Podía sentir un liquido cálido correr pesadamente por su cara. Tenia ganas de tocarse para ver de donde provenía, pero un dolor en el costado izquierdo de la frente le dio a entender que era de ahí. De pronto otro punzante dolor, esta vez de en su barriga le hizo saber que mas cosas estaban mal, entonces vio su enorme vientre y admiro con sorpresa que estaba embarazado.
¨Mierda¨
Miro a su alrededor y vio un hombre a través del cristal, estaba en un taxi recién estrellado y el conductor no se veía mucho mejor. Trato de enfocarse en los detalles rápidamente pues por el dolor amenazaba con desmayarse y eso no seria bueno para el.
Vio letras escritas en ingles, eso indicaba que no estaba en Japón, pero igual podía leerlas. eso resulto todo un descubrimiento, pero lo paso por alto. Volvió al recorrido del lugar, vio una pequeña TV que marcaba las 00:26 11-01-2018. Bien, estaba lucido así que eso era bueno, tenia que pedir ayuda antes de que algo pasara y.... Sus pensamientos se vieron interrumpidos por otro cálido liquido que lo mojaba, pero esta vez era toda su entrepierna lo que estaba mojado. Con miedo se movió un poco y pudo sacar una mano de debajo de si, con mucho esfuerzo abrió la puerta y se arrastro lo mas que pudo. La calle estaba muy fría, cubierta de nieve y muy solitaria. Cada vez mas le dolía la enorme barriga y temía que su bebe naciera allí mientras el no podría hacer nada.
A lo lejos pudo divisar una figura que se acercaba corriendo, no sabia cuanto tiempo había pasado, pero estaba seguro que esa persona le ayudaría, así que sin mas miedo se dejo llevar por la paz que le embargaba.
Despertó muy aturdido, no sabia cuanto tiempo llevaba en aquel lugar, pero estaba seguro que había pasado mucho tiempo. La ultima vez que estuvo consciente le dolía todo el cuerpo, y a penas podía pensar por el fuerte golpe de su cabeza. Instintivamente llevo su mano derecha a su cabeza y noto que solo le dolía ligeramente al tocar la pequeña cicatriz que quedaba. Entonces guio asombrado la mirada a su estomago y vio que ya no estaba aquella enorme tripa. Con dificultad se puso de pie y fue al baño donde por primera vez veía lo que parecía ser su aspecto; era un chico de piel ligeramente bronceada con el pelo rubio que le llegaba hasta el cuello, paso la mano por su pelo y sonrió al sentirlo rozar su mejilla, eran rebeldes y muy suaves. Noto en sus mejillas unas venditas que cubrían su cara. Se pregunto si tendría ahí marcas del accidente. Miro entonces sus ojos azules, eran realmente hermosos, pero se sorprendió ya que por alguna razón su cerebro esperaba ver unos ojos negros profundos. Entonces un fuerte dolor en todo su cerebro lo hizo flaquear, se agarro del lava manos y grito de dolor.
No podía levantar la cabeza siquiera, pero sintió como unas gentiles, delicadas y blancas manos lo guiaban hasta la cama. La persona le tendió un vaso con agua que tomo a prisa y cerro los ojos mientras se recostaba.
-ya, ya. Tranquilo que todo pasara– decía una voz serena en japones que lo ayudo a relajarse, y como por arte de magia el dolor fue cesando-
Respiro profundo varias veces hasta sentirse completamente calmado, entonces abrió los ojos y su mirada se encontró con unos ojos color aguamarina muy relajantes. Continuo reconociendo los detalles de aquella persona, cara fina, blanca y sonrojada, risos rojos desordenados por todas partes que daban la impresión de que si fuesen peinados estarían sobre sus hombros, tenia unas ojeras enormes que trataban de ser disimuladas con maquillaje y su pequeña boca tensa en una linea recta. Entonces trato de buscar en su banco cerebral datos pasados de esta persona y entonces lo supo, no lo conocía, y mas preocupante aun, no se conocía a si mismo. Había estado tan sorprendido por las cosas que no se había percatado de su poco conocimiento de todo.
-¿Estas bien? Sasuke salio un momento, pero imagino que volvera pronto. - Dijo tratando de fingir indiferencia – Pensé que no sobrevivirías. - contrastando con su voz acusadora su mirada estaba hacia otra parte, noto que una fina lagrima salia solitaria.
-Disculpa, puedes por favor llamar al doctor? - pregunto formalmente en ingles ganándose una mirada de sorpresa del otro – Lo siento, pero creo que no se quien eres.... no se quien soy – si voz se escuchaba muy tranquila, pero de pronto las lagrimas empezaron a rodar por su mejilla y al ver al pelirrojo aun mas pálido supo que el también había descubierto la gravedad del asunto.
El pelirrojo salio de la habitación, volviendo unos minutos después con un hombre de mediana edad, no muy alto y ligeramente fuera de formal.
