Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

JONGTAE ONE SHOTS (100% LEMON) por Caroand

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

One shot del día, 

Enjoy it :)

Taemin no tenía idea de por qué respondió el aviso en una revista, excepto que necesitaba dinero. Casarse con un tipo en necesidad, parecía ser menos doloroso que vender un órgano o someterse a dudosos experimentos médicos por dinero.


Un momento después de que colgó el teléfono, y se preparaba para ir a tomar café en su cita con Jonghyun. Finalmente decidió atravesar eso. Tenía que hacerlo.


Sin embargo, estaba deprimido, tenía treinta y cuatro años y aún no había encontrado el amor de su vida, sin importar lo mucho que había tratado. Podía oler el aroma del buen café que salía de la cafetería y se animó a entrar en la débilmente iluminada.


Una barra estaba a la izquierda y estaba abarrotada de gente leyendo el periódico o trabajando en sus laptops, eso era mala señal. Eso significaba que las mesas podrían estar llenas. Y así era. Revisó la cafetería.


—¿Jonghyun? —le preguntó a un tipo sentado solo ante una mesa. El tipo se parecía a la descripción que le había dado Jonghyun.


—No, soy yo —dijo otra voz. La mirada de Taemin fue hacia la siguiente mesa y su espíritu se hundió. Taemin trató de mantener la sonrisa en su cara, aunque comenzaba a pensar que la venta de órganos no era tan mala idea después de todo.


—Por Dios, Kibum —dijo el primer tipo, negando con la cabeza. Se puso de pie. —Deberías ver su cara. Taemin, ¿no es así? — Taemin asintió, sintiéndose aturdido mientras Jonghyun le estrechaba la mano —Soy Kim Jonghyun. Kibum es mi compañero de cuarto.


Taemin estrechó la mano de Kibum, tratando de no apartarse ante la húmeda sensación de la piel del hombre contra la suya.


—He tenido algunos extraños encuentros como te dije por teléfono, así que Kibum amablemente me ayuda a echarles un vistazo. — Jonghyun sonrió.


Él tenía muy buena apariencia. Tenía el cabello corto y oscuro, ojos cafés y una fantástica sonrisa. Algo movió su corazón, él no sabía qué. Trató de distanciarse de las tontas emociones. Se dio cuenta que él aún seguía siendo un romántico en su alma. Quería creer en el amor a primera vista.


—¿Qué te gustaría tomar? — Jonghyun le preguntó.


—Un latte grande, por favor.


Jonghyun sonrió. —Toma asiento. Ahora regreso.


Kibum se unió a Taemin, acercando la silla. La manera en que veía la cabeza de Taemin le hacía pensar que era un peluquero...o un bicho raro.


Le sonrió a Kibum quien tomó su café, sentado a pocos centímetros de Taemin.


—¿Eres peluquero? — Taemin le preguntó.


—Sí. ¿Cómo lo supiste?


—Tienes una expresión...mi barbero tiene la misma.


—¿Barbero? ¿Realmente vas con un barbero?


—Seguro. ¿Por qué? — Taemin estaba comenzando a sentirse incómodo.


- No me extraña que tu cabello luzca como una mierda. Eso que usas es diferente a lo esperado.


—Siento que esto me tomara un tiempo —dijo Jonghyun, regresando con el café de Taemin. Lo dejo frente a él. Los dos hombres se vieron fijamente. Kibum podría ser un imbécil, pero Jonghyun parecía agradable. Taemin sintió que la ansiedad fluía por su sistema —Entonces, ¿qué haces para vivir? —preguntó Jonghyun. Taemin estaba seguro de que a Jonghyun le gustaba lo que veía. Taemin era un buen juez del carácter y usualmente leía a la gente bien...excepto cuando era el amor de su vida.


—Soy director de casting. —Le dio un trago a su café. Le pareció que sabía a nuez. Odiaba los sabores en el café, pero no dijo nada.


—Hey, gran chico — Kibum intervino. —Te estás tomando mi café.


—Oh, lo siento. — Taemin sintió que el color subió a sus mejillas cuando tomó su propia taza y le dio un trago. De nuevo, tuvo que esforzarse por mantener la sonrisa en su cara.


- ¿Director de Casting? — Jonghyun preguntó, viendo a Kibum quien hacía muy evidente que estaba limpiando el lado de la taza en donde Taemin había bebió. Qué vergüenza.


Jonghyun tenía un lindo acento. Taemin sonrió.


—Sabes...eso es genial —dijo Jonghyun. —Un director de casting y un escritor...es una pareja convincente. ¿En qué tipos de programas eliges el elenco?


—En algunas películas, pero principalmente programas de televisión.


—¿Algo que pudiera haber visto?


Taemin le dio los nombres de un par de películas. Jonghyun asintió.


—Es un trabajo interesante, Taemin. ¿Cómo llegaste a eso?


Taemin se sentía cómodo hablando de su carrera. Estaba orgulloso de sus logros, incluso si el negocio iba directo a la quiebra.


—Era actor —dijo. —Entre trabajos, comencé a trabajar con una gran directora de casting.


—Entonces el negocio es bueno, ¿huh? —le preguntó a Taemin.


—Realmente no. — Taemin vio a Kibum. Realmente no quería discutir sus problemas frente a ese tipo. Él le dio otro trago a su café.


—Quiero decir....los casting en esta ciudad...han de ser un gran negocio, ¿verdad? — Jonghyun insistió.


—Ya no.


—¿Cómo es eso?


—Las cosas han cambiado durante los últimos dos años. Las producciones en esta ciudad han disminuido. El año pasado solo se hicieron dos películas aquí y en este año solo una. Todo el mundo se está yendo fuera del país o a otras ciudades.


—Eso es malo. ¿Realmente también se está llevando una parte del mercado?


—Puedes apostarlo. Yo puedo llevar una lista de actores a los productores, pero el hecho es que ellos no quieren arriesgar su dinero en el reality shows como si lo hacen para el guion del programa.


—Ah...pero, realmente no son espontáneos, ¿siguen un libreto, ¿verdad? — Kibum preguntó. Taemin sintió un nuevo aprecio por Kibum. El tipo no era tan estúpido como se veía.


—Si, pero mi trabajo es darles los nombres. Ellos quieren ver una gran lista de nombres. A veces incluso buenos actores. En estos días, las estrellas de grandes películas están más que dispuestos a aceptar un papel en una serie o incluso un papel secundario en una película. Los Reality shows no necesitan director de casting.


Taemin dejó de hablar. A él no le estaba yendo del todo mal en su conversación, pero empezaba a sentirse molesto consigo mismo. Había pasado muchas noches de insomnio preocupado acerca de su carrera.


