Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Fuego oscuro, fuego negro por hellblack_sasuke-

[Reviews - 24]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Todos los personajes utilizados pertenecen a Masashi Kishimoto.

 

La historia se centra en la edad que tienen ahora en Boruto, sin embargo, ajusté algunas cosas que con el tiempo se irán dando cuenta.

 

 

-Cuando un humano pelea codo a codo con los dioses, y es capaz incluso de sellar a uno, entonces ese humano es diferente al resto de los otros

-¿Qué estás diciendo? –Lo miró extrañado. Sasuke sabía que lo que estaba viendo no era exactamente real, sin embargo estaba sucediendo.

Habían pasado cinco meses desde la pelea con los Otsutsuki, entonces ¿por qué estaba sucediendo?

-¿Acaso no puedes verlo? – Momoshiki tomó con fuerza el brazo del Uchiha. Miraba su muñeca y después desvió su mirada a los penetrantes sharingan y rinnegan de Sasuke- ¿ni siquiera con esos artilugios que tienes?

-Frunció el ceño. Por un extraño motivo, por primera vez en mucho tiempo se sentía inquieto. Incluso una gota de sudor rozó su frente- solo veo lo que necesito –sentenció-

-Esos ojos han cambiado –sonrió divertido- ya no son como eran antes. Sin embargo esa oscuridad que persiste en ti. Esa oscuridad que nunca se ha ido.

Puedes engañar a todos, inclusive a ti, pero en el fondo sabes de lo que hablo –el sujeto, pasó ambas manos al rostro del Uchiha en un movimiento rápido. Nuevamente Sasuke tuvo esa detestable sensación- tu vida y tu futuro son muy interesantes –sonrió nuevamente complacido- he podido verlo de principio a fin.

Tu pasado, tu presente y tu futuro no son como las de un ser inferior cualquiera.

-¿Qué quieres decir? –Intentó preguntar con frialdad, pero para ese momento se sentía bastante confundido-

-¿De verdad no lo sabes? Sé que eres más inteligente que eso.

Ambos sabemos que esos ojos terminarán por destruirte. Y será un deleite, ver como sucede –en ese instante Momoshiki comenzó a desvanecerse en el aire. Lucía como si estuvieran en una de las dimensiones donde hace ya tantos años había peleado contra Kaguya-

-¡Espera! –Exclamó Sasuke con un tono dudoso en su voz. Sin embargo, ya había desaparecido por completo.

De un momento a otro, Sasuke notó como todo se iba oscureciendo, como si de nuevo estuviera en un cambio de dimensión; intentó usar su rinnegan pero no funcionó en nada. Antes de quedar completamente sumergido en la oscuridad, a lo lejos pudo escuchar algo que lo dejó aún más desconcertado. Después, esa negra oscuridad lo consumió por completo.

Entonces despertó. De forma muy abrupta, como casi siempre y con la guardia alta. Por un segundo había olvidado que se encontraba en la aldea. Sí, en Konoha. Después de la pelea con los Otsutsuki y el riesgo latente de un nuevo ataque, tanto los kages como Naruto, decidieron que lo mejor sería que Sasuke se quedara en la aldea por un tiempo. Incluso el mismo Uchiha lo creía conveniente mirando la situación que tenían encima.

Se levantó con cierta dificultad dado el vértigo con el que cargaba en ese momento, pero una vez repuesto, se vistió rápidamente para salir directamente a la oficina del Hokage.

[*]

-¿Qué es lo que tanto te preocupa? –Preguntó Shikamaru. Llevaban aproximadamente quince minutos discutiendo acerca de la agenda de ese día, pero más bien parecía que Nara estaba hablando con la pared.

Conocía a Naruto y sabía lo despistado y cabezota que podía llegar a ser, pero ese día en particular, era diferente-

-¿Eh? –Contestó sin ni siquiera mirarlo a la cara. El rubio estaba leyendo unos papeles sobre su escritorio, pero Shikamaru sabía muy bien que solo estaba fingiendo- ¿Por qué estaría preocupado?

