Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Escape por Q Toxic

[Reviews - 0]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

   Primero que nada el disclaimer: ya saben que ningún personaje me pertence, lo único de mi autoría es la trama, lo demás, créditos a su autor Dany Antonucci (creo) y Cartoon Network (que según recuerdo es donde lo transmitían.  Si han seguido mi historia de PoT, déjenme ofrecerles ¡una enorme disculpa! no quiero abandonarla, es que estos años sucedieron muchas cosas y ahora verla casi que duele (implicaciones ajenas al fic pero que para mí siguen ahí), pero sí pienso continuarla, sólo me derrumbé por un rato pero... ahora disfruten esta.  Esta historia la tenía desde hace muchísimo y se suponía que me la iban a betear, pero nunca me llegó el archivo, aun así le hice algunas mejoras por mi cuenta hace poco, espero que haya quedado bien.

Notas del capitulo:

   Como dije en el resumen, este fic contiene varias referencias a capítulos de la serie, si algo les deja alguna duda pueden preguntarme.

 Creo que esta es la pareja menos Crack de las que me gustan, normalmente mis favoritas son muy difíciles de encontrar, pero parece que ésta no lo es tanto, aun así quise aportar mi granito de arena.

Escape

 

   Afuera se oía el sonido de la ligera lluvia y él, sin prestarle atención, observó la habitación una vez más: la última. Apagó la luz sin dejar de mirar a su alrededor, como si quisiera estar seguro que quedaría grabado en su memoria. Suspiró, a partir de ahora lo más probable es que jamás volviese a ver el que fue su cuarto durante casi toda su vida, desde que se mudó a ese sitio siendo apenas un niño pequeño. Pero no se sentía triste, ya no más. Es decir, sí, extrañaría un poco la vida que había llevado antes que todo empezara, hubo momentos en que deseó que todo fuese como cuando niños o mejor aun volver a esa época, regresar a su infancia y que el tiempo se detuviera ahí, pero aquello había pasado, estaba feliz y eso era lo que le importaba, ya no quería devolver el tiempo, él era feliz de verdad y si a los demás no les gustaba, pues era muy problema de ellos, no el suyo.

 

 Siguió ignorando la ligera llovizna que cada vez amainaba más y se adentró otra vez en la recámara pero ya sin observarla, su vista estaba fija en el escritorio, donde reposaba un cactus con la marca de una vieja mordida, lo tomó en sus manos y recordó a Ed, pues fue quien mordiera a Jim estando sonámbulo. Sonrió, no porque le agradara que Ed casi se comiese su cactus o a Jimmy ni que acabara con las reservas alimenticias del barrio, su sonrisa no era por ese recuerdo en sí. Estaba seguro que si Ed siguiese ahí lo hubiese apoyado, aunque quién sabe, había estado seguro que Eddy lo haría tarde o temprano pero no fue así, seguía sin hablarle. Lo decidió: se llevaría a Jim con él, con ellos, ya que no podía llevarse a sus 5,239 amadas hormigas, a ellas las había soltado el día anterior, era imposible que pudiese llevárselas y menos con todo su hogar ¡Eran 5 239! Le dolió tener que dejarlas ir, las había cuidado por tanto tiempo. Cerró la puerta del cuarto que, en su opinión ya no era más suyo, pegó varias notas adheribles en la puerta para sus padres y bajó las escaleras.

 

 Escuchó un par de suaves golpes en la puerta de entrada, casi imperceptibles. Sabía quien era. En parte porque eran las 2:40am y no habían muchas opciones y en parte porque alguien más hubiera tocado el timbre o hubiera golpeado más fuerte. Abrió procurando no hacer ruido.

  • ¿Estás listo? – la pregunta fue dicha en voz baja, no llegaba a ser murmullo pero estaba seguro que de no ser por la escasa distancia no lograría oírlo, asintió como respuesta. El otro bajó la vista a sus manos notando lo que llevaba en ellas – ¿piensas llevarlo? – él también volvió a mirar a Jim.

