-¡Adiós, que se diviertan!... y Ojala y les de diarrea y su cita termine pronto o que a KyungSoo le de cólico premenstrual- Dije esto último entre dientes mientras les sonreía falsamente y agitaba mi mano diciéndoles adiós, ellos voltearon a verme, agitaron las manos y se alejaron. Caminando muy juntos. ¡ssiba!
Caminaba por una calle de Gyeongju , llenas de gente que caminaba de prisa y carros andando me desesperaban, tendría que regresar solo a mi casa. Era una tarde cálida de marzo, apenas habían empezado hacía quince días las clases y JongIn me había dejado botado por segundo ocasión en viernes por irse con KyungSoo, me sentía triste y enojado con el , el viento soplo despeinándome el chongo mal amarrado que caía casi ya por mis hombros. Me daba igual.
Me dirigí lentamente a la parada de autobús, arrastraba un poco los pies sin importar que se rayaran un poco mis zapatos recién comprados para el inicio del curso escolar, ya esta de malas.
Me tomaría casi una hora llegar a mi casa, si me hubiera quedado con ellos, me hubiera regresado con la mamá de JongIn, tardaríamos menos de media hora, por la imprudencia de la señora al manejar rápidamente pero era muy divertido, era como si también fuera adolescente robando el carro del papá, vendríamos oyendo música y cantando canciones de Girl Generation que a fuerza de tanto escucharla ya me sabía varias canciones y hasta me gustaba cantarla…ah y comiendo korebap o peperos, cortesía de la señora. Pero no, preferí venir a la parada del autobús.
¿Porque estaba molesto? Nos conocimos desde niños, enseguida fuimos amigos cuando llegó a vivir a la casa de a lado de la mía, venían de Inglaterra, porque su madre extrañaba su lugar de origen y quería criarlo en su país natal. Les agradó a sus padres que yo tuviera su edad porque podría compartir con el, así que en seguida me acogieron en su casa, pasaba mucho tiempo con el.
Sus padres decían querer vivir en un lugar mas tranquilo para que JongIn viviera seguro y disfrutara su infancia ( Así que yo era parte del paquete de tranquilidad pues era un niño muy educado según ellos), su padre había conseguido un trabajo en Gyeongju en una firma hotelera y su madre consiguió afortunadamente trabajar en el Museo Nacional de Gyeongju , porque era antropóloga, ambos viajaría todos los días hasta el pueblo , pero valdría la pena según ellos.
Desde que nos conocimos empatizamos y siempre jugamos juntos, convivíamos la mayor parte del tiempo, incluso compartíamos sueños en común , habíamos prometido que siempre estaríamos juntos, estudiaríamos juntos, iríamos juntos a la universidad de Ulsan, trabajaríamos en la misma empresa juntos e incluso que cuando fuéramos adultos y tuviéramos esposa viviríamos cerca y cuando tuviéramos hijos ellos jugarían juntos…
Claro que habían sido promesas en nuestra época de asistir a la Elemental y ya estábamos en el instituto Superior y claro no tendríamos esposa porque con el paso de los años nos habíamos dado cuenta que nos gustaban los chicos y claro tampoco podíamos casarnos porque legalmente no era posible en Corea y claro tampoco tendríamos hijos porque los hombres no se embarazan y claro tampoco podríamos salir juntos porque JongIn ya tenía novio y yo no. ¡ ssiba!
Otra cosa que me molestaba un poco (no era envidia, por supuesto que no) es que el papá de JongIn era extranjero, conoció su mamá cuando después de terminar la universidad se fue de mochilero, cuando llegó a Corea, conoció a la mamá de JongIn y se enamoraron, la convenció de irse con el, ella a pesar de tener solo 20 años sin importar lo que pensaría la familia de ella, aceptó. Viajaron juntos a Inglaterra de donde era el , ella estudió con el apoyo de los padres de este, pese a ello trabajaban en cuanto empleo pudieran para apoyarse con la renta y sus gastos, pero todas esas experiencias les hicieron ser personas de mente mas abierta y de lo importante que es el amor para salir avante.
