Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Te Alcanzara Mi Corazón por AMMU TEIKOKU YUDAINA

[Reviews - 4]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola mis terrones, espero que esten bien. 

Por favor lean, disfruten y dejen sus comentarios. 

Nos vemos abajo. 

Solo pasaron unos días, y tantas cosas inevitables sucedieron.

---Lado de los demonios---

-¿A qué has venido? Tu deber es custodiar a Shion- Hablo de manera seria el actual patriarca, que su semblante sereno se ha esfumado desde aquel acontecimiento.

Un demonio que mantiene su postura de reverencia, se encuentra en la sala patriarcal –Lo lamento mucho su señoría, pero… Creo que es más importante informarle un suceso imperdonable-

Hakurei afilo su mirada, pensando que nadie debía saber la situación de Shion, que está encerrado por haber estado con un Ángel, si no, por no cumplir con sus deberes y está siendo castigado.

Solo algunos conocían la verdad.

-¿Qué es?- Preguntó, apretando sus puños de manera discreta.

Sin levantar su mirada, comenzó a relatar su noticia –El otro día, Albafica fue a ver a Shion, y tuvieron una conversación bastante interesante- Sonrió levemente apenas si perceptible.

-Yo le indique a Albafica que fuera a verlo- Técnicamente esto no era cierto, nunca dio su consentimiento, pero no se interpuso al darse cuenta que el peli celeste visita al peliverde de vez en cuando.

-Sí, pero… Lo que hablaron…- Callo un instante, como si tratara de dar un toque de incertidumbre –Me entere que Shion, su sucesor se encuentra encinta-

Los ojos del mayor se abrieron de par en par, incluso se levantó de una forma agresiva que podría tomarse como un acontecimiento peligroso para cualquiera.

-¡¡¡¿QUÉ?!!! ¡¡¡¿QUÉ HAS DICHO?!!!- Comenzó a caminar con un paso firme y decidido, su furia reflejada en su mirada, sin poder creer lo que ha escuchado.

-Su… Su… Señoría… Patriarca…- Comenzó a titubear, preguntándose si había hecho lo correcto, la energía del patriarca se volvió tan peligrosa para todos a su alrededor –Los escuché, Albafica confirmo esto, al tocar el vientre de Shion y ambos se alarmaron, pidió que nadie se enterara, que no se debería saber, mas creo… Que debía decirle- Espero que esa explicación lo satisficiera, hablo tan rápido como pudo, el terror en sus ojos se reflejó.

El de cabellos blancos en una coleta alta, apretó los dientes y puños, su ceño fruncido da a entender lo que siente, una tremenda decepción, odio y un imposible.

-Esto… No puede ser verdad…- Hablo entre dientes, incluso por la rabia dio un fuerte golpe en la mesa que tenía a su lado, quebrándola porque necesita sacar su frustración que incrementa.

-Patriarca, le digo la verdad… Yo no ganaría nada mintiéndole- Ese Demonio, hablo por lo bajo, ahora se arrepentía haber ido de chismoso.

-Eso ya lo veremos- Camino por un lado del subordinado en cuestión, para dirigirse a la salida, sin duda debía ir en ese mismo momento, saber si ese estado en su discípulo es correcto o solo la mentira de un demonio envidioso.

Pero… Miles de ideas asaltaron su mente, si es cierto que está esperando un bebe, significaría que esa criatura es… Un hibrido de ambas especies.

No cambia duda, Shion se había entregado por completó a un Demonio, esto es peor de lo que creía.

Ahora la barrera Lapis Lazuli es la única opción.

Se perdió entre los pasillos del recinto, dirigiéndose a quien sabe, solo él.

-Esto… No puede ser… Shion… ¿Esta embarazado?- Un demonio bastante joven, de cabellos castaños, se quedó detrás de la puerta patriarcal, posiblemente con el objetivó de entrar a informar algo importante, pero sin querer escucho esa conversación y ahora no sabía qué hacer.

Sus pasos fueron hacia atrás, retrocediendo de a poco, hasta que sus piernas recuperaron la fuerza de la impresión.

---Habitación de Manigoldo---

-Tus heridas ya están sanando- El de cabellos peli celestes, lacios que se notaba apenas un ligero bulto en su vientre, limpiando aquellas zonas que pronto cicatrizarán.

-Si- Sonreía, pues el dolor había desaparecido, miraba atento a su pareja -¿Cómo estás?-

-Estamos bien, solo que es demasiado glotón- Suspiro en este punto, dejando ver una pequeña sonrisa.

