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Grifted por Alei sama

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Notas del fanfic:

Se supone que esto sería para el
domingo y pido una muy grande disculpa
Puesto que he estado muy delicada de salud y se me complicó muchísimo la entrega al final.
Sin más! Esperó que les guste ?

Notas del capitulo:

Los personaje no me perecen, son propiedad de Fujimaki-sensei simplemente los utilizó para bellas historias!

Aomine suspiró por quinta vez y se recargó en el volante de su carro. Era aburrido esperar.

La radio de su coche sonaba con tontas canciones pop y el calor daba a todo, la calefacción trataba de enfriar el ambiente pero era casi imposible. Además el hecho de ir vestido de un traje negro no ayudaba en nada.

Esperaba el momento exacto para actuar, su compañero de equipo lo esperaba en una moto en la contra ezquina de la avenida.

- Más te vale que no te quedes dormido, sólo tenemos una oportunidad.

Aquella voz sonó a través de la radio regañándolo y Aomine suspiró pesadamente.

- No me estoy durmiendo idiota, sólo estoy muy aburrido. ” respondió con pesar.

Después de cambiar las estaciones de la radio y no encontrar nada de su gusto optó por apargalo. Estaba a punto de encender un cigarrillo cuando escuchó el potente rugido del motor de la motocicleta.

Ahí estaba. El momento que estaba esperando.

Encendió el auto y arrancó bruscamente quemando las llantas sobre el pavimento.

Su objetivo se movía rápidamente y lo malo de se eso es que era demasiado ágil como para seguirle el paso.

Derrapando con habilidad evitó todos los obstáculos que se le atravesaban, como carros, motos y hasta personas rompiendo un par de muchas reglas de tránsito, el problema vino cuando el chico que estaba siendo perseguido era decir su objetivo, decidió entrar en un parque, Aomine tronó la lengua y la moto de su compañero saltó velozmente a la persecución, Aomine optó por la segura, rodear y esperar por el otro lado.

Entonces arrancó de nuevo.

- ¡Oi! ¿¡Cuantos había dicho Himuro que eran?! ” habló su compañero alterado por la radio.

- ¿¡Ah?! ¿De qué hablas imbécil? ¡Sólo es uno! ” respondió Aomine sin quitar la vista de la carretera.

- ¡Aparecieron dos más! ” avisó el chico.

- ¡Mierda! ” maldijo por lo bajo el moreno, con una mano tocó la pantalla que tenía delante de su tablero, justamente arriba del radio y comenzó una llamada. ” Tetsu, aparecieron dos más, necesitamos refuerzos.

- Entiendo, estoy en camino.

Una monótona voz habló por la radio y Aomine dobló bruscamente por una esquina parándose justamente frente a la salida del parque.

¿Sería mejor esperar? ¿Debería seguir la persecución a pie?

- ¡El primero está saliendo! ¡Atrapalo! ” gritó su compañero alertándolo.

¡Ah! ¡Mierda! Sería a la mala.

Salió se su carro y se aflojó la corbata y la camisa desabotonando los primeros botones, miró atentamente frente a él y pudo verlo, a un chico castaño corriendo muy rápido.

Extendió sus manos frente a él y sus ojos se tornaron de un color azul pálido, una fuerte ráfaga de viento salió de sus palmas, aire que cegó momentáneamente al blanco, el chico perdió el ritmo y comenzó a disminuir la velocidad, Aomine aprovechó eso para atraparlo. Cuando estuvo lo suficientemente cerca se abalanzó encima de él tumbándolo sobre el suelo, pero aquel chico comenzó a focejear contra él, tanta era au desesperación de salir huyendo de ahí que le propino una buena y fuerte patada en el estómago al moreno.

Aomine se retorció por el dolor de aquel repentino golpe pero no lo soltó, apretó la quijada, tumbó al chico completamente sobre su espalda y se subió encima de él, tomó sus manos por encima de su cabeza y le miró a los ojos.

- Ya me hartaste bastardo.

Fue lo único que dijo el moreno antes de que sus ojos cambiaran a un tono azul cielo y el chico se quedara inconsistente en el suelo, Aomine se separó de él enderezándose en su lugar y al final soltó un profundo suspiro.

No tan a lo lejos escuchó el motor de una motocicleta, ese era su compañero, ese bastardo se suponía que venía siguiendo de cerca a ese chico, ¿en que momento se había quedado tan atrás? Dio un par de pasos para acercarse y ayudarlo pero cuando se percató que frente a él estaba una brillante cabellera celeste se relajó bastante, los refuerzos había llegado a buen tiempo.

Kuroko se paró en la entrada del parque y miró fijamente al par de chicos que trataban de huir desesperadamente. Uno tenía el cabello negro y ojos amarillos y el otro tenía el cabello color vino y ojos cafés. Al verlo ahí parado sin hacer nada se detuvieron tratando de mantener un poco de distancia. El persecutor de la moto se detuvo detrás el ellos y se bajó de la moto.

- Rindanse y nadie saldrá lastimado. ” habló fríamente el peliceleste.

Ambos chicos se miraron entre si y después de un par dr segundos ambos asintieron con la cabeza, al final fue el chico de cabellos negros el que se decidió por atacar primero, corrió rápidamente hacia el peliceleste y cerró su puño preparando su primer ataque pero al estar a centímetros de distancia del peliceleste este desapareció completamente. El joven pelinegro abrió los ojos sorprendido, sin saber a donde lanzar el golpe se quedó ahí, parado desorientado, acto seguido un fuerte gancho a la mandíbula le impactó con tanta fuerza que lo dejo tumbado en el suelo, el joven peliceleste apareció de nuevo y colocó su pie en el estómago del chico. Le dirigió una fría mirada al último chico y esperó.

El último chico miró aterrado al joven de cabello celeste, comenzó a respirar de forma irregular y del bolsillo de su pantalón sacó un par de canicas, cuando su mano comenzó a brillar ligeramente el hombre con el casco se sacó los guantes de cuero y colocó sus dedos sobre el cuello del joven.

Al final, los tres chicos fueron subidos al auto que manejaba el moreno no sin antes colocarles unas esposas un tanto especiales para cancelar sus poderes por un rato. El moreno condujo un par de horas hasta salir de la ciudad, llegaron a un terreno inmenso, cubierto de árboles y maleza, al adentrarse más en ese inmenso bosque un enorme edificio apareció frente a ellos.

La seguridad era exagerada. Era la mayor fortaleza de la ciudad. Un edificio inpenetrable.

Los chicos vestidos de negros dejaron a los más jóvenes en manos de un rubio y un pelimorado y se retiraron a descansar.

Así eran todos los días de su vida.

¿Qué eran ellos?

Se podía decir que ellos eran una organización más o menos secreta. Eran conocidos entre los "Grifted" pero su misión principal era proteger.

Un día, de repente, en la tierra la gente comenzó a ser especial. Comenzó a aparecer gente dotada de un poder especial, a ellos se les comenzó a llamar "Grifted".

Pero no había explicación alguna para eso, nadie sabía si era un virus, una anomalía genética, el efecto de un rayo gama o simplemente un milagro. Y ahí aparecieron los "Hunter Killers" que eran gente que se dedicaba especialmente a cazar y matar a los Grifted.

Hubo un tiempo donde la gente temía por su vida, ser un Grifted podía ser aquello que podría arruinar tu vida entera si un Hunter Killer te encontraba, hasta que apareció la organización "Generation of miracles" que era un grupo de Grifted trabajando en conjunto para proteger a tantos dotados como pudieran.

Lo que ellos hacían era cazar a los dotados antes de que un verdadero Hunter killer los encontrara y les ponían un brazalete especial para identificarlos y así saber su poder.

También, ese brazalete servía como rastreador, si algún dotado se llegaba a encontrar en problemas ellos irían a rescatarlo cuanto antes.

Su trabajo era pesado, pero lo hacían por una buena causa.

- A veces pienso que no me pagan lo suficientemente como para tratar con mocosos así. ” se quejó Aomine antes de dejarse caer en el sofá que tenían su zona de descanso.

Su compañero que venía caminando detrás de él se rió por lo bajo, se quitó por fin el casco de la moto y se sentó junto a él.

- Hubieras hecho lo mismo, debes admitirlo. ” respondió el joven pelirrojo.

Aomine se movió un poco para verlo y después de meditarlo un rato llegó a la conclusión de que en efecto si, sí él tuviera de nuevo esa edad haría lo mismo que ellos.
Se acomodó hasta quedar recostado en el regazo del pelirrojo y le miró.

- Ese no es el punto Taiga, me molesta cuando no puedo golpearlos, no soy tan ruin como para golpear niños. ” respondió Aomine en una queja.

El pelirrojo soltó de nuevo una carcajada y comenzó a acariciar suavemente el cabello del moreno que se encontraba recostado sobre su pierna.

Ambos eran miembros principales de la organización, sus poderes eran indispensables para cada operación.

Aomine tenía el poder de la réplica. Podía poseer el cuerpo de un dotado 3 segundos y cuando volvía a su cuerpo, su alma se llevaba un poco de la esencia de esa persona, lo suficiente como para poder reproducir a la perfección el poder del antes poseído.

Por otro lado Kagami tenía el poder de la cancelación. Con el más mínimo roce el pelirrojo podía anular el poder de cualquier dotado.

- Buen trabajo.

Habló una tercera voz entrando por la puerta de la sala de descanso y el moreno fruncio el ceño. Era la odiosa y melodiosa voz de su capitán de equipo Akashi.

- Tenemos sus nombres y sus poderes en el registro quizá te sirva alguno de ellos. ” mencionó el pelirrojo arrojándole un montón de papeles al moreno.

- Lo dudo, con sólo recordar el poder del chico cohete me da una jaqueca. ” respondió Aomine negando con la cabeza.

Kagami tomó los papeles entre sus manos y comenzó a leer los registros recién escritos.

- Poder de la aceleración, poder de agrandamiento y... Quizá este te sirva. ” respondió Kagami pasándole un par de papeles.

