No más entró a la escuela pasó lo que tanto se temía. En el pasillo todos lo miraban y cuchicheaban pero para su sorpresa no eran los profesores, si no los alumnos. No podía creer que incluso los chicos ya supieran lo ocurrido. Un brazo que se posó sobre sus hombros lo sacó de sus pensamientos.
- Buenos días, como está mi alumno favorito hoy, aunque creo que ahora eres mi colega favorito.
- Ray sensei, buenos días- la mirada triste del chico lo hizo darse cuenta de que algo andaba mal. Rápidamente se percató de la situación, así que comenzó a reír sonoramente
- oigan chicos, deberían de dejar de cuchichear que tienen a Zoro sensei nervioso. Si lo que quieren es un autógrafo, solo pídanlo.
Ante esta declaración todos se acercaron con sus calendarios en las manos pidiéndole al peliverde que los firmara. Zoro estaba rojo era bochornoso verse a sí mismo en esa foto y más aún tener que firmarla. Sin embargo sintió un gran alivio, al parecer no iba a ser tan malo después de todo.
Impartió sus clases normalmente, era como si nada hubiera pasado, los colegas que había visto lo habían tratado como si nada, de verdad que le gustaba esa escuela. Tomó unos papeles de su escritorio y se dispuso a llevárselos al director y de paso recoger a Luffy para ir a almorzar. Sin embargo al salir chocó con alguien, lo que provocó que los papeles cayeran al suelo, no pudo evitar sentir un deja vu y más aún cuando se encontró con unos hermosos ojos dorados.
- disculpe Dracule sensei, no estaba prestando atención- Zoro quería que la tierra se lo tragara ya se imaginaba la reacción del mayor, esta era la segunda vez que tenían este tipo de incidente y la primera había sido bastante desastrosa.
- no tiene que disculparse, fue mi culpa. De hecho le debo una disculpa desde la otra vez que nos vimos envueltos en una situación parecida. Lo juzgue con severidad sin conocerlo guiándome por las apariencias y sacando conclusiones precipitadas. Me gustaría que empezáramos de nuevo, esta vez con el pie derecho.
La cara de Zoro era un poema, quien era ese y que le había hecho al subdirector. Que podía haberlo hecho cambiar de opinión, y entonces se dio cuenta, ese hombre que antes lo despreciaba ahora le tenía lástima.
- Claro, ahora piensa que con una marca tan desagradable en mi cuerpo es imposible que me gane favores de ese tipo. Sabe no necesito empezar de nuevo con usted, no quiero su lástima.
Zoro tomó los papeles que aún estaban en el suelo y se dispuso a marcharse pero el fuerte agarre de Mihawk lo hizo detenerse.
- habría que ser muy estúpido para tenerle lástima a un hombre como usted. Siempre he sido una persona tranquila e imperturbable, no tiendo a cambiar de opinión ni retractarme de mis decisiones fácilmente, puede ser por eso que me costó tanto trabajo admitir que me equivoqué con usted. Pero le aseguro que si hay algo que no siento por usted es lástima, alguien tan fuerte como para sobrevivir a heridas como esa, no merece tan bajo sentimiento.
Zoro estaba sorprendido pero a la vez extremadamente feliz. Qué tenía ese hombre que lo hacía sentir así?- gracias- dijo suavemente y ambos se quedaron mirándose a los ojos, pero no como otras veces, no con desprecio, no con rudeza, o retándose esta vez era una mirada tranquila, agradable y con algo más, algo a lo que no le sabían poner nombre.
- ZOROOOO, COMIDA!- El ambiente se rompió con el grito de Luffy.
La cara de Mihawk se tornó seria, soltó la mano del muchacho que hasta ese momento había mantenido agarrada y se dispuso a irse. Sin embargo esta vez fue su diestra la que resultó prisionera del agarre del peliverde.
- si de verdad vamos a comenzar con buen pie, es necesario que no halla malentendidos. Dracule sensei él es Luffy el nieto del director Garp y mi mejor amigo. Es un poco torpe y causa muchos problemas pero es como un hermano para mi.- dijo el peliverde presentando a ambos hombres.
- mucho gusto- dijo el de ojos dorados extendiéndole al pelinegro más joven la mano que permanecía libre.
Luffy lo miraba desconfiado- Drácula? Lo sabía es un vampiro! Zoro estás seguro de que no me chupará la sangre.- preguntó a su amigo notablemente asustado.
- idiota claro que no, no seas maleducado y saluda.
- hola, soy Monkey D Luffy, por favor no me coma- dijo Luffy mientras apenas rozaba la mano contraria.