-¿Crees que vuelvan a atacarnos? –Preguntó con su seriedad típica.

Naruto terminó de firmar esas hojas que tenía encima, y está vez lo observó serio-

-No estamos seguros de cuantos como ellos quedan todavía y que tan fuertes pueden llegar a ser

-O sea que lo que realmente te preocupa es que no estamos preparados para afrontar un nuevo ataque como el de la última vez, ¿no es cierto?

-Entre Sasuke y yo apenas pudimos contener a uno. Si aparecieran más como ellos...

-Comprendo –suspiraba con pesadez como era habitual- ¿entonces lo mandarás de nuevo afuera? –En ese momento Naruto soltó su típica y casual risa divertida. Se cruzó de brazos y terminó de recargar todo su cuerpo en la silla-

-No lo sé –sonrió- cualquier decisión implica un gran riesgo. Es importante que Sasuke siga investigando, ya que además es el único capaz de hacerlo; pero no tenemos idea de que pueda encontrar y qué tan peligroso sea. Y por otro lado, si se queda, podría ser un mayor atrayente hacia la aldea

-Ya veo. Así que tienes que tomar difíciles decisiones

-Como Hokage, Shikamaru, la mayor parte del tiempo tengo que hacerlo –respondió con un poco de tristeza-

-¿Y qué opinan los otros kages?

-Gaara y los demás piensan que sería mejor que Sasuke siguiera investigando. Creen que podemos tener cierta ventaja gracias a que derrotamos a Momoshiki

-¿Y tú que piensas? –El Nara miraba detenidamente al rubio. Jamás había sido de su incumbencia y en realidad no era que le importara; pero siempre le pareció muy divertida su forma de actuar siempre que se trataba de Sasuke-

-Bueno –se llevaba una mano a su mentón- creo que también sería lo mejor

-"Sí claro" –pensó para después dedicarle una sonrisa somera- Bien. Al final son decisiones problemáticas que solo los involucran a ustedes.

Vendré más tarde, ¿de acuerdo? –El rubio asintió con el rostro y solo escuchó la puerta cerrarse.

Pasaron cerca de veinte minutos, hasta que de nuevo la puerta se abrió suavemente, con algo de discreción.

Naruto levantó la mirada, esta vez sintió como el cansancio se iba de su cuerpo y una hermosa sonrisa afloraba en sus labios-

-¿Por qué no me despertaste? –Preguntó el moreno una vez que se cercioró de que la puerta estaba cerrada y no había nadie cerca. Dio rápidamente unos pasos hasta estar al frente del escritorio donde se encontraba el rubio-

-A mí también me da gusto verte, Sasuke –respondía con esa calidez típica en él-

-Dobe–chasqueó la lengua ligeramente molesto- perdí toda la mañana durmiendo, en lugar de ayudarte con la investigación de Otsutsuki

-No deberías de ser tan duro contigo mismo –contestó- además –esta vez Naruto lo miraba con intensidad- ya sabes que me gusta verte dormir

-Uusratonkachi –apenas murmuró- este no es tiempo para bromas –dijo desviando levemente la mirada-

-¿Sasuke?

-¿Qué? –Respondió intentando sonar frío-

-Ven –susurró. A lo que después de fruncir el ceño como muestra de queja, rodeó el escritorio, para sentarse de lleno sobre las piernas del rubio-

¿Contento? –Musitó-

-¿Qué es lo que te preocupa? –Naruto le preguntó con una suavidad y preocupación tan empalagosa, que Sasuke no estaba seguro de cómo reaccionar. Sin mencionar esa estúpida mirada que le dedicaba en momentos así-

-¿De qué hablas? –Dijo, restándole importancia- no sé a qué te refieres –sonaba tajante como siempre-

-Sé cuándo me estás mintiendo –en ese momento, el rubio pasó su brazo derecho por la espalda del Uchiha para rodearlo y atraerlo un poco más hacia él- ¿qué te está molestando?

