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El chico de mis sueños por KoichiBielefeld18

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Notas del capitulo:

Al encontrar al castaño, este esta de nuevo como cuando llego, con miedo hasta de su propia sombra...

Clarus saca sus encantos paternales con el chico, sabeindo muy bien lo que esta pasando...

¿quien esta detras del secuestro?

Habían pasado un par de horas desde el secuestro del castaño. Toda Crowcity estaba cerrada, podían entrar autos y personas, pero no salir, al menos no por el momento. La alerta se extendió rápido.

Libertus revisaba junto a los encargados de seguridad cada cámara cerca de donde estaban en ese momento, mientras que los otros dos corrían por varios sectores de Palacio sin parar, revisando cada cuarto, desde las habitaciones reales hasta los armarios de limpieza.

Una hora más tarde, Gladio y Nyx se habían reunido algo exhaustos;

- ¿nada de Libertus? - pregunto el más joven cuando el otro negó con la cabeza - ¡mierda!

- ¡chicos! - se escuchó una voz que se acercaba hacia ellos. Ambos levantaron la cabeza y vieron al soldado pelirrojo que estaba con Gladio antes

- ¡Tredd! - dijo Nyx acercándose al otro

- ¡encontramos algo! - dijo y llegó junto a los otros - ¡Síganme al sótano!

- ¿sótano?

-hay algo raro con esa cámara, así que Libertus dijo que el chico podía estar ahí, que fuéramos inmediatamente

-perfecto- exclamo Gladio y se fue junto a los otros hasta el sótano.

Los tres llegaron en un santiamén al lugar y vieron que una de las puertas que iba hacia los depósitos estaba abierta y no había soldados cerca. Los tres se acercaron sigilosamente mientras oían a alguien adentro hablar;

-nos mataran si lo descubren- decía una voz joven pero no reconocida por ninguno

- ¡nos ira peor si no lo matamos ahora! ¡fue nuestra orden! - dijo otra

- ¡nuestra orden fue secuestrarlo y esconderlo mientras venían por el! - dijo una tercera mientras que los otros dos callaban

- ¿creen que aquí este bien escondido? - pregunto la primera

-aquí no viene nadie. Estos depósitos han estado desocupados desde hace tiempo. Nadie lo buscara aquí- exclamo la segunda dando un respiro y volvió el silencio. Luego oyeron como movían algo y un sonido sordo.

Los tres se volvieron a ver y fue cuando Tredd pateó la puerta y Nyx utilizo su Lux para entrar al lugar, golpeando a uno de los hombres. Gladio entro detrás embistiendo a los otros dos con su gran escudo mientras el pelirrojo buscaba con la mirada al castaño.

Uno de los hombres se levantó y fue cuando Nyx lo agarró del cuello;

- ¡¿Dónde está el chico?! - pregunto mientras Gladio sostenía a los otros dos en lo que Tredd los ataba

-no… no puedo… decirlo- decía el joven lentamente por la falta de aire y mirando de reojo una caja que estaba apoyada a una de las paredes

-Gladio, ¡ahí! - exclamo el soldado cuando el gigante se acercó rápidamente a la caja y destrabando la tapa, abrió de golpe dejando ver a un lloroso castaño que lo veía aterrado. Gladio sonrió con alivio y se dispuso a desatar al chico, quien tenía sus manos y pies atados con una cuerda. Así que terminó, Gladio tomo al otro en brazos y de inmediato Ignis paso sus manos alrededor del cuello del gigante y oculto su cara en el pecho del otro mientras que los otros tres eran apresados por un par de sodados que acaban de llegar junto a Libertus.

Gladio camino hasta las habitaciones de los Glaives, que eran las que estaban más cerca, aun con el chico en brazos. Cuando estaba llegando, Noctis salió a su paso muy preocupado;

- ¡¿qué fue lo que paso?! - soltó acercándose mientras que Gladio intentaba abrir la puerta -Llegue de la escuela y me dijeron que estaban en el estudio y cuando llegue ahí, vi todo desordenado

-en un momento te contare. - contesto el otro con cansancio sentándose en un pequeño sillón que había en la habitación. Gladio bajo al otro y lo sentó, sin ser soltado por el castaño quien apretó con más fuerza sus brazos alrededor del cuello del otro - Avísale a mi padre que ya lo encontramos por favor, yo iré por Nyx

-enseguida- dijo el príncipe saliendo por la puerta. Gladio hizo a soltarse, pero el otro se sostenía con más fuerza

-Ignis, debo…

-no te vayas. - susurro el castaño en el pecho del otro -Te lo suplico, no me dejes. Vendrán por mi

-ya fueron apresados. - dijo el otro pasando sus brazos por el otro y acercándolo a él, en un fuerte abrazo. Gladio sintió como el otro frágil cuerpo temblaba bajos sus brazos y eso le dolió mucho -No volverán a hacerte daño

-no me dejes- fue lo único que decía el chico sin soltar su agarre

-no lo hare- contesto él apretándolo con más fuerza y sentándolo sobre sus regazos.

Al poco rato, Gladio sintió como el otro aflojaba su agarre y se soltaba de los fuertes brazos del chico para abrazar sus propias piernas;

-lo lamento- dijo en un susurro, el grande sonrió

-no te disculpes Ignis. Es normal que estés asustado. No dejaré que te pase nada ¿está bien? - Gladio pasó uno de sus brazos por los hombros del castaño y lo atrajo hacia él de nuevo

-puedo... ¿Puedo quedarme aquí hoy? No sé en dónde estoy, pero no quiero salir de este lugar, me siento muy seguro

-estamos en la cuartería de los Glaives. - comenzó a decir una voz que estaba en la puerta. Ambos voltearon y vieron a Cor junto a Clarus, quien corrió veloz hacia el castaño y lo abrazo -Puedes quedarte aquí un tiempo Ignis, mientras arreglamos todo esto. Pero deberás volver a Palacio en unos días

-aquí es un poco ruidoso, pero te acostumbras- rio Cor. Ignis sintió los brazos de Clarus y devolvió el agarre algo aturdido, pero con gratitud

-señor... Amicitia

-lo siento, - dijo el hombre incorporándose, mirando a su hijo y luego al castaño -supongo que mi instinto paternal salió

-no se preocupe, lo agradezco enormemente

- ¡Ignis! - oyeron gritar cuando Iris entro junto a Noctis al lugar. La niña corrió y se lanzó sobre el castaño -Fui muy torpe y no pude defenderte, lo siento

-fui yo quien no pudo defenderte- dijo el niño al ver un corte que la niña tenía en la mano. Iris negó con la cabeza

-tú me protegiste mucho y te pusiste para que no me hicieran daño

-y eso nosotros lo agradecemos- dijo Clarus poniendo una mano sobre el hombro de su hijo quién sonrió cuando levantó y abrazó a su hermana pequeña.

 


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