—Zánganos — Kibum dijo, su voz se oía genuinamente compasiva.


Jonghyun no dijo nada. Él veía fijamente a Taemin como si él fuera la criatura del lago negro.


**************************************************************************


Jonghyun aparentemente había colocado primero su anuncio en línea y solo se encontró con hombres con horribles situaciones financieras y antecedentes criminales.


—Estoy dispuesto a pagar los recibos de la casa y darle una parte de mi dinero al chico correcto —él dijo. —Pero no puedo pagar sus multas de estacionamiento y encargarme de las desastrosas tarjetas de créditos de sus madres. Solo no puedo hacerlo.


A Taemin le gustó la idea de que Jonghyun pagara los recibos de la casa. Eso podría ayudar a Taemin con sus problemas de dinero. Deseaba preguntar qué cantidad de dinero Jonghyun consideraba una parte, pero no quería presionar con Kibum presente.


—¿Cuantos chicos encontraste con ese anuncio? —preguntó.


—Nueve. Un par con posibilidades, pero no me sentía esperanzado hasta hoy.


Taemin vio a Kibum asentir vigorosamente y empezó a sentir mayor amistad por el chico.


—Escucha —dijo Jonghyun —vamos a que revises mi departamento. Asegurarnos de que es de tu agrado.


Cuando se estacionaron afuera del departamento que compartía con Kibum, lo guió hacia unos escalones de piedra de un dúplex. Arriba de las escaleras el departamento tenía pisos y techo de madera y maravillosas molduras en las paredes.


—Es genial, ¿no es así? — Jonghyun se sentó con Taemin en el sofá de la sala mientras Kibum se preparaba para su cita.


—Me preguntaba ¿si... el matrimonio gay califica en inmigración? — Taemin preguntó.


—Absolutamente. Fue mi abogado de inmigración quien lo sugirió. La proposición ocho ha sido revocada, pero sabes que el matrimonio gay sigue siendo válido en Seúl por ahora.


—Entonces, ¿dónde quieres casarte? — Taemin preguntó.


—Pensaba en Daegu, dado que tengo ahí un primo lejano. Podemos tener a algunos amigos. Por cierto...necesitamos muchas fotos. Yo pagaría los boletos de avión y el hotel. Todos los gastos de la boda. Nosotros debemos tomarnos un fin de semana largo, quiero una luna de miel divertida. 


Taemin empezó a sentirse nervioso. Se sentía atraído por Jonghyun. ¿Qué si con un par de copas de champagne no pudiera evitar mantener sus manos fuera de su nuevo marido? Jonghyun debía pensar en lo mismo, porque cuando habló de nuevo su voz era gruesa.


—No tiene que ser un arreglo libre de sexo. Nosotros podemos tontear si queremos. Eres caliente y me agradas. Yo...


Kibum salió viéndose exactamente igual que veinte minutos antes.


—Estoy listo para mi cita —dijo, aún se veía despeinado.


—Er...buena suerte —dijo Taemin.


—Que te diviertas. —Dijo Jonghyun.


—Gracias, chicos. — Kibum entró en la cocina y salió con una bandeja llevando comida y aperitivos y entró al cuarto silbando. Taemin lo oyó cerrar la puerta.


Jonghyun sonrió, sus dedos se movieron por el respaldo del sofá y descansaron en la parte de atrás del cuello de Taemin.


—Sé que me gustas —dijo Jonghyun, su voz suave. —Ahora sabes por qué no quiero casarme con Kibum. El pobre, iluso bastardo.


Taemin trató de absorber todo eso. Eso era irreal, eso era seguro.


—¿Dónde estábamos, Lee Taemin? — Jonghyun preguntó, su voz con admiración. Se inclinó un poco más cerca. Taemin sostuvo el aliento, seguro de que Jonghyun iba a besarlo. El calor sexual fluía entre ellos.


Y entonces el timbre del teléfono celular de Taemin rompió el hechizo del momento. Yoona. Taemin vio en la pantalla. Dejó salir un suspiro de frustración.


—¿Problemas? — Jonghyun preguntó.


—No, para nada. Es mi mejor amiga, Yoona. Ella quiere ir a cenar y ver una película.


—¿Y tú no quieres ir?


Taemin dudó.


—Esperaba que pudieras quedarte un poco más esta noche —dijo Jonghyun.


—Puedes venir.


—Esperaba que dijeras eso — Jonghyun se inclinó y finalmente le dio un rápido beso. El roce de los labios contra los suyos, Taemin lo sintió como el cielo.


**************************************************************************


Yoona estaba esperando en el sillón del ultra lujoso cine. Ella estaba vestida como si fuera a ir a un baile, como de costumbre, ella estiró su brazo y acercó la cara de Taemin a la suya.


—Cariño. ¿No es esto maravilloso? —Ella besó sus mejillas. Yoona era asombrosa —Y ¿quién es esta divina criatura? —Ella puso el vaso de su coctel en la mesa de café. Taemin se permitió jalarla para que se pusiera de pie y la abrazó.


Ella abrazó a Jonghyun, quien parecía pasmado de conocerla.


Im Yoona en la pantalla, grande o pequeña era algo especial. Yoona en persona eclipsaba todo, incluyendo el sol.


—Eres la mujer más hermosa que he visto —jadeó.


Yoona lanzó la cabeza hacia atrás y se rió. Su cabello era rubio, el color de sus ojos de chocolate. Su cara era exquisita, una deslumbrante sonrisa elevó ligeramente las esquinas de su boca.


Los dos hombres se sentaron al lado de ella cuando ella regresó al sofá acomodando su largo vestido negro.


—¿Qué bebes? amor. — Jonghyun preguntó.


—Martini —Ella le ofreció un trago. Taemin vio cómo se veían a los ojos cuando Jonghyun le dio un trago al coctel de ella.


—Picante. Y un poco letal — Jonghyun murmuró. Taemin estaba seguro que no solo hablaba acerca de la bebida.


—Yo prefiero una cerveza —dijo Taemin. Yoona y Jonghyun seguían su silencioso coqueteo mientras Taemin se encontraba renuente a tener otra noche siendo la quinta rueda en presencia de Yoona.


Este chico podría quebrar mi corazón. Ese pensamiento fue más claro que cualquier presentimiento que Taemin hubiera tenido antes. Tenía una extraña sensación de que tenía que tomar una decisión. En lugar de eso, cuando el mesero se aproximó a la mesa, Taemin le sonrió.


—¿Coctel? —preguntó el mesero, dejando en la mesa tres vasos de martinis. Galletas, nueces y dulces.