Mihawk lo miraba con cara de circunstancia, ese chiquillo tenía que estar mal de la cabeza. Sin embargo le pareció divertido y su instinto un tanto sádico salió a la luz- no se preocupe joven Monkey, mis gustos difieren un poco de su persona, me gusta comer cosas un tanto más duras.- dijo mirando a Zoro.
Luffy empalideció y Zoro enrojeció- Dracule sensei por favor no lo asuste más- se quejaba Zoro.
- Lo siento no he podido evitarlo, no se preocupe le puedo asegurar que no soy un vampiro, es más me dirigía a la cafetería a tomar el almuerzo si gustan pueden acompañarme y comprobarlo en persona.
Luffy asintió y los tres se dispusieron a ir a almorzar sin embargo algo llamó la atención del monito. - oye Zoro por qué están tomados de la mano.
Solo en ese momento se percataron de que era cierto, a Mihawk no se inmutó pero Zoro parecía un tomate. - Yo...este....nosotros.
- es solo que Roronoa sensei me pidió que lo levara a la cafetería y para evitar que se perdiera, lo tomé de la mano.- respondió tranquilamente Mihawk.
- Ya veo, tiene razón Zoro se pierde hasta en una línea recta.
- YO NO ME PIERDO!.
- Ah no, entonces explíquele al joven Monkey por que estábamos tomados de las manos.
Zoro estaba entre la espada y la pared. - solo vamos a almorzar, que se acaba la carne- ante este comentario Luffy pareció olvidarse del tema y salió corriendo gritando- CARNE, CARNE, CARNE.
Ya en la cafetería se dispusieron a encontrar una mesa, para su desgracia cierto pelirrojo los divisó y comenzó a gritarles a todo pulmón para que se sentaran con él.
Para evitar el escándalo se acercaron y tomaron asiento junto a Shanks. - Akagami podrías por favor dejar de hacer un espectáculo cada día- se quejó Mihawk.
- lo siento Mihi pero es que tú y Zorito no me oían así que tuve que hacerme notar.
- Oye Zoro, quien es este?
- Él es Akagami Shanks, es profesor de matemáticas como yo.
- Ya veo, hola soy Luffy.
- Zorito no me digas que es tu novio. Es muy lindo- decía Shanks emocionado.
Luffy se sonrojó instantáneamente y Zoro rió divertido- Claro que no, él es mi mejor amigo, además es el nieto de Garp sensei.
- que lástima y yo que pensé que al fin había encontrado a una pareja para que Mihi y yo tuviéramos citas dobles.
- tu novia se llama Mihi, que nombre más ridículo- se burlaba Luffy.
- Akagami, cuantas veces te he dicho que no me llames así.- se quejaba el pelinegro mayor.
- espera, eso quiere decir que estás saliendo con el vampiro y yo me acabo de burlar de su nombre?- decía Luffy mientras sudaba nervioso.
- vampiro? Ya veo es por sus ojos, si la verdad es que son escalofriantes, pero te puedo asegurar que no muerde, bueno no de la forma que crees?- dijo Shanks coquetamente.
- pues yo creo que son hermosos- todos en la mesa se quedaron mirando a Zoro, que había hecho el comentario sin percatarse, así que trató de enmendar su error- quiero decir que sus ojos tienen un color muy bonito, es decir...son diferentes pero bonitos.- que rayos lo había empeorado. Así que decidió callarse y tratar de esconder el rubor de su cara. Por suerte para el los demás no demostraron interés aparente en su comentario. Aunque internamente Luffy empezaba a atar cabos sueltos y Shanks no había pasado por alto la mirada cálida que su novio le había dedicado al chico.
………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………….
A la salida Luffy lo esperaba.
- en serio te has pasado el día en la escuela, que no tienes trabajo que hacer?
- no te preocupes que mis horarios son flexibles. Por cierto que pasa entre tú y el vampiro.
Zoro paró en seco.- no tengo idea de a que te refieres.
- sabes que a mí no me puedes engañar, vi cómo se miran y en serio crees que me tragué el cuento de las manos tomadas, sé que soy despreocupado pero no idiota.
- no inventes cosas, yo tengo pareja y el también.
- eso no impide que se gusten. Además por lo que pude ver lo siento por Shanks pero su relación es más bien unilateral y tú estás mejor sin Torao.
- a que te refieres con unilateral?
- por dios, acaso eres ciego, no le hace ni puto caso al pobre Shanks y a ti te comía con la vista.
- en serio- dijo Zoro emocionado.
