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Un amor extraño por KoichiBielefeld18

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Notas del capitulo:

En la cueva todos se vuelven locos por el tan repentino celo del niño de acero… los alfas pelean entre ellos, pero el enorme omega solo pide por uno.

Por otro lado, Batman y Canario no saben que hacer con esto y solo les queda aun cosa… hablar con Superman

Batman se encontraba sentado junto a la cama donde habían dejado al pelinegro, cuando la puerta se abrió y por ella entró Canario Negro junto a Flash;

- ¿Cómo está el niño? - preguntó la mujer viendo como el otro negaba con la cabeza

-los niños están preocupados afuera ¿Qué les digo? - dijo Flash cuando el mayor lo miró

-diles que sigue inconsciente y que apenas sepamos algo, les informaremos- contestó Batman levantándose y yéndose con la mujer hacia la sala de estar, dejando al menor solo.

Bruce y Dinah acababan de llegar a la oficina de la mujer cuando sintieron un suave pero fuerte olor a pie de manzana con menta que inundo la habitación, seguido de un fuerte grito de Barry;

- ¡chicos! ¡auxilio! - escucharon al momento que salieron en carrera tras oír unos fuertes gruñidos. Cuando llegaron frente a la puerta de la habitación de Superboy, vieron a Flash y Wally protegiendo la puerta mientras que Kaldur era sostenido por M´gann y Dick y Artemisa se miraban con reto enseñando sus colmillos y comenzando una fuerte guerra de olor territorial.

Bruce y Dinah se taparon la nariz al acercarse;

- ¡ese omega es mío! - soltó Artemisa lanzándole un golpe a Robin, quien lo evadió y lo devolvió tirando a la chica de una patada al suelo

- ¡es mío! - gritó el pelinegro soltando más olor mientras oían los fuertes gritos de Conner detrás de la puerta. Batman y Canario abrieron la puerta rápidamente y entraron viendo como el menor se retorcía de dolor mientras soltaba dolorosos gritos;

- ¡¿Qué rayos está pasando?! - preguntó el hombre acercándose, recibiendo un fuerte golpe que lo tiró contra la puerta

- ¡no lo sé! - comenzó a decir la mujer cuando el chico cayó al suelo y sosteniéndose de la cama los miró con los ojos acuosos

- ¡¿Qué me pasa?! - gritó con furia rompiendo las sabanas mientras se sostenía el pecho - ¡¿Por qué me duele?! - la mujer intentó acercarse, pero el niño lanzó un golpe que ella evadió - ¡¿Qué me hicieron?!

-Conner, lo que está pasando es tu celo. - exclamó Batman intentando acercarse de manera lenta y sigilosa -Déjanos ayudarte, somos como tú

- ¿so-soy omega? - preguntó soltando unas cuantas lagrimas -no… ¡NO!

- ¡Dinah! - la mujer negó

-desconozco cómo funciona el segundo género en los kriptonianos, necesitamos a Superman- dijo la rubia alejándose de nuevo del chico

-él no vendrá… pero- Batman se acercó rápidamente y colocó un trozo pequeño de kriptonita que sacó de su cinturón en la mesita de noche junto al menor, quien comenzó a debilitar sus movimientos

-Robin… - decía entre sollozos mientras era subido por los adultos a la cama de nuevo -Robin.

- ¿está llamando a Robin? - preguntó Dinah mirando hacia la puerta - ¿Por qué?

-creo que lo reconoce como su alfa, por esa razón él está peleando afuera por proteger la puerta- contestó Batman cuando oyeron un fuerte golpe

- ¿amigos? - oyeron a Flash - ¿Qué hago?

- ¡llévate a Artemisa lejos y dale un supresor! - gritó Batman mientras le ponía un grueso collar al menor - ¡También a Kaldur!

- ¡bien! - oyeron como la chica se quejaba para luego solo escuchar fuertes golpes en la puerta. Batman se acercó y abrió, topándose con un poco golpeado Robin;

-quiero ver a mi omega- dijo aun con sus colmillos fuera retando con la mirada al mayor. Bruce suspiró

-podrás hacerlo, solo si te calmas- contestó con tranquilidad

-está sufriendo…

-lo sé, pero necesitamos que te calmes para que lo calmes a él ¿de acuerdo? - el menor asintió -Bien, entra- Robin entró viendo como Conner respiraba con dificultad por la piedra verde a su lado

- ¿Por qué lo lastimas con Kriptonita? - soltó enojado mientras se acercaba cuando fue detenido por Bruce

-eso es lo que lo que está haciendo que no sufra… NO la toques- el menor asintió quedándose en la puerta. Canario los vio y luego dirigió su mirada al azabache que estaba sobre la calma, quien se estaba comenzando a calmar;

-Rob… - dijo mirando al otro -Alfa… duele… -Robin lo miró y luego a Batman, quien se debatía por lo que sucedía

-acércate y cúbrelo con tu olor. - dijo cuando el menor asintió con fuerza recostándose al lado del otro y abrazándolo posesivamente mientras comenzaba a cubrirlo con su olor -No hagas nada estúpido mientras vuelvo

- ¿A dónde iras? - preguntó la rubia acercándose, viendo como Conner se acurrucaba en el pecho de Robin

-iré por Superman, necesitamos que nos ayude. Conner está muy inestable y no sabemos que otras sorpresas nos dará… también temo que los supresores no funcionen así que lo buscare a él

- ¿crees que Constantine sea de ayuda?