—A Taemin y a mí nos encantaría tomar cerveza. ¿Tienes de barril? — Jonghyun preguntó, como si le fuera difícil apartar la mirada de Yoona.


Yoona se giró, vio a Taemin y pronunció con los labios, es lindo, el espíritu de Taemin se elevó un poco ahora que Jonghyun había dejado de ignorarlo e incluso oyó que él quería una cerveza.


Jonghyun levantó el menú y lo revisó.


—Excelente. Hey, Taemin, ellos tienen entremeses, ¿Te gustan los camarones?


—Me encantan los camarones.


—Entonces yo lo pido. — Yoona dijo y levantó su delgado dedo y ordenó los platos.


—Esto lo pago yo — Jonghyun dijo, dándole su tarjeta de crédito al mesero cuando regresó con sus bebidas. Ellos tomaron sus cervezas y botanas y entraron a la sala del cine.


—¿Tu amiga es algún tipo de actriz o algo así? — Jonghyun murmuró mientras tomaban sus asientos. Ellos se sentaron al lado de Yoona, quien se acomodó el vestido antes de sentarse. —La gente se le queda viendo.


—Si, ella lo es.


—Pobrecita.


Taemin casi se ríe. Yoona adoraba la atención. Ella amaba ser famosa, aunque le había costado un divorcio público que había enfriado su entusiasmo por la fama y la fortuna. Con mucho amor y apoyo ella se recuperó bien.


—¿Realmente eres gay? — Taemin oyó que ella le preguntaba a Jonghyun mientras la comida llegaba en la ligeramente iluminada sala. Taemin no podía creerlo.


—Sí, soy gay — Jonghyun le aseguró. —Quiero casarme con Taemin.


—Mejor cásate conmigo —ella le dijo. —Soy genial en la cama.


—Lo siento cariño, pero te falta un pedazo de equipo para que pueda desearte.


Yoona soltó una carcajada que hizo que la gente del cine la viera. Taemin sintió un flash. Alguien le había tomado una fotografía, él estaba seguro de eso.


—No mires ahora, cariño. — Yoona colocó su mano en la rodilla de Taemin. —Eso estará en todos lados en cinco minutos.


Jonghyun se inclinó sobre ella, viendo a los ojos a Taemin.


—Es el destino, Taemin. Creo que estás destinado a casarte conmigo.


**************************************************************************


Jonghyun era muy atento en las citas y mostraba interés en la preocupación de Taemin por sus negocios.


—Te recuperarás —dijo después de que Taemin comentó que había dejado ir a tres jóvenes del elenco y a uno de sus dos asistentes. —Sé que podrás.


Taemin apreciaba la fe de Jonghyun en él. Jonghyun le ofreció veinticinco mil dólares como compensación por el matrimonio. — Espero un gran cheque con mis regalías dentro de algunas semanas. Tú serás la primera persona a la que le pagaré.


Taemin lo necesitaba—y quería—el dinero. Luchó contra la urgencia de declinar la oferta del dinero. Encontró que se sentía más y más atraído por el hombre que estaba desesperado por obtener su estatus legal. Aceptar el dinero ayudaría a Taemin a enfocarse en el hecho de que era un matrimonio por conveniencia y no por amor. No había incluso garantías en un matrimonio incluso si se casaban por amor, pero repentinamente mientras los días pasaban se encontraba con que empezaba a crecer una burbuja de esperanza de que Jonghyun podría ser para él...verdaderamente.


—¿Aún te sigues reuniendo con chicos que responden al anuncio? —le preguntó a Jonghyun una noche en que se encontraban disfrutando de la cena.


Jonghyun paseo en el pequeño balcón.


—Me he reunido con algunos chicos... Taemin, realmente, realmente quiero estar contigo.


Taemin sintió que el placer fluía en su sistema. —Yo también lo quiero.


—Bien, bien.


—No te reúnas con nadie más. Por favor.


Jonghyun dejó de pasear. Vio fijamente a Taemin.


—Está bien. Entonces no lo haré.


—¿Te agradaron?


Jonghyun frunció el ceño. —¿Qué? No, no, Taemin ...yo...esto se va a oír loco, pero realmente me agradas. Algunas veces no puedo recordar cómo era antes de que estuvieras alrededor.


—¿En serio? — Taemin se emocionó. —Me siento de la misma manera.


—Mierda. — Jonghyun se acercó a él y se acabó su copa de champagne.


Taemin se acabó la suya. Jonghyun los llevó hasta los cojines de su gran silla. La cual traqueó. Se inclinó hacia Taemin, podía sentir la dura erección de Jonghyun contra su muslo.


La mirada de Jonghyun era feroz.


Quería que Jonghyun lo besara...lo tocara. Quería sentir a Jonghyun en sus brazos, quería saborear cada segundo de tener sus dedos en la piel de ese hombre mientras el sol se metía en lo que se convirtió en un perfecto atardecer.


La mano de Taemin temblaba cuando la levantó para tocar la mandíbula y los labios de Jonghyun.


—¿Puedo besarte? — Jonghyun preguntó, besando la punta de los dedos, con su voz de la emoción.


—Por favor hazlo.


Jonghyun se acomodó arriba de él, sus cuerpos presionándose, sus ojos en los del otro, sus labios se tocaron, sus cuerpos registraron su mutua necesidad y...el deseo. El tentativo beso se volvió salvaje en segundos. Taemin se permitió entrar en la lujuria, sus sentidos girando, repitiendo un sonido que hacía eco en su cerebro como una molesta mosca volando en círculos. Eso era caliente. Era dulce. Era una locura. Era una divina transformación. Ese era el más increíble beso que Taemin hubiera tenido en su vida.


—Mierda —dijo Jonghyun, quebrando el beso para tomar aire. —¿Qué infiernos nos sucedió?


Comenzó el ritmo de nuevo. Segundos después, regresó con Taemin y tomó su cara entre sus manos. La caliente lengua de Jonghyun entró en la boca de Taemin mientras su duro pene se presionaba contra el abdomen de Taemin. Jonghyun lo besó y lamió su boca, Taemin era incapaz de pensar o de respirar más allá de la urgencia de apagar su sed con los besos de Jonghyun.


Jonghyun lo besó de nuevo y de nuevo.


—Oh, Dios —dijo separándose de sus brazos por segunda vez.


—Si —dijo Taemin, su boca ya extrañaba a Jonghyun.


—Dios, Taemin, por favor dime que te vas a casar conmigo, antes de que tenga un ataque al corazón aquí.


—Me casaré contigo —dijo Taemin.


Fue la más fácil promesa que hubiera hecho.