- Piroquinesis... ” leyó Aomine según el informe. ” ¿Crees que sea útil? El fuego es más peligroso que utilizar solo viento. ” respondió con duda el moreno.

- Contra un killer hunter servirá. ” respondió Akashi mirándolo de lejos.

Aomine chasqueo la lengua y al final soltó un largo suspiro.

- De acuerdo, tomaré su poder. ” respondió el moreno fastiado.

- Akashi, hay algo que no se ve bien.

Midorima entró a la sala de estar y el heterocromatico le miro desconcertado, detrás del chico de cabello verde entraron Kise, Murasakibara y Kuroko. Todos intercambiaron miradas y el ambiente comenzó a tensarse.

- ¿Qué pasa? ” preguntó el capitán.

El joven de anteojos sacó de su pantalón un celular algo grande y bastante avanzado, comenzó a mover un par de cosas en el aparato y el celular de todos vibró.

- Les estoy transmitiendo en tiempo real las cámaras de seguridad que hay al rededor de la base y las cámaras captaron a 3 personas merodeando cerca, dos hombres y una mujer. ” habló el peliverde al mismo tiempo que todos miraban las pantallas de su celular.

En el vídeo se mostraba a dos hombres altos, cabello negro y ambos vestían de negro, junto a una mujer de cabello rosado con vestido negro. Todos se miraron extrañados entre ellos.

- ¿Por qué los protocolos de seguridad no se han activado? ” preguntó Kise alzando los hombros.

- Ese es el punto al punto al que quería llegar. ” explicó el peliverde. ” No puedo activar la seguridad para hacer algo contra ellos. De alguna manera están bloqueando mi poder.

- ¿Bloqueando? ” cuestionó Kagami.

- Si lo están bloqueando quiere decir que... ” especuló el pequeño fantasma sin terminar la frase.

- Son dotados. ” completo Akashi la frase mirando al frente.

- ¿¡Ah?! No tiene sentido. ¿Por qué un par de dotados querrían atacarnos? ” exclamó Kise negando con la cabeza. ” Somos los buenos.

- No sé, pero todos, preparense para salir. Vamos a cazarlos. ” ordenó con seriedad el capitán.

Aomine miró de reojo a Kagami y le guiño el ojo dándole una señal de que todo estaría bien.
Todos caminaron a otra habitación donde comenzaron a cambiarse y a equiparse. Dejaron las ropas formales por una playera negra, pantalones y botas militares y un par de armas de fuego. Todos se colocaron un pequeño y redondo auricular dónde escucharían las ordenes de su capitán.

- Bien, escuchen todos, la prioridad es capturarles vivios pero en caso de peligro tirar a matar. Dispersense y rodeenlos, Kise, tú quedate en la base en caso de que alguien salga herido tú serás el apoyo, Midorima necesitó ojos en el cielo, cuento con ello.” ordenó Akashi. ” De ser un caso extremo yo iré al campo de batalla, es todo.

Las puertas de la base se abrieron y todos salieron caminando tranquilamente, frente a ellos un extenso bosque se mostraba, profundo e imponente. Kagami caminó hacía la derecha y Aomine hacia la izquierda, Kuroko desapareció de la vista de todos y Murasakibara comenzó a seguirlos muy de lejos.

Un fuerte estruendo se escuchó y las aves que estaban en los árboles salieron volando. Este pequeño detalle no se escapó de la atención de Aomine quien miraba extrañado las copas de los arboles.

- ¿Ves algo desde arriba Midorima? ” preguntó Aomine esperando tener respuesta, sin embargo solo obtuvo un gran silencio como respuesta. ” Oe, te estoy hablando cuatro ojos.

Una fuerte interferencia comenzó a sonar, Aomine se encogió de hombros por el volumen tan alto del auricular, antes de retirárselo a lo lejos y de una forma muy distorsionada pudo escuchar un "Salgan de ahí".

Aomine abrió los ojos tanto como pudo, cuando se dio vuelta para regresar a la base un brusco movimiento le hizo perder el equilibrio tirándolo repentinamente al suelo. Era sólo el inicio de un fuerte y devastador terremoto. Los movimientos eran tan bruscos que no se le permitía ponerse de pie.

- ¿Alguien me escucha? ” preguntó esperando tener respuesta de alguien.

- ¡Todos agachense!

Se escuchó una voz desesperada por el auricular, su corazón se heló cuando supo que esa voz era de Kagami. Sin pensarlo dos veces se tiró al suelo pegando su pecho a la tierra, apenas rozandole una extraña esfera paso por encima de él, cuando se dio cuenta de que esa esfera se había tragado una parte del bosque supo que esto no era un ataque normal.

El terremoto se detuvo y sus manos temblaron, su vista estaba distorsionada, estaba mareado, en cuanto pudo enfocar bien la imagen ante sus ojos le dejó sin aliento. Más de la mitad del edificio había desaparecido, no estaba, no había rastros de nada.

- ¿Akashi..?

- ¡Aomine-kun!

Aomine se giró para ver detrás de él y lo único que vio fue a su amigo muy mal herido producto de la extraña esfera de hace un momento.

- ¡Tetsu! ” corrió a acercarse a él y su pequeño amigo se dejó caer.

- Ve de nuevo a la base... ” habló Kuroko con una voz sumamente cortada y ronca.

- ¡Estás loco! ¡No pienses que te dejaré aquí! ” exclamó Aomine tratando de levantar a su amigo.

- No creas que soy estúpido... ” tosió el peliceleste con seriedad ” Ya sé que tengo un enorme hueco en el estómago, no hay forma en la que... Pueda salvarme.

Aomine apretó la quijada, apenas caía en cuenta de lo grave que era su herida.

- Estas loco, Kise puede sanar esto en un segundo, ahora. Vamos. ” respondió Aomine acomodando a su amigo entre sus brazos para levantarlo.

- Llevate mi poder. ” mencionó el fantasma con esfuerzo.

Aomine le miró sorprendido. Era la primera vez en su vida que veía tanta sangre entre sus manos, era verdad que en el pasado había matado a un par de Killer Hunters pero jamás había tenido que lidiar con una situación familiar, nunca había tenido que ver a sus aliados de esa manera.


- ¡Aomine! ¡Reacciona! ¡Escuchame! ¡Ve a la base, llevate tanta información puedas de la base de datos y huye! ¡Perdimos! ¡Solo vete! ” le gritó el peliceleste con su último aliento. ” No importa lo que pase, vete.

Aomine tenia un enorme nudo atascado en si garganta, de alguna manera estaba en un shock tremendamente grande, simplemente no sabía que hacer.

- Hazlo... ” mencionó Kuroko.

Aomine miró fijamente a su sombra a los ojos y estos cambiaron de color por un amarillo pálido cuando volvió en sí, los ojos de su compañero se cerraron lentamente. Soltó con una suavidad poco característica de él el cuerpo de si amigo y miró a su al rededor.

El bosque estaba destruido, el edificó en ruinas, sus manos tintadas de carmín y el enemigo ahí a fuera. Moviéndose de forma torpe dio un par de pasos sin saber exactamente a donde ir, trató de pasar saliva pero su garganta estaba tan seca que ni eso podía hacer.

- Kagami.

Debía encontrar a su pareja, debía encontrarlo y salir de ahí fuera como fuera.

Corrió de forma extraña entre las ramas caídas de los árboles, su respiración era extrañamente irregular y su visión era extremadamente borrosa.

A pesar de ser de elite, de ser un adulto de 26 años era la primera vez que lidiaba con un desastre así, nunca había experimentado la muerte de un aliado. No sabía exactamente que sentir.

El crujido de las ramas le alertó, aquel ruido ajeno a él lo hicieron volver en sí, sin embargo lo que vio le dejo en un shock aún más grande.

Kagami estaba tendido en suelo, sus ojos parecían opacos y su nariz y boca sangraban, sobre él estaba su verdugo, era nada más y nada menos que él mismo.

Una persona, que tenía su mismo tono de piel, su color de cabello, su mismo rostro había terminando fácilmente con la vida de su pareja.
Algo dentro de él se quebró, cuando vio que el otro se había percatado de su presencia desenfundó una pistola, le apuntó directamente a la cabeza pero una esfera idéntica a la otra se tragó la boca de la pistola. El farsante le sonrió sínicamente mientras lamía uno de sus dedos los cuales estaban cubiertos con la sangre del pelirrojo.

Un par de disparos externos le hicieron volterar, era Murasakibara el cuál tenía una herida aun más grave que la de Tetsu, simplemente le asintió con la cabeza y Aomine salió corriendo hacía las ruinas que ahora eran la base.

Estaba aturdido, era obvio.

Jamás había visto una masacre igual a esa. Y que demonios eran esos tipos. ¿Como pudieron eliminarlos tan fácilmente? ¿No era un chiste? ¿Alguna clase de ilusión?
Se dejó caer al suelo y trato de procesar todo.

No había podido pelear ni un poco. No había podido proteger a sus amigos, mucho menos a su pareja, le había guiñado el ojo a Kagami para darle confianza y tranquilidad. ¿Qué demonios le estaba contando ahora?

Una reacción tardía a eso fue una enorme ira, ira de ver morir a sus amigos ante sus ojos, ira de no haber peleado, ira de no haber hecho nada.

Un par de pisadas se escucharon cerca, ahora si estaba enojado. Antes lo habían agarrado en shock, aturdido por el terremoto y los ataques repentinos pero ya no más.

Sus ojos cambiaron a un negro profundo y se puso en posición de combate. Aquella persona sonrió al verlo, de una forma tranquila se paró frente a él.

Aomine le miró de arriba a abajo, un chico de piel blanca, ojos plateados y cabello blanco.

- ¿Eres Aomine? ” preguntó el chico de cabello blanco.

