Jonghyun se encontraba arreglando unos papeles en su oficina, al ser el director de una escuela tenía que quedarse hasta tarde para tener todo listo para el día siguiente. Pero este día iba a demorar un poco, ya que tenía que hablar con una alumna por haber tenido problemas con una de sus compañeras y porque su rendimiento era muy bajo. Terminó de guardar sus cosas hasta que escuchó que alguien tocaba la puerta.
- Pase – dijo sentado en el asiento de su escritorio.
- Buenas noches director Kim – saludó una alumna.
- Tome asiento señorita Lee. La llamé para informarle que usted está a punto de ser expulsada de la escuela, si vuelve a sacar una baja calificación o se mete en problemas lo sentiré mucho.
- Pero director, no me puede hacer eso – se levantó cuando vio al mayor dirigirse a la puerta de la oficina.
- Si puedo, es una advertencia señorita. – siguió su camino hacia la puerta y antes de abrirla la menor lo abrazó.
- Por favor ayúdeme – susurró en su oído.
- Por favor suélteme – volteó para empujarla y salir del agarre.
- Haré lo que quiera – susurró sobre sus labios pasando sus manos por el pecho del mayor y éste se mordió el labio inferior.
- ¿Lo que quiera? – murmuró y la menor asintió – Eres tentadora pequeña.
Pasó sus manos por debajo de la falda, sintiendo esa piel suave y ese trasero casi expuesto siendo violado por una pequeña tanga. La besó despacio, subiendo sus manos hasta la pequeña cintura mientras ella con una mano lo masturbaba por encima del pantalón. Bajó sus besos hasta ese blanco cuello haciéndola jadear y comenzó a subirle el polo hasta quitárselo, dejando ver esa piel de porcelana.
La menor desabrochó su camisa, tocando ese perfecto cuerpo bronceado para luego arrodillarse y desabrocharle el pantalón junto con el cinturón bajándoselo. Mordió el miembro semi erecto por sobre la tela del bóxer para luego lamerlo y volver a morder la punta; bajó la prenda dejándolo libre para metérselo en la boca comenzando a chuparlo de manera lenta.
- Mmmmgh – gruñó y bajó la vista encontrándose con la de ella.
Comenzó a masturbarlo y a chuparle los testículos para que sintiera más placer; Jonghyun le acariciaba los cabellos semi rojizos lamiéndose los labios por la bella vista que tenía. Volvió a engullirse ese gran miembro acariciando su torso sin dejar de mirarlo a los ojos. El mayor se apartó un poco haciendo que su pene salga de esa boquita, para tomarla de los brazos poniéndola de pie.
- Todo lo haces tan bien Minnie – dijo con voz ronca.
- Hyung acabas de malograr el momento – rió un poco.
- No me importa – volvió a besarlo despacio enredando sus lenguas y acariciándose.
Llevó sus manos nuevamente bajo la falda, lo empujó un poco para que quedara sentado sobre el escritorio sin romper el beso; le sacó la ropa interior con los dientes para luego lanzarla por ahí. Taemin estuvo a punto de sacarse la falda, pero el mayor se lo prohibió.
- Aún no, después te lo quitas – dijo acariceándole las piernas.
Se alejó y jaló la silla giratoria para sentarse mientras el pelilargo se recostaba en el escritorio colocando sus pies sobre éste con las piernas flexionadas. El castaño se quitó el pantalón antes de acercase con la silla hasta el escritorio, levantó la falda y lamió el miembro erecto del menor.
- Ngh – gimió cuando el mayor le chupó el glande.
Apoyó su cuerpo en sus codos para ver como su novio le hacía sexo oral; Jonghyun rozó con su dedo ese anillo rosado, sintiendo cómo se tensaba. Metió el dedo dejando el pene del menor para darle algunas lamidas mientras lo penetraba.
- Aaaahh síii – jadeó tirando la cabeza hacia atrás sintiendo como ese dedo entraba y salía de su interior.
El mayor retiró el dedo y acercó su lengua a la entrada de Taemin para seguir dilatándolo, mientras lo masturbaba un poco. El pelilargo se volvió a recostar alzando las piernas aún flexionadas, jalándose los pezones y moviendo las caderas para sentir más esa lengua.
- Jong… aaahhh – jadeó y se mordió el labio inferior.
Jonghyun se separó y metió dos dedos para ensanchar ese canal estrecho haciendo un movimiento de tijeras; después de unos minutos metió el tercero haciéndolo fruncir el ceño por la intromisión. En el despacho del mayor sólo se escuchaban los constantes jadeos que provenían de la boca de Taemin, quien se aferraba más fuerte al escritorio por todas las sensaciones.
