Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Tenshi no merodi por KoichiBielefeld18

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Tsuzuki se encunetra con aquel hombre que de manera cruel asesino a su compañero, mientras que este le invita a cenar con él y hacerle compañia...

¿El shinigami se dara cuenta de las segundas intenciones de ese hombre?

Tsuzuki caminaba sin rumbo durante la noche, hasta que sus pies no aguantaron más y lo dejaron caer en medio de un parque. El chico, se levantó a como pudo y se sentó en uno de los columpios del lugar, colocando sus manos sobre sus regazos y viendo como caían enormes lagrimas sobre ellas;

“eres un inútil Asato” se decía a si mismo mientras que lloraba en silencio “Hoy sí que te lo hicieron ver y eso que no sabes ni de que estaban hablándote… además de que olvidaron mi cumpleaños” el chico suspiro “y el jefe boto los pastelillos que llevaba para compartir con ellos… de verdad que me odian… y… ya no…”.

Tsuzuki comenzó a llorar sin control cuando frente a él, alguien le extendía un blanco pañuelo de seda. El chico lo tomo limpiándose las lágrimas cuando volteo a ver hacia arriba encontrándose con la persona que menos quería ver en ese momento;

-Muraki… - susurro cuando este lo miraba con una sonrisa desagradable

-buenas noches, Tsuzuki-san. - dijo este cuando su pañuelo le fue devuelto -Que encantador haberlo encontrado esta noche y bajo esta bella luna

-n-no estoy de humor hoy, Muraki. Por favor, déjeme en paz

-pero si hoy es una ocasión especial. - y el hombre le entrego un enorme ramo de rosas rojas -Feliz cumpleaños, Tsuzuki-san- el chico se levantó de su asiento mirando al otro abrumado

- ¿Cómo es que usted?

- ¿lo sé? Es obvio ¿no? Se todo de usted, mi querido Tsuzuki-san. Aunque… - y miro hacia todos lados algo confundido - ¿Dónde están tus grandes amigos? ¿no deberían estarle celebrando con una gran fiesta llena de pastel? - el shinigami bajo la cabeza y de nuevo sus enormes ojos amatista se llenaron de lágrimas ante la enorme sonrisa disimulada de Muraki - ¿He dicho algo malo?

-ellos…. Se molestaron conmigo por algo que sé que no hice, pero… no quisieron escuchar y… - sin previo aviso, Tsuzuki se abalanzó sobre Muraki y lo abrazo con fuerza, comenzando a llorar en su hombro - ¡Yo no hice… nada de lo que dicen! - Muraki se sorprendió y le toco la cabeza con la mano, aun asombrado

-ya, ya Tsuzuki-san- el estómago del mencionado sonó con fuerza cuando este se soltó del hombre de cabello plateado - ¿Tiene hambre Tsuzuki-san?

-y-yo… - dijo el otro algo nervioso -no he comida nada desde el desayuno-. El doctor sonrió y le limpio las lágrimas de la cara

-vamos a comer entonces y celebrar este gran día

-pero…

-no se preocupe, Tsuzuki-san, yo le invito… esta noche… será mi compañía- termino con malicia cuando guío al otro hasta el centro de la ciudad y se dirigieron hacia un restaurante.

Por otro lado, Hisoka se encontraba caminando por el jardín de EnmaCho, cuando topo de frente con Tatsumi quien se veía preocupado;

- ¿aun nada? - pregunto el menor algo angustiado, aunque no quería que se notara. Tatsumi negó con la cabeza

-eh ido a su casa, a la cafetería que frecuenta… incluso a las cercanías del lago de Nagasaki, que le gusta ir ahí cuando está molesto, pero… nada

- ¿A dónde podrá haber ido?

- ¡en cualquier momento cuando tenga hambre vendrá! - se escuchó decir al jefe Konoe, quien se acercaba a ellos con enojo -El rey Enma está bastante enojado, así que espero que aparezca pronto

-nosotros también- susurro Hisoka preocupado.

 

. . .

 

Tsuzuki se encontraba completamente ido en sus postres, sin notar como el silencioso doctor lo veía lleno de lujuria mientras que tomaba largos tragos a su copa de vino;

- ¿está todo delicioso Tsuzuki-san? - preguntó mientras que el otro se relamía los dedos después de comer una enorme tarta de chocolate

-todo está delicioso, - contesto el castaño tomando un trago de su copa de vino también -le agradezco esto

-le parece si nos movemos a un lugar un poco… ¿más íntimo? - sugirió el doctor poniéndose en pie mientras que el otro lo miro aun con un pedazo de tarta en su plato. El peli plata sonrío -Pediré que traigan ese y más dulces a la habitación, ¿le parece? - el shinigami lo miro nervioso

-creo que… ya debería irme…

- ¿está seguro Tsuzuki-san? ¿hay alguien que le esté esperando en casa? Pensé que había peleado con sus supuestos amigos- Tsuzuki bajo la mirada con tristeza

-tiene razón, - dijo aguantando un sollozo -creo que podría quedarme un rato mas

-entonces, sígame por favor.

Tsuzuki dudo por un momento, pero recordando todo lo que había pasado temprano, decidió seguir a aquel hombre que le invitaba a su habitación a continuar comiendo pasteles, sin notar el doble propósito de este.

Después de subir un par de pisos en el elevador, Muraki guio a su acompañante por un par de pasillos más hasta que llegaron a una enorme suite que tenía vista hacia toda la ciudad de Tokio.

