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Como un demonio por Silence Tsepesh de Lenfet

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Notas del capitulo:

Hola ~

Llega un capítulo mas de esta historia, espero que les guste!

Nos leemos pronto.

O planes para enamorar a un demonio.


 


 


Pero que temprano… Uh, ya paso tanto desde la última vez que me desperté temprano que ya lo olvide. Quiero dormir más, estaba tan cómodo en la cama, hace mucho que tampoco dormía tanto, pero para ser justos hay cosas más divertidas que hacer en la cama. Quiero volver a estar calientito en la cama.


— No te duermas, no te  duermas— ¿se puede dormir de pie? Siento que me quedare dormido así, si lo hago me iré de cara al piso. Aún sigue oscuro, tengo que encender la luz de la cocina para no golpearme con algo. Hubo un tiempo en el que ansiaba tener sirvientes, alguien que hiciera todo lo que yo no quería hacer o tal vez por el simple placer de saber que tenía a alguien más abajo que yo. Pero después de conocer a Cyan y comenzar todo eso del casino, decidí que era mejor no pedir empleados domésticos por dos cosas:


1— sería difícil estar ocultando que Cyan es un demonio, y que alguien más supiera sobre eso estaba fuera de toda discusión. Cyan no quería rebelarlo y yo no quería compartirlo. 


2— el asesino siempre es el mayordomo.


Así que ocasionalmente contrato un servicio de limpieza general, envió mi ropa a la lavandería y cocino para mí cuando quiero comer algo y no quiero pedir comida, aunque casi siempre estoy fuera de casa y no cocino con frecuencia. No me preocupo por que no tenga cosas porque Cyan siempre se encarga de tener todo en orden... umm ¿los demonios pueden tener esa cosa de los obsesivos compulsivos? Creo que Cyan si lo tiene, ojala existiera algún terapeuta especialista en problemas demoniacos, aunque suene a alguna clase de exorcismo. Mejor sigo con mi desayuno, o no hare nada si sigo pensando sobre eso.


— Estas despierto— me tomo mucho tiempo no gritar cuando Cyan aparece de la nada, un poco más para no saltar de la sorpresa  y verlo como algo normal.


— claramente sigo en la cama, durmiendo. Aunque no sé si estoy soñando.


— ¿Qué harás?


— el desayuno, no quiero salir y no sé si habrá alguna tienda abierta a esta hora.


— son las siete de la mañana, de seguro encuentras algo abierto.


  — oh, gracias por el dato.


— pero no me refería a que harás ahora mismo, más bien ¿Por qué estas despierto tan temprano?— enciendo la licuadora cuando meto los ingredientes para hacer hotcakes.


— ¿no puedo? Hay mucho trabajo que hacer con la revisión tan cerca, será mejor tener todo listo para evitar problemas. Además aun quiero ver la posibilidad de hacer la publicidad especial y abrir un segundo local ¿Me pasas la mantequilla?


— no hemos hablado de otro local.


— te lo estoy diciendo ahora. No sería inmediato, necesito información más cercana sobre cómo va este que tenemos ahora. Aun no superamos el lleno total aunque si hay mucha gente, y si seguimos así la expansión será una necesidad.


— Tienes razón— ¡Bien, punto para Jade! Y los hotcakes no se quemaron. Los pongo en un plato y busco la mermelada de fresa y el jarabe de chocolate— eso es demasiada azúcar.


— ¿Y? me gustan las cosas dulces…— no me dice nada, aunque se queda mirando la torre azucarada que tengo por desayuno antes de darse la vuelta al refrigerador y sacar la leche. Le veo servirse cereal en un tazón. Esta es una de esas cosas si se sobre Cyan: él no necesita comer, aunque de vez en cuando lo hace para aparentar que es un humano. También dice que le ayuda a comprender mejor como convivimos los humanos cuando salimos a comer.


— muy bonito ese discurso, pero ¿Qué es lo que harás realmente?— ¿eh? ¿Acaso él puede leer la mente? Hasta donde sé, no puede, pero no sería la primera vez que no me dice las cosas como son— ¿de verdad esperas que crea que te levantas temprano para ir a trabajar?


— umm…— uy, pues me parecía una idea excelente antes de dormir. Creo que ese movimiento ha sido más obvio de lo que esperaba. 


