Día 6: Valiente
Emilia está loca, jura que ha encontrado al candidato indicado para estar conmigo.
-Si eso sucediera, tendríamos que dejar de fingir que somos pareja. ¿Cómo le vas a hacer para sacarle celos a Cristián? -
-¿Celos? Yo creo que lo único que he podido generar en él ha sido un poco de risa. No entiendo por qué no se fija en mí -
Tengo algunas posibles opciones, pero creo que no le gustaría escuchar ese tipo de cosas.
-De todos modos es estúpido creer eso, debes está equivocado y te pido no me metas en más problemas -
-El amor nunca ha sido un problema, ya lo verás -
Empecinada con la idea, vigila a Joaquín todo el día, y luego me comenta que me estuvo mirando un rato en clases.
-Emilia, tenía que disertar, era obvio que me estaba viendo -
-Ya, pero podría haber estado en el celular y no, te prestó atención en todo, escuchó cada palabra que te aprendiste de memoria y que recitaba como robot-
-Me da vergüenza hablar en público -
No tiene respeto por las personas tímidas.
Todo empeoró cuando llegó la clase de artes. El profesor nos pidió que hiciéramos parejas para hacer una escultura en greda.
-¿Lo hacemos juntos? -
-¿Qué? ¿Estás loco? Claro que no, tú lo harás con Joaquín - Emilia respondió antes de levantarse de su pupitre y caminar hasta donde estaba el chico y mi amigo.
-Cristián, vamos a hacer parejas. Tú Joaco, párate y anda a hacer el trabajo con Pablo -
Como si se tratara de un general del ejército, la muchacha le ordenó a los chicos sin que éstos chistaran, solo le hicieron caso como si fuera ella quien mandara.
-¿Por qué no lo haces con tu novio? - Cristián estaba sorprendido, aún cuando ya había aceptado su suerte.
-Estamos peleados, le pedí que me tocara una teta y no quiso, creo que es un poco rarito -
Escuché lo que me mi amiga había dicho, en realidad estaba loca para inventar todo eso.
-Es que... Él siempre ha sido muy tímido, quizás deberías darle un poco más de tiempo-
-No, dos semanas ya fueron suficiente, estoy segura que lo nuestro no va a llegar a ninguna parte... En fin, estaba pensando en hacer una escultura de mis tetas, yo modelo y tú esculpe. ¿Qué te parece? Ven, tócamelas para que tengas una idea -
-¡Señorita! Bájese la blusa en este momento - el profesor gritó histérico al ver que Emilia se subía la prenda y dejaba entrever su brasier. Por suerte la vio a tiempo, porque ya estaba tratando de sacárselo también.
-Está muy loca -
Joaquín comentaba lo que todo el curso ya pensaba.
-Tienes toda la razón - suspiré hondo y me centré en el trabajo.
-¿Por qué nos separaron? ¿Acaso a Emi le gusta Cristián? -
-Sí, le gusta mucho, que sea alto y atlético, y un tanto torpe, pero agradable -
-Ya veo, que pena -
Mierda, sin darme cuenta había revelado el secreto de mi amiga, pero es que estaba tan pendiente de su conversación con el moreno que no me di ni cuenta. Aunque, otra cosa llamó más mi atención.
-¿Pena? ¿Por qué? ¿Acaso ella te gusta? -
Joaquín me miró fijo un rato antes de arreglarse el cabello castaño y tocarse la barbilla como si fuera un detective.
-No, no me gusta, lo decía porque es a Cristián quien no le atrae Emilia -
-¿Por qué? Si es bonita -
-Porque se supone que era tu novia y tiene ese código que no está con la mujer de su amigo -
-Ay que tarado, pero si todo fue una mentira -
-Pero él no lo sabe -
-Y si supiera la verdad, ¿tú crees que le gustaría? -
-Para ser sincero, creo que le gustaba de antes, pero siempre estabas con ella, pensaba que a ti te gustaba y no te iba a hacer algo tan feo -
El resto de la mañana me quedé pensando en esos dos, en que en realidad ambos se atraen pero que por malentendidos no pueden estar juntos. Ok, el malentendido soy yo, al final es por mi culpa que Cristián no se atreve a estar con Emilia.
¿Y si le contara todo? Eso arreglaría los malos entendidos, pero... Tendría que confesar toda la verdad y decirle que soy gay, que fue un plan para ocultarlo. ¿Cómo va a reaccionar? ¿Se alejará de mí?
-¿Cómo les va con la escultura? -
-Mal, Cris quiere hacer un pajarito porque le da vergüenza tocarme. ¿Será homosexual también? -
-No lo creo, solo piensa que estoy enamorado de ti y no te va a tomar atención por lealtad masculina -
-Mierda, pero qué tonto es, si todo el mundo sabe que esto es una mentira -
-¿Todo el mundo? -
-Ya te lo he dicho, no es un secreto, creo que el único tarado que no se da cuenta es Cristián -
-¿Te gusta mucho? -
-No es que esté enamorada, pero me gustaría que él fuera mi primer amor -
Y ese comentario me quedó guardado en el cerebro. No es que haya sido mi plan, pero seguir con él me dio un poco más de relajo. Lo malo es que al final estaba separando a dos personas que podían ser felices estando juntos.
Por primera vez me di cuenta que debía ser valiente y ayudar a mis amigos, olvidar todos mis miedos y hacer frente a la realidad.
Me paré de mi silla y caminé hasta el puesto de Cristián.
-Tengo algo que decirte -
Fue todo lo que dije antes de sacarle del salón para que habláramos en privado.
-¿Qué sucede? -
-¿Te gusta Emilia? -
Pregunté serio y es que quería saber que si me iba a sacrificar, fuera por algo real.
-¿Qué? Claro que no, hermano. No ando mirando las mujeres de mis amigos-
-Si no fuera mi novia, ¿te gustaría? -
Se quedó callado como si lo hubiera descubierto.
-Me gustaba de antes, pero siempre supe que tú le gustabas -
Ok, estaba confirmado, esos dos debían estar juntos y yo tenía que contar la verdad.
-Cristián, soy Gay, me gustan los hombres y Emilia lo sabe, de hecho, estamos juntos porque quiere sacarte celos... Tú le gustas... Ambos se gustan -
Dije muy rápido y es que todo me daba vergüenza, pero lo hice, hice frente a mis miedos.
-¿Eres maricón? - fue todo lo que preguntó.
Nunca antes me había dolido tanto esa palabra, y es que me la estaba diciendo alguien a quien quiero. Su rostro tenía cierta expresión de desagrado, como si fuera un desconocido, alguien que le daba asco.
Cuando niño mis compañeros se reían de mí porque siempre lloraba por todo, por eso intenté desde entonces no hacerlo nunca más en público. Solo que esta vez me fue imposible, su rechazo me dolió mucho.
Lo que sucedió después no sé cómo explicarlo, porque de la nada apareció Joaquín y golpeó a Cristián en la cara.
-¿Eres imbécil? Te contó algo importante, confió en ti, ¿y tú reaccionas de esta manera? -
El muchacho estaba enfadado, en realidad le disgustaba lo que había sucedido.
Luego me tomó del brazo y me llevó al baño para que me limpiara el rostro. Fue muy amable conmigo ese día.