Aomine apretó la quijada y tomó al joven por el cuello de su playera, lo levantó tanto como pudo y su mirada comenzó a cambiar a una dorada

- ¿Quién eres tú maldito bastardo y qué es lo que quieres? ” preguntó pausadamente Aomine conteniendo lo más que podía su enojo. No quería matarlo antes de sacarle información claro estaba.

El joven peliblanco chasqueo la lengua y sin usar casi fuerza se zafó del agarre del moreno.
Aomine claramente no razonaba, solo sabía que debía desquitar su enojo con algo o alguien y él era el elegido.

- Escuchame bien idiota, yo no soy tu enemigo, esos de allá si. ” trató de explicar el peliblanco poniendo ambas palmas frente a él mostrando que no tenía intención alguna de hacerle daño.

Importándole poco, Aomine soltó el primer puñetazo el cual fue esquivado por el contrario de puro milagro.

- ¡Escuchame! ¡No hay tiempo! ” suplicó el otro.

- ¡Y una mierda! ” Aomine estuvo a punto de soltarle una patada en la rodilla derecha pero el joven habló.

- En un minuto aproximadamente habrá un terremoto igual al primero, si no me escuchas no habrá manera de salvar a nadie. Todos moriremos aquí, hablo en serio.

El chico le miró con suplica, Aomine lo pensó un par de segundos, no podía detenerse ahora a escuchar a un lunático que le hablaba con la mayor familiaridad del mundo, todos estaban muertos y una charla amena no era la solución. Volvió a cogerlo del cuello de su camisa y antes de estrellar su puño contra su cara un fuerte temblor azotó el lugar, tal y como había revisto el albino.

Tanto él como el otro chico cayeron inevitablemente al suelo y fuertes estruendos se escucharon a su alrededor avisando que la estructura no aguantaría más.

- ¿Ya me crees? ” preguntó el desconocido.

- ¿Quién eres? ” preguntó seriamente Aomine.

- Me llamo Sora y he estado buscandote Aomine Daiki-san. ” le dirigió una media sonrisa y Aomine se tensó.

- ¿Qué quieres? ” preguntó el moreno de forma cautelosa.

El chico suspiró.

- ¿Siempre tienes que hacer la misma pregunta? Esto me está cansando. ” replicó Sora. ” No importa, escucha, esta no es la primera vez que nos encontramos, pero el resultado siempre es el mismo, no hay otra oportunidad ¿Entiendes?

- ¡No! ¡En absoluto! ” se quejó Aomine.

- Mi poder es el de regresar en el tiempo. ” soltó el chico de la nada. ” He usado este poder para evitar este evento pero inevitablemente sigue sucediendo y en todos los finales tú y tus amigos terminaban muriendo. Después de un severo análisis entendí que yo no soy el que debe evitar esto, sino tú. ” trató de explicarle claramente.

Regresar en el tiempo. No tenía idea de que existía un poder así.

- Escucha, tú debes copiar mi poder y usarlo tú. Pero hay un par de cosas que debo decirte antes. Este poder tiene un fallo, cada vez que lo usas eventualmente te irás quedando ciego y si llegas a perder la vista completamente. Jamás podrás volver atrás de nuevo. Y... Esto es más como un favor personal, recuerda estos nombres Nozomi y Mizuki Niwa, ambas murieron tratando de llegar hasta aquí, debes salvarlas. ” pidió Sora.

Aomine simplemente no podía procesar todo eso.

- Hazlo, ya no hay tiempo. ” le alertó el otro.

Un fuerte estruendo se escuchó, era un derrumbe, sus ojos miraron al chico y cambiaron a un amarillo pálido, poseyó el cuerpo del peliblanco, cuando volvió en sí pudo ver como se acercaba peligrosamente el techo, caería sobre ellos.

- La habilidad sabe a que época llevarte, hazlo.

Aomine pudo verlo, una media sonrisa vacía y ojos perdidos, el chico desee un principio nunca pudo verlo cómo tal, esos minutos que habló con él, siempre estuvo ciego.
Sin poderle responder nada simplemente asintió con la cabeza, activó el poder pensando en que quería volver, quería cambiar aquel resultado.

” Primera línea. ”

Su vista se tornó borrosa y un fuerte dolor de cabeza le azotó aturdiéndolo por completo. Cuando volvió a abrir los ojos un techo color azul cielo fue lo primero que pudo ver.

Brincó de la impresión y se sentó de golpe en su lugar. Estaba en una habitación la cual le pareció particularmente familiar. La observó detenidamente y pasó saliva con algo de dificultad, no podía creer lo que estaba observando.

Se encontraba en su habitación de cuando estaba en secundaria, en su pared estaba colgado su uniforme blanco con azul celeste, se miró al espejo que estaba dentro de su armario y el reflejo que vio ahí le puso nostálgico.

Jamás pensó que algún día podría volver a verse a sí mismo con unos 14 años de edad.

Un par de golpes sonaron en su puerta sorprendiéndolo aún más.

- Vas a llegar tarde. Deja de dormir y baja a desayunar.

Aquella voz, una voz femenina, dulce y cálida. La voz de su madre. Un nudo se formo en su garganta y con voz rasposa solo atinó a decirle.

- Sí, bajo enseguida.

Se volvió a sentarse al filo de su cama y miró a la nada. Hasta hace un par de horas estaba en un campo de batalla y no hacía mas de 30 minutos había visto a sus amigos muertos y... ¿ahora estaba en una época donde ni siquiera de conocían?

¿Esto era real?

De forma robótica se colocó el uniforme y tomó su maleta para salir de su habitación, caminó por el pasillo para bajar la escaleras de madera y en la mesa vio a su madre sentada desayunando.

- Buenos días. ” saludó sin ganas

Su madre funció el ceño y le miró extrañada, se levantó su asiento y se paró frente a él.

- ¿Te sientes bien? Te ves pálido. ” las cálidas manos de su madre le helaron el corazón.

Aomine retrocedió un par de pasos y con una mueca torcida sonrió ligeramente.

- Estoy de maravilla. ” se dio media vuelta en su lugar y caminó directamente a la puerta.

- ¿Pero es que no vas a desayunar? ” preguntó preocupada su madre.

- Estoy bien, debo irme.

Aomine abrió la puerta dejando a su madre parada en el mismo lugar de antes con la boca abierta. Cuando salió de su casa soltó un profundo y áspero suspiro.
Volver de golpe a esa época era una patada en el culo.

No sabía de qué manera ver a su madre a los ojos ahora tenía ante sus ojos a la mujer que le había dado la vida, la única mujer que había amado toda su vida y la única mujer que le había metido una puñalada por la espalda echándolo de la casa cuando se enteró que su hijo, su único hijo era un dotado.

Y la única persona que le acogió durante esa época fue Tetsu quien le recibió con los brazos abiertos en la casa de su abuela.

Era una época horrible.

Caminó a la escuela, desganado, sin saber que esperar exactamente. Y al entrar al instituto fácilmente pudo identificar a sus amigos o aquellas personas que serían sus amigos. Quería acercarse y hablar con ellos pero no sabía de qué manera hacerlo sin parecer un completo lunático.

Entró a clases y todo normal, el tiempo transcurrió y el final del día se dio, una semana después entró al club de baloncesto, equipo principal.

Despertar, ir a la escuela, ir a club y volver a casa. De esta manera pasó alrededor de un mes y él ni siquiera podía lidiar con su madre.

Cuando era adolescente era un joven carismático y muy enérgico, positivo y hasta podría decir tranquilo. Fue en un momento de abandono, hormonas y depresión en donde él se había vuelto apático y malhumorado.

- Esto no está llevando a ningún lado. “ suspiró Aomine mirando el techo de su habitación.


Había tratado de hablar con Akashi de acercase un poco para ser más cercanos pero todos le evitaban y a veces sentía que estaba actuando con demasiada confianza ante ellos.


- Creó que Tetsu es la clave de esto. “ se mencionó a si mismo soltando un profundo suspiro.


A la mañana siguiente fue a la escuela, estaba impaciente de poder comenzar las actividades del club y de poder hablar un poco con su antigua sombra. Pero el día pasó lento y aburrido, cuando estaba más que abatido llego la hora de ir a entrenar al club.


A paso rápido se dirigió a un gimnasio en específico, el gimnasio de la tercera clase y ahí lo vio, al pequeño peliceleste estirando tranquilamente se abalanzó prácticamente sobre él y le miró fijamente


- Necesito hablar contigo. “ le dijo Aomine desesperado.


La pequeña sombra frunció el ceño y después de un momento cayó en cuenta de quién era.


- ¿Aomine-kun? “ fue la única frase que soltó Kuroko en ese momento.


Ambos salieron del gimnasio para hablar, se sentaron a la sombra de un árbol y la mente de Aomine se puso en blanco. ¿De qué demonios le iba a hablar a ahora?


- Esto… ¿Qué era eso que me querías decir? “ pregunto directamente el pequeño fantasma.


- Te he visto jugar antes, eres realmente bueno. “ soltó Aomine a la nada. “ una persona con una habilidad como la tuya debería estar en nuestro equipo.


Los ojos del peliceleste brillaron. Que alguien del nivel de Aomine le halagara de esa manera le conmovía demasiado y más en ese momento cuando él había tenido la vaga idea de dejar el deporte porque quizá no era lo suficientemente bueno.


- Gracias, me halaga que creas eso pero… no soy tan bueno como crees. “ respondió apenado el más bajo.


- Esta tarde, al finalizar el entrenamiento, te presentare a un par de amigos. ¿Bien?


Aomine le extendió el puño al peliceslete y este le choco puño con puño. Una enorme sonrisa se dibujó en el rostro del moreno y una tranquilidad profunda le llenó.


” Primera línea ” (2)


Después de haber llevado a Akashi al gimnasio ese día se interesó en la sombra y le hizo la famosa y dichosa invitación a cambio de desarrollar un estilo único de baloncesto. El moreno le aconsejó tanto como pudo y entrenó arduamente hasta poder adaptar perfectamente su propio estilo de baloncesto.