Luffy lo miro sonriendo socarronamente, rayos lo había pillado, el solo se había delatado. A veces odiaba que el pequeño mono lo conociera tan bien. Suspiró cansado.
- a ti no puedo mentirte cierto? La verdad es que desde la primera vez que lo vi fue como si algo en mi hiciera clic. No sé lo que es pero es fuerte y me asusta, es como cuando conocí a ...- dejó de hablar al percatarse quien lo escuchaba.
- a Ace. Puedes decirlo no tienes que ocultarlo, la verdad es que siempre he deseado que encontraras a alguien así. Alguien que te devuelva la esperanza.
- no es tan fácil Luffy, hay muchos obstáculos, además no quiero volver a tener algo tan mágico para luego perderlo.
-no tiene por qué ser así, pero es tu decisión, de todas formas sabes que puedes contar con mi apoyo.
- gracias.
Ambos se despidieron. Zoro llegó a su casa y encontró una nota de Law diciéndole que pasaría la noche en el hospital. Así que tomó un baño, ordenó una pizza y se fue a dormir no sin antes darle vueltas a su conversación con su mejor amigo, podría ser que en verdad Mihawk se sintiera atraído por él, desechó la idea, sin dudas solo había sido amable así que no servía de nada fantasear con eso.
......................................................................................................................................................................
No sabía que pasaba pero en el trayecto a casa Shanks había estado en un completo silencio. Por un momento se preguntó si el pelirrojo estaría enfermo. Pero decidió no tocar el tema por miedo a perder la paz que había hasta el momento.
A la hora de dormir miró el libro que había sobre su mesa de noche, era el primer libro de la saga Canción de Hielo y Fuego, Juego de Tronos, ya casi lo terminaba pero no podía negar que la trama lo tenía con los pelos de punta, así que retomó su lectura con la intención de conocer el tan esperado final. Sin embargo el ruido de la puerta al cerrarse lo hizo levantar la vista.
En la entrada estaba su pelirrojo novio que al parecer había tomado un baño, pues su cabello estaba húmedo y traía como única prenda una toalla alrededor de la cintura. Comenzó a acercarse a la cama con movimientos felinos hasta que se posicionó sobre las caderas del pelinegro.
- que crees que haces Akagami?
- acaso no es obvio, solo quiero que nos divirtamos un poco.
- no estoy de humor.
- en serio, no lo estas, vamos te demostraré que soy más divertido que un libro.
- no lo dudo, pero en estos momentos prefiero el libro.
- no seas así, te necesito sabes que solo tú puedes complacerme, todo de ti me encanta.
- en serio, incluso mis escalofriantes ojos- le dijo Mihawk seriamente
Sin dudas eso Shanks no se lo esperaba, al pelinegro nunca le había importado lo que la gente dijera de él, - que rayos, te pasa eso no te ha molestado antes, oh ya veo es que prefieres a alguien que te diga que son hermosos.
- que no lo diga, no significa que no me importe y más si es lo que piensa mi "pareja", mejor dejemos la conversación quiero terminar mi libro- y dicho esto se quitó de encima al pelirrojo y salió de la habitación.
Shanks estaba de piedra, molesto y frustrado comenzó a gritarle improperios antes de apagar las luces y echarse a dormir.
Al día siguiente el pelirrojo le aplicaba la ley del hielo, la verdad es que estaba acostumbrado a eso. Siempre que se molestaba era así, se hacía el ofendido hasta que Mihawk le daba algo de afecto. Pero esa mañana no estaba de humor, así que prefería que el silencio durara un poco más. Para colmo era feriado, así que para no quedarse en casa fue a dar una vuelta.
- voy a la librería, no tardo.
- que bien, compra muchos libritos que te calienten por la noche porque yo no pienso hacerlo- soltó resentido Shanks.
Mihawk solo suspiró. Salió de la casa y se dirigió al centro comercial, se le ocurrió comprarle algún detalle a su novio para así calmarlo pero no se decidía por nada. Salió del lugar para dirigirse a casa. Fue entonces que pasó frente a una librería y recordó que pronto terminaría su libro así que se dispuso a comprar el segundo, Choque de reyes, una vez lo tuvo en la mano iba a pagar pero una cabellera verde en uno de los estantes llamó su atención.
- Roronoa?
-Dracule sensei. Que hace aquí?
- pues por lo visto lo mismo que usted. Buscando un buen libro- dijo levantando el ejemplar que portaba en su mano
Zoro enrojeció solo a él se le ocurría una pregunta tan tonta, sin embargo su interés se posó en el libro del contrario- valla no pensé que le gustara ese tipo de literatura.
