Estabas sumamente ocupado tratando asuntos de suma importancia en tu empresa, nuevos negocios, nuevo socios, nuevos problemas que resolver, sonó tu celular, ni si quieras tomaste la llamada, con solo ver el numero suspiraste, tomaste tu inseparable gabardina y saliste de oficina rumbo a una sola dirección, bajaste de tu lujoso auto deportivo, dirigiste tus pasos rumbo al tercer departamento del quinto piso, abriste la puerta como si fuera tu casa, no viste a nadie en sala ni escuchaste los reclamos del inquilino, supusiste que estaría en su habitación.
- Hola, Ka…iba, se escuchó una voz muy tenue, tu solo suspiraste, (no de nuevo) fue lo que pensaste, te acercaste al bulto que se escondía debajo de las cobijas y las jalaste para dejar ver a un chico de cabello claro y ojos color miel llorando.
- Tranquilo cachorro, todo está bien, le susurrabas mientras sentías como sus lágrimas, mojaban tu camisa,- sabes perro, esta camisa vale más de lo que tu gansa en un año y la estas arruinando, lo sentiste temblar y escuchaste una ligera risa, -cállate gato roñoso o también me limpiare los mocos, decía Joey mientras se limpiaba las lágrimas.
Viste un ligero moretón que comenzaba a formarse en su cachete derecho, -cachorro,- no me mires así Seto, estoy bien
- Bien ese malnacido volvió a golpearte ¿ahora por qué fue?
- Ha le dije que se quedara en casa, que no fuera de fiesta, y él se molestó.
- Y el golpe fue
- No es nada, perdón por sacarte de tu empresa
- ¿Por qué fue el golpe? Le miraste con tus ojos fríos, esa mirada que no aceptaba un no por respuesta y el cachorro comenzó a llorar de nuevo.
- Seto, porque, yo lo amo, porque se tiene que ir por ahí, acostándose con cualquiera que le dé la gana.
- Y entonces te golpeo porque le reclamaste su infidelidad.
- No fue porque le dije que yo aria lo mismo, que me acostaría con el primero que me invitara una copa en un bar, y me golpeo, e insulto y después se fue.
Volviste a abrazar a Joey, olía tan bien, a manzanilla con un toque de canela, amabas el olor de tu cachorro, -Ya todo está bien, comenzaste a besar las lágrimas de Joey, su golpe y por ultimo sus labios, mientras comenzabas a acariciar su cuerpo por encima de la ropa.
- No Seto, para, yo no soy como él
- Y sin embargo me llamaste
- Porque haa, sentías como Seto comenzó a besar tu cuello un punto muy sensible en ti, los besos de seto comenzaban a ser peligrosos y su manos se deslizaban dentro de tu ropa y tú solo te limitabas a dar gemidos quedos.
- Cachorro, te are el amor, esa es la diferencia, entre tú y el, así que no vuelvas a decir que eres como el idiota de Tom.
Comentase a besar a Joey en la boca y fuiste bajando poco a poco, mientras levantabas su camisa de la pijama, miraste sus lindos pezones, - cachorro tus pezones, parecen unas pequeñas florecitas, me pregunto si sabrán a miel, decías mientras los besabas,- auch, me mordiste, - es que eres delicioso, ¿me pregunto si aquí también? bajaste hasta su entre pierna, comenzaste ha hacerle una buena mamada - ha SETO, haaa, si sigue mmm, seto bajo un poco más, justo donde está tu entrada, metió su lengua dentro de ti, escuchar los gemidos del cachorro eran la gloria, seto sustituyo su lengua por sus dedos, primero uno, luego dos y tres - cachorro no aguanto más, entrare en ti, lentamente, sentirás cada centímetro de mí, y cuando este dentro comenzare a moverme primero lento, hasta que comiences a rogarme y solo entonces comenzare a moverme más rápido, mientras de susurro al oído lo cálido y apretado que eres, y …- haaa Setooooo, Joey se corrió mientras narrabas, lo que le arias y aprovechaste el clímax para entrar en él, y cumplir tu amenaza, -Joey voy a correrme, - dentro, Seto, lléname de ti. Y te corriste dentro de Joey, mientras él se corría por segunda vez en medio de ambos, el cansancio los venció, quedándose dormidos abrasados.
Te despertaste primero que el cachorro y desististe tomar una ducha, antes de irte a tu mansión, pero esta vez te llevaría a Joey contigo a si sea a rastras, ya estabas arto que el imbécil de Tom, se aprovechara del amor que le tenía Joey.
- Eres una puta, Joey, escuchaste que alguien grito, y yo que te traía flores, y mira con lo que me encuentro a mi pareja desnuda en nuestra cama, llegaste a tiempo para detener el golpe que pretendía darle Tom al cachorro, tu ira se incrementó al ver a Joey en el suelo desnudo llorando a los pies de Tom, y sin pensarlo le diste un buen golpe de lleno en la cara, tomaste la cobija de la cama y cubriste a Joey, - tranquilo cachorro, aquí estoy yo, - Joey, que haces, mira este imbécil me golpeo,
- To…m, vete
- ¿Qué estás diciendo Joey?
- Vete, lárgate has lo que se te dé la gana, ya no te quiero volver a ver en lo que me resta de vida, yo te engalle me acosté con otro en nuestra cama, y sabes que no es la primera vez que lo hago, siempre que tú te vas y me siento solo llamo a Seto y el viene y me hace sentir amado, luego yo lo corro diciendo que no está bien lo que hago, pero tú también lo haces.
- Yo te amo Joey
- Y yo también te amo Tom, fuiste mi amor, pero, volteaste a ver a Seto, él es mi primer amor, además Tom, tu no me amas a mí, amas la posición y el estatus que te di, y mírame, te has llevado todo de mi Tom, vete por favor, no hagas más difícil esto,
- Joey, no me iré yo te amo, déjame demostrártelo, ya no iré a fiestas, me quedare en casa.
Viste dudar al cachorro, y lo abrazaste, como diciendo un no lo hagas
- Vete, Tomas, por favor vete, si es verdad que me amas vete, decías mientras llorabas.
- TE ARREPENDIRAS. Fue lo que grito Tom antes de irse
- Se fue Seto, lo perdí
- Ya tranquilo, yo curare tu corazón, vámonos
Seis meses después
- Seto, vallamos a cenar al restaurante plata, le comentabas a tu pareja, cuando viste que se acercaba un chico al auto de enfrente, un prostituto pensaste, le pusiste más atención y lo reconociste era Tom.
- ¿Qué pasa cachorro?
- Nada solo pensaba, que sería bueno ir a vacacionar a noruega que ¿dices?
- No suena mal, sirven buenos quesos, bien sabias que tomas estaría en esa calle, pues tu personalmente te encargaste de arruinarle la vida, que esperaba que te quedaras con las manos cruzadas después de maltratar tanto a Joey, ja, le cerraste todas las puertas al bastardo y solo le dejaste abierta la ventana a la prostitución, si tanto quería abrirse de piernas le darías el gusto, volteaste a ver a tu cachorro, sonreíste, eras feliz muy feliz.
fin