Habían pasado cerca de dos meses, las cosas marchaban más o menos bien, al menos ahora no se sentía tan solo, un día simplemente decidió dar un salto de confianza y contarle todo al pequeño peliceleste. Había dos opciones seguras o le creía o le tachaba de loco.

Como solían hacerlo en épocas de secundaria, después del entrenamiento fueron al famoso Magi Burger y llevaron toda la comida para llevar, caminaron hasta un parque cercano y se sentaron en una banca. Kuroko tomaba felizmente su malteada mientras que Aomine simplemente tenía la mirada perdida.


- ¿Sucede algo? “ pregunto su sombra al verlo tan distraído.


- Dime Tetsu ¿Qué opinas de los dotados? “ pregunto Aomine sacando a la luz el tema.


Antes, cuando había descubierto sus poderes fue por un simple accidente, ese día estaba tan enojado de no poder conseguir un oponente digno que durante un partido había poseído el cuerpo de un jugador que le estaba cubriendo y durante esos cuatro segundos lanzo el balón desde el cuerpo del otro y metió una increíble canasta cuando había vuelto en sí al principio creyó que esa era su única habilidad, poseer el cuerpo de alguien más por un corto tiempo, pero un día poseyó accidentalmente el cuerpo de un dotado y cuando se dio que podía usar los poderes de aquel dotado fue en ese entonces que descubrió que su verdadero poder era el de replicar los poderes de los demás.


- Los Grifted… - menciono Kuroko mirando hacia el suelo. “ Me parece que son personas completamente normales que merecen una vida normal, ellos simplemente tienen habilidades especiales, pero todos poseemos alguna habilidad especial entonces… pienso que son personas cualquiera. “ respondió tranquilamente el peliceslete. “ A todo esto, me parece extraño que te interese un tema así. No pareces el tipo de persona que se interesa por un tema de ciencia ficción.


- La verdad Tetsu, es que soy un Grifted, un dotado.


El ambiente se tensó, Kuroko cambio por primera vez su monótona expresión del rostro y miro fijamente el rostro de Aomine.


- ¿Escucharías una larga historia? “ preguntó Aomine sonriendo de lado.


Necesitaba ser escuchado y aconsejado. Y Kuroko era la persona perfecta para aquello, una de sus mejores cualidades del peliceste era escuchar, él, fuera de todo, siempre era muy objetivo y directo.

Demasiado directo.

Le contó todo, del pasado, de su equipo, las preparatorias, el equipo que formarían más adultos, la base, su trabajo y finalmente las muertes. Cuando termino de contar todo miro la expresión en el rostro de su amigo y pensó que después de eso Kuroko nunca le volvería a dirigir la palabra, pero después de un ligero suspiro del otro pudo mirar como este asentía con la cabeza.


- Si no fueras tú, pensaría que has visto demasiadas películas de ciencia ficción, pero no pareces ser el tipo de persona que bromea con temas así por eso es que llegue a la conclusión de que me estás diciendo la verdad. “ respondió Kuroko mirándolo a los ojos.



- ¿Me crees?.. “ respondió Aomine sorprendido. ” ¡¿De verdad?!


- Sí, siempre he pensado que hay tantos poderes como personas en el mundo y la idea de una habilidad que te hace regresar en el tiempo no es tan descabellada si lo ves desde cierto punto. “ respondió la sombra brindándole una media sonrisa.


Aomine suspiró aliviado.



- Aunque me hayas hecho un enorme spoiler contándome mi muerte te creo. Gracias por decirme que no voy a llegar a tener más de 30 años. “ respondió kuroko de forma seria.


Aquello era una broma, una muy mala, pero al final era una broma del peliceslete para tratar de suavizar el ambiente.


- Estoy aquí para evitar tu muerte, idiota. “ respondió Aomine mirándolo.


- Debió ser difícil mirar la muerte de tus amigos, no puedo si quiera imaginarlo. “ respondió Kuroko un poco de pena.


- Lo fue, pero ahora será diferente. “ menciono Aomine de una forma seria.


- ¿Sabes que es lo que opino al respecto Aomine-kun? “ pregunto Kuroko. “ Que el futuro no es tan fácil de cambiar, costará demasiado corregir algo así, pienso que te va a llevar tiempo y esfuerzo. Y no creo que Midorima-kun o Akashi-kun sean tan comprensivos como yo, ellos se ven más del tipo escéptico. Por eso, quiero pedirte una cosa. Si vuelves a volver a una línea temporal donde no nos conozcamos aun, espera un poco para contarme esto, seamos amigos al principio y después cuéntame de nuevo esto y tendrás mi completo apoyo. “ le explico Kuroko sonriendo de lado.


Aomine asintió con la cabeza y le devolvió la media sonrisa.


- Entonces… ¿Debería ir hablándole a mi abuela de ti? “ pregunto de forma divertida la sombra.


Aomine soltó una carcajada y asintió con la cabeza.


” Primera línea ” (3)


Después de batallar con Akashi fue todo un reto hacerle creer la disparatada historia que le estaba contando, pero la única manera de hacerle creer eso fue dándole un par de predicciones exactas. Una vez de su lado reunir a los demás no fue tan difícil si lo pensaba de cierta forma.

Todo estaba saliendo desastrosamente bien.

O eso parecía.


Sin previo aviso un día un grupo de killer hunters les ataco. Había sido un tonto, había divulgado libremente que él era un dotado, se defendieron como pudieron pero no eran lo suficientemente fuertes para ganar. El resultado de esa batalla, una derrota inminente.

Sin poder hacer más uso la única habilidad que tenía, volvió a saltar en el tiempo y volvió a su punto de partida.


” Segunda línea ”


Ahí estaba de nuevo, el techo de su habitación y su uniforme azul celeste.


Después de aquella platica con el peliceleste comprendió algo, que no debía apresurarse a los hechos, que debía ser cauteloso y aún más importante debía ir a su tiempo.


Los meses pasaban y dejó que todo se fuera dando, la forma en la que conoció a Tetsu volvió a ser como la primera vez, en el gimnasio de tercer nivel, la forma en que Akashi le reclutó fue normal, hasta la forma en la formar su equipo lo fue.


Lo único que se salió de sus planes fue que un día, caminando por los pasillos de su escuela se topó por sorpresa con aquella chica de cabello rosado que lo había atacado ese día que todos habían muerto, no había duda, era la misma. La forma y el color de su cabello aún seguían grabados en su memoria y jamás se había dado cuenta de que ella asistía a la misma escuela que él. Esa tipa sería una completa lunática en un futuro no tan lejano. Debía detenerla a toda costa.


Ese día la siguió por toda la escuela, y lo pensó por varias horas, atacarla o seguirla el resto del año escolar. Opto por seguirla, la siguió un par de días y la chica no hacía más que asistir a clases, saltarse la clase de gimnasia y estar horas en la azotea.


Ella sería una potencial amenaza después de un par de años, no tenía otra opción más que deshacerse de ella. Odiaba la idea de tener que lastimar a una chica pero no tenía opción si pensaba en todas las muertes que habría si la dejaba vivir.


Era cruel, pero era necesario. El día que decidió eliminarla la siguió, se había aprendido sus rutinas y sus horarios, sabía a qué hora subía a la azotea todos los días y el plan era sencillo, poseer su cuerpo y tirarse de la azotea, parecería un suicidio y eso haría un cambio drástico en las cosas, quizá la batalla que podrían llegar a tener en el futuro seria menos difícil con ella fuera del camino.


Una vez ella estuvo en la azotea espero un poco para que ella se colocara lo más cerca posible del barandal y cuando vio que ella se sentó recargándose en el barandal abrió la puerta de la azotea y se acercó rápidamente a ella.


- Oye. “ la llamó para atraer su atención y cuando ella alzo la vista aprovecho para mirarla a los ojos y poseer su cuerpo.


Una vez teniendo control de ella se levantó lo más rápido que pudo, saltó el barandal y se lanzó al vacío.

Cuando volvió en sí se asomó por el barandal cuando escucho un agudo grito.


- ¡No quiero! “ gritó ella a un par de metros del suelo, su cabello comenzó a brillar de un rosa brillante y toda la escuela se sacudió.


Cuando ella cayó al suelo a Aomine le pareció ver que el golpe que ella se había dado no había sido tan grave como esperó pero lo malo vino después de eso, la tierra que estaba alrededor de ella se partió, y de la nada un fuerte y repentino terremoto comenzó, era ella la que tenía el poder de los terremotos, la escuela se sacudió de una manera tan brusca que los edificios comenzaron a venirse abajo. Aomine comenzó a negar con la cabeza y antes de que la situación empeorara activó la única habilidad que tenía y volvió de nuevo al punto de partida.


” Tercera línea ”


Suspiro de una forma profunda al ver de nuevo al ver el techo de su cuarto. Había comenzado de nuevo. Cerró los ojos y en su mente recordó a aquel pelirrojo que tanto quería, quería verlo de nuevo, le extrañaba muchísimo.


- Quiero verlo…

Se dijo a sí mismo, durante esa época el pelirrojo aún seguía estudiando en América al otro lado del mundo.

Recordó su cabello, su aroma, au voz, su sonrisa y su corazón se encogió al recordar la cruel muerte que había tenido.

Debía seguir haciendo eso sinde verdad quería salvarlo.


” Tercera línea ” (2)




Fue ahí donde comenzó a notar el pequeño defecto que tenía la habilidad de volver en el tiempo, su vista comenzó a hacerse más borrosa, era molesto pero era tolerable, aun sentía que no eran necesarias un par de gafas.


Debía pensar en una manera distinta de lidiar con ella, era un peligro andante. Ahora que sabía su habilidad y su apariencia, tendría que ser más fácil llegar a ella.

Desde el primer día su mirada se fijó en ella, la observó todo el día todos los días, y dejó pasar el tiempo, no lo sabía pero de alguna manera noto que su mirada se opacaba con el paso de los días, decidió dejarla tranquila un tiempo y después de unos meses ella desapareció de la escuela.