-No es nada importante –Sasuke no estaba seguro en contarle acerca del sueño que había tenido hace apenas unas horas. Sabía de antemano que Naruto siempre era un exagerado en situaciones como esas, y venir a contarle un hecho que incluso podría ser irrelevante, no tenía mucho sentido. Así que mejor esperaría a tener más información o entender más al respecto, para contarle lo sucedido-

-Ya veo –suspiró pesadamente. A veces le gustaría que el moreno fuera más abierto con él. Sabía que algo pasaba por su cabeza con solo mirarlo, pero si no cedía, tampoco pretendía acosarlo- si es así, yo debo de confesarte algo

-¿De qué se trata? –Lo miró ligeramente curioso. Al final, nunca dejaba de sorprenderlo-

-Le he mentido a Shikamaru cuando me preguntó por qué estaba preocupado

-Sasuke no pudo evitar hacer una mueca de extrañeza. No entendía para donde iban los comentarios del rubio- ¿Qué le dijiste?

-Le contesté que estaba preocupado por la situación de Otsutsuki

-¿Y no es verdad? –Preguntó frunciendo el ceño nuevamente-

-En parte –sonrió- pero la verdadera razón por la que estoy preocupado... -Naruto dejó unos breves segundos al aire, momento en que Sasuke sintió como el rubio apretaba un poco su cintura- eres tú –el azul se cruzó con el negro. Preocupación verdadera, mezclada con culpa silenciosa-

-¿Por qué? –Arqueó la ceja inquisitivo- no entiendo porque deberías estar preocupado por mí

-¿Te duele mucho? –Preguntó suavemente-

-¿El qué? –A pesar de que se estuviera haciendo el loco, intentaba no sorprenderse ante lo que estaba suponiendo el rubio. ¿En qué momento se había vuelto tan observador?-

-Tu rinnegan –suspiró- sabes que puedes decirme lo que sea –sonrió de nuevo, ampliamente, dedicándole esa mueca tan especial, solo a él- he notado que te molesta desde hace un par de semanas

-Son pequeñas molestias –en ese instante, Sasuke optó por elevar la mano y acariciar de forma grácil el rostro del de ojos azules- no es necesario que te preocupes

-Lo es –murmuró cerca de sus labios- porque si te dejo solo dos minutos, destruyes el planeta...

-Tal vez en el pasado, ahora es diferente –susurró-

-También lo sé. Te conozco –aprovechó esa cercanía para poder besarlo en un gesto pícaro. Sus besos eran tan apasionados que podían subir de tono de un segundo a otro- y por lo mismo, deberías de permitir que alguien te revise. Me preocupa que se agrave

-Nadie en esta aldea sabe más de los poderes oculares que yo, dobe, así que básicamente –el Uchiha se quedó pensando nuevamente unos segundos. En algo Naruto tenía razón. Si bien estuvo soportando desde hace casi un mes, el rinnegan le producía cada vez un dolor más y más intenso, tanto, que pareciera que la cabeza iba a explotarle, además de algunas ocasiones donde lloraba sangre y lo que más le preocupaba... en algunos momentos, era incapaz de utilizarlo. Como si su cuerpo no lo reconociera, o como si el rinnegan no reconociera a Sasuke- si yo no tengo idea de que sucede, nadie más la tendrá

-Siempre tan negativo –torció la boca en un pequeño puchero- tal vez con Sakura y Kakashi podríamos encontrar algo

-Yo me encargo- tan autoritario como siempre- ya te dije que no es nada serio –se levantó de repente-

-¿A dónde vas? –Preguntó con curiosidad-

-Acepté salir contigo desde hace mucho tiempo, pero eso no significa que tenga que decirte todo lo que hago –el rubio solo se rió-

-¿Cuándo dejarás de ser tan frío?

-Hasta que tú, dejes de ser tan dobe –sonrió para sí mismo- iré a casa, quiero estudiar unas cosas que encontré –en ese momento se desvaneció. Naruto, volvió al trabajo como cualquier día normal. Se sentía feliz-

[*]

-Entiendo tus razones, pero deberías decirle

-Sabes cómo es, no quiero que comience a perder la cabeza –dijo con voz cansada- ¿alguna idea?