Cuando JongIn les dijo que era gay, no lo tomaron a mal, hablaron el de sexualidad e incluso le enseñaron como debía usar un condón, ya fuera que el lo usara o su pareja lo usara… que diantres, ¡ Una mamá no debería hablar así, al menos no en Corea! Si yo se los decía a mis padres seguro me encerraban en el sótano de por vida.
Así que JongIn desde mas joven supo mas de sexo que yo y aun cuando me decía que se restregaba con KyungSoo cuando este ultimo iba a dormir con el y sobre todo ¡con permiso de su mama!, claro la de JongIn (porque de la de KyungSoo no sabía nada) aun no lo hacía, pero JongIn decía que estaba seguro que dentro de poco lo harían, habían hablado ya de ello , aun no habían dado el paso porque querían estar seguros de amarse.
Mientras que yo solo había recibido unos cuantos besos y solo podía tocarme a mi mismo, con ayuda de mi mano y un poco de crema humectante que mi mama se untaba en la cara y que últimamente le extrañaba que se le acabara muy pronto, solía escuchar que le decía a papa. ¡ ssiba!
Aun cuando KyungSoo me insistió para que los acompañara y estuviéramos juntos no quería sentirme incomodo, la verdad aunque suene egoísta no me importaba si yo los incomodaba, pero ya en muchas ocasiones cuando íbamos a la plaza saliendo de la escuela, había ido con ellos al cine y el incomodo era yo al ver como KyungSoo le daba a JongIn palomitas en la boca mientras yo comía mis palomitas solo e ignorado, mientras JongIn le compartía de su refresco y se miraban a los ojos ridículamente felices, mientras yo los miraba ser ridículamente ser felices y terminábamos los tres sin siquiera ver la película o como cuando caminábamos juntos de regreso de la escuela y se abrazaban por el frío en noviembre , mientras yo me abrazaba a mi mismo pero lo peor de todo era acompañarlos al parque Hwanseong, como cuando un día fuimos a una cafetería y JongIn por amabilidad se sentó a mi lado, como la mesa tenia un mantel largo, KyungSoo quiso acariciar la pierna de su novio, pero errando la puntería me tocaba la mía, le deje hacer, solo por molestar, pero cuando subió mas y di un brinco quedó al descubierto, me moría de la risa, pero al parecer a ellos no les pareció muy gracioso, después de muchos ruegos convencí a JongIn de disculparme, pero en compensación terminé aceptar acompañarlos al parque, no porque realmente desearan mi compañía, sino porque mi función sería avisarles si alguien pasaba, los veía besarse arrinconado en una parte solitaria del área de pinos, al verlos lo único que podía hacer era lamerme mis labios, fingí dormirme echándome en el pasto, pero cuando escuché los ¡mghm! Rayos, estaba seguro que JongIn lo hacía a propósito en venganza.... me sentía patético.
Además era injusto, JongIn decía que había alguien para mi reservado en algún lugar y que cuando nos encontráramos seguramente Cupido nos lanzaría una flecha, aunque yo estaba seguro que en algún lugar Cupido había perdido mi flecha y para que Zeus no se enojará no la reportó perdida y por ende nunca iba a haber una flecha para mi y el que debería ser el amor de mi vida nuca quedaría flechado de mi o peor aún, todos decía que JongIn y yo eramos muy parecidos y ¿Si el estúpido de Cupido uso mi flecha con el?…
Aunque claro a mi no me gustaba KyungSoo era demasiado nerd , tenia cara de Buho con esos ojos tan grandes, ¿quien tiene los ojos tan grandes en Corea?, eso es ridículo y poco atractivo, digo no me caía mal, pero realmente no entendía que le veía que estaba tan enamorado y no es que me dieran celos por JongIn porque seria como incestuoso , tampoco es que le tuviera envidia…bueno la verdad he de reconocer que lo que yo tenía si se llama “Envidia” con todas las letras de la palabra , porque quería que alguien me mirara como el miraba a KyungSoo con esa cara de persona a dieta mientras pasa frente a una pastelería o como cuando lo tomaba de la mano y le acariciaba con su pulgar el dorso o como cuando hablada de lo lindo que era su novio y entonces JongIn ponía cara de pintura renacentista, de esas que me caía tan mal y que nos obligaba a estudiar el maestro de arte. ¡Estúpido Cupido, estúpido JongIn y estúpido yo por fijarme en esos detalles que me hacían sentir mal!