Aún era demasiado pronto para reiniciar la línea, todavía podía sacar más pistas el respecto de esto. El equipo se formó y solo era cuestión de tiempo para que se revelara de forma simultánea que todos eran dotados, podía esperar un poco y hablar con Tetsu al respecto.


Un fin de semana caminando tranquilamente por las calles le pareció ver un chico familiar. El chico que paso a un lado de él le recordó a alguien pero no sabía exactamente a quien. Cabello blanco y ojos plateados, después de quemarse hasta la última neurona pensando, lo recordó, era el chico que le había dado esa habilidad. Cuando se giró para verlo se percató de que a mitad de calle estaba él junto a dos chicas mirándolo fijamente.

Después de sostener miradas durante un minuto aproximadamente ellos posteriormente se dieron media vuelta y se fueron, las chicas estaban vestidas con el uniforme deportivo de su escuela, fue gracias a la maleta que él se enteró que ellas asistían a la escuela media Suzaku.


” Tercera linea ” (3)


- ¡¿Intentaste matarla?! “ le gritó Kuroko en la cara.


Asintió fríamente con la cabeza y le devolvió la mirada a su amigo.


- No tenía opción. “ respondió con firmeza. “ Pero ella causó un gran terremoto, y todo salió peor.


- Se de quien hablas, ella va en mi salón, se fue de la escuela porque realmente la pasa mal. “ respondió Kuroko mirándolo “ En lugar de matarla directamente intenta hablar con ella, todavía faltan muchos años para que ella haga eso que estás diciendo, quizá aún hay tiempo de corregirla.


¿Tiempo? Si, quizá aún tenía mucho tiempo más.


- Respecto a lo otro, quizá el chico que te dio esa habilidad quería que lo buscaras en este tiempo, busca a los tres y ve a ver que descubres. “ aconsejó kuroko mirándolo fijamente.


Aomine asintió con la cabeza pero no estaba seguro. No estaba del todo confiado respecto a ellos. Pero al final no tuvo que ir a buscarlos porque ellos fueron directamente a él al día siguiente. Los tres estaban parados en la entrada de la escuela esperándole. Cuando vio a la chica del otro día no pudo evitar ladear la cabeza, ella le sonrió confiada y se acercó a él.


- Hola. “ le saludó ella.


- Hola. “ el moreno le devolvió el saludo.


- ¿Podemos hablar un momento? Aomine Daiki-kun. “ preguntó la chica sonriendo aún más.


Aomine les miró desconfiado, al final les siguió, si algo salía mal solo tenía que volver atrás y comenzar de nuevo. Los cuatro se dirigieron a una cafetería para hablar. Durante el camino Aomine se dedicó a examinar con la mirada a los jóvenes, la chica más baja tenía el cabello naranja, ojos verdes y piel bronceada, por otro lado, la otra chica que caminaba detrás de la de pelo naranja era más alta, tenía el cabello color bronce y ojos azules, y al final estaba el chico que había visto antes, cabello blanco, ojos plateados y piel blanca.


Al llegar tomaron la mesa más lejana y la chica de cabello naranja ordeno cuatro cafés, le miró directamente a los ojos y suspiró.


- Te había estado buscando. “ comentó ella. “ Sé quién eres, algo así, gracias a mi hermana. Tú tienes la habilidad de Sora ¿Verdad?


Aomine abrió los ojos sorprendido.


- ¿Quiénes son exactamente? “ preguntó Aomine mirándolos.


- Mi nombre es Nozomi y ella es mi hermana Mizuki, ambas somos dotadas, como tú. “ explicó la de cabello naranja.


- ¿Cómo sabes que tengo la habilidad de él? “ preguntó Aomine alzando una ceja.



- Fácil, por la habilidad de mi hermana, ella ha estado soñando con un grave desastre, más bien, múltiples desastres, pero ninguno parece estar pasando aquí, son desastres que han pasado antes, pareces estar metido en un problema enorme. “ respondió Nozomi sonriendo de lado.


- Tal parece que sí. “ respondió Aomine. “ A todo esto ¿Qué habilidades tienen?


Ellas se miraron entre sí.


- Predicciones. “ respondió la más alta.


- Robo. “ respondió la de cabello naranja.



” Tercera línea ” (4)


Después de aquella misteriosa reunión con Nozomi y su hermana recordó las palabras del Sora que le había dado esa habilidad.

Le había pedido que las salvará.


Quizá ellas inevitablemente estaban siendo perseguidas por un Hunter killer y el único que tenía posibilidades de salvarse era el chico.

Un par de golpes muy fuertes sonaron en la puerta de su habitación, antes de poder responder su madre abrió la puerta y le mostró una enorme y brillante sonrisa.


- Hay una chica bastante linda en la puerta preguntando por ti. Baja


- ¿Chica? ” preguntó Aomine alzando una ceja.


- ¡Si! Una chica de cabello naranja ¿Es tu novia? ¿La dejó pasar aquí? ” preguntó emocionada la mujer.


Esa maldita...


- No, bajaré a ver que quiere y no, no es mi novia. ” respondió indiferente el moreno.


Bajó rápidamente las escaleras y se colocó un par de zapatos, y abrió la puerta, se encontró a la chica de cabello naranja sentada en el escalón de su puerta y la miró.


- ¿Se te ofrece? ” preguntó Aomine de mala gana.


Ahora debería lidiar con su madre preguntando cada 5 minutos si esa chica sería alguna vez su nuera. Cerró la puerta a sus espaldas para que su madre no escuchará nada.


- Hablar contigo. ” respondió la chica esbozando una media sonrisa.


Aomine arqueo una ceja. Por alguna razón la chica se veía pálida y ligeramente sudorosa.

Se acercó un poco a ella y se agachó hasta quedar a su altura.


- ¿Sobre qué?


- Mi hermana, tuvo muchas visiones sobre ti. Pero la de hoy fue distinta, una chica, de cabello rosado, hay una oportunidad, habla con ella, reclutala. ” explicó Nozomi.


- ¿¡Ah?! ¿¡Estás loca?! ” espetó Aomine. ” ¡No estoy entendiendo nada!


- Las predicciones de mi hermana nunca fallan, intentalo, buscanos antes en la siguiente línea. Si cambias eso, las visiones de mi hermana cambiarán y podré guiarte. ” respondió Nozomi con voz áspera.


Aomine lo notó, ella estaba encogida en su lugar y ella abrazaba con fuerza su estómago.


- ¿Qué pasó? ” preguntó Aomine tocándole el hombro.


- Un Hunter killer nos encontró, mi hermana está muerta y Sora desaparecido, huí de milagro, pero no creó... Haberme salvado. ” respondió la joven enderezándose un poco, su camiseta y sudadera estaban manchadas de sangre. ” Debes comenzar de nuevo.


Activó el salto en el tiempo antes de que chica agonizará más, esa herida parecía estarla matando lenta y dolorosamente.


” Cuarta línea ”


Como ahora, ta había usado bastantes veces el salto en el tiempo su vista comenzó a volverse mala.

No alcanzaba a ver letras muy pequeñas u objetos muy lejos.

Entonces, faltando a la escuela el primer día fue a comprarse unos lentes de línea plateados. Nunca había necesitado lentes pero ya no tenía opción.

Lo malo de eso, ya no podría decirle cuatro ojos a Midorima.


Volvió a su punto de partida una vez más. Con un solo objetivo en mente siguió a la chica de cerca, muy muy de cerca, debía estudiar a su enemigo lo más que pudiera.

Aquella chica de cabello rosado seguía subiendo y subiendo por las escaleras del edificio hasta llegar a la azotea. La manera desganada en la que subía algunos días le sorprendía bastante a Aomine.

Este día en especial no lo recordaba, quizá fue uno de esos días donde decidió dejar de seguirla y después desapareció.

Se sentó en un escalón cerca de la puerta para poder seguir mirándola. Vio como ella daba vueltas sobre su lugar, se revolvía el cabello frustrada y al final, se recargaba en el varandal miraba hacia el vacío y después suspiraba resignada para sentarse en el mismo lugar de siempre, Aomine lo notó, sus labios comenzaron a temblar, ella ocultó su rostro abrazando sus rodillas.

Ella escondía lo más que podía su cara y aunque fuera un sonido muy débil él la escuchaba sollozar.

Esperaba no equivocarse, más bien, esperaba que aquella chica no se equivocará. Acomodó sus lentes sobre el puente de su nariz y se levantó de su lugar, caminó discretamente y se sentó a una distancia considerable de la chica, se quedó en silencio, esperando a que ella reaccionara y cuando ella se dio cuenta de la presencia del moreno soltó un agudo y estruendoso grito.

Aomine ladeó la cabeza tratando de controlar su mal genio para no gritarle por ser tan escandalosa a la chica, esbozó una forzosa sonrisa y la chica le miró con pánico.

- Hola. ” le saludó tranquilamente el moreno.

- Hola... ” saludó de vuelta la pelirosada.

El silencio cayó. Aomine carraspeo su garganta y le miró de reojo.

- ¿También huyes de clases? Yo lo hago a menudo, justo ahora debería estar en clase de matemáticas. ¿Qué clase estás matando tú? ” preguntó amenamente el moreno.

- Educación física... ” respondió en un murmullo la chica.

- ¿No se te dan los deportes? ” preguntó Aomine para que la plática no muriera.

- No es... Eso. ” replicó la chica.

- Hm...” el corazón de Aomine comenzó a latir rápidamente, venía la prueba de fuego. Si ella se alteraba un terremoto azotaría la escuela ” Te he visto antes, estas a dos salones del mío.

- Si, yo... También te he visto en los pasillos... ” respondió ella.

- Tú... ¿Eres un Grifted? ” preguntó directamente el moreno.

La chica se tenso, sus puños se apretaron y su mirada se oscureció.

- ¿Y qué si lo soy? ¿Me llamarás fenómeno? ” cuestionó ella fríamente.

