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[ChenMin] Boomerang por CRNTT

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Capítulo 1

 

MinSeok permanecía en la barra con un vaso de whisky en la mano, no había nada interesante en aquel bar por lo que se encontraba ideando una excusa para fugarse de la reunión organizada por sus compañeros de trabajo. Todo el equipo se veía muy unido, en realidad tenía en claro —de manera implícita— que aquella reunión era para que los mayores ojearan a las nuevas ingresantes. A ojos de Kim MinSeok, ninguna de las féminas  tenía ni una pizca de gracia... y casi a diario se lamentaba mucho de pensar así.

 

—Hey.

 

Una voz interrumpió sus cavilaciones, MinSeok levantó la vista de su bebida girando el rostro hacia el lado de donde la suave voz provenía.

 

Era un jovencito, con cara de bebé.

 

Bueno, se estaba pasando de exagerado. Sin embargo el joven que se había acercado tenía las facciones más delicadas que había visto en muchísimo tiempo, lo miraba fijamente con un brillo peculiar que, pese a tener facies de timidez, no dejaba de irradiar cierta osadía. Sintió la necesidad imperiosa de preguntarle si tenía suficiente edad para estar allí. Pero lo único que hizo fue enarcar una ceja, mirándolo extrañado.

 

—¿Me hablas a mí?—replica. El jovencito, asintió y se apoyó a la barra, llegando a estar muy próximo a él. MinSeok lo observa de reojo mientras que juguetea incomodo con las puntas de sus cabellos rubios—. No recuerdo donde te he visto.

 

—Oh, eso —el jovencito sonríe y MinSeok se percata de la curva de su boca torciéndose de forma muy bonita—. No, no tendrías por qué recordarme. No nos conocemos.

 

—Ah.

 

—Solo te he visto de lejos. —comienza a hablar el chico, muy pausadamente—. En el Moonlight —Los ojos del rubio se abren como platos. Y rápidamente deja el vaso a un lado, mirando entre confuso y nervioso al joven—. Vaya, por la cara que has puesto diría que tu entorno no sabe que frecuentas bares de ambiente.

 

—No creo que sea de tu incumbencia. —respondió sorprendiéndose  por lo seria que había sonado su voz.

 

MinSeok, dejó un billete al lado del vaso barra y se levantó del asiento, queriendo irse cuanto antes de allí. Sin embargo el contrario, logró tomarlo del brazo antes que avance un centímetro más.

 

Oye, no te quería asustar. —las mejillas del rostro ajeno se tiñeron de rosado—. Sólo quería invitarte a salir.

 

Oh.

 

Definitivamente se había puesto muy a la defensiva. El jovencito posiblemente era gay y ya, no era algún sujeto que intentaba exponer su opción sexual para poner en aprietos su vida... tal vez ya estaba exagerando con los dramas baratos, debía bajarle a su dosis nocturna.

 

—Ah... —MinSeok parpadeó varias veces, pensando aun qué decir. En realidad, en muchas veces había rechazado a varios tipos, al 50% les decía un no tan sin siquiera titubear, pero... ¿Cómo hacerlo en esta situación?, el rostro del chico le causaba cierta ternura, sentía que estaba por patear a un cachorro sin hogar.

 

Oh, vamos, ni siquiera es tu tipo.

 

Desde que había descubierto su sexualidad, MinSeok – inconscientemente – había repetido un patrón en cuanto a los hombres con los que salía: altos y fornidos, de piernas largas, y entre otras cosas de medida similar.  Eran evidentes las intenciones del chico pelinegro, por lo que era mejor ser directo. El jovencito tenía una expresión un tanto resignada, como si no le sorprendiera la respuesta que MinSeok estaba por pronunciar.

 

—No. Pero gracias.

 

El joven de sonrisa bonita estaba por agregar algo más que decir pero, en ese momento una de sus tantas compañeras de trabajo apareció repentinamente. Era la excusa perfecta para despedirse del otro, quien únicamente sonrió leve mientras que MinSeok se daba la vuelta y volvía a la mesa donde sus colegas estaban haciendo el brindis final.