  • Sí – volvió a asentir.

  • ¿Por qué? A tus hormigas las soltaste y te despediste de Mildred ¿no? – Edd, luego de confirmar lo último, pensó por un momento.

  • A Mildred en realidad no la cuidaba, sólo le hacía revisiones semanales que no necesita para sobrevivir y mis hormigas son muchas, estoy seguro que entre todas se cuidarán, saben defenderse y encontrar comida, son una gran colonia. Pero Jim no puede hacer eso, sólo tiene sus espinas, eventualmente se secará y morirá – fue el turno del otro de asentir.

  • De acuerdo. Ahora ¿Dónde está tu maleta? – Edd señaló a un costado de la puerta, su interlocutor se agachó, la levantó y se encaminó nuevamente a la oscura calle.

 

 Edd también dio un par de pasos hacia fuera. Antes de cerrar la puerta dio un último vistazo a la casa, similar a como hiciera antes con su habitación, muchos recuerdos saltaron a su mente, tantas cosas había pasado ahí, algunas buenas otras no tanto, con sus amigos y con su novio. Cerró lentamente y aseguró con llave.

 

 La familia de Ed se había mudado un par de años atrás, antes que todo empezara. Y Eddy se alejó de él cuando se enteró, eso de verdad le dolió. ¿De qué fue que se enteró? Edd y Kevin empezaron a salir. Al principio fue un poco a escondidas, pero después, de forma gradual, todo se volvió tan natural para ellos que no se molestaban en ocultarlo. Tampoco lo gritaban a los cuatro vientos, no lo anunciaban, en realidad nunca se lo contaron a sus amigos, pero era imposible no enterarse, ya no lo escondían y eso terminó valiéndoles el rechazo general, algunos no porque quisieran eso exactamente pero lo hicieron. Rolf al inicio se comportaba como si se les hubiera metido el chamuco y había intentado sacarlos del hechizo, incluso los empapó con una cubetada de agua sucia muy seguro de que funcionaría porque “Ya lo hizo una vez” pero como no fue así pareció convencerse de que el sentimiento era real y sencillamente los dejó en paz, se centró en sus asuntos y dejó de darles importancia, podría decirse que se volvió neutral. Nazz se alejó por dolor, pues de alguna manera siempre creyó que ella se quedaría con Kevin o, de no ser el caso, con Edd, eran los chicos que la atraían, eran por decirlo así “sus dos opciones” en realidad estaba enamorada de Kevin pero se dio cuenta que difícilmente le correspondería, por ello trataba de fijarse en Edd y descubrir de pronto que salían entre ellos fue un duro golpe, por eso los esquivaba no porque quisiera ser mala con ellos ni nada por el estilo pero le afectaba verlos juntos, en el fondo se alegraba por ellos, pero no era todavía capaz de admitirlo en voz alta. Johnny no era de por sí muy cercano a ninguno de los dos, ahora lo era aun menos porque al parecer Tablón le aconsejó que se mantuviera al margen, MUY al margen. El único que los apoyaba secretamente era Jimmy, quien era un enamorado del amor en cualquiera de sus formas, pero era así: en secreto, porque sin Sarah no tenía el valor de hacerlo abiertamente, él aun era muy débil y pequeño y obviamente le daba miedo lo que pensarían de él si mostraba su apoyo, otros chicos ya lo molestaban desde la partida de su amiga y no quería convertirlo en acoso o algo peor.

 

 Edd bajó el escalón de la entrada y se dirigió hacia la motocicleta en la que Kevin trataba de acomodar las pequeñas maletas, llevaban sólo lo estrictamente necesario. La lluvia se había detenido por completo.

 

  • ¿Le dejaste una nota a tus padres? – preguntó Kevin incorporándose a su lado y tomándole de la mano.

  • No podría irme sin hacerlo.

  • Bien... y ¿traes contigo unas hojas más? – Edd entendió perfectamente lo que quería.