- No, no es nada de eso. Es que... ” dudó, por primera vez en años, dudó de sus palabras. Juntando todo su valor se forzó a completar la frase. ” Yo también soy un Grifted. ” completó la oración y el lugar quedó en silencio de nuevo.

La fría mirada de la chica se suavizó, sus ojos se agrandaron y después de un par de segundos brillaron.

- ¿De verdad...? ” preguntó incrédula.

- Sí, de verdad. ” respondió el moreno. ” Así que, no te sientas sola, no somos los únicos en esta escuela, todo irá para mejor.

Le sonrió lo más honesto que pudo, los ojos de la chica se cristalizaron, sin poderlo evitar ella simplemente se tiró a llorar desconsoladamente, había pasado el peligro, simplemente era una niña, una niña que lo único que quería era un amigo. Acarició su cabeza tratando de consolarla.

Fue gracias a Tetsu que descubrió que un par de chicas la molestaban por ser Grifted, por esa razón, ella quizá les tenía rencor.

Cuando ella se calmó hipeando un poco se presentó formalmente.

- Me llamo Momoi, Satsuki Momoi. ” dijo ella sorbiendo su nariz y frotando sus ojos.

- Aomine Daiki, un gusto.

El poder de la chica, con un poco más de explicación, era poder moldear las capas tectónicas de la tierra, por ello, era capaz de crear temblores pero no solo podía hacer eso, podía crear cañones o boquetes, formar colinas o una pequeña montaña si se lo proponía.

Con el pasar de los meses Aomine se dio cuenta de que Momoi era una chica muy tranquila, un poco llorona y fastidiosa a veces pero muy noble en el fondo. Después de un tiempo no pudo despegarsela por nada del mundo.

Cuando sintió la confianza suficiente, la presentó ante su grupo de amigos y al poco tiempo ella se volvió en parte importante del equipo. Ella también entró al equipo de baloncesto como la mánager principal. La habilidad que tenía para recolectar datos era impresionante.

Quizá por esa razón se llevó particularmente bien con Midorima, ambos hablando de algoritmos y bases de datos, era una tortura.

” Cuarta línea ” (2)

Tal y como había dicho Nozomi, eso cambiaba drásticamente el futuro.

Cuando había ido a verla las presentaciones no habían sido necesarias, la otra chica, Mizuki, explicó todo. Debía seguir adelante con todo, como si nada.

Pasaron dos años y medio. Los planes para la base no fueron como Aomine los recordaba. Con Momoi ahí la idea fue: comprar un terreno lejos de la ciudad, talar unos cuantos árboles y formar una montaña, una grande y ahí comenzar de cero.

Aomine no protesto, solo le pareció extraño, no estaba mal, pero si extraño.

Con el poder estratégico de Momoi de su lado, eran considerablemente mucho más fuertes.

Esta quizá era la línea temporal donde todos se salvaban.

Aomine sonrió al ver que al fin ya había avanzado. No sabía la cantidad de veces que había vuelto a su punto de partida, meses y meses haciendo lo mismo, partidos, desesperación, aburrimiento. Al menos algo nuevo estaba pasando. Jamás se había llevado particularmente bien con las chicas pero molestar a Momoi diciéndole fea o gorda y ver su expresión, le causaba gracia.

- Nee, nee, Dai-chan. ¿Ya sabes a que escuelas vas a ir?

Aomine la miró de reojo. Era verdad, pronto debían ir todos a una preparatoria y todavía no hablaba con Akashi o Tetsu sobre su pequeña habilidad oculta de poder volver al pasado.

Debía mandarlos a todos a una preparatoria distinta para reclutar a gente nueva.

- Supongo que...

La vista de Aomine se desvió, un color rojo intenso le hizo perder la conciencia de todo lo que estaba diciendo, su corazón comenzó a latir muy fuerte y este pequeño detalle claro que no pasó de largo de la chica.

- ¿Qué estás viendo tan fijamente? ” preguntó la chica con una pequeña sonrisa pícara en el rostro

Aomine reaccionó de su ensoñación y después se giró a ver a la chica para después alzar una ceja.

- No sé de que me hablas. ” respondió Aomine retomando su caminata, dejando a la chica de pelo rosado atrás.

- Nee Dai-chan. Quiero comer ahí. ¡Vamos!

La chica tomo al moreno de la manga de su uniforme y lo arrastró con todas sus fuerzas dentro del restaurante de comida rápida. Más específicos un Magi Burger.

La chica lo obligó a tomar una de las mesas del fondo, y se fue directamente a pedir la comida. Aomine suspiró cansado. Y cuando la chica desapareció completamente de su vista recargó su codo en la mesa, de una forma muy diminuta esbozó una sonrisa y cerró los ojos, relajándose por completo.

Estaba seguro de que ese color de cabello era el de Kagami, le parecía haberlo escuchado, que él había llegado a Japón antes de comenzar la preparatoria. Lo había escuchado de Kuroko alguna vez y al parecer era verdad. Kagami ya estaba en la zona.

Cuando le pareció que la chica molesta ya se había tardatado mucho abrió los ojos, la buscó por todo el local y de repente frente a él, lo vio. Era Kagami.

Tenía su habitual montaña de hamburguesas y aquella fiera y aguda mirada en el rostro. Su corazón se detuvo.

- Te gusta. ¿Verdad? ” preguntó la chica detrar de Aomine.

El moreno simplemente guardó silencio. La chica se sento frente a él y dejó la charola de comida en la mesa.

- Si. ” fue lo único que respondió Aomine antes de comenzar a comer.

” Cuarta línea ” (3)

Debido al entusiasmo de Momoi ella investigo sin descanso alguno al pelirrojo. Aomine le había repetido mil veces que no necesitaba información de él pero ella le repitió mil y una veces que si.

Le elaboró un informe completo de él, nombre entero, edad, fecha de cumpleaños, altura, peso, comida favorita y otras cosas. Cosas que Aomine ya sabía pero que la chica lo descubiera así como así le perturbaron un poco.

Cuando ella se proponía algo de verdad era imparable.

- Él irá a Seirin. Deberías ir también. ” mencionó emocionada la pelirosada.

Entonces lo que ella le dijo no le pareció tan descabellado.
Pero aquí la disyuntiva era muy grande.

¿Entrar a Seirin o a Tōō? ¿Ser amigos o enemigos? En sus recuerdos, cuando él y Kagami se conocieron fueron rivales apenas cruzaron miradas, su lazo se fortaleció por eso mismo. Por ser rivales. Pero... Quizá podía haber un buen resultado si el asistía a Seirin. Podía eatar un poco más cerca de él. Aunque... Para esto, quía lo mejor era no unirse al club de baloncesto y simplemente mirar de lejos.

"Entrar a Seirin y sacrificar sus mejores años de baloncesto para poder salvar a ese idiota pelirrojo" fue lo que pensó Aomine mirando el techo de su habitación.

No le gustaba la idea para nada, pero si lo pensaba en retrospectiva, ya había jugado muchísimos años con él. Quizá cambiar de aires, ir a Seirin podía ser divertido. Descansar un poco.

Al menos ya no tenía esa idea "El único que puede derrotarme soy yo mismo" y si los humos se le subían a ese tonto, el también podía derrotarlo para ponerlo en su lugar.

Justamente unos meses antes de finalizar la secundaria Aomine se diiba la tarea de hablar con Akashi.

El pelirrojo no se negó. Él también tenía que hablar con él.

En resumidas cuentas Akashi tuvo cierta sospecha de Aomine, ante los pequeños conflictos del club el moreno siempre se comportó como una persona serena y madura. Él siempre sabía que hacer y que decir, como si el supiera que era lo que iba a pasar después de eso.

Y cuando todos revelaron entre si que eran unos dotados el fue el único en no mostrar sorpresa alguna. Como si él ya lo supiera todo.

Aomine no se fue por las ramas, le explicó la situación y gracias a la cantidad de pruebas Akashi lo aceptó. Para el pelirrojo, los planes de la base fueron su prioridad y les dio un muy alentador discurso de despedida a toda la kiseki. El baloncesto sólo sería una fachada, su objetivo era reclutar dotados, tenerlos en la mira y comenzar a actuar en las sombras.

Entonces, antes de que pasara más tiempo, decidió hablar con su madre. Ya que ella también comenzaba a sospechar de que el actuaba distinto.

Esa misma noche durante la cena. Soltó la bomba.

- Soy un dotado. ” comentó en voz alta.

Todos los recuerdos de su niñez viajaron a su mente. Antes le guardó rencor pero ya no más. Comer su comida los últimos meses le abrieron los ojos.

La mujer claramente no reaccionó bien, comenzó a gritar y a azotar todo, repetía mil y una veces que su hijo no podía ser un dotado, que él no podía ser un monstruo. Se abalanzó sobre él y comenzó a golpearlo, Aomine se dejó hacer, ella le golpeó, pateó y arañó. Cuando ella de calmó se levantó de su lugar, tomo las llaves de su casa y salió.

- Para cuando vuelva, no quiero verte aquí.

Fue lo último quw escuchó de ella.

- Te amo, mamá. ” le respondió Aomine con tranquilidad.

La puerta se azotó y Aomine subió a buscar sus maletas. Cuando volvió a abrir la puerta vio a la pequeña sombra parado frente a la puerta.

- ¿Hacemos una pijamada? ” preguntó Kuroko mirándolo.

Aomine asintió con la cabeza y se fue directamente con Kuroko.

” Cuarta línea ” (4)

Primer día de preparatoria. Jamás pensó que alguna vez en su vida volvería a usar él mismo uniforme que Tetsu.

Akashi en Rakuzan debía reclutar a Mayuzumi.
Murasakibara en Yosen a Himuro.
Midorima en Shutoku a Takao.
Kuroko en Seirin a Kagami
Y el por desgracia nunca reclutó a nadie de Tōō y era por esa razón que había mandado a Momoi ahí. Ya que todo estaría tranquilo allá.

