-No estoy listo.
-¡Claro que lo estás! Deja de ser tan molesto -Su Won lo retuvo del brazo, evitando que el otro se fuera.
-No es como si quisiera ser así. Simplemente estoy algo nervioso -Jae Duck se estremeció, como si una corriente eléctrica le hubiera atravesado el cuerpo entero-. Sé que algo va a salir mal y simplemente estaré fuera de tu casa, quizá, muerto.
-¡Qué dramático!
-Tu papá me odia.
Su Won se quedó viendo a Jae Duck.
-Bueno... es verdad. Pero tendrá que aceptar nuestra relación, quiera o no.
Se agarraron más fuerte de las manos. Iban desde la casa del mayor hacía el hogar de los padres de Su Won.
Había pasado casi un año desde que comenzaron a salir como novios. Ante sus amigos cercanos ellos no tenían problema en mostrarse como eran, sin embargo, ante sus padres la cosa cambiaba. Obviamente el problema no era que fueran gays, después de todo, sus padres también lo eran, incluso sus tios. Quizá todo recaía en que su compañero era Jae Duck. El chico no tenía nada malo, simplemente que siempre fue presentado como su mejor amigo y sabía que a su papá no le gustaba.
Llegaron a la casa. Su Won sacó las llaves para abrir la puerta. Dio el paso primero a su invitado. Ambos ingresaron, algo nerviosos.
-Hola, chicos -Jae Jin iba llevando el bowl de la ensalada de la cocina hacía el comedor.
-Hola, tío -Su Won fue a abrazarlo.
-H-hola, señor -Jae Duck hizo una reverencia hacía el adulto, el cual se la regresó sutilmente. Se separó de su sobrino para ir de nuevo a ayudar. -No me dijiste que también estarían tus tíos -le susurró a Su Won apenas el mayor se distanció.
-La verdad es que yo tampoco sabía. Pero mírale el lado bueno, te verás con todos de una vez.
-Tú quieres que me muera de un paro, ¿verdad?
-¡Su Wonnie! -se quedó tieso al escuchar como Sung Hoon, la "madre" de su novio, salía de la cocina para encontrarse con su pequeño y abrazarlo. -Me alegro que ya estés en casa. Bienvenido, Jae Duck -le sonrió.
-Gracias por aceptarme hoy -hizo una reverencia-. En serio estoy muy feliz.
-No te molestes. Siéntete como en casa. Ya cuántos años llevan siendo amigos con Su Wonnie, ¿cuatro, cinco años?
-Sí, señor. Alrededor de cinco años -mencionó con orgullo.
De la nada, apareció Ji Won detrás de Sung Hoon. Su mirada penetrante quería atravesar al invitado un millón de veces.
-Papá -Su Won se acercó a saludarlo. El adulto le sonrió cálidamente, abrazándolo.
-Veo que si pudo venir tu amigo.
-¡Sí!
Jae Duck se inclinó ante él. Ji Won hizo un pequeño gesto, apartándose de prisa.
-Vengan, tomemos asiento.
Su Won tomo la muñeca de su novio, arrastrándolo hacía el comedor, donde el pequeño Seung Jae era mimado por Jae Jin.
-¡Es el novi...! -rápidamente, Su Won hizo gestos hacía su pequeño primo, indicando que se quedara callado. El menor lo miro confundido, mientras se mantenía callado.
El almuerzo fue servido. Cada quien tomo su lugar en el amplio comedor. Jae Duck no dejaba de sentir la pesada mirada de Ji Won puesta sobre él. Su mano temblaba un poco mientras tomaba los alimentos, colocandolos sobre su propio plato.
-Dinos, Jae Duck, ¿haz pensado qué estudiar en cuanto te gradues del instituto?
-Sí, señor. He pensado en aplicar a medicina. Realmente me gusta y quiero intentar hacer lo mejor por la gente.
-Wow -Sung Hoon sonrió-. Es impresionante.
-Ja... No es la gran cosa -respondió, restandole importancia.
-Su Wonnie todavía sigue mirando por ahí a ver qué encuentra.
-¡Mami!
-Perdona -se rió un poco-. Pero ese no es motivo para avergonzarte, cariño.
-Él tiene razón, Su Wonnie. Simplemente tienes que ver qué carrera te gusta más y vas por ella. Recuerda que en mi casa hay algunos catálogos de universidades, puedes ir y los observamos juntos.
Se escuchó un gruñido sutil. Su Won vio como Ji Yong le daba un empujon a Ji Won y Sung Hoon lo miraba con reproche. También notó como Jae Duck se removió algo incómodo en su puesto, intentando que no se notara tanto.