  • Kevin ¿acaso no has escrito siquiera una nota todavía?

  • Bueno no es como si tuviera mucho que decirles de todos modos, si no les gusta nuestra relación, por mí pueden irse a...

  • ¡Kevin, son tus padres! – le reprendió procurando no alzar la voz.

  • Aunque lo sean, no es su vida, es la mía, la nuestra – lo miró profundamente a los ojos afianzando el agarre que compartían – entonces ¿me prestas una nota? – pidió, haciéndolo reaccionar. Así que soltó a su pareja y le pasó por un momento a Jim, para buscar dentro de su bolsa un pequeño bloc, que en seguida le extendió, el otro lo tomó, le devolvió el cactus y volvió a entrar a su casa.

 

 Decidieron decírselo a sus padres, pero cuando lo hicieron ninguno pareció tomarlo muy bien. Los padres de Kevin quisieron creer que era sólo una etapa de experimentación, que ellos no dejarían evolucionar, lo ayudarían a “corregirse”. Mientras que los padres de DD. Lo trataron como si tuviera una especie de enfermedad, una muy triste enfermedad para la cual ellos se esmerarían por encontrar una cura. Luego de eso pasaron por una corta pero insoportable temporada, eran vigilados constantemente, querían separarlos. Fue por ello que empezó a surgir su plan: acordaron que le dirían a sus progenitores que terminaron, que ya no querían más estar juntos y Kevin además añadió que definitivamente no era gay. Todo una mentira, por supuesto, lo que querían era volver a ganarse su confianza, la que ni siquiera deberían haber perdido porque no hicieron nada malo. Fue relativamente más difícil para Kevin pues veía a sus padres todos los días y, le gustara o no, lo conocían bastante bien, mientras que Edd, bueno su comunicación básica consistía en las notas de siempre, lo que les impedía detectar algunas señales de la mentira como el lenguaje corporal o el tono de voz. A él se le revolvía un poco el estómago de pensar en mentirles, pues nunca lo había hecho antes, lo cual ayudaba a que le creyesen en esta ocasión, luego se daba cuenta que la razón por la que lo hacía realmente valía la pena, era lo que realmente quería. Además no les mentía por completo, les decía una media verdad, después de todo en sus notas les dijo que se separaría de Kevin y que se concentraría sólo en sus estudios porque estaba seguro que jamás sentiría por alguien más lo que sentía por él. Esto último de verdad lo pensaba y sí se concentró mucho en estudiar. Sin sus amigos y teniendo que fingir que su pareja ya no lo era más, tenía mucho tiempo libre para mantener sus calificaciones en perfecto estado, pese a que en ningún momento habían decaído y las de Kevin de hecho habían subido desde que empezaron su relación. De cualquier forma, eso ya no les importaba, en cuanto los mayores se descuidaban ellos encontraban la forma de reunirse en secreto y con ello darse ánimo para seguir con su plan: mantener a sus padres engañados para que no intentaran separarlos hasta tener sus certificados de preparatoria en las manos y luego huir juntos. Por suerte, para entonces no faltaba mucho, el día de la graduación finalmente fijaron una fecha. En un inicio el plan original de Kevin había sido escapar de casa desde el instante en que sus papás se opusieron a su relación, pero Doble D lo hizo entrar en razón, no podían dejar sus estudios a tan poco de terminarlos y siendo menores de edad, su vida luego sería demasiado difícil, no conseguirían mantenerse mucho tiempo de esa forma y según él, habría una alta probabilidad que tuvieran que volver con el rabo entre las patas, cosa que definitivamente sería un golpe a su orgullo y ninguno quería hacer. Pero ahora el asunto había cambiado y podían hacerlo, habían cumplido la mayoría de edad, ahorraron dinero suficiente para sobrevivir un corto periodo de tiempo y estaban más que dispuestos a trabajar en casi cualquier lugar para obtener más.