 

El resto de la noche transcurrió sin ningún evento resaltante, salvo que BaekHyun se pasó de copas y terminó vomitando dos pasos antes de llegar al baño. El rubio iba a decir algo para consolarlo pero, su propio amiguito terminó carcajeándose de lo sucedido por lo que ambos culminaron aquella velada soltando unas buenas risas. De regreso al área donde estaban el resto de sus compañeros de trabajo, una de las secretarias les preguntó qué sucedió para que demoren tanto, BaekHyun empezó a palabrear cualquier cantidad de excusas que no implicaran explicar que había terminado limpiando su vómito con papel higiénico. MinSeok a su lado simplemente se cubría la boca con una de sus manos en un intento de no descojonarse de risa.

 

Concluyendo con la reunión, todos empezaron a embarcarse en taxis debido a que la mayoría de personas presentes se encontraban ebrios. Como era de costumbre, MinSeok compartió transporte con BaekHyun y SeHun, debido a que los tres vivían en zonas cercanas, especialmente BaekHyun, quien vivía dos pisos arriba de su departamento. Tras haber sido deleitados con la más amplia variedad de canciones del pelirrojo llegaron al vecindario, SeHun fue el primero en bajarse y le deseó suerte  para lograr bajar a BaekHyun que se movía como una anguila y entonaba Vogue en un idioma que más que inglés, parecía inventado.

 

—Deberíamos ir al bar...

 

—Acabamos de volver de uno.

 

—No, no, al Moonlight. —especificó mientras que movía las cejas de manera sugerente—. Promete por la garrita que iremos al Moonlight, ¡promételo!, promete, promete... —empezó a murmurara hasta que su voz se convirtió en susurros y el ruidoso BaekHyun quedó dormido.

 

 

(+)

 

 

Aquella mañana se sentía muy adormilado, aun así caminaba hasta llegar al trabajo. Llevaba un capuccino en sus manos y trataba de no pensar en el frío que no tenía piedad de los mortales como él. Entrecerró sus ojos, pensando que aún seguía en su cama, intentó caminar así hasta que casi cae sobre una señora. Un par de minutos más caminando y llegó a su trabajó, mostró su identificación antes de entrar y esperó afuera del ascensor para empleados. BaekHyun precisamente llegó, traía unos lentes negros y un cubreboca.

 

—¿Qué demonios pasó ayer? Siento que me han partido la cabeza, me siento marchito. —MinSeok rió un poco de sólo pensar que Byun BaekHyun se consideraba una plantita, le ofreció su café empezando a darle palmadas en la espalda.

 

—¿No recuerdas nada?

 

—Solo que nos subimos al taxi.

 

—Bebiste como si fuera tu cumpleaños, y luego de cantar te quedaste dormido así que tuve que cargarte hasta tu dormitorio. Encontré las llaves de repuesto en la maceta, y te dejé en tu cama.

 

—¿No te aprovechaste de mí, verdad?—preguntó simulando preocupación y haciendo una equis con sus brazos... ¡como si en su pecho tuviera algo que ocultar!, el rubio simplemente le dio un codazo. Finalmente las puertas del ascensor se abrieron y ambos ingresaron.

 

Como era de costumbre, dejó su portafolio sobre su escritorio y empezó a ordenar los documentos que debía entregarle al jefe cuando llegase. El arquitecto Park era un señor que bordeaba los sesenta años, se trataba de un profesional muy exigente, que parecía adorarlo por ser tan meticuloso en sus funciones. MinSeok no se veía siendo asistente cuando aún estudiaba Arquitectura, pero la crisis económica llegó antes de que pudiera concluir sus estudios y si a eso se le sumaba el hecho que debía pagar la pensión de su departamento, no tuvo otra alternativa más que empezar a enviar su currículum vitae a todos lados. Creyó que nadie lo llamaría, que lo tildarían de inexperto, que tal vez le ofrecerían poco dinero pero tras dos semanas de ardua busca, lo llamaron de la compañía de Park, la entrevista duró apenas quince minutos y le dieron el puesto, además de ofrecerle una paga justa... MinSeok se sintió sumamente feliz desde ese entonces. Al menos esos seis meses iban estables, no había recibido llamadas de atención.

