demonio, puedo asegurarlo viéndote a los ojos Taeyang- desliza su mano para acariciar la mejilla del castaño.
Al sentir su corazón latir con fuerza, YoungBae le quitó la mano del peliplateado que yacía en su rostro para luego quitarse sus prendas rápidamente.
-Suficiente de cursilerías. Te follaré- una vez desnudo, se acomoda entre las piernas de un sonrojado Seungri.
-T-Taeyang- lo mira con miedo al sentir cómo dos dedos del castaño se escabullían en su interior.
-¿Duele?- mete y saca sus dígitos lentamente.
Seungri negó cerrando sus ojos, intentando concentrarse.
Al estar unos segundos embistiendo el interior del peliplateado con sus dedos, YoungBae movió sus dígitos en forma de tijeras escuchando unos bajitos jadeos del incubo.
-La meteré- avisa quitando sus dedos para luego acomodarse sobre Seungri quien no abría sus ojos.
El incubo sólo atinó a asentir mientras abrazaba a YoungBae por el cuello.
El castaño dio una ruda embestida entrando completamente en Seungri quien al sentirlo, apretó con fuerza sus ojos dando un gemido alto.
“Su interior es tan caliente que me dan ganas de moverme con rudeza. Jamás sentí algo igual”
Apoyando su frente sobre el pecho de ahora un silencioso Seungri, el castaño comenzó a penetrarlo sin esperar a que se acostumbre.
-Aaah mmh T-Taeyang- gimió de una manera tan extraña que YoungBae detuvo sus embestidas para mirarlo y asustarse al verlo llorar.
-¿Te duele?, lo lamento… saldré de ti…-
-¡No!, no salgas por favor- lo mira con súplica.
-Pero estás llorando, significa que te duele-
Seungri negó.
-Sólo estoy feliz porque finalmente soy uno con la persona que amo- le dedica una sonrisa tan llena de calidez que YoungBae no pudo resistirse en besarlo.
“¿Es realmente posible que un incubo se enamore? Y lo peor de todo, ¿puedo nuevamente ser capaz de confiar en las palabras de amor de alguien que prácticamente acabo de conocer?”
No pudo evitar pensar mientras ambos disfrutaban besarse de una manera tan ruidosa debido a que Seungri jadeaba.
Por falta de aire, el peliplateado deshizo el beso para luego dedicarle una mirada llena de lujuria a YoungBae.
-Fóllame como más te guste… quiero que ambos disfrutemos esto- abre lo más que pudo sus piernas sintiendo cómo el castaño comenzaba a embestirlo con más fuerza.
Al sentirse incómodo, YoungBae deslizó sus manos hacia las nalgas del incubo, elevando un poco su cadera para poder penetrarlo a su antojo.
-Aaaah mmmh sí mmmh más aaah- se aferra a la almohada gimiendo fuerte.
El castaño sólo jadeaba ronco aumentando la velocidad de sus embestidas provocando que un excitante sonido se produzca entre la fricción de ambas pieles húmedas chocar una y otra vez.
“Ese aroma es tan dulce que me produce un cosquilleo en mi interior”
Miró a Seungri quien mordía su labio inferior para no gemir tanto y sonrió de lado atacando el pecho del incubo a mordidas.
-MMMH SÍ AAAH M-MIERDA MMMH ME V-VENGO AAAH MMMH- ante las mordidas y el buen labor que YoungBae estaba haciendo dándole placer, contrajo su ano comenzando a tener espasmos de placer.
-Yo también mmh- jadeó ronco y mientras mordía con fuerza el cuello de Seungri, dio una última embestida corriéndose dentro del incubo quien gimió alto elevando su pecho, corriéndose con fuerza entre ambos abdómenes.
Mientras ambos se recuperaban de sus recientes orgasmos, YoungBae decidió salir del peliplateado notando cómo Seungri contraía su ano logrando que su semen saliera lentamente.
“Es la primera vez que olvido usar protección”
Sonrió de lado ya que para su suerte, no sería un problema. Aunque se sentía aturdido debido a que Seungri le estaba produciendo un cambio en él.
Suspiró sentándose al lado del incubo quien sonrió mirando detenidamente a YoungBae con dulzura.
-Eres bueno en la cama. Cuando quieras volver a tener sexo, puedes llamarme… incubo-
El peliplateado frunció el ceño poniéndose de pie para vestirse rápidamente.
-¿Qué te sucede?- lo mira sin comprender.
-Mi nombre es Lee Seung Hyun y mi apodo es Seungri- le dedica una mirada seria convirtiéndose en murciélago para irse por la ventana volando.
-¿Se enojó?- miró hacia la ventana sorprendido y suspiró desviando su vista hacia donde Seungri estaba recientemente acostado, notando algo que brillaba sobre la almohada.
-Su cadenita de oro- la tomó observándola detenidamente notando que en el centro, el dije era algo alargado con unas extrañas letras grabadas en ella que no comprendía el castaño.
Suspiró pesado mientras dejaba la cadenita sobre la mesita de luz.
-Ya volverá- se encoje de hombros y al sentir su cuerpo pesado, se acostó en la cama para dormirse casi al instante.
**
Luego de haber tenido relaciones con Seungri, había pasado más de dos semanas y el incubo no volvió a aparecer. Y lo peor de todo era que YoungBae era un caos por no poder dejar de pensar en él, no solamente en lo físico, sino en lo lindo que era el incubo con él.