 

 Edd se había quedado solo recargado en la moto girando al cactus en sus manos hasta que su novio volvió a su lado.

  • Listo, he dejado un breve mensaje – le devolvió el resto de las notas y miró nuevamente la pequeña maceta – ¿Y cómo piensas llevar a Jim? No puedes llevarlo en las manos, las ocupas para sostenerte de mí y no caerte.

  • Creo que cabrá en mi mochila sin apachurrarse si lo guardo correctamente – abrió su mochila y trató de hacer un hueco en que cupiese su cactus, estaba metiéndolo cuidadosamente cuando un grito lo sobresaltó.

  • ¡Espera Doble D! – conocía esa escandalosa voz que le provocó un accidente.

  • ¡Auch!

  • ¿Estas bien Edd? – se preocupó su pareja, al que sintió colocarse frente a él.

  • Sí, sólo me he picado un dedo con las espinas de Jim.

 Levantó la mirada dándose cuenta que su novio no lo veía, sino que le daba la espalda, como ocultándolo de algo, se asomó por un costado notando que lo quería proteger del dueño de la voz que lo había llamado. Justo ahora se encontraban en un duelo de miradas.

 

  • ¿E-Eddy? – llamó haciendo que los otros dos rompieran el contacto visual.

  • Doble D, yo... – Kevin se movió, volviendo a tapar por completo a Edd – quiero hablar con Doble D. Sólo hablar – pero su tono era agresivo y eso alarmaba a Kevin, lo ponía a la defensiva.

  • ¿De qué? – gruñó.

  • Yo... quiero al menos despedirme – bajó la mirada.

  • ¡¿Después de la forma en que lo has tratado?!

  • ¡No quise hacerlo ¿Está bien?! Yo sólo... es que... ¡Todo es por tu culpa! – la discusión a gritos hubiera continuado pero Edd lo impidió.

  • Por favor, más bajo o despertarán a los vecinos – su novio entró en razón, no podían permitir que descubrieran su escape justo ahora. Los dos “rivales” se calmaron un poco.

  • Lo siento Doble D – escucharon decir a Eddy, los otros se sorprendieron, rara vez lo habían visto disculparse y nunca con la sinceridad de ahora – de verdad lo siento, sé que debí apoyarte, estar contigo, defenderte o algo, pero es que – se detuvo sin saber cómo continuar, Edd conmovido trató de ayudarlo.

  • No te preocupes, supongo que puedo entenderlo, un poco. Aunque sí me dolió porque nunca imaginé que te molestarías de esa forma al saber de mi orientación...

  • ¡Te equivocas! – en seguida tapó su boca al darse cuenta que levantó la voz, miró a ambos lados verificando no haber despertado a nadie, luego prosiguió – no fue porque fueras... bueno, ya sabes, gay. De alguna forma eso ya me lo esperaba hace mucho.

  • ¿En serio? ¿Aun cuando antes me gustaba Nazz? – Kevin gruñó recargándose en su moto, el otro sólo se encogió de hombros – entonces no entiendo ¿por qué te alejaste? – su amigo frunció el ceño y apuntó con el dedo a su novio viéndolo con expresión enojada.

  • Eso fue por su culpa – el aludido se tensó devolviéndole la mirada listo para algún enfrentamiento según lo que dijera el otro. En su opinión era muy de Eddy estar echándole la culpa a los demás, pero no entendía cómo podía ser suya en esta ocasión – yo podría haber tolerado la idea de que salieras con un hombre pero ¿Kevin? Es... es ¡mi enemigo! ¿no recuerdas las palizas que nos llegó a dar?

  • Casi siempre eran provocadas por nuestras estafas, lo molestábamos primero además realmente nunca llegó a golpearme a mí de la misma forma que a ustedes y en todo caso ya se ha disculpado miles de veces por ello.

  • ¿De verdad? Pues eso no lo sabía – dijo en voz muy baja, se volvió a hacer un corto silencio.

  • Así que ¿Sólo fue por Kevin?