-Ya te quiero ver más gordito, lucirás muy hermoso- Bromeo, para animar a su amado Albafica.

Pero como este demonio, no es partidario de algunas bromas, aunque sean hechas con amor, fue capaz de apretar algún punto en el cuerpo de Manigoldo para hacer que callara.

-¡¡¡AY!!! ¡¡¡YA, YA ENTENDÍ!!!- Le rogaba para que lo soltará un poco.

-No te burles de mi- Sonrió porque ahora él fue quien molesto a su amado peli azul.

-No lo hago- Hizo una mueca de fastidio, pero duro poco al volver a verlo, en su imaginación solo podía pensar en escenarios tan hermosos para estar con su demonio, aun después del castigo que le han dado.

Poco a poco, fue recordando de nueva cuenta, el motivo por el que decidió recibir aquello y no decir nada.

-¿Cómo está?- Le hablo con un tono suave.

Suspiro, había terminado su labor, bajando su mirada y posando sus manos en el regazó –Esta bien físicamente, pero… Emocionalmente…- Cerro sus ojos –Extraña demasiado a ese Ángel-

Cruzo sus abrazos, molestó –Le dije que no debía enamorarse de alguien así, pero no… Nunca me hace caso- Se sentía enojado, pero no tanto por el castigó, o el hecho de que un amigo de la infancia rompiera las reglas, el hecho de no poder ayudarlo a estar con quien ama, le causa bastante enojo, pues conoció como mejoro su ánimo, y que volviera a ser infeliz, no le parecía justo.

-Manigoldo…- Llamo suavemente el peli celeste.

-¿Qué pasa? Encanto- Le hablo con un cumplido, aunque el contrario no es partidario de ellos.

-Ahí… Algo más… Shion…- Pensaba que podría ser contraproducente esta información, pero sabe que su amado peli azul jamás haría nada contra ese peliverde que ambos quieren mucho.

-¿Qué más le pasa?- Se giró a verlo, con algo de seriedad en sus facciones.

-Él… Esta…- No termino de hablar, pues la puerta de la habitación se abrió de par en par, dejando ver a un demonio, demasiado agitado, casi al borde de caerse.

-¿Es verdad?- Regulus hablo tan agitado que necesitaba tomarse un minuto, pareciera que hubiera volado por todos lados, para encontrar a alguien que le diera una respuesta.

-¡¡¡¿QUÉ TE OCURRE MOCOSO?!!! ¡¡¡¿CÓMO TE ATREVES A ABRIR LAS PUERTAS DE OTROS DEMONIOS SIN TOCAR?!!! ¿Qué le hubiera dicho a tu tío si te enteras como se hacen los bebes?- Esta última fue ya de burla, para avergonzar al recién invitado no grato.

-¡¡¡ES DE UN BEBE, A LO QUE VENGO HABLAR!!!- Su oración no tuvo mucha coherencia para los dos presenté.

-Pues… Yo estoy esperando uno… Como debes saber y no te daré la charla, esa es obligación de tu tío- Albafica hablo, levantándose de su asiento y haciendo algunos labores para ignorar al joven.

-¡¡¡YA SÉ CÓMO SE HACEN LOS BEBES Y POR ESO VENGO A PREGUNTARLES!!!- Volvió a tratar de recuperar aliento -¡¡¡¿ES CIERTO QUE SHION ESTÁ ESPERANDO UNO?!!!- Sus ojitos azules y grandes, se fijaron en ambos demonios adultos.

Manigoldo, casi se le iba el color de la cara, pues él no sabía que eso había ocurrido, incluso se levantó de golpe.

-¡¡¡¿QUÉ EL PACHONCITO ESTA EMBRAZADO?!!!- Exclamó con uno de los tantos sobrenombres que le ha dedicado al peliverde.

-¡¡¡SI!!! ¡¡¡LO ESCUCHE EN LA SALA PATRIARCAL, UN DEMONIO DE JAMIR, LE INFORMO QUE SHION ESTÁ ESPERANDO UN BEBE!!!- Entro a la habitación, para hablar de frente con el dueño del lugar -¿Por qué esta en Jamir? ¿Es por él bebe?- Cruzo sus abrazos –Sé que los demonios que están destinados a ser patriarcas no deben tener familia de sangré, pero… ¿Por eso lo castigan?-

-Yo… ¡¡¡¿QUÉ VOY A SABER?!!!- El demonio con una actitud bastante jovial y burlesca, comenzó a pensar en tantas cosas, que de la nada iba del enojo a la confusión en segundos.

