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Es preciso que parta, y viva... por nezalxuchitl

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Notas del fanfic:

Un trabajo viejo que subo conmemorando el 02-02-2020

 

Notas del capitulo:

Enjoy it.

Michael Corleone echaba la cabeza atrás, pegándose contra la pared contra la que Tom Hagen batallaba por empotrarlo. Hombros y nalgas se aplastaban contra ella, por la curva de su cintura las manos de su hermano lo apretaban, frenéticas. Tom empujaba con su cuerpo, con su pecho, pegándolo al de Michael y fundiendo sus bocas en una.

Michael jalaba su chaleco, estrujándolo; sus manos recorrían sus muslos con ardor, palpando lo que habia debajo, carne suave y añorada. Se devoraban las bocas entre ruidos, jadeos entrecortados y respiraciones pesadas, ruidos de placer, de deseo, de ansiedad. Las manos de Tom subieron por sus muslos, por sus nalgas, separándolo de la pared y cargándolo sobre si, sobre su cadera. Mike ladeo el rostro con la boca abierta, muda expresión de placer al sentir las nalgas apretadas y la dureza de Tom contra la propia. Se froto contra el y el consiglieri lo miro hacer, admirando su belleza.

Pero mas admirada era todavía la suya; no habia nadie mas hermoso que Tom Hagen a los ojos de Mike, nadie a quien deseara mas, fruto prohibido en tantos sentidos. Estrujo esas carnosas nalgas como tantas veces habia deseado hacerlo, esas curvas que surgían desde el cinturón, curvas perfectas que lo hacian morderse los labios de deseo. Carne que estaba bajo sus dedos, bajo los pantalones y la ropa interior, pero bajo sus dedos.

Tom habia admirado la belleza de Michael durante demasiado tiempo. Solo su mirada habia podido seguir la delicada línea del cuello, su imaginación perderse bajo la ropa. No podia evitar, ahora, devorar el cuello de su hermano, ese cuello fragante y calido, delicado, sobre el que se cerraba su boca como queriendo dar un mordisco, pero solo queriendo embeberse de el. Tironeo de la ropa de Michael sin importarle arrugarla, que la corbata terminara deshecha y el cuello arruinado por su saliva. Ansiaba tenerlo, lo ansiaba con toda su alma, y aun asi, era poco comparado con lo que Mike lo deseaba.

El brillo en sus negros ojos lo asusto por un instante. Que Mike fuera capaz de poseer sentimientos tan intensos lo asustaba, a veces. Lo hacia desearlo mas. Sus labios volvieron a encontrarse, furiosos, casi dentelleándose, tomando ambos la iniciativa el mismo tiempo, como si estuvieran conectados fuera del tiempo y del espacio. El ardor con que se tocaban, se embestían, se lengüeteaban, superaba los limites de la mera pasión.

Arriesgaban cosas mas importantes que la vida entregándose al deseo en ese pasillo. La mano de Mike apretó el pecho de Tom, como si lo quisiera empujar, cuando lo que realmente quería era tenerlo mas cerca. Tan cerca como fuera posible, rodeando su nuca con su mano, la zona mas desprotegida, empujándolo contra su boca. Las de Tom bajaron a sus nalgas, estrujandolas, sobándolas de arriba abajo con ganas de poseerlas. Mike lo sabia, y lo deseaba, y subio un muslo contra el, estrechando su cercanía, acariciado y sostenido por Tom, que sigio sobando la otra nalga.

Llevo su mano a la entrepierna de Hagen; al tocar su miembro caliente y erecto una ola de calor lo arraso, asolando como el viento del desierto, dejándolo con una necesidad tan imperiosa de ser uno con el amado que casi le hacia llorar.

Tom se habia quedado igualmente sin aliento al sentir a Michael agarrarlo; no pudo jalar aire, solo abrir mas la boca, cuando Michael comenzó a sobarlo con fruición, con exquisito placer, que sin embargo, no bastaba. Con un gruñido se lanzo contra sus nalgas, estrujandolas desde abajo, llevando al limite las costuras del pantalón y la propia capacidad de contenerse.

Pero… ¿valia la pena seguir conteniéndose? Las pestañas infinitas de Mike, sus mejillas tan suaves, tersas. Las sigio con los labios, llegando hasta la oreja, olfateando con gesto desesperado, ojos cerrados. Agarro fuertemente a Mike de las caderas, subiéndolo por la pared, cargándolo con su cuerpo, ardientes ambos.

Michael jadeo, viendo el sufrimiento en el rostro de Hagen.

-Tom, suéltame. Tom, tenemos que parar.

Estaba al borde de las lagrimas y su voz no tenia toda la fuerza que quería demostrar.

Hagen lo hociqueaba, devuelto al estadio mas bajo, totalmente adicto a su pareja. Olor, sabor, cercanía. Que lo mataran, pero no iba a soltarlo, no.

-Tom, por favor…

El mismo no era capaz de dejar de tocarlo, de apretarlo.

-No vale la pena seguir asi, no…

Lagrimas ardientes quemaron su cuello antes de que los dientes se cerraran en una mordida, posesivos.

Estuvo tentado de sucumbir, de abandonarse ahí mismo a los habilidosas manos de su hermano, pero termino empujándolo por el rostro.

-“Es preciso que parta y viva, o que me quede y muera”

Tom tardo un momento en identificar el fragmento. Entonces, con un gemido lastimero froto la frente contra su pecho.

-Te necesito… 

Apreto su ropa, impotente, desesperado.

-Lo se. – le respondio lleno de ternura, de comprensión.

Cuando los ojos azules lo miraron desesperados, heridos, desde abajo, sintió dolor, rabia.

Se obligo a apartarse, se obligo a alejarse, con la sangre bullendo tan fuertemente por el deseo, por la rabia de que no fuera consumado. Por el dolor que provocaba a Tom Hagen.

Apenas se habia repuesto un poco, el consiglieri, cuando la puerta al final del pasillo se abrió y de ella surgieron los jefes de las cinco familias, precediendo a Don Corleone.

 

 

Notas finales:

Esta pareja fue mi otp hace como tres años.

Portada en wattpad, mismo nombre, mismo autor.

Slán!


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