Días de escuela.
-Aaamnh aamh.- estaba en cuatro entre las sabanas de su cama iluminada por los primeros rayos de sol.
-Delicio mmn so Dick. Mnh
-Mnh Bruu…ce
-Me vengo oo mmh
-Aah Brucee- gimió al sentir como el mayor lo llenaba con su semilla .
-¡Apresúrate! Alfred te espera a desayunar antes de que te vayas.- mordió su espalda antes de salir de él y marcharse de la habitación.
Observo al hombre que había querido como un padre alejarse, despacio bajo de la cama y se dirigió a la regadera. En donde se permitió bufar su frustración al tiempo que limpiaba su cuerpo.
Bajó con una sonrisa en sus labios, desayuno lo que Alfred le había preparado, se despidió de él con un beso en la mejilla y salió rumbo a la escuela en su moto.
Continuaba siendo el Dick Grayson de siempre, alegre y amable, con buenas calificaciones y él mejor gimnasta de la escuela. No se permitiría derrumbarse, después de todo cumpliría 17 años la próxima semana; no le faltaba mucho para ir a la universidad y entonces se alejaría, volvería a ser libre, no volvería a ver a Bruce, aunque le doliera. Y es que a veces no podía odiarlo, ¿cómo hacerlo? Si cuando murieron sus padres le dio un hogar, recordaba sentirse protegido por esos grandes brazos cada vez que lloraba su perdida. Recordaba como solía ayudarlo con las tareas de la escuela, o como lo cuidaba cuando estaba enfermo. Y luego estaban esos otros recuerdos, esos que se remontaban a tan sólo tres meses. Una amarga sonrisa cruzó su rostro. Al cerrar su casillero.
-¡Hey! Dick ¿listo para la fiesta?- escuchó a Roy quien golpeo su hombro a modo de saludo.
-¿Fiesta?
- Oh vamos Dick no me decepciones, aun recuerdo la del año pasado.
-Tranquilo Roy seguro Dick no quiere arruinarnos nada.- habló Wally llegando junto a ellos.
-Oh mi cumpleaños, La cuestión es que no pensaba hacer nada este año. No sé tal vez salir un rato con el grupo y ya.
-¿En serio? Decepcionaras a las chicas amigo, escuche que Bárbara y Kori estaban buscando vestidos. Y hermano tienen una pequeña competencia para ver quien lleva el mas revelador.
-¿Y tú cómo sabes eso? Roy- preguntó el otro pelirrojo
-Casualmente las escuche hablar. Ya sabes que las dos mueren por llamar la atención de este perro con suerte.
Dick sonrió abiertamente, había tenido sus acercamientos con ambas chicas y la verdad era que las dos le gustaban y no podía decidirse por ninguna. Y luego iniciaron ese juego por llamar su atención que aunque quisiera negarlo elevaba su ego. Y luego sucedió lo de Bruce.
-No seas maldito y escoge una. Déjanos algo a los demás.
-Sí claro, como si tuvieras oportunidad con Kori.
-Podría sorprenderte Wallyto.
-Odio que me llames así.
-Quizás prefieras “el velocista mas rápido de la escuela, dos veces campeón estatal en busca de su siguiente triunfo, un aplauso para Kiiid Flaaash”
-Wally, Wally, Wally.- Comenzó a vitorear Dick mientras veía la cara de molestia de su amigo. Sabia que odiaba el sobrenombre.
-Como si Speedy o Robin fueran mejor sobrenombre.
-Ja ja ja lo había olvidado Robin.
- Exacto, olvidan que estoy haciendo campaña para dejar ese apodo, ahora seré Nigthwing.
-Claro hasta el leotardito tiene el dibujo azul.
-Oh cállate Roy. Tu te autonombraste Flecha roja.- reclamó el heredero Wayne.
-Es lo único acorde con mi aplastante personalidad.
-Suficiente.- dijo el velocista y mirando a Dick comenzaron una amigable pelea que termino solamente porque tenían que continuar con sus actividades escolares.
Regresó a la mansión con una sincera sonrisa, pasar tiempo con sus amigos siempre lo hacia sentirse mejor, un poco mas fuerte. Pensaba que quizás Bruce le daría un descanso, a veces no visitaba su habitación en 2 o 3 días. Entró al garage para dejar su moto cuando vio a un chico con pinta de pandillero sobre otra de las motos. Derrapó frente a él impidiéndole el paso.
-Ok te lo diré una vez. Aléjate de la moto. No hagas ningún movimiento brusco y no tendremos problemas.
-¿En serio?- el muchacho del flequillo blanco lo miro irónico antes de volver a hablar. -Vamos niño rico mira con quién te metes.
-Espera estas sobre la Ducati ¿Cómo lo hiciste? llevaba semanas sin encender.
-Oh veo que ya se conocieron joven amo Richard permítame presentarle como es debido al joven maestro Jasón. A partir de hoy estará apoyándonos con sus conocimientos en mecánica.- dijo el mayordomo de la casa entrando con una charola que llevaba una jarra de agua y un par de vasos. -Tal vez podría pasar tiempo con el joven Todd y aprender un poco más sobre el funcionamiento de sus motocicletas, así probablemente no gastaría tanto en mantenimiento. ¿Requiere algo mas joven Jasón?
-No Alfie gracias.
-Le agradecería que utilizara mi nombre de manera correcta.
-Lo siento Al no se puede, eres demasiado cool para ser un apretado mayordomo inglés.
Dick trataba de no reír a carcajadas. Mientras el aludido movía la cabeza a modo de desaprobación para luego suspirar la palabra cool al marcharse.
Jasón apago la moto bajo de ella y limpiándose la grasa con uno trapo se dirigió hasta la jarra de agua. Dick aprovecho para acomodar su moto.
-Oye lo lamento. No debí asumir lo peor.- habló quitándose los guantes de piel acercándose al chico.
-Estoy acostumbrado.- afirmó el mecánico subiendo los hombros restándole importancia. -Oye es hermosa esa Honda.
-Gracias. ¿Quieres verla de cerca?
-Seguro tendré que hacerlo antes de que la arruines.
-Hey no soy tan terrible.
Pasaron un tarde agradable Jasón le contó que vivía en Crime Alley, que Alfred lo había conocido tratando de robar las llantas del mercedes favorito de Bruce. Y después de una extraña charla el mayordomo decidió que “un muchacho con tal ímpetu sólo necesitaba un empujón en la dirección correcta para desarrollar su potencial” Había dejado la escuela por un tiempo, pero ahora iba a la nocturna, era dos años más joven que él pero ya lo rebasaba en estatura. En general parecía un buen tipo, un poco bravucón quizás pero seguramente era necesario en su vecindario.
-Es hora de cenar amo Richard.- habló el mayordomo entrando en la habitación.
-Gracias Al enseguida bajo.- afirmó cerrando los libros sobre su escritorio.
-El amo Bruce llamó, al parecer un asunto urgente en la oficina le impide acompañarnos esta noche por lo que me pidió que le diera las buenas noches de su parte. Dick suspiro en alivio y sonrió de forma que el hombre mayor no supo bien a bien interpretar.
-Supongo que cuando el deber llama.
Continuara ……
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