No diría nada, pues el pequeño Régulos no debía saber la verdad, siendo joven, que supiera que un colega se unió de forma carnal con un Ángel, sería imperdonable y muy malo para la reputación del peliverde.

Por eso habían jurado no revelar nada, y el mismo patriarca se los ordeno aparte.

Mientras Albafica, guardaba silencio y no se atrevía a mirar a ninguno, solo clavo su vista al suelo, preocupado por el bienestar de su amigo, ahora que el patriarca de seguro está enterado.

-Yo creo… Que no debió ser por eso- De nueva cuenta el joven hablo –Si eso hubiera sido la razón, el patriarca no hubiera salido de esa manera tan brusca y… Creo que va a ir directamente a Jamir-

Los ojos azul cielo de Albafica se abrieron preocupados -¿Cómo sabes que ira?-

Manigoldo giro su vista a su amada florecita, con esa forma de actuar repentina, entendió que sabía al respecto y no le ha contado, se controló tanto en no empezar una discusión, solo por no revelar información del prisionero.

-Cuando venía para acá, lo vi, dirigirse para allá- Bajo su mirada angustiado –No se veía nada feliz-

Aunque sea joven y algo presumido por sus grandes habilidades, siempre ha tenido un gran aprecio por Albafica y Shion, sin contar a su Tío Sísifo y sus dos primos que aún son unos niños, esos dos se volvieron su familia no sanguina y los admira tanto, saber que una de sus figuras a seguir esta en un predicamento como este, puede causar confusión, decepción, y preocupación.

Regulus sin duda se cuestiona tanto ¿Qué está pasando?

-Tengo… Tengo que irme…- Albafica hablo, angustiado, pensando que el patriarca pudiera dañar a su amigo.

-Ah no- Manigoldo lo sujeto de la mano, impidiéndole que avanzara –No irán a ningún lado los dos solos-

-Pero…- Miro de reojo a Regulus, debía callar aun.

-Iré con ustedes, no puedo permitir que esto sea peor- Sonrió decidido, pero su preocupación por el peliverde aumento, comprendió lo que ocurría, y sabía que esto traería consecuencias peores.

-¿Qué está pasando?- El castaño, se volvió a sentir excluido de la conversación.

-Regresa con tu tío- Manigoldo le ordenó de inmediato.

-Pero… Quiero ayudar- Quiso detenerlos, pero no lo logro, después de todo, aun es joven y estos dos tiene más fuerza y rapidez para irse.

Esto le causo más dudas, y preguntarle a su tío no era opción ahora, pues seguía reposando de una batalla que no le contó, cuándo siempre es costumbre saber de lo que hace.

El menor, está teniendo tantas preguntas y nadie le desea contestar, sobre todo un embarazo…

-¿Qué tan malo es esperar un bebe?- Dejo escapar esa pregunta al aire, mientras notaba como los dos demonios se alejaban volando.

---Torre de Jamir---

Sin saber, tan ajeno del exterior y lo que está a punto de pasar.

El peliverde, se había recuperado un poco, su deseo de dejarse morir se había sustituido por las ansias de conocer a su bebe, el saber de esa hermosa noticia, lograba formar una sonrisa en sus labios.

Pensando que si se recupera rápido, podría tener la fuerza de ir a los límites y encontrarse a Dohko.

Ni siquiera recuerda la amenaza de la barrera, pero si quería hacer funcionar el plan de emergencia debía ser ahora o nunca.

Toca su aun vientre plano, pensando en cómo podría ser.

Su pequeña ilusión crecería cada día más, al ver cambiar su cuerpo, sentirlo en su interior.

Recordando como su dulce Ángel, le contaba lo ilusionado que podría estar al saber que esperaría un bebe.

Siendo un hijo engredado por un Demonio y un Ángel.

Debería ser la criatura más hermosa.

-Te quiero conocer y te prometo que tu padre estará con nosotros muy pronto- Se levantó un poco, al estar comiendo de forma adecuada, y con una actitud más positiva ante su situación, solo crea mayores fuerzas.

-No me importa si te pareces más un Ángel, te amare como seas- Esa mirada rosa se volvió tan cálida y dulce, que parecía que nunca hubiera sufrido, sonreía para él bebe que crecía en su interior.

Un fruto de un amor prohibido, y que defendería de quien fuera.

No sabía que eso debería hacerlo en cuestión de minutos.

-Dohko… ¿Qué estás haciendo ahora?- Se preguntó, tocando su pecho, justamente en el punto en donde oculta una tela azul muy apreciada o pedazo de una.

-¿Es cierto?- Una voz grave irrumpió en la tranquilidad de esa prisión.