**************************************************************************


Taemin no podía esperar a que ellos estuvieran solos en la habitaicón, pero Jonghyun se quedó con sus boxers negros, así que Taemin también, se quedó con los suyos blancos. Ambos sabían que estaban limpios gracias a sus recientes exámenes de sangre. Él y Jonghyun podrían fácilmente hacer el amor sin condón. Caliente sexo salvaje estaría bien para él. También tenía una buena dotación de condones por si Jonghyun prefería hacerlo seguro, estaban seguros en el cajón en la mesa de lado de Taemin.


Ellos subieron a la cama igual que niños deseosos y se acurrucaron nariz con nariz. Se veían fijamente. Jonghyun lo besó. Taemin se derritió. Él cerró los ojos, sintiendo que Jonghyun se acercaba, amaba la sensación y el olor de él. Sus cuerpos se moldeaban con el otro, pero no fueron más allá de calientes y casi de cuerpo entero besos.


Jonghyun era el más asombroso hombre que había conocido.


—Es tan extraño lo conectado que me siento con él —le confesó a Yoona una mañana durante un descanso de la clase de pilates. Las clases en el costoso estudio habían sido el regalo de navidad de Yoona para Taemin.


—Nunca te he visto tan atontado —ella dijo.


—Si, y nunca me había sentido tan atontado.


—¿Te gustaría casarte con él independientemente del dinero?


—Oh, Dios, eso creo.


—Entonces, mi amor, necesitas seducirlo.


—¿Lo crees?


Ella lo vio fijamente. —¿Cuándo comenzaste a ser tan temeroso? dulzura. ¿Sabes que eres un hombre sexy?


Calientes lágrimas ardían en sus ojos. Él comenzó a ser temeroso en el preciso momento en que Choi Minho comenzó a ser su amante. Taemin había violado sus propias reglas de no actores y se permitió ir a la cama con Minho y el huyó llevándose su corazón. Ese infierno de relación de dos meses había seguido con mensajes de textos y entonces llegó el discurso de solo quiero que seamos amigos.


Minho, entre tanto seguía con su carrera y buscaba a Taemin para que le ayudara con el elenco de su debut como director. Taemin vio en eso la oportunidad de un trabajo y de renovar su relación, hubiera sido menos doloroso haber puesto su mano derecha sobre un fosforo encendido.


—Ve por él —dijo Yoona, poniéndose de rodillas para otra ronda de ejercicio.


Esa noche, Taemin se había ofrecido a preparar la cena y Jonghyun había aceptado.  


**************************************************************************


La fiesta de compromiso que les hizo Yoona fue una de las mejores noches de la vida de Taemin.


Taemin, aún no se acostumbraba a recibir cumplidos por su nuevo corte de cabello, se sentía radiante con su nuevo traje, un regalo de Yoona. Él nunca habría comprado algo tan extravagante, pero Yoona y Jonghyun habían ido de compras. Aparentemente, Jonghyun tampoco enloquecía con el estilo para vestir de Taemin.


Jonghyun estaba usando un traje gris-verde con una camisa negra. Se veía tan caliente, Taemin anhelaba llevarlo al cuarto de baño para un rapidín. Pensaba que ellos nunca se habían visto tan bien.


Él amaba que sus amigos cercanos y los padres de Taemin estuvieran ahí.


Jonghyun y la madre de Taemin se acomodaron en una esquina comiendo y bebiendo café con leche. Taemin se preguntaba qué habrían hablado y esperaba que no descubrieran el blog de Jonghyun.


**************************************************************************


El teléfono sonó de nuevo.


—¿Hola? —preguntó distraídamente. Temía que pudiera ser su madre quien estuviera mortificada por el blog.


—¿Taemin?


Una voz femenina.


—¿Si? —contestó tratando de ubicarla.


—Soy Kim Taeyeon.


—Hola Taeyeon. —Ella era una directora de casting rival. Taemin podía sentir su presión elevarse solo con oír su nombre. Ella le había ganado varios trabajos últimamente y el rumor decía que ella se encargaría del casting de la nueva película de Minho.


—Estoy leyendo las hojas del casting que Choi Minho me envió. Él me acaba de contratar para el casting de su película. De cualquier manera. Estoy segura de que esto es tu trabajo. Él me aseguró que hicieron juntos las listas, pero reconocí tu toque y algunos de tus nombres favoritos. ¿Hiciste tus las listas?


—Si, las hice.


—¿Te pagó por eso?


Taemin ahogó un resoplido. —No, no lo hizo.


—Estoy oyendo malas cosas acerca de que él se ha aprovechado de mucha gente y hace muchas promesas. ¿Sabes si incluso la película es real?


—¿Crees que no es real? —Eso lo sorprendió.


—Bueno, él dice que él tiene el financiamiento, pero no veo programaciones por ningún lado. Nadie sabe nada acerca de su misterioso inversionista. ¿Te mencionó algún nombre?


—No, no lo hizo. —La verdad era que Minho le había mencionado el nombre de unos ejecutivos de una compañía americana, pero no tenía la intención de repetir esa información. —¿Tiene un distribuidor? —le preguntó.


—No.


—No sé qué decirte, Taeyeon.


—¿Hace cuánto le hiciste este trabajo para él?


—Hace un par de meses. Oí que estaba buscando gente para el casting, pero entonces oí que tú habías obtenido ese trabajo semanas antes.


Ella guardó silencio un momento. Él la había agarrado en una mentira tan obvia. Probablemente ella sabía que él había hecho las hojas del casting hace semanas, pero estaba desesperada por obtener información. Ella había estafado a Taemin en su breve asociación. Ella era afortunada de que él siquiera hablara con ella.


Taeyeon suspiró. —Si...yo acepté la película, pero he estado trabajando hace tres semanas y no he visto ni un centavo. Sabía que la lista del casting no la habían hecho juntos. Sabía eso. Era demasiado profesional. —Ella hizo una pausa. Ella lo aduló y ahora le estaba dando tiempo para que respondiera, pero Taemin no respondía.


No sabía si el dinero que tenía Minho para esta película era real o era imaginario. Él no tenía deseos de tener algo que ver con esa conversación.


Taemin había mantenido su relación con Minho bajo llave y seguía teniendo buenos contactos con la gente en su negocio. Lentamente pero seguro la gente había comenzado a regresar con Taemin dado que Taeyeon se sobrevaloraba y amaba estar en las locaciones de las películas, coqueteando de pasada con el personal masculino. Ella también tenía tendencia a ocultar ciertas cosas que Taemin no hacía.


El silencio continuó.


—¿Sigues ahí? —ella preguntó.


—Sí.


—Oí que te vas a casar. Jonghyun parece ser todo un personaje.


