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Dejado atrás por desire nemesis

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Notas del fanfic:

No soy la inventora de ninguno de los personajes sólo lo utilizó con fines de diversión sin fines de lucro espero que los creadores sepan entender.

La historia comienza con Joseph en una habitación semi oscura rodeado de varios rufianes el agarrado de los brazos está de rodillas en medio del lugar. Uno de los rufianes el que parece jefe sonríe malévolamente antes de decir—Chicos pueden divertirse todo lo que quieran, enseñenle a este tipo todas las maneras y posiciones no sé cuánto dinero nos hará ganar pero espero que en un tiempo recuperemos lo que su padre nos debe—Joey lo miró desafiante y el rufián le dijo--No me culpes a mí todo este embrollo es culpa de tu padre a ti te toca pagar sus platos rotos—
 
Todos los de la banda lo tomaron en varios turnos por varios días en todas las maneras y posiciones a veces uno solo a veces en grupos y luego comenzó su trabajo. Estaba en una tienda donde vendían sexo no era el más popular sólo era un trabajador más, por 6 años estuvo trabajando allí y cuando hubo pagado la deuda fue dejado ir ya que no era nada especial para ellos.
 
Él no quería encontrarse con nadie de su pasado pero si se quedaban Tokio no tenía forma de evitarlo ya que debido a diversos traumas había olvidado todo de su pasado antes de ingresar a esa tienda si sabía el motivo por el cual había trabajado así era porque se lo habían dicho los yakuza.
 
Es así como Joseph se subió a un ferry y terminó en una alejada isla al norte de Japón trabajando de mesero en un pequeño pueblo. Un día en dicho pueblo había una gran conmoción en los noticiarios se hablaba de la inauguración de una fábrica mucho tiempo esperada que traería prosperidad a la zona. Todos están alborotados porque el dueño de tal empresa un conglomerado multinacional estaba en el pueblo para la inauguración de dicha fábrica un hombre al que no reconoció llamado Seto Kaiba. Pero él no hacía mucho caso de las noticias no era algo que le interesara.
 
El mencionado salió de la ceremonia con destino al pequeño Puerto donde estaba anclado su yate personal para dejar la isla cuando en una intersección miró por la ventanilla y vio algo inaudito Joseph Wheeler caminando muy tranquilamente después de 6 años en los que había desaparecido sin dejar rastro.
 
Algo hizo que caiga se bajara de su auto y se interpusiera en su camino. Joseph percibió más que ver a una persona en frente suyo mientras caminaba con la cabeza algo gacha sumido en sus pensamientos, decidió evadirla como generalmente lo hacía pasando por su lado pero dicha persona se movió para quedar en su camino cortándole el paso lo que hizo que Wheeler levantar a su vista para mirarlo Justo a los ojos el otro correspondió su mirada.
 
No sé qué te pasa pero no deberías meterte en el camino de la gente—le dijo el rubio.
 
Y tú deberías aprender a comportarte perro—le contestó Kaiba usando el mote qué más le desagrada al otro a propósito.
 
Idiota no debería ir insultando a la gente por ahí sólo porque tiene un mal día—le dijo en mi lado antes de pasar por su lado. 
 
Seto se quedó estático mientras lo veía irse por su lado aparentemente sin reconocerlo. Cabía la posibilidad de que el otro estuviera fingiendo pero no lo creía posible. Wheeler no había reaccionado como esperaba al sobrenombre no había actuado como el mismo ni siquiera había reaccionado a su cara. Tenía que saber si estaba en lo cierto y es por eso que se volteó y fue por el otro agarrándolo de un hombro y obligándolo a darse una vuelta.
 
¿Acaso no me reconoces?--preguntó con tono imperativo el castaño.
 
¡Ah sí! Eres ese empresario que vino hoy a inaugurar la fábrica ¿verdad? Bueno lo que sea no me interesa no tiene nada que ver conmigo ¿o si?--le dijo el rubio antes de volverse una vez más y alejarse.
 
Seto se quedó un momento más tratando de averiguar qué era lo que estaba pasando mientras veía la espalda de Joseph Wheeler alejarse. Sentía algo en su pecho era como un dolor que no entendía. Nunca le había pasado con nadie. Pero jamás nunca nadie lo había olvidado. Podrían despreciarlo guardarle rencor o adorarle pero nunca lo habían borrado de su memoria y nunca le hubiera importado que alguien lo hiciera lo que le preocupaba es que al parecer si tenía importancia que el perro lo hiciera y no se explicaba el por qué.
 

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