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Buscando una luz. por Joha-SS

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Notas del fanfic:

Primero debo aclarar que esta es mi primera historia, la verdad desde hace mucho quiero subirla, pero una amiga me animo y ¡Tara! aquí estoy.

Notas del capitulo:

Esta es mi primera historia, espero sean pacientes conmigo y tratare de actualizar seguido.

POV/Zeinth.

 

Hoy una mañana de clases me dirigí a la universidad, ya que solo faltaban seis meses, estoy tan emocionado después de veinticinco meses y catorce días, woow estoy tan cerca de terminar la universidad pesaba con una sonrisa ladina en el rostro. Aunque no estoy tan seguro de sacar mi licenciatura, qué más da.

 

Ya estaba llegando a la universidad y dirigiéndome a mi salón, pero me encontraba sumergido en mis pensamientos sobre lo que haría cuando me graduara y sin darme cuenta choco con alguien.

 

-¡Ay! Ten más cuidado idiota. –Al oír eso fui sacado de mis pensamientos, y  me di cuenta de que la persona con quien había chocado era nada más y nada menos que Naydel, la puta de la universidad. – ¡Hey! ¿No te vas a disculpar? –Dice la puta, digo la susodicha muy enojada. Rodé los ojos con fastidio ignorándola por completo y seguir mi camino al salón de clases, mientras ella me maldecía como loca a gritos. 

 

En eso siento que me jalan bruscamente del cuello de mi camiseta para ser arrojado contra la pared más cercana, provocando que un ruido sordo se escuchara por los pasillos, eso dolió bastante, pero eso no era lo peor, sino que la persona que me tomo de la camiseta y me arrojo contra la pared, era Adrian Swift el noviecito de Naydel.

 

-¡Hey, ¿qué acaso no te piensas disculpar con mi chica?! –Dice Adrian con tono serio y amenazante, junto a una mirada asesina, como si yo le hubiera roto una uña, pero aun así sería estúpido.

 

-No, no me interesa disculparme con “tú chica” –Digo haciendo con mis dedos el gesto de comillas.

-¿Quieres tener problemas, mocoso? –Dice Adrian enojado empuñando su mano para golpearme.

 

-¿Así? Oblígame. –Respondí ya fastidiado de la situación.

 

-Tú lo pediste. –Dice colmado y alzando su brazo con la mano empuñada, cierro los ojos esperando el impacto del golpe.

 

Me quede así por un momento con el miedo invadiéndome, en eso me doy cuenta de ¿por qué no me ha golpeado? Abro los ojos lentamente para asegurarme de que estuviera o no.

 

Ya habiendo abierto por completo mis ojos, veo que alguien alto de la misma altura que Adrian pálido con una chaqueta de cuero roja, pantalones jeans algo holgados y pelo color ceniza desordenado. No sabía quién era él, pero parecía que no era alguien con malas intenciones ya      que por suerte pudo detener el puñetazo que me iba a dar Adrian.

 

-Tsk. –Adrian chasquea la lengua dirigiéndole una mirada asesina a quien había detenido el golpe hacia mi persona. – ¡¿Ahora qué quieres Elian?! –Exclama el susodicho notablemente molesto.

 

-Yo… Solo quiero evitar tus estupideces. –Responde el otro de forma muy tosca y seria.

 

-¡Ya vete! Esto no te incumbe. –Dice Adrian muy airoso.

 

-Claro que me incumbe. –Dice el otro de forma muy tosca y un poco desinteresada.

 

-¡¿Ah?! ¿A qué te refieres con eso? –Dice Adrian mientras se soltaba del agarre del oji-esmeralda. –Además ¿por qué te importa tanto lo que yo haga? –Pregunta de forma confusa.

 

-Por la grandísima razón de que si no lo hago seré yo quien pague las consecuencias de tus actos ¿recuerdas? –Responde el oji-esmeralda con una mirada un poco sádica hacia Adrian. –Y porque también soy quien representa a nuestro salón. –Dice con voz tosca el oji-esmeralda.