YoungBae quien no estaba de buen humor mientras hacía su trabajo, llevaba puesta una vestimenta sensual para Halloween mientras bailaba delante de sus admiradores quienes estaban embelesados gritando a todo pulmón por el baile del castaño que ahora sólo llevaba puesto una zunga color naranja con rostro como si fuera una calabaza.
“Tuvo sexo y se fue. Realmente quería eso y no amarme como dijo”
Gruñe desilusionado, bailando alrededor del caño mientras conservaba en su cuello la cadenita de Seungri.
De pronto, a lo lejos del lugar, divisó al incubo vistiendo sus oscuras prendas, apoyado contra una de las columnas, cruzado de brazos mirándolo atento.
“¿Qué hace aquí?”
Como si el destino estuviera a su favor, la música terminó dando por finalizado su show. Por lo que luego de recibir billetes de todos sus fans, se apresuró en dirigirse hacia Seungri quien se había esfumado de su vista.
“¿A dónde se fue?”
Miró a su alrededor y al no verlo entre tantas personas, suspiró desilusionado.
-Mierda-
-¿Me estabas buscando?- colocándose detrás del castaño, le susurró de manera sensual.
YoungBae frunció el ceño tomando una de las manos del peliplateado que se escabullía por su pecho, para jalarlo hacia la columna mientras apegaba su cuerpo contra él.
-Vaya trabajo tienes… Taeyang, el stripper- sonríe de lado.
-¿Algún problema con eso? Necesito dinero- frunce el ceño.
-Ningún problema. Es sólo que… estoy celoso porque eres mío y no quiero todos estos horribles humanos te miren con deseo- lame los labios del castaño mientras lo abrazaba por el cuello.
-¿Cuándo dije que era de tu propiedad?- lo desafía con la mirada.
-Llevas mi colgante. En el dije dice “propiedad de Seungri”- con su dedo índice acaricia el desnudo pecho de YoungBae, tocando la fina cadenita.
Rápidamente el castaño se lo quitó colocándoselo al incubo.
Seungri frunció el ceño.
-¿A dónde te fuiste?-
-¿Acaso me extrañaste?- sonríe de lado.
El castaño frunció más el ceño sin quitarle la mirada de encima.
-Vaya vaya vaya, mira a quién me encuentro en este lugar… el incubo virgen. Me enteré de que finalmente has podido tener sexo. Es mentira, ¿verdad?- se hizo presente un bello pelinegro de labios carnosos.
-Kang Seung Yoon- frunce el ceño Seungri.
-¿Quién eres?- el castaño voltea su rostro para ver al pelinegro.
-Soy un incubo como aquel ser de ojeras… sólo que yo soy mil veces mejor y más hermoso- comenta en tono arrogante.
Seungri rió a carcajadas al escucharlo.
-¿De qué te ríes, incubo de bajo nivel?- frunce el ceño.
-Mi nivel es más alto que el tuyo. Y me río porque dices ser más hermoso que yo cuando es mentira-
-Es la verdad, ¿o no precioso?- acaricia el hombro de YoungBae provocando que soltara al peliplateado para colocarse cara a cara con él.
-¡No lo toques!, es mío- gruñe Seungri intentando tomar el brazo del castaño pero rápidamente Seung Yoon lo abrazó del cuello atrayéndolo hacia él.
-No es tuyo porque no lleva tu marca- le señala la cadenita que Seungri tenía.
-Eso no implica que no sea mío, ¡Suéltalo!- se queja pero se sorprendió al ver que YoungBae se aferraba a la cintura del pelinegro.
“Tiene un aroma similar a Seungri pero más agridulce que logra que mi cuerpo se mueva por sí solo”
Miró a Seung Yoon quien sonrió de lado.
-Soy hermoso, ¿no crees?- susurra cerca de sus labios.
-Sí, lo eres- susurra bajo pero lo suficientemente audible para que el peliplateado lo escuchara.
-¿Quieres ir al sector VIP para que podamos pasarla bien?- intentó besarlo pero YoungBae reaccionó empujándolo al escuchar unos audibles sollozos de Seungri.
-¡Eres un idiota! ¡Te odio!- grita Seungri quien al sentir la mano del castaño tocar su hombro, lo empujó yéndose entre las demás personas disfrazadas que bailaban ebrias sin darle importancia a lo que sucedía.
-¡Seungri!- gritó e intentó ir tras él pero Seung Yoon lo detuvo.
-No vayas tras un incubo que no vale la pena. Vamos al sector VIP- le guiña un ojo.
YoungBae suspiró intentando calmarse para no golpearlo.
-Ve tú primero y has que sólo estemos nosotros en el VIP. Yo iré cuando me quite este molesto disfraz-
-De acuerdo- sonriendo de lado caminando hacia el sector VIP, no sin antes besar y manosear a cualquier persona que se le atravesara en su camino.
“Típico comportamiento de un incubo”
Suspiró mirando hacia donde se había ido Seungri, por lo que decidió ir a su pequeño camerino para cambiarse y así poder ir a buscarlo. Aunque en su mente no podía dejar de pensar en la mirada de odio lleno de lágrimas que le dedicó.
“Me dolió peor que cuando fui dejado por mi antigua pareja”
Frunció el ceño y aceleró el paso esquivando a sus admiradores porque sabía que si dejaba que se le acercaran para que le tomen fotos o algo, no podría encontrar a Seungri.
**