- bueno si algo hemos aprendido es que las apariencias engañan, la verdad es que este género es de mi agrado y el primer libro de la saga me tiene más que complacido.
- si pero apuesto a que no se esperaba la muerte de Ned Stark.
Ante la cara perpleja del pelinegro Zoro comenzó a temerse lo peor.
- aún no termino el primero- fueron las únicas palabras del mayor.
- lo siento tanto, no fue mi intención, es que como tiene el segundo yo pensé..
Su disculpa fue interrumpida por un hombre enmascarado que entró a la tienda y apuntó a la cajera con un arma pidiéndole el dinero del lugar y ordenándoles a todos los clientes que se tiraran al suelo.
Mihawk iba a acatar la orden pero al mirar a Zoro se percató de que este había entrado en shock, estaba pálido con la mirada perdida y no se movía.
- Roronoa, Roronoa al suelo.- le decía el mayor pero Zoro permanecía en su trance. Así que Mihawk abrazó al chico y lo hizo sentarse a su lado sin soltarlo.
- tranquilo todo está bien, todo está bien.- le susurraba.
Una vez el ladrón obtuvo su botín salió corriendo del lugar. Mihawk se dispuso a pararse y seguirlo pero los brazos de Zoro se aferraron con fuerza a él.
- no vayas por favor, no quiero perderte Ace.
Ese nombre otra vez, el de ojos dorados no tenía idea de quien se trataba pero sintió la necesidad de proteger al muchacho por lo que no dijo nada y solo lo abrazó con más fuerza.
Una vez el chico volvió a sus sentidos, trató de marcharse sin embargo Mihawk percatándose de que aún su estado no era óptimo, prácticamente lo arrastró hasta una cafetería cercana donde pidió un café para él y un té para el muchacho.
- ya te encuentras mejor- preguntó suavemente el mayor.
Otra vez le hablaba informalmente y con ese tono tan amable, una pequeña parte de él se sintió feliz- si ya estoy bien, gracias por ayudarme. Fue solo un susto.
- Roronoa sé que no es mi asunto y si no quiere hablar del tema tenga por seguro que no lo voy a presionar. Pero si hay algo que me causa gran curiosidad y es que es la segunda vez que me llama por otro nombre.
Zoro bajó la vista notablemente incómodo, sabía que esa pregunta llegaría tarde o temprano pero no se sentía con la fuerza para hablar ese tema en esos momentos.- Discúlpeme no era mi intención..
- no me malentienda, no es que me moleste solo es curiosidad no tiene que decirlo si no quiere.
- no, está bien, usted me ha ayudado mucho así que merece una explicación. Ace es el hermano mayor de Luffy, el fue muy importante para mí, era ese tipo de persona que todo el mundo quiere cerca y pese a tener su lado despistado, propio de los Monkey, era alguien muy confiable.- no pudo evitar que la felicidad se reflejara en su cara al recordarlo.
- ya veo, usted lo ama- no sabía por qué pero llegar a esa conclusión le dolió.
- lo amaba- ante la mirada curiosa del mayor siguió hablando- él murió hace cinco años.- no pudo evitar que sus ojos se humedecieran y su voz se entrecortara- yo...lo siento...es un poco difícil hablar de eso
- está bien, no tiene que forzarse, si algún día quiere contarme la historia gustoso lo escucharé, pero ahora no creo que le haga bien- dijo Mihawk mientras tomaba su mano por encima de la mesa.
- valla, debe de pensar que soy una pésima compañía. Tiro sus papeles al piso, me pongo a llorar como una niña, nos asaltan e incluso le hago spoilers de su libro.
- para nada, me gusta su compañía. Aunque bueno lo del spoiler no pienso perdonárselo tan fácilmente- dijo Mihawk aprovechando la cobertura para cambiar de tema.
- discúlpeme, haré lo que sea.
Zoro enrojeció en cuanto se percató de sus palabras y a Mihawk se le pasaron unas cuantas ideas por la cabeza. Sin embargo prefirió dejarlas ahí.
- pues me vendría bien algo de compañía el día de hoy. De hecho quería ir al cine pero es un poco triste ir solo así que si de verdad está dispuesto a todo no le molestará acompañarme.
- Claro, cuente conmigo.
Terminaron sus bebidas y se dirigieron al cine más cercano. Para su desgracia todas las películas eran de tema romántico, sin embargo marcharse sería como admitir lo incómodo de la situación y dos hombres orgullosos como ellos no darían su brazo a torcer, así que se decidieron por The Notebook. Que podría pasar? Fue el pensamiento de ambos.