El shinigami caminó hasta el balcón y quedó admirado por la vista;

-nunca había tenido una vista como esta- dijo más para sí mismo que para el hombre que estaba a su lado

-opino lo mismo- respondió el doctor tocando levemente el brazo del castaño, quien se sorprendió y se alejó de inmediato, haciendo que el otro sonriera. Tsuzuki entró en la habitación, notando por fin la enorme suite en la que estaba

-se ve bastante caro- dijo en son de broma mientras se paseaba por el enorme lugar

-lo es, - comento el otro -y si usted lo desea, puede quedarse aquí todo el tiempo que quiera y también, todo el que yo quiera. -. Muraki se acercó al otro por detrás y lo tomo en un fuerte abrazo, el cual Tsuzuki rechazo casi de inmediato, yéndose de frente y cayendo sobre sus postres, llenándose él y el piso de la habitación. El peli plata rio con gracia mientras el otro se levantaba del piso y se lamia las manos -Pero que desastre ha hecho Tsuzuki-san, creo que deberá limpiarlo

-e-enseguida lo hare- soltó el otro nervioso y se puso de pie cuando fue jalado por el hombre y lanzado con fuerza sobre la enorme cama King que había en la habitación - ¡h-hey!

-shhhh- dijo el doctor poniendo un dedo sobre los labios del otro -Creo que es hora de darle su regalo de cumpleaños, Tsuzuki-san

- ¿Qué? -. Muraki chasqueo los dedos y fue cuando el shinigami sintió como sus muñecas se juntaban sobre su cabeza y eran atadas por fuertes y delgados hilos que se incrustaban en su piel - ¡Muraki! ¡déjeme ir!

-solo vamos a divertirnos, mi querida muñeca. - dijo el otro mientras que con una tijera que había tomado de su mesita de noche iba cortando la ropa que tenía el otro, dejándole solamente la camisa blanca y sus apretados bóxer negros -Es hora de disfrutar un poco, así que porque no te relajas ¿eh?... Asato

- ¡no me llame por mi nombre! - Tsuzuki intento moverse, pero su amarre se incrustaba aún mas

-entre más te muevas, más te apretara. Como hice con tu querido compañero en una ocasión, esos hilos son de cabello de mujer, así que son irrompibles

-por favor… no…

- ¿Qué tiene que perder Tsuzuki-san? ¿no lo ha perdido todo ya?- Muraki acaricio la mejilla del castaño mientras que este lo miraba con miedo, sabiendo lo que iba a suceder -No hay nadie buscándolo,- comenzó a decir mientras que tomaba un poco de pastel y lo embarraba sobre el pecho desnudo del castaño -no hay nadie que se esté preocupando por usted en este momento, mientras que yo… - bajó y lamió con demasiada intensidad los suaves y rosados pezones del otro, haciendo que Tsuzuki sintiera nauseas mientras era tocado -puedo consentirlo y darle todo lo que usted quiera… empezando porque yo no olvide su cumpleaños

-suélteme… - Tsuzuki intento hacer su cabeza hacia atrás cuando el doctor se acercó a sus labios y los beso con mucha pasión, recibiendo a cambio un fuerte mordisco por parte del shinigami. Muraki se tocó el labio y tomando un poco de la sangre que salía de él, la lamio mirando de lleno las enormes amatistas del otro -Entre más intentes huir, más se cernirá la amarra a tu muñeca y más me excita a mi

-n-no quiero esto- dijo en voz baja el shinigami mientras que ese hombre lo acariciaba y lo lamia, en cada rastro de piel que tenía libre. Muraki, el asesino de su compañero estaba a punto de violarlo y él lo sabía, sabía que tendría el mismo y cruel destino de Hisoka, solo que él no podría morir, ya que era inmortal. Odiaba serlo.

Muraki continúo lamiendo el pecho de su amado, hasta que empezó a descender y con un movimiento rápido, estiro la ropa interior del otro mientras que este cerraba sus piernas con fuerza. El doctor sonrió ante este movimiento;

-eso es, mi amado Asato… hazme las cosas más difíciles que solo haces que te desee más y te quiera ver llorar- Tsuzuki lo miro aterrado cuando el hombre le abrió las piernas de golpe y con la misma tijera corto sus finos bóxer negros, dejando al descubierto la media erección que tenía el castaño

-p-por favor… no… déjeme ir Muraki… ya suficiente he tenido hoy- dijo el otro aguantando la respiración cuando el doctor comenzó a tocar su miembro palpitante

-lo sé y que mejor que para terminar este horrible día… que tener un buen final

- ¡NO QUIERO ESTO! - grito Tsuzuki lanzando una fuerte patada que le dio al doctor en la mandíbula y lo lanzó de la cama. El chico aprovecho eso, para levantarse de la cama a pesar de que sus muñecas ya se encontraban sangrando y buscar sus pantalones para acercarse a la puerta.

Tsuzuki estaba por ponerse el pantalón, cuando fue interceptado por el hombre, quien lo tomo del cabello y le estrello la cabeza contra la pared;

-de verdad que eres melindroso, Asato… - dijo colocando al otro de frente contra la mesa y alineándose detrás de él, mientras que le abría las piernas con las suyas -De verdad que haces que me excite hasta el punto de hacerte gritar y gemir de dolor… ¡quiero que grites y sufras Asato! - exclamo entrando de golpe en el shinigami de ojos amatista, quien soltó un grito tan fuerte que hizo que su garganta se lastimara. El chico comenzó a sentir como la sangre bajaba por su pierna mientras que el doctor le daba fuertes y muy dolorosas estocadas en su ya no virginal trasero, - ¡grita! ¡gime!... ¡di mi nombre!

- ¡NOOO! - soltó el otro con tristeza siendo sometido por el diabólico asesino de su compañero.

 

 

 

Notas finales:

Actualizacion los viernes :3

 

Dejen sus comentarios


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).