 

-Tsk, como sea. –Murmulla Adrian al oji-esmeralda. –La próxima vez él no estará para salvarte. –Me dice sin dirigirme la mirada, y se va directamente donde Naydel como si nada.

 

Me quedo mirando por donde Adrian y Naydel se habían ido, tratando de averiguar que carajos pasaba entre Adrian y el oji-esmeralda.

 

-¿Estás bien? –Pregunta el susodicho a mi izquierda sacándome de mis pensamientos.

 

-Eh, eh, eh, si estoy bien, gracias, eh, eh, eh ¿cómo te llamas? –Digo un tanto nervioso ya que ¿de dónde apareció él?

 

-Soy Elian Colfman, la próxima vez no vuelvas a actuar de forma imprudente ¿entendido? –Dice de forma estricta y con una mirada distraída.

 

-Okay, disculpa, solo que no puedo dejar que me traten como la basura de la universidad. –Digo con tono un poco serio. –Además ¿de qué parte eres? ¿de dibujo técnico o informática? –Le pregunto un poco curioso.

 

-Informática, y tú ¿Cómo te llamas? Y ¿De qué parte eres? –Dice directo al punto lo cual me sorprendió.

 

-Yo me llamo Zeinth Calleight y estudio en la parte de dibujo técnico. –Responde con una suave sonrisa. –Oye ¿qué hora es? –Pregunto un poco curioso.

 

-Las 7:10 am, no falta mucho para que empiecen las clases. –Dice él muy tranquilo. –¿En qué salón estudias? –Me pregunta serio y sin hacer ninguna expresión.

 

-En el salón de dibujo técnico “B” así que disculpa, me tengo que ir. –Digo para cortar la conversación.

 

-Déjame acompañarte. –Dice un poco tímido, lo cual no me pareció tan raro solo asentí con la cabeza y seguimos el camino en silencio, no tratamos de comenzar una conversación. Pero la verdad es que estar a su lado me pareció muy tranquilizante.

 

Fin de POV/Zeinth.

 

POV/Elian.

 

Amanece, como siempre me levante exaltado a causa de una pesadilla, como siempre atormentado por mí padre así que me levante para dejar de pensar en eso, me acerque a uno de los gabetines a mi derecha, abro el primer cajón y saco de allí una cajita con la imagen de kukri.

 

Abro la caja y saco de allí una navaja para comenzar a herir los brazos con brusquedad haciéndome heridas no tan profundas, pero lo suficientemente dolorosas. Después de un buen rato limpio la navaja y la pongo en la caja guardándola del lugar de donde la saque.

 

Me termino de levantar adolorido, pero con la satisfacción de poder olvidar esa pesadilla, me dirijo al baño a paso un poco apresurado. Llego y luego me comienzo a desvestir (Solo me quito los pantalones y boxer’s) ya listo entro en la regadera, abro la llave y siento como arden mis heridas por el contacto del agua, me quedo por un momento así para acostumbrarme al dolor de mis heridas, mientras agarraba el jabón para pasármelo por todo el cuerpo (N/A: 7w7) me enjuago el cuerpo para luego salir de la regadera, agarro una toalla para secarme el cabello y una vez realizada la acción me la pongo de forma que quedo alrededor de mi cintura, salí del baño.

 

Me dirijo de vuelta a mi habitación, ya estando en mi cuarto me comienzo a vestir, me pongo unos bóxers negros, junto a unos jeans, una camisa de color negro y sobre ella una chaqueta de cuero roja y zapatos deportivos color ceniza, agarro mis cosas de la universidad, pero antes acomodo mi cama para así salir de ahí dirigiéndome a la sala que esta junto a la cocina en donde esta mi desayuno y almuerzo listo (para llevar claro está) lo agarro y guardo en mi bolso para dirigirme a la puerta e irme para la universidad.