Aomine y Kuroko caminaron juntos a la escuela en silencio y al llegar a la entrada se separaron. El moreno por su parte se fue a explorar un poco las instalaciones y Kuroko directamente a inscribirse al club de baloncesto.

Aomine había tomado el poder de Kuroko unos días antes. Claro estaba sin su permiso. Pero a el le importó poco los gritos y reclamos del peliceste, ahora tenía el poder de hacerse invisible.

Cuando entraron a clases Aomine fue ubicado en el salón de a lado y claro Kuroko estaba con Kagami.

Durante la hora del almuerzo Aomine fue al salón de Kuroko, claramente no iba por él, solamente quería mirar de cerca al pelirrojo. Cuando localizó a Kuroko con la mirada caminó hasta él, le invitó a salir y su mirada se cruzó con la de Kagami, le sonrió pícaramente y salió del salón arrastrando a Kuroko con él. Kagami simplemente alzó una ceja y se quedó sentado en su lugar.

Al finalizar el día Aomine activó el poder de Tetsu, sus ojos cambiaron a un azul pálido y caminó dando brinquitos hacia el gimnasio, se sentó en la tarima del teatro que estaba al fondo y miro la presentación del equipo de baloncesto.

- Muy bien, saquense la camisa. ” ordenó la entrenadora.

Aomine alzó una ceja y sin disimularlo un poco, observó fijamente como Kagami se sacaba la camisa.
Nadie podía verlo, no tenía por que ser discreto o algo así. Su vista recorrió de arriba a bajo el cuerpo del pelirrojo. Le gustaba lo que veía.

Aomine agradecía mentalmente por el fanservice antes dado y miró durante horas el plan de entrenamiento de Seirin. Nunca fue la gran cosa. Pero con ese entrenamiento tan bajo y un equipo novato ellos de verdad lograron vencer a todos.

” Cuarta línea ” (5)

Kuroko le había presentado a Aomine a Kagami. Lo habia presentado como un buen amigo de la preparatoria. Kagami simplemente le aceptó pero nada relevante. Y Así pasaron meses, Aomine fue a ver todos los partidos de Seirin, partidos de eliminatorias antes de la inter high. Y por una u otra razón su mirada siempre se terminaba encontrando con la de Kagami.

Un día, un sábado por la tarde escuchó el sonido de un balón botando sobre el pavimento, guiado por el sonido se asomó para ver quien era el que estaba jugando y se llevó una sorpresa cuando vio a Kagami jugar. Lo observó un par de minutos y cuando el pelirrojo se percató de su presencia le miró.

- Eres muy bueno. ” mencionó Aomine.

- Gracias. ” respondió Kagami secando el sudor de su cara con su camisa. ” ¿Qué hay de ti? ¿Prácticas algún deporte?

- No, ninguno en particular. ” respondió Aomine alzando sus hombros.

- Debes ser realmente para los deportes entonces. ” mencionó Kagami girando el balón en su dedo índice.

- Quién sabe, yo no estaría tan seguro. ” respondió Aomine caminando a él.

Aomine colocó sus manos en posición receptiva y Kagami le lanzó el balón, comenzó a girar el valón igual que el otro y Kagami alzo una ceja.

- ¿Quieres jugar? Prometo no ser tan rudo contigo.

Aomine soltó una carcajada.

- Oh, ¿de verdad lo prometes? ” preguntó Aomine con diversión.

- Claro. ” ánimo Kagami.

Cuando Aomine estaba por aceptar el duelo su celular comenzó a sonar. Tronó la lengua y cuando miró la pantalla era claramente una llamada que no podía ignorar.

- ¿Si? ¡¿Ah?! ¿¡Cómo dices?! ” la mirada del Aomine se oscureció y después de escuchar atentamente respondió ” Entiendo, voy para allá.

Soltó un profundo suspiro y Kagami le miró.

- ¿Todo en orden? ” preguntó Kagami.

- Si, debo irme, aceptaré tu gentileza otro día. ” respondió Aomine sonriendo.

Sin apuntar ni un poco Aomine lanzo el valón hacia la canasta, anotando una increíble y extraña canasta. Kagami abrió los ojos sorprendido y Aomine se despidió con la mano para echarse a correr.

La llamada había sido de Akashi, Momoi estaba en problemas un par de chicos trataron de propasarse con ella y después de un par de insultos ellos resultaron ser dotados, estaba encerrada en el baño de un centro comercial y estaba asustada. Si no lograba calmarse ese centro comercial se vendría abajo.

Corrió lo mas que pudo y cuando llegó al centro comercial se encontró a Tetsu y a Kise en la entrada.

- ¿Hay noticias? ” preguntó el moreno.

- No contesta el celular, me temo que se lo hayan quitado. ” respondió Kise.

- Separemos y busquemos. Hay que calmarla. Ya saben que puede pasar si se altera. ” respondió Aomine.

Todos se dispersaron y comenzaron a buscar a la chica, eran 4 niveles y el centro comercial era enorme.

Un agudo grito le llamó la atención, ella estaba en el nivel inferior y forcejeaba contra dos tipos. Nadie les acercaba y nadie parecía tener voluntad para llamar a la policía. Sacó su celular y llamó a Kise.

- ¡La tengo! Nivel 2 área de comida

- ¡En seguida voy!

Aomine debía rodear toda el area si es que quería bajar, debía calmarla antes de que ella causada un desastre. Derribando a un par de personas justo a unos metros de la escalera le pareció ver un fuerte destello rosado. Era Momoi.

No llegaría. Un pequeño brinco se sintió en el lugar.

Cuando pensó que ya todo estaba perdido nada pasó, su mirada se relajó y miró la situación de lejos.

Kagami estaba a un lado de Momoi, tocándole el hombre. Le lanzaba una fuera mirada a los atacantes y después de un par de amenazas verbales ellos salieron huyendo.

Bajo las escaleras para ir por las chica y Kise llegó del laso contrario

- ¡Ah! ¡Kagamicchi! ” exclamó sorprendido el rubio.

- ¿Kise? ” preguntó Kagami.

- Kagami-kun. ” Mencionó Kuroko.

- ¿¡Kuroko?!

- ¿Me seguiste a caso? ” preguntó Aomine con burla.

- ¿¡Aomine?!

Todos se acercaron a la chica, la cual estaba hincada en su lugar con las manos en el rostro.

- Satsuki. ¿Estás bien? ” preguntó Aomine hincándose a su altura.

- Chicos...

- ¿La conocen? ” preguntó Kagami.

- Si, es amiga nuestra. ” respondió Kuroko.

- Momoicchi, ya todo está bien. ” ánimo Kise.

- Gracias por lo de antes. ” mencionó Aomine ayudando a la chica a levantarse.

- No fue nada, estaba siendo molestada. ” respondió Kagami.

- No eso, anular sus poderes. ” aclaró Aomine. ” Nos vemos.

Los tres chicos se despidieron y Kagami se quedó ahí parado mirando como se iban

” Cuarta línea ” (6)

- ¿Cómo sabes que soy un dotado? ” preguntó Kagami mirándolo a los ojos.

El pelirrojo del salón de a lado lo había emboscado en su salón a la hora de la salida, le había pedido que permanecieran dentro del salón de clases para hablar. Y ahí estaban, dentro del salón completamente solos con un fondo naranja por el sol sobre ellos

- ¿Cómo que cómo lo sé? ” preguntó Aomine.

- Si ¿Cómo me descubriste? ” cuestionó Kagami.

- Es un poco obvio. Sé que también lo notatse, la chica a la que ayudaste, estaba a punto de usar sus habilidades y mágicamente no paso nada. ¿Coincidencia? ” atajó Aomine.

- Así que... Estabas al tanto de la situación. ” respondió en un suspiro Kagami.

- Todos lo estábamos. Después de todo. Todos nosotros somos dotados. ” contestó Aomine.

” Recta final ” (1)

Aomine le había hablado a Kagami de los futuros planes que de llevarían a cabo.
De la organización que estaba en proceso y más que nada su meta.

Le hizo una invitación, de ser reclutado, que su poder sería algo indispensable y que les seria de ayuda.

Kagami respondió que necesitaba tiempo para pensarlo. Y después de pensarlo meticulosamente durante todo el verano accedió a unirse a ellos.

Entonces poco a poco, intercambiando un par de palabras y después compartiendo un par de almuerzos Kagami y Aomine se volvieron un poco más cercanos al punto de decir que ya eran buenos amigos.

Al mismo tiempo que Kagami fue abriendo su corazón hacía el moreno Aomine también lo fue haciendo.

Kagami le había contado a Aomine la razón por la cual se había únido. La razón principal era para hacer aunque sea una zona segura para los dotados. La madre de Kagami había sido asesinada por Hunter killers, y por esa razón había dejado América.

Aomine le escuchó, le escuchó mucho rato hablar de su madre, lo buena y hermosa que era, también lo solo que se llegó a sentir.

Y cuando el pelirrojo le preguntó a Aomine sobre su familia, sin una pizca de tristeza Aomine le contó toda la situación que se había desatado con su madre por ser Grifted y que le habían echado de su casa, por esa razón, el vivía con Tetsu.

Kagami simplemente se quedó callado. Y Kagami le dio un par de palmadas en la espalda.

- No necesito consuelo, estoy bien. ” respondió Aomine sonriendole ligeramente.

- Aún así debió ser difícil. ” respondió Kagami.

- Estoy mejor ahora. ” contestó Aomine.

” Recta final ” (2)

Unos meses antes de pasar a segundo año Nozomi se puso en contacto con Aomine.
Está vez la cita fue en la casa de la chica.

Todo estaba con aura misteriosa y por la voz de la chica quizá no eran buenas noticias.
Se presento en la casa de las chicas lo antes posible.

- Te estábamos esperando. ” Nozomi abrió la puerta y le dejo pasar, le guió a la sala y ahí estaban su hermana y Sora.

- ¿Porqué tanto misterio? ” preguntó Aomine tumbándose en el sillón.