-Concuerdo con Sakura –suspiró- me parece que a estas alturas Naruto sabría qué hacer, o por lo menos tendría noción de cómo abordar el problema

-Te permití entrar en mi mente para que revisaras los recuerdos, ¿y esa es tu respuesta, Ino?

-Han pasado tantos años y sin embargo, hay cosas que nunca cambian, ¿cierto, Sasuke? –Decía un tanto, divertida- tu ojo comenzó a fallar poco después de la pelea con esos tipos, ¿verdad? –El otro contestó con un movimiento de cabeza- de acuerdo a los estudios que te hicimos por segundo mes consecutivo, Sakura y yo diríamos que estás en buen estado... -la rubia se limitaba a comparar las hojas, para identificar si las hubiera, diferencias significativas-

-En cualquier caso –Sakura retomaba la conversación- si tuvieras algún problema físico, estoy segura que no estaría ligado al problema de tu rinnegan. Me parece que más bien es otra cosa... -la chica dijo reflexiva-

-Todos tus niveles están bien y no han cambiado mucho. Tal vez, aquí –Ino señalaba con la mano uno de los estudios- estás un poco bajo de hierro... ¿estás comiendo bien?

-Lo normal

-En ese momento, Haruno se acercó a Yamanaka y revisó detenidamente los papeles, entonces, Ino también lo notó- ¿seguro que te estás cuidando bien? –La rubia tragó saliva. Se sintió tensa por un momento-

-¿Por? –En el fondo se sentía un poco curioso. Sabía perfectamente que esas dos como médicos, eran de lo mejor en todo el mundo shinobi. Así que esa manera en alterarse, significaba algo-

-No es nada –contestó Sakura- pero tus conteos de hemoglobina, glóbulos rojos, y hematocrito han ido disminuyendo. Tampoco es para alarmarse o que hayan bajado mucho pero, me resulta...

-¿Qué significa todo eso?

-Pueden ser muchas cosas, pero –Ino sonrió complacida- seguramente es que has tenido mucho trabajo ¿no?

-El de siempre

-O sea que sí. Ha tenido mucho trabajo –respondió Sakura, cruzándose de brazos- comprendo que tú y Naruto tienen muchas responsabilidades, y después de lo que pasó hace unos meses, deben de estar más alertas, pero no descuides tanto tu salud o vas a desmayarte de la nada, y ten por seguro que hará más escándalo del que quieres

-Seguramente todos estos resultados no son más que la manera de decirnos que estás muy estresado y cansado. Así que la recomendación es que duermas más, comas bien e intentes calmarte. Podemos mandarte vitaminas también

-Está bien –confirmó- ¿y con respecto a lo otro?

-En cuanto al recuerdo de ese sueño, estoy de acuerdo contigo en que fue una especie de genjutsu de muy alto nivel. Tal vez solo con el rinnegan serías capaz de hacerlo y nadie más en el mundo

-¿Entonces sigue vivo? –Preguntó Sakura-

-En realidad no lo pudimos matar. Solo lo contuvimos –Sasuke volvió a su actitud seria- por eso sabemos que un nuevo ataque sería inminente, en cuanto se recupere...

-¿Crees que tengan más semilleros? En otras, ¿dimensiones?

-Es muy probable –Sasuke dirigió su vista a la ventana. Era un día cálido, con mucho sol- ¿pudiste escuchar algo de lo último, Ino?

-No Sasuke, lo siento –la chica desvió la mirada- nada

-Bien –se levantó con agilidad y una vez que se colocó la capa que cubría su cuerpo, decidió partir- no le digan nada de esto a Naruto, ¿entendido?

-Como siempre –murmuró Sakura a regañadientes-

-Sakura –Ino susurró cerca del oído de la de ojos verdes-

-¿Sucede algo? –Inquirió curiosa-

-Es solo, que estoy preocupada –dijo con algo de nerviosismo- es una locura pero, por un momento se me ocurrió que...