 

O0o0o0o0o0o0o0o0o0o00o0o0o0o0o0o0o0o0o00o0o0o0o0o0o0ooo000o0o0o0o0o

 

Ya estando en la universidad me encamino a mi salón de clases, el cual es informática “A” el salón de los supuestamente mejores en esa carrera, pero bueno que puedo hacer. Como siempre llego de primero en el salón, así que me quedo sentado en unas bancas que se encontraban cerca del aula repasando la clase anterior, ya que el pasillo estaba solitario podía concentrarme en mi repaso, pero sabía muy bien que este silencio no iba a durar mucho.

 

-Hola, buenos días Elian. –Me sobresalte un poco al escuchar la voz de un profesor, alce la mirada para encontrarme con esa persona.

 

-Hola. –Le devuelvo el saludo de forma desinteresada.

 

-Disculpa que te moleste, pero necesito que suplantes al profesor de dibujo técnico de la sección “B” –Me dice con tono amable y directo.

 

-¿Por qué? –Le pregunto con fastidio y se un suspiro por parte del profesor.

 

-Porque hoy tuvo que hacer una diligencia y no podrá dar clases hoy, algunas secciones las pasamos para que tuvieran clases con el profesor Rivero en la tarde a excepción de dibujo técnico “B”, tú sección y otra más. –Explica seriamente el profesor.

 

-Está bien, lo hare, pero espero algo a cambio. –Digo fastidiado.

 

-¿Qué cosa? –Pregunto con una ceja enarcada. –Espero que no sea una estupidez. –Replica el profesor.

 

-Obviamente que no, solo no quiero que me fastidien. –Digo un poco colmado.

 

-Está bien, me largo. –Dice el profesor desviando la mirada de la izquierda y yéndose por esa misma dirección, pero antes de eso me dejo la lista de los alumnos de dibujo técnico “B”. Así que simplemente me levanto de mi lugar y me dirijo a caminar por los pasillos, para revisar si rondaba algunos alumnos aquí.

 

Así que me puse a buscar por la universidad a todos los mocosos de dibujo técnico “B” a ver si veía a alguno.

 

No falto mucho tiempo para toparme con uno de mis compañeros “Adrian” y como siempre estaba metiéndose en problemas, así que me quede viendo por un momento lo que pasaba y parecía que Adrian estaba sometiendo a alguien por la novia, como siempre, lo que sorprende es que la persona a quien somete, el pobre diablo, es bastante imprudente.

 

En eso Adrian empuña su mano y la levanta (obviamente para golpear a la persona sometida) en eso acelero el paso casi corriendo y detengo el golpe del susodicho, me lanza una mirada entre confusa y asesina. Así que poso mi mirada sobre la víctima en la pared, era un chico de piel blanca, pelo negro azulado, vestía una camisa negra, junto a una chaqueta simple del mismo color, pantalón negro, zapatos deportivos de color azul, en si me pareció muy elegante lo que usaba, aparte de que sus ojos eran de un peculiar color miel.

 

Y en eso Adrian comienza a discutir conmigo, se comenzó a quejar y se soltó de mi agarre después de unas quejas, se dispuso a irse, no sin antes dejar una amenaza a quien se encontraba en la pared, se fue con la rabia en los cielos junto a Naydel.

 

Mientras que el peli-negro azulado se quedo con una totalmente confusa expresión que se notaba de forma obvia, y para sacarlo de su trance le pregunte si se encontraba bien, y él me respondió que sí.

 

Le hice otras preguntas para asegurarme de que él fuera uno de los alumnos de dibujo técnico “B”, lo bueno es que acerté y faltaban pocos minutos para que comenzaran las clases.

 

Así que me fui con él para el salón y durante todo el camino que recorrimos hubo silencio, lo cual me causo mala espina, ya que sabía que después de lo que sucedió con Adrian me iba a causar problemas tanto al chico peli-negro azulado como a mí.

 

Sera mejor que comience a estar alerta, ya que la última vez que paso algo así, las cosas terminaron envueltas con sangre.

 

Continuara…

Notas finales:

Espero que les haya gustado, los vere pronto y no olviden dejar sus reviews con respecto a la historia.


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