—Él es asombroso.


—Me alegra que te vaya genial, Taemin.


—Gracias.


—Bueno, supongo que tendré que replantearme sobre el trabajo con Minho —ella dijo. —Entonces, ¿no sabes nada sobre su financiamiento?


—Seguro que no. Yo le hice un favor...sabes que Minho y yo trabajamos juntos hace años. Pensé que...bueno, pensé que cuando encontrara el financiamiento tendría el trabajo. De cualquier manera, buena suerte, Taeyeon.


—Si, gracias Taemin.


**************************************************************************


—¿Por qué estas nervioso? — Taemin preguntó cuando ellos llegaron a la pequeña área de recepción, pero Jonghyun estaba actuando muy extraño.


—Es solo, ya sabes...real —dijo paseándose frente a la chimenea. —Demasiado real. Taemin, ¿estás seguro de esto? quiero decir. ¿Estamos seguros?


—Si, estamos seguros. — Taemin realmente no estaba seguro. Ahora estaba seguro que estaba muy enamorado de Jonghyun, pero Jonghyun, se resistía a un contacto más íntimo digamos a una verdadera follada. Se veía aterrado. Taemin tomó las manos de Jonghyun entre las suyas. Jonghyun debería enamorarse de él. Tenía que hacerlo. Taemin estaba totalmente involucrado ahora. Jonghyun no podía echarse para atrás. Tenía en la punta de la lengua decirle a Jonghyun que a él no le importaba el dinero.


—Estamos juntos en esto.


Jonghyun finalmente sonrió, la luz alcanzó sus ojos. —Te ves realmente hermoso, Taemin. No creo que pueda mantener mis manos fuera de ti por mucho tiempo.


—Piensa en mí como tu trapo, Jonghyun. Soy tuyo.


—Hermoso. — Jonghyun sonrió. Se acercó y lo besó. Justo cuando Taemin estaba disfrutando del cálido abrazo, Jonghyun se apartó —Solo una cosa.


—¿Cuál? — Taemin veía los labios de Jonghyun los quería de regreso.


—Tus padres no tienen perro, ¿verdad?


—No. Murió. Murió hace un par de años. ¿Por qué?


—¿Su nombre era Bandido?


—¿Cómo sabes eso?


—Tu mamá sigue hablando con el fantasma de tu perro.


Taemin se rio. —Te advertí de ella y sus fantasmas.


—Si, lo hiciste. Supongo que es una buena cosa que no planeemos tener hijos propios.


—Bésame cuando digas eso, Jonghyun.


**************************************************************************


La ceremonia de la boda fue en el patio exterior, fue corta y dulce y seguida de una cena y un gran pastel de bodas.


—Perfecta elección —dijo Jonghyun, viendo al mesero servir ron alrededor del blanco merengue y prenderle fuego. —Es como tú, Taemin.


—¿Por qué dices eso? — Taemin arqueó una ceja mientras el flameado se apagaba.


—Bueno, el pastel es una sorpresa. Tiene helado, pastel en el interior, todo el mundo lo ama y tiene un llamativo exterior.


—¿Estás diciendo que soy llamativo?


—Estoy diciendo que estas para morirte, hermoso, y amo tu interior tanto como tu exterior.


—¿Por qué no pones eso en tu blog? — Taemin preguntó.


—Podría, rayo de sol. Podría.


**********


Solos en su habitación esa noche. Algo le sucedió a Jonghyun quien le quitó toda la ropa a Taemin.


—Traje condones —dijo Taemin.


—Bien. Los necesitaremos.


Solo con la luz de la chimenea y unas velas, estaba totalmente desnudo con Jonghyun por primera vez, parecía como un premio.


Jonghyun acarició el ahora rígido pene de Taemin.


—Hermoso —dijo Jonghyun. —Tu pene es encantador, Taemin.


Siguió acariciándolo y apretándolo, como si no creyera que fuera real.


Taemin quería recordar cada segundo de su primer real encuentro sexual. Jonghyun cargó a Taemin y lo llevó a la cama.


—¡Oh! —Algo duro estaba entre las sabanas. Taemin levantó el edredón. Un sartén. No, se dio cuenta que era una de las antiguas maneras de calentar la cama. Jonghyun se reía mientras la sacaba y la apoyaba contra la pared. Ellos se acomodaron entre las calientes sabanas, Jonghyun besó a Taemin mientras se acomodaba arriba de él.


—¿Estas bien? —le preguntó.


Taemin asintió.


—Bien. Porque no puedo follarte si te quebraste la espalda.


Se movió un poco, Taemin gimió cuando sintió el duro pene de Jonghyun contra su muslo. Jonghyun lo besó, se movió y lamió los pezones de Taemin. Él ya había descubierto que a Taemin le gustaba que chupara sus pezones, pero esta vez él le dio una atención especial.


—He estado soñando acerca de seguir el camino hacia el tesoro — Jonghyun murmuró, bajando la lengua hacia el ombligo de Taemin. Él se estremeció cuando repentinamente la boca de Jonghyun lo tragó.


—¡Aquí Bandido, aquí Bandido!


Oh, Dios... ¡mamá!


La madre de Taemin tocaba en la puerta. —¿Está bandido ahí? —Ella gritó.


—¡No! — Taemin bramó mientras Jonghyun lo tenía profundamente en su garganta. Sus manos entre el sedoso cabello de Jonghyun, se oyeron chillidos de un pequeño animal seguido por un coro de aullidos.


—Oh, mi Dios. ¡Bandido!


Taemin oyó a su madre gritar y sus pasos alejarse corriendo, dándole la dicha por la que había orado. Jonghyun lo chupaba con total abandono, Taemin era incapaz de contenerse más. Las manos de Jonghyun trabajaban en las bolas de Taemin y su culo, acariciándolo, tocándolo, tentándolo al más asombroso orgasmo. Se corrió duro en la insistente boca de Jonghyun.


Quería corresponderle a Jonghyun, pero Jonghyun apartó sus manos, escupió en el agujero del culo de Taemin. Comenzó a lamer y a chupar el agujero de Taemin, sosteniendo su trasero entre sus manos. Taemin buscó los condones que había comprado.


Jonghyun se colocó uno, murmurando —Voy a follarte, Taemin. Voy a tenerte. —Él se empujó dentro de Taemin, presionando su cuerpo hasta que él sintió que Jonghyun había entrado profundamente, sintió la dura presión en su ombligo. Un momento de agudo dolor seguido de un estremecimiento de placer.