  • No, bueno, en realidad creo que yo pensaba que si llegabas y me decías que te gustaban los chicos yo estaría preparado pero es que nunca lo hiciste, simplemente se te empezó a ver muy cariñoso con él y nunca me contaste nada, supongo que eso me enfadó – ahora Doble D se sentía algo culpable y avergonzado: tenía razón, nunca le dijo directamente de lo suyo con Kevin – además luego que Ed se fue no quería que tú también lo hicieras. No pienso repetir esto así que escúchalo bien: no quería quedarme solo, creo que me di cuenta que me había preparado para enterarme de tus, bueno, tus preferencias pero no – suspiró–, no para que salieras con alguien ¡Y menos iba a estar listo para que ese alguien fuera Kevin! Era como si te estuviera robando, no quería que te alejara de mí, así que lo odiaba más y te odiaba a ti por estar con él y al final – parecía que le había costado mucho decirle todo eso y ya no pudo con lo último.

  • Al final fuiste tú quien se alejó – terminó Kevin por él, ya algo desesperado porque terminara, quedara todo claro y pudieran irse. Eddy asintió.

  • Yo. Bueno, estaba feliz cuando terminaron o se alejaron o lo que sea. De verdad estaba dispuesto a ir contigo y decirte un “te lo dije” aunque en realidad nunca lo haya hecho, pero sólo quería que habláramos mal de Kevin, decirte que ya sabía que para él no eras importante pero que yo te ayudaría a olvidarlo y creí que nuestra amistad volvería a ser igual que antes, que todo regresaría a la normalidad.

  • ¿Por que no lo hiciste?

  • Porque no pude, cuando se corrió el rumor de que habían terminado imaginé que estarías destrozado, que Kevin te habría dejado de la peor manera y que eso era perfecto para mí porque necesitarías todo mi apoyo y era el mejor momento para demostrar que estaba ahí. Pero al verte, tú no parecías sufrir, no te veías mal, había algo en ti que era raro, no te veía ni un poquito triste. Y yo puedo notar eso porque soy tu mejor amigo – infló el pecho como recuperando el orgullo que siempre lo había caracterizado y que parecía haber perdido esa noche–. Parecías tan decidido, tan seguro de ti mismo que me quedé ahí, sin saber como debía acercarme. ¡Pero no podía dejar que te fueras esta noche sin despedirme! Ed jamás me lo perdonaría si lo supiera.

  • Eso me recuerda, Eddy disculpa pero ¿puedo preguntar cómo fuiste capaz de descubrir nuestro plan de escape para esta noche?

  • Fue todo gracias a mis dotes detectivescas, por supuesto, para mí las pistas eran obvias.

  • ¡Genial! – exclamó enfadado Kevin, aunque más sonó a una maldición – ¿Y puedo saber exactamente qué nos delató? Porque si lo que dices es cierto, tenemos que irnos ya antes que alguien más se dé cuenta de las “pistas obvias” – esto intimidó un poco a Eddy.

  • Bueno... sólo fue porque yo soy muy bueno... y conozco muy bien a Cabeza de calcetín.

  • Pero nos gustaría saber qué fue lo que hizo que lo averiguaras, por favor Eddy – ante la mirada de Edd suspiró y luego gruñó como dándose por vencido.

  • ¡Bah! En realidad, por toda esa actitud rara tuya sabía que algo tramaban pero no sabía qué ¿de acuerdo? Ni cuándo. No lo supe nunca.

  • ¿Y entonces cómo es que llegaste esta noche a despedirte?

  • No podía dormir, fui a la cocina por un vaso de agua y me asomé por la ventana de la sala, luego se encendió la luz de tu cuarto, creí que tampoco podías dormir o algo, estaba pensando si estaría bien que fuera a tu casa cuando me di cuenta que la luz de la habitación de Kevin también estaba encendida. Eso fue sospechoso pero el que Kevin saliera de su casa con su moto, una maleta que dejó a media calle y una mochila y luego fuera a tu casa donde tomó algo más, bien, eso fue lo que me hizo darme cuenta de cuál era el plan.