Sin embargo el universo conspiraba contra ellos, por lo que les toco estar rodeados de parejas que no eran para nada discretas a la hora de demostrar su cariño, además sus dedos siempre chocaban al tomar las palomitas y para colmo el peliverde se quedó dormido a los 20 minutos, con la cabeza apoyada en el hombro de Mihawk. Un sonoro Ahhh…. departe de las damas de la sala al ver a Ryan Gosling sin camisa lo despertó, solo para desear que la tierra se lo tragara por haber tomado al mayor como almohada. Tanto se impresionó que no volvió a dormirse, por lo que al final le gustó la película incluso se le escaparon algunas lágrimas.
- valla al final, va a resultar usted un romántico sentimental- se burló Mihawk mientras salían del cine.
- pero es que era muy triste, es que acaso no tiene corazón. Todavía lo pienso y me da sentimiento.
- no es que no tenga corazón, solo no creo que exista un amor así de fuerte.
- no me diga que nunca a sentido una conexión especial hacia otra persona.
- claro que si, pero eso sería confundir lujuria con amor.
- no es lo mismo, la lujuria es solo carnal, estoy hablando de una conexión más profunda. Esa sensación de necesitar a una persona incluso antes de tocarla y que va creciendo mientras más conoces de ella. Solo piense en cuando conoció al pelirrojo, no sintió algo similar.
- no
Zoro lo miraba un tanto incómodo- disculpe no era mi intención, meterme en su vida privada.
- no es un secreto. Mi relación con Akagami no es una gran historia de amor aunque él le haga pensar eso a los demás. Supongo que con nosotros se aplica lo de los polos opuestos. Nos intrigo lo diferentes que éramos, terminamos en la cama y al ser nuestros cuerpos compatibles decidimos repetirlo. No sé en qué momento, pero dejamos de ver a otros y nos mudamos juntos. Nada más.
- pero él lo ama, se le nota a kilómetros.
- lo sé.
- usted...lo ama?- no sabía por qué estaba tan nervioso de oír la respuesta.
- si supiera lo que es el amor podría responderle. Me gusta mucho y le tengo un gran cariño, pero no creo que sea ese amor del que usted habla. Tal vez si, tal vez el amor es eso y soy yo el que sobrevalora un sentimiento que no conoce.
Zoro lo miró comprensivamente- entiendo.
- valla es la primera persona a quién le cuento esto y no me dice que soy un hijo de puta que se aprovecha de los sentimientos de Shanks.
- no creo que tenga nada de malo estar con quien nos hace sentir bien, aunque los sentimientos no sean los mismos. Pero créame cuando se enamore lo sabrá.
- a mi edad no creo que pueda estar en esos trotes.
- de que habla, si luce genial.
Mihawk se acercó peligrosamente a él mientras tomaba su mano.- de verdad lo crees?
Zoro se quedó embobado una vez más en esos ojos dorados. Tragó saliva mientras la distancia entre ellos seguía disminuyendo.
- Zoro eres tú?- esa voz femenina los hizo salir del trance.
- Vivi hola, que coincidencia encontrarte aquí- dijo Zoro notablemente nervioso.
- si salí con un amigo a ver una película.
- que casualidad yo también. Por cierto él es Dracule Mihawk un colega del trabajo.
- mucho gusto- saludó el mayor que aún se notaba un poco molesto por la interrupción.
- el gusto es mío, soy Nefertari Vivi, por favor cuide de mi amigo.
En ese momento el acompañante de Vivi hizo acto de presencia llamando la atención de todos los presentes con sus extravagantes fachas y su actitud un tanto peculiar.
- ese es tu amigo- preguntó Zoro mientras una gota bajaba de su frente
-jaja si él es Mr. 9 jaja- decía la peliazul notablemente incómoda.
- ya veo, tus gustos no mejoran - se burló Zoro
- no es así, es solo mi amigo, lo que pasa es que Kohza estaba ocupando y no quería venir sola. Por favor no se lo cuentes a nadie.- pedía Vivi totalmente sonrojada.
Zoro le lanzó una mirada cómplice y ambos sonrieron. Un carraspeo de parte del mayor de los cuatro hizo que el peliverde reaccionara.
- oh se hace tarde mejor no vamos, hasta luego Vivi.- y sin más comenzaron a caminar, pero un grito de la chica lo hizo detenerse.
- Zoro, Nami pronto regresará y queremos reunirnos todos a festejar, te animas. Te extrañamos la última vez
No quería ir, desde aquel incidente trataba de evitar ese tipo de reuniones sin embargo la cara de súplica de su amiga, lo hizo ceder.- claro envíenme la fecha y el lugar.