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¡Pobre! por jotaceh

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Día 20: Por qué 

 

Me quedé con la pena por unos días, me fue difícil olvidar la humillación que me hizo pasar Julieta.

 

-Hola cara de mono, ¿cómo estás? -

 

Cristián me encontró el lunes mientras caminaba al colegio.

 

-Parece que no muy bien, porque te ves terrible, ¿te resfriaste? -

 

-No, no es eso, solo que no me siento de ánimo para estudiar -

 

-Pero si nunca vienes a estudiar, solo calientas el asiento - se rió frente a mí.

 

-Tú tampoco es que seas el más inteligente -

 

-Ves, ahora estás mucho mejor -

 

El moreno me molestó con la intención de hacerme sentir mejor, y aunque haya sido por unos segundos, lo había logrado.

 

Finalmente, le conté todo lo que me había ocurrido, desde el beso de Rafael, hasta la humillación del fin de semana en la piscina.

 

-Qué desgraciados, esos niños ricos son lo peor -

 

-Lo sé, como tienen dinero piensan que son mejores que nosotros -

 

-Pero no te sientas mal por lo que te hacen, son ellos los que están equivocados, no tú - me dio una palmadita en la espalda a modo de consuelo.

 

-Veo que ya no ocultan su romance -

 

Escuchamos la voz de Joaquín, quien en un tono se enfado nos miraba atento.

 

-Le toqué la espalda, ¿encuentras eso romántico? - Cristián no podía creer lo ridículo que había sonado eso.

 

-Quizás es porque no te atreves a hacerle más cosas en público -

 

-Pablo... Creo que nos equivocamos, hay alguien más estúpido que nosotros - al moreno no le importaba el mal humor de su antiguo amigo.

 

-Tengo mejores notas que ustedes -

 

-Pero aun así, le haces caso a una mentirosa como Emilia... Solo quiere estar contigo porque Pablo se fijó en ti primero, en cuanto sepa que él se anda besando con el hijo de los Eguiguren, te va a olvidar y va a ir corriendo detrás de ése... -

 

Tuve que golpearme en la frente ante la imprudencia del muchacho. ¿Cómo se le ocurre revelar lo que le acababa de contar?

 

-Ya veo, así que era verdad que quién te gusta es ese tal Rafael -

 

Ahí empeoró todo, porque podía desmentir lo que ocurría con Cristián, más que mal, solo somos amigos, pero ahora no podía ocultar algo que es verdad.

 

-Por lo menos él no anda creyendo las mentiras de Emilia - fui grosero.

 

-Menos mal que no sigo contigo, o sino quizás con cuántos me hubieras engañado -

 

Y hasta ahí llegó mi paciencia. Le guardaba mucho aprecio por todo lo que me ayudó, pero al tratarme como si fuera un fácil, me hizo enfadar.

 

-Con todo el pueblo, porque soy una vil y asquerosa puta - le seguí el juego.

 

-Igual que tu mamá -

 

Me quedé congelado al principio. Había escuchado eso antes, pero jamás de quien se suponía era mi amigo.

 

Como mala de novela, me acerqué al castaño y le abofeteé en la mejilla. Pensaba que sería como en la tele, que la otra persona se da vuelta y casi cae al suelo por el impacto, tan solo que lo único que ocurrió es que me comenzó a doler mucho la palma de la mano.

 

-Ni se te ocurra hablar mal de mi mamá otra vez -me aguanté el dolor.

 

Me fui de allí con la frente bien en alto, porque no iba a dejar que las palabras de Joaquín me afectaran.

 

Me había tratado mal Julieta, y ahora Joaquín, al parecer todo el mundo estaba en mi contra.

 

 

 

 

 

 

Las clases terminaron, no tomé mucha atención porque tenía la cabeza en otro lado. Cristián estuvo a mi lado la gran parte del día, trataba de hacerme reír, aunque su humor no es para nada bueno.

 

Llegué a la casona y entré por la puerta de la cocina como me es usual, y tan solo al entrar me encontré de frente con Rafael. Me estaba esperando. 

 

-¿Podemos hablar? - 

 

-Si es lo que quiere el señor... No puedo negarme - fui sarcástico. 

 

-¿Estás enojado? - 

 

-¿Tú qué crees?- 

 

-Está bien, Julieta fue muy desagradable contigo y me sentí pésimo después de eso, pero ya sabes cómo es - 

 

-Fuiste su cómplice, hiciste todo lo que ella quiso, como si fueras su esclavo - 

 

-Lo siento - 

 

Creo que es la primera vez que le escuché disculparse. Agachó la cabeza como perro regañado, parecía que estaba realmente arrepentido. 

 

Mi enfado menguó al verle así, aunque me repetía una y otra vez que no cayera en sus encantos, lo que había hecho era terrible. 

 

-¿Por qué me besaste? - 

 

Dije sin pensar, me había quedado con esa duda y ese era el momento para dilucidarlo. 

 

-Porque quería hacerlo - levantó la mirada para mirarme fijamente, estaba convencido, hablaba con seguridad. 

 

-¿Y por qué querías hacerlo? Deberías ser más conciso - 

 

-Porque te quiero ... - no me despegaba la mirada. 

 

-Pero tienes novia y haces todo lo que ella quiere... Si en realidad me quisieras como dices, me hubieras defendido - 

 

-Eso es un tema más complicado... Necesito estar con Julieta - se avergonzó, agachó nuevamente la cara. 

 

-Lo dices como si ella fuera lo más importante, como si no pudieras vivir sin ella - 

 

-En cierta forma... Es así - 

 

Mi pecho se contrajo bruscamente, y es que parecía que la muchacha ésa era demasiado relevante en la vida del rubio. Me sentí traicionado, aunque no fuéramos nada. 

 

-¿Entonces por qué me besas? ¿Por qué me dices que me quieres? Si la amaras tanto no me buscarías - 

 

Rafael estaba incómodo, sin embargo, se acercó a mí para agarrarme de la cintura y reposar su cabeza en mi hombro. Podía sentir su pesar y aquella carga tan grande que le hacía desfallecer. 

 

-No la amo - susurró. 

 

-¿Entonces por qué es tan importante para ti? - 

 

-No puedo decirte la razón... Lo siento - 

 

Su voz apenas podía ser escuchada, tenía la garganta apretada, en realidad estaba sufriendo y quizás desde hace cuánto tiempo llevaba sufriendo. 

 

Hice a un lado mi enojo y le abracé con fuerza. Fuera la razón que fuera, él estaba sufriendo y no podía dejarle allí solo, nadie se merece eso. 

 

-Está bien... Aunque no lo puedas ver ahora, todo mejorará... - fueron mis palabras de consuelo. 

 

Así nos quedamos un largo rato. Le abracé como si se tratara de un bebé pequeño e indefenso que lloraba por largos años por un poco de cariño. 

 

¿Qué será aquello que tanto le está haciendo sufrir? 

 

 


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