El frio centro, tanto tiempo guardado, encerrado y dolorido, dio paso a una profunda y deliciosa alegría que abarcaba todo. Sentía que el fuego lamía las puntas de los dedos de sus pies. No podía creer que se iba a correr de nuevo justo mientras Jonghyun se corría en su interior, liberando un rugido, una sola palabra burbujeaba de su boca una y otra vez.


—¡Taemin!


**************************************************************************


Ellos tomaron un baño en la tina Pasaron el día en su recamara, disfrutando comer en la cama, ordenaron servicio al cuarto. Ellos eligieron hamburguesas para comer y filete para cenar, follando en cada oportunidad. Se quedaban dormidos entrelazados, la segunda noche, Taemin creía que había encontrado su alguien especial. Creía que así era.


Pero en la mañana cuando era tiempo de ir al aeropuerto, Jonghyun estaba menos caliente de nuevo.


—Vamos tarde —seguía diciendo. —Vámonos, Taemin.


La ternura y la intensidad de su pareja parecía que se había perdido en el frenesí de Jonghyun, quien tenía un ataque de pánico.


—Llegaremos. Tenemos mucho tiempo —decía Taemin, pero Jonghyun no regresaba a la cama.


Ellos tomaron una ducha juntos y Jonghyun se calmó, permitiendo que Taemin le lavara la espalda y lo sostuviera.


—Tú me aterrizas, Taemin, realmente lo haces. — Jonghyun se aferró a él. Taemin estaba sorprendido de que Jonghyun estuviera temblando. Repentinamente abrió la cortina de la ducha. —Tenemos que irnos bebé. Hay que moverse.


**************************************************************************


- ¿Quién es Choi Minho? — Jonghyun le preguntó a Taemin la siguiente mañana.


Taemin había tenido una noche difícil. Jonghyun no había querido follar desde que llegaron de la luna de miel. Él dormía desnudo con Taemin, y ahora él le preguntaba sobre Minho.


—Él es un actor.


—Lo sé. Kibum lo mencionó el día que te conocimos. Entonces, ¿Qué relación tiene contigo?


—Salimos un tiempo.


Jonghyun lo vio fijamente.


Taemin suspiró. —Tuvimos una relación. Eso terminó hace mucho tiempo. Él también...bueno, él me jodió algunos buenos negocios. ¿Por qué quieres saber de él?


—Me envió un email. Ha estado leyendo mi blog. Quiere hacer una película basada en mi novela. 


—Oh, no. Él realmente es algo especial. Él ni siquiera tiene recursos para su proyecto actual.


—Dijo que quería verme para comer.


Taemin lo veía fijamente, impactado. —¿Comer? ¿Estás bromeando?


—¿Por qué te molesta? Son negocios.


Taemin luchaba con sus demonios interiores.


Jonghyun se veía enojado. —Deja de verte tan enojado. Solo te dije que iremos a comer. Necesito que algo suceda, Taemin. Una película es algo fantástico.


—¿Una película? Quiere más que eso.


—Mierda, Taemin. Estoy enloqueciendo. ¿Qué si algo sale mal y ellos niegan mi aplicación para la visa? Entonces ¿Dónde estoy?


Taemin puso una mano en el brazo de Jonghyun. —Cariño ¿por qué estas preocupado? Nos hemos casado hace dos días. Ellos no te echaran.


—No es eso. Necesito que algo mágico suceda con mi carrera.


—Necesitas terminar de escribir el libro.


—Si, eso también.


—Entonces, quédate en casa y termínalo. Tengo una reunión en media hora.


Le dio un beso de despedida a Jonghyun, no le gustaba la expresión de distracción en su esposo.


**********


Jonghyun no lo llamó en toda la tarde. Taemin se había acostumbrado a sus constantes llamadas telefónicas durante todo el día. Él se fue a casa después del trabajo y se sorprendió que ni siquiera estuviera Kibum. Se ocupó en limpiar el departamento, sorprendido de encontrar confeti en el suelo.


Trató de no preocuparse, trató de no sentirse como un tonto. Cuando Jonghyun finalmente se apareció eran las nueve, arrastrando a Kibum, Taemin se calmó.


— Minho nos invitó a ver una película —dijo Jonghyun. —Estaba fantástica. Él es muy divertido.


Taemin no podía creer lo que estaba oyendo.


—¿Por qué no me llamaste para decírmelo? —le preguntó.


—Porque, sabía que no te gustaría.


—¿Pasaste todo el día con él?


—Si, pero Kibum fue conmigo a ver la película. — Jonghyun se oía a la defensiva. Kibum seguía de pie moviendo la cabeza de uno a otro mientras Taemin y Jonghyun tenían su primer desacuerdo.


—Así que no estuve solo con él. Minho realmente es agradable, Taemin. Y él es serio acerca de la opción de mi libro. ¿No es eso fantástico?


—Totalmente. — Taemin forzó una sonrisa. Él tenía que calmar al monstruo verde de los celos.


—Quería invitarte, pero Minho pensó que podría ser incómodo.


Taemin no dijo nada. Después de un momento, Taemin le dio la actuación de su vida. Manteniendo un tono de voz ligero, dijo: — Entonces, ¿quieres que vayamos por algo para cenar?


—Nosotros comimos con Minho. —Por primera vez, Jonghyun parecía incómodo. —Mira, él me invitó a salir mañana en la noche con algunos de sus socios de negocios.


—Lo hizo, ¿por qué?


—Bueno, él piensa que debería de reunirme con esa gente.


—¿Tienes una cita con él? — Taemin no lo podía creer.


—No...exactamente. Son negocios.


—Nos acabamos de casar.


—Lo sé, Taemin, lo sé. Mira, quiero la oportunidad para mi libro.


—Quieres una cita con él.


—Él es malditamente sexy, lo sabes. Es agradable. Solo quiero divertirme, Taemin. Él es una gran famosa estrella de cine.


—Que me trató como una mierda. —justo como lo haces tú.


Taemin controló sus emociones, justo cuando se dio cuenta que Kibum había dejado el cuarto.


—Son solo negocios, bebé. —La voz de Jonghyun era suave.


—Supongo que iré a buscar algo para cenar.


—Me iré a dormir —dijo Jonghyun, parecía aliviado de que Taemin no presionara con el tema.


Él luchó contra sus sentimientos de fracaso y pena. Se preguntaba qué había sucedido desde la noche de la boda, qué había alejado a Jonghyun de él. Entrando directamente a los brazos del imbécil de Minho.


**************************************************************************


Despertó temprano, Jonghyun estaba extendido al lado de él. Taemin trató de salir de la cama sin hacer ruido, pero su marido despertó y lo vio fijamente. La mano de Jonghyun lo agarró.


—Jesús, Taemin, odio esto.