El mayor sacó sus dedos recibiendo un gemido de protesta, se levantó de la silla perfilando el glande en la entrada del pelilargo. Acarició sus piernas mientras entraba de manera lenta; primero metió la punta, retrocedió un poco para volver ingresar hasta la mitad, volvió a salir aún con la cabeza dentro y entró despacio por completo sintiendo un pequeño espasmo por parte del cuerpo del menor.
- Eres tan estrecho – murmuró masturbándolo un poco antes de comenzar con las embestidas.
Taemin levantó una pierna colocándola en el hombro del moreno y la otra la abrió más para que entrara más profundo; le encantaba cada vez que su novio lo penetraba de esa manera tan lenta que podría quedarse así con él por el resto de su vida. Jonghyun le quitó los zapatos y las medias sin dejar de moverse, además que se estaba excitando más por los jadeos y gemidos del menor.
- Mmmghh Jong… asíi… asíii.
- Ngh bebé – susurró besándole la pierna y acelerando las embestidas.
Lo jaló un poco haciendo que enrede las piernas en su cintura, se aferró a las estrechas caderas para seguir penetrándolo como sabía que le gustaba a su pequeño. Mantuvieron el ritmo por varios minutos entre gemidos y gruñidos por parte de ambos; el mayor se sacó la camisa antes de besarlo disminuyendo el ritmo de las embestidas mientras Taemin tomaba su rostro entre sus manos para intensificarlo.
Sin romper el beso, lo tomó en brazos para sentarse en la silla con su miembro aín en el interior del menor; el pelilargo cortó el beso para acomodar sus pies en el suelo, al mismo tiempo que colocaba sus manos en los hombros del moreno para subir y bajar de ese pene que tanto placer le daba.
- Así bebé… así – jadeó mirándolo como se autopenetraba despacio.
- Oh sí… ngh – gimió antes de besarlo.
Jonghyun llevó sus manos para desabrochar la falda y se la quitó por la cabeza mientras el menor no dejaba de moverse; colocó una mano en la cadera y la otra en esa montaña redonda besándole el cuello sin dejar de acariciarlo.
Cada vez los gemidos del menor eran más fuertes, movía las caderas de adelante hacia atrás de manera frenética para sentirlo más profundo aferrándose a la cabellera del mayor y besándolo desesperadamente.
- Mierda Taemin – gruñó rompiendo el beso y embistiéndolo.
- Jong… máaas… másss rápido – gimió acelerando sus saltos.
El mayor separó sus nalgas para llegar más profundo, logrando que el menor subiera una pierna apoyándola en un pedazo del asiento para sentir más a ese miembro que lo estaba haciendo delirar de placer.
- Síiii… mmghhh… no pares… no pares
Llevó una mano a su miembro masturbándose mientras tiraba la cabeza hacia atrás cerrando los ojos; el moreno besaba su pecho, chupaba sus pezones y manoseaba a su gusto el trasero del menor manteniendo el ritmo de las embestidas.
- Ahíiii… ahí de nuevo – jadeó bajando la pierna para posicionarla en el suelo dejando de masturbarse.
- Ngh me encantas… me encantas – susurró en su cuello abrazándolo embistiéndolo frenéticamente.
- Oh Dios… me… corro
- Córrete bebé – susurró antes de besarlo.
Taemin se corrió ahogando sus gemidos en la boca de su novio y manchando sus vientres; el mayor siguió penetrándolo sin romper el beso y poco después llenó con su esencia al pelilargo quien gimió al sentir el semen en su interior. Se separaron por falta de aire y sonrieron.
- Gracias por complacerme – dijo Jonghyun pasándole un mechón de cabello por la oreja.
- Sabes que me gusta hacerlo – le dio un pequeño beso – Si no lo hago ¿quién más lo haría? – sonrió.
- Lo sé – susurró acariciándole la espalda.
- Tú también me complaces cuando te lo pido – se sonrojó un poco.
- Y siempre lo haré – sonrió – ¿Tomamos una ducha? – el menor asintió.
Taemin se paró y gimió al sentir que el pene del mayor salió de su interior; se tomaron de la mano para salir del despacho e ir al baño de su habitación caminando desnudos por toda la casa.
Al principio al menor le incomodó cumplir con las fantasías que tenía su novio, pero poco a poco comenzó a gustarle; lo bueno era que no lo hacían seguido y las fantasías de ambos eran cada vez más osadas que la anterior. A Taemin le gustaba complacer en todo lo que su novio le pedía y a Jonghyun le encantaba que su novio lo complazca pero también... él lo hacía con él.