Estaba sentado en la parada de el autobús, refunfuñando de la vida, cuando llegó me senté hasta el fondo, viendo hacía la ventana, me coloque los audífonos escuchando a música deprimente que hiciera juego con mi estado de ánimo , después de casi una hora de camino, entre dormitar, seguir refunfuñando de mi vida, pensando en mi mala suerte, en el estúpido de Cupido…en fin siendo solo un adolescente.
Llegué a mi parada y recorrí las 3 cuadras que me separaban de mi casa. Estaba cansado, aburrido y …cansado de solo pensar en la cantidad de deberes que tendría que hacer.
Entre a mi casa azotando la puerta. Desde el pequeño recibidor me asomé a la sala.
-TaeMin ya llegaste.
– Hablando de estupidez-. Murmure mas para mi y rodé los ojos , mi hermana HaYii estaba recostada en la sala de tres piezas y ella como siempre estaba en el mas pequeño para una sola persona y se tenía que enroscar para poder entrar, no tenía sentido a menos que en una de sus vidas pasadas haya sido serpiente, aunque eso sonaba muy lógico.
-Esta noche me acompañaras a una fiesta –Me dijo muy fresca.
-No iré, prefiero morir de aburrimiento viendo un documental sobre como construyen los hormigueros las hormigas que ir con las chismosas de tus amigas- Dije cortantemente parado, recargado sobre el marco de la entrada de la sala.
-Es que es una fiesta de parejas y ellas irán con novio y yo no quiero ir sola-Dijo haciendo aegyo .
Rayos esas palabras me dieron en el corazón, entendía lo que ella sentía, ella era una chica algo mas pequeña que yo, media poco menos de 1.60, tenia el cabello largo, lacio y castaño claro con un flequillo en el frente , piel blanca, delgada con una pequeña cintura, sus rasgos delicados y femeninos, sus labios no tan gruesos, no le veía defectos, pero aun así no entendía como no tenía novio, tal vez era que los hermanos Lee fueran odiados por Cupido por alguna razón, pero esas palabras doblaron mi fuerza de voluntad, me avente en el sillón mas grande para poder desparramarme mejor y deje a un lado mi mochila .
-Mmm eso sonó incestuoso- Dije mirándola con burla.
-No seas tonto- Me aventó un cojín directo a la cara -Serás mi acompañante mientras conozco a un chico lindo y luego serás libre.
-Ah y que ganó yo.
-Tal vez conozcas a una chica linda…o un chico guapo – Dijo esto sonriendo pícaramente y guiñándome un ojo.
Ahora fui yo quien le lance un cojín directo a la cara.
-!Oppa!
-Tonta, claro que no-. Nunca había dicho que me gustaran los chicos pero sentía que mi hermana siempre lo sospechaba, además que al ver a JongIn con novio y el y yo siempre juntos, supongo sacó conclusiones.
-A menos que tengas planes para salir con JongIn- El dedo en la llaga.
-Compraste comida y no me guardaste, por eso no consigues novio por tragona- Dije para cambiar la platica. Nuevamente sentí un cojín en la cara.
-Y tu por feo- otro golpe bajo, realmente me sentía feo y ella lo sabía y me miró arrepentida
-Pero mira, te guarde la galleta de la suerte- Me la aventó y la abrí quería saber que me deparaba el destino.
-Dice que conocerás el amor de tu vida o que dice lee en alto Tae- Me apresuró.
-“Algo crecerá dentro de ti”- leí entre risas imaginándome cierta imagen.
Mi hermana me miró sería y usando un tono enojado.
-TaeMin te dije que te desparasitaras, ahora una lombriz crecerá dentro de ti-