  • Así que todo fue una coincidencia.

  • Tal vez, pero no podía dejar que te fueras creyendo que soy un pésimo amigo – Kevin estuvo a punto de soltar una risa sarcástica y Eddy pareció notarlo – Sí, ya sé que lo soy. Admito que estos años he sido un terrible amigo, pero no quería que te fueras con esa idea.

  • No te preocupes Eddy, yo jamás podría pensar tal cosa de ti – su novio, presintiendo que ese era por fin el final de la conversación, intervino.

  • De acuerdo, tu disculpa ha sido aceptada y estás perdonado Eddy. Supongo que no eres tan malo como llegué a creer. Ahora si nos disculpas – pasó una pierna al otro lado de su motocicleta subiéndose – tenemos que irnos antes de que amanezca y nos descubran – sabía que todavía era improbable, pero se estaba poniendo nervioso, habían planeado hacer todo rápido. El plan era levantarse a las 2:30am estar listos en 15 o 20 minutos y ponerse en camino antes que fueran las 3:00am. Sin embargo seguro que ya eran más de las 3:15 y seguían allí.

 

 Edd miró a su novio, luego a su amigo y no lo resistió, posiblemente sería la última vez que lo vería así que regresó rápidamente con Eddy y le dio un fuerte abrazo.

  • Gracias – murmuró – en verdad eres un buen amigo – le dijo antes de separarse.

 

 Kevin sólo reprimió un suspiro, su novio podía ser un sentimental, a decir verdad él también, pero sólo con personas muy allegadas, que hasta el momento sólo habían sido Nazz y Edd. Cuando Doble D llegó a su lado le extendió un casco con el mismo diseño que su gorro: negro con franjas blancas, pero Eddward no llegó a ponérselo porque otro llamado que no podría llamarse grito se lo impidió.

  • ¡Esperen! ¡Por favor esperen! – Kevin hizo una mueca mientras pensaba “¿Y ahora qué?”. Jimmy llegó jadeando por haber corrido, finalmente se incorporó y, todavía con la respiración entrecortada se dirigió a ellos – tienen todo mi apoyo chicos, el amor nunca debe ser reprimido sin importar en qué forma venga.

  • Oh, Jimmy ¿viniste a estas horas horas de la madrugada para decirnos eso? – preguntó Doble D tratando de no sonar descortés mientras su novio se preguntaba si es que de verdad habían sido tan obvios que todo el mundo estaba al tanto de su plan. La idea de que de pronto salieran todos los demás y terminaran por impedir que se fueran le aterró en serio.

  • No sólo por eso – contestó Jimmy – yo quería... pensé que ustedes... Toma, quiero que se lleven esto – con expresión decidida extendió su alcancía de cochinito hacía Edd quien se enterneció ante el gesto como lo había hecho varios años antes.

  • Cielos Jimmy, muchas gracias pero no podríamos. Son tus ahorros.

  • De casi toda mi vida, por eso puedo decidir que hacer con ellos y creo que ustedes los necesitarán más que yo.

  • Pero... – Edd no sentía que fueran merecedores de tanta amabilidad. En cambio a Eddy los ojos se le habían vuelto signos de dinero.

  • Si ellos no lo quieren, yo puedo aceptarlo en su lugar – Jimmy le apartó bruscamente su alcancía antes que la tomara y entonces pudo ver que los tres lo miraban con reproche, se aclaró la garganta un par de veces dándose cuenta que su actitud estaba fuera de lugar –*ejem** ejem* lo siento, la costumbre, *ejem* quise decir que deberían aceptar Cabeza de calcetín, piénsalo: van ustedes dos solos con ¿cuánto dinero? ¿tus ahorros? ¿piensan que alcanzará para dos personas? Y Kevin ¿no pagó él solito una moto? Las motos no son baratas Doble D.