—Yo también.


—Lo siento tanto. Soy un total imbécil. Te prometo que mi interés en Minho es totalmente de negocios. Él es tan malditamente sexy...


—Si y no quiero tener esta conversación de nuevo.


—Bebé, no me gusta esto. Estoy tratando de disculparme. Le dije que si él quiere la opción del libro él va a tener que poner la bola a rodar. Eres demasiado bueno para mí, Taemin. No quiero joder las cosas entre nosotros.


Taemin se descongeló un poco. —Está bien. Eso es genial. También te extraño, Jonghyun.


Jonghyun subió arriba de él. Las manos de Jonghyun en él lo volvían loco. Lo extrañaba tanto.


Diez segundos después, Jonghyun estaba chupando su pene. Taemin amaba la sensación de la boca de su esposo en él.


Repentinamente, Jonghyun dejó de hacer lo que estaba haciendo.


—Mentí en mi blog, Taemin. Estoy asustado.


—¿Sobre qué mentiste? — Taemin tenía un mal presentimiento, sospechaba que era la parte en la que decía que amaba a Taemin.


—Dije que ya escribí tres capítulos. No he escrito una palabra.


El alivio de Taemin fue evidente. —Solo tienes que escribir.


—No puedo. Tengo un bloqueo de escritor.


—¿Cuánto tienes escrito?


—Una página.


—¿Quieres leérmela?


—¿Lo quieres? — Jonghyun saltó de la cama. La decepción de Taemin por la mamada interrumpida fue rápidamente reemplazada por los asombrosos tres cortos párrafos de una sola página.


—¿Eso es todo? Jonghyun. Tienes que volver a empezar.


—No puedo.


—¿Qué te bloquea?


—Estoy preocupado por las regalías de mi primer libro. Recibiré el cheque pronto. Todo en lo que puedo pensar es ¿qué tal si no es tan grande? Te prometí veinticinco mil dólares.


Taemin lo vio fijamente. —Es por eso que es todo esto, ¿verdad? Maldición, Jonghyun, ni siquiera pienses en eso. Sé que me prometiste el dinero y si, esa fue una excitante idea, pero no puedes dejar que interfiera con el proceso.


Jonghyun lo veía fijamente. Una serie de emociones cruzaban su cara.


—Oh, joder, Taemin. —Enterró la cara en sus manos.


— Jonghyun ...háblame. —Él frotó reconfortantes círculos en la espalda de su marido. —¿Qué sucede?


Su marido levantó la cabeza. —Ya las recibí. Mis regalías...es una mierda. Cinco mil dólares. ¡Cinco mil miserables dólares!


Taemin se rio. —Cariño...tienes que aprender cómo funcionan los negocios. Tienes que darte un poco de crédito. Cinco mil no está nada mal para el primer cuarto, es enorme, realmente, considerando el trabajo promedio. Un escritor exitoso gana doce mil dólares al año por escribir.


—Mi agente me dijo lo mismo.


—Vas a estar bien, pero tienes que levantar la cabeza y escribir. Un escritor escribe.


—Yo...yo no puedo creer esto. Eres fantástico. ¿No estás enojado?


—No. Estoy más enojado de que salgas con Minho.


—No lo haré de nuevo. Trató de seducirme, pero le dije que estábamos casados. — Jonghyun se acomodó entre los brazos de Taemin. —Quiero su película, bebé. Quiero que sea exitosa.


Taemin lo entendía. Sostuvo a Jonghyun hasta que sintió que su hombre se calmó. Taemin trató de no tomar el estrés de Jonghyun.


—Tengo que tomar una ducha e ir a trabajar. Prométeme que empezarás a escribir.


—Lo sé, puede que necesite trabajar todo el fin de semana. Estoy atrasado.


Taemin le dijo a Jonghyun que él se quedaría con la hija de Yoona las siguientes dos noches.


—¿En serio? — Taemin trató de no sentirse ofendido de la felicidad que mostraba Jonghyun. —No quería decirte nada porque te adoro y todo eso, pero Taemin, no estoy acostumbrado a estar alrededor de alguien todo el tiempo. Creo que un tiempo separados puede ser bueno para ambos.


Taemin asintió y se dirigió a la ducha, pensando que eso era lo último en el mundo que quería.


**************************************************************************


Paseó a los perros. Dejándolos salir a orinar, urgiéndolos a regresar. La temperatura en la noche bajaba drásticamente. Se estremeció repentinamente, deseando que Jonghyun estuviera aquí. Se debatía sobre llamarlo, pero temía interrumpir su trabajo. Se sorprendió al ver las luces de un carro dirigiéndose a la casa de Yoona. Estiró el cuello para ver, pensando que sería el carro de alguien que regresaba de la ciudad.


No lo era. Era asombroso, era Jonghyun.


Taemin se acercó a la propiedad, a la puerta de hierro frente a él. Jonghyun se estacionó, apagó las luces y corrió hacia él.


—No puedo hacer esto, Taemin. No puedo hacer esto —le gritó.


Jonghyun se veía terrible.


—¿Que sucede? —trató de acercarse y confortar a Jonghyun, pero su marido se alejó, moviéndose de un pie al otro frente a la puerta. Los perros se enredaban en sus piernas, tratando de salir.


—Entra - le dijo.


Jonghyun entró, caminando por el vestíbulo. Taemin temía despertar a la menor por la manera en que su voz seguía subiendo hasta estar cerca de la histeria.


—He estado de tratando de imaginarme por qué no puedo escribir. Taemin. Finalmente encontré el problema. El problema eres tú.


—¿Yo? Pero yo te di tu espacio, Yo...


—Ese es el problema. — Jonghyun se oía gruñón. —Yo solo tengo bloqueo como escritor cuando estoy enamorado y Taemin, había pasado tanto tiempo que lo había olvidado. ¡Estoy enamorado de ti!


—¿Es ese un problema? — Taemin no podía quitar la sonrisa de su cara.


—No sé. ¿Es un problema?


—No para mí, Jonghyun. También te amo.


—¿Por qué no me lo dijiste?


—¿No me case contigo?


—Si —dijo Jonghyun. —Me di cuenta en nuestra luna de miel que estaba en un gran problema. Estar en la cama contigo es peligroso. Eso bloquea todo lo demás. Estar fuera de la cama...estar lejos de ti es el peor tipo de tortura. No duermo sin ti, Taemin. No puedo escribir sin ti. Te necesito.


Taemin jaló a su marido por la manga de su suéter.


—Vamos a la cama ahora, ¿me oyes?


Ellos se apresuraron al cuarto de Taemin, el cuarto de huéspedes. Yoona lo había dejado confortable con dos juegos de toallas, jabones, chocolates y un pequeño paquete de condones.