— Jade, no me hagas trabajar más— me entrecierra los ojos. Mejor no respondo nada porque hablare de más. No me sorprende que lo notara a la primera, como dijo no es algo que yo haga y solo si fuera un tonto no notaria esto ¡Incluso yo no me lo creería!


— claro que no… ¿tu harás algo hoy? Además de lo usual.


— nada.


— ¿no has pensado en tener pasatiempos?


— eso es de humanos.


— pero siempre trabajas tanto. Se siente como si estuviera haciendo explotación laboral, no pasara nada si te tomas un día de descanso ¿sabes? el mundo no va a acabarse.


— ¿Quieres que me vaya?— el tono se sospecha en su voz me hace notar que he ido muy lejos por hoy. Claro que si me he levantado temprano, me hice el desayuno y le pido que se marche solo puede llegar a la conclusión de que estoy planeando algo y su vigilancia será mayor. Y no es lo que necesito ahora.


— solo es una plática en el desayuno, y una sugerencia. Si quisiera me dejaras solo te lo pediría. Bien, voy a bañarme— me tomo mi tiempo en la regadera, aun es temprano de cualquier modo y no importa si trabajo realmente o no. ver mi cama me hace querer acostarme de nuevo, se que podría dormirme si lo hago. Vamos, aun tengo muchísimo que hacer antes de rendirme, unos días levantándome temprano no me van a detener.


 


El local no está completamente vacío,  aun están haciendo labores de limpieza y los últimos rezagados se están yendo a sus casas, algunos me saludan al cruzarnos y todos evitan a Cyan, que camina unos pasos tras de mí.  En el pasillo de la oficina todo está tranquilo y no nos cruzamos con nadie.


— deberíamos rentar algunos de estos para abogados, estoy seguro que más de uno tiene asegurado un  lugar en el infierno.


— si tu lo dices— los papeles están perfectamente ordenados en el escritorio, posiblemente desde anoche. Es una suerte que la cuestión administrativa la lleve alguien más porque con tantos números sería una tortura venir a trabajar. Hay muchas cosas pequeñas que hacer, a Cyan no le gusta hacerse cargo de las entrevistas o de atender las solicitudes de los empleados así que esas cosas me tocan a mí, cuando quiero trabajar. También me encargo de llamar a los proveedores y personas interesadas en el negocio.


— Jade…


— ¿umm?


— olvídalo.


— voy a solicitar empleados. Se necesita novedad, tal vez podemos hacer un show especial para atraer personas, alguien conocido que venga ¿puedes encargarte de eso? algo que sea llamativo pero no tanto, no queremos problemas con esos mafiosos que vinieron la otra vez porque estaban perdiendo clientes.


— no tendremos ese problema de nuevo, no con ellos.


— bueno, entonces no atraigamos demasiado la atención. Es mejor ser discreto hasta que sea tarde— Cyan no me dice nada, y hasta que no se me entume el cuello de estar inclinado no me muevo de la silla. No hay nadie aquí, y ni siquiera vi cuando se fue. Las cosas son así normalmente no es nada nuevo. Ah, ojala pudiera acelerar un poco las cosas… hey, tal vez no precisamente acelerar, pero tengo una idea. Paciencia… solo es cuestión de tener paciencia porque al final todo saldrá bien.


Ojala despertar temprano  fuera tan fácil, al menos he logrado despertarme yo mismo sin que Cyan venga, y vale la pena con tal de ver la expresión que pone cada que me encuentra en la cocina haciéndome el desayuno. Aun levanta una ceja, como si no creyera lo que está viendo.


— ¿otra vez iras a trabajar?


— sí. Hoy tenemos las entrevistas de personal— ahí está esa expresión de disgusto, finjo interesarme en mi plato— ¿tienes algún problema con eso? necesitamos empleados.


— eso lo sé. Pero no me siento cómodo con tantos humanos.


— pasas la noche en el casino, lleno de gente ¿y te da miedo una sesión de entrevistas?


— no me da miedo. Y no es igual, puedo pasar desapercibido entre una multitud, pero si tengo que estar en la misma habitación que un montón de humanos se pone difícil— si, ya lo he notado.


— creo que deberíamos trabajar en eso, podría ser un problema, tal vez deberías dejar de ver a los humanos como  cucarachas y mas como herramientas para lograr tu meta. Es más fácil así, haces que piense que nunca habías hablado con humanos antes.


— claro que he hablado con humanos antes.


