Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

¡Pobre! por jotaceh

[Reviews - 156]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Día 51: Un poco de compañía

 

El resto de ese fin de semana me quedé en cama, no tenía ánimos para nada, ni siquiera para comer.

-¿Y por qué lloras? Vendrán muchos más hombres a tu vida, ya verás… Además, a la primera de problemas se fue con su papá, ni siquiera luchó o te hizo frente. No, es igual de cobarde que tú…-

-Mamá, eso no me ayuda mucho, ¿sabías? –

-Pero es verdad. Si hubiera estado enamorado como decía, te hubiese comprendido y se hubiera quedado. Tienes que reconocer que, en el fondo, piensa igual que tú… Es evidente que se fue porque no soportó la pobreza y al saber que podía tener la misma vida de rico de siempre, utilizó tu secreto para irse volando… Ni siquiera se demoró un día en llamar a su papito –

Carmen intentaba animarme, aunque sus conjeturas me deprimían más aún. ¿Y si tiene razón? Es muy extraño todo lo que sucedió, especialmente porque fue inusualmente rápido. ¿Qué hubiera hecho yo en su lugar? Estaría enojado, pero tampoco arrancaría, así como lo hizo, aunque, es lo que quería ¿no? Al final tomó la mejor decisión, haya sido porque quería estar cómodo o porque le rompí el corazón. Lo importante es el resultado, que tanto él como Olivia podrán tener un futuro mejor.

 

 

-Si quieres puedes faltar al colegio hoy…-mencionó Carmen la mañana del lunes.

-Claro que no, no quiero perderme las clases –

-Pero si de todos modos no entiendes mucho… Tienes pésimas calificaciones –

-¿Mamá? ¿Quieres ayudarme o buscas destruirme? Porque solo me dices cosas malas, solo te falta decir que soy feo –

-Bueno, ahora que lo mencionas, la espinilla de tu frente está asquerosa –

-Ok, ya mejor vete a trabajar, yo me bañaré –

¿Se han dado cuenta que en los momentos más tristes o estresantes siempre hay una espinilla de por medio? Es como si tu propio cuerpo quisiera pisotearte aún más en la miseria. Y yo ya tengo a mi mamá para eso.

Me arreglé y salí a la calle vestido con mi uniforme. Tenía pocos ánimos, pero por lo menos ir a la escuela me ayudaría a pensar en otro asunto.

¿Y Rafael?

¿Dónde está ese príncipe?

Era obvio que no durarían mucho, es demasiado para ti.

Se demoró muy poco en cansarse.

Pobre Rafael, después de tener todo tuvo que compartir la miseria contigo. También lo entiendo.

Son algunas de las frases que me dijeron en mi salón cuando se enteraron que Eguiguren ya no asistía más a clases. Al final, me fue imposible pensar en otro asunto y es que todos me preguntaban por él. Si al final se hizo muy popular en muy poco tiempo.

-No les hagas caso, están envidiosos porque en su vida les va a tocar un novio tan hermoso como Rafael – se me acercó Emilia. Fue extrañamente simpática y eso me causó mucha curiosidad.

-¿Por qué estás siendo tan gentil? –

-Bueno, ahora… somos casi familiares ¿no? –ay claro, se me había olvidado la relación poliamorosa que llevaba con mi mamá y Cristián.

-Al principio pensé que no durarías mucho, por eso me sorprende que sigas yendo a mi casa –

-Es que es lo más hermoso que me ha sucedido en la vida. Solo es amor, puro y a la vez sucio. Significa pertenecer a algo más hermoso que una pareja… Deberías unírtenos –sonreía como fanática religiosa.

Tan solo la miré con tedio.

-Eso es incesto, ella es mi mamá –

-Ah, verdad… bueno, entonces deberías hacer tu propio trío –

-Emilia, no tengo ánimos como para pensar en relaciones, acabo de terminar con mi novio –

-Lo siento, es que ya no reconozco la tristeza, todo es amor y felicidad en mi vida… Espero algún día puedas sentir lo mismo –y se fue dando saltitos como venado.

Para serles sincero, prefiero a la Emilia malvada en vez de esta especie de monja hipersexualizada.

 

 

Y como las conversaciones con Carmen y Emilia no me ayudaron en nada, decidí ir a la casa de Julieta a la salida de clases.

-Ay querido, me enteré de lo que sucedió, debes estar destruido –

-Sí, me siento fatal, pero tengo el consuelo que él está mejor ahora –

-Hablas como si se hubiera muerto, por favor, que solo está en la ciudad, ni que se hubiera ido a Marte-

-Es que con lo que sucedió fue como si hubiera muerto. Estoy seguro que no volveré a verle nunca más. Me debe odiar –

-Pablo, solo tienes quince, deberías ser más positivo. Yo también terminé con él y mírame, nunca he estado mejor –sonrío intentando demostrar su estabilidad emocional.

-¿Me quieres mentir? –

-Puta vida, me siento sola y creo que he engordado dos kilos. Ni siquiera me he subido a la báscula por miedo a la verdad. Lo único que tengo es mi belleza y se me escapa como agua entre los dedos… Dedos de gorda – me dieron ganas de pegarle y es que además de guapa, tiene dinero y es inteligente, o no tan estúpida para ser rubia.

-Imagínate, si tú no puedes conseguir un novio siendo tan hermosa, yo estoy perdido… Me voy a quedar solo de por vida –

-Tú por lo menos perdiste la virginidad, yo todavía la tengo intacta –hacía pucheros.

-Ah verdad, el sexo… se me había olvidado - ¿Cuándo le conté?

-¿Sabes? Tenemos que salir más seguido, ir a la plaza y conocer muchachos –

-¿No te acuerdas la última vez que hicimos eso? Todavía la gente me apunta con el dedo –

-Tienes razón, no me conviene que sigas transformando en gais a los pocos chicos que hay en el pueblo –

-¡Yo no lo transformé! ¡Ése venía desviado desde antes! –

-¿Y qué hacemos entonces? Necesito un novio ¡ahora! –

-No quiero eso, pero puedo ayudarte. Tengo una idea para ti –

-¿Cuál?  Cuéntame –se acercó a mí desesperada, ansiosa por saber la idea.

-Podríamos inscribirnos en las juventudes católicas. Ya sabes, los retardados que se sientan adelante en la iglesia –

-¿Los que huelen a masturbación? ¡Olvídalo! Además, suenan a agrupación nazi –

-Es lo único que se me ocurre para conocer gente. No hay otra agrupación para jóvenes. Es eso o ir a la cantina donde iba antes mi mamá… pero lo veo peligroso –

-Está bien, inscribámonos con los taraditos esos. Total, mi reputación de chica popular se arruinó cuando me dejó Rafael… ¿qué podría salir mal? –

-No te hagas esa pregunta. Siempre que me la hago, todo sale pésimo…-

Y así fue como decidimos ir al otro día a la iglesia para inscribirnos. Y este sábado es nuestra primera reunión. ¿Cómo nos irá?

 

 

 

 

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).