  • Sólo fue la mitad, quizá un poco más – replicó Kevin – el trato con mis padres fue que si yo reunía suficiente dinero por mi cuenta para pagar la mitad ellos me completarían pagando el resto y conseguí un poco más – había pasado ya un tiempo de eso, pues había sido mucho antes que sus padres o nadie más se enteraran de su relación con Edd–. De cualquier forma luego de eso seguí ahorrando, por supuesto que no voy a cargarle todo a Doble D.

  • Oh, y no deberías – prosiguió Eddy en tono de conspiración –, pero tampoco sería correcto que se presionen en exceso cuando tienen amigos que quieren respaldarlos ¿no es así Jimmy? – el aludido asintió enérgicamente y les volvió a ofrecer su cochinito.

  • Por favor acéptalo puede serles de utilidad – entre la mirada suplicante de Jimmy y el tono de voz de Eddy, quien siempre había conseguido convencerlo hasta de los planes más absurdos, no pudo negarse, finalmente, con los ojos brillantes de la emoción igual que los del menor, tomó la alcancía.

 

 El miedo de Kevin se incrementó al punto que pudo sentirlo por un instante en la garganta, así que bajó de la moto para acercarse a su novio fingiendo que estaba bien, le pasó un brazo por sobre los hombros y con un ligero suspiro le preguntó:

  • ¿Todavía quieres irte? – los otros tres se sorprendieron en demasía, fue como si el ambiente previo se hubiese roto en un instante.

  • ¿Por qué? – inquirió Edd sin saber qué otra cosa decir mientras colocaba su mano sobre la que Kevin tenía sobre su hombro y lo miraba con los ojos totalmente abiertos

  • Bueno, ahora tenemos el apoyo de Jimmy y Eddy y pareciera que quieres... – lo dejó así, esperando que lo hubiera entendido.

  • ¿Y tú?

  • ¿Eh? – no esperaba que la pregunta le fuera devuelta.

  • ¿Todavía quieres que nos vayamos? – apretando el agarre sobre los hombros de Edd, alzó su vista al cielo pensando en como responder o tal vez para que no pudieran ver el miedo, la ansiedad y la preocupación en sus ojos.

  • Siendo sincero, desde el principio sabía que sería difícil: lejos de casa, sin un lugar al cual ir o en el cual quedarse, poco dinero – hizo una pausa para ver a Jimmy como agradeciendo su aportación – poca comida, poco de todo. Pero los dos solos, juntos, lejos de todo y de todos, me importa poco si suena cursi pero sí, yo quería irme contigo desde que la idea se formó en mi cabeza y todavía quiero, pero – regresó a mirar a Eddward que no estaba seguro si su expresión era de resignación o de algo más–, pero si tú no estás completamente seguro entonces no intentaré forzarte, porque nada funcionaría así – sus palabras casi derretían de ternura a Doble D mientras los otros dos se sentían muy fuera de lugar, ahí, escuchándolo sonar tan “no-Kevin” sobraban en la escena.

  • También quiero. Sabes perfectamente que me atemoriza porque es una experiencia totalmente nueva, que figura ser muy complicada, todo un reto como nunca hemos enfrentado, pero estoy convencido que si nos quedamos nuestros padres encontrarán la forma de separarnos. Puede que mis padres no pasen mucho tiempo en casa conmigo pero los conozco lo suficiente para saber que son muy listos, con nuestra inminente entrada a la universidad sin duda hallarán el pretexto ideal para alejarme de ti y tengo nulos deseos de que eso ocurra. Eso me da el valor suficiente. Estoy decidido: me iré contigo – los monstruos mentales de Kevin se disolvieron al oírlo y en su rostro se dibujó una sonrisa enorme.

  • En ese caso, que no se discuta más. Vámonos – volvió a ofrecerle el casco.