— ¿en serio? ¿Y qué hacías? ¿Cuál era tu trabajo en el infierno? ¿También hacías papeleo como ahora?


— no, el papeleo es un castigo, nadie quiere hacerlo… hay muchos siglos de papeleo atrasado y mucho polvo— ¿Qué?— entonces es el castigo perfecto, todo lo demás es mas… insignificante.


— pero tú no puedes volver ¿es un castigo?—  el plato de cereales que tiene frente a él se rompe, y la leche escurre por la mesa.


— lo fue…


— ¡Entonces hiciste algo malo!— me rio, aunque intento no hacerlo mucho porque parece un tema sensible— pero oye ¿Qué cosa puedes hacer en el infierno para que te expulsen? Todos son demonios, tienes que hacer cosas malas ¿no? llevar las almas de los pecadores o algo así, supongo ¿no cumpliste la cuota?


— Jade…


— lo siento, es que no puedo imaginar porque otro motivo harían eso contigo ¿Qué puede ser tan malo que ni en el infierno lo permiten? yo creía que era al revés, entre más cosas malas haces te dan asensos y puestos más importantes— o algo así, porque no se tanto del infierno como parece. Cyan suspira, le veo pasarse las manos por la cara.


— así es.


— ¿y entonces?


— Dije algo que no debía— ¿y eso es todo? pero que poco conversador, puedo ver que no me dirá nada mas aunque pregunte, pero ya he conocido un poco más a Cyan— se hará tarde si no nos vamos ahora. Nunca me has pedido un auto.


— No me gustan mucho, no se conducir tampoco— es curioso pero  tener un auto nunca fue parte de mis sueños y ambiciones. Es difícil mantener uno cuando no tienes nada, además he aprendido que a veces es más fácil moverte sin un auto— y no se hará tarde, soy el jefe, nunca llego tarde— ya se me ha hecho costumbre caminar hasta el casino, a veces Cyan camina conmigo otras le encuentro esperando allá y esas veces me da algo de tiempo para pensar a solas como debo seguir, que debo hacer. La entrada del casino es grande, con el espacio justo para estacionar autos y el camino es fácil de seguir una vez llegas aquí.  Todos los bordes del edificio están pintadnos de dorado, no hay luces extravagantes como en los otros casinos porque no queremos llamar la atención de esta manera y lo más extravagante que tiene por fuera son las letras doradas que están en sobre la  marquesina: Arcanum. No me costó nada elegir el nombre una vez que hable con Cyan. 


— ¿No vas a la oficina hoy?— en lugar de ir arriba, me encamino a la parte del fondo del casino.


— No, hoy…


— ¡Jade!— la puerta a la que voy se abre, y por ella sale Dee. Escucho el sonido que hace Cyan, una especie de gemido o gruñido de molestia al ver al chico— Vamos, llegas tarde.


— Yo no llego tarde— Dee es uno de los empleados con más antigüedad aquí y lo más cercano a un amigo que puedo tener y no porque no quiera, si no porque sé que todos estos solo quieren estar conmigo por mi puesto, como si yo no lo hubiera hecho antes. Al menos Dee no esconde sus intenciones.


—  de todos modos tienes a todos esperándote.


— ah, eso es bueno ¿hay muchos solicitantes?


— Muchas chicas, poca ropa…— pone los ojos en blanco— me ofende un poco que solo piensen en eso cuando vienen, pero servirá.


— ¿te da miedo la competencia?— Dee es muy popular por aquí, y de los que más ganancias tiene y deja en el Arcanum— no deberías ser egoísta, estoy seguro de que hay muchos clientes por allí que están dispuestos a pagar y tú no puedes complacerlos a todos.


— ¿es un reto? No deberías hablar a la ligera, amore mío— entrelaza su brazo con el mío mientras pasamos la puerta. Escucho otro refunfuño de Cyan, y como sé que no puede verme me permito sonreír. Dee no está aquí por casualidad, además de que sé que podrá ayudarme a elegir de manera más objetiva a los nuevos empleados, quiero comprobar algunas cosas— gracias por invitarme, hace tiempo que no hablamos.


— he estado ocupado con el papeleo, aunque Cyan ayuda mucho.


— ¿Vas a ayudarnos a elegir?— aunque a Cyan no le guste nada de esto él viene porque dice que es más fácil comprobar cosas cuando está cerca, aun no sé qué tipo de cosas puede comprobar estando cerca.