 

En ese momento, la puerta del estudio se abrió e ingresó el arquitecto, saludó al rubio quien siguió los pasos del señor Park y le recibió un par de documentos que había traído en la mano, a su vez le entregó los que le había solicitado el día anterior y por varios segundos ambos estaban inmersos en la lectura, finalmente Park empezó a asentir mientras que terminaba de ver todo el documento, colocó su sello y firmó al lado. Le entregó un par de archivadores pidiéndole que busque cuadros estadísticos, MinSeok asintió mientras que salía del despacho del arquitecto y se disponía a realizar el trabajo encomendado. BaekHyun estaba en el escritorio contiguo y se mantuvo quejándose por el resto de la mañana aunque tampoco se despegaba de sus labores.

 

Cuando terminó de redactar los análisis de los cuadros que aquella mañana le enviaron y quedó sin nada que hacer, aprovechó en ir a la máquina para sacar otro café. Decidió subir por las escaleras hasta el último piso, le despejaba mucho caminar. Metió un par de monedas a la máquina y tras unos minutos salió su café. Ya que había pasado toda la mañana sentado mirando al monitor por 4 horas seguidas prefirió quedarse tomando su café cerca a la baranda de las escaleras, aprovechaba en ver hacia abajo, muchas personas ingresaban al edificio ese día. Finalmente tomó su celular empezando a revisar algunas aplicaciones. Ningún mensaje interesante salvo el de su mamá quién le enviaba una imagen de Piolín con buenos deseos, rió y simplemente le respondió con un emoji. Estaba por guardar su móvil hasta que en ese preciso momento recibió un mensaje de BaekHyun.

 

"Esta noche hay barra libre si vamos con disfraz vamoooossss!!!!"

 

BaekHyun era un niño.

 

"¿Terminaste los reportes de gastos?"

 

"Yoora ha prolongado el plazo."

 

"No creo Baek, tengo cosas que hacer"

 

Y vaya que tenía mucho que hacer esa noche. Sabía que se estaba pasando de aburrido al preferir pasar esa noche en casa viendo X files, pero... su último ligue había terminado hace dos semanas por lo que sexualmente estaba más que satisfecho, y no es como si estuviera en busca de algo serio. Ir al bar no solo implicaba conocer gente, también era interesante bailar y unirse a las temáticas que el bar proponía. Y aunque esa noche sólo quería estar tranquilo en casa...

 

“Vamossss hyunggggg~~~~~”

 

Suspiró resignado.

 

“Te acompaño porque te prefiero con órganos.”

 

 

(+)

 

 

BaekHyun parecía haber descubierto un talento oculto, había sido capaz de replicar el maquillaje de Joker viendo un tutorial en Youtube. Ya que no tenía pintura u otro material especial, supo improvisar bien además que todo combinaba bien con su cabello pelirrojo. Sí que se había esforzado este Halloween.

 

—¿Y? ¿A qué hora te vas a disfrazar? —MinSeok levantó la vista de su laptop, juzgándolo—. Tengo un traje de conejo...

 

—No.

 

—¿No te dije de la oferta?

 

—Sí, sí. Pero pagaré la entrada, no me voy a disfrazar. —Cerró la laptop y se quitó los lentes mientras que empezaba a levantarse  del sofá—. Bueno, vamos ya.

 

Muchas personas estaban disfrazadas en las calles pero la mayoría eran niños. BaekHyun no dejaba de hacer muecas extrañas mientras que se tomaba varias selfies todo el camino, también canturreaba alegre, eso no podía hacer más que feliz a MinSeok, después de todo por lo que el joven pelirrojo había pasado adoraba verlo bien.

 

El bar Moonlight era relativamente grande, las grandes letras con el nombre estaban acompañadas de una luna, la primera vez que pisó ese sitio tenía 18 años... 10 años después seguía siendo su lugar favorito para olvidarse de las responsabilidades aunque sea por unas horas, aunque ahora estaba mucho más moderno. Aquella noche había una fila larguísima para entrar, MinSeok y BaekHyun se estaban resignando a hacer la cola pero en aquel momento lo inesperado sucedió.