-¿Eh?- Shion dirigió su mirada al portador de aquella voz y su sangre se helo un momento, pero sus ojos se fruncieron, sin duda ahora reconocía al patriarca como un enemigo y no se dejaría doblegar tan fácilmente.

-Dime… Shion- Le dedico una mirada cargada de enojo -¿Estas esperando un hijo?- No sería amable, mejor preguntar directamente.

Apenas Shion si hizo una mueca de sorpresa, pero no podría creer que su amigo lo traicionará.

-¿Quién le dijo eso?- Lo miro desafiante, estando a punto de llevar sus manos al vientre, pero se detuvo.

-No importa quien fue- Alzo apenas la voz, apretando los dientes -¡¡¡LO QUE IMPORTA ES SI ES VERDAD O NO!!!-

Trago saliva, pero no podía ser débil en estos momentos, pero tampoco podía arriesgarse a hace algún movimiento brusco, el patriarca podría herirlo o peor, a su pequeño que no tiene culpa de nada.

-¡¡¡CONTÉSTAME AHORA MISMO!!!- Dio algunos paso directamente hacia el peliverde -¡¡¡¿TU Y ESE ÁNGEL, OSARON HACER ALGO TAN PROFANO?!!!-

-¡¡¡LO QUE HICE CON DOHKO, NO LE CONCIERNE!!! Patriarca…- No dejaba de vigilar los movimientos del de cabellos blancos, notando su elevada energía acumulándose.

Abrió sus ojos, y boca, pero rápidamente volvieron a ser de un eminente odio –Entonces… ¡¡¡ES VERDAD!!!- Grito y esta vez sí se fue directamente contra Shion, sujetándolo de los brazos y acorralándolo contra la pared de manera brusca -¡¡¡¿CÓMO PUDISTE COMPORTARTE COMO UNA RAMERA?!!! ¡¡¡ENTREGANDO TU CUERPO A UN ÁNGEL!!!-

El peliverde comenzó a forcejar, logrando quitarse de encima las manos de Hakurei, para alejarse de inmediato, aunque la celda se encuentre cerrada con llave, todo fue calculado de inmediato.

-¡¡¡ES MI CUERPO!!! ¡¡¡NO ME IMPORTA LO QUE ESTUVIERA DESTINADO, AHORA NO PUEDO HACERLO!!! ¡¡¡COMO LE DIJE Y LO SIGO SOSTENIENDO, AMO A DOHKO Y ÉL A MÍ!!! ¡¡¡LO QUE HICIMOS… NO LE INCUBE A NADIE, SOLO A NOSOTROS!!!- Dijo estas palabras con toda la firmeza posible, apretando sus dientes e incluso mostró sus colmillos de manera amenazante.

-Es verdad… Llevas a un maldito bastardo en tus entrañas- Hablo como si tratara de calmar su voz, sin muchos logros.

Que se dirigieran de esa manera su ser que fue creado con todo el amor que sus padres pudieran trasmitirle, no podía permitirlo.

-¡¡¡NO SE ATREVA A LLAMARLE ASÍ DE NUEVO!!!- Su furia aumento, podía ser la primera vez que Shion muestra esa determinación en su ser, y sin duda, si no fuera porque el mayor tiene más experiencia, lograría intimidarlo.

-¡¡¡¿CÓMO QUIERES QUE LE LLAMEMOS A ALGO QUE ES ASÍ?!!!- Le contesto, pero rápidamente suspiro, calmándose, porque sin duda aun debía informarle algo, que sabe perfectamente que es hora de pagar el castigó –Entonces… Te hare escoger entre dos opciones-

Los ojos rosas, miraron detenidamente al mayor, tratando de descifrar a que se refería.

-Tu castigo por haberte involucrado con un Ángel, aun no se ha cumplido así que- Camino quedando a una moderada distancia entre ambos demonios –¿Pierdes tus alas? O ¿A la criatura que llevas dentro?- Lo miro directamente a los ojos, logrando plasmar su autoridad, aun molestó en sus facciones.

Shion, sintió como su sangre se fue a los pies, su piel palideció y el sudor frio recorrerle, por su ensoñamiento no recordó el castigo, si tan solo lo hubiera recibido antes de que supieran esta noticia… No le podrían dar esa terrible opción.

Pero el mismo lo pensó, no importa lo que pase con él, con tal de que su hijo, logre tener la oportunidad de una vida feliz, haría cualquier sacrificio.

Bajo su mirada, tratando de sacar fuerzas de donde fuera y sus ojos de nuevo se dirigieron a los contrarios, con una mueca de determinación.