— No mucho— ah, siempre tan escueto cuando se trata de otras personas.


La elección del nuevo personal nos toma toda la mañana, ya pasa de la hora de la comida cuando sale la última chica. Al final hemos reducido la lista a diez personas. Tengo hambre y no siento las piernas, tengo los dedos de las manos entumidos y quiero irme a dormir a casa.


— han sido muchos. Es tarde, apenas tendré tiempo para  ir a casa y comer antes de regresar ¿no vas a pagar al menos la comida?


— Puedes comer en el restaurant que esta por aquí— Dee hace una mueca.


— No me gusta esa comida.


— bueno… aun no terminamos el trabajo, no hemos elegido a nadie en si ¿Por qué no vienes a mi casa? podemos comer allí, estaremos más cómodos— amontono los papeles en un folder y lo cierro. Dee me mira, sin moverse de la silla.


— lo siento pero tengo que trabajar. Mis cuentas no se pagan solas.


— entiendo ¿está bien si te pago por venir?


— Jade, eso…— Inicia Cyan, pero Dee ya está sonriendo y poniendo una expresión encantadora. Nunca he invitado a nadie a casa, siempre que tengo compañía es aquí en el casino o en algún hotel bonito. No tenemos reglas sobre llevar gente a la casa y quiero ver que pasa ¿Qué hará Cyan? ¿Se ira? ¿Si le propongo hacer algo con Dee aceptaría? Aunque no sé si Cyan prefiera a los chicos o las chicas, siendo un demonio es fácil asumir que le da igual, como a mí.


— Acepto ¿a qué se debe la repentina generosidad del jefe?— me encojo de hombros, no puedo explicarle nada.


— puedes venir en un rato, por si quieres ir a tu casa por ropa o lo que sea, yo aún tengo que dejar algunas cosas en la oficina. Te envió la dirección— Dee se da por satisfecho con eso y se va, dejándome a solas con Cyan. Finjo que no ha pasado nada importante y que solo es trabajo.


— ¿en qué estás pensando, Jade? Sabes que es arriesgado llevar a casa a cualquiera.


— ¿eh? ¿Arriesgado? Cyan, no pasara nada a menos que te andes por la casa con cuernos y cola.


— ¿solo será por trabajo?


— umm, claro ¿Qué pensabas? Oh, bueno, tal vez si terminamos pronto… estoy pagándole después de todo ¿no? y Dee es atractivo. Me gusta su cabello, aunque no tengo una preferencia por apariencias ¿y tú? ¿Tienes algún tipo de persona que te guste más?


— no.


— ¿en serio? creí que dirías cosas como “con el alma corrompida” o “que sean fáciles de corromper”


— todos los humanos son fáciles de corromper. Da lo mismo como sean siempre que pueda hacer mi trabajo— no es lo que buscaba pero puedo tomarlo como algo bueno, ya que si no hay un tipo no tengo que adaptarme a eso— prefiero un trabajo bien hecho, que todo salga bien.


— Ya veo ¿y eso te llevo a… terminar expulsado del infierno?— uy, mejor me voy antes de que se enoje. No me sigue cuando me salgo y subo hasta la oficina para tomar la agenda y dejar los papeles que no voy a necesitar. Saludo a algunos de los empleados de limpieza y algunas chicas que siguen ensayando sus bailes, Cyan me está esperando en la entrada— hoy no vendré por la noche, hare el trabajo desde casa.


— Como digas— vaya, creí que iba a reprocharme no trabajar, espero que sea porque me ha visto trabajar últimamente. Bah, de seguro es porque he dicho que hare trabajo desde casa, no miento,  porque si quiero terminar la selección de los nuevos miembros del casino. No hablamos en todo el camino a  casa, ya me estoy desesperando por su falta de comunicación, vamos que hemos pasado mucho tiempo planeando cosas como para que siga siendo tan serio conmigo—  Cyan, estuve pensando un poco sobre cómo te relacionas con los humanos.


— ¿sigues pensando en eso? deja de pensar tonterías y concéntrate en el trabajo.


— bah, pero si no son tonterías. Tú no me dices mucho así que pienso mucho a cambio ¿Qué te parece? Bueno, estaba pensando en la clase de trabajo que hacías antes de que nos encontráramos ¿te le aparecías a los que invocaban al diablo?


— no.