-Buenos días, Soy el Dr Coldman – dijo dándole una cálida sonrisa y acercándose para examinarlo – Este jovencito me dice que no recuerdas nada, te puedo hacer unas preguntas?
-Claro – se sentía algo confundido por su situación pero acepto de buena gana la sesión de preguntas.
-Bien, al parecer es un cuadro de amnesia, pero vamos a hacerte unos estudios y veremos que tan afectado estas realmente – mientras el doctor le hacia preguntas, de si mismo en diferentes idiomas pudo recordar que era Naruto Uzumaki, que estudio literatura universal en la ToDai y que quien estaba junto a el era Sabaku no Gaara, su mejor amigo desde la primaria cuando en clases de etiqueta una maestra le dijo que no tenia gracia, que era tan simple como un lagarto, que debía tratar de ser mas sensible, tanto como una flor, entonces Naruto le dijo que si quería flores, que fuera al jardín, ese día tanto el como Deidara, un doncel muy callado se hicieron amigos de Naru ya que todos fueron castigados, Naru por el comentario y Gaara y Dei por reír hasta el llanto por el comentario. Recordó a sus padres y su empleo en Konoha Gakkuen en Japón, lo que no entendía era que hacia en América, con Gaara y que estuviera embarazado cuando hasta donde recordaba aun era virgen.
Todo el día le hicieron estudios y ya para las 3 de la tarde el doctor le informo que había perdido los últimos 5 años de su vida, que era probable que los recuperara pronto, pero que todo dependía de que había provocado tal perdida. Cuando volvió a su habitación encontró que Gaara no estaba y en su lugar había un moreno dormido en el sofá con un pequeño bultito en su pecho. Se acerco a examinarlo mejor y noto que tenia que tener unos treinta y tantos años, tenia el pelo negro y la piel muy pálida ¿Estaría enfermo? Aun con los ojos cerrados podía notar las lineas negras bajo estos y la linea recta y apretada que era su boca le hizo saber que era probable su sueño no fuese tan satisfactorio. Entonces reparo su mirada en el bulto de su pecho, estaba bien envuelto en una manta azul, solo sobresalían unas mechas negras, su corazón empezó a latir desbocado y su estomago se contraía.
“Menma”
Supo inmediatamente que ese bebe era el que pocas semanas atrás estaba dentro de el, tenia ganas de tomarlo y apretarlo contra si, pero la verdad tenia mucho miedo porque ni siquiera recordaba quien era su padre.
Mientras el rubio divagaba en la luda, el hombre del sofá empezó a incorporarse y con cuidado coloco al pequeño en la cura. Mientras el rubio volvía a la cama muy sonrojado, no sabia quien era el hombre pero supo que le vio algo mas que la espalda por la abertura de la bata.
-Naruto ¿Que diablos te pasa por la cabeza? – dijo el hombre mirándolo con una cara llena de dolor y reproche – ¿No podías esperar unas malditas semanas mas antes de ir a revolcarte con el? ¡Casi matas a nuestro hijo!
-mm..p... perdón – No sabia porque, pero las lagrimas empezaron a bajar por su rostro y su corazón se contrajo al ver el dolor en el rostro del mayor.
-No tienes que disculparte – dijo pasándose la mano por el cabello – no se ni porque me sorprende que hagas estas cosas, ya debería estar mas que acostumbrado a tus estupideces.
-Bien ya entendí – dijo enojado el rubio, no sabia como podría ser, pero el hombre que llevaba menos de 5 minutos allí ya le había provocado varias emociones y no todas agradables. - ¿Sabes? No tienes que ser un cretino.
-Bien, al menos ya eres tu – dijo sin cuidado el hombre.
-Solo tengo una pregunta. ¿Quien diablos eres? - Pregunto molesto Naruto, ese hombre le daba ganas de pegarle un puñetazo en su casi perfecta cara.
-¿Como que quien soy dobe? Tu esposo ¿Me olvidaste? - dijo incrédulo el moreno.
-Maldita sea – mascullo para si el rubio - ¿Que otras estupideces habré hecho? El doctor dice que perdí los últimos 5 años de mi memoria – dijo algo cansado.
-Demonios – el moreno se tenso notoriamente, no se esperaba algo así en ese momento – Creo que debería verte otro doctor, no me confió de ese diag... - El moreno no pudo continuar hablando porque un pequeño pelirrojo, de orbes negras y piel acaramelada irrumpió en la habitación y se abrazo a su pierna.
-¡Mami! ¿Ya estas bien? - inmediatamente el niño lo solto y corrio detras del moreno - perdon mama, no lo volvere a hacer...
El rubio no entnedia que diablos pasaba, pero al parecer ese niño era su hijo y le temia. ¿porque demonios le temia su hijo? ¿Tendria algo que ver con el motivo por el cual el mayor lo miraba con tando odio?