  • Vaya Cabeza de calcetín, me impresionas, esa seguridad por irte, en una moto, con poca visibilidad, a altas horas de la madrugada y con el suelo húmedo por la lluvia. De haber sabido que lo que se necesitaba para que fueras así de valiente y decidido era que estuvieras enamorado, tal vez debí conseguirte novio antes – Eddy rió, su amigo observó a su alrededor, efectivamente había mucha humedad en el ambiente pese a que la lluvia había cesado un buen rato atrás y tal vez ellos no iban en óptimas condiciones por no dormir bien, después de todo eran alrededor de las 3:30am lo que significaba que no habían tenido una larga noche de sueño precisamente. Kevin quería fulminar con la mirada a Eddy que recién se daba cuenta de lo que podía implicar su comentario, pero siendo honestos, si sus palabras hacían cambiar a Edd de opinión entonces tal vez desde el principio no quería irse.

  • Ciertamente estas condiciones parecen muy arriesgadas para emprender el viaje, pero intentar aplazarlo podría resultar incluso peor para nosotros. Puede que tengas razón y estar enamorado me vuelva valiente pero es sólo porque se trata de Kevin, confío en él. Por ello es que no necesitas preocuparte Eddy, estaremos bien – con estas palabras se percataron que a Doble D le había sonado a preocupación lo dicho por el otro.

 

 Ambos chicos se colocaron sus cascos, el primero tomó asiento sujetándose bien, listo para arrancar en cualquier momento, su novio siguió su ejemplo sentándose atrás de él y sosteniendo su cintura firmemente. Jimmy dio un pequeño brinco y soltó una exclamación.

  • ¡Casi lo olvido! Tengo la dirección de Sarah, si alguna vez pasan por la zona podrían ir a visitarla

  • No estaría mal, si llegan a ir saluden a Ed de mi parte – Kevin tomó el pequeño trozo de papel de la mano de Jimmy y lo guardó en uno de los bolsillos de su chaqueta.

 

 Finalmente y mucho más tarde de lo que originalmente habían pensado, Kevin arrancó, Edd apretó su cintura y comenzaron a avanzar, Eddy y Jimmy agitaron sus mano en señal de despedida, Doble D giró despidiéndose también, aunque con un sólo brazo, usaba el otro para sujetarse bien a su novio, luego alzó la voz.

  • ¡Muchas gracias chicos! ¡Despídannos de los demás si a ellos no les molesta! – ellos asintieron sabiendo que lo harían, pues estaban seguros que no se molestarían, al contrario, estarían contentos por ellos.

 

 Los vieron alejarse y perderse en la obscuridad. Se quedaron con la mirada fija en la dirección por la que se fueron incluso después de que desaparecieron y se dejó de oír el ruido del motor. Nuevamente reinó el silencio de la noche y aun tardaron un rato en reaccionar y moverse. Esa noche sencillamente ya no pudieron conciliar el sueño, pero no estaban preocupados sino felices. Claro que no tanto como los viajeros, que escaparon juntos y se mantendrían juntos.

FIN

Notas finales:

   Irónicamente la idea original que tenía se deformó tanto que la primera escena que imaginé tuve que retirarla del fic. Es decir que cuando se me ocurrió, lo primero que surgió fue una escena que al final no checaba con la trama, no sé, no me parecía que correspondiera ahí, de todas formas dejé una referencia únicamente para mí para recordarla y ver si después le hago un fic decente. Es que llegó un punto en que era más un estorbo que una ayuda, era darle mucha vuelta (que de por sí siempre me hago un lío, me voy por las ramas y acabo dando demasiadas explicaciones que pueden ser hasta innecesarias), así que puede que algún día escriba otro de esta pareja.

 ¡Ah! un último detalle, al momento de publicar, los guiones largos fueron automáticamente cambiados por puntos, no sé como se verá finalmente, pero de quedarse los puntos, espero que comprendan que no fue mi intención y que significan el cambio de quien emite el diálogo. Sepan perdonar.

 Espero que pese a todo, disfrutaran mi fic.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).