— umm ¿asustar en casas embrujadas? Oh, ya se, asustabas adolecentes que se creían valientes y jugaban con la ouija— escucho un resoplido de burla ¡Maldición, no alcance a ver si se estaba riendo o no!


— no hacía nada de eso, eso es tarea para el más bajo rango.


— ah, entonces no era nada de eso ¿posesiones entonces? eso suena divertido.


— Oh, lo es.


— ¡Acerté!


—  no cualquiera puede llevar a cabo una posesión, y casi siempre se hace un enorme escandalo cuando actuamos un poco y queremos terminar el trabajo. Estuve un tiempo haciendo posesiones.


— increíble ¿cosas como torcer el cuerpo de forma grotesca, voces demoniacas y mucho vomito asqueroso?


— ¿de qué hablas?


— ¿Nunca has visto la película del exorcista? Por dios, tienes que verla… eh, ¿dije algo malo?— si todo parecía ir bien, se ha puesto serio otra vez  hasta creo se puso más pálido de lo normal ¡no puedo dejar que se pierda el momento! — Lo lamento, no fue mi intención, en fin, es una película bastante genial que trata sobre una chica poseída.


— por el nombre de la película pude adivinar eso.


— hay muchas películas así veamos algunas pronto para que te pongas al día— como no me dice nada lo tomare como un sí, bien dicen que el que calla otorga ¿no?— entonces hacías posesiones ¿Qué más? ¿Los pactos?


— los hice un tiempo pero no hay muchos últimamente, se han perdido las costumbres.


— que mal, ojala te hubiera invocado antes.


— no es seguro que yo hubiera venido, no soy el único demonio ¿sabes?


— No, no lo sabía, aunque hace tiempo leí sobre demonios porque tenía curiosidad pero me aburrí y lo único que entendí es que hay demonios que obtienen energía teniendo sexo, íncubos y súcubos, creo.


— ah, no me extraña que solo aprendieras eso— Eso, punto para Jade— Si, los hay y es una de las secciones más lucrativas… en cierto modo.


— ¿en serio? ¿Por qué? espera, que pregunta tan tonta ¿Quién no querría tener sexo todo el tiempo para tener energía? ¿Tú tuviste un trabajo allí?


— ¿tengo cara de ser un incubo?


— eres atractivo, bien pudieras serlo— ¡Esto está saliendo mejor de lo que pensé!— aunque no sé, no parece que te guste… relacionarte de ese modo.


—hay una lista de espera muy larga para entrar a trabajar en íncubos y súcubos. Y es la única área en la que no trabaje— lo suponía, Cyan es muy serio como para estar en un lugar donde solo tienen sexo, apostaría a que ni siquiera lo considera un trabajo. Es una pena porque es como un trabajo maravilloso.


— pues a mí no me molestaría trabajar allí, encontraría la manera de pasar a los otros y que me tomen en cuenta, haría lo que sea con tal de trabajar allí. Si dices que es la única área en la que no trabajaste ¿al menos intentaste pasar por allí? Como enviar una solicitud ¿Lo hiciste?


— No. estar en recolección de almas y en desastres es mucho mejor.


— umm… supongo que depende de que cosas te diviertan, parece que al final si tenias algo que te gusta. Por la forma en que trabajas creo que serias un buen incubo o lo que sea. Cada vez me gusta más la idea de trabajar allí—… riendo… él se está riendo. No puedo creerlo…


— Serias el empleado del mes todos los meses… si, sin duda serias bueno en eso.


— ¿Tú crees? Tal vez tengas que enseñarme cosas— las palabras salen sin que las piense, ni me arrepiento de decirlas en ese tono provocativo. Cyan sigue sonriendo.


— Tu amigo acaba de llegar—apenas termina de decir eso, el timbre resuena en toda la casa, él se levanta pero no va hacia entrada— Estaré por aquí. Ah y por cierto…— se inclina hacia mí, y su tono se vuelve igual de provocativo que el mío— Tendrías mucha suerte si yo te enseñara esas cosas— en un parpadeo él ya no está aquí. Pero joder ¡¿Qué ha sido eso?! Casi me he puesto duro. Esto no es solo un punto para mí, es toda una anotación. Sea lo que sea que haya sido esto, Cyan ha entrado a mi juego y cuando entras a mi juego solo puedes perder.

Notas finales:

Gracias por leer!!


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