 

La fila estaba tan desorganizada que ocupaba la acera por lo que MinSeok terminó yendo por la pista, repentinamente sonaron fuegos artificiales, ambos jóvenes giraron el rostro para observar bien el cielo iluminado por aquellas chispas, tan inmersos y distraídos de todo, que ninguno de los dos se percató de un automóvil que frenó en seco antes de arrollar al rubio a quien se le paralizó la sangre en un milisegundo. Casi todas las personas de la fila emitieron gritos de sorpresa y alivio al ver que no ocurrió nada grave, BaekHyun llegó de inmediato la lado del rubio y lo llevó hacia un lado, inspeccionando que verdaderamente nada le hubiera pasado.

 

—Lo siento mucho, nos quedamos viendo los fuegos estos...— el conductor salió del coche también, y BaekHyun aún trataba de hacer que el rubio reaccionara puesto que se cubría el rostro con una de sus manos.

 

—¿MinSeok? —le llamó el pelirrojo, retirándole la mano del rostro. El rubio lentamente volvió a sus sentidos y comenzó a asentir.

 

—Oh, cielos, ¿Kim MinSeok? —el conductor del coche al parecer lo había reconocido por lo que el rubio abrió los ojos desmesuradamente y no lo pudo creer. ¿Acaso sus ojos veían lo que creían estar viendo? ¿Estaba viendo a sus compañeros de la universidad allí?

 

—¿JoonMyeon-hyung?

 

El chico abrió los brazos esperando que el rubio se acercara, MinSeok terminó sonriendo y realmente se acercó a abrazarlo fuerte mientras que le pedía diculpas por ocasionarle tal susto, no lo veía desde que había dejado sus estudios en stand by y un bichito de nostalgia lo invadió, habían muchas maquetas y trabajos  BaekHyun carraspeó puesto que el abrazo había durado más de lo usual. JoonMyeon giró su rostro en dirección del pelirrojo y le sonrío amablemente.

 

—Kim JoonMyeon —se presentó estirando una de sus manos y miraba curioso su disfraz.

 

—MinSeok es mi mejor amigo. —respondió, huraño mientras que tomaba la mano adversa. El rubio simplemente rió, mientras que se hacía a un lado para alejarse por completo de la pista, JoonMyeon estaba por agregar algo más pero la puerta trasera del coche se abrió y una chica de cabello largo negro y vestido rojo salió observando preocupada a los tres.

 

—¿No hay nadie herido o sí?

 

—Eh, no. Cierto... —JoonMyeon titubeó y pareció recordar por qué estaban allí—. He venido con un par de amigos más y mi primo. Nosotros vamos a ingresar por el estacionamiento así que ¿adentro nos vemos? —MinSeok sonrió y asintió. BaekHyun por su parte parecía estar viendo el auto cuando JoonMyeon arrancó.

 

—Qué pedazo de auto. —murmuró el pelirrojo mientras que le rodeaba los hombros con uno de sus brazos y lo dirigía a la fila.

 

Después de veinte minutos lograron ingresar, aquella noche las luces parpadeaban por lo que al inicio se dispersaron mucho y simplemente se dejaron llevar por la música del DJ, realmente era agradable pasar tiempo así, BaekHyun a su lado también agitaba sus brazos y cintura. MinSeok tuvo que retirarse la casaca de cuero porque el calor empezó a hacer efecto en él, muy pronto sintió muchas ganas de beber agua, logró avisarle al pelirrojo quien ya estaba entretenido conversando muy a gusto con un tipo.

 

Llegó a la barra, dando por perdido hallar a JoonMyeon entre la multitud, dudaba mucho que su compañero fuese a estar pendiente del móvil porque el sonido de la música resonaba, todo el lugar estaba repleto de gente disfrazada, las luces tampoco ayudaban. Decidió tomarse un respiro mientras que bebía un jugo —se había prometido no beber ni una sola gota de alcohol—, a quien sí vigilaba era a BaekHyun bailando igual de enérgico que siempre.