- Seré directa. ” fue Muzuki la que intervino en la conversación esta vez. ” Hace unos días, tuve una visión. En donde mi hermana moría al igual que yo. Pero al parecer esta no es la primera vez que morimos. ¿No es así?

- No, no es así. ” respondió Aomine directamente.

- Mi poder no es de la predicción. Es el de la intuición. Puedo intuir cosas que van a pasar o en estos casos que ya pasaron. Y la razón por la cual tengo visiones tuyas todo el tiempo es por de alguna u otra manera nos hemos involucrado contigo. ” explicó Mizuki mirándolo fijamente.

- ¿Y? ” preguntó Aomine.

- Nosotras estamos por morir pronto. ” soltó de la nada. ” Y ya descubrí la razón.

Aomine le miró fijamente.

- ¿Por qué? ” inquirió el moreno.

- Nosotras, nuestros poderes, estorban. No puedo decir a ciencia cierta por que, pero... Es por eso, el enemigo está más cerca de lo que crees.

- ¿Sabes quien...

- No, no sé quien es. ” interrumpió Mizuki. ” La razón por la cual te he citado aquí es por la última visión vque he tenido.

- Dila. ” exigió Aomine.

- En esta visión, tú besabas a mi hermana.

Aomine fruncio el ceño.

- ¿¡AH?!

- Lo pensé, por días, pero sólo encontré dos respuestas posibles. O mi hermana se roba tu habilidad o tu robas la de ella. ” explicó la chica.

- Mi habilidad funciona solo si beso a alguien, y aún si esa persona no tiene un poder que robar, puedo robar recuerdos. ” explicó Nozomi.

- Puedes salvarlas a ambas ” habló Sora.

"Por favor... Salvalas" recordó las palabras de Sora. Si ellas dejaban de ser dotadas, no tendrían razón para matarlas y la atención se centraría especialmente en él.

- Bien, lo haré. ” respondió Aomine.

” Recta final ” (3)

Y así fue. Nozomi besó a su hermana y después de copiar el poder de la chica, Aomine la besó robándole el poder de la intuición y adueñándose del poder del robo.

Ahora ese par eran chicas comunes y corrientes. Estaban fuera de peligro o eso esperaba al menos.

Los planes siguieron adelante, Aomine junto a Kagami pasaron miles de cosas juntos pero... No de la manera en la que el moreno quiso.

Aomine lo intuía, que Kagami gustaba de él, lo sabía ya que muchas veces tenía visiones donde Kagami sonría de una forma estúpida y enamorada a una foro que tenía donde estaban ambos. Pero Aomine siempre le evitó. El tema de las cosas amorosas lo evitó, y eso en el fondo de su ser le dolió. Pero si él expresaba sus verdaderos sentimientos, Kagami sufrirá y eso lo sabia por las miles de visiones que había yendo al respecto

” Recta final ” (4)

Tiempo después, cuando tenía 20 años Aomine tuvo una visión, fue la más larga y detallada que tuvo desde que había obtenido el poder.

En ella tomaba entre sus manos el rostro de Kagami y le plantaba un suave beso. El pelirrojo le miraba fijamente y al final lo miraba a los ojos, sus ojos cambiaban a un color rojo claro y le ordenaba que se fuera del lugar. Después de eso... Todo se torno de color rojo seguido de un profundo negro.

Ae levantó de su cama completamente aturdido. Su cabeza le dolía a horrores y se sentía mareado.

Debía robar el poder de Kagami y no solo eso, debía copiar todos las habilidades de los integrantes de la Kiseki. Nunca hubo otra salida, el siempre seria el señuelo perfecto, mientras el cancelaba a los otros dos sus aliados podrían combatir en paz. Y quizá no volvería vivo. La base en su sueño seguía en remodelaciones y ambos se veían igual de jóvenes, más o menos como ahora.

La batalla decisiva se venía pronto.

Ya tenía en su poder el la habilidad de Tetsu, la invisibilidad.
Le faltaba la habilidad de la obediencia de Akashi, el curativo de Kise, la habilidad de manejar todo aparato tecnológico de Midorima y el la somnolencia de Murasakibara.

Aquella noche no pudo dormir, ni la próximas dos noches siginetes. Los días pasaban sin novedad alguna y eso le pertubaba. Su rendimiento era un asco y su atención estaba por las nubes.

Sin aguantarlo mas, una tarde cogió las llaves de su departamento y salió directamente hacia el departamento del pelirrojo. Hizo un par de paradas antes y cuando se sintió listo se paró frente a la puerta del otro, tocó el timbre un par de veces y cuando el pelirrojo abrió Aomine le recibió con una rosa.

- ¿Puedo pasar? ” preguntó Aomine.

Kagami le miró extrañado y le dejó pasar, Aomine le entregó la rosa y le sonrió. Cuando cerro la puesta a sus espaldas Kagami le miró fijamente.

- ¿Qué significa esto? ” preguntó Kagami mirando la rosa entre sus dedos.

- Me gustas. Desde hace mucho tiempo que es así. ” declaró Aomine sin vacilación alguna.

- ¿Ah? ¿Cómo puedes decirlo así cómo así? ” reclamó Kagami.

Aomine apretó la quijada simplemente estrecho el cuerpo del pelirrojo contra el suyo. Pudo sentir el calor que tanto había deseado, el aroma que tanto había extrañado. Un nudo se atascó en su garganta y sintió un picor en los ojos, es esa sensación que sienten justo antes de llorar, lo abrazo tan fuerte como pudo cerrando los ojos.

- Simplemente... Guarda silencio ” pidió Aomine con voz ronca.

Kagami también cerró los ojos y le devolvió el abrazó tan fuerte como pudo.

” Recta final ” (5)

Ese día era el indicado. No había tenido una visión al respecto, pero dentro de el podía sentirlo.

Entonces sin tanta preocupación tomó sus cosas y salió directamente hacia la base, el camino fue largo, como el esperaba. Y cuando saludó a todos sus amigos ahí no le importó.

- Akashi, hoy tenemos visitas, unas un tanto problemáticas. ” vociferó Aomine.

Akashi entendió la analogía y asintió con la cabeza.

- Todos, posición defensiva. Vamos a recibir como se debe a esas visitas.

Todos asintieron con la cabeza.

- Antes, necesitó copiar sus poderes. Es necesario. ” pidió el moreno.

Todos guardaron silencio.

- Si así debe ser solo hazlo. ” respondió Midorima.

Aomine asintió con la cabeza y uno a uno fue tomando sus habilidades, cuando terminó un estruendo se escuchó. En la seguridad extra de la base se habia implementado cámaras de seguridad a prueba de movimiento. Las cámaras captaron a dos jóvenes vestidos de negro.

- Son ellos. ” dijo Aomine mirando las cámaras. ” Uno puede controlar el vacío y el otro, cambiar de forma, yo seré el señuelo, ustedes solo vayan detrás.

Todos guardaron silencio. Aomine llevaba en sus hombros a todo el equipo, en ese momento tan tenso Satsuki y Kagami aparecieron, diciendo que estábamos bajo ataque.

- Todos posición defensiva. ” ordenó Akashi. ” debemos proteger la base.

Todos en la habitación salieron.

- Kagami espera. ” pidió Aomine.

Kagami miró a Aomine de forma extraña y se quedó parado en su lugar.

- Sal de aquí, lo antes posible es lo mejor. ” mencionó Aomine.

Kagami fruncio el ceño.

-¿Por qué debería? También recibí entrenamiento al igual que tu, voy a pelar.

- Una persona normal debería mantenerse selajada de esta situación. ” respondió Aomine tomando la cara de Kagami entre sus manos.

De una forma muy suave Aomine beso los labios de Kagami. Fue un roce apenas y después de eso miró los azules ojos del moreno, los cuales cambiaron a un rojo intenso.

- Sal de aquí y ponte a salvo. ” ordenó Aomine antes de darse la vuelta y salir corriendo de ahí.

Kagami se quedó inmóvil, su cuerpo no le obedecía, todo era confuso y estaba pintado de rojo.

Solo pudo ver la espalda de Aomine alejándose de él.

” Recta final ” Epílogo.

Kagami tocó un par de veces una puerta antes de entrar, sus brazos sostenían un hermoso ramo de rosas y después de un par de segundos sin respuesta entró en la habitación.

Era una habitación blanca adornada de flores por todos lados. Era la habitación de Aomine.

Después de aquella intensa batalla ellos ganaron de puro milagro, gracias a todos los sacrificios que hizo el moreno. La mitad de la base, se cayó fue inevitable pero afortunadamente solo hubo dos bajas. Los enemigos. Un par de Hunter killer con habilidad.

Querían cazarlos y casi lo logran. Y no eran solo ellos dos, era un ejército entero.

Kagami tomó entre sus manos la mano del moreno y le planto un beso. Aomine llevaba en coma casi 5 años y todos ellos se negaban a desconectarlo, sabían que algún día despertaría, sabían que lo haría.

A pesar de todas las heridas sabían que él abriría los ojos de nuevo.

Kagami habló con Nozomi y ella le contó que él era capaz de robar tantos los poderes como recuerdos y era por eso que le besaba siempre que iba a verlo. Con la esperanza de que él robará sus recuerdos y estuviera al tanto de la situación.

- Apareció alguien que quizá te agrade, todavía puedo recuperar mi habilidad, apareció alguien con el poder de otorgar. Si copias su habilidad... Puedes otorgarme de nuevo mi habilidad... ” mencionó Kagami con la voz temblorosa. ” solamente... Tienes que despertar...

- Y... Aunque despertase, no te devolvería... Tu habilidad.

Una voz ronca, muy ronca se escuchó dentro de la habitación.

Pero cuando abrió los ojos sus ojos reflejaban un blanco pálido. Ya no había un azul profundo.

Los ojos de Kagami se inundaron. Tratando de no llorar simplemente esbozó una enorme sonrisa.

- Bienvenido... ” saludo Kagami.

- Estoy en casa... ” respondió Aomine.
Notas finales:

Gracias por leer! :D ?


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