—Nosotros no necesitamos eso. — Jonghyun lo empujó a la cama. —Cuando te folle esta vez no quiero que nos separemos. Te amo, Taemin. Siento mucho... siento lo de Minho.


—No menciones su nombre.


—Lo siento. — Jonghyun se arrodilló entre sus piernas. —Debí darme cuenta de que estabas celoso, Kibum piensa que soy un imbécil...y lo soy, lo sé.


—¿Vas a compensarme? — Taemin pensó que su corazón podría explotar antes de que Jonghyun entrara en él de nuevo.


—Voy a pasar el resto de mi vida intentándolo. — Jonghyun le murmuró.      


Jonghyun apretó sus labios contra los de Taemin. Con un suspiro, su esposo se abrió para él. Jonghyun usó su lengua para acariciar todas las superficies que podía alcanzar. Taemin respondió lamiendo y chupando la lengua y los labios de Jonghyun a cambio.


Sólo besar a Taemin no era suficiente. Jonghyun quería tocarlo todo de él, sentir su piel cálida bajo sus dedos. Se retiró y comenzó a quitar a Taemin su jersey y su camisa. Taemin le devolvió el favor y muy pronto ambos estaban desnudos.


Jonghyun dejó brevemente a Taemin para conseguir lubricante, empujándolo debajo de una almohada cuando se unió a su amante que esperaba bajo las sábanas. Con los cuerpos apretados juntos, su piel desnuda rozando todas las partes, desde el pecho hasta la ingle, ellos comenzaron a besarse y acariciarse mutuamente y no se detuvieron.


—Te quiero—Las pupilas de Taemin estaban dilatadas por la lujuria y estaba moliendo su dura polla contra el muslo de Jonghyun en movimientos sensuales y lentos.


Jonghyun tomó el lubricante, lo abrió y cubrió sus dedos sin siquiera mirar.


—¿Me quieres en mi espalda? — Taemin sonrió de oreja a oreja cuando las caderas de Jonghyun brincaron contra él—. A ti te gusta que hable de estas cosas, ¿no?


—¡Oh, Dios! Sí me gusta. — Jonghyun no perdió tiempo en ir por la pequeña abertura de Taemin.


—Ahhh, eso se siente tan bien. — Taemin presionó contra el dedo de Jonghyun por lo que su punta se deslizó dentro—. Mucho mejor que un dildo.


—¿U... un dildo? — Jonghyun casi se corrió con el pensamiento de Taemin jugando con él mismo así. Un día, iba a pedir a su amante que le mostrara exactamente lo que había hecho. La imagen mental que evocaba era demasiado sexy para las palabras.


—Sí, bueno, ¿qué iba a hacer? — Taemin se había ruborizado con una sombra profunda de rojo—. No iba a dejar que otro hombre me tocara ahí.


—Estoy contento. — Jonghyun tomó una respiración profunda para recuperar el control.


Una vez que estuvo seguro de que había evitado su orgasmo, por el momento, cuidadosamente preparó a Taemin, sin querer hacerle daño. Pronto se dio cuenta de que iba a perder su propio control incluso antes siquiera de hacerlo en su interior. Su amante estaba ondulándose y gimiendo debajo de él cuando insertó dos, luego tres dedos y lentamente lo follaba.


—Por favor. Ahora. Te necesito. — Taemin jadeó por aire, moviéndose frenéticamente en los dedos de Jonghyun. Centrándose en la tarea con cada poquito de fuerza de voluntad que le había quedado, Jonghyun se posicionó a sí mismo en el agujero de Taemin que le esperaba. Era difícil esperar, pero quería que Taemin tuviera algo que decir también.


Cuando Taemin asintió con la cabeza, empujó dentro, observando cuidadosamente a su amante a cualquier señal de molestia. Pero Taemin gimió y se movió hacia arriba para que se deslizara dentro mucho más rápido de lo que había planeado. Taemin silbó con la penetración repentina, pero agarró las mejillas del culo de Jonghyun para retenerlo en su interior.


—Mierda. Tan bueno. Sólo dame un momento. — Taemin volvió su rostro para un beso.


Jonghyun se inclinó para complacerlo.


Cuando el beso se profundizó y Taemin comenzó a moverse, Jonghyun supo que era hora. Retrocedió lentamente, haciendo gemir a Taemin, y volvió a empujar dentro lentamente. Taemin arqueó su espalda y se reunió con él empuje a empuje, mientras trabajaban hacia la satisfacción.


El sudor empezó a cubrir sus cuerpos y Jonghyun no pudo resistir el sabor. Lamió su camino a lo largo del cuello de Taemin, siguiendo la clavícula en su hombro y chupó la piel caliente hasta que Taemin comenzó a retorcerse. Jonghyun estaba totalmente perdido en el momento, el olor y los sonidos sensuales que su amante estaba haciendo elevaron su excitación aún más.


Sabía que no sería capaz de aguantar mucho más tiempo cuando sus testículos apretaban y la sensación de hormigueo en la base de la espalda comenzó a propagarse hacia arriba. Se estrelló contra Taemin con todo lo que tenía, con duros y profundos empujes, haciendo a Taemin jadear. Finalmente, su amante echó atrás la cabeza.


—¡Mierda! — Taemin chorreó caliente semen entre sus cuerpos, y su canal se contrajo alrededor de la palpitante polla de Jonghyun en un apretado agarre que era irresistible.


—¡Taemin! — Jonghyun perdió su ritmo y cedió a su propia necesidad.


Se sacudió y se estremeció cuando se corrió en el más poderoso orgasmo que podía recordar. Temblando de la intensidad de sus sentimientos, se aferró a Taemin como el único punto fijo de su existencia. Cuando terminó, salió colapsó, medio cubriendo el cuerpo caliente de Taemin.


—Te amo. —La voz de Taemin era un suave susurro en la oreja y el brazo que rodeaba su cintura, presionándolo contra el cuerpo de su amante, se sentía como el cielo.


—Te amo, también. — Jonghyun presionó su rostro contra el cuello de Taemin y aspiró el olor de sudor y sexo.


Este hombre, este cuerpo caliente y de delicioso aroma, el amor correspondido de Taemin, eso era el verdadero hogar de Jonghyun.


Taemin acariciaba su espalda con movimientos perezosos. Jonghyun sonrió y apretó su agarre alrededor de la cintura de Taemin


Taemin presionó un beso en la sien de Jonghyun —. Este lo único que quiero celebrar contigo.


 


FIN

Notas finales:

Hasta la próxima,

Gracias por leer :)


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).