Toco la puerta del salón e ingreso luego de que el maestro asienta de inmediato con una sonrisa. Está tratando de coquetear, como siempre.
-Oh, Nuestro Young Saeng al parecer hoy no está de humor – suspiro ignorándolo por completo. Escojo las carpetas del fondo y me hundo en ellas esperando no ser molestado hasta que termine la salida. Miro por la ventana. Está lloviendo como si quisiera hacerme compañía porque mis lentes negros solo están ahí por una razón.
-¿El examen será mañana? – no escucho su respuesta pero sé que es afirmativa porque todos empiezan un pequeño alboroto.
-Vamos chicos, chicos. Será algo fácil si es que atendieron a clases.
-Definitivamente estoy perdido – es un frase que causa risas en todos pero no en mí. Quiero llorar.
- Young Saeng ponte al día con los apuntes – dice segundos antes que el reloj por fin marque la hora de salida, vuelvo a ignorarlo y está vez es notorio - ¿Acaso viniste de un funeral? Cambia de cara muchacho – lo ha dicho con intención de coquetear de nuevo aunque no sé cómo esa frase podría ayudar en algo. La clase está esperando mi siguiente jugada que no resulta ser más que la verdad.
- ¿Cómo lo supo? Mis padres estarán muy agradecidos por sus respetos.
*
No he podido dormir en todo el viaje, que han sido como 15 horas. Hyun Joong está a mi lado y parece que descansa con un bebé. Hwang Bo está al otro y al igual que su prometido se ve tranquila. Me he visto obligado a sentarme en medio o sino habría presenciado besos el 99% del tiempo y eso es simplemente asqueroso.
Entre los tres soy el único que le tiene miedo a los aviones o tal vez al destino. Hay una voz que anuncia la llegada así que me encargo de despertar a ambos, para mi buena apenas toma unos segundos.
-Vamos a casa de Mark. No puede negarle nada a su hermanito – Hwang Bo y yo reímos por ese comentario. Hyun Joong y su hermano están supuestamente peleado pero este se aprovecha de eso a veces. Enciendo mi teléfono y no me sorprendo al encontrar tantos mensajes de un solo número.
-Yo ya aparté algo. Los veo luego.
-¿En la… despedida? – miro a Hyun Joong con seriedad. He vuelto a Corea por el trágico accidente pero apenas lo había mencionado. No me causa tristeza asi que eso me hace sentir muy mal.
-Cla…
-Ya vámonos – Hwang Bo se lo lleva y yo me siento infinitamente agradecido como siempre. Ella es la mejor. Vuelvo a dirigir mi atención al teléfono. Marco el número ansioso y cuando responden sonrió.
*¿Llegaste? – asiento y respondo cuando, como idiota, comprendo que no me está viendo.
*Hace apenas unos minutos – puedo escuchar sus sonrisitas a través de la línea - ¿Estás en el trabajo?
*Si y estoy muriendo. ¿No puedes volver?
*Se supone que me fui para que te quedaras a cargo – ambos reímos - ¿Aún es fecha indefinida?
*Si. No sé cuándo me desocupe aquí pero no tomará mucho.
*De acuerdo – entonces bostezo – No dormiste – es una afirmación que no contradigo por nada del mundo – Ve al departamento de inmediato y descansa MUCHO.
*Como digas.
*La cremación es… mañana – dice como si estuviera leyendo su agenda, que es seguro lo que hace – Duerme todo el día.
*Suena bien Hara – puedo ver su sonrisa incluso a miles de kilómetros.
*Te extraño Kyu – y rio porque esperaba esas palabras, de hecho pensé que sería como me saludara.
*Y yo a ti.
Alguien está anunciando de nuevo que los vuelos están llegando y pienso que estoy en Corea una vez más. Me siento culpable al decirle a Hara aquello pero no porque sea mentira sino al contrario.
*Salúdame a tu hermano – dice apresurada antes de cortar y… la culpa crece.