-Arránqueme mis alas, pero no lo dejare dañar a mi bebe- Le hablo fuerte, su postura demuestra toda la energía y amor que alguien podría darle a un ser que crece dentro de sí.

Había pensado en no llevar a cabo el castigó correspondiente, después de todo le guarda un cariño al peliverde muy grande, no quería seguir con esta cuestión, hasta que la barrera estuviera lista y liberarlo, para seguir el plan de vida, pero un embarazo cambia las cosas por completó.

Se sintió un tonto, al haber dado esas opciones, conocía la respuesta del demonio de ojos rosas antes de siquiera soltar la pregunta.

-No prometo que logres sobrevivir, por lo tanto puede que… No logres darlo a luz- Le advirtió, creyendo que así lo convencería.

-No pienso morir, sin que mi hijo logre ver este mundo, y le advierto de una vez… Pienso volver  a ver a Dohko y que sepa que será padre- Sonrió de manera forzada, el dolor que le esperaría lo debilitaría tanto tiempo que el plan se puede venir abajo.

---Afuera de la torre Jamir---

-¿Por qué no me habías dicho?- Manigoldo iba algo molestó por no enterarse de aquel secreto.

-Shion, no quería… Aaaah…- No podía seguir, había hecho algo de esfuerzo y su estado le demandaba descansar, tuvo que detenerse y sentarse en el suelo rápido.

El peli azul, rápidamente sostuvo a su amado, tratando de transmitirle algo de fuerza para que recupere el aliento -¿Estas bien?-

-Si… Solo que nuestro hijo, me agota muy rápido- Sostuvo la mano del demonio –Él no quería que nadie supiera… Yo fui quien se dio cuenta y le informo… Tenía que respetar su decisión.

-Pero… Ahora no lo podremos ayudar si el patriarca quiere hacerle daño- Hablo angustiado, mientras seguía sosteniendo a su florecita.

-Manigoldo… Ve con Shion rápido…- Rogo, el estaría bien… Su embarazo no es algo de alto riesgo, y podía manejarlo, sin embargo el peliverde está solo, sin quien lo ame y en el peligro de que lo dañen.

Giro su vista a la torre que aún se encontraba a una distancia considerable -¿Estarás bien?- Dudaba entre ayudar a su amigo y quedarse con su amada pareja.

-Sí, solo es algo de cansancio… Te alcanzare rápido, pero no podemos dejarlo…-

Ambos enmudecieron al escuchar un horripilante grito desgarrador, capaz de helear la sangre del más valiente.

Notas finales:

Buenos días, tardes, noches, ¿Que hora es? ¿Quien me ha robado el reloj? ¿Como están mis terrones de azúcar? Yo me encuentro super bien, muy feliz y llena de energía, aunque tenga sueño, el frió hace de las suyas en ocasiones... Pero bueno... Mi ciudad es cálida y en inverno el frió no es tanto, recuerdo que una vez llegamos a 5°C y aun así... Debimos ir a la preparatoria, jajajajajajajaja salimos temprano.

Creo que casi morimos congelados, algunos... Jajajajajja en fin... Que experiencias invernales mas feas hemos tenido. 

Pero fuera de eso, ha sido lo mas bajo, espero que no se vuelva a repetir. 

Veamos... Shion esta muy angustiado... Su bebe, el castigo... Los amigos que quieren impedir y le pequeño Regulus sabiendo cosas y no saber que hacer. 

Kiaaaaaaa... Me pone muy triste... Pero... Les dije que después de cierto punto, todo se volverá tan complicado y triste, y de verdad... Ya todo esta planeado y la linea cronológica es demasiado dura. 

En fin... Vamos a hacer la pregunta del día de hoy.

¿Creen que un cierto Angel ya este en el horno? Jajajajaja este es un guiño a DefMita...

Espero sus respuestas, comentarios y reclamos. 

Mis hermosos terrones de azúcar, muchas gracias por seguir apoyándome, aquí conmigo, wow me siento super feliz y aunque este aun lejos de ser una escritora, por que en si... No me considero una como tal, pues aun cometo errores, que obvio estaré arreglando y corrigiendo para próximos fic's, les quiero decir que tengan por seguro que tratare de ser mejor por todos ustedes. 

Bueno croe que me despido, quiero envolverme en una cobija y hacerme taquito, por que me esta congelando ahora el frió, coda rara, sale el sol, pro siempre han dicho por acá... Que mas frió hace cuando se esta descongelando... Y puede que sea cierto...

Cuídense mucho, hagan caso a las medidas de higiene y los quiero tanto. 

Ammu se va. 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).