 

Fue en ese momento en el que se sus ojos visualizaron a su amigo de la universidad, estaba en el segundo nivel, donde sólo podían subir los que tenían pase VIP. MinSeok rió entredientes recordando que su amigo no tenía reparos en darse sus gustos. JoonMyeon iba a heredar la compañía de sus padres, tenía buenas notas y era muy empático. A su lado estaban un par de chicas con las que conversaba sosteniendo un trago en la mano, a una de ella la había visto en el incidente del auto, entonces recordó haberla visto en la universidad también, una jovencita posiblemente del mismo entorno que su compañero: ambos con el futuro resuelto.

 

Dio un sorbo largo al jugo.

 

Quiso arrancar esos pensamientos de envidia de su cabeza, y respiró hondo. En realidad sí se alegraba y mucho, JoonMyeon posiblemente se graduaría este semestre. Volvió a colocarse la casaca de cuero encima de los hombros, caminando decidido a saludar un rato a su amigo. Subió por las escaleras que llevaban al segundo nivel, un par de guardias de seguridad lo detuvieron pero su colega ya había notado su presencia por lo que rápidamente se acercó a solucionar el inconveniente.

 

—Es bueno verte. —empezó a decirle mientras que lo guiaba al box*, estando dentro lo presentó con sus dos amigas, la de cabello largo y vestido rojo se llamaba Seulgi y la otra chica de que tenía un rostro de facciones muy finas se presentó como Irene.

 

—¿MinSeok-sshi es de...?

 

Síp, estudia con nosotros —respondió JoonMyeon.

 

—Qué raro, no recuerdo haberte visto —preguntó Seulgi, llevándose una mano a la nuca.

 

—Ah, es que tuve que dejar este semestre—decirlo en voz alta fue como rasgarse un poco más el corazón, aun así sonrió y esperó pasar desapercibido.

 

—¿Dónde has estado trabajando?

 

JoonMyeon empezó a hacerle varias preguntas sobre el trabajo, sobre cuáles eran sus funciones allí, los salarios entre otros temas. Hablar con él le hizo sentir cierta nostalgia de todo. Estaba muy sensible la verdad y por fortuna sentía que actuar como si nada pasara le estaba resultando bastante bien, en ese momento se percató de la hora y se tuvo que disculpar con JoonMyeon explicándole que debía ir a ver a BaekHyun. Su compañero de la universidad refirió que ellos también ya estaban retirándose porque esperaban que el ambiente fuese mejor así que irían a otro bar.

 

Byun BaekHyun se había limpiado todo maquillaje y estaba tranquilo esperándolo en sentado cerca a la barra de tragos.

 

—¿Estás sobrio?

 

—Bastante, hyunggggg. Me divertí mucho, creo que ya hay que irnos. —el pelirrojo empezó a estirar los brazos y un leve bostezo salió de sus labios.

 

—No, recién me ha dado sed a mí. —murmuró mientras que le pedía dos tequilas al barman y tomaba asiento su lado, el pelirrojo tuvo un mal presentimiento. En cuestión de segundos salieron los tragos y en un abrir y cerrar de ojos, el rubio tomó ambos. Llevaba demasiado tiempo con MinSeok para saber qué tipo de borracho era, así que se preparó para oír su monologo, un par de tequilas más vinieron y de un solo shot los pasaba como si de agua se tratase.

 

Empezó hablando de política, en algún momento terminó hablando de Trump y Nostradamus prediciéndolo como el peor presidente que tendría ese país, a raíz de hablar de profecías empezó a hablar del fin del mundo. En realidad era muy interesante oírlo, soltaba datos interesantes. Lentamente el rubio empezó a pararse y al son de la música empezó a mover su cuerpo. Un chico apareció y lo quiso sacar a bailar, BaekHyun rechistó los dientes, advirtiéndolo que estaría vigilando.

 

MinSeok solo se sentía con muchas ganas de bailar, y el otro chico lentamente empezó a besarle el cuello, el rubio empezó a morderse los labios, disfrutándolo, se sentía bien, hasta que sintió un dolor bastante agudo lo hizo separarse de inmediato. Ese idiota le había dado una mordida olvidándose que se trataba de un área muy sensible, el dolor le hizo reaccionar de golpe, por lo que le empujó al tipo con fuerza y se dio la vuelta dispuesto a ir con BaekHyun. Con lo que no contaba, era que el sinvergüenza se atrevió a detenerlo cogiéndolo firmemente del brazo.