-no realmente, pero ha de ser de ayuda. Vuelvo en unas horas ¿puedes vigilarlos?

-Flash y yo nos haremos cargo

-es bueno contar con dos omegas más en el equipo- suspiró Batman acercándose a la puerta -Gracias, Dinah. Nos vemos

-bien. - la mujer suspiró con fuerza y jaló la silla hacia la puerta, sentándose de espalda a los otros para darles un poco de privacidad.

Mientras tanto, Conner al sentir el olor de Robin comenzó a calmarse, sumándole lo debilitado que estaba por la kriptonita junto a él. Cuando sintió al chico, se acurrucó junto a su pecho mientras era abrazado por el otro.

Luego de un rato, Dick bajó su cabeza y pasó su lengua por el cuello del azabache, sintiendo el collar que estaba ahí, haciéndolo molestar un poco;

- ¿Por qué mi omega tiene un collar? – preguntó haciendo que la rubia se volteara para verlo intentar quitárselo sin éxito alguno

-porque debemos evitar que lo marquen… igual no harás nada más que darle tu aroma mientras estén juntos. Deberás irte cuando vuelva Batman- contestó la mujer cuando el otro gruño

-no me iré y no pueden obligarme

-parece ser que eres un alfa bastante difícil. - recibió un gruñido -No puedes hacer nada y debemos estudiar su calor. Cuando todo mejore, volverás con Conner

- ¿puedo besarlo? - preguntó el mini alfa algo tímido acariciando la mejilla del otro con su pulgar

-solo si él quiere…

-siempre me deja besarlo… le gusta- Canario se puso de pie y se acercó mirando al acróbata

- ¿ya lo has besado antes? - Robin gruñó

-es un secreto…

- ¿ustedes son pareja?

-aun no… pero ahora… es mi omega y no permitiré que me lo quiten ni lo dañen

-nadie le hará daño a tu omega. - la mujer se acercó para revisar la temperatura del otro recibiendo un gruñido y un manotazo de parte del alfa -Necesito tomar su temperatura Robin, déjame tomarle los signos mientras vuelve Batman- el chico asintió permitiéndole a la mujer tocar al más alto.

Cuando la rubia acabó, vio a Conner abrir los ojos y soltar un leve gemido que hizo que Robin lo mirara asustado y luego a la mujer;

- ¿Qué le hiciste? - soltó amenazante cuando la mujer se alejó de ellos un poco

-no le hice nada, creo que solo está empezando a acostumbrarse

-alfa- soltó levemente el otro jalando a Robin del cuello de la camisa para oler su cuello

-sshhh… aquí estoy Con- respondió este dejando que el más grande oliera todo lo que quisiera -Hueles muy bien- agregó acercándose a la glándula del otro y oliéndola por sobre el collar

-Robin… distancia- dijo suavemente Canario cuando el pequeño alfa gruño y se alejó del cuello del menor, cuando este lo miró

-rob… hechizo- exclamó en voz baja. Robin sonrió y miró a Dinah

- ¿nos darías espacio, por favor? - la mujer asintió y se dio la vuelta para sentarse donde estaba antes, mirando hacia la pared.

El azabache se acercó al mayor y tomó sus labios en un suave beso, que fue recibido por el tembloroso cuerpo del omega, que se aferraba al cuello de la camisa del menor. Dick se acomodó mejor y comenzó a acariciar el enorme cuerpo junto a él, comenzando a mezclarse los olores.

Las cosas se estaban calentando, cuando la puerta se abrió y por ella entró Batman junto a una mujer de cabello largo color café;

-suficiente Dick. Vamos a revisar a Conner- el pequeño gruño y se alejó de su omega quien le sostenía el brazo con fuerza

-no, Dick no- soltó asustado, pero aun bastante débil por la piedra

-no me iré- dijo el acróbata más para Batman que para el super niño. El mayor suspiró

-lo prometiste, afuera- exclamó con autoridad cuando este chasqueo la lengua y salió junto a la mujer rubia, viendo a Superman acercarse por el pasillo.

 

 

 

 

 

 

Notas finales:

 

Actualización lista… adoro como va tomando forma, aunque no todo será paz

Gracias por leer <3

 


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