-¿Estás bien, papá? -preguntó, intentando aligerar un poco el ambiente.
-Sí, no te preocupes -tomo un sorbo de agua-, tengo la garganta reseca. Es todo -le sonrió un poco.
Sin embargo, nada mejoró. Su madre intentaba hacer sentir agusto a Jae Duck, al igual que sus tíos, pero su padre no colaboraba en nada y de vez en cuando lanzaba ciertos comentarios en contra de él. La cena terminó. Jae Duck se ofreció a lavar los platos junto con Su Won.
-Relájate.
-¿Cómo quieres que esté calmado si con solo respirar tu papá está que me mata?
-Ya lo sé, pero mira el lado bueno. 1) Mamá te ama, 2) mis tíos te aman, 3) hasta Seung Jae te ama. Sé que será aún mejor su reacción en cuanto sepan nuestra relación.
-Eso espero.
Tomo su mano, entrelazando con fuerza sus dedos. Rapidamente, le dio un beso en los labios. Jae Duck puso su mano en el cuello del menor. Podía estar muy complicada la situación, pero amaba demasiado a ese chico como para rendirse solo por su padre. Se separaron para ir hacia la sala donde los adultos sostenían una conversación.
-¿Cuándo vas a decir que Jae Duck es tu novio?
Su Won abrió los ojos como platos cuando escuchó como su primito, inocente a la situación, le preguntaba con sutileza. Simultáneamente, vio como todos en la sala tenían el mismo rostro que él. Las miradas de todos se clavaban en su pareja.
-Su Wonnie... -musitó su madre.
-S-sí. Es cierto -no tendría chiste ocultarlo más-. Jae Duck y yo llevamos saliendo alrededor de un año. Lo traje aquí hoy para presentarlo oficialmente.
Sung Hoon cubrió su boca con sus manos. Estaba realmente sorprendido. Ji Won se levantó, sin despegar el ojo de Jae Duck. Se acercó a lentas sancadas, hasta quedar frente a frente con el muchacho.
-Sí... disculpe por no presentarme adecuadamente -el aludido enderezó su postura y con voz firme, prosiguió-: soy Kim Jae Duck, el novio de su hijo Eun Su Won. Es un gusto para mí estar aquí diciendo esto.
El rostro del adulto se contrajo en una mueca. Estuvo a punto de decir algo pero Su Won se paró entre los dos.
-Papi... desde el día que tú y mamá me adoptaron, estuve realmente agradecido con ustedes. Los amo demasiado porque me dieron una familia, un hogar donde vivir y he llegado hasta aquí gracias a los esfuerzos de ambos. Estoy realmente agradecido -hizo una ligera reverencia- pero ahora soy grande y quiero que lo entiendas. Jae Duck es la persona que yo amo y quieras o no, aún si es sin tu bendición, permaneceré con él.
Ji Won alargo sus brazos y apartó a su hijo con algo de brusquedad, casi haciéndolo caer. Volvió a estar frente a frente con Jae Duck.
-Quiero que algo quede claro: no me agradas.
-Lo sé.
-Bien. ¿Y aún así estás aquí, frente a mí, presentandote como el novio de mi hijo?
-Sí, señor. Realmente lo amo y espero recibir su bendición. Es algo importante para mí el ser aceptado por las personas que Su Wonnie ama.
-Entonces, 1) si separas a mi hijo de nosotros, eres hombre muerto; 2) si le haces daño, eres hombre muerto; 3) si lo engañas, eres hombre muerto. Mi pequeño es lo más valioso que tengo, además de mi esposo y mis amigos. ¿Entiendes el valor que tiene la persona que te estoy entregando?
-Por supuesto, señor. Muchas gracias -le sonrió e hizo una reverencia. Estaba realmente agradecido con recibir la aceptación de Ji Won.
-Bien -vio al mayor, acercándose a Su Won, disculpándose por cómo lo había apartado. Le susurró algo al oído antes de retomar su asiento al lado de Sung Hoon, quien lo miraba con orgullo y admiración.
Ji Yong, abrazando a Jae Jin, dieron sus felicitaciones a la joven pareja, deseandoles lo mejor para el futuro. Seung Jae también estaba orgulloso por su primo.
Su Won no pudo evitar acercarse a Jae Duck, dándole un beso en los labios (recibiendo un gruñido de parte de su padre). Lo abrazó después, tomando asiento, sonrientes. Para relajar al mayor de los Eun, sólo se tomaron de las manos mientras proseguía una conversación sin mayor significado.
Fue la primera vez para Jae Duck siendo parte de la familia.