 

—Hace un rato lo estabas gozando, no te hagas al difícil.

 

—Imbécil, suéltame.

 

El sujeto le ganaba en fuerza así que empezó a arrastrarlo del brazo hacia el apartado de los baños, MinSeok empezó a pedir ayuda  pero a esa hora la gente estaba demasiado metida en sus propios asuntos, prácticamente todos estaban sordos por la música. Trató de llamar la atención de un par de personas, en eso casi empuja a un chico en el camino, lo buscó la mirada para pedirle ayuda. Los cuatro tequilas se fueron al demonio porque sus neuronas hicieron sinapsis y lo reconoció, era el chico de sonrisa bonita, el de la otra noche. Quien lo miró con un rostro desencajado, no pudo articular alguna palabra porque el asqueroso tipo lo terminó de llevar al baño.

 

MinSeok sintió mucho temor, el tipo simplemente lo miraba por largos minutos, deleitándose de verlo temblando. El mareo había disminuido y sintió que un par de lágrimas abandonaron sus ojos.

 

—Oh, qué bonito, estás llorando. —el tipo empezó a acercase y lo tomó de la nuca, quería besarlo a la fuerza, pero no llegó a concretar tal acción. De un momento a otro el sujeto estaba en el piso, el rubio elevó el rostro y lo vio allí.

 

El chico pelinegro había aparecido en el momento más preciso, le había propinado un puñetazo al rostro del tipo quien había caído al suelo casi de inmediato. Detrás suyo habían un par sujetos con esmóquines quienes observaron al caído.

 

—Señor Kim, uh. ¿Por qué lo golpeó? ¿Cómo lo llevamos ahora?

 

—Sólo sáquenlo ya.

 

MinSeok estaba respirando hondo, tratando de calmarse. Todo estaba bien. El pelinegro se quitó la gorra, acercándose hasta quedar al frente del adverso, no supo bien que decirle, parecía torpe. Y pese al mal momento, el rubio volvió a hallar ese brillo en los ojos ajenos.

 

—¿No traes casaca?

 

—Se cayó. —respondió MinSeok, el contrario empezó a quitarse la gabardina negra que vestía y el rubio lo detuvo—. Muchas gracias, chico, en serio. Pero estoy bien.

 

—¿De qué rayos hablas? —inquirió con extrañeza—. Si estás llorando.

 

—No.

 

El chico elevó una de sus manos como si quisiera tocarle las lágrimas, que sí, sí tenía muchas en las mejillas. El rubio hizo su rostro hacia el lado opuesto para que no cumpliera su cometido, haciendo que el pelinegro respirara hondo, de igual forma se quitó la gabardina puesto que traía más ropa abrigadora.

 

—No sé si tiritas de miedo o frío, da igual, acéptala.

 

—Déjeme pasar, soy su amigo —comenzó a oír aquella voz inconfundible afuera del baño. MinSeok desvió el rostro y pronunció el nombre de su ruidoso amigo—. ¿¡Ya ve!? Soy su amigo. —Le dejaron pasar y de inmediato el pelirrojo lo abrazó—. Te perdí de vista de un momento a otro. ¿Qué demonios pasó? Afuera hay un tipo con esposas en las manos. —entonces se percató de el otro joven—. ¿Y tú quién eres? ¿Le hiciste algo? —MinSeok negó de inmediato.

 

—Kim JongDae. —se presentó el joven, y se aproximó para colocar la gabardina en los hombros del rubio—. Bueno, mi labor ha terminado aquí. Adiós.

 

Fue un momento casi imperceptible pero, MinSeok jura haberlo visto guiñándole antes de salir del baño.

 

Notas finales:

24/07 Okay, acabo de descubrir lo sencillo que es subir historias a Wattpad así que, corran:

https://www.wattpad.com/story/156361195-chenmin-boomerang

 

 


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