-¿Qué? –Ladeó el rostro- ¿tiene que ver con Sasuke?

-Sí –movió su cuello suavemente para confirmar- hace un momento, cuando estaba revisando sus recuerdos... -la chica desvió un poco la mirada- pude ver y escuchar todo lo que Momoshiki le dijo a Sasuke...

-¿Qué sucede Ino? –Sakura preguntó preocupada-

-Lo último que le dijo a Sasuke antes de desaparecer... y con los análisis, yo por un momento creí que... por eso no le dije nada, porque sé que debe ser una locura, pero con los síntomas que dice ha tenido últimamente...

-Por favor, habla ya –dijo tomándole el hombro- ¿es algo serio?

-No estoy segura pero... Momoshiki le dijo que

"Felicidades, o al menos eso se dicen los humanos cuando van a engendrar a otros"

-¿Qué? –La pelirrosa la miró confundida, alterada, contrariada, escéptica, asombrada, asustada. Un poema completo- ¿qué quiere decir eso? ¿A qué se refirió, con eso?

-¿Entiendes ahora a lo que me refiero?

-Déjame ver otra vez eso –la chica tomó nuevamente todos los papeles con los resultados de los estudios- no... es decir, son síntomas muy banales, a cualquiera le puede pasar. No es necesariamente porque...

-Por eso no quise decir nada pero, cuando vi el recuerdo me sentí muy alterada, fue como sí... Un escalofrío recorrió mi espalda

-Debe de ser un error

-Pero Sakura, si tú vieras esos datos y te preguntaran... y en caso de que fuera mujer

-Diría lo mismo que tú. Muy probablemente lo haría –se llevó un dedo a la boca y lo mordía ligeramente. Era un reflejo cada vez que se sentía nerviosa- pero en este caso es imposible... además, si así fuera eso querría decir que Naruto... -la chica se puso un poco roja de las mejillas. No eran temas que le importaran pero, a veces, se llegaba a enterar de tantas cosas... - pero no. Debe ser un error. Vamos a esperar, seguramente es estrés y que ha estado muy cansado.

Simplemente no puede ser

¿Cómo podría?

Eran cerca de las ocho de la noche. Sasuke acaba de recoger la mesa después de cenar. Sabía que Naruto llegaría tarde, así que optó por adelantarse. Dejó los pocos trastes sobre la mesa para que terminaran de escurrirse, y ya estando dispuesto a revisar unos pergaminos que tenían que ver con Kaguya, oler la carne que estaban cocinando en el departamento de abajo, lo hizo correr directamente al baño.

Permaneció ahí aproximadamente quince minutos. Se sentía consternado porque nunca se enfermaba del estómago, mucho menos si siempre comía cosas sanas a diferencia de Naruto. Pero vomitar tanto, le parecía, dramático; porque ciertamente no era la primera vez que lo hacía. Sin embargo, si no se lo contó a las chicas, fue porque no lo creyó necesario. Aun así, seguramente no se trataba más que de una infección por algo que comió en mal estado. Eso era todo.

Incluso por un momento en verdad pensó que tenía que relajarse o de lo contrario su cuerpo estaría tan susceptible como para enfermarse de cualquier cosa.

Para su sorpresa, mientras se levantaba con algo de dificultad, sintió el chakra del rubio a escasos metros de él. Supuso que al final se habría llevado trabajo a casa o había dejado a un clon en su oficina.

Se arregló rápidamente para que Naruto no sospechara nada y salió del baño, tranquilamente y con una pequeña sonrisa

-Ya estoy en casa Sasuke –vociferó Naruto una vez que se descalzó y entró a la sala-

-Bienvenido –lo miró con la profundidad típica de siempre, recargado en el marco de la puerta que llevaba a la alcoba y al baño- Naruto –sonrió de la única forma en la que le podía sonreír a él. Solo a él- 

 

Notas finales:

Muchas gracias por leer.

 

